Heridas abiertas
Capítulo 14. Intermedio
- Cómo le habrá convencido? – se preguntó Akagi en voz alta por tercera vez.
- Ni idea – dijo Ryota – De verdad que no me lo dijo.
- Y está en su casa? – inquirió Haruko.
- Sí. Pero recordad que nada de visitarlos, ni siquiera llamarlos. Hanamichi ya nos avisará cuando esté mejor.
- Me parece bien – intervino Mitsui – No creo que en estos momentos Rukawa tenga muchas ganas de ver a nadie.
- Y no es extraño que al único que quiera ver sea a Sakuragi? – el pívot seguía sin creérselo.
- Según me contó Kuwata en la fiesta del viernes, esos dos ya se llevaban bastante bien en tercero… - dijo Kogure.
- Sí, es cierto – afirmó Haruko.
- Aún así…
Se hizo un momento de silencio, en el que todos se preguntaban que podría haber inducido a Rukawa a aceptar la ayuda de su ex-rival.
- Todavía me cuesta creer que estemos hablando de nuestro Rukawa – murmuró Akagi finalmente.
- A mi también… – dijo Kogure apenado – No me esperaba esto de él…
- Yo sí… – dijo Mitsui más para sí mismo que para que los demás le oyeran. Sus amigos le miraron sorprendidos.
- Por qué dices eso? – preguntó Ryota.
El jugador de los Tokyo Apache se revolvió incómodo en su silla, mientras pensaba como explicarse.
- Me refiero a que Rukawa tenía apenas dieciocho años cuando se fue de Japón; ni siquiera era mayor de edad… Y de pronto se encontró en Estados Unidos, sin sus padres, fichando por un equipo bastante conocido de la NBA, con un contrato millonario y saltando a la fama mundial…
- Quieres decir… que el éxito le llegó demasiado pronto y que no lo supo asimilar?
- Sí, eso creo. En mi opinión no supo estar a la altura.
Ryota asintió, pero Kogure no estaba de acuerdo con él.
- Pero tanto como para caer en drogas…
- Se te ocurre algo mejor? – preguntó el especialista en triples.
- Quizás es cierto que fue un hecho aislado, o quizás… no sé…
La conversación se interrumpió cuando llegó el camarero a repartir las bebidas que habían pedido.
- Y Ayako? – preguntó Akagi cuando el camarero se hubo marchado – No va a venir?
Todos miraron instintivamente a Ryota, quien simplemente se encogió de hombros.
- Yo no sé nada – dijo.
- No la avisaste de que habíamos quedado aquí para tomar algo?
- Claro que la avisé – repuso el chico del pendiente, molesto – Le mandé un mensaje.
- Quizás no lo ha recibido…
- Mirad, por ahí viene – dijo Haruko de pronto – Anda, pero ese no es…?
Ryota miró hacia donde señalaba Haruko, y al ver la escena se quedó de piedra; a su lado se escucharon otras tres exclamaciones de asombro.
En el otro lado de la calle, esperando para cruzar para llegar a la terraza del bar donde se encontraban ellos cinco, estaban Ayako y Sendoh cogidos de la mano.
- No puede ser… - murmuró Akagi.
"No, no, no, no, no, no…", era lo único que se repetía en la cabeza del chico más bajo.
- Está saliendo con Sendoh! – exclamó Mitsui.
"No, no, no, no, no, no…"
Ayako y Sendoh cruzaron finalmente la calle y llegaron hasta ellos. Sendoh estaba sonriendo como siempre, pero a Ayako se la veía nerviosa.
- Hola chicos – saludó – Perdonadnos por haber llegado tarde.
- Hola a todos – saludó Sendoh.
Sólo Haruko respondió el saludo. Los demás estaban demasiado sorprendidos.
- Bueno, supongo que ya conocéis a Akira… - Ayako esquivó la mirada de Ryota – Estamos saliendo…
Apenas lo dijo Ryota se levantó y salió corriendo.
- Ryota! – exclamó Ayako al verle marchar.
- Ryota! – los demás también se levantaron.
Pero el chico bajito no se detuvo, y todos lo vieron desaparecer calle abajo. Ayako se llevó la mano al pecho, desolada. Se hizo un silencio muy incómodo.
- Ya te vale, Ayako – dijo Mitsui al fin mirándola con cara de pocos amigos – Deberías haber hablado antes con él, y no soltar la noticia así como si nada.
- Y eso por qué? – preguntó Sendoh mirándole a él del mismo modo.
- No estaba hablando contigo – replicó desdeñoso.
- Se te ha subido la fama a la cabeza, eh Mitsui?
- A qué viene eso, imbécil?
Sendoh dio un paso hacia Mitsui, pero Ayako le detuvo.
- Basta los dos! – gritó – Mitsui tiene razón. Debería haber hablado antes con él. Voy a buscarle.
- Qué? – exclamó su novio.
- Que voy a buscarle. Nos vemos más tarde.
Sendoh no tuvo ni tiempo de replicar de nuevo; Ayako le soltó la mano y salió corriendo en la misma dirección que lo había hecho Ryota.
Después de ver como Ayako también se alejaba, Mitsui, Akagi, Kogure y Haruko se quedaron mirando a Sendoh. Éste dio un bufido y dio media vuelta para irse.
xXx
Sentado en el banco de un parque, Ryota se preguntaba cómo había sido tan estúpido de no darse cuenta antes de quien era el novio misterioso de Ayako. Los había visto juntos miles de veces, mirarse entre ellos, tutearse, incluso se había puesto celoso, pero aún así no había caído en lo evidente.
"Y ahora qué?", se preguntó. Todos estos años desde que la conoció había mantenido la esperanza mientras Ayako seguía soltera, pensando que ella también lo esperaba a él, a que madurase, por ejemplo. Pero todo habían sido falsas ilusiones. Ayako nunca le amaría.
Sentía su cara mojada y el corazón hecho trizas. Nunca antes había experimentado tal dolor, era como si el pecho le fuera a estallar de un momento a otro. Le costaba incluso respirar.
- Ryota…
Dio un respingo al escuchar esa conocida y adorada voz detrás suyo.
- Ayako… - murmuró volteando para verla.
Ayako rodeó el banco y se sentó junto a él. Ryota no se sentía con fuerzas para escapar de nuevo.
Era tan hermosa…
- Lo siento mucho, Ryota… Debería habértelo contado antes… - musitó la chica.
- Desde cuándo salís? – preguntó con voz ronca.
- Desde principios de junio…
- …
- Ryota, yo…
- Le quieres? – interrumpió.
La chica respiró hondo y le cogió suavemente de la mano.
- Sí… Le quiero.
- Y él a ti?
- También…
- Entonces me alegro mucho por ti – dijo Ryota levantándose.
Pero Ayako no le soltó la mano y se levantó también.
- Ryota escúchame… de verdad que lo siento…
- Qué es lo que sientes, Ayako?
Ryota la miró a los ojos y se sorprendió al verlos húmedos.
- Siento mucho no haberme enamorado de ti… - sollozó.
- Cómo…? – preguntó el chico desconcertado.
- Sé que me quieres. Y dudo que en toda mi vida alguien me quiera tanto como me quieres tú. Y si yo te correspondiera sé que sería la mujer más feliz de este planeta… Pero no es así… Y lo siento tanto…
Ayako se echó a llorar a lágrima viva. Ryota, todavía desconcertado por sus palabras, la abrazó.
- No llores…
- No me odies, por favor…
- Cómo podría odiarte, tonta? Lo importante es que seas feliz…
- Seguiremos siendo amigos, verdad? – preguntó temerosa.
- Para siempre… - la tranquilizó.
La chica de rizos se separó y le cogió la cara con ambas manos.
- Aunque no del mismo modo, yo te quiero mucho, lo sabes verdad?
Ryota sonrió y la abrazó de nuevo.
- Lo sé.
Estuvieron abrazados por un buen rato. Sin saber muy bien por qué, Ryota se sentía con nuevas fuerzas. Quizás deberían haber hablado antes. Quizás debería haber renunciado antes a ella. Quizás aún estaba a tiempo de encontrar al verdadero amor de su vida.
- Prométeme una cosa, Ayako – dijo mientras le acariciaba la espalda.
- Lo que tú quieras.
- Que si Sendoh alguna vez te hace daño, me lo contarás y me darás permiso para partirle la cara.
Ayako soltó la risa.
- Está bien…
N/A: Hola! Con este capítulo llegamos a la mitad del fic; y perdón por haberlo hecho tan cortito, digamos es una especie de 'pausa', de ahí el título… La segunda parte se centrará mucho en Hanamichi y en Kaede, ya veremos como les va…
Muchos besos a todas y gracias por los reviews, están contestados a continuación:
Elena: pues sí, a ver si deja de ser un do'aho y se da cuenta de por qué fue…
Kaehana9: caray, veo que sabes perfectamente a que se refería Ryota…
Vanne: pero solo de momento… porque como ya dije al principio será un HanaRu o un RuHana… aunque quizás solo sea sexo… XD
Celine: esperemos que sí, porque sino el zorrito lo pasará muy mal… pero ya sabeis que eso me encanta…
Balucita: me alegro de que no te haya decepcionado, la verdad era un capítulo muy importante para el desarrollo del fic y me costó bastante.
Inuyashaluchi: gracias! y también gracias por el fotolog, ahora ya te conozco un poco más ;)
Haima: Kaede lo tendrá difícil para comportarse, pero a mi entender, aunque quisiera no podría, y Hanamichi va a tener que aguantarle mucho… pero que mucho…
Haruko Sakuragi: irte? A donde te vas? No me asustes! XD Espero te guste el desenlace, y aunque ya lo tengo pensado, los finales se me dan muy mal… pero todavía queda para planearlo.
Astrea: te acercas bastante a la situación que claramente se va dar… A qué te refieres con que si he pensado sobre la marcha si será un HanaRu o un RuHana me ha quedado bien? Es que hoy estoy muy espesa…
Nos vemos en el próximo capi!
Khira
