Capitulo XXXVI: una nueva vida, un amor y un adiós….
- jaken cuida a Rin – le ordeno caminado hacia donde se encofraba tirada su espada toukijin, no se arriesgaría a enfrenarse con el hechicero sin su arma ahora que colmillo sagrado se encontraba dañada
- si amo bonito, como usted diga… oye Rin desde cuando tienes el cabello tan largo? -
- es una larga historia sr. Jaken… una larga historia…. - respondió viendo como todos se a alejaban
Todos llegaron hasta la orilla del cráter, tragaron saliva al no obtener ninguna respuesta tras sus insistentes gritos, entre la oscuridad apareció como un llama que empezaba a encéndrese, la misma luz violeta que había rodeado a la miko y para el alivio de todos allí estaba ella! Con varios rasguños y algo agitada pero se encontraba con vida y la aparición de la guerrera midoriko aun seguía atrás de ella
- kagome! – la llamaron todos mientras ella camina para salir del agujero, el hechicero quedo atónito al verla salir junto a la silueta de midoriko, sus ojos regresaron a la normalidad al verla, hasta su semblante cambio por completo a uno de nostalgia, acaso sus ojos lo estaban engañando?
- kagome están bien? – pregunto preocupado el hanyou, podía sentir un fuerte olor a sangre pero por mas que la observaba no lograba ver alguna herida grave, mas bien eran pequeños rasguños
- si, no te pero..cupes inuya.sha esta..mos bien – sonrió la miko mientras posaba una de sus manos en su ya abultado estomago, la gran felina se acerco rápidamente reconociendo la silueta de la mujer que acompañaba a la miko dejando escapar un gruñido que parecía mas un saludo
- yo también te he echado de menos kirara – le confeso la guerrera dándole una sonrisa tan calida como el mismo sol
- entonces no era una ilusión de mis ojos, si es la sacerdotisa midoriko… pero como es que esta aquí? – cuestiono la exterminadora
- kagome como lograste salir casi ilesa de esa gran explosión? – pregunto asombrado el youkai zorro
- todo se los explicare mas tarde, ahora tenemos que darle descanso al alma de yotomi – les pidió la sacerdotisa girándose en dirección al hechicero
- si – afirmaron todos al unísono
- ahora que no tiene su cuchilla será más fácil detenerlo -
- no te confíes shippo ya nos ha dado varias sorpresas – le recordó el hombre mitad bestia desenfundando a colmillo de acero
- srta. Kagome quizás esto le sirva – le dijo sacándose de entre sus ropas la roca para poder entregársela - es la piedra shisuko, se dice que es capaz de capturar cualquier alma sin importar a quien pertenezca -
- gracias monje miroku – la piedra era realmente hermosa con los diferentes tonos del arco iris, tan alegres y brillantes como las flores en primavera…. Cerró sus ojos y sintió como la misma roca le digiera lo que tenia que hacer, con su ayuda le daría descanso al alma del hechicero y salvaría a su querido amigo Houjo
- solo debemos seguir creyendo en el futuro – comento el kitsune encendiendo grandes llamas en sus palmas
- midoriko… - susurro yotomi observando como las jóvenes mikos se acercaban a el caminando – eres tu mi amada midoriko – sonrió con esperanza en sus palabras
- porque? Porque has hecho todo esto Kuro? – le pregunto la guerrera
- lo hice para que estuviéramos juntos tu y yo, midoriko -
- y por eso mataste a tantos monstruos y seres humanos? -
- es que acaso no entiendes! Que no podía vivir sin ti! Todo lo hice para que volviéramos ha estar juntos y por fin ser felices! -
- ser felices? Al costo de tantas vidas… yo no hubiera podido ser feliz de esa forma-
- acaso no me amas midoriko? Acaso todo fue un engaño? – grito el hechicero llegando al limite de la desesperación
- yo ame al Kuro con que compartí mi vida antes de morir, con el que batalle interminables horas para que en este mundo existiera la paz…. no al ser maligno en el que te has convertido… - dijo tristemente, en sus ojos se podía ver la melancolía que mantenía en su corazón
- TODO FUE UN ENGAÑO! UN MALDITO ENGAÑO! – grito desesperado, porque? Porque? Se sentía tan frustrado… acaso todos los años que dedico a la búsqueda de las almas de la guerrera fue un desperdicio? Porque no entendía, que todo lo había hecho por ella?
- kuro… - susurro tristemente la sacerdotisa que permanecía como un espíritu
- mon.je miroku! Por fa.vor encár ..guese de crear una ba.rrera con ayu..da de la pie..dra shisuko pa.ra que el al..ma de yotomi no es..cape; shippo! Kirara! Nece.sitare..mos de su ene..rgía so.bre na..tu.ral – les pidió mientras le devolvía la roca al houshi
- pero srta. Kagome usted que hará? -
- tra..tare de pu.rifi..car el al..ma de yotomi… - aclaro viendo el melancólico rostro de la creadora de la shikon no tamma
- pero que locuras estas diciendo kagome? – la regaño el hanyou, en que estaba pensando lo que quería hacer era demasiado arriesgado
- des..pués sa.brás que lo que es.toy ha..cien.do fue lo me…jor inuyasha… - le dijo tiernamente
Porque? Porque? Esas palabras le traían un fuerte dolor a su corazón, que era lo que significaban? – kagome… - susurro el hombre mitad bestia viendo como la mujer que mas amaba en la tierra se alejaba lentamente buscando rescatar un alma perdida, Rayos! Porque tenía un corazón tan puro… porque pensaba en otras personas antes que en ella…
- esas… esas es la piedra shisuko! – la reconoció el hechicero – malditos jajaja no podrán detenerme! Figuras de piedra acaben con ellos! – dicho esto del suelo empezaron a salir grandes piedras que se iban uniendo hasta formar hombres gigantescos de rocas
- son muy parecidos a los ninjas de agua con lo que luchamos la primera vez – recordó la exterminador tomando con seguridad la pita de su boomerang
- miroku! Shippo! Kirara! Ustedes concéntrense en crear la barrera que les pidió kagome, sango protege a kagome y yo protegeré a los demás, entendido? – todos aceptaron los papeles indicados por el hanyou que se puso atento para atacar a cualquier figura que quisiera acercársele, la exterminadora lanzo su boomerang partiendo en dos a la creación de roca que intento acercarse a la miko; el monje les indico a los dos youkais lo que tenían que hacer para transmitirle su energía sobre natural a la piedra shisuko, ayudándolo con un rezó que el mismo empezaba a recitar
- sr. Jaken!aaaaaaaa- grito la muchacha al ver que una de las figuras se acercaba a ella y el pequeño sapito peleaba contra otra, al igual que A-UN, con miedo abrió sus ojos para encontrarse con el poderos lord frente a ella destruyendo a todas esas creaciones hechas de tierra que se le acercaban
- Rin quédate atrás mío -
- AHORA! – termino de decir el monje al finalizar con su rezo
- NOO! – grito el hechicero al percatarse que no logro detener el conjuro del houshi
Como una estrella fugaz la piedra salio disparada hacia el cielo, las negras nubes que antes lo cubrían desapareció instantáneamente dejando sentir la presencia del calido sol que los alumbraba con sus rayos, algo muy raro para la época por la que estaban pasando. Una luz de alegres colores cubrió el cuerpo de yotomi, dejándolo atrapado en un cúpula cristalina, las dos sacerdotisas entraron sin ningún problema en ella para intentar darle descanso eterno y finalizar con esta sangrienta batalla
- es ho..ra de que to.do ter..mi.ne yotomi… - comento tranquilamente kagome
- NO TE ACERQUES! ALEJATE! – estaba tan confundido que ya no sabia ni que decía, era la primera vez en la cual no sabia que hacer, que era lo que había hecho mal? QUE?
Flash back
- Entonces tu eres la pequeña que guarda las almas de mi querida midoriko, acaso tu eres su reencarnación? – le pregunto un ser de capa negra a un pequeña niña que se encontraba asustada en la esquina de una cabaña
- yo no se de que habla… - respondió sollozando, no solo por el miedo sino también por haber visto como mataban ha sus padre a sangre fría frente a sus ojos cuando intentaron protegerla – yo… no soy midoriko…. -
- eso lo sabremos en unos instantes – el grito de la pequeña se quedo atrapado en la cabaña, su inocente cuerpo callo sin vida sobre el suelo mientras que un gran charco de sangre se formada debajo de el, las almas de la chiquilla salieron a los pocos minutos en que le quitaron cruelmente la vida – era verdad, estas no son las almas de mi querida midoriko – reconoció atrapando una de ellas en su mano derecha, la soltó par que siguiera su cruzo y salio sin ningún cambio en su rostro de la cabaña
Fin flash back
- NO! NO! NO! - repetía sosteniéndose la cabeza, una gran angustia y confusión se dejaba ver en su rostro, el tenia la culpa! Mato a cientos de personas inocentes, a pequeños niños que rogaron por su vida… como? Como? Como había podido ser capaz de tantas atrocidades?
- tran..quilo to.do esta..rá bien – le dijo la joven de kimono al abrazarlo – to..do es..ta.rá bien… -
- es hora de que descansemos en paz, tu y yo Kuro como debió ser… - le sonrió la guerrera caminando hacia el para separase del cuerpo de la miko
- gracias… - susurro al sentir nuevamente la calidez de su corazón mientras que iba siendo purificado por la sacerdotisa de hermosos ojos color chocolate, las figuras hechas de roca empezaron a deshacerse hasta convertirse en polvo – pero srta. Kagome usted… - comento levántanos su rostro
- shhhhhh esto te..nia que ser así… tran..quilo… - le sonrió mientras lo seguía envolviéndolo en el abrazo que marcaba el final de la pelea
- el sobrevivirá… ko-ru-yo-to… - el estomago de la mujer volvió a crecer aumentando unos centímetros, ella empezó a respirar agitadamente mientras caía hincada sosteniéndose el vientre - gracias por todos srta. Kagome… - fue lo último que se escucho antes de que la silueta de la guerrera midoriko desapareciera junto con la de un hombre…
Un hermosos arco iris surco el cielo demostrando infinidad de colores, una refrescante brisa rozo el rostro de los presentes indicándoles que todo había terminado, la larga y dura batalla había llegado a su fin…el muchacho que estaba siendo poseído por el hechicero retrocedió un paso aturdido, todavía no lograba ubicarse, empezó a ver todo a su alrededor hasta que se encontró con la persona que mas deseaba ver
- kagome! Kagome! – llamo a la joven mientras la acomodaba en el suelo y la sujetaba con uno de sus brazos, porque había tanta sangra a su alrededor?
- Houjo me ale..gra que ha…yas re..gresado – sonrío acariciando una de sus mejillas – aaaaaa- se quejo llevándose ambas manos a su vientre
- KAGOME! - se acerco rápidamente el hanyou seguido por los demás
- rápido! No tenemos tiempo que perder kagome va a dar a luz! – les grito a todos los presentes
- mi.. mi bebe va a nacer… - dijo sorprendido el hanyou mientras tomaba a su hembra en sus brazos – kagome por favor resiste! – le pidió al ver su agitada respiración, las gotas de sudor que cubrían su frente y su rostro levemente arrugado por el dolor
- aaaaaaaa inu..yasha aaaaaaaa – se volvió a quejar la miko mientras una de sus manos seguía posada en su estomago y con la otra agarraba fuertemente el haori verde de su amado
- hay que llevar a la Srta. Kagome a un lugar limpio lo mas rápido posible! – comento la mujer de largo cabello negro mientras esperaba la aprobación del lord para que permitiera que todos entraran a su "refugio"
- regresemos al palacio – pronuncio con su típico tono de voz el dueño de las tierras donde se encontraban
- KIRARA! – la llamo rápidamente la exterminadora para que los llevara mas rápido
Sobre la felina se subieron inuyasha, kagome y Houjo; arriba del youkai dragón se montaron shippo, miroku y sango; mientras que Rin y Jaken viajaban sobre la nube que creaba sesshoumaru para movilizarse
- porque siento tanto olor a sangre… a sangre de kagome… - se pregunto el chico mitad bestia en la mente, cargando con la mayor delicadeza del mundo a su hembra
- aaaaaaaa inuyasha… -
- resiste kagome pronto llegaremos – le pidió el joven con orejas de perro
Tan rápido como se lo permitieron sus fuerzas llegaron al gran palacio, la mujer que antes viajaba con el lord se movió ágilmente pidiéndole a algunas youkais que le levaran todo lo necesario para la situación, seguido de eso les indico un habitación cercana para que recostaran en la cama a la miko
- aaaaaaaa -
- vamos kagome respira – le pedía sabiendo ya los síntomas que estaba sintiendo su amiga, ella tenia experiencia en eso ya que había traído a sus dos grandes tesoros al mundo y también porque ayudo en muchas ocasiones a la anciana kaede a atender algunos partos – respira -
- jhjhjhjhjhjh aaaaaaaa –
- kagome tu puedes – la alentaba inuyasha mientras limpiaba su frente con un pequeño trapo y con la otra mano agarraba la de su amada
- jhjhjhjhjh inu..ya..sha el bebe.. El bebe ya vie..ne aaaaaaaaa jhjhjhjh – la muchacha se mantenía apoyada en la cabecera de la cama, con las rodilla flexionadas y el kimono cubriéndola hasta ellas – aaaaaaaaa -
- las contracciones son cada vez mas rápidas, eso es bueno ya que nos indica que pronto nacerá – explico sango revisando los síntomas de la sacerdotisa – vamos kagome sigue respirando -
- jhjhjhjhjhjhjh -
El hombre con orejas de perro estaba más nervioso que nunca, como podía no estarlo si su hijo, su primer hijo pronto nacería!
- Puedes tráeme más toallas calientes – le pidió la exterminadora a Rin que la estaba ayudando
- tranquila linda respira, respira – la apoyaba inuyasha
- jhjhjhjhjhjhjh aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa ya vie..ne aaaaaaaaaaaa -
- aquí están – le dijo la doncella a sango entregándole los trapos húmedos
- bien kagome llego la hora cuado cuente hasta tres vas a pujar con todas tus fuerzas – le explico la exterminado quien se preparaba para recibir al niño
- si… jhjhjhjhjh aaaaaaaaaaaaa jhjhjhjhjhjh – respiraba agitadamente, con la mano donde no la sujetaba inuyasha se agarro fuertemente de la cabecera
- uno… dos… tres! -
- aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa -
- sigue así kagome puja, puja! -
- aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa jhjhjhjhjhjhjhjhjhjhjhjh-
- respira, respira ya salio la cabecita, vamos kagome puja otra vez! uno… dos… tres…. -
- aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa-
- amor sigue, tu puedes! -
-aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa jhjhjhjhjhjhjhjhjh aaaaaaaaaaaaaaaaaaaa jhjhjhjhjh aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa-
- ya viene kagome, has el ultimo esfuerzo puja! Puja! -
- aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa – la miko quedo exhausta, suaves alaridos se escucharon dentro de la habitación, dando a entender que una nueva vida había llegado al mundo
- lo hiciste muy bien linda – la felicito el hanyou mientras besaba una de sus mejillas
Los hombres que esperaban afuera de la habitación el gran acontecimientos entraron al instante al escuchar el llanto del bebe
- es un niño – menciono sango después de haberlo limpiado y envuelto en una manta, para poder entregárselo a su padre
- es precioso… - los ojos de inuyasha no podían dar crédito a lo que veían, su hijo, su pequeño estaba ahora en sus brazos – es nuestro hijo kagome – le sonrió a la madre que aun respiraba agitadamente
El bebe tenia los dorados ojos de su padre pero la dulce mirada de su madre, su cabello era tan negro como la noche y no podían faltar esas lindas orejitas que sobresalían en su cabecita
- felicidades inuyasha – dijo alegremente el monje dándole una palmadita en la espada – ya eres padre de una pequeña criatura -
- como te sientes kagome?- le pregunto preocupado el joven de traje japonés
- feliz… -
- y que nombre tiene pensado ponerle? – los cuestiono la exterminadora
- un nombre? – repitió el hanyou
- por supuesto tonto, tienes que llamarlo de laguna forma - se burlo el kitsune
- a quien le estas diciendo tonto, enano? – le reclamo golpeándolo en la cabeza como lo hacia de pequeño a lo que todos rieron
- que bueno que kagome es la madre porque sino ese niño crecería con los mismos modales que inuyasha – rió miroku
- mira quien habla libidinoso – susurro el hanyou colocando al pequeño a un lado de su hembra
- yo ya no miro a otras mujeres mi querido inuyasha, solo tengo ojos para mi amada sango – reitero poniendo su mano donde no debía, recibiendo una bofetada departe de su esposa
- que bue..no que to.do es.ta bien… - sonrió la miko viendo como todos sus seres queridos disfrutaban de su compañía – saben algo mu..chachos.. -
- que cosa kagome? – pregunto con atención shippo
- los quiero mu..cho, cuiden al pe.queño inu…. Inuyasha sien..pre te amare… - termino de decir cerrando lentamente sus ojos, el bebe empezó a llorar desconsoladamente mientras que las lagrimas se agolpaban en los rostros de todos los presentes
- ka..kagome… - la presencia de la sacerdotisa dejo de sentirse al igual que su agitada respiración, una gran herida apareció en su pecho y su kimono cambio de color a uno completamente rojo; la vestimenta de inuyasha, de Houjo y un poco del pelaje de kirara se cubrieron del mismo color… las sabanas también se iban manchando lentamente... la piel de la miko se iba poniendo cada vez mas blanca y fría – KAGOME! – grito el hombre mitad bestia mientras la sacudía para que abriera sus ojos, NO! ERA IMPOSIBLE! Se rehusaba a creer que su amada estaba muerta! Estaba soñando verdad? Que alguien le digiera que era un sueño!
- la presencia de la srta. Kagome ha desaparecido… - comento entre cortadamente el monje mientras abrazaba con todas sus fuerzas a su esposa que había empezado a llorar desconsoladamente en su pecho
- cállate! CALLATE MIROKU! – le ordeno el hombre con orejas de perro sin querer escucharlo
- kagome… – se puso a sollozar el kitsune como un pequeño niño en las piernas de la mujer que se había convertido en su segunda madre, ocultando su rostro con los castaños cabellos que caían desordenados sobre su frente
- se ha ido… - susurro aun sin moverse el muchacho del futuro, las cristalinas gotas recorrían su rostro sin detenerse, todavía no daba crédito a lo que veía, su amiga, su hermana los había dejado…
- NO! NO! ELLA NO SE HA IDO! -
- PORQUE TANTO ESCANDALO?- pregunto furioso el youkai de ojos dorados al entrar en la habitación
- sesshoumaru-sama! La… la srta. Kagome..a …a – intento explicarle la muchacha mientras se pegaba al cuerpo del lord
- a muerto – dijo observando toda la escena
- DEJEN DE DECIR ESTUPIDECES! – les grito inuyasha mientras se acercaba a su medio hermano
- apártate Rin – le ordeno el youkai retirando a la chica de su cuerpo – porque no quieres aceptarlo ella ya murió! Que no te has dado cuenta que los engaño a todos con su técnica nuevamente? -
- nos engaño? – pronuncio el hombre mitad bestia deteniéndose en seco
- ella ya estaba casi muerta después de la explosión, utilizo su técnica el espejismo de los ojos para que ustedes no se percataran de la gran herida de su pecho ni de toda la sangre que iba perdiendo rápidamente, porque creen que todo lo que toco esa mujer ahora esta cubierto con sangre? Deberían agradecer que utilizaran a tiempo la técnica ko-ru-yo-to sobre ella, sino ese chiquillo no hubiera sobrevivido - dijo finalmente mientras señalaba al bebe que intentaba consolar sango
El joven mitad bestia recordó las palabras que le dijo su amada cuando la intento detener - después sabrás que lo que estoy haciendo fue lo mejor inuyasha…- entonces, ya sabia que ella moriría? Acaso se acerco a yotomi especialmente para que utilizara su técnica sobre ella y así se salvara su hijo? – NO! NO! FUE LO MEJOR! – grito cayendo hincado en el piso mientras sus puños golpeaban una y otra vez el suelo, sin causar demasiado daño ya que casi no tenia fuerzas
- acaso eran tan grave la herida de kagome que ni con el tiempo que transcurrió en su cuerpo logro curarse? – pregunto shippo aun con lagrimas en sus ojos
- si no le hubieran dañado partes vitales, hubiera seguido viva… aunque mas me sorprende que se haya resistido a la muerte tanto tiempo – comento sesshoumaru viendo a través de la ventana como el sol se ocultaba tras las montañas, reflejándose algunos rayos naranjas en sus dorados ojos
- colmillo… colmillo sagrado! Sesshoumaru podría revivir a kagome con su espada! – dijo la exterminadora con esperanza en cada una de sus palabras
- no lo haré – respondió fríamente el youkai
- pero sesshoumaru-sama…. -
- NO LO HARAS? YO MISMO TE OBLIGARE SI ES NECESARIO!- le grito inuyasha a todo pulmón poniéndose rápidamente de pie para agarrarlo de las ropas
- quítame tus sucias manos de encima inuyasha! Si tanto quieres revivir a esa mujer hazlo tu mismo! - le respondió soltándose de su agarre
- COMO QUIERES QUE YO LO HAGA SI COLMILLO DE ACERO NO TIENE ESA HABILIDAD? – le reclamo furioso
- entonces necesitas a colmillo sagrado? Pues tómala - dijo desenvainando la espada y lanzándosela para que la atrapara – dudo que te sirva de mucho - comento cerrando sus ojos
- colmillo sagrado esta rota! – observo el hanyou perdiendo todas las esperanzas, se quedo sin mas ideas, estancado en las ultimas palabras de su amada - siempre te amare… - porque! Porque! Porque kami tenia que llevársela? Que era lo que había hecho mal para pagar esta condena… ahora… ahora quien lo despertaría cada mañana con un beso, una caricia? Con quien compartiría el calor de su cuerpo en las frías noches de invierno? Quien lo haría sentirse especial, amado, querido, aceptado? Que le diría a su pequeño cuando preguntar por su madre? Que haría cuando necesitara de su compañía, de su presencia, de su afecto? A quien le susurraría al oído un te quiero, un te amo, un te necesito? Había perdido a su corazón, a su amada kagome…
- se rompió cuando intento detener la esfera de energía, cuando sesshoumaru nos estaba protegiendo de ella – recordó el joven zorro
- corrección! El gran sesshoumaru no los estaba protegiendo a ustedes – reitero girando su vista hacia Rin
- ahora… ahora que haremos… - susurro tristemente el monje
Continuara…
Muchísimas gracias por sus post créanme que siempre los leo y me alegro de verlos nn pues ya estamos llegando al final la verdad este fic tiene 40 capítulos y tan solo quedan cuatro mas OO espero sus comentarios CUIDENSE!
