una historia narrada en primera persona, con un personaje externo, espero les guste.
Era
una expresión inaudible. Era el desasosiego humanizado al
creer que nada podría salir bien.
La
palabra desamor jamás había surtido tanto efecto como
ahora lo hacía, y entendías a la soledad.
El
calor de ese beso jamás realizado quemaba tus labios y esas
palabras de amor que nunca salieron de tu boca oprimían tu
pecho instándolo a no respirar de nuevo.
Guarda silencio amor mío, guarda silencio... amor mío.
Ella
se fue y su perfume aún recorre cada rincón de tu
habitación, y tu ya no la quieres, es cierto.
Tu
corazón destruido, Tus ojos rojos por el llanto solo querían
verla... muerta.
Solo
anhelaban el sufrimiento ajeno, sufrías el desamor con todas
sus letras. Y por más que quisiste, solo le fuiste infiel con
su recuerdo. Ella esta ahora en los brazos de otro, tu cerebro se
encarga de recordar.
Solo duerme, querido mío, solo duerme... querido.
Te
mortificas, torturas, recuerdas; recuerdas cada movimiento suyo y lo
odias, por no haber estado ahí, por estar con otro.
Tus
manos anhelantes recorren las sábanas, inconscientemente,
buscando su piel morena y suave, esa piel no como la tuya, no como la
mía, esa que denota que cada verano ha sido aprovechado, no
cómo el nuestro, aquí encerrados, buscando a la nada, y
ahora la buscas a ella.
¿ves
el sol? Quiere conocerte, y tú lo detestas por recordarte a
ella.
Mírame, cariño, mírame... cariño.
He
observado cada movimiento tuyo, cada lágrima derramada la he
guardado en mi memoria como el más profundo tesoro, más
valioso que el cristal, he oído cada maldición, cada
gemido, he sido momentáneamente esa sábana que tocabas
buscando su piel. Te he dado mis labios, mientras compruebas que no
son los de ella.
He
sido su recuerdo, intentando consolarte. He sido el ínfimo
placer con el cual te has calmado, buscándola.
Y
le fuiste infiel con su recuerdo, no conmigo, yo no era yo mientras
tus manos recorrían mi cuerpo, solo soy su espectro, jamás
lo suficientemente bueno cómo para abandonarla por mi.
No
estás solo, mi vida... no estás solo...
Mi
vida.
Ella está muerta ahora, Draco, tu padre se ha encargado de todo...
Ya
ahora, quizás como siempre, es demasiado tarde.
Te
invito a decir mentiras¿quisieras jugar? Yo comienzo.
una extraña historia, la cual me agradó bastante como quedó. por favor solo pido a cambio algún review.
gracias, un beso.
