Este ff esta hecho por Elísabeth y Ana!

Los personajes principales son los de Rowling, los demas son nuestros!

Capítulo 8: Enterrando el hacha de guerra.

Entrada ya la tarde los chicos concluían ya su última clase y decidieron ir a ver a James, que seguía en la enfermería. Sin embargo, al cruzar la esquina vieron a Lily entrar y pensaron que sería buena idea dejarle un tiempo para charlar.

Al entrar, Lily vio a James recostado mirando al techo.

- ¡Por fin¡una cara amiga! Estaba muy aburrido y necesitaba hablar con alguien - dijo James al darse cuenta de la presencia de la chica.

- No te ilusiones Potter, no venía a verte a ti -

- Entonces... ¿no te importo? - dijo James entre pucheros.

- Eeehhh... no... sólo venía a por una aspirina -

- ¿De verdad no te importo? - volvió a preguntar James, pero esta vez le miraba fijamente a los ojos, con el rostro serio.

- Bueno... eehh... cambiemos de tema ¿quieres? - dijo ella intentando desviar la mirada, pero no podía dejar de mirar esos preciosos ojos marrones.

- ¡Lo ves! Yo sé que me quieres con yo te quiero a ti -

- Sí, venga, y ahora voy yo y me lo creo - dijo Lily.

En ese momento llegaron Sirius y Remus.

- Hola, James ¿que tal? -

- ¿Nos echas de menos? -

Dijeron los chicos mientras se acercaban a la cama.

- Claro que si, Canuto, esto está muy aburrido sin vosotros. Aunque Lili viene mucho a visitarme... -

Lily se quedó de piedra "¿acaso sabe que vine anoche? No,... no puede ser, no puede saberlo"

- Bueno Lily... -

- ¿Si, Sirius? -

- Ejem... queremos hablar de cosas de chicos... -

- ¿Y? -

- Sobras -

- Tío, Canuto, no seas así... Lily nunca sobra y menos cerca de mí... venga suéltalo ¿que pasa? -

- Se trata de Eli y Ann - dijo Remus.

- ¿Qué pasa¿ha ocurrido algo nuevo? - preguntó James.

- Bueno si no hacemos algo pronto... se van a matar - dijo Sirius.

- No seáis exagerados... bueno venga vamos que James tiene que descansar - dijo Lily mientras se levantaba para irse.

Los tres se dirigieron a la sala común de Gryffindor.

Allí estaba todo revuelto, las sillas estaban tiradas por el suelo, la gente te agrupaba en la puerta para saber que era lo que estaba ocurriendo.

Y lo que ocurría era, precisamente, otra gran pelea de Eli y Ann.

Esta vez no utilizaban ni poderes ni cogían sus cosas para lanzarlas, esta vez habían llegado a las manos.

Sirius y Remus oyeron los gritos procedentes de la sala y entraron corriendo para intentar sepáralas. Cada uno cogió a la primera que encontró, con la mala suerte de que Remus cogió a Eli y Sirius a Ann.

Entonces la situación se puso aún más tensa, al darse cuenta cada una que el chico que le gustaba estaba abrazando a la otra.

Sirius intentó tranquilizar a Ann, pero esta estaba muy nerviosa, no sabía que hacer, así que opto por llevársela de la sala para hablar.

Mientras tanto, Remus intentaba hacer razonar a Eli.

- Eli, por favor,... esto no puede seguir así,... sois muy buenas amigas,... no podéis acabar de esta forma -

- Remus, no entiendes nada,... que tú hayas perdido tu oportunidad con Ann... por no aclararte sobre tus sentimientos,... sobre si te gusta o no,... no significa que todos seamos tan tontos como tú,... yo voy a luchar por lo que quiero - dijo Eli intentando zafarse del chico, que la tenía muy bien agarrada.

- Eso es un golpe bajo,... además yo siempre he sabido lo que siento por Ann, el problema es... -

- El problema es que no confías en ella... y por eso la has perdido - diciendo esto, Eli consiguió separarse de él y se fue.

- Vale,... esto necesita medidas urgentes... - dijo mirando como había quedado la sala común.

Sirius y Ann seguían caminando, Ann estaba colérica y triste a la vez, Sirius se estaba preocupando cada vez más y decidió que esta situación se tenía que acabar enseguida.

Por la noche, y una vez que Remus, Sirius y Lily lo habían planeado todo, Remus y Sirius quedaron con Eli y Ann respectivamente. Estuvieron paseando por el castillo, hablando animadamente hasta que llegaron cada una de las parejas a las puertas de una habitación.

- ¿Por qué no entramos en esta habitación y hablamos más tranquilamente? - dijeron los chicos, cada uno a su respectiva acompañante.

- Bueno... así podemos hablar sin que nos escuche todo el mundo -

Esta conversación al tuvieron las dos parejas a la vez y cada chico abrió la puerta invitando muy caballerosamente a la chica a entrar. Las dos chicas entraron y los chicos aprovecharon la oportunidad para encerrarlas en la habitación.

- ¡Remus¡abre la puerta! - gritó Eli.

- ¡Sirius¡abre o te mato! - gritó Ann.

Las dos chicas se giraron y se cruzaron sus miradas. Al principio no dijeron nada, hasta que Ann rompió el hielo.

- ¿Cómo me has podido hacer esto¡eres un traidora! -

- ¡Pero qué dices! Si eres tu la que lo ha empezado todo ¡se supone que te gustaba Remus! -

- ¡Por eso¡eres una guarra! -

los chicos chillaron a la vez desde el exterior del aula.

- ¡Chicas o hacéis las paces...! -

- ¡O no salís! -

Se quedaron un rato calladas, meditando, y esta vez fue Eli quien hablo.

- Se supone que éramos amigas, te dije lo que sentía por Sirius y tú no perdiste la oportunidad para traicionarme¿no? -

- ¿Qué¿tú crees que me hubiera declarado a Remus si iba a intentar algo con Sirius¿tú que te crees que soy una guarra? -

- Entonces ¿que tienes con él? - preguntó Eli frunciendo el entrecejo.

- Somos amigos ya está ¡a mí no me gusta Sirius! Y tú qué... ¿qué tienes con Remus? -

- ¿Yo¡yo no tengo nada¡sólo le ayudaba a conquistarte! -

- ¿A conquistarme¡no digas chorradas! Ya hace un mes que me declaré y está claro que no el intereso - dijo Ann amargamente.

- Pero vamos a ver... ¿cómo pretendes que se te declare si a cada paso que dábamos te veíamos a ti cogida del brazo de MI Sirius? Así se le quitan las ganas a cualquiera... - dijo Eli exaltada y alzando las manos.

- Entonces... ¿quiere conmigo o no? Sabes me estoy empezando a desesperar... por cierto, siento todo esto - dijo Ann mientras se acercaba a abrazar a su recién recuperada amiga.

- Yo también - dijo abrazándola - por cierto... siento lo de las cartas... -

- No te preocupes,... puedo decirle a Michael que me escriba más,... además,... mientras lo tenga a él... -

- Lo quieres mucho ¿verdad? -

- Claro que sí -

- ¿entonces Remus? -

- Yo amo a Remus, sólo quiero estar con él,... pero Michael siempre va a formar parte de mi vida... -

- ¿Entonces te vas a lanzar con Remus? -

- Yo ya di el primer paso, ahora es él el que tiene que decirme algo, estoy harta de ir siempre detrás suyo, también yo necesito que me demuestre lo que siente por mí -

- Pero... ¡si cada vez que lo intenta o no le hablas o le ignoras o te ve con su mejor amigo! - dijo Eli mientras se reía.

- No te preocupes, ahora las cosas vas a cambiar, no pienso estropearlo nunca más - dijo Ann riendo.

Al cabo de un rato los chicos entraron en la habitación.

- ¿Qué tal chicas? - preguntó Remus.

- ¿Cómo estáis? - preguntó James.

- ¿Seguís vivas? - preguntó Sirius.

- Muy bien - dijo Eli.

- ¿Entonces habéis hecho las paces? - preguntó Lily acercándose a ellas.

- Si - dijeron Ann y Eli abrazando a Lily.

- Que bien... menos mal - dijeron los chicos.

- James - dijo Ann yendo hacia el chico.

- Capi - dijo Eli haciendo lo mismo que su amiga.

- Lo sentimos mucho -

- Sí, de verdad lo sentimos, no queríamos que pasara eso en el partido -

- No queríamos darte a ti -

- Sorry - dijo Eli haciendo pucheros.

- Perdónanos por favor - dijo Ann también haciendo pucheros.

- No pasa nada,... todo esta olvidado,... además,... no es como si no hubiera sacado algo bueno de haber estado en la enfermería... ¿verdad Lily?- dijo mirando a Lily pícaramente.

"Ya esta otra vez,... creo que lo sabe,... creo que no estaba tan dormido esa noche" pensaba la pelirroja frunciendo el entrecejo.

- Bueno,... yo me voy ya - dijo Ann despidiéndose de Eli, Sirius, James y Lily y acercándose a Remus y dándole un beso en la mejilla, y a continuación le susurró al oído muy bajito para que nadie lo oyera - yo soñare contigo ¿soñaras tú conmigo? - dijo esto, Ann se marchó.

Remus se quedo atónito ¿era verdad lo que acababa de ocurrir o era un sueño¿podría empezar de nuevo, decirle lo que sentía por ella?

- Eeehhh... me he perdido algo - dijo Sirius.

- No nada - contestó Eli girándose hacia donde se encontraba el chico.

Se acercó rápidamente y sin darle tiempo a reaccionar empezó a besarlo de forma muy pasional y ardiente, mientras colocaba sus brazos alrededor del cuello del chico. Sirius no desaprovecho la oportunidad y correspondió al beso y abrazándola por la cintura.

Después de besarse apasionadamente, Eli se separó, se despidió de todos y se fue a su cuarto.

James y Lily se quedaron atónitos.

- Eeehhh... ¿y yo no tengo beso? - dijo James mirando a Lily y haciendo pucheros.

- ¡A callar Potter¡se van a enterar estas dos! - dijo Lily marchándose.

- Eeehhh... ¿y yo qué? - volvió a decir James.

Lily se giró y le lanzó un beso a James.

- ¡Bien! - gritó James entusiasmado.

Al quedarse solos los tres chicos la situación era muy graciosa. Sirius no sabía qué decir, se había quedado petrificado por lo que había pasado, a Remus se le quedó una sonrisa de pardillo y James no paraba de saltar y gritar alrededor de sus amigos.

- ¡Me ha besado!... ¡me ha besado!... ¡Lily me ha besado! -

En ese momento Lily llegó a la habitación donde se encontraban las chicas.

- ¡Sois unas guarras! -

- ¿Por qué? -

- ¿Cómo que por qué¡me habéis dejado a mí sola con los tres chicos y con un Potter salido reclamándome un beso! -

- Pues tenías que haberle dado un buen morreo - dijo Ann sonriente.

- Sí, como lo he hecho yo - dijo Eli con una sonrisa de oreja a oreja.

- ¿Qué? - dijo Ann sorprendida.

- Sí, je je... he aprovechado... je je... ¿te crees que ibas a ser la única? -

- ¡Que tía! -

Los chicos llegaron como pudieron a la habitación. James, el muy pesado, no paró de gritar y pegar saltos en la cama.

- James,... tío... que sólo te ha lanzado un beso... para ya - dijo Remus amenazándolo con la varita.

- Si,... tío... te rayas - le dijo Sirius recostándose en su cama.

- Es que no me tienen paciencia - dijo James saltando en su cama, a partir de hay siguió saltando pero no dijo ni una palabra más.

A la mañana siguiente, los alumnos se dirigieron a Hogsmeade para comprar los disfraces para la fiesta. Las chicas y los chicos se fueron por separado. A la hora de comer se fueron a las Tres Escobas para tomarse algo y allí se encontraron los seis.

- Hola chicas ¿qué tal las compras? - preguntó James.

- Pues muy bien, aunque aún faltan algunos retoques - contestó Eli.

- ¿Retoques? - preguntó Ann - pero... si ya está todo -

- Ya lo veréis, os va a gustar mucho... sobre todo a vosotros - dijo riendo.

- Con lo salida que está... puede esperarme cualquier cosa - dijo Sirius para sus adentros.

- Lily... - dijo James.

- Si -

- Toma... para ti - dijo el chico tímidamente poniendo una cajita en las manos de la chica.

- Eeehhh... gracias -

Lily abrió el regalo que James le había dado, y se quedo alucinada al ver de lo que se trataba. Era un colgante de plata en forma de corazón con una esmeralda verde con forma de corazón en el centro. Los dos se fueron a dar una vuelta para hablar, dejando a sus amigos en el bar.

- James... no puedo aceptarlo... yo... -

- Lily, por favor, no seas así... -

- Pero... -

- Lo vi y pensé en ti -

- Pero... -

- Yo... quiero que lo aceptes para enterrar el hacha de guerra... me gustaría que fuéramos amigos... -

- ¿Tú y yo amigos? -

- O algo más... -

Lily se quedo mirándole fijamente, sonriendo. Al cabo de unos minutos.

- Todo se andará - dijo esto, se acercó y le dio un beso en la mejilla - ¿me lo pones? -

- Si, claro - dijo James que estaba muy feliz.

- Eeehhh... Ann... yo... -

- Sí,... Remus... -

- Yo... también tengo algo para ti... -

Pasaron un par de segundos en silencio.

- ¿Y bien? - dijo ella impaciente.

Remus la cogió del brazo y la alejo de donde se encontraban Eli y Sirius. Le daba mucha vergüenza... le cogió la mano y se la abrió.

- Cierra los ojos -

La chica le hizo caso, los cerró y Remus puso algo sobre la palma de sus manos e inmediatamente el chico dirigió su mirada hacia el suelo muy colorado.

Ann abrió los ojos y vio el paquete que tenía en las manos, lo abrió y se dio cuenta de que en su interior se encontraba un anillo. Era precioso, de plata, en el cual estaba grabado:

"He soñado contigo R & A"

Las letras estaban grabadas como a fuego y brillaban de una forma especial.

Ann no sabía que decir, levantó la mejilla de Remus e hizo lo primero que se le pasó por la mente.

Se acercó al chico lentamente, se dio cuenta de que a Remus le temblaban las manos y se las cogió, colocándoselas en su pecho, para que él notara los latidos de su corazón.

Siguió acercándose mientras sus corazones iban acelerándose cada vez más, hasta que rozándose con los labios de Remus le besó.

Fue un beso tierno pero a la vez apasionado, dulce y calido.

Cuando se separaron se quedaron un rato mirándose fijamente.

- Siento mucho todo lo que ha pasado, no quería que sufrieras por mi culpa - dijo Remus.

- No te preocupes ya está todo arreglado, pero... vosotros tendréis que tener cuidado... - dijo Ann sonriente cogiéndole la mano a Remus y llevándolo hasta donde se encontraban los demás.

Cuando se reunieron con los demás, Sirius se dio cuenta de que él era el único que no había comprado regalo.

- Eeehhh... yo me he quedado sin pasta - dijo señalando las bolsas de artículos de broma que había en el suelo - y como ellos - les lanzó una mirada asesina a James y a Remus - no me han avisado... pues... - dijo cogiendo un regaliz de su bolsillo - ¿quieres? -

Todos se quedaron callados para ver la reacción de Elísabeth. Ella tranquilamente cogió el regaliz y pego un mordisco.

- ¿Quieres un poco? - le ofreció a Sirius.

- Bueno... si compartes... -

Sirius se fue acercando hacia el regaliz, pero Eli fue más rápida, lo apartó y lo besó. Sirius no desaprovecho la oportunidad y le respondió al beso.

Eli y Sirius se separaron al cabo de unos minutos, después de un apasionado beso y vieron como sus amigos les miraban sin mediar palabra.

- Bueno,... será mejor que nos vayamos ya - dijo Eli cogiendo a Ann y a Lily del brazo y llevándoselas.

- Eeehhh... esta chica no para de sorprenderme - comentó James.

- Y siempre tan fiera... - dijo Sirius atónito.

- ¿Y tú que Remus? - dijo James mirando a su amigo que seguía con la cara de felicidad.

- Yo... es que... ha sido tan... tan... tan... -

- ¿Tan que? -

- Tan romántico... - dijo suspirando.

- ¿Y tú con Lily? -

- Pues no mucho, sólo he conseguido un beso en la mejilla,... pero bueno... ¡me ha besado! - dijo alegremente.

- Otra vez no - dijeron Remus y Sirius a la vez poniendo los ojos en blanco.

Lily, Ann y Eli hablaban de lo ocurrido.

- Tía, Eli, te has pasado, un poco más y te lo tiras ahí en medio -

- Tienes razón,... debo ir más despacio,... además... todavía no se me ha declarado... - dijo pensativa.

- ¿Hablas de declaración? Pues como tengas que esperar lo mismo que yo... -

- Es cierto,... estamos las dos iguales,... habrá que hacer algo para que esto cambie... -

- Si fuera tan fácil... -

- Lo haremos fácil... en la fiesta... con los trajes que os voy hacer -

- Me das miedo... - dijo Lily entre risas.

- A ver... cuéntame los detalles... ¿que tienes pensado? - le preguntó Ann.

- Pues veras... - comenzó Eli.

Os puedo adelantar que cuando leais el capitulo 9 nos vais a querer matar por que os dejamos a todos con la intriga, jejejeje! somos muy malas!