Capitulo XXV: no te mueras! No puedo vivir sin ti!

-kagome estas bien? –

- Houjo! Houjo! Que has hecho? – la miko lloraba sin control al ver las gotas de sangre salir del cuerpo de su amigo – Houjo! – lo llamo cuando el cayo al suelo hincado, cubriéndose con una de sus manos la herida

- maldición que esta sucediendo? Porque el aroma de kagome se esta mezclando con sangre? – se pregunto a si mismo el hanyou con orejas de perro acelerando mas su paso

- jajaja te lo tienes merecido estupido! – se burlo el vándalo que los apuntaba con el arma

- jefe que hacemos con ellos? -

- Desháganse de los dos… – les ordeno fríamente

- Yamoru te dejo a la mujer? – pregunto el ladrón que sostenía la pistola

- yo también quiero hacer sufrir a ese imbecil – le alego tomando la navaja del pavimento – dejemos a la chica para después -

- NO! – grito la muchacha al mismo tiempo que se escucho el segundo disparo – no lo lastimen mas! – de su mano brotaron nueve pequeñas flechas; una de ellas se impacto contra la bala logrando desviar su curso, las otras apresaron las ropas de las extremidades de los dos asaltantes

- que son estas luces? – preguntaron los dos sujetos tratando de liberarse del pavimentó pero sin lograr algún resultado

- no intentes nada o quedaras inmovilizado como tus aliados! – le advirtió la joven mientras lograba ponerse de pie, frente ahora su protegido

- sacerdotisa tu poder espiritual no ha cambiado en nada; la técnica de las flechas espirituales, debes haber leído el diario del sacerdote shinmuzo… pero yo tampoco he perdido el tiempo, ahora puedo poseer los cuerpos sin que pierdan su alma; tan solo la tengo retenida – por un instante sus expresiones faciales cambiaron, para retornar a ser el simple humano de la época actual – esto es un gran beneficio para mi – se burlo recobrando su rostro maléfico

- entonces tu utilizaste a estas personas! Yotomi! - le grito la miko viendo a los sujetos – flecha espiritual! -

Una gran flecha de color púrpura se dirigió hacia su contrincante, pero este utilizo una esfera de energía para evitar el golpe… el choque de las energías segó a todos por unos segundos, haciendo una fuerte ráfaga de viento que se despejo en los alrededores

- para que utilizas flechas espirituales? Se necesitan mucha energía para formarlas - la interrogo caminado lentamente hacia ella

- yo no permitiré que lastimes a las personas que mas amo! Las protegeré a cualquier costo!- la respiración de su amigo se miraba cada vez mas dificultosa, el sudor opacaba mas su rostro, su blanca camisa se había convertido en un mar de sangre… tenia que llevarlo a un hospital lo mas rápido posible! Su presencia estaba desapareciendo, al igual que la llama de su vida

- eres una ilusa! Piensas protegerlo en esas condiciones? – le dijo señalando las flechas que se desvanecían con lentitud, cuando las luces desaparecieron los dos hombres se echaron a correr, alejándose en unos segundos del lugar de batalla - el conjuro de las flechas es muy efectivo si no tienes armas pero devora tu poder espiritual a gran velocidad -

- eso no me importa, no lograras matarnos! – le advirtió reuniendo nuevamente energía en su mano

- y quien dijo que quiero eliminarlos? – Pregunto tomándola del cuello para elevarla unos centímetros del suelo – al principió eso era lo que tenia pensado hacer, pero ahora quiero tenerte a ti y a tus poderes de miko – le aclaro mientras apretaba su cuello

- suel..ta..la.. yo pe…lea.re con..ti.go.. – pronuncio el joven de ojos cafés al lograse ponerse de pie

- humano de que estas hecho? Como puedes levantarte con esa herida en tu pecho? – musito el hechicero con mucho interés, que ser de la época actual podía reincorporarse con tanto fervor en sus ojos? Porque lo hacia?

- yo.. cui..dar..e de.. kago..me has.ta qu.e mue…ra -

- cállate! – le grito golpeando la mejilla del muchacho – porque no te rindes? – le pregunto al ver que luchaba por mantenerse parado

- no… pue..do de.jar..la so..la… -

- deja de decir estupideces! – golpes sucesivos con su pierna derecha lanzaron al joven contra el auto

- houjo! – logro decir la chica ahogadamente, tratando con sus manos de aflojar un poco la presión que estaban ejerciendo en su cuello; el dolor era cada vez mayor pero era aun mas grande el dolor de ver a las personas que mas amaba sufriendo por ella.. Solo podía sacar su tristeza por las cristalinas gotas de sal que ya conocían su camino por su rostro

- ya no te preocupes mas por ese humano sacerdotisa, su vida pronto se extinguirá! -

- KAGOME! – lo dorados ojos del hanyou se hicieron visibles entre la oscuridad, el hechicero soltó rápidamente a su victima y retrocedió varios pasos mientras ella tocia - estas bien kagome? – le pregunto al tomarla con sus brazos y revisar todo su cuerpo con su mirada… su vestido se encontraba manchado el diferentes sitios por sangre…

- si… pero, pero Houjo.. Esta herido por mi culpa… - le explico entre sollozos, el hombre mitad bestia desvió su mirada hacia el muchacho que se cubría con dificultad su herida… el se estaba muriendo, por proteger a su kagome… lo había juzgado muy mal y ahora le daría una paliza al culpable de todos eso!

- por fin el gran inuyasha a llegado, aunque ya te has perdido toda la diversión – se borlo el bandido…

- yotomi, maldito! Vas a pagar por todo esto! -

- arreglaremos cuentas en las tierras de los bosques prohibidos, solo los espero a ustedes dos o la aldea donde viven sus amigos quedara destruida; tienen una semana para llegar o regresare para eliminar a ese sujeto, si no se muere antes… - termino de decir al sacar su alma del cuerpo del sujeto; dejando al hombre inconciente en la banqueta

- los bosques prohibidos… - susurro entre dientes el muchacho de gorra roja

- Houjo! – grito la mujer caminando hacia su lado – inuyasha, ayúdame a subirlo al auto por favor, tenemos que llevarlo a un hospital! - le suplico viendo el estado de su amigo

- solo dime que hacer –

Mientras que la pareja intentaba llegar al hospital lo más rápido posible, el alma llena de maldad viajaba largas distancias de kilómetros en tan solo unos segundos hasta que se detuvo sobre el jardín del gran palacio del lord sesshoumaru…

Continuara…

Muchísimas gracias por todo su apoyo, no me he perdido ninguno de sus reviews, pero como ya se habrán enterado ya no se pueden responder, quiero que sepan que siempre los tomare en cuenta y que son algo muy importante para mi! CUIDENSE!