Hola.

Me he tardado bastante en subir este capítulo. Lo siento. Pero aquí está al fin... Espero que sea del agrado de quienes lo lean.

Por cierto, Ezequiel, no vas a tener que mandar los gunships a mi casa después de todo, aquí está lo que esperabas… lol

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Capítulo II: La misión

Mientras Gordon pensaba acerca de todo lo sucedido, no se dio cuenta de que alguien aparecía detrás de él, saliendo de la nada. Volteó a ver, y se encontró con el hombre que lo mantenía prisionero en ese lugar. Ahí estaba aquel hombre mayor, misterioso, impositivo: G-Man, entre nubes de humo negro y rayos de energía verde, entre imágenes y recuerdos de la mente de Gordon.

"Dr. Freeman. Es un verdadero placer saludarlo de nuevo. Como podrá darse cuenta, es ahora cuando su hora ha llegado de nuevo."

Gordon permaneció frente a él, sin moverse, con la mirada de sus profundos ojos verdes sobre los ojos de aquel hombre. El rostro de G-Man no había cambiado para nada. Especialmente esa expresión que causaba reacciones mezcladas: incertidumbre, curiosidad, ira…

"Y en verdad es ahora, cuando he debido aceptar la oferta que recibí por sus servicios. Es su hora, Dr. Freeman. Es la hora de probar su valía, y hacer honor a su fama, acumulada a lo largo de este tiempo. El Hombre-Libre, el Elegido, El-Que-Abre-El-Camino. Es su hora de terminar con este capítulo de la historia. Simplemente, es su hora, Dr. Freeman."

Gordon empezó a sentir cómo todo lo que estaba alrededor suyo empezaba a acelerarse. El HUD de su traje de protección apareció de nuevo, súbitamente, y con toda claridad. El contador de energía empezó a subir aceleradamente hasta llegar a 1000. No entendía qué era lo que pasaba en esos momentos.

"Es su hora, Dr. Freeman. El punto cúspide en el que demostrará lo que puede hacer, y cuánto puede resistir. La misión definitiva. Pero primero, tendrá que sobrevivir a lo que viene en este momento. Hasta luego, Dr. Freeman. Ah, casi lo olvido. Reciba algo que necesitará en esta nueva batalla."

G-Man extendió su brazo, apuntándolo hacia Gordon, y un rayo de luz proveniente de su dedo índice golpeó en el símbolo de lambda en su pecho. Acto seguido, desapareció.

El tren en el que estaba Gordon parecía estarse descarrilando, aunque no se podía decir que lo estuviera. No tenía raíles, pero Gordon tenía esa sensación. En ese momento, pudo recuperar su capacidad de moverse. El sistema de selección de armamento de defensa de la Mark V empezó a proyectar espectros intermitentes enfrente de Gordon. La visión del movimiento del tren era alucinante. Empezaron a aparecer los símbolos que vio en las calles de la Ciudad 17, las insignias de la raza Combine, y miles de luces parpadeantes. El tren aceleraba cada vez más y más. Hasta que al fin, delante de sus ojos, apareció un muro enorme, con miles de dispositivos y tuberías de energía oscura.

El tiempo se detuvo. Gordon vio ese muro, que parecía reírse de él y gritarle "MUERTE" en sus oídos. El tiempo reanudó su marcha, hubo un zumbido que se hacía cada vez más fuerte… y el tren se estrelló de lleno contra el muro.

Gordon vio la explosión abriéndose paso a través del tren, y cubrió su rostro con sus brazos. Sintió un calor extremadamente insoportable, mientras su traje de protección emitía pitidos que indicaban la presencia de altísimas temperaturas. La energía del traje disminuía a un ritmo drástico. Cuando la explosión lo alcanzó, salió volando por los aires, junto con los pedazos del tren. Cayó sobre unos peñascos, golpeándose violentamente, y rodó por las laderas del lugar. Se detuvo al toparse con una gran roca. Su mirada se nubló… y perdió el conocimiento.

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Algunas horas después, Gordon recobró la conciencia. Pero la visión de enormes monstruos como trípodes, y el saberse completamente indefenso ante ellos, hizo que sintiera su cabeza dando vueltas, además del dolor que estaba sintiendo. No lo soportó, y se desmayó de nuevo.

Miles de imágenes cruzaron por su mente como una pesadilla.

Esa pesadilla hizo que se despertase más tarde. Cuando intentó levantarse, se estremeció de dolor. Su espalda le dolía como si le hubiesen atravesado con clavos. Y parecía que su pierna estaba rota. Maldijo para sí al G-Man. ¿Por qué ese hombre tenía que causarle tantos problemas? No lo entendía.

Recordó la visión de los monstruos, y se sintió frustrado. ¿No se suponía que una vez que destruyera el reactor principal los Combine se quedarían sin energía para seguir produciendo armas, movilizando sus naves, y exterminando a la raza humana? ¿No se suponía que la Tierra quedaría libre entonces? Pero como suele suceder, cuando parecía que las cosas iban a mejorar, resultaban peor que antes. ¿Era este el caso?

Pero en ese momento, algo raro alrededor suyo le hizo pensar: ¿La Tierra? Se dio cuenta de que estaba en un lugar muy parecido su planeta… pero definitivamente no era la Tierra. Esto, al ver cuán diferente era el suelo donde estaba. Era… color sangre. Y los pocos pastos que había por allí eran azules. Sin embargo, el cielo era celeste. Pero en el horizonte, ese celeste se teñía de negro, aparentemente fruto de una enorme contaminación, sobre una gran ciudad que le recordó la arquitectura Combine. ¿Dónde demonios estaba entonces?

Gordon se sentó, esperando que se calme un poco el dolor de sus heridas. Al fin entendía el repentino y violento aumento de capacidad de protección de traje, pero ahora parecía como su traje estuviera estropeado. Normalmente le habría suministrado una dosis de una droga analgésica, pero ni siquiera daba señales de que los sistemas estuvieran funcionando.

Maldijo de nuevo. Y con rabia golpeó con su puño la otra manga del traje. Entonces, el traje se encendió y aplacó un poco su dolor, administrándole un medicamento. Pensó que quienquiera que haya dicho que las cosas no siempre se arreglan a golpes, nunca estuvo en los zapatos de Gordon Freeman. Y sonrió.

Con gusto vio que ya podía levantarse. Afortunadamente lo de su pierna no fue una fractura, de lo contrario, no podría haberse puesto de pie. Pero, había perdido sus lentes, y la palanca. ¿Cómo se supone que iba a defenderse en caso de necesitarlo? Esto, porque empezaba a sospechar en dónde estaba. Empezó a caminar, y delante de él, a cierta distancia, observó ese gran muro en donde fue a parar el tren en el que viajaba. Era parte de un gran edificio de metal, que estaba ahora en llamas. Escuchó sonidos como sirenas, y a lo lejos vio cientos de soldados movilizándose. Si sus conjeturas sobre el lugar en el que estaba eran ciertas, debía moverse con cuidado. Más aún al no estar armado.

Continuó caminando y llegó hasta unas bodegas. Empezó a moverse sigilosamente entre los cientos de cajas de se hallaban almacenadas allí. Vio entonces un ser de extraña apariencia, vistiendo un uniforme similar al que vestían los soldados Combine en la Tierra. Estaba hablando por un comunicador con alguien.

"bjkk Cabo Schaarik, Indique su posición. ¿Se ha hallado algún rastro del responsable del ataque, Cambio bjkk"

"bjkk Me encuentro en las bodegas A51C. Y nada aún, señor. Solamente hallamos los restos de lo que parece ser un tren, Cambio bjkk"

"bjkk Bien, pues sigan buscando. La destrucción del edificio principal de reactores debilitará nuestras capacidades de defensa y ataque si es que las llegáramos a necesitar. Además murieron muchos soldados en ese edificio. Ahora tenemos pelotones enteros trabajando en limpiar este desastre y reconstruir los reactores en el menor tiempo posible. No se trata de un ataque de ninguna nave, pues nuestros radares nunca detectaron la presencia de cuerpos movilizándose en el aire. Pero como dicen que encontraron los restos de un tren, esto se vuelve un poco confuso. Encuentren al responsable. Debe estar por los alrededores. Cambio bjkk"

"bjkk Sí señor, Cambio y fuera bjkk"

Gordon se quedó estupefacto… ¿Acaso… acaso había entendido el lenguaje de esos seres? Probablemente esa capacidad fue lo que G-Man le dio en forma de rayo de luz antes de dejarlo en el tren.

Ahora sabía que los soldados buscaban a quien provocó tal catástrofe. Y sabía que ellos sin saberlo, lo estaban buscando. Y si llegasen a saber quién era, después de lo que pasó en la Tierra, no le iría nada bien. Ahora era urgente conseguir un arma… pero… ¡vaya sorpresa! Delante suyo en el piso, vio un objeto familiar, Al parecer la palanca había volado hasta ese lugar después de la explosión. La tomó y empezó a buscar si había alguna arma entre todas esas cajas. Pero no halló nada. La única arma que había cerca, era la que ese guardia tenía en su cinturón. Sí, era arriesgado, pero debía intentar conseguirla. Además el Combine estaba solo en aquel lugar, así que no habría peligro de que nadie pueda descubrir el cuerpo del guardia. Y le restaba algo de energía en el traje. Se acercó sigilosamente, y cuando estuvo detrás de él, rodeó el cuello del monstruo con la palanca y sus brazos.

"¿Qué…?"

Gordon actuó rápido, y con esa maniobra, rompió el cuello de ese ser, quien cayó al suelo sin emitir un quejido.

Ya tenía un arma. Era una pistola de pulsos… o al menos eso pensó, pues se parecía mucho al rifle de pulsos que consiguió poco antes de llegar a New Little Odessa. Era por supuesto, una arma pequeña, pero arma al fin.

Ahora, era tiempo de buscar el motivo por el que fue a parar allí…

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Un review nunca le hace daño a nadie ;)