Heridas abiertas
Por Khira
Capítulo 25. Orgullo
En medio de la marea humana que era el aeropuerto de Narita a esas horas de la mañana, Karen se preguntó seriamente si sería capaz de distinguir a Kaede entre tanto japonés.
"Suerte que es alto", pensó la chica poniéndose de puntillas, "Y japoneses altos no hay muchos…"
No entendía por qué Kaede había insistido en ir a buscarla al aeropuerto, ella habría sido perfectamente capaz de encontrar su casa. Supuso que lo había hecho para asegurarse de que no se quedara en un hotel como la otra vez, y a decir verdad, después de lo poco que le había contado por teléfono, prefería aceptar la invitación de quedarse en su casa y estar con él el máximo tiempo posible.
Pensando como hacer para animar a Kaede, no sintió que alguien se colocaba detrás suya hasta que la tocaron suavemente en el hombro.
- Kaede! – sonrió al ver quien había sido.
Para su tranquilidad, lo primero que Karen comprobó fue que a primera vista Kaede parecía estar bien, al menos físicamente. Aunque era un chico de piel muy blanca, ya no tenía esa palidez fantasmal que lucía en el hospital, y tampoco estaba tan delgado. Sin embargo el chico le devolvió una sonrisa muy triste. Karen le abrazó brevemente, ya que sabía que en Japón las demostraciones públicas de afecto no estaban muy bien vistas.
- Hola Karen – saludó Rukawa – Qué tal el viaje?
- Muy bien, gracias – dijo ella – Pero creo que ya me está empezando a afectar el jet-lag, porque me caigo de sueño y no son ni las doce del mediodía – rió.
- Suele pasar. Bueno, nos vamos?
- Claro!
Empezaron a caminar hacia el aparcamiento, donde Rukawa había dejado el coche de sus padres. El día era un día típico de invierno: poco sol y mucho frío. Durante el trayecto a casa de los Rukawa sólo habló Karen en el coche. Le contó que finalmente Joe y Linda iban a casarse en primavera y que él por supuesto estaba invitado. Rukawa se alegró, pues eso significaba que Joe no le guardaba ningún rencor.
Al cabo de un rato llegaron a casa de los Rukawa. Los padres de Kaede recibieron a Karen con mucho cariño, ya la conocían de cuando acompañaron a su hijo a presentarse ante el tribunal de disciplina de la NBA, y se dieron cuenta enseguida de que su amiga no había tenido nada que ver con su problema con las drogas.
- Tus padres son geniales – le dijo Karen a Kaede cuando se volvieron a quedar a solas en la habitación de la planta baja que ocuparía ella esos días.
- ... – Rukawa sólo asintió con gesto ausente, aunque lo tenía muy claro: si no fuera por sus padres y todo lo que le estaban apoyando en esos momentos, seguramente se habría vuelto a Nueva York y hecho alguna tontería.
La chica afroamericana no aguantó más y le preguntó como estaba.
- Bien – contestó Rukawa secamente mirando al nublado cielo por la ventana de la habitación.
- Perdona, pero no te creo – dijo Karen acercándose a él.
- … - el ex-jugador de los Knicks seguía sin mirarla.
- Vamos, Kaede, ya sabes que puedes contármelo todo – insistió.
- Ya te lo conté todo la última vez que hablamos por teléfono – dijo mirándola por fin.
- No, sólo me contaste que habías roto con Hanamichi, y sigo sin saber por qué.
- Te lo dije – Rukawa bufó y miró de nuevo al cielo a través de la ventana – Él no me quiere… al menos no tanto como le quiero yo...
Las últimas palabras las dijo en voz muy baja, apenas audible, pero Karen lo oyó. Y le costaba reconocer en el joven enamorado que tenía enfrente al mismo chico frío y callado que le presentó su hermano hacía ya más de un año y del que le había costado tanto entablar amistad.
- Estás muy enamorado, verdad? – preguntó de pronto haciendo sonrojar a Kaede, quien sólo bajó la cabeza y asintió con un pequeño gesto.
- Por qué lo preguntas? – inquirió en voz baja.
- Por nada... bueno, es sólo que aún me sorprende que lo reconozcas tan fácilmente.
- ... – Rukawa lo pensó brevemente antes de contestar – Supongo que después de pasar tantos años intentando negarlo, al final me di cuenta que no servía de nada...
- Claro que no – sonrió la chica - A ver, y por qué dices que Sakuragi no te quiere? Te lo dijo él? – preguntó.
- Más o menos…
- Más o menos?
- ...
Aunque Rukawa pensaba que quizás se había precipitado diciéndole todo aquello a Hanamichi el día de la cena y yéndose de su casa, la cuestión es que el pelirrojo no le siguió... Y había pasado casi un mes desde entonces y no había tenido noticias suyas...
- Kaede, no puedes dejar estar una relación así como así sin estar seguro… - decía Karen - Deberías ir a hablar con él y…
- No. Yo ya me he humillado demasiado… - musitó Rukawa interrumpiéndola.
- A qué te refieres…?
"A que me ha tenido en su cama las veces que ha querido", pensó Rukawa amargamente, pero no lo dijo en voz alta, "Y yo era el único gilipollas que le decía que le amaba".
- Mira, si Hanamichi me quiere de verdad que me busque él… - suspiró – Yo ya hice todo lo que estaba en mis manos…
xXx
Esa misma tarde Sakuragi y Yohei conversaban en casa del primero. El moreno se había enterado de que el rey de los rebotes andaba deprimido desde hacía días y fue a verlo. Al principio Hanamichi no quería hablar pero terminó contándole muy resumidamente lo que había pasado con Rukawa, cosa que todos los de la pandilla se imaginaban.
- Y no sabes nada de él desde entonces? – preguntó Yohei.
- No… - murmuró el pelirrojo.
Sakuragi sabía que si no tenía noticias de Rukawa era culpa suya, pero no se atrevía ni a llamarle. Le parecía muy hipócrita hacerlo y preguntarle 'Cómo estás?', sabiendo que si la respuesta era la que se imaginaba era por su causa, por haber jugado con sus sentimientos sin tener claro los suyos propios. Pero también sabía que no aguantaría mucho más tiempo así, necesitaba verle, porque además de su pareja – en realidad ex-pareja – Kaede Rukawa se había convertido en su amigo.
- Pero… - Yohei dudó un poco antes de formular la pregunta – Y no te preocupa que… bueno, que haga una tontería…? – preguntó finalmente. Sakuragi le miró con una expresión extraña, por lo que el chico más bajo se apresuró a añadir – Vamos, todos sabemos que si no fuera por ti Rukawa seguiría enganchado… y ahora que le has dejado plantado…
- Me ha plantado él… - le recordó Hanamichi con voz cansada – Además, confío en Rukawa, sé que no volverá a lo mismo…
- Tú crees…?
- Estoy convencido.
Yohei se quedó mirando a Hanamichi sin atreverse a preguntarle por qué estaba tan seguro de que Rukawa no volvería a la droga, mientras el pelirrojo daba un par de sorbos a su bebida, mirando hacia la ventana del salón con expresión ausente. Pero la razón ya se la había dicho: porque confiaba en el zorro, porque estaba seguro de que Kaede no volvería a decepcionarle, ni a él, ni a nadie. Y más le valía, porque de lo contrario no lo soportaría. No soportaría verle de nuevo acabado y demacrado como estaba cuando regresó con él de Nueva York.
- Hanamichi, hay algo que no entiendo, o que no me has contado… - la voz de Yohei interrumpió sus recuerdos - Si Rukawa le dijo todo eso a tu madre es porque tenía pensado mantener su relación contigo… Entonces, qué pasó? Por qué discutisteis?
- …
- Hanamichi… - insistió.
- Rukawa sabía que le había mentido… - respondió el pelirrojo sorprendiendo a Yohei, quien enseguida supo a que se refería.
- Y cómo lo averiguó...?
Sakuragi tardó unos segundos en responder.
- Simplemente se dio cuenta… - contestó finalmente – Me preguntó si me había enamorado de él y no le contesté, después de eso se marchó…
- Y por qué no le dijiste que le querías? De verdad que aún no lo sabes? – preguntó Yohei algo incrédulo. Para él y los demás era evidente que Hanamichi se había colado por el zorro.
- No, no lo tengo claro aún…
Yohei se quedó pensativo unos minutos, analizando la situación. Hanamichi decía que aún no sabía si amaba a Rukawa, pero se les había visto muy bien juntos y además estaba hecho polvo por la ruptura… Recordó también la escenita de las afueras de la discoteca y de pronto se le ocurrió un posible motivo para que al pelirrojo le diera reparos abrazarse delante de ellos y no en cambio demostrarse su afecto de maneras más pasionales.
- A ti lo que te pasa es que te da vergüenza admitir que te has enamorado de Rukawa y no que te lo tiras.
Sakuragi miró a su amigo con los ojos muy abiertos y pensó detenidamente en sus palabras. Podría ser que fuera eso? Que su subconsciente aceptara que estaba a gusto con un chico, que se acostaran, pero no que le amara?
Yohei miraba la cara angustiada de su amigo sin saber que más hacer por él, hasta que se le ocurrió una idea.
- Mira, ya sé lo que vamos a hacer. Jugaremos a un juego.
- Cómo…? – exclamó Sakuragi sorprendido. No le parecía momento para juegos.
- Jugando. Se trata de preguntas y respuestas. Yo hago las preguntas y tú contestas sí o no.
- Y de que servirá eso? – el pelirrojo seguía sin entender adonde quería llegar su amigo.
- Servirá para aclararte, ya lo verás. Lo vi en una serie de televisión – sonrió - No te puedo decir más porque sino no funcionará. Espera que me prepare un poco las preguntas, ya que las tengo que decir muy seguidas.
- Ok…
Yohei cogió una libreta y un bolígrafo de encima de la mesa de la salita y empezó a tomar unas notas ante la mirada nerviosa de Hanamichi. Finalmente alzó la vista y se puso el bolígrafo detrás de la oreja.
- Preparado? – preguntó – Recuerda que sólo has de contestar sí o no lo más rápidamente posible.
- Adelante – dijo el pelirrojo convencido.
- Te gusta el baloncesto?
- Sí...
- Y el fútbol?
- No.
- El tenis?
- No.
- Alguna vez te has arrepentido de jugar a baloncesto?
- No.
- Cambiarías el baloncesto por el judo?
- No.
- Se te dan bien los rebotes?
- Sí.
- Eres el rey de los rebotes?
- Por supuesto… digo, sí.
- Serás profesional algún día?
- Sí.
- Te gustaría ser profesional en EEUU?
- Sí.
- En la NBA?
- Sí.
- Y en la ACB?
- Sí.
- Terminarás antes la carrera?
- Sí.
- Echas de menos Shohoku?
- Sí.
- Querías ser novio de Haruko en el instituto?
- Sí.
- Y ahora?
- No.
- Ayako y Sendoh hacen buena pareja?
- Sí.
- Y yo y Arimi?
- Sí.
- Kiyota con esa chica que conoció en Level?
- No.
- Te gustaría volver con Nanako?
- No.
- Quieres a Rukawa?
- Sí.
Sakuragi esperó a que Yohei le hiciera la siguiente pregunta, pero el moreno se quedó callado mirándole con una amplia y divertida sonrisa en los labios. Cuando Hanamichi se dio cuenta por fin de la pregunta y de su respuesta, se atoró y sus mejillas se tiñeron de un rojo escandaloso que nada tenía que envidiar al color de su pelo. Se levantó y empezó a dar vueltas muy nervioso por la estancia, pasándose una y otra vez las manos por el cabello. Yohei le miraba sonriente.
"Dios mío..."
"Estoy enamorado de un chico..."
De pronto volvió al sofá, dejándose caer en él de golpe.
- Que he hecho… - balbuceó después de unos segundos.
- El tonto... – sonrió el moreno.
- No lo entiendes, Yohei? – exclamó - Lo he estropeado todo! Rukawa me ha dejado y con razón! Soy un idiota! Le he perdido por idiota!
- Tranquilízate Hanamichi… - pidió Yohei con voz suave - Aún no es tarde para arreglar las cosas entre vosotros.
- Tú crees…? – preguntó no muy convencido.
- Claro, sólo tienes que ir a hablar con él, pedirle perdón y decirle que sí que le quieres.
- Pedirle perdón… y decirle… que… le quiero…? – repitió Sakuragi así como asustado.
- Pues claro Hanamichi, sino cómo le vas a recuperar? – se exasperó Yohei.
- No sé si me atreveré… - murmuró el pelirrojo.
Yohei meneó la cabeza decepcionado. Hanamichi era un caso. De pronto sonó su móvil y descolgó.
- Ayako? Ah, hola, qué tal…? Muy bien y tú…? Pues sí, estoy con él… Pues… creo que lo tiene sin batería… El sábado que viene…? Ok, yo se lo digo… si, a ella también, claro… De verdad…? Vale, vale… Sí, adiós…
- Qué pasa? – preguntó Sakuragi.
- Que vas a tener la oportunidad perfecta para hablar con Rukawa…
El pelirrojo escuchó atentamente la explicación de Yohei, y no le quedó más remedio que admitir que no debía desaprovechar la ocasión.
La pregunta era… se atrevería?
N/A: Hola a todos/as, perdón por el retraso y lo cortito del capítulo, pero el próximo capítulo es el último y será más largo… o eso espero… La verdad creo que mis musas ya se han ido de vacaciones de navidad o algo así… por cierto, yo también tengo XDDD Pero una semanita me han dado no más T.T Muchísimas gracias de verdad por los reviews, perdonad por no contestarlos pero si me ponía ahora a ello no habría subido el cap hasta después de fiestas.
Y que no se me olvide:
FELIZ NAVIDAD! Y que os lo paséis muy bien estas fiestas, con vuestra familia y amigos, comed mucho y bebed mucho (champán, eh?), y sobretodo, leed y escribid mucho yaoi XD.
Muchos besos,
Khira