Capitulo XXXI: no puede ser posible!

El joven entro en la habitación y vio a esa hermosa mujer a la que tanto amaba; ella se encontraba con las piernas flexionadas, su cabeza apoyada en sus rodillas y sus brazos rodeando sus piernas… cuando sintió que la puerta se abrió levanto su rostro mostrando sus ojos llenos de lágrimas, se puso de pie para alcanzar al hombre cono orejas de perro pero sus piernas no la dejaron avanzar ni dos pasos antes de caer hincada al suelo

- kagome! - la llamo el muchacho yendo a su lado

- inuyasha… ese sueño… tuve ese sueño nuevamente… - sollozaba mientras se aferraba del haori rojo del chico, estaba asustada y respirando agitadamente sin control

- pequeña tranquila, solo fue un sueño… - le dijo mientras la abrazaba y acariciaba su espalda suavemente – un mal sueño… -

- es una pesadilla! Y si se vuelve realidad? Yo no quiero que los lastimen! No quiero perderte… no soportaría estar sin ti… te amo demasiado inuyasha… -

- no importa lo que suceda yo siempre te amare! – Susurro al apoyar su barbilla en la cabeza de la miko – tranquila todo estará bien… ahora descansa… - le pidió cardándola nuevamente a la cama - me dijeron que el desayuno pronto estaría listo - comento mientras se sentaba a un lado de la chica

- no tengo apetito… -

- eso no importa, mira lo débil que estas! Tienes que comer algo para recobrar tus fuerzas -

- pero… -

- nada de pero… quiero que recuperes todas tu fuerzas pequeña… -

- el desayuno! – se escucho al otro lado de la puerta después de que esta fue golpeada varias veces; el hanyou se puso de pie para abrirla y encontrarse con dos ancianas youkais, una de ellas llevaba una bandeja de comida que le entrego al joven con orejas de perro y la otra señora unas prendas sobre sus brazos

- la srta. Rin les manda estas prendas y dijo que no tenían que preocuparse porque también estaban hechas con las ratas de fuego, las aguas termales ya están listas para que la utilicen – les aviso la otra mucama mientras dejaba las ropas sobre una mesita para después salir del cuarto cerrando la puerta tras su paso

- ahora a comer! – dijo el hombre mita bestia poniendo la bandeja con alimentos sobre la cama

- en verdad no tengo apetito… -

- acaso te sientes mal? – Pregunto poniendo su mano sobre la frente de la miko – pero no tienes fiebre – menciono bajando su mano y sentándose a un lado de ella

- no es nada grave solo estoy un poco mareada - le sonrió

- aunque sea prueba la comida, hazlo por mí -

- eso es injusto, sabes que haría cualquier cosa por ti – le respondió dándole un beso en la mejilla antes de tomar los palitos y comer – satisfecho? – le dijo al terminar con el plato de comida

- si y mucho – le sonrió – aceptas mi invitación para ir a tomar un baño o tendré que convencerte nuevamente? – la cuestiono divertido mientras se ponía de pie he iba por las prendas limpias

- muy gracioso inuyasha - pronuncio cuando el muchacho le entregaba las ropas - así podré revisar tus heridas – susurro mientras el la tomaba sobres sus brazos para salir de la habitación – como encontraremos el baño? -

- se la dirección donde esta, vi a dos youkai con varias tollas dirigiéndose al otro lado de la mansión cuando fui a hablar con sesshomaru -

- estabas hablando con sesshomaru? -

- si sobre el hechicero yotomi y otras cosas – termino de decir sin dejar escapar un leve gruñido

- tuvieron otra pelea no es así? -

- yo no me hubiera molestado si no se hubiera dicho estupideces -

- tranquilo inu, solo estaremos aquí unos días -

El joven dejo escapar el aire y siguió su camino hasta el baño el cual estaba dividido en dos partes: una para dejar la ropa y cambiarse, y la otra donde estaban las aguas témanles; ambos se desvistieron y entraron al agua… la sacerdotisa limpio las heridas del chico con un pañuelo y le dio un relajante masaje para que sus músculos dejaran de estar tensos; se quedaron disfrutando del relajante baño unos minutos mas y después salieron a ponerse las nuevas ropas

- este kimono es muy extraño… - se dio cuenta la joven al terminar de vestirse; a diferencia de los otro este no ejercía la presión en la cintura sino que en los pechos, cosa que le reducía el escote, la mangas eran larga y livianas; en todo el traje habían pétalos de cerezos bordados que la hacían destacar mas ya que ahora era una de las pocas flores en medio del invierno

- te queda muy bien - le confeso el joven viéndola completamente

- y el tuyo esta justo a la medida - las vestimentas de inuyasha eran muy parecidas a las de un terrateniente con un pantalón gris y un gi verde que a los extremo de las mangas y en el ruedo del cuello tenia bordado con plateado figuras de poderosos perros demonios

-kagome! – la llamo el hanyou al verla tambalear y recargarse con su mano en una de las paredes

- tranquilo inuyasha estoy bien… - le menciono para calmar al joven mitad bestia que la sujetaba

- regresemos a la habitación para que duermas un poco -

- dormir…? – pronuncio con un poco de temor en su tono de voz

- yo estaré todo el tiempo a tu lado, para velar tus sueños – le afirmo cargándola para llevarla al cuarto – no tienes nada de que temer… -

- buenos días srta. Kagome, veo que las prendas les quedaron a la medida – sonrió la joven que llevaba unos libros en las manos

- gracias Rin -

- no es nada Srta. Kagome, con su permiso los dejo o el sr. Jaken se molestara por llegar tarde a su clase – les comento la chica antes de seguir con su camino y dejar que la pareja siguiera también con el suyo – ya estoy aquí sr. Jaken – le aviso entrando en la gran biblioteca donde diariamente recibía la enseñanza sobre diferentes temas

- casi llegas tarde – le reclamo el youkai sapo

- lo lamento, estaba conversando con sesshomaru-sama y perdí la noción del tiempo – le explico mientras dejaba los libro sobre la mesa y se sentaba en una de las sillas

- esta bien, empecemos – como cada día a las 11 de la mañana empezaban las enseñanzas del sabio monstruo que duraban aproximadamente 4 horas y tan solo con un descanso a la hora del almuerzo – eso es todo por hoy Rin -

- gracias sr. jaken; solo una pregunta mas, usted no conoce la técnica ko-ru-yo-to? – pregunto al terminar de utilizar el pincel sobre las hojas del cuaderno

- no la conozco, pero que quieres saber de ella? -

- es solo simple curiosidad –

- te quedaras aquí mas tiempo? –

-si! Rin quiere buscar algunos libros - le dijo y después el monstruo se dio media vuelta para salir del lugar

- jaken! – lo llamo el gran lord desde las escaleras

- si amo bonito?-

- donde esta Rin? – lo cuestión al no encontrar a la joven en su habitación ni verla presente en la cena

- Rin?- pronuncio recordando donde la había visto por última vez – debe seguir en la biblioteca – respondió rápidamente con una gota de sudor en la cabeza al no darle una respuesta concreta

El serio lord solo bajo las escaleras para ir a donde le había indicado el youkai sapo, atravesando los largos pasillos silenciosamente… entro en la enorme habitación con altos libreros buscando entre cada uno de ellos a la muchacha, poseía una gran colección de miles de libros que había adquirido de diferentes tierras; busco en los pasillo donde solían estar los temas que ella leía frecuentemente, pero no la encontró en ninguno de ellos…. Siguió caminando hasta lo más profundo del lugar en la sección de conjuros, hechizos y ataques; los aspectos más sombríos de los youkais… era ya pasada la media noche, avanzo unos minutos más hasta que la encontró durmiendo en el suelo, con un libro en sus manos y varias pilas de ellos a su alrededor

- hechizos de las energías oscuras – leyó en la portada de la enciclopedia que tomo de las manos de la joven para después dejarlo a un lado; la tomo con mucho cuidado para no despertarla y sacarla de entre las amplias libreras, pero justo antes de llegar a la habitación de la chica:

- sesshomaru-sama… - susurro la doncella restregando uno de sus ojos con su palma

- energías oscuras? – pronuncio sin retirar la vista del pasillo

- quiero encontrar la técnica ko-ru-yo-to, es lo único que recuerdo de la pelea con la srta. Kagome y el joven inuyasha… es un sentimiento difícil de explicar pero creo que es un conjuro muy importante – comento antes de bostezar – Rin solo quiere ayudarle en algo sesshomaru-sama - susurro recostándose en el pecho de su protector

El youkai dejo a la joven en su cuarto para que descansara y regreso a su despacho viendo los copos de nieve que caían lentamente al suelo – ko-ru-yo-to… suena interesante –

Mientras que el lord seguía sumido en sus pensamientos un muchacho zorro removía los leños de la fogata para que recobrara su fervor, cuidando el campamento que había formado con sus amigos; les costo mucho trabajo pero en tan solo un día ya había llegado al pie de la montaña de la vida antigua, grades poderes espirituales se podían sentir en su camino el cual no iba a ser nada fácil….

Habían transcurrido cuatro días y a pesar de que los malestares de la miko aparecían de vez en cuando ya se había acostumbrado a ellos, la protegida del mayor de los hermanos pasaba casi todo el día en la biblioteca sin descansar hasta hallar una respuesta… la miko y el hanyou se encontraban sentados en una banca en los amplios jardines del castillo

- iré por el desayuno - aviso el hombre mitad bestia poniéndose de pie

- inuyasha hay algo que te este molestando? Te he notado muy distraído estoy últimos días – menciono la sacerdotisa

- no es nada… - pronuncio sin verla

- que es lo que te esta perturbando? Dime la verdad inuyasha – le pidió la joven tomando su mano

- es algo sin importancia… - dijo mirando al lado contrario de la chica

- si no fuera importante no estarías así -

- a la mañana siguiente después de la batalla con yotomi tuve una discusión con sesshomaru…. Porque el dijo que estabas esperando un cachorro…….. – la mano de la chica soltó la del muchacho al escuchar sus ultimas palabras - un monstruo puede sentir el aroma de los cachorros al mes de que estos empiezan a crecer mientras que un hanyou como yo, solo puede sentirlo hasta el mes y medio después de que este se empieza a formar… yo se lo negué rotundamente, quizás porque no quería creerlo... pero desde hace dos días yo he empezado a sentir el aroma del bebe… - comento bajando su rostro; la miko estaba en estado de shock sin poder pronunciar palabra alguna para defenderse – yo cuidare del cachorro como si fuera mío, porque te amo kagome… - mencionó antes de empezar a caminar rumbo al castillo sin tener la fuerza de mirar hacia atrás

- un… un hijo… - logro pronunciar la mujer ahogadamente al caer hincada sobre la nieve – voy a tener un hijo…. Eso…. Eso es imposible… - se dijo a si misma mientras colocaba sus manos sobre su vientre – es imposible… - sollozo para descargar su pena

- nada es imposible sacerdotisa… -

La joven se dio la vuelta y se puso de pie rápidamente para encontrarse con un hombre encapuchado

- yotomi – pronuncio secamente creando una de sus flechas espirituales, el hechicero dio un paso adelante pero la miko al mismo tiempo lanzo su ataque…. Una cuchilla alargada desvió el ataque que se impacto contra los árboles causando una gran explosión, la cual retumbo por todo el castillo y alerto a los presentes que corrieron a gran velocidad al lugar de donde provenía

- ya no soy el mismo sacerdotisa… - le aclaro triunfante

- inuyasha! – grito la muchacha antes de quedar inconciente y ser secuestrada por el hechicero

- kagome! Kagome! – la llamaba a lo lejos el chico con orejas de perro encontrando tan solo un rastro de huellas que conducía al bosque, en el lugar donde haba dejado a su amada

- que esta sucediendo aquí? – le pregunto el lord a su hermano

- maldición! No tuve que dejarla sola! – grito furioso mientras apretaba sus puños y se preparaba para seguir el rastro

- joven inuyasha! – Lo llamo la joven que corría hacia ellos con un libro entre sus manos logrando que el chico se detuviera – el ataque ko-ru-yo-to que recibió la srta. Kagome también se conoce como la técnica que manipula la rapidez del tiempo, con ella el hechicero yotomi puede hacer que el tiempo en el cuerpo de una persona transcurra mas rápido en tan solo cuestión de segundos - explico un poco agitada

- eso quiere decir que el cachorro que espera esa sacerdotisa puede ser tuyo inuyasha… - menciono el youkai

- mi…mi hijo… - pronuncio sorprendido el hanyou recordando aquella tarde en la cual había unido sus cuerpos entre caricias y besos….

continuara...