Nota de la Autora:
Por fin conseguí subir todos los capitulos que borraron del fic, y les dejo a continuación el correspondiente a esta semana. La verdad, no vale la pena seguir dándole vueltas al asunto... Solo me queda agradecer su infinita paciencia y ánimos para que siga adelante. ¡¡Gracias!! Los quiero mucho.
¡¡Aquí me tienen de regreso!! Mis disculpas por haberme "saltado" una semana pero una repentina falta de inspiración hizo estragos en el cap correspondiente jijijiji Así que preferí tomarme unas pequeñas vagaciones hasta que mi "musa" decidiera volver. Gracias a Merlín, regresó a mediados de esta semana (y aunque no en muy buenas condiciones) me permitió continuar con el fic sin mayores contratiempos.
Me temo que este cap es algo confuso y deja varias cosas sueltas, sin explicar… Pero todo tiene un por qué y solo les pido paciencia. Si lo desean, pueden dejarme sus teorías en los reviews (y así de paso, obtengo una carta bajo la manga por si a mi inspiración le da por salir a "parrandear" de nuevo) jijijiji
La contestación a los reviews será cortita (para qué entretenerlos más, ¿no?) pero antes, y como ya es habitual, mi más sincero agradecimiento a mi beta comadre Jany.
Drake Malfoy: Hola, "wapo" jijijiji Ya sé que andas de vagaciones (y bien merecidas las tienes después de tanto estudiar) pero sé que cuando vuelvas leerás esto así que pon mucha atención. Tienes toda la razón, a Sev y a Nindë les queda mucho camino que recorrer y más cuando tengo estos instintos asesinos rondándome en la mente… Y no te preocupes, que el lobito no va a quedarse tan solo… Pobre, no se lo merece. Un beshito!
Lil Granger: ¡¡Amigui!! Años de años que no me encuentro contigo. ¿Estarás bien? ¿Seguirás viva? ¿Ya de vagaciones? Cuántas preguntas jijijiji Y sip, el amor flota en el aire… (Por cierto, no sabes cómo me reí con eso de "Dumbledore y McGonagall" jijijiji) Ya en este cap salen más Ron y Herm… Aunque me temo no te va gustar. Pero prometo redimirme en el próximo cap. ¿Querías acción? Pues los próximos dos caps caen en esa categoría. Un poquitín de paciencia. Con respecto a Ale pues… a seguir esperando que no tenemos cap quizás hasta cuando… Beshitos!!
Lakota Snape: Gracias, muchas gracias. Es una gran satisfacción para mí que el cap anterior haya sido de tu agrado. Y te aviso que me encanta lo romántico así que es posible que tengamos un par de caps más en ese tono. Yo también pienso que a Sev le hace falta un "relajo" con nombre de mujer. Saludos!!
Indira de Snape: ¡¡China!! No sabes lo bien que me hizo recibir tu mail y luego la tarjetita virtual. Muchísimas gracias, me subiste harto el ánimo y en parte, este cap te lo debo a ti. Es gratificante saber que cuento con una gran amiga…porque a pesar de la distancia, así te siento: una gran amiga. Gracias por preocuparte…TQM!! Con respecto al cap anterior… ¡¡me alegra que por fin no quedaras picada!! Jijijiji Y lo mejor aun está por venir. Espera el cap 25. ¡¡Muchos beshitos!!
Caris: ¡¡Amigui!! Al final nunca te dejaste ver por msn… Aquí tienes ya tu cuota semanal del "Elixir…" jijijiji Y no podrás quejarte demasiado porque Ron y Herm por lo menos salen en este cap. Eso sí, espera el próximo que será el definitivo para ellos... ¡¡Qué bien que te encanta el dulce!! Porque aun queda una gran cuota jijijiji Y sip, si vi Moulin Rouge… y también me gustó (sobre todo por Ewan jajajajaja) Un besazo!!
Alexms: ¿Qué más te puedo decir, amigui? Tú lo sabes casi todo (o casi nada, dependiendo de cómo se mire jijijiji) Me alegro que el cap anterior te haya gustado tanto… ¡¡Mira que los hice sufrir como 20 caps!! Jajajajaja Pero al final, todo tiene su razón de ser y su recompensa. Espero que esta semana no me mates por lo que le hice a Sev… pero recuerda que necesito estar viva para poder escribir el final (qué chantajista jajajaja) Muchas gracias por "soportarme" todas las tardes en msn jijijiji Espero disfrutes con esta entrega. Un beshito!!
Elanor Black: Jijijiji Qué bien que te haya gustado tanto el cap anterior (y más me alegro de que te guste lo dulzón porque aun queda su buena cuota para el futuro jijijiji) Y debo darte toda la razón... A Sev y a Nindë aun les queda mucho camino que recorrer (y en él está Voldemort incluido) ¿Que después luzca el sol? Difícil pero no imposible. Veremos qué resulta al final. Beshitos!!
Amsp14: ¡¡Ani!! Te lo sigo diciendo: ¡¡me encantan tus reviews!! Los espero con ansias cada semana, junto con los de May. Qué dicha que te gustara el cap, tenía miedo que quedara muy romántico (sobre todo por Snape, que no sabemos cómo reacciona ante estas cosas… En ese aspecto es un personaje difícil de manejar, ¿no? En fin…) Ya verás que Sev sí acepta que la elfa esté enamorada de él y él de ella… pero no por eso dejará de ser sarcástico, ¿eh? Incluso en este cap estuvo a punto de… bue, mejor que lo leas tú misma y luego me dices qué te pareció. Como le advertí a May, pues… no me vayas a matar por lo que le hice a cierto profesor de Pociones… Si en algo te sirve de consuelo, te cuento que me costó horrores escribir esa escena. Por lo pronto puedo prometer unos dos o tres caps con calma… con mucho amor… pero después de eso… Ni yo lo tengo muy claro (y más ahora que me bajaron todos los instintos asesinos muajajaja) ¿Y eso? ¿Me dices que Florence se parece a un personaje tuyo? ¿Será a la misteriosa Mary Ann? M m m… Espero que el cap sea de tu agrado. Un beshito!!
Amanda Beicker: ¿Andarás de vagaciones, amiga? Siglos que no sé nada de ti… Bien, espero que ya estés con el ánimo muy pero muy arriba y que estés escribiendo como una loca la continuación de tu fic, ¿eh? Jijijiji Sip, el triángulo ya se va resolviendo pero descuida que nadie se quedará solito… (Bueno… más o menos jijijiji) ¡¡No!! Sev puede amar a Nindë pero jamás, jamás de los jamases dejará el negro… Es su manera de llevar el luto y si lo deja, pues dejaría de ser Snape, ¿no crees? Ni te preocupes por lo del review… Me contento con que leas el fic hasta el final y me dejes tu opinión de vez en cuando. Saludines!!
Eso es todo… Ahora… ¡¡a leer!!
CAPITULO 23: UNA NUEVA ORDEN
Salió de la Enfermería con el corazón desbocado y una gran sonrisa en los labios. Sin embargo, y nada más con cerrar la puerta del lugar, se dio cuenta de que las piernas le temblaban (como si estuviesen hechas de flan) y que no llegaría muy lejos si antes no se tranquilizaba. Se apoyó ligeramente sobre el muro de piedra del castillo mientras dejaba escapar un hondo suspiro. ¡Esta vez ni siquiera intentaría impedir sus habituales divagaciones mentales!
- "Gracias a Merlín que las piernas te fallaron ahora y no cuando estabas ahí adentro, con él… ¡Hubiese sido desastroso terminar en sus brazos, confesándole tu amor! Mmmm… Aunque pensándolo bien, eso no hubiese estado tan mal… ¡Ja, ja, ja, ja!..." ¡¡Basta, Nindë!! Pareces una adolescente irresponsable… "¡Oh, vamos! Hasta una elfa tiene derecho a soñar, ¿verdad? Porque él me corresponde… porque él está sintiendo lo mismo…" Pero ¿te diste cuenta del temor que lo invade? Es la primera vez que aquellos ojos negros te permiten llegar al fondo de su alma… "Y en ella hay tanto dolor, tanta amargura… Ya no hay dudas: Severus se culpa por el trágico destino de Florence y es por eso que se autoexige vivir en la más implacable soledad".
Una extraña sensación se alojó en su pecho. ¿Qué? ¿Celosa de la señora Snape? "No, no es eso, al contrario… Florence fue una bruja muy afortunada. Existen poquísimas criaturas que han sido amadas en forma tan ferviente y desesperada… Y así fue como Severus la amó y como ella lo amo también. No, definitivamente no son celos… Lo que él necesita ahora es un ser especial que vuelva a inspirar ese sentimiento que su esposa le hizo conocer".
Casi al instante, el Colgante de la Amada se coló entre sus pensamientos. Si tú fueses ese ser, Nindë, si él te permitiese acercar y entrar en su corazón entonces… ¿Qué harías? "Lo único que podría hacer: intentar ayudarlo". Tal y como Florence lo hizo… "Cada quien debe correr sus propios riesgos, ¿no?". ¿Estás consciente de que Severus no sería capaz de soportar otra pérdida semejante? "¿Y por qué esta vez las cosas tendrían que darse de la misma forma?" Perdona pero el hecho de que debas enfrentar a Voldemort (ya sea como Princesa o como Guardián), es razón más que suficiente para "sospechar" que compartirás el mismo destino que ella. ¿O qué? ¿Crees poder derrotar al Señor de las Tinieblas? "Espero que sí… espero que si..." ¡Pero estás arriesgando demasiado tu vida! "¿Y qué valor tiene la vida cuando a cambio tienes la posibilidad de redimir a la persona que más amas en el mundo?"
La fastidiosa vocecita en su cabeza dejó de hacer preguntas justo cuando aparecía Harry al final del pasillo. Nindë se alegró de que el chico no la encontrase desprevenida como en aquella ocasión, en que había estado a punto de descubrir sus verdaderos sentimientos por el ex mortífago.
Alisó la túnica que traía puesta y sonrió. Se sorprendió de la facilidad con que el gesto se había dibujado en su rostro y no pudo dejar de preocuparse por ello. Entonces, y por segunda vez en esa mañana, sintió una extraña sensación alojándose en su pecho… De pronto, una especie de visión muy, muy borrosa fue adquiriendo forma en su mente… aquello parecía ser…
- Hola, Nindë.
- Buenos… buenos días, Harry – contestó la joven un tanto confundida. Le parecía estar debatiéndose entre el sueño y la realidad.
- ¿Te sientes bien?
- Sí, sí – se apresuró a contestar – Me duele… me duele un poco la cabeza pero es normal luego de… Olvídalo, no es nada importante. ¿Y tú? ¿Cómo te encuentras? No es muy agradable tener premoniciones, ¿verdad?
El ojiverde se encogió de hombros.
- Supongo que no. Lo que realmente me molesta es haberme… desmayado. Me desmayé y no fui capaz de ayudarte…
Nindë no pudo dejar de notar la amargura en cada una de las palabras del chico.
- Harry, eso no significa que seas débil. Es más, estoy impresionada de que hayas tenido tiempo para alertar a los demás sobre el ataque. Las visiones suelen ser devastadoras para nuestras reservas de energía y más si no está en tu naturaleza el conocimiento y manejo del don.
A Harry se le figuró estar oyendo a la profesora Trelawney. Si su Guardián hubiese salido a continuación con un discurso acerca del ojo interior y todas esas tonterías, seguramente habría echado a correr por el pasillo, sintiéndose aun más resentido por no haber podido ayudar. Pero Nindë Nólatári no era como la profesora de Adivinación (sino que era la Princesa escogida por la Profecía); no era una bruja ordinaria (de hecho, ni siquiera era Humana sino que Elfa); ni tampoco dijo ni una palabra más al respecto (solo se limitó a mirarlo con dulzura a través de sus vivaces ojos verdes). Entonces el muchacho sonrió, experimentando una renovada sensación de bienestar.
- Dumbledore me dijo que los mortífagos no te habían hecho daño – prosiguió el ojiverde más animado.
- Así es, solo tengo un rasguño en el hombro pero no es nada de cuidado.
- Entonces ¿qué hacías en la Enfermería tan temprano?
La elfa se sonrojó.
- B-Bien… y-yo… Madame Pomfrey…
Si la situación en sí ya era embarazosa, se puso peor cuando el profesor de Pociones se reunió con ellos (accidentalmente, por supuesto). Al salir de la Enfermería, el mago oscuro no se percató de la presencia del "odioso" Gryffindor y… cuando vino a reaccionar, ya había pronunciado ciertas palabras… digamos que comprometedoras.
- ¿Todavía por aquí, Nindë? Ahora no pretenderás estar todo el día peg… - se calló de golpe. Iba a decir: "Ahora no pretenderás estar todo el día pegada a mi" pero no contaba con que Potter estuviese allí. Al instante, la sonrisa maliciosa se esfumó de su rostro y se esforzó por recuperar su habitual "máscara" de hostilidad - Vaya, vaya, Potter… - la voz de Snape sonaba suave pero extremadamente peligrosa – Tienes un talento especial para encontrarte siempre en el momento y lugar menos indicado. ¿Qué haces aquí? Deberías estar en tu Sala Común y no "merodeando" por el castillo.
Harry no reaccionó a las provocaciones de su profesor como habitualmente lo hacía. ¡Eso podía esperar! En ese momento estaba demasiado ocupado sacando veloces conclusiones. ¿Desde cuándo Snape y Nindë se trataban con tanta familiaridad? ¿No era que no se soportaban? ¿Y a qué se refería cuando le dijo "Todavía por aqui"? ¿Acaso habían estado juntos en la Enfermería?
La elfa observó al ojiverde con preocupación. El chico tenía en su rostro la misma expresión de sospecha de Sirius, la noche que habían sido atacados. Seguramente estaría atando cabos, situación que no sería beneficiosa para ninguno de los tres (y eso que no estaba incluyendo a Remus que si no…)
- Ejem, ejem – carraspeó finalmente, interviniendo – Severus, no quiero que te ofendas pero Harry y yo estábamos en medio de una conversación importante.
El aludido desvió su mirada de Potter hacia Nindë. Al ver el evidente nerviosismo en ella, no pudo evitar que sus pequeños ojos negros brillaran de forma extraña. Y Harry se dio cuenta.
- Si dices que se trata de una charla tan significativa, entonces, ¿qué hacen aquí? Deberían estar en tu despacho. Las paredes tienen oídos, ¿sabes?
- Tendré en cuenta tu consejo, Severus… muy en cuenta. Gracias.
El mago dirigió una última mirada a Harry (de esas que solo reservaba para él) y se alejó de ambos con la larga capa negra hinchándose tras él.
- Supongo que estoy en lo cierto, ¿verdad? – preguntó la elfa con intención de captar nuevamente la atención del ojiverde – Hay algo que quieres decirme…
- ¿Cómo sabes eso?
La joven se encogió de hombros.
- Intuición femenina.
- Se trata de una idea de Dumbledore. Hablamos de ello esta mañana.
- Ya veo… Entonces lo mejor será que sigamos el consejo de Severus. Vamos a mi despacho, ¿sí?
Harry asintió mientras tomaba nota mental de todo lo que había presenciado. Luego tendría que hablar de ello con su padrino y con Remus.
o o o o o o O O O O o o o o o o
- M-Mi… mi señor – musitó Colagusano a la vez que realizaba una profunda reverencia ante el lord.
- Ya era hora, Colagusano – fue la respuesta que recibió. El mago que alguna vez fuese humano, se mantuvo sentado frente al fuego de la chimenea, acariciando mecánicamente a su serpiente/mascota Nagini - ¿Dónde los llevaron?
- A Azkaban, señor.
- Perfecto… Entonces es hora de que volvamos a reunirnos. Acércate, Colagusano.
El hombre bajito y calvo (de asombroso parecido a una vieja rata) se acercó temblando al sofá donde descansaba su amo. Su sola presencia bastaba para que hasta los pelos de la nuca se le erizasen; eso no cambiaría nunca… nunca. Y tal como lo hiciese aquella vez en el cementerio de Pequeño Hangleton, el Señor de las Tinieblas tiró del brazo izquierdo de su mortífago y le retiró la manga por encima del codo. Tras contemplar la Marca Tenebrosa unos instantes, su largo y blanco dedo índice la apretó con fuerza.
Fue poco tiempo después que el viejo salón de la Mansión Ryddle fue llenándose repentinamente de ruidos de capas. Todos los magos que iban apareciéndose, estaban encapuchados y utilizaban máscaras sobre sus rostros. Voldemort permaneció en silencio, aguardando. Cuando consideró que ya había pasado el tiempo suficiente para que sus fieles vasallos acudiesen al llamado, se puso de pie y se colocó en medio de ellos, imponente.
- Bienvenidos, mortífagos – cada uno de los presentes efectuó una respetuosa reverencia en respuesta al saludo de su señor – Los he convocado porque tengo que comunicarles noticias importantes… muy importantes para la consumación de mis propósitos. Sepan que la Princesa de los Elfos Altos apareció. Sí, amigos, y se encuentra muy bien protegida por ese paladín de la gente común, de los sangre sucia y de los muggles. Según un informe presentado por Lucius Malfoy (única razón de por qué sigue vivo tras su fallida incursión a Hogwarts), la profesora de Encantamientos terminó poniendo al descubierto su verdadera identidad al invocar, en la pelea, un poderoso hechizo de magia antigua. Como supondrán, ahora menos que nunca podremos sacarla ese maldito colegio porque el viejo chiflado habrá tomado más precauciones que nunca… Crabbe, Goyle – preguntó de improviso y los aludidos temblaron bajo sus capuchas – Supongo que el resto de los ingredientes están…
- En perfectas condiciones, señor – se apresuró a añadir Crabbe.
- Y esperando para ser utilizados en el momento que usted disponga – agregó Goyle.
- Muy bien… Entonces pónganse a trabajar.
- Pero mi señor – se atrevió a rebatir Crabbe – El Antyw debe ser agregado a la poción exactamente a las 8 semanas y… y si ahora es más difícil que la Princes…
- ¡Crucio! – exclamó el lord mientras apuntaba su varita hacia el mortífago – Jamás vuelvas a cuestionar una decisión mía. ¿Lo entiendes, Crabbe?
El hombre se retorcía de dolor en el suelo, incapaz de pronunciar palabra alguna. Luego de unos instantes, Voldemort levantó su varita, cesando la maldición.
- Ponte de pie. Ahora mismo tú y Goyle se marchan al laboratorio. Los demás, sigan con sus actividades habituales… hasta nuevo aviso.
La rapidez con que cierto profesor de Pociones se retiraba del salón, se vio truncada por la mismísima voz siseante del lord.
- Tú quédate, Severus.
El mago oscuro perdió todo rastro de sangre fría al escuchar la orden de "su señor". ¡Demonios! Sabía de antemano que sería castigado por no ayudar a Malfoy en el ataque, sin embargo, después de que el lord los despidiese pensó que… Volvió tras sus pasos y tomó aire con decisión. Acto seguido, vació y cerró su mente justo cuando Voldemort comenzaba a practicar la Legeremancia con él.
- ¿Por qué no ayudaste a tus compañeros anoche?
- Mi señor – Snape estaba con una rodilla en el suelo, mostrando una lealtad y debilidad que en ningún caso sentía – Yo sí interv….
- ¡Crucio!
La maldición golpeó de lleno el cuerpo del ex mortífago pero, aunque cayó de rodillas, ni un solo grito salió de sus labios.
- Tu ineptitud y la de Lucius ¡estuvieron a punto de echarlo todo a perder! – Voldemort por fin retiró la maldición – Sin embargo, no puedo eliminarte porque eres el único que se encuentra realmente cerca de esa… elfa. Así que llegado el momento, serás tú quien la traiga ante mi presencia.
- No… no creo que sea… conveniente, mi señ...
- ¡CRUCIO!
Esta vez, el profesor cayó redondo al suelo y poco le faltó para empezar a gritar. La maldición había sido mucho más fuerte que la anterior y aplicada con un intervalo de tiempo muy reducido entre una y otra.
- No estás en posición de creer o no creer, Severus. Ya me has decepcionado demasiado… no hagas que me arrepienta ahora de haberte dado esta última oportunidad. Mantente muy cerca de ella… ¡y tráela cuando te lo indique! ¿Lo has entendido?
- Sí… mi lord.
- Entonces ¡¡sal de mi vista!!
Snape inclinó la cabeza y atravesó el salón a grandes zancadas. Bajo el umbral de la puerta (y antes de desaparecerse) intercambió unas cuántas miradas gélidas con su compañero de labores, Lucius Malfoy. Este último hizo acto de presencia frente al lord nuevamente y…
- Mi señor…
- Tenías razón – escupió Voldemort - ¡Severus se ha enamorado de esa dichosa Princesa!
- Y aun así cree que es prudente que él…
- Por supuesto que no – lo interrumpió secamente – Pero de este modo, me aseguro de que no pueda ponerla sobre aviso… ¡Ja, ja, ja, ja!... No podrá, por más que esté tentado de hacerlo…
o o o o o o O O O O o o o o o o
Algunos días después…
- ¡La reunión estuvo excelente! – exclamó Hermione con un entusiasmo desbordante – Tengo que reconocer que Dumbledore esta vez se ha lucido.
- La verdad es que tienes toda la razón, Hermione – confirmó Ron con un ánimo muy similar al de la morena – Esto será parecido al antiguo Club de Duelo pero… con profesores capacitados.
La chica carraspeó nerviosa.
- Ojalá sea Tonks la primera en instruirnos – añadió - ¿Se imaginan? ¡Tendremos a un Auror como profesora! Claro, sin contar a Remus y a Nindë que son igual de diestros en la materia… No podríamos estar preparándonos de mejor manera frente al regreso de Vo… Vo… Voldemort.
- Pero no te noto tan animado como nosotros, Harry – intervino nuevamente el pelirrojo - ¿Qué es lo que te preocupa? Acaso Remus…
- No, él está bien – aseguró el ojiverde – Además hoy, y después de tanto tiempo, vuelve a estar con Hocicos para su transformación…
- ¿Entonces?
- ¿La verdad? Se trata de los Slytherins. ¿No creen que es muy arriesgado que ellos estén aprendiendo junto con nosotros? Es como estar dándole armas para cuando decidan revelarse.
- Mmmm… no lo había pensado de ese modo, Harry – apuntó Ron ahora algo preocupado también – Y no solo es arriesgado sino que peligroso… Luego de lo del Baile de Navidad…
- Quizás es por eso que Dumbledore los ha escogido.
- ¿A qué te refieres, Hermione?
- Verás, Harry… ¿Piensas que los slytherins seleccionados para esta Orden no se lo harán saber a Vo… a Voldemort? Yo creo, más bien, que es una especie de advertencia… En fin, olvídenlo, no es más que una mera suposición. ¿Dónde se quedó Ginny?
- Está con Luna – esta vez fue el pelirrojo quien contestó – Necesitaban ponerse de acuerdo por un trabajo que Sprout les dej… - el muchacho supo que había "metido la pata" por la dura mirada que la morena le propinó.
- ¿Ahora es Luna? – le preguntó la chica elevando considerablemente su tono de voz - ¿Cuándo dejó de ser Lunática?
- Ya va, Hermione, cálmate porque no es lo que tú...
- Ron… ¡Ron, espera! – eran Ginny y Luna Lovegood. La chica de Ravenclaw llevaba su cabello rubio suelto, acentuando aun más su habitual aire soñador (y también algo chiflado, por cierto).
- ¿Qué pasa Ginny? – preguntó la morena en un tono frío y seco – Ah… hola, Luna.
- Hola – contestó Luna, utilizando en sus palabras la misma indiferencia de Hermione – En verdad yo quería hablar con… Ron.
- ¿Conmigo?
- ¿Con Ron? – preguntaron el ojiverde y la morena al unísono.
- Bueno… sí. Yo solo… solo quería saber si sigue en pie nuestra salida a Hogsmeade en… San Valentín.
Ron miró de reojo a Hermione. Se notaba que ella estaba furiosa y no era para menos… Desde un poco antes del Baile de Navidad que la relación entre ambos había mejorado sustancialmente y justo ahora…
- Bien… verás Luna… lo que pasa es que…
- Si es por mí, ni te preocupes – le espetó la morena de muy mal talante – Tú y yo… no tenemos nada formal, Ron. Eso de que somos novios es… ¡es solo un estúpido rumor! Así que puedes arreglar, sin ningún tipo de remordimientos, todas… todas las citas que quieras. Y si me disculpan, me tengo que retirar.
-¿Así que solo se trata de un rumor? – preguntó Luna con una sonrisa de oreja a oreja - ¡Yo lo sabía! Entonces… ¿quedamos para ese día?
- Así… así parece – le contestó el chico encogiéndose de hombros - ¿Sabes? Recordé algo importante que tengo que hacer… Nos… nos vemos después, ¿sí?
- Oh, claro, no te preocupes. También yo me voy – y dirigiéndose a Harry y a Ginny añadió – Buenas noches, chicos.
- Vaya reacción la de Hermione – murmuró Harry cuando él y la pelirroja se quedaron solos. Aun lucía sorprendido por la actitud de su amiga.
- Al parecer, ella se transforma cuando se trata de Ronnie y de… las posibles chicas que pudiesen estar interesadas en él. Una faceta hasta ahora desconocida, ¿no crees?
- Pues sí. Al único que había visto comportarse de igual manera es a Ron… Solía tener arranques parecidos con…
- Viktor Krum.
- Aja… En fin, la paz entre ellos no podía durar mucho tiempo más, ¿verdad?
La pelirroja rió.
- Creo que no. Si esos dos no están peleando entonc…
- ¿Ya tienes planes para San Valentín, Ginny? – la interrumpió Harry, cambiando diametralmente de tema.
- ¿Yo? Bah, quiero decir… no, ninguno… No soy tan "afortunada" como Luna y… para ser sincera, no guardo muy buenos recuerdos de esa fecha – cierto mensaje amoroso entregado por un duende con un arpa, ocupaba en esos instantes la mente de Ginny – En todo caso, nunca se sabe si llegará una invitación a último momento… Bien, creo que ya me voy. Nos vemos en la Sala Común, supongo.
El muchacho solo atinó a mover su cabeza afirmativamente. Las últimas palabras de la pequeña Weasley lo habían puesto a pensar inexorablemente.
o o o o o o O O O O o o o o o o
- Me encantó la postura de los chicos – le decía Nindë a Tonks mientras terminaba de recoger unos cuantos libros de encima de su mesa – A pesar de los esfuerzos del Ministerio, la noticia del regreso de Voldemort los ha… ¿Sucede algo, Tonks?
- ¿Eh? ¿Cómo? No, no, no te preocupes…. Es solo que últimamente ando más distraída de lo normal.
Ambas brujas rieron.
- La verdad, Nindë, pensaba en ti.
- ¿En mí?
- Sí, bueno… en realidad en los Elfos en general. Quizás te parezca gracioso pero me imaginaba que ustedes eran… distintos.
- ¿Distintos? – preguntó la Princesa muy interesada, apoyándose contra un pupitre de la primera fila - ¿En qué sentido?
- No sé… Los hacía más… etéreos, casi angelicales.
- Y hablando siempre como "en clave", acerca del poder y la magia de la naturaleza.
- ¡Sí! Parecidos a los Centauros… Místicos, sabios, enigmáticos…
- Inaccesibles.
La Auror asintió.
- Bueno… no me extraña que tengas esa imagen de nosotros. Y además, no eres la única que nos imagina así, ¿eh? Es natural cuando nuestras razas han evolucionado en forma tan… independiente.
- Ya veo… Los magos han mirado en menos a demasiados seres mágicos… Durante muchos años han creído que sus poderes y conocimientos son superiores y mira a donde nos ha llevado esa creencia. Voldemort, por ejemplo, ha sabido aprovecharla muy bien… Cada vez son más las criaturas que se les une, deseosas de venganza al verse marginadas por tanto tiempo.
- Tienes toda la razón, Tonks. Es más, mi propio pueblo se mantiene alejado de los "Hombres" por ese motivo. Aunque no te engañes: yo tampoco soy el prototipo de elfo ideal. Mi padre me crió de tal manera, que creo parecerme más a ustedes que a mis propios pares.
Las brujas volvieron a reir.
- Siempre me pregunté por qué se me permitía estar en "contacto permanente" con el mundo de los magos y brujas… Ni siquiera cuando manifesté mi deseo de aprender a hacer magia con varita tuve tantos problemas (y eso que suponía una afrenta contra nuestras leyes y principios fundamentales de vida). Ahora sé que mi padre intentaba prepararme, de la mejor manera posible, para el momento en que enfrentase a Voldemort.
- Por la Profecía.
- Así es… En verdad creo que ser una "mezcla" algo extraña entre ambas razas.
- Quizás es por ello que Remus se siente tan identificado contigo.
La elfa alzó una ceja.
- ¿Cómo?
- Eso… Que eres un ser muy especial, Nindë. Posees un poder, una especie de… aura que tranquiliza, que atrae… Sí, definitivamente te asemejas demasiado a los elfos de mi mente… - y hablando más para sí misma, musitó - Y lo peor es que yo nunca podré ser como ellos… Él nunca me verá como te ve a ti…
Esta vez la elfa alzó ambas cejas, sorprendida. Había escuchado eso… ¡y muy bien! ¿Sería posible que Tonks…? ¿Tan ciega había estado, que recién venía a darse cuenta de que la Auror estaba enamorada de...?
Fin del Capítulo 23.
Nuevamente, muchas gracias por seguir leyendo y por todo su apoyo. Para los que están de vagaciones, descansen y disfruten mucho. Para los del otro lado del mundo, fuerza y muchos ánimos. ¡¡Beshitos!!
Clau de Snape
