"planes idiotas y soluciones practicas"
- la vida es cruel chicas – puntualizo Lily enterrando su cara entre las almohadas
- ni me lo digas - coincidió Emma malhumorada - ir a clases va a ser un problema grave
- no si construimos con ramitas un par de... - creo q no tengo q decir de quien provenía este comentario a medias ¬¬
- creo q mejor bajamos a comer - dijo Lily rápidamente tomando a sus amigas de la muñeca - antes de que empieces otra ves a fantasear con tus amigas las ramitas
- creo que mejor yo las espero aquí, no tengo mucha hambre que digamos - Sam hablaba enserio, no estaba de muy buen humor, y en esos momentos prefería acostarse unos momentos a leer o bien a tocar un rato el viejo violín de su abuela (lo que había sido un problema por años, pues el idiota de Black siempre se quejaba del "sonido infernal" del instrumento y en un par de ocasiones le escondió su violín por un par días o mas, claro, no sin despertar al día siguiente en una jaula o rapado a coco).
- bueno, nos vemos entonces - se despidió Emma comprensiva y Sam vio a sus amigas desaparecer por la escalera.
- ¡pero no se tarden y tráiganme algo dulce! - pidió a sus amigas antes de tumbarse en la cama para comenzar a aburrirse como garrapata (esos animales pueden vivir años sin moverse con haber tomado una vil gota de sangre) miles de ideas pasaban por su mente, pero la que mas le tentaba era sentarse un rato a tocar el violín, pero no podía tomarse ese lujo porque no estaba segura de si el idiota de Black ya había bajado a comer, y no quería despertar con una carta del odioso merodeador diciendo: si quieres volver a ver a tu violín sin una cola de perro ven a la sala de encantamientos a las 10:30 con una blusa escotada o bien: te devuelvo tu amado violín si me das un beso linda, atentamente: tu merodeador favorito, y Sam, sacada de quicio buscaría una manera de recuperar su instrumento,y partirle la cara de una patadavoladoraal mismo tiempo, y Sam enojasa, Sirius golpeado, estres x todas partes y todo el mundo miserable, pero por otro lado, después de ese horrendo día nada sería mejor que distraerse un rato, tanteo un rato con los dedos, y lanzo miradas complices al instrumento, que la veìa como diciendo "saves que si quieres morenaza!", hasta que no pudo resistir la tentación de tomarlo y darse el lujo de tocar un rato, le encantaba escuchar las notas, por lo general lentas y tristes, y en algunas ocasiones hasta melancólicas, algunas notas vibrantes y otras lentas, arrastradas y como por arte de magia desapareció todo su estrés, transformándose en concentración sobre cada nota, y poco a poco se fue fundiendo en la música, y separándose de la realidad, sin embargo escucho algo que no encajaba del todo con el melodioso sonido del instrumento toc toc sin embargo no presto mucha atención, hasta que TOC TOC alguien tocaba la puerta, tal vez era algún otro idiota que tocaba en la habitación vecina, por lo que lo ignoto una vez mas, pero... ¡TOC TOC TOC! la tercera vez toco tan fuerte que la pobre chica casi sufre un infarto, sobresaltándose casi dejo caer el violín¡que era lo que quería ese demente¿Tirar la condenada puerta puerta?.
- ¿qué dem...? - chilló por fin poniéndose en pie algo aturdida y dirigiéndose a la puerta con intenciones acecinas… si yo fuera el pobre diablo detrás de la puerta me echarìa a correr den fa.
- ¿que pasa¿qué no saben abrir una puerta de mie...? - Sam se detuvo a media frese, pues no era una de sus amigas... Bueno, ni siquiera era una amiga, ni una chica, ni un ser huemano - ¿Black? - el chico se veía muy bien... Bueno mas de lo que se veía normalmente (¬), tenía puesta ropa que le quedaba muy bien, que no usaba excepto para salir al pueblo en las noches y tenía puesto una colonia que olía de una manera casi irresistible.
- ¡hola! - saludo el moreno alegremente a la chica que lo miraba confundida desde la puerta.
- ¿qué haces aquí? - pregunto sorprendida, no se imaginaba abrir la puerta y encontrar a Sirius Black parado con un ramo de rosas en las manos, y menos con sus mejores galas y luciendo su mejor sonrisa, eso solo podìa significar una cosa... - ¿estas drogado o algo?
- er... no... solo pasaba serca y pense ¿"por que no pasar a visitar a mi buena amiga Green", en realidad te traje esto- dijo dándole las rosas, sin embargo el moreno no la veía a la cara... bueno, generalmente su mirada nunca estaba posada en su cara, si no un poquito mas abajo, pero esta ves su mirada ni siquiera estaba cerca de nada que tuviera que ver con ella, el muy tarado solo miraba sobre el hombro de la chica por alguna razón.
- oh - dijo Sam arqueando una ceja tomando las rosas como quien toma una rata muerta... ¿Sirius Black le estaba dando unas flores¿considaraba "buena amiga" a alguien q casi lo habìa castrado con cucarachas carniboras?eso podía significar que alguien le habíapuesto pastillas alucinógenas en elcafè o que el universo había perdido el sentido y en pocos minutos todo sería destruido y todos morirían - bueno, no se que decir... Es muy... Muy... Er, original - dijo por fin (bueno¿que querían¿Que corriera a sus hombros a decirle que eran hermosas? si hubiera escrito eso, la teoría de Sam hubiera sido cierta).
- gracias - dijo Sirius sonriente, por alguna razón se veía nervioso.
- ¿"para Martha de Antonin: por nuestro 2° aniversario de novios"? – pregunto Sam frunciendo el entrecejo mientras leía la tarjeta que tenían las rosas amarrada con un listón verde
- ¿qué?... ¡Ah, si! es el nombre de la florería - se excuso el moreno tomando la tarjeta y prendiéndole fuego con la varita, para pisara en el piso sin dejar mas que cenizas en el piso, parecía muy intrigado y se había puesto colorado - es la tienda del primo del papá un amigo de un amigo de mi hermano, pero como me cae mal quiero que olvides todo lo que leíste - pidió el chico rápidamente, escondiendo detrás de si lo que quedaba de la famosa tarjeta de la "florería" del primo del papá un amigo de un amigo del hermano de Sirius.
- eso... ¿quieres pasar? - ¡EL UNIVERSO SAM, RECUERDA EL UNIVERDO!
- no, no, yo... - parecía distraído y seguía mirando sobre el hombro de Sam, con una cara nerviosa, sin embargo cuando Sam quiso ver que era tan interesante, Sirius llamo su atención hablando, quizás mucho mas fuerte de lo normal (quizás algo mas que mucho).
- ¡QUIERES SALIR CON MIGO MAÑANA?
Sam se sobresalto
- ¡esta bien! - accedió por instinto, en realidad no había pensado la respuesta, (de haber sido así lo habría negado solo después de partirle su hermosa cara con un golpe) simplemente el susto la había obligado a reaccionar rápidamente, estaba algo preocupada, pues Sirius seguía sin verla a la cara. - ¿estas bien? - pregunto alterada, pues el chico había comenzado a reírse de la nada, después de ver con suma preocupación sobre su hombro, pero, cuando vio que ella tenía la intención de darse la vuelta para ver que era tan divertido el chico la beso en la comisura de la boca, y Sam se quedo como clavada en el suelo.
- si, claro, bueno... Esto, quedamos mañana ¿no¿a eso de las 11:30¿no hay ningún problema? genial ¡nos vemos! - dicho esto, bajo las escaleras como una flecha, ahora la expresión del chico era de completo terror, iluminando el pasillo con su cara roja como una lámpara, como si se hubiera arrepentido de haber hecho tal incoherencia (que suerte tuvo de que Sam tuviera una mente lenta, de haber sido diferente el pobre Harry Potter se habría quedado sin padrino mucho antes de que naciera).
Cuando los pasos del chico dejaron de oírse en la escalera, Sam entro en el cuarto bastante aturdida por lo ocurrido, puso los flores en agua y tan pronto se acostó de nuevo en su cama la puerta se abrió, solo que esta ves por ella pasaron sus amigas, con algo de comida para ella y unas cuantas bebidas que traían todos los viernes para salir un rato al balcón a divertirse con las viejas cartas de Emma.
- disculpa por tardar - se excuso Lily con una sonrisa picara - es que vimos a cierto merodeador subiendo aquí y pensamos que tal ves quería verte a solas
- bueno, eso y unas chicas pusieron cola-loca en nuestros asientos – agregó Emma – las chistositas no podran caminar en un par de semanas, problema resuelto, jiji ..
- y que?... quería algo interesante el picaron
- ¿de que hablas, solo me trajo esas er... Rosas y se fue - respondió mas roja de lo que solía ponerse, todavía no sabía si quería decirles que había quedado con el o no.
- si, claro - Emma usaba un tono sarcástico muy obvio - bueno, la única clase que nos queda es la de Herbología, yo la noche pasada avance la tarea, no me importa faltar a esa clase - dijo encogiéndose be hombros.
- de todas maneras después nos pasas la tarea - dijeron las otras dos amigas con simplicidad, mientras Emma salía a la terraza con la antigua baraja de cartas de su abuela.
- ¡aaah! - grito esta al salir afuera de la habitación.
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--- 30 minutos antes ---
Ahora si; los tres merodeadores estaban en su habitación, escuchando atentamente al general James (canción de guerra por favor, y unos cascos militares en cada una de las cabezas de los personajes... Muchas gracias), todos tenìan la mirada enun pizarrón, que James llenaba con garabatos infantiles
- bueno tropa - dijo dramáticamente - como ya deben saber la operación "rescata la humillante foto de nuestro amigo Remus para que nole rompa la mazetaal amigo James y el amigo Sirius no se quede solito el pobre", requiere de 3 hombres valientes: la carnada o el galán seductor, el soporte y por ultimo el caminase suicida oel Tom Cruise que tiene que tirarse por la ventana, y puesto que es mi plan propongo ser yo la...
- pido ser la carnada
- y yo el soporte - Remus se puso de pie con Sirius para poner en marcha la operación "rescata la humillante foto de nuestro amigo Remus para que nole rompa la mazetaal amigo James y el amigo Sirius no se quede solito el pobre".
- ¿qué? P-pero...
- calla pobre diablo - dijo Sirius mientras se quitaba la camisa y emprendía la búsqueda de sus mejores galas - deberías ser una humilde persona deseosa de ayudar a tus amigos - explico sacando brevemente la cabeza con una cuidadosamente seleccionada montaña de ropa en los brazos.
(Déjenme hacer un paréntesis en esta historia, ustedes se preguntaran¿por qué demonios no hicieron un encantamiento accio, o simplemente bajaron a pedir que les regresaran el libro, la respuesta es la siguiente: en 3° los merodeadores tenían la costumbre de arrojar sapos, arañas, ratas etc. Al balcón de las chicas, por lo que estas decidieron hacer una regla: "lo que se les caiga a los merodeadores a nuestro balcón pasara a nuestra propiedad legal por derecho" articulo # 32 de la constitución femenina de socias contra los merodeadores, y en cuarto a la magia, después de hacer explotar la mitad de la sala común los merodeadores perdieron el permiso de hacer magia fuera de clases bajo la pena de expulsión... ¿y por que no tenían balcón? Después de que los merodeadores descubrieron que era el bongi, Dumbledore supuso que darles a los merodeadores una plataforma gratuita de bongi sería un homicidio) (¡ah! Y otra cosa: las chicas eran las únicas miembros del club anti merodeadores, claro u.u)
- aparte, tu lo pierdes tu lo recuperas - dijo Remus quitándose la camisa también (¿por que¡por que yo quiero! Y tu también, no te hagas ¬¬) (¿no c han dado cuenta q la mayoría de personas en esta pagina son mujeres calenturienas que fantasean con los merodeadores o similares?)
- pero, pero yo... - James buscaba cualquier argumento que lo salvara de tener que arrojarse por la ventana.
- ¡vamos, son solo dos metros, y tu eres mas ligero que yo - puntualizo Sirius
- Sirius... Si me muero te mato - advirtió James - digo... si me caigo te mato
- si, claro - respondió Sirius sin prestar mucha atención mientras se arreglaba algunos pequeños detalles frente al espejo - bueno - mientras se daba la vuelta - ¿como me veo? - cuando dijo esto adopto una pose de modelo de Arany Exchange (esa marca de ropa horrible de USA en la que te cobren 10, 000$ por medio zapato -).
- pareces modelo de Aramany Exchange - respondió Remus amarrando una de las sabanasde James y una de las de Sirius, sin embargo, una chica furiosa entro en la habitación.
- ¡oye! que poco original eres, eso lo había escrito yo fuera del dialogo - se quejo Ana (le escritora del FF que ahora están leyendo ).
- ¿qué!Pero yo solo digo lo que escribiste en el guión! - exclamo Remus indignado, releyendo un grueso cuaderno de hojas - ¡mira!
- ¡uy, si es cierto! Perdón - se disculpo Ana viendo el párrafo que le señalaba su amigo
- no importa, a ver si después de este capitulo salimos a echamos un cafecito ¿no? - pregunto James a la decrepita escritora
- me encantaría, pero hoy Sirius me invito a una cena romántica en el Blue Palm, pero nos podemos ver mañana para desayunar - respondió Ana risueña.
- esta bien - aceptó Remus regresando a lo que hacía entes de que Ana entrara en el cuarto como un huracán
- pues órale, perdón por la interrupción - se disculpo Ana y salio por la puerta por la que había entrado, mientras le guiñaba un ojo a Sirius
- nos vemos esta noche guapa - se despidió Sirius regresándole el gesto a su amor de toda la vida.
James puso los ojos en blanco cuando la chica hubo desaparecido tras la puerta de su dormitorio.
- estas escritoras ya no saben ni lo que escriben - gruño James molesto por la interrupción
- ¡escuche eso! - chillo Ana enojada entrando de nuevo al dormitorio - ¡una mas y escribo un slash con tigo y con Dumbledore el sexy eeeh!
- no, ya me porto bien - dijo James mansamente reprimiendo un escalofrío
- ¿de todas maneras que haces aquí¿No deberías estar en clase de matemáticas justo ahora? - Remus arqueo una ceja al mirar su reloj
- ¡hay, es cierto! si llego tarde la mis cuervo me va a matar con un hachazo de su narizota! Gracias Remusin ¡nos vemos después chicos! - dijo Ana bastante preocupada a los merodeadores, mientras campanita (la de Peter Pan) sale de la nada, echa sus maravillosos polvos mágicos sobre la escritora que sale volando por la ventana como Meary Poppins (¡Dios! Tengo que dejar esa hierba... me esta haciendo mal).
- ¡Madre¿y esa que se fuma? - pregunto James pasmado
- hierba... le esta haciendo mal - respondió Remus con sencillez
- ¡no copien lo que yo escribo fuera del dialogo! - grito la voz de Ana de algún lado
- OK, OK ¿donde estábamos¡ah, si! Pareces modelo de Armany Exchange - respondió Remus sin dejar de trenzar sabanas.
- o sea que bien- se conformo Sirius satisfecho mirándose al espejo como un pavo real (¡ah, la vanidad!... Mi pecado favorito XD) (bueno, neta odio la vanidad, yo soy 0 vanidosa, pero a mi Siri-boy le queda muy bien -").
- ¿por que no soy yo el galán seductor? - pregunto James enojado.
- por muchas razones - respondió Remus - primera no eres un galán: eres flaco y feo y muchos otros adjetivos negativos - (¡James no es feo! TT) - segunda eres mas ligero y tercera me quiero vengar por que tiraste mi libro por la ventana - termino con crueldad (ah, venganza... Me 2° pecado favorito, es dulce como la miel... Pero al final siempre es amarga como las toronjas de a peso por kilo en el tianguis ¬¬) (¡guacala! Toronjas )
- sin tomar en cuenta que nadie es mejor que Sirius Black para ligar - añadió el guapo merodeador orgulloso (solo en este FF, fuera de el es TODO MIO!) (no soy tan posesiva en la vida real eeh)
- aja ¿y por eso me tengo que tirar por la ventana¿no? - se quejo James (veo que todos ya están entendiendo en que se basa el plan)
- bueno, alguien tiene que hacerlo - recordó Remus encogiéndose de hombros - y no creo que tu puedas cargar algo mas pesado que una niña anoréxica de 8 años y medio.
- ¡solo cuando estoy ebrio!
- bueno, una niña de 10 años sobrio
- ¡claro que si puedo! - se defendió James irritado
- bueno, pero yo no soy una niña de 10 años - repuso Sirius
- ah, pero eso no lo mencionaste
- bueno, como sea, yo voy a hacer MI parte del trabajo - dijo dirigiéndose a la puerta para poner en practica sus encantos.
- ¡espera¿cómo vamos a amarrar a James? Necesitamos algo que nos sirva para amarrarlo - Dijo Remus que acababa de reparar en el detalle.
- bueno, creo que tal ves podríamos...
5 minutos después los tres amigos se encontraban en la habitación de su compañero Arthur, que estaba jugando un partido de ajedrez con una chica con la que se había llevado muy bien desde 1°: Molly
- ¿qué quieren que? - pregunto Arthur confundido cuando Sirius le explico lo que necesitaban
- esa cosa... Esto... ¿Como se llama esa cosa que usan los Muggles mas locos para subir y bajar montañas? - pregunto Remus impactado por una idea tan ridícula.
- ¿QUÉ¿quieren que les preste mi arneseses¿están locos¡No tienen una idea de lo que me costo robárselo a ese muggle en la montaña! - chillo indignado
- oye... ¿y como bajo ese hombre de nuevo la montaña? - pregunto Sirius con curiosidad
- ¿tengo cara de adivino?
- ¡eso no importa, Arthur, enserio necesito ese arnéseses, por que de todas maneras voy a tener que bajar por las buenas o por las malas - dijo viendo de reojo a Remus que le echo una mirada fulminante como diciendo "yo me encargo de eso"
- bueno - cedió Arthur resignado - pero si no me lo devuelven tendrán que conseguirme otro, y robarlos en un problema - amenazo revolviendo unos instantes en su baúl para pasarle a James un maltrecho nudo de cintas negras.
- er... Gracias¿pero como me lo pongo? - a James no le hacía ni pizca de gracia que su vida (o la mitad de sus huesos) dependerán de un inútil nudo.
- ¿parezco un alpedrista o que? - pregunto Arthur arqueando las cejas
- bueno, no te preocupes, nosotros ya improvisaremos algo - Sirius parecía muy confiado
- no estarías tan tranquilo si tu tuvieras que usar esto para no romperte la nuca - dijo James malhumorado mientras bajaban las escaleras de regreso a su cuarto.
- ¡vamos Prongs! Solo es una caída de un par de metros - lo "animó" Sirius risueño
- si, siempre y cuando caiga en el balcón, si no seguro que mueres antes de tocar piso, no te preocupes - Remus perecía igual que Sirius
- amigos, jamás olvidare el apoyo moral tan bueno que me han dado, gracias - James fingía una voz conmovida conforme cruzaban la sala común hacia su dormitorio.
- cuando quieras, para eso son los amigos - respondió Sirius complacido a un James que gruño enojado.
- ¿qué nadie en este fan fiction reconoce el sarcasmo?
- ese es el chiste tarado... Aparte no puedes mencionar el fan fiction en el dialogo - dijo Remus poniendo los ojos en blanco mientras Sirius se tapaba la cara con las manos, negando con la cabeza.
- ¡ah, si! Perdón lectores - se disculpo James abriendo la puerta de su dormitorio (Jimmy... Solo sigue el dialogo por favor ¬¬).
- ya déjalo, ahora... A lo que íbamos - Remus sonreía mientras ponía en las manos el famoso "harneseses" - si no te importa me gustaría empezar de una vez
- ¿qué, por todos los cielos te obligo a pensar por décimas de tu miserable vida que me lanzaría por la ventana dependiendo de un trapo viejo que nos presto un completo chiflado? - pregunto James como si lo estuvieran obligando a despertar a una dragón con regla echándole chispas en la cara para promocionarle un nuevo tipo de hamburguesas de McDonad´s, (pero no se preocupen, pues solo 5 minutos después James ya tenía amarrado a la cintura el "trapo viejo que les presto un completo chiflado", junto con unas cuentas sabanas, dándole un aspecto ridículo al pobre , se sentía mas humillado que cuando casi se ahoga en una alberca muggle y fue rescatado por una chica de 9 años) (James ¡no dejes que te humillen mocosas 6 años menores que tu por amor de Dios! ¬.¬).
- no puedo creer que mis amigos del alma sean capaces de tirarme por la ventana - dijo James indignado (indignadísimo, mas bien) viendo con furia como Remus se retorcía en el suelo y Sirius parecía tener problemas gravas para respirar de tanto reir.
- corrección: a tirarte por la ventana con la mejor seguridad - dijo Sirius cuando pudo por fin respirar y no tener esa alegre muerte (¿te imaginas literalmente hablando morirte de risa ¡yo quiero morir así -!).
- corrección de corrección: a tirarme por la ventana con la mejor seguridad que consiguieron en 10 minutos - se quejo James con fastidio - ¿en verdad te importa mas una vil foto que tu amigo James? - preguntó James suplicante
- bueno... En realidad no, pero se trata de una foto mía, como Dios me trajo al mundo, a exposición de las curiosas manos de calenturientas adolescentes, que probablemente se la enseñaran a mas adolescentes calenturientas hasta que no exista un alma en Hogwarts que no me conozca mejor que mi madre, por lo que mi respuesta oficial es si - respondió Remus cuando se hubo recuperado de un frenético ataque de risa.
- si Jimmy, deberías ser como yo - lo riño su amigo Padfood
- tu no estarías deseoso de lanzarte por la ventana, créeme - se defendió Prongs mientras Remus terminaba de hacer unos cuentos nudos mas con la improvisada cuerda en los muebles para aligerar la carga.
- si, pero como yo solo tengo que dar un par de pasos y usar mis encantos sobre unas lindas chicas, si estoy deseoso de ayudar
- hum - gruño James luchando contra los impulsos de saltarle a la yugular a su amigo, que en ese momento se ponía loción mientras tarareaba una canción.
- bueno, ya me voy a cumplir mi parte de la misión, si no llego en media hora... Bajen a cenar sin mi - repuso como si temiera por su vida - pues lo mas probable es que regrese en otra media hora - agrego mas tranquilo saliendo de muy buen humor.
- ese es un caso perdido - repuso Remus negando con la cabeza.
- y me lo dices a mi, desde que tenía unos diez años hacía lo mismo - comentó James con una ceja arqueada mirando a la puerta.
- bueno, mejor nos apuramos - cortó Remus haciendo que James recordara que le quedaban minutos de existencia en este planeta (por lo menos sin la mitad de los huesos rotos).
- er... ¿y si bajamos a comer algo a las cocinas primero?
- nada, nada, que el tiempo es oro - dijo Remus dando pequeños empujoncitos a James en la espalda para obligarlo a avanzar - ¿qué no son los Griffis los mas valientes?
- si, pero eso no quiere decir que sean idiotas - replico James asomándose por la ventana.
- si no eres un idiota lánzate de una ves.
- ¿por qué?.
- veras mi querido amigo... No se si 7 años de amistad con un licántropo te hayan servido para saber que aún después de las transformaciones tienen mucha mas fuerza que un escuálido como tu - dijo su amigo con aire de profesor de matemáticas (James no es escuálido! TT).
- buen punto - dijo resignado, temiendo enfrentarse a su amigo, pues era obvio que lo haría mole para la cena.
James se sentó en el alfeizar de la ventana, y como toda persona normal y sin hábitos suicidas como James prefirió enfrentarse e un licántropo enfurecido que a la fuerza de gravedad y a un chingo de metros sobre el piso.
- ¡apiádate de mi alma en pena! - (yo hubiera echo lo mismo, déjenme añadir... La última ves que me encontré en una situación como esa tuvieron que mandar a un helicóptero por que no bajaba ni estupida... Ni todo el campamento pudieron convencerme de que me bajara... Ni el papa Juan pablo II me hubiera convencido, pero como el papa no puedepartirme la caraJames accedió a cumplir con su parte de la misión), el chico Lupin tardo un buen tiempo en convencerlo - bueno, si me muero me entierran con todas mis cosas, no les voy a dejar nada por kabr0#&$ - amenazo.
- eeeh... claro Jasmes, claro
Entonces James comenzó su misión suicida para recuperar esa estupida foto de su amigo (canción de "misión imposible"! XD) (pom pom, pom pom pom pom, piruli piruli! Me encanta esa canción!)... Solo que había un pequeño problema: la única diferencia entre Tom Cruise y James Potter era que Tom bajaba perfectamente bien colgado de la cintura en posición horizontal con material militar para robar una importante información para la CIA, y por si fuera poco, el fulano tenía que esquivar al mismo tiempo un muy completo sistema de seguridad de rayos láser con alarma... Por otro lado James tenía que bajar unos tres metros, con unas sabanas mal amarradas, colgado de cabeza y golpeándose con la pared, para rescatar la humillante foto de uno de sus amigos de las diabólicas manos de adolescentes calenturientas, capaces de hacer barbaridades con ella,... ¬¬ bueno, pero Jimmy no tiene un entrenamiento militar ¿verdad?
- ¡au, ay, ah! - se quejaba el chico mientras se daba golpes contra la pared - ¡eres un salvaje! - se quejo después de darse un buen golpe en la nariz, pero su amigo no contesto, así que de esa manera, lo siguio siguió bajando "cuidadosamente", hasta que por fin de detuvo... A nada de tocar el suelo, de hecho lo lograba tocarlo con la punta de los dedos.
- ¡James! - la voz de su amigo lo llamaba desde arriba - ¡no puedo bajarte mas!
Entonces a James se le callo el alma a los pies... O mas bien se lo comenzó a subir la sangra a la cabeza¡genial! Estaba colgado de cabeza justo en el balcón de la chica de sus sueños, que podría llegar en cualquier momento para verlo con ese disparate muggle en aquella posición tan ridícula, y en caso de que eso pasara, su humillación sería mayor que la de Remus, por lo que tendría todo el derecho de hacerlo saltar por la ventana, entonces lo vio: el maldito libro descansando sobre la mesa, como si se tratara de una lagartija tomando el sol cómodamente, mientras el pobre chico se balanceaba para intentar agarrarlo, sin éxito.
- ¡eso¡si se puede¡si se puede! - repetía la voz de su amigo desde lo alto animadamente - ¡DAME UNA "J"¡DAME UNA "E"! - sin embargo, la mesa estaba a apenas un par de centímetros fuera de su alcance, por lo que se rindió, volviendo a colgar balanceándose débilmente de un lado a otro, si la mesa hubiera estado a su alcance en ese momento la hubiera echo leña en un arranque de furia y desesperación, pero esta seguía a apenas unos centímetros mas legos de lo que podía balancearse, (los dos centímetros mas largos de su vida) como burlándose de el... entonces accedió a usar su ultima salida: cortar la cuerda, para después volverla a amarrarla, por lo que tomo la navaja que Sirius le había prestado y con ella corto la cuerda, cayendo de bruces contra el suelo, donde se quedo inmóvil unos segundos.
- ¿taz bien Jimmy? - pregunto Remus asomándose por la ventana.
- creo que me lisié el cerebro - se quejo en voz baja, sin mover un músculo.
- ¡ah, si! No te preocupes, no creo que nadie lo note - lo "animo" su amigo con "optimismo".
Mientras tanto...
Sirius acababa de salir de la habitación con una sonrisa de oreja a oreja, primero lo mandaba a la enfermería la mitad de las chicas del colegio y después tenía que distraer con sus encantos a 3 chicas al mismo tiempo, se sentía como Pierrce Brustam en "el mundo no vasta", entonces se detuvo en seco... ¿de quien era la habitación que estaba justo debajo de los de ellos? se dio cuenta de que quienes eran las tres chicas que tendría que distraer y ya no se sintió tan afortunado al recordar que eran las únicas chicas faz del planeta Tierra, que no se sentían atraídas por el, entonces busco a su alrededor para ver si encontraba algo que lo ayudara con su estrategia, claro, tenía que ser algo que les gustara a tres chicas... Un sofá... No, muy pesado¿qué tal un esclavo? Peter sería una buena opción, pero era algo cruel, aparte Peter era SU esclavo... Busco en su alrededor y... ¡que oportuno!
- ¡oye! - le grito a una pálida y pequeña niña de 1°, con cabello negro y rizado con unos fascinantes ojos grises que traía unas flores en los brazos... ¿por qué? No lo sabía, ni le importaba - te compro esas flores. - ofreció
- ¿qué? - la chica volvió sus asombrosos ojos grises al merodeador (como los del Elijah Wood ) - perdón, pero no puedo - se disculpo la chica - son para...
- quince cincles
- veinticinco
- diecisiete
- veinticinco
- dieciocho
- veinticinco
Sirius estaba perdiendo la paciencia.
- diecinueve o nada
- de acuerdo, pero me dejas darte un beso - replico la niña con una sonrisa burlona
- de acuerdo, treinta cincles.
- olvídalo - la chica se iba a marchar cuando Sirius decidió que ir a ver a Lily Evans, Sahara Green y Emma Reace sin ningún motivo para que no lo secuestraran y lo amarraran a las vías del expreso de Hogwarts era algo que ni un idiota era capaz de hacer.
- esta bien - accedió echando chispas por los ojos, sin embargo se sintió muy conmovido cuando la pequeña chica le dio un sencillo y dulce beso en la mejilla y sonrió encantadoramente desde un par de cabezas mas abajo.
- no tienes que pagarme- dijo entregando todas las rosas al merodeador.
- ¿por qué?
- por que me caes bien - replico la pequeña niña sonriendo - y por que te acabo de robar todo tu dinero - explico la chica sacando de detrás de si la cartera de Sirius y echando a correr hacia la abertura del retrato de la señora gorda donde desapareció enseguida, Sirius solo se quedo petrificado... Si tan solo supiera el nombre de la chica podría buscarla en el mapa, y perseguirta para recuperar los 10 galeones, 14 cincles, 30 kunts, identificación de aparición, foto de Ana Gutierrez y el cupón de descuento para una inscripción a la revista "fanaticos del Quidditch" que la pequeña niña de 2 cabezas mas abajo le había robado (no conocía su nombre por que la pobre chica solo tenía poco mas de un mes en el colegio ¬¬)... Era la cosa mas humillante que le había pasado en su vida, peor que todas las humillaciones de James con niñas mucho mas pequeñas que el, una niña de 12 u 11 años lo había timado, y ni siquiera le había dado tiempo de reaccionar, su reacción fue irse a una pared de la sala y golpearse con ella varias veces en la cabeza, hasta que recordó que tenía una importante misión de la que dependía que las 3 chicas que mas odiaban a los merodeadores no fueran a ver a James colgado en su balcón y lo fueran a usar de piñata, así que con un nudo en el estomago se dirigió hacia el cuarto de las chicas, pensando en lo que diría el mundo si se enteraran de que el famoso Sirius Black, el chico con mas clubs de fans en todo Hogwarts, un estudiante modelo en la mayoría de las materias, golpeador del equipo de Griffindor por 4 años y a opinión popular el chico mas sexy de la escuela entera había sido timado por una enana mas pequeña que el por 6 o 5 años que le había visto la cara de inocente palomita.
Mientras el chico subía las escaleras escucho como la melodía lenta de un violín bajaba por las escaleras con un sonido brillante, en verdad era una melodía hermosa, (Sirius: "nota mental: robar ese estúpido violín") sin embargo, cuando se topó con la alta puerta de las chicas el hermoso sonido del violín y la pequeña morena se esfumaron de su mente por unos momentos, nunca había estado en aquel lugar, la puerta de madera verde, vieja y gastada se encontraba frente a el como retando a entrar, era aterrador ese lugar (a pesar de que era como cualquier otro cuarto) la puerta estaba cubierta de fotos y pósters de la gente mas rara que jamás había visto nunca: eran chicos comunes y corrientes, pero con lo que parecían ser aretes por toda la cara, en las cejas, en los labios, las orejas cubiertas de arracadas, la nariz y solo Dios sabe donde mas, también tenían tatuajes en la piel... Muchísimos tatuajes (mas de el que creía que una persona era capaz de hacerse) y el largo pelo de algunos de los chicos estaba peinado de tal manera que parecía un erizo de todos los colores existentes menos el que debía ser el pelo humano¿qué demonios era eso, vio lo que dictaba uno de los pósters mas grandes: "AC-DC" (a Lily y a Sam las había asaltado la vena punk en el verano) el chico se sentía muy extrañado, pero unas imágenes raras de las cuales solo se movían la mitad no iban a asustarlo, por lo que toco la puerta, pero el sonido del violín no paro, el chico estaba perdiendo la paciencia, y esos tipos raros que le hacían una seña rara con la mano (los típicos cuernos merol XDDD) lo estaban poniendo nervioso, toco mas fuerte esta vez y nada, el violín seguía tocando, por lo que decidió ver mas de cerca esas imágenes, y todo iba mas o menos bien hasta que un chico de Kiss le saco la lengua dejando ver un arete que la atravesaba, eso era el colmo, Sirius se estremeció imaginándose lo que se sentiría tener un arete atravesado en la lengua, decidió que no quería quedarse mas tiempo de lo necesario en ese lugar donde una foto le enseñaba un tatuaje en los nudillos que rezaba "madde man," por lo que toco la puerta desesperado por que le abrieran, entonces por fin se rasgo el lento y triste sonido del violín, al parecer había asustado a la inocente chica que lo tocaba, por que escucho un fuerte respingo seguido de algunas palabrotas:
- ¿no sabes abrir una puerta de m...? - exclamo muy irritada la chica que en ese momento abría la puerta de su dormitorio sin embargo Sam no termino la fraze al ver a el guapo moreno, parecía sorprendida de verlo, lo miro de arriba a abajo, y vio como un muy ligero rubor cruzaba sus mejillas - ¿Black?
- ¡hola! - saludo Sirius lo mas alegre que podía, pues todavía tenía un sabor amargo en la garganta por lo antes sucedido.
- ¿qué haces aquí?... ¿estas drogado?
Sirius noto como ella era la única en el dormitorio (afortunadamente) probablemente las demás aún no regresaban de comer.
- er... no... solo pasaba serca y pense ¿"por que no pasar a visitar a mi buena amiga Green", en realidad te traje esto- respondió el merodeador sacando de detrás de el las malditas rosas (las malditas rosas mas caras del mundo ¬-¬), pero el merodeador no veía a la chica, sino que había notado como su amigo se balanceaba de un lado a otro intentando agarrar el libro que estaba sobre la mesa, pero después de un rato se quedaba de nuevo balanceándose de un lado a otro, frustrado.
- oh... bueno, no se que decir... Es muy... Muy... Er, original - dijo Sam tomando las rosas y viéndolas como si fueran a explotar en cualquier minuto.
- gracias - respondió el guapo merodeador distraído, viendo como su amigo cortaba la improvisada cuerda y caía de bruces al suelo y se quedaba tirado unos momentos.
- ¿"para Martha de Antonin: por nuestro 2° aniversario de novios"? - dijo confundida la chica. Cuando Sirius escucho a la chica debajo de el y cuando desvió su mirada vio que leía la tarjeta que tenía las rosas
- ¿qué?... ¡ah, si! - exclamo horrorizado, mientras le quitaba la tarjeta de las manos y le prendía fuego y después la pisaba en el suelo pensando rápidamente en una excusa - es el nombre de la florería, es la tienda del primo del papá un amigo de un amigo de mi hermano, pero como me cae mal quiero que olvides todo lo que leíste - dijo escondiendo las cenizas detrás de el, mientras tanto el chico Potter se había puesto de puesto tambaleándose.
- eso... ¿quieres pasar? - pregunto Sam que no tenía en mente otra cosa que decir, y no pensó mucho en la pregunta, Sirius no se esperaba aquello.
- no, no, yo... - había pasado por alto que había estado mirando sobre el hombro de Sam, por lo que reacciono rápidamente cuando la chica quiso averiguar que era tan interesante, hablando mucho mas fuerte de lo que pretendía - ¡QUIERES SALIR CON MIGO MAÑANA?
La chica se sobresalto y respondió casi al instante, se notaba que no había pensado en la respuesta (¡que suerte! OO).
- ¡esta bien!
Sirius tampoco había esperado eso, pero en aquel momento veía como James le enseñaba como ya había conseguido el libro mientras intentaba atar de nuevo el arneseses a la "cuerda", pero no habían pasado ni dos segundos de que su amigo había desaparecido de la vista de Sirius cuando el chico volvió a caer con la mitad de las sabanas rasgadas (que ya no podrían usar para dormir), dándose de nuevo en el suelo de piedra, por lo que Sirius no pudo evitar soltar una carcajada, lo cual alarmo visiblemente a la pobre chica.
-¿estas bien? - pregunto dándose la vuelta para ver que era lo que le causaba tanta risa al pobre lunático que estaba frente a el, sin embargo el merodeador no podía dejar que la chica viera como su amigo buscaba con desesperación un lugar donde esconderse, por lo que actuó haciendo lo primero que se le vino a la mente al desesperado chico: la beso en la comisura de la boca, impidiendo que la chica volteara claro, pero haciendo uno de esos osos que te obligan a tirarte de los pelos al recordarlos, y sintió como un desagradable calor se extendía por su cara, la chica no dijo ni una palabra.
- si, claro, bueno... Esto, quedamos mañana ¿no¿a la 1:30¿no hay ningún problema¡genial¡nos vemos! - el chico salio corriendo pensando que nunca olvidaría aquella cosa tan espantosa, había besado a la chica Green, no espero ni para ver si su amigo había encontrado algún lugar donde esconderse, ni lo quiso comprobar cuando llego a su cuarto, tampoco reparo que las dos amigas restantes subieron la escalera justo cuando el la bajo, lo único que tenía en mente era llegar a su dormitorio y una ves allí se tumbo en la cama tapándose la cara con todas las almohadas, para que nadie viera que tenía la cara como acero para marcar vacas.
- si me buscan, me golpeo un meteorito en la cabeza y estoy dos metros bajo tierra- farfullo, rojo todavía
- ¿te fue bien? - pregunto Remus asomándose por la ventana.
- mejor de lo que quería que me fuera - dijo por respuesta - ¿James?. - pregunto el chico queriendo saber si a su amigo le había ido una milésima parte de mal que a el.
- pues, veras... - la voz de Remus se escuchaba preocupada y aliviada al mismo tiempo - tuvimos un pequeño problema
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Órale, ahora si que me pase oO, el capi me quedo bestial mente grande, lo siento, no me di cuanta hasta que ya estaba a punto de mandarlo, pero de todas maneras que lo disfruten mucho y gracias a todos los que están leyendo mi historia, significa mucho para mi .
Jess, te amo alma gemela, gracias por el concierto, es el mejor regalo de cumpleaños ToT !