DISCLAIMER: ninguno de los personajes nombrados me pertenece a mi sino a J.K.Rowling, etc, etc (uds ya saben)
UNA CUESTIÓN DE SANGRE
Capítulo 1: "Lo que pasó en las mazmorras"
Los pasillos de Hogwarts hubieran estado desiertos sino fuera por la muchacha de cabellos castaños que dirigiéndose a su sala común, corría apresuradamente.
-Chocolates de menta- le respondió a la dama gorda que le impedía el paso.
Hermione Granger entró a su sala común de Gryffindor y buscó a sus amigos con la mirada. Harry y Ron estaban a unos metros de ella, en el rincón más alejado de la sala. Aparentemente discutían de algo muy importante por lo que pudo adivinar la muchacha. Sus rostros en rara ocasión denotaban esa seriedad como la que esta observando en ese momento.
-¿De que están hablando?- preguntó
Los dos muchachos se sorprendieron al verla y sonrieron, visiblemente incómodos.
-Quidditch- respondió finalmente el pelirrojo
Hermione hizo una mueca de disgusto.-Uf, yo creí que estarían hablando de algo importante
-El quidditch es importante
-Si, ya lo sé, solo que pensé que sería más, es decir, tenían una cara de…-ambos muchachos arquearon sus cejas, impacientes-…olvídenlo
-¿De dónde vienes?- preguntó Harry
Hermione apoyó en una mesa los pesados libros que hasta ese momento descansaban en sus brazos
-De la…
-biblioteca-la interrumpió Ron-¿dónde más podría haber estado?
Hermione le dedicó una mirada de disgusto. "No es lo único que hago"-pensó
-Es lo único que haces, biblioteca, ir a clases- Hermione se preguntó si había pensado en voz alta- ¿no piensas en tener algo de diversión?
-¿Diversión, por Merlín Harry, claro que no. No puedo permitirme reprobar. No todos somos magos tan poderosos como tú. Además-continuó-soy prefecto, ¿Cómo crees que quedaría si comenzara a irme mal en clases? Y mirando a Ron concluyó: tú deberías pensar lo mismo
-Estoy bien como estoy, gracias- respondió éste
-Pues te has perdido una gran escena en el comedor. Harry y Ron comenzaron a reír acaloradamente. ¿Quieres que te cuente?
-Claro
-Bueno, nosotros estábamos tranquilamente comiendo como todos los días cuando de repente escuchamos un grito que provenía de la mesa de Slytherin-Hermione se acomodó en su silla poniendo gran interés-pero te juro que los gritos parecían ser de alguien a quien estuvieran matando…!Pero yo te amo, ¡porque me haces esto, ¡somos el uno para el otro,cosas así….
-¿Y quién era el que gritaba?
-La que gritaba-corrigió Ron- era Parkinson
-¿De veras, pero, ¿por que?
-No estamos seguros, no conocemos toda la historia, pero cuando nos dimos vuelta para ver que pasaba, Malfoy estaba tan rojo como el cabello de Ron…Pansy le estaba recriminando cosas a él. Odio a ese hurón pero realmente no le deseo eso a nadie…incluso que te echen el maleficio Cruccio debe ser mejor que tener que soportar a esa idiota gritándote frente a toda la escuela.
Y dicho esto los tres comenzaron a reír exageradamente.
-Lamento haberme perdido esa escenita tan peculiar-dijo Mione
-Me hubiera gustado tener una cámara en ese momento-dijo Harry con lágrimas en los ojos-cielos, miren la hora que es…-exclamó debo hablar con Katie para arreglar las prácticas de la semana próxima, ¿vienes conmigo Ron?
-No-respondió éste- mejor me quedo a hacerle compañía a Mione
Harry asintió divertido – Como quieras- miró a su amiga y luego a Ron con una extraña expresión de complicidad- Los veré más tarde- y su figura se perdió entre los demás alumnos de Gryffindor
-¿Y a éste que le pasa?-preguntó la muchacha mientras se disponía a abrir uno de sus tantos libros
-Mione-comenzó a decir Ron-¿hace cuanto nos conocemos?
-Mmmm, seis años
-y siempre hemos sido buenos amigos ¿verdad?
Jugueteaba con su ya arrugada corbata, enrollándola y desenrollándola una y otra vez. La miraba furtivamente, nervioso, intentando no quedar como un idiota
-Supongo que si -respondió cansinamente- a menos que aún recordemos como tú y Harry me trataban en primer año…
-Lo siento por eso-murmuró Ron- entonces somos amigos, pero…¿Qué es lo que sientes por mí, ¿me quieres?
Hermione evitó cruzar miradas. Comenzaba a sospechar adonde se dirigía esta conversación. ¿Qué podía decirle? "Si, te quiero pero como amigo", "eres mi mejor amigo Ron no quiero arriesgarme a arruinar la relación"ó "no es por tu culpa, es la mía". El solo hecho de pensar que dijera lo que dijera le rompería el corazón a ese muchacho tan dulce que anhelaba una respuesta que ella no podía darle la hacía sentir la basura más grande del mundo.
-Por Merlín, no puedo creer que haya olvidado un libro- exclamó eludiendo la pregunta de su amigo-iré a buscarlo
-¿Qué libro es?-preguntó Ron claramente decepcionado-te ayudo a buscarlo
-Oh, no te preocupes, no tienes porque aburrirte buscando un estúpido libro, mejor quédate aquí, enseguida vuelvo
Pero Hermione no pensaba volver. Debía esconderse y rápido! No podía subir a los dormitorios a esta hora, era demasiado temprano y si Ron quería encontrarla la buscaría allí o mandaría a Ginny a hacerlo. "Que cobarde eres, mañana tendrás que verlo y enfrentarlo indefectiblemente, ¿de que vale escabullirse?" Pero ella no estaba preparada para hacerle frente a esto precisamente ahora, pensaría más tarde que le diría a Ron en el desayuno de mañana.
-¿Dónde, dónde?-murmuró-un lugar comenzó a tomar forma en su cabeza…caminó con sigilo hacia la clase que menos le gustaba en todo el colegio. A medida que avanzaba el frío la hacia aprisionar más y más la túnica contra su cuerpo. Cruzó la entrada a las mazmorras deseando que no haya nadie (N/A: claro! Justo ahí se va a esconder no? Jajaja).Un silencio de muerte se cernía sobre el lugar. Suspiró aliviada y se sentó a esperar a que los minutos pasaran.
"CS"
Unos ruidos a pasos acercándose la sacaron de sus pensamientos.
-¿Granger?- escuchó-esperaba encontrarse con los fríos y severos ojos del Profesor Snape, sin embargo, lo que encontró en esos ojos era aún peor.
-¿Malfoy,¿que haces aquí?
-¿Qué haces tú aquí?- Hermione no le hizo caso a la pregunta del rubio. No tenía el mínimo interés en contarle lo que hacía allí, ni el porqué-¿de quién te escondes?
-Tienes que irte-replicó cortante
-¿Irme? Ninguna sangre sucia me dirá lo que tengo que hacer y mucho menos tú
-Yo llegué antes que tú, te corresponde a ti marcharte
-Yo no me iré a ningún sitio, si no quieres verme pues te aconsejo que vayas marchando…
-bien, si así lo quieres. Cruzó los brazos en torno a su pecho y se sentó enfadada. Nos quedaremos los dos. Por el rabillo del ojo pudo ver como Malfoy sacaba su varita. Su pulso se aceleró. "¿Irá a atacarme?". Pero nada de eso sucedió, el muchacho solo había desenfundado su varita para practicar el encantamiento que la profesora McGonagall le había enseñado la última clase: como transformar arena en agua. "Nunca se sabe cuando les será necesario"-había dicho
-Aguarenanaúm -repetía Malfoy una y otra vez sin obtener resultados
-Lo estas haciendo mal-interrumpió Hermione
-¿mal, y tú que sabes…
-Es Aguarénanaum, no Aguarenanaúm (es leviosa, no leviosá jejeje)
Malfoy la fulminó con la mirada. –Si eres tan lista, hazlo tú. La muchacha realizó un complicado movimiento de varita y, apuntando al reloj de arena que hacía unos momentos estaba en manos del muchacho, exclamó Aguarénanaum!. Instantáneamente el reloj se transformó en un vaso de agua. La muchacha puso cara de orgullo y con un aire de suficiencia bebió un sorbo y le ofreció a Malfoy.
-¿Quieres?
Éste puso cara de asco y negó con la cabeza.
-Como quieras-Hermione se encogió de hombros-ahora inténtalo tú
- Aguarénanaum- repitió. Esta vez funcionó. El muchacho sonrió satisfecho y pronunció un inaudible "Gracias"
Hermione lo observó sorprendida, ¿realmente la palabra gracias había salido de su boca o acaso se lo estaba imaginando, quizás Malfoy no era tan malo después de todo…
-Ron-comenzó la muchacha-me escondo de Ron. El rubio asintió.
-Pansy-admitió. Hermione recordó lo que Harry le había dicho acerca de la "escena" en el comedor. -¿Qué te pasa?
-Nada- dijo la chica- y dime, ¿Por qué te escondes de ella?
-No me estoy escondiendo, solo…la estoy evitando. Verás, hay cosas que ella pretende de mi que yo no puedo darle
-¿Cómo cuales?
-Amor
-¿amor, ¿tú, esas palabras no van juntas…
-búrlate todo lo que quieras sangre sucia, pero aunque te sea difícil aceptarlo Draco Malfoy tiene sentimientos…
-¿entonces cuál es el problema?
El muchacho suspiró, se notaba que la conversación no le divertía en absoluto.-No tienes porque saberlo, no es de tu incumbencia.
-¡Pero fuiste tú el que comenzaste…-no pudo terminar la oración puesto que Malfoy le ordenó con un ademán que se callara-oye, no tienes ningún derecho…Esta vez el rubio se abalanzó sobre ella y le tapó la boca con su mano.
-Alguien viene-dijo en un susurro-cállate. Y así como la tenía, asida por el cuello, la levantó y la metió en un armario; segundos más tarde entró el también.
"CS"
Definitivamente era un lugar demasiado pequeño para que cabieran dos personas. Hermione apenas podía respirar y tener a Malfoy tan cerca…con su cuerpo sobre el de ella, respirando encima de ella, le ponía los nervios de punta. Su corazón comenzó a latir alocadamente, su respiración se aceleró. A decir verdad nunca había estado tan cerca de el hasta ese día…nunca había estado tan cerca de nadie hasta ese día. Lo observó detenidamente, captando cada detalle de su rostro ¿Cómo nunca había notado lo atractivo que era, sus cabellos color platino resplandecían aún en la oscuridad, sus ojos -"Merlín esos ojos"-semejantes a dos perfectas joyas, frías como el hielo pero con cierto brillo malicioso que incrementaban su atractivo. La muchacha apenas prestaba atención a las voces de afuera, creyó oír a Pansy y al Prof. Snape llamando a Draco, pero no estaba segura. ¿Había estado ciega todo este tiempo, tantos años? Inconscientemente acercó su mano al rostro de Malfoy, quería tocar su piel, sentirla. Lo acarició suavemente a medida que escalofríos recorrían su inexperto cuerpo. Cuando se dio cuenta lo que había hecho ya era demasiado tarde…Malfoy tenía la vista clavada en ella, extrañado.
-¿Qué diablos estás haciendo?
-Lo siento-murmuró-no se que me pasó…quería que se la tragara la tierra, nunca había sentido tanta vergüenza, tanto asco, estaba asqueada con ella misma.
Malfoy abrió las puertas del armario y aspiró una gran bocanada de aire- Yo sé lo que tienes-continuó-te sientes terriblemente atraída por mi
Hermione quiso decir algo pero por alguna razón que no llegaba a comprender las palabras no salían de su boca. El muchacho se acercó lentamente, sus rostros separados por escasos centímetros, podían oír los latidos del corazón. Malfoy le guiñó un ojo y con un inesperado movimiento la tomó del la cintura y colocó descaradamente una mano debajo de su falda. Hermione cerró los ojos. ¿Qué estaba haciendo? Corre, niña, corre. Insúltalo, dile lo que siempre le dices. Pero estaba petrificada. Ella quería esto, quería más que esto. Malfoy la aprisionó contra su cuerpo aún más.
-Sabes que puedo matarte ¿verdad?
Hermione abrió los ojos lentamente. El corazón le dio un vuelco al reconocer lo que el chico sostenía frente a su rostro.
-¿Vas a hacerlo?-preguntó desafiante
-Quizás-respondió misteriosamente, y comenzó a juguetear con su varita, recorriendo con ella el cuerpo de una asustada Hermione
-Inténtalo...y verás lo que te sucede
El muchacho sonrió y rozó delicadamente con sus dedos los labios de ella
-Lo siento, no me acuesto con chicas como tú-contestó altanero-"cuestiones de sangre" y diciendo esto la soltó en un rápido movimiento, desapareciendo de su vista y dejando a Hermione confundida e incapaz de pronunciar ni un insulto.
Ok, fin del primer capitulo…espero que les guste…yo particularmente adoro los Dr-Hr, igual les aviso que no va a ser largo…Un beso y dejen RR!
-Nan-Miembro de la Orden Draconiana
