Capítulo 3:

Jugadas... y No de Quidditch

Cuando todos se levantaron, Colín no perdió tiempo y abordo a Sax, Ron como que no estaba muy contento, pero ni para protestar, porque Sara se lo llevo arrastrando... literalmente.
-¡Hola!
-Hola...
-Me llamo Colín Creevey, del sexto curso, Gryffindor.
-Saxana, también del sexto curso del IAM, mucho gusto, puedes llamarme Sax
-¿sabes? eres la chica mas linda que he visto, aunque supongo que muchos te lo habrán dicho ya.
-¡Ay, o sea.. si! Pero ninguno ha sido como tu, eres un hiper lindo, no sabes, me encanta que un chico así, bello como tu, me diga esas cosas tan halagadoras, me hace sentir única...
-¿Tienes novio?
-Tenia... ¿y tu?
-También tenia - respondió - tal vez podemos salir un fin de semana a Hogsmeade y mostrarte todo el lugar.
-¡Me encantaría!
-¡Creevey! - llegaron Ralph y Morgan - ¡No acapares a la muñeca! ¡Hola preciosa!
-Hola nenes... ¿qué hay?
-Escuchamos que Creevey te invito a Hogsmeade ¿te parece si vamos todos?
-¡Claro que si!
Luis Turpin estaba sonrojado por lo que Diana le decía jocosamente, y le tomaba la mano fervientemente, claro que Ian estaba absorto en su asiento, ¡la chica no lo estaba acosando ni haciendo el mínimo caso!
-¿qué te pasa Ian? - pregunto John.
-Nada...
-Pues estas muy serio, parece que quisieras matar a alguien...
-Si claro...
-Por cierto, esos chicos del IAm no pierden el tiempo, el francés ya anda tras nuestras compañeras.

Y el francesito estaba sobre su victima... digo, sobre una chica en particular - ¡U LA, LA...pego que bonita vigta, degde cuando los angeleg viven aquí! - le decía a Luna Lovegood, quien sorprendida porque un chico se le acercara... pero la verdad es que ese año, Luna mostraba la belleza escondida entre la maraña de pelo, y sus enormes ojos expresivos tenían maquillaje.
-¿quién eres?
-Jean-Paúl Jacquard, de Lyon, Francia... a tug pieg, Madame... ¿Puedo sabeg tu nombre?
-Luna Lovegood...
-UUUH, pego que pregcioso nombre... si tu ereg la luna y yo el sol... un eclipse no nog vendría mal...
-¡Dices cosas raras!
-Egpego que me enseñeg el lugag...
-Eh... si claro...
-Muchag graciag Luna...

Sax y Regina veían pasar a los chicos, y ellos las miraban sonriendo - ¿qué dices?
-Digo que están buenos... como que ya estuvo suave de celibato y hay que darles pa sus tunas a estos niños...ya que ni Fred ni George aflojaron...
-Habla por mi, porque ya me contaste lo que hacias con Fred

-Si, hay cada tío, que pa que te cuento... ¿alguno en especial?
-¿qué me dices de este?
-MMMM... - Mary le lanzo una mirada sed uctora mirándolo de arriba abajo - como que me merece...
-Eres una pe.rru china - musito SAx - pero yo también, tengo mis ca.len turas - y su mirada se topo con Owen, de Hufflepuff, el chico no podía tener mas de quince años, pero era alto, con el cabello muy corto, rubio y ojos color miel, simpático y guapo.
-¡Pues mas pe.rru china eres tu si sigues viendo a ese niño! Debe ir como en... cuarto curso y tu vas en sexto...¡eso es co.rrupción de me.nores, asalta cunas, cuida niños, nana!
-ya esta en edad de merecer - respondió y le lanzo una sonrisa, que Owen acepto tímidamente - y si tiene todo lo que debe tener y bien desarrolladito, cuidadito que ¡voy por el!
-¡Que zo.r ra, si hay mas en sexto y séptimo, son un montón!
-¡pero es mas divertido cuando tienes que enseñar!
-¿qué cuentan? - se acerco Helena.
-Aquí nada mas, viendo la mercancía... ¿ y tu?
Huyendo del tontolino de Justin, no lo quiero ver porque su recuerdo duele...
Helena, aquí hay miles de chicos... anda, sonríe y en menos de lo que canta un gallo, uno de ellos será tuyo...
-¡Tienes razón! - y se dio una vuelta, pasando al lado de Zacharias, que era mas alto que ella y le sonrió.
-¡Guapa! - dijo Zach a Justin.
-claro...
-Habrá que llegarle...
-¿a quien? - pregunto
-A Helena, es guapa, y creo que necesita algo de amor - sonrió Zach y Justin palideció.
-¡Juega! - brinco otro Huffepluff - ¡a mi también me interesa! A ver quien la conquista ¿vale?
-¡Vale!
Chocaron sus manos, en señal de acuerdo, y Justin sintió que debía hacer algo de inmediato, o alguien mas le pondría las manos encima, Ernie pareció darse cuenta de lo que sentía.
-Es tu ultima oportunidad Justin... secuestra a la chica y hazle lo que ella quiera... punto...
-¡como crees!
-O lo haces tu... o será el postre de Smith
-¡diablos! - y salió tras ella, quien a pleno día se dirigía a su habitación, para quitarse la túnica de viaje, al abrir la puerta de su vagón dormitorio, Justin de pronto la jalo hacia dentro y en un acto de inusitada valentía (que debió haber echo hace mucho) se le fue encima, besándola apasionadamente, sin dejar que hablara siquiera, y mano seándola des caradamente.

Finch-Flethley la besuqueaba y manoseaba y ella ni protesto, porque las caricias que le hacia, le provocaba que se olvidara hasta de donde estaba y la hacia perder la noción del tiempo... pero Helena como ya saben,
... que perdió en ese salón... por un frenético Justin, que por fin había reaccionado...
Claro que al final, el se sentía culpable... y no había entrado a Herbología, pero Helena, lo abrazaba y lo besaba.
-Lo siento mucho - decía el chico muy apenado - es que... no debí ser tan rudo contigo... - se arregló la túnica, mirando a la inocente de Helena (¿dije inocente? JAJAJAJA)
-No importa mi amor, no importa... lo guardaba para ti... - le miro lascivamente recorriéndolo de arriba abajo.
-¡Es que te deje hasta moretones! - y se percato de cómo lo miraba la chica - ¡Oye! ¡No me mires así!
-¿Así como?
-Pues... pues... si estuviera desnudo... ¡tienes una miradita lujuriosa que me asusta!
-Tu me provocas con solo verte - ¡bésame mas! - le volteo el rostro y le aprisiono los labios.
-¡Que haré contigo! - murmuró bajo sus labios.
-Quererme mucho - respondió antes que se perdieran de nuevo entre beso y beso.