¡¡Hi!! Como verán, he decidido hacer un cambio. De ahora en adelante, contestaré los reviews primero, antes de colocar el capítulo. ¿Por qué? Pues porque hoy esta historia da un giro. Es posible que, en primera instancia, no se den cuenta de ello pero seguro que más adelante lo entienden .
Esta semana quiero darles las gracias a mis amigas Caris y Alexms. Sin su ayuda, el capítulo no hubiera salido, y es que estaba tan indecisa… ¡¡Muchísimas gracias por apoyarme!! La primera escena va dedicada exclusivamente a ustedes dos.
Como siempre, miles y miles de gracias a mi beta y comadre Jany.
Antes de pasar a las respuestas personales, un aviso. Mi amigui Paula Moonlight dibujó la escena final del capítulo anterior, es decir, el beso entre Nindë y Severus. Si van a mi perfil, encontrarán la dirección para ver dicho dibujo. ¿Cierto que está espectacular? ¡¡Convénzanla para que siga pintando más escenas!! Jijijiji ¡¡Muchas gracias amiga!! ¡¡Te quedó lindísimo!! Vaya talento… (Te envidio jijijiji).
Amsp14: ¡¡No me molestan para nada los reviews largos!! Es más, tú sabes muy bien que acostumbro a dejar "mini reviews" en las historias que leo jijijiji Muchísimas gracias por la ovación pero estoy segura que hoy día querrás… ¡¡matarme!! Ais… antes de que lo hagas, te pido un poquitín de paciencia, que los cosas van a cambiar… más con la llegada de Sirius y de Tonks al castillo. En cuanto a si Snape se va a enterar que Nindë es el Guardián, pues si… si no es en el próximo cap entonces en el siguiente, pero de ahí no pasa. El misterio de quién escribió la carta que Remus recibió se desvela en este cap. Ahora, que Nindë le de calabazas pues… … ¡¡Ron y Hermione!! Espero que la explicación y el relato de los hechos después de "eso", te hayan dejado conforme. Hablando de la escena final pues… la empecé ahí pero me temo que… ¡¡no me mates, por favor!! Prometo, ¡prometo! recompensarte con creces más adelante jijijiji Yo también espero no enfermarme más. Gracias por el apoyo, wapa (jijijiji) Beshitos!!
Paula Moonlight: ¡¡Tanto tiempo amiga!! Jijijiji Hace dos días que no hablamos… Apuesto que cuando nos encontremos de nuevo, ¡¡estaremos diez horas conversando!! Jijijiji Pero lo pasé tan bien… … En fin, vamos al cap. ¡¡Cuánta publicidad!! Prometo leer todas las historias que me recomiendas, aunque no se cómo voy a hacer para no confundirme después jijijiji Con respecto a la escena del beso entre Nindë y Severus, él tiene demasiado claro que la pone en peligro, por eso… ¡¡Mejor léelo!! Ya me sonsacaste quién era la persona que le había escrito a Remus, así es que… creo que no tengo nada más que contarte. ¡¡Ah, sí!! ¡¡Me encantó el dibu que me mandaste!! Soberbio, espectacular… Pero no te olvides que espero el anterior terminado ¿eh? Jijijiji TQM!! Beshitos!!
Caris: ¡¡No me odies, no me odies!! ¿Tanto así te tiene este fic? Jijijiji Pues no puedo pedirte disculpas porque… ¡¡me encanta que así sea!! Jijijiji No sabes lo que significan para mí tu apoyo, tus palabras… ¡¡Gracias!! Es que no tengo otra manera de expresar mi cariño… simplemente gracias . Con respecto al cap anterior, verás cómo Nindë ya no puede seguir negando lo que siente… Como dices, todo cae por su propio peso y espero que a Severus le pase lo mismo porque está de un terco… uf!! ¿Que quién escribió a Remus? Pues… en este cap ya se sabe… ¿sería la persona por quien apostabas? Si es así, voy a tener que entrar a preocuparme porque… ¿no me estarás leyendo la mente? ¿Estás tomando clases con Snape y no me has dicho nada? Jijijiji Si Nindë se muere en el enfrentamiento final, no te lo puedo decir… Pero ¿tú me llamas mala? ¿Tú, que estás matando a Amanda poco a poquito? Yo solo aprendo y aplico (muajajaja) ¿Pero no digo que me lees el pensamiento? Estás totalmente en lo cierto con respecto a Ron y a Hermione. Cuando leas la reacción del pelirrojo, espero te lleves una gran sorpresa… En cuanto al beso entre Severus y Nindë… bien, ya sabes que sin tu apoyo no hubiese salido para este cap jijijiji ¿Viste que los cambios fueron sutiles? Espero no haberte defraudado. Millones de beshitos!!
Alexms: jijijiji ¡¡Qué bien que te haya encantado!! La pregunta ahora es… ¿qué pensarás con la reacción de ambos en este cap? Bueno, tú ya sabes lo que pasa porque me ayudaste muchísimo con la primera escena. Gracias, en verdad gracias… y espero poder contar con tu ayuda, si en un futuro la vuelvo a necesitar (que es lo más probable jijijiji) Bueno, Nindë lleva en terreno peligroso mucho tiempo… aunque creo que ahora se está quemando. Eso sí, no olvides que los elfos son orgullosos y después de lo que Severus le hizo pues… no creo que lo ande tratando con guantes de seda. No puedo decirte si Nindë al final se salvará o no pero… Lo importante sucederá antes de que ese momento llegue. Con respecto a Ron y Hermione, en este cap se ven las reacciones de cada uno más la del colegio… Espero te rías un rato con esos dos. De la escena final… no coment, solo que le eches un vistazo al dibujo que Paula hizo. ¡¡Muchísimas gracias por estar conmigo!! Beshitos!!
Barbi Black: ¡¡Gracias, gracias, gracias!! Vas a hacer que me sonroje… ¿Así que tu manera de inspirarte es en las clases? Jijijiji Pues te diré que tus historias no tienen nada que envidiarle a la mía. ¡¡Si son tan buenas!! Eso sí, deberías actualizar más seguido. Este cap no es ni la mitad de emocionante que el anterior, pero espero te guste igual. Gracias por el apoyo. Un beso.
Indira de Snape: ¡¡China!! Aquí está el cap para que no me mates ni me odies pero… ¡¡estoy segura que lo harás igual una vez que lo leas!! Discúlpame, pero me encanta hacer sufrir a los personajes (porque cuando se reúnan definitivamente… uy!!) jijijiji Ya ves que no soy tan mala, siempre dejo abierta la posibilidad de que estos dos se unan pero… ¡¡es que Snape está de un terco!! A ver si tú lo convences. Yo tampoco encontré el libro… ¡¡y con las ganas que tengo de leerlo!! (Ya sabes por qué ¿no?) Un beshito.
DarkAngelx20: Muchas gracias por dejar otro review jijijiji Y porque seguirás leyendo pase lo que pase ¿no? A propósito, tú no me has dicho con quién quieres que se quede Nindë… a ver si le apuntas ( qué mala jijijiji) ¿Así que eres de Panamá? Yo de Chile… algo lejos, pero en el corazón siempre cerca. Beshitos!
Elanor Black: jijijiji ¿La elfa atrevida? Jijijiji Pues… … ¡¡Y Sev sacrificado!! Jajajaja Yo creo que cualquiera se deja llevar… el momento… la situación… Pero creo te llevarás una sorpresa con la reacción de Severus. Como dices, la amenaza de Voldy es tan fuerte que… XD ¿Remus rechazado? Yo no estaría tan segura… mejor léelo para que te convenzas tú misma. Beshitos!!
Amanda Beicker: jijijiji Qué modesta… No te conocía esa faceta. Pero sí eres "maja" y ya sabes que no importa si dejas review antes o después… ¡¡igual me encantan porque me suben el ánimo!! Jijijiji Me temo que te llevarás una sorpresa con respecto a Remus. Él, al igual que Hermione, aun tiene la herramienta "presión"… ¿Que creíste? ¿Que se quedaría de brazos cruzados? ¡¡Y ahora con Sirius en el castillo!! Ais… que me adelanté… mejor dejo que lo leas. Sip, Nindë tiene que sacrificarse si algo malo le pasa a Harry. Qué mal ¿no? Esperemos que eso no llegue a suceder. No me acuerdo si al final te dije quién le escribió la carta al lobito tierno… Bueno, si no lo hice, ahora te enteras. ¿Habrás acertado en tus deducciones? Espero impresiones. Te quiero mucho!!
Jany: ¡¡Comadre!! Perdón por tenerte hasta tan tarde ayer pero… ¡¡esas son las consecuencias de salir de farra!! Jijijiji Que bueno que ya estás mejor, y tienes que cuidarte mucho, mira que la influenza se vino con tutti este año (sino pregúntame cómo me dejó) jijijiji Con respecto a lo del rating, no desesperes… ya viene, ya viene… y antes de lo que piensas. Ya hay un avance muy avance entre Ron y Hermione… ¡¡ya era hora!! A pensar cómo los dejo juntos… ¡¡mira que me costó mucho unirlos!! Jijijiji ¡¡Y ya quiero trabajo!! Apuesto que el sábado me dices que porque estuviste de cumple, no escribiste nada ; ; ¡¡No seas mala!! Que me muero de la curiosidad. TQM!! Beshitos!!
Maru Snape: ¿Yo desaparecida? ¡¡Si estoy todo el día en msn!! ¿No ves que no tengo nada más que hacer? jijijiji Esto de tener vagaciones indefinidas es tan sacrificado... Ni te preocupes por la tardanza, yo se que tú sí estás ocupadita… ¡¡Y con saber que te guste ya me doy por satisfecha!! ¡¡Traicionándome!! ¡¡Quieres revelar lo que viene!! Mmmm… pues no se te olvide que yo siempre puedo hacer lo mismo con tu fic… ¡¡y yo tengo evidencia tangible!! Muajajaja Estoy de acuerdo contigo, yo Nindë lo agarro a besos del primer capítulo jijijiji Ahora sabrás lo que hizo Draco, y lo de la cita entre Ron y Luna, ya viene, ya viene… o tal vez no muajajaja ¿Que cómo reaccionará Severus después de los besos? Aquí lo tienes, unas cuantas líneas más abajito... Pero cuánto me temo que no te va a gustar... ¡¡En fin!! Muchos beshitos loquilla!!
Bien, ya terminé. Espero disfruten el cap. ¡¡A leer!!
CAPITULO 18: REACCIONES INESPERADAS
Vagamente sintió cómo él la separaba de su cuerpo. Tardó unos instantes en reaccionar… y es que ya se había acostumbrado a su cercanía, a su calor, ¡a su olor!... Abrió los ojos con lentitud. Casi de inmediato, un agudo dolor atravesó su corazón: en sus pequeños ojos negros ya no ardían ni el fuego ni el deseo, sino que habían vuelto a lucir la frialdad y dureza de siempre. Se sintió morir. Supo con certeza lo que sucedería a continuación.
- Vete – le ordenó.
La elfa ni siquiera lo pensó.
- Acaso ¿esto no significó nada para ti? – Antes de que las palabras terminaran de salir por su boca, ya se había arrepentido profundamente de haberlas pronunciado.
- ¡Vete! – repitió – Quiero estar solo.
La joven no se movió ni un milímetro. No podía creer que él… ¡Oh, vamos! ¿Por qué le extrañaba tanto la reacción de Severus? Cuando se besaron en la Enfermería, él había decidido desentenderse de todo y ella estuvo de acuerdo con su proceder. Entonces… ¿por qué tendría que ser diferente ahora? ¡¡Por qué esta vez le dolía tanto su rechazo!! ¿Sería posible que… que aquel mortífago hubiese entrado en su corazón, sin que ella se diese cuenta?
Irguió la cabeza, orgullosa.
- Está bien, Severus… ¡como quieras!
Salió del despacho hecha una furia, cerrando la puerta tras de sí con un fuerte portazo. Quería salir de ese lugar lo más rápido posible, olvidar lo que había sucedido entre ambos, ¡no pensar en lo que había hecho! Sin embargo, y a pesar de todos sus esfuerzos, no pudo hacerlo… Temblaba de furia de pies a cabeza. Suspiró en forma profunda, resignada a emprender lentamente el regreso hacia su cuarto. Fijó la vista en el frío suelo de piedra mientras caminaba y se entregó una vez más a esas temidas divagaciones mentales.
- "¡Tienes que admitirlo! ¡¡Te enamoraste de Severus Snape!! Sabías que él era frío, sarcástico, incapaz de corresponderte ¡¡y aun así te enamoraste!!... ¿Cuándo perdiste la cabeza? ¡En qué momento te volviste tan débil frente a ese hombre! No debías fijarte en él, ¡no debías! ¡Mira a quién sirve! ¡¡Mira a quién le rinde obediencia!!... Pero lo besaste… Por qué insististe en demostrarle afecto ¡si sabes que no le importas! ¿Dónde está la elfa orgullosa y arrogante que él dice que eres? ¿Te dejarás doblegar así de fácil? ¿Permitirás que te humille solo porque sabe lo que sientes?... ¡Por Merlín, Nindë!... ¡¡EN QUE MINUTO LE ENTREGASTE TU CORAZON!!"
Sonrió amargamente.
- "Al menos… no hay nada peor que pueda sucederte ya, ¿no es cierto? Ni siquiera la amenaza de Voldemort se compara con este dolor tan grande que sientes hoy…"
Cerró los ojos y el miedo la invadió por completo. Lo olvidaba… ¡si existía algo peor!
- Remus… - susurró la joven, a media voz.
Cuando la elfa salió de aquella manera de su despacho, sintió la imperiosa necesidad de detenerla, de tomarla de una mano e impedir que se marchara, ¡impedir que lo dejara solo!... "Solo…" Se encontraba solo una vez más.
El mago oscuro se acercó a la puerta, vacilante. Todavía podía alcanzarla pero… ¿qué lograría con ello? Podría aceptar y decirle que la amaba… ¿Y después qué? ¿Es que todo lo ocurrido con Florence no le había enseñado nada? Él no tenía derecho a amar. Él nunca sería feliz, ¡nunca!... Nunca, porque exponía al peligro a la persona a quien decidiera entregar su corazón.
Apoyó sus manos contra la puerta del despacho y bajó la cabeza. Suspiró hondamente. Sabía muy bien que la esperanza que había brotado en su corazón, segundos antes, terminaría extinguiéndose como el fuego en la hoguera. Y eso era lo mejor… Sí, lo mejor.
- "Eres patético… Los débiles no tienen resistencia frente al Señor de las Tinieblas ¡¡y aun así no hiciste nada para evitar enamorarte de ella!! Te propusiste ser indiferente ¡y mira hasta dónde han llegado! ¿Quieres exponerla aun más a la muerte? Es más ¿serías capaz de soportar otra pérdida tan terrible? No, ¿no es cierto?... ¡¡Entonces no la busques más!! Es mejor que renuncies de una vez, porque mientras más tiempo pase, más indispensable se volverá en tu vida… Además, ¡¡ella no te ama!! – y golpeó con fuerza la puerta, frustrado – "Por algo está saliendo con el hombre lobo, ¿no? Tú solo le provocas pena… ¡LASTIMA!... Todo lo que ella te inspira está negado para ti, ¿por qué no terminas de entenderlo?... ¡Por Merlín, Severus, reacciona! ¡¡SOLO LOS ESTUPIDOS CREEN EN EL AMOR!! Y tú nunca fuiste ni serás uno de esos… ¡¡No olvides ahora la única razón que te mantiene con vida!!"
- Venganza… - susurró el mago, con rencor.
o o o o o o O O O O o o o o o o
- Ginny, ¿no crees que Ron y Hermione ya se tardaron demasiado? – Harry y la pelirroja se encontraban cómodamente sentados frente al fuego en la chimenea de la Sala Común. La pequeña Weasley tenía abierto sobre sus rodillas, el ejemplar de Volando con los Cannons del ojiverde. El lugar estaba repleto: como quedaban menos de dos semanas para el término del trimestre, la mayoría de los profesores habían adoptado un tedioso sistema de estudio y de deberes.
- No te preocupes por ellos, Harry. Conociendo a Hermione, no han de estar haciendo nada indebido.
- Yo no estaría tan seguro… Creo que Ron tiene razón: somos una mala influencia para ella.
La pelirroja rió con ganas ante el comentario. Harry sintió una leve sacudida en su estómago cuando se percató de la forma en que brillaban sus ojos al sonreír.
- Muy gracioso, Harry. A propósito, ¿no deberías estar estudiando tú también? Considerando que este año debes rendir las MHB, yo no te veo muy preocupado…
El muchacho se sonrojó.
- No es que no me preocupe… imposible si tienes a Hermione detrás de ti todo el tiempo, recordándote lo importantes que son para el futuro profesional y confeccionando horarios de estudio imposibles de cumplir.
Ginny volvió a sonreír. Esta vez, el chico se dio cuenta que escuchar esa linda risa le resultaba de lo más agradable…
- ¿Entonces?
Harry pareció reaccionar.
- Bueno… Es que existen otras cosas que me preocupan más que las MHB y que exigen… mayores responsabilidades.
La pelirroja abrió la boca para preguntar de qué se trataban esas "cosas", pero se arrepintió de hacerlo al ver el semblante de tristeza que adoptaba su amigo. Sabiamente, decidió no presionarlo para que le contara.
- Esteeeeee… Dime, Harry ¿has pensado ya qué te gustaría hacer cuando salgas de Hogwarts?
- Pues… pienso que a lo mejor podría ser Auror.
- Ufffffff… por lo que papá nos ha contado, se trata de una carrera muy difícil… Es más, me parece recordar que hace tres años no aceptan a nadie.
- ¿En serio? – preguntó un tanto perplejo.
- Sí… En todo caso, si esa es la carrera que te interesa, deberás estudiar asignaturas como… - lo pensó un momento y luego comenzó a enumerar con los dedos a medida que hablaba - … Transformaciones, Encantamientos, Pociones… ¡Ah, sí! Y Defensa Contra las Artes Oscuras, naturalmente.
- Estás muy informada sobre el tema, ¿eh?
Esta vez fue Ginny quien se sonrojó.
- Bueeeenooooo… Es que Ron quiere estudiar lo mismo, ¿lo sabías? – Harry asintió – Y estuvo preguntando mucho en casa sobre las posibilidades reales que tenía para conseguirlo. Es una carrera interesantísima pero muy sacrificada, ¿no lo crees así?
El muchacho se encogió de hombros, algo aturdido. Acababa de darse cuenta lo fácil que resultaba mantener una conversación entretenida con Ginny. Sin duda, se había convertido en una chica madura y muy centrada, con la cual tenía mucho en común. Se preguntó entonces, por qué no se había percatado de todas esas cualidades antes… ¿Y por qué aquella repentina necesidad de saber más sobre ella y su vida? Estaba seguro que lo que descubriría, le gustaría tanto o más que lo poco que ya conocía…
- ¿Ginny?
- ¿Mmmm?
- ¿Qué te parecería si tu… si tú y yo…?
- ¡COMO NO LO PENSASTE ANTES, HERMIONE! ¡¡AHORA SEREMOS LA COMIDILLA DE TODO EL COLEGIO!!
El pelirrojo y la morena acababan de entrar en la Sala Común. Como de costumbre, iban enfrascados en una violenta discusión por lo que los Gryffindors que se encontraban en el lugar, no les prestaron demasiada atención.
- ¿Y qué más querías que les dijera? ¿QUE LOS ESTABAMOS ESPIANDO?
- ¡¡SE TE HUBIERA OCURRIDO UNA EXCUSA MEJOR!!
- ¡Deberías agradecer que al menos pensé en algo! Porque te diré que tu mutismo frente a la situación no me ayudó en nada.
- Bueno, es que… es que… ¡me pillaron de sorpresa!
- Siempre te pillan de sorpresa, ¿no? Y si no solucionas las cosas a golpes, ¡entonces no las solucionas! ¡¡GRACIAS A MI SALIMOS DE LA BIBLIOTECA SIN UN SOLO RASGUÑO!! ¿Cómo están? ¿Ginny, Harry? – les preguntó Hermione bruscamente, acomodándose junto a ellos frente a la chimenea. Ron la seguía de cerca.
- ¡¡SIN UN RASGUÑO!! – repitió furioso el pelirrojo - ¿Cómo crees que quedará mi reputación, una vez que esos estúpidos echen a correr el rumor?
- ¡Gracias! ¡NUNCA PENSE QUE SIMULAR SER MI NOVIO TE MOLESTARIA TANTO! Debí suponerlo… ¡TE AVERGUENZAS DE MI PORQUE SOY UNA SANGRE SUCIA!
A las palabras "novio" y "sangre sucia", varios pares de oídos se mostraron repentinamente interesados en la discusión.
- ¡P-Por favor, Hermione! ¿Cómo puedes pensar eso de mí? ¿Quién anduvo escupiendo babosas cuando Malfoy te espetó semejante insulto? ¿Ah? ¡¡QUIEN!!
- Pues… bueeeenooooo… - la chica parecía muy incómoda – Bueno… ¡¡Entonces por qué te molesta tanto!! ¡Ni siquiera tiene la importancia que le estás dando! Ya sabes cómo son los rumores… Una vez que se pase la novedad…
- Dime una cosa ¿por qué te cuesta tanto entenderme? Esto es… ¡ESTO ES VERGONZOSO! ¡¡HUMILLANTE!!
- Apuesto que lo que más te molesta es lo que esa tal Luna piense de ti, ¿no? ¡POR QUE NO RECONOCES DE UNA VEZ QUE TE GUSTA Y TERMINAMOS CON TODO ESTO!
Cuando Luna Lovegood fue nombrada en la discusión, la totalidad de los oídos de los Gryffindors presentes ya no se perdían detalle alguno de lo que ambos chicos se gritaban.
- Es que… ¿no puedes verlo? Acaso… ¿NUNCA VAS A DARTE CUENTA, HERMIONE?
Ron miró a la morena por un instante, lleno de resentimiento, lleno de vergüenza… Luego salió disparado hacia su habitación, con Harry detrás de él.
- ¿Qué se supone que me quiso decir?
Ginny negó con la cabeza, resignada.
- Ay, Hermione… En esto eres casi tan ciega como Ron. En fin… me pareció entender que hay "ciertas personas" que creen que mi hermano y tú ¿son novios?
- Esas "ciertas personas" son Draco Malfoy y su grupito de… amigos.
- ¡QUE! ¡¡Con razón Ron está tan enfadado!!
- Lo sé, lo se… es que estábamos en la Biblioteca discutiendo con ellos y se presentó la oportunidad perfecta para… y pensé que… ¡Ay, Ginny, tú lo sabes perfectamente! Si no empezaba a forzar un poquitito las cosas con tu hermano, entonces… ¡no iba a dejar de ser nunca su amiga! Y bueno… tú sabes que yo… que a mí me gustaría ser más que…
- Sí, ya te entendí pero… ¿quieres que te diga una cosa? Creo que forzaste demasiado la situación y… no sé si Ron reaccionará como tú lo esperas. Reconozco que él es algo tímido para estas cosas y tal vez hasta poco perceptivo y, sin embargo… Bueno, supongo que sabes mejor que yo lo que estás haciendo.
- En realidad… no – y se encogió de hombros – Pero lo hecho, hecho está.
- Hermione… ¿estás segura que no inventaste todo eso para impedir la cita de Luna y mi hermano?
- ¡¡No!! ¡Para nada! Yo solo… yo pensé que… - la morena se había puesto roja como tomate. Ginny suspiró.
- Ni te esfuerces, Hermione… Acabo de entenderlo todo.
o o o o o o O O O O o o o o o o
La semana que siguió fue especialmente tortuosa para Harry, Ron y Hermione. El pelirrojo había tenido razón: la noticia de que la morena y él eran novios, revolucionó a todos los habitantes del castillo. Al lugar que fuesen, los chicos se veían rodeados de curiosos alumnos que, con poco disimulo, cuchicheaban a sus espaldas apostando si se besarían en público y soltando esas típicas risitas tontas.
Antes semejante panorama, Ron parecía haberse resignado: desmentir que entre ambos existía algo más que amistad, se había convertido en una misión prácticamente imposible. El pelirrojo no sabía explicarse por qué todo Hogwarts no se cansaba de felicitarlos por su "noviazgo" y de lanzarles indirectas del tipo "Ya se habían tardado demasiado" o "Ya era hora que se decidieran". Era en esos momentos que Ron no dejaba de preguntarse por qué todos en ese bendito castillo parecía saber de antemano su atracción por Hermione. ¿Sería posible que la única que no se hubiese dado cuenta fuese la propia involucrada?
Fuese como fuese, había algo que tenía que reconocer. Su indignación hacia al rumor no se debía al hecho de que lo ligaran con la morena, sino que no dejaba de ser una mentira… una bonita ilusión, pero mentira al fin y al cabo. ¿Por qué tenía que ser tan cobarde? ¿Por qué no era capaz de decirle de una vez que le gustaba mucho? ¿Por qué no se decidía a pedirle que fueran novios, pero DE VERDAD? "Por vergüenza… por estúpida vergüenza" ¿Y si ella lo rechazaba? O peor aun ¿cómo reaccionaría si ella le decía que de quien gustaba era de ese… de ese estúpido Vicky? "Por lo menos así la tengo cerca… y aunque sé que es una farsa puedo soñar, por un breve tiempo, que Hermione me corresponde, que le gusto, que… me quiere". Por supuesto, ¡nunca daría su brazo a torcer!, y esa era la razón por la que todavía fingía estar molesto con su amiga. Frente a Harry, sus hermanos y amigos más cercanos, aun tenía una reputación que mantener, ¿no?
Como si lo anterior no fuese suficiente, un nuevo rumor (que causó tanto o más revuelo que el bullado noviazgo entre Granger y Weasley) amenazó con liquidar el poco control que ya exhibía el trío. Al término del trimestre, los deberes, los exámenes y el "noviazgo", se sumaba ahora el "supuesto" Baile de Navidad. Se decía que Dumbledore, satisfecho con los resultados del año anterior, había decidido dar su consentimiento para volver a repetir el festejo. El entusiasmo no tardó en expandirse por todo Hogwarts. Aunque nadie había confirmado ni desmentido nada, daba la impresión de que todos los alumnos (de cuarto para arriba) se iban a quedar a pasar las Navidades en el castillo, mostrándose tan obsesionados con la idea como cuando el Torneo de los Tres Magos se llevaba a cabo.
La sola idea de tener que pedir a una chica que los acompañase al baile, sumó en la depresión a Harry y a Ron. Ambos no habían obtenido muy buenos resultados el año pasado, pues sus respectivas parejas terminaron por abandonarlos a mitad de la celebración.
Aunque el pelirrojo insistía en mostrarse abatido ante la posibilidad de que el Baile de Navidad se repitiese, Harry sabía que se encontraba feliz. El año anterior (con todos los celos que Ron había demostrado tener de Víktor Krum) la propia Hermione le había gritado que, de celebrarse un nuevo baile, la invitara antes que ningún otro y no como último recurso. Estaba claro que su amigo no lo demostraría jamás, pero se notaba a leguas que se sentía satisfecho: el rumor de que ambos estaban juntos, le ofrecía la oportunidad perfecta para cumplir con esa "sutil insinuación". "Y esta vez, estoy seguro, no abandonarán a Ron en mitad del festejo".
Para él, en cambio, las cosas no se presentaban nada de fáciles. ¿Sería que Cho Chang esperaba que la invitara al baile, solo porque habían acordado ir juntos a Hogsmeade en la próxima visita a ese pueblo? Con profunda tristeza, no pudo evitar recordar la tímida invitación que le hiciera a la buscadora de Ravenclaw el año anterior y su posterior rechazo por Cedric Diggory. "Cedric…" - se repitió en su mente – "Si ese monstruo… si solo Voldemort no hubiese… es seguro que en esta ocasión ella volvería a acompañarte…"
Sacudió su cabeza con fuerza para ahuyentar aquellos dolorosos pensamientos. Decidió concentrarse nuevamente en el Baile de Navidad y a qué chica debería invitar para que fuese su pareja. Tenía que reconocer que se moría de ganas por pedírselo a Ginny Weasley pero… ¿Cómo reaccionaría ella al saberlo? ¿Y Ron? ¿Y Cho? "¡Argh! ¿Por qué todo tiene que ser tan complicado? ¡Por qué el amor tiene que ser así de complicado! Es en estos casos que desearía ser mayor… ¡de seguro los adultos no tienen que pasar por semejante bochorno!"
El Adeste Fideles cantado por una armadura embrujada, sacó al ojiverde de sus preocupaciones. Él, Ron y Hermione ya bajaban las escaleras de piedra en dirección a las mazmorras. Un gesto de profundo desagrado atravesó su rostro. "Casi lo olvido… examen de pociones herbovitalizantes. ¡Este hombre es insufrible! Si supiera que, en estos momentos, lo menos que me preocupa es su estúpido examen ¡seguro le da la rabieta del siglo!"
La imagen del rostro de Snape desfigurado de ira por ese motivo, hizo sonreír al chico. Sin embargo, una vocecita en su cabeza se encargó de recordarle su temor más profundo.
"Así y todo, él no tiene que pedirle a nadie que lo acompañe a ese dichoso baile…" "Sí, es cierto… hasta para eso tiene suerte el muy…" Volvió a sentirse abatido.
Si Harry Potter hubiese sabido que para su profesor de Pociones, la vida era igual o más tortuosa que para ellos, ¡¡es seguro que se habría sentido en la gloria!!
Detestaba profundamente aquella horrible decoración navideña. Después de los Merodeadores, lo que más odiaba en su vida eran los festejos, las celebraciones… Las consideraba a todas, sin ningún tipo de excepción, burdas, insulsas, innecesarias… Esas estúpidas fiestecillas solo lograban que alumnos y profesores bajaran la guardia, olvidándose de lo que realmente es importante… "Como ahora, por ejemplo, con ese ridículo rumor del Baile de Navidad… ¿Es que no tienen nada mejor que inventar? Deberían preocuparse por estudiar, que es para eso que se encuentran aquí. Como si Albus fuese a permitir que se celebrara un baile en estas condiciones… El Señor de las Tinieblas adquiere cada vez más fuerza y todos en el castillo parecen más excitados por ese patético rumor que por el destino de nuestras vidas. Lo que hay que ver… Y ahora esta reunión… ¡Argh! Este día ha sido uno de los peores: primero la decoración, luego el desastroso examen de los Gryffindors y ahora esto… ¿Qué más podría suceder?"
Aun estaba formulando la pregunta en su mente, cuando la vio aparecer por el otro extremo del pasillo. Se quedó de piedra.
- "Lo que me faltaba… y todavía tengo que conversar con ella"
Apresuró el paso para alcanzarla antes de que entrase a la sala de profesores. Tomó aire decidido y…
- Buenas noches, Nindë.
Ella ya había abierto la puerta del lugar. Al escuchar su voz, detuvo su marcha pero no retrocedió. Con cierto fastidio, se dio vuelta para encararlo.
- Buenas noches, Severus. ¿Necesitas algo?
Una ligera sensación de vacío invadió al mago oscuro. Ni en sus peores discusiones, la elfa lo había tratado con tanta indiferencia… Jamás había visto en sus ojos verdes tanta dureza, tanto desdén… y eso le dolía. "Pero ¿qué más querías? Después de lo ocurrido en tu despacho, no esperarías que ella te tratara con dulzura… ¿o sí?"
- ¿Necesitas algo? – repitió la profesora de Encantamientos con impaciencia. Desde el interior de la sala, el resto de los profesores los observaba con curiosidad.
- En verdad, sí – le contestó con la voz destilando veneno – pero ¿no te parece que hay… demasiados entrometidos escuchando lo que no les corresponde?
Los aludidos dejaron de mirarlos rápidamente, entablando una amena conversación con quien estuviese más próximo.
- Severus, si no te molesta, tengo un poco de prisa. Necesito hablar con Remus antes de que Albus llegue.
- "Otra vez ese maldito hombre lobo…" – Empuñó sus manos con fuerza. Al parecer, no le iba a quedar de otra más que conversar con ella bajo el umbral de la puerta, con todos los demás escuchando lo que hablaran – Está bien… Albus vino esta mañana para aconsejarme aumentar las horas de nuestras clases. Le dije que te preguntaría primero porque después de lo que pasó, ni siquiera estaba seguro de si…
- Por mi no hay problema – lo interrumpió secamente – No soy tan inconsciente como para dejar las clases solo por una… tontería como esa.
- "¿Tontería? ¿Así que esos besos no fueron más que una… tontería?" – Lo mismo pienso yo – le espetó de mala gana, tratando infructuosamente de controlar su ira.
- Pues me alegro. Y espero que nunca más volvamos a tocar este asunto. Hablando ahora de las clases…
- ¡AHHHHHHHH! – exclamó teatralmente la profesora de Adivinación, llamando la atención de los presentes. Trelawney tenía los ojos desorbitados y no hacía más que apuntar hacia la puerta donde Severus y Nindë charlaban poco animados.
La elfa y el mago oscuro miraron atónitos por sobre sus cabezas. Allí no había nada más que muérdago, colgado del dintel de la puerta.
- ¿Qué pasa, profesora? – le preguntó burlonamente Snape - ¿Me va a decir que ahora ve augurios de muerte hasta en una simple rama de muérdago?
- No profesor Snape – le respondió Sybill ofendida – Pero seguramente será usted el que se muera de la impresión cuando le recuerde que, según la tradición, debe besar a la profesora Nólatári para que ambos encuentren el amor eterno.
Fue como si alguien hubiese dejado caer un balde de agua fría sobre todos los profesores de Hogwarts. En forma casi automática, sus miradas se dirigieron hacia los dos docentes que se encontraban en la puerta de la sala de profesores. Se preguntaban cómo reaccionarían ante semejante situación, en especial, Snape.
Nindë y Severus no pudieron evitar sonrojarse al sentirse tan observados. El profesor de Defensa había estrechado sus ojos dorados (ante el rubor que apareciese en el pálido rostro de su colega) y meditaba el tener que intervenir, cuando la elfa rompió el incómodo silencio objetando…
- Lamento desilusionarla, profesora Trelawney, pero Severus y yo no nos vamos a besar. Dudo que el profesor aquí presente crea en esas tradiciones y yo tampoco lo hago. Además, esa costumbre solo es válida para Nochebuena y… - se detuvo al recibir la mirada gélida que le propinaba el profesor de Pociones. ¿Qué? Parecía más irritado de lo normal pero… ¿por qué, si no había dicho nada de malo? A no ser que... ¡en verdad pretendiera besarla! Sintió pavor ante la sola idea de que eso fuese posible.
- Tengo que contradecirte, querida – prosiguió la profesora Trelawney – porque estás equivocada. La tradición nos dice que…
- Sybill – esta vez fue Remus quien interrumpió a la profesora de Adivinación – No es necesario que Severus y Nindë se besen, porque al menos ella ya encontró el amor eterno – y con una gran sonrisa en los labios, agregó - Somos novios desde hace casi un mes.
Un segundo balde de agua fría cayó sobre los presentes. Severus miró a la elfa, incapaz de articular palabra. La noticia lo había pillado de sorpresa (y eso que se vanagloriaba de estar siempre atento ante cualquier eventualidad).
- Pues felicitaciones – exclamó una voz jovial proveniente de detrás de Nindë y Severus. Era el director.
- Gracias – le respondió Remus, mientras se acercaba y tomaba de la mano a su "novia".
- Yo… yo también te felicito – agregó una dulce voz femenina. Se trataba de una bruja de ojos oscuros y centelleantes, y de cabello corto, de punta y de color violeta intenso.
- ¡Tonks! – exclamó Remus, abrazando a la bruja – Y… ¡Hocicos!
Un gran perro negro se encontraba al lado de Tonks y del director, moviendo la cola sin cesar.
- ¡Qué alegría tenerlos aquí tan pronto! – prosiguió el licántropo – Cuando recibí tu carta, no me decías la fecha en que vendrían.
- Pues…
- Creo que ya tendrán tiempo de conversar sobre eso después – intervino Dumbledore - Por lo pronto, podríamos ir entrando a la sala para dar comienzo a la reunión, ¿no lo creen?
Así lo hicieron. Severus se dirigió al fondo de la habitación, sin dejar de mirar ni un instante a la Princesa de los Elfos Altos. No quería reconocerlo pero la noticia no le había causado gracia alguna. Aunque aun no terminaba de reaccionar, comenzaba a sentirse engañado, burlado… Y como si eso fuese poco ¡qué diablos hacían el estúpido de Black y esa torpe Auror en el castillo!
Casi no escuchó las palabras del director. Sentía hervir la furia bajo sus venas, lo único que quería era gritarle un par de cosas a esa, a esa… profesora y estrangular del cuello a Lupin hasta borrar esa estúpida sonrisa de su rostro… Había comenzado a perder la noción del tiempo, cuando escuchó claramente que para Navidad se celebraría el baile del que tanto hablaban los alumnos. La noticia terminó por agotar su paciencia. Era más de lo que podía soportar.
- Perdona que me entrometa, Albus, pero es la peor decisión que te he visto tomar. El famoso Baile de Navidad lo único que provoca en el castillo es caos. Con el Señor de las Tinieblas vigilando cada paso que damos, lo menos recomendable es una celebración de este tipo. Debemos estar preparados, no darle oportunidad a que nos encuentre desprevenidos.
- Por esta vez estoy de acuerdo con el profesor Snape, Albus – intervino la profesora McGonagall – Dadas las circunstancias…
- Es por eso mismo que he decidido que se lleve a cabo este baile, Minerva – la interrumpió gentilmente Dumbledore – Todos estamos muy tensos ante el regreso de Voldemort y siempre viene bien darse un respiro… Nos servirá para aclarar las ideas y liberar ciertas… tensiones. Los alumnos se lo merecen, ¿no? Han estado trabajando duro todos estos meses. ¿Qué mejor recompensa que ésta?
Los murmullos se expandieron por la sala de profesores. La mayoría se mostraba conforme con la disposición del director, hasta que Albus agregó con cierta picardía…
- Les recomendaría que ustedes también participaran de la celebración así es que… pueden ir buscando desde ya su pareja. Aunque creo que a algunos no les hará falta – y les guiñó un ojo cómplice, a Nindë y a Remus.
- ¡Es suficiente para mí! – masculló entre dientes el profesor de Pociones y se retiró de la sala evidentemente molesto, tras un sonoro frú frú de su capa negra.
¿Por qué Albus insistía en que participara de semejante aberración? ¿Tan pronto había olvidado lo que un Baile de Navidad simbolizaba en su vida? Todo había comenzado con un estúpido baile como ese, hacía ya tantos años… Y hasta el día de hoy estaba pagando las consecuencias de tan fatídica noche.
Fin del Capítulo 18.
Notas de la Autora:
Para quien se haya quedado con la duda, la tradición del muérdago de la que habla Trelawney es la siguiente:
"Son muchas las leyendas que giran entorno a esta planta de arraigada tradición navideña. Una de las más curiosas dice que Balder, Hijo de Odín en la mitología escandinava, dios de la paz y la inocencia, fue herido y luego muerto por una flecha de muérdago. El hecho de su muerte entristeció tanto al resto de los dioses, que conmovidos por las lagrimas de su amada, le devolvieron la vida para restituir su amor y que éste durase para siempre ( pues algo de tal belleza no debía morir). Balder, una vez vuelto a la vida, en tributo a esta acción ordenó que en adelante, cada vez que una pareja pasase bajo una rama de muérdago, debería besarse para perpetuar el amor en la tierra.
Cuentan que dar este beso a la otra persona hará que las mujeres encuentren su amor verdadero, perpetúen el que ya tienen o en el caso de los hombres mejore su fertilidad".
En mi país, esta tradición no se lleva a cabo pero… ¡¡me encantaría que así fuese!! Jijijiji
Les deseo una muy buena semana. Muchos besos y mucha fuerza.
Clau de Snape
Miembro de la Orden Severusiana
Miembro de las Ron4Ever
