Cuando mi vista se oscureció, vi dos figuras con ropajes negros y túnicas que cubrían sus cabezas, imaginé que eran servidores de Voldemort. Desde mi punto de vista podía observar como uno le mandaba un crucio al otro. De repente llegaba otro mortífago, lanzaba un expeliarmus y ataba al sujeto atacante. Asegurándose de que estuviera bien atado iba corriendo y se arrodillaba al lado del ser que estaba en el suelo retorciéndose aún de dolor. Cogió al mortífago moribundo por la cintura y le zarandeó para despertarle. Se quitó la capucha a la vez que se le caía la capucha al otro y le besaba el cabello. Todo pasó muy rápido y no se que me sorprendió más, si ver a un Malfoy llorar, o si verlo llorar por un Weasley. Sí, se lo que estás pensando, ¿qué el mortífago moribundo era yo y Malfoy me había intentado salvar y ahora lloraba por mí?. Pues si, yo le oía gritar mi nombre, ese especial que solo usaba mi hermano Ron. Fui abriendo mis ojos y la voz de Draco se fue convirtiendo en la voz de Ron.

Cuando recuperé totalmente la consciencia me eché a llorar en los brazos de Ron diciendo que yo no quería acabar siendo sirviente de Voldemort. Esto sorprendió mucho a mi hermano, pero me susurró que no me preocupara, que mi corazón no era tan tenebroso como para eso. Pasó un rato cuando dejé de llorar y me fijé que en la sala de espera solo estábamos nosotros dos y mamá, que sospecho no se había movido de allí ni para ir al servicio. Al ver mi cara de no entender nada, mamá me dijo que mis hermanos habían ido a comprar algo de comer y de beber para todos y a por algunas cosas a casa. Nada más decir eso, un médico salió de la habitación de papá, habló con ella y entraron los dos de nuevo al cuarto. Como estábamos solos Ron y yo, opté por intentar mantener una conversación con él a ver que tal estaba y así de paso ver si me calmaba un poco.

¿Qué tal estás Nito?- dije con la voz más nítida y segura que me
salía en ese momento.

Supongo que no estoy bien, pero mejor que tu si, dormilona – esbozó una pequeña sonrisa con la intención de infundirme ánimo. Siempre preocupándose más por los demás que por él. Es algo que admiraba, y aún admiro.

Creo que solo me impresioné al verle – dije señalando al cristal – de ese modo tan horrible. – dejé pasar un tiempo antes de continuar- he tenido una pesadilla, pero fue tan real... demasiado para mi gusto. Realmente me acojoné.

¿Estás segura de que era una pesadilla? Bueno da igual, cuéntamela.

Lo importante es que Draco era un mortífago, y yo también lo era, entonces yo era herida de muerte y el se desmoronaba llorando y gritando mi nombre, el que solo usas tú.

Oh! Supongo que tu aún no sabías que Draco YA es un mortífago. Desde que estábamos en quinto, nada más cumplir los 15 le iniciaron y le marcaron.

¿Y tú como sabes eso? Me refiero a cuándo... – no me dejó continuar.

Draco y yo somos amigos desde hace un año. Nos costó dejar atrás nuestras diferencias, pero una noche se patrulla, Hermione, Harry, que iba con la capa invisible, y yo nos lo encontramos saliendo del despacho de Dumbledore. A continuación se dejó caer por la pared, puso la cabeza entre las manos y se puso a llorar. Nos pareció que por mucho que fuera Malfoy en esos momentos se veía bastante humano y necesitaba desahogarse. Nos acercamos, nos contó su historia y nos dimos cuenta que no era una mala persona, al revés, era una de las mejores personas que podíamos echarnos a la cara. Entendimos que su actitud tenía una muy buena razón, así que decidimos intentar llevarnos mejor él. Ahora es uno más del grupo fuera del colegio, pero dentro es necesario que siga aparentando odiarnos, nosotros lo preferimos también así.

¿Por eso fue tan amable conmigo cuando estaba caminando por las afueras del castillo y me acompañó a la entrada de nuestra sala común? – la verdad es que a la historia de mi hermano le faltaban mucho detalles, pero entendí que si no me lo había contado es que no podía hacerlo, y que no lo iba a hacer por mucho que lo intentase.

Si, yo diría que fue una de ellas. Como tu le contaste lo que había pasado, él imaginó que yo debía estar preocupado y se apresuró a llevarte sana y salva de vuelta. Espero que nadie le haya visto, me molestaría tener que preocuparme por algo más, y escoltar a una Weasley podría levantar sospechas de muchos mortífagos de los que hay entre los alumnos. Sospechas hacia Snape y Malfoy, que es su maestro como sirviente del señor tenebroso. Pero estoy seguro de que hay algo más – sonrió – que siempre le has tenido loco. – su sonrisa se ensanchó de un modo travieso.

No digas tonterías Nito – creo que estaba igualando mi cara con el color de mi pelo.

No son tonterías Vir, te lo cuento porque aunque sea mi amigo, no quiero que tengas nada con él. Se que ahora te está empezando a atraer. – Me dijo mirándome seriamente a los ojos.

Solo tengo curiosidad por él. – Desvié mi mirada al suelo, craso error.

Tu a mi no me engañas y lo sabes. Vir, pequeña, no seas insensata, es un mortífago, si tienes algo con él uno de los dos va a acabar muerto, y no quiero que os pase nada. A ninguno de los dos. – se que lo estaba diciendo enserio, y como no quería ponerle en un compromiso preguntándole cosas que yo sabía que no me respondería, cambié de tema. Él me miró agradecido y se desplomó en una silla a mi lado.

Después de que mis hermanos vinieran, comimos unos bocadillos y mamá nos mandó a los dos pequeños a casa a ducharnos y a que durmiéramos. Dijo que lo debíamos necesitar. Fuimos por la red flú hasta la madriguera. Entramos a la cocina a dejar los dulces de nuestros baúles porque la norma más estricta de mi madre, era la de no tener comida en los pisos de arriba. Entré yo primero en la cocina, y vi una lechuza posada en la mesa de la cocina. No debía llevar mucho tiempo ahí porque mis hermanos, que se habían ido hacía como una hora, no parecían haberla leído. Con curiosidad me acerqué a la lechuza y le acaricié las plumas. Eran unas plumas bonitas, suaves y brillantes, parecía una buena lechuza, era negra totalmente. En cierto modo me recordó a la lechuza de Harry y pensé que esta era su negativo, como en las fotografías. Cogí la carta y recibí un picotazo cariñoso de la lechuza, creo que esa lechuza era de las pocas que me había caído bien. Bueno, es que yo tenía un miedo inconfesable por las lechuzas, y a lo largo de mi vida solo he aguantado a la vieja lechuza de mi familia y a la de Harry, pero aquella me gustó. Volviendo la carta, la leí y creo que ponía algo parecido a esto:

"Comadreja, ten mucho cuidado y avisa a los tuyos de que lo tengan, el Lord planea mataros porque sois de las pocas familias sangre-limpia que queda sin unirse a él. Suerte y ya hablaremos."

Lógicamente me sorprendí y mi hermano al ver la carta de lejos simplemente dijo

Es Draco, ¿Qué quiere?

Le conté lo que ponía en la carta y maldijo algo por lo bajo, me pareció entender que decía que Draco era un gilipollas o algo así. Ahora si que estaba confusa, antes le caía bien y ahora le insultaba. No entendía a mi hermano por aquella época, y si os digo la verdad, ahora le entiendo menos. Nos duchamos y dormimos en el cuarto de los gemelos para poder estar en la misma habitación. La verdad es que el espíritu del ático daba bastante miedo cuando la casa estaba tan vacía. Dormimos bastante, y es que el cansancio y el hecho de saber que al día siguiente te enfrentarás a la peor imagen de tu vida, agotan a cualquiera que se diga un poco humano. Mi hermano dijo que en San Mungo mi familia estaba protegida, pero a mi me pareció que si habían atacado el ministerio, también podían atacar el hospital.

A la mañana siguiente cuando fuimos a ver a papá nos dijeron que había despertado y estaba en una silla de ruedas en el tanatorio velando a Percy con el resto de la familia. Fuimos al velatorio que no te voy a contar porque no tengo ánimos y al entierro que te puedes imaginar como fue.

Cuando volvimos a Hogwarts, me salí al jardín con el trío y nos fuimos al sitio en el que Ron me dio la fatal noticia. Esperando allí estaba Malfoy porque sabía que sería donde iríamos primero para hablar a gusto. Según le vio mi hermano se acerco a él gritándole cosas como gilipollas, atontado o maldito hurón de mierda. Por su parte Malfoy parecía gritar algo como "yo no sabía nada de sus planes" y cosas así. Ron le señaló y le dijo:

Como vuelvas a poner a alguien más en peligro, te mato. Imbecil. ¿Qué hubiera pasado si descubrían dónde se dirigía la lechuza y quién la enviaba? ¿Crees que estarías vivo? Si es que a veces pareces tonto. – Su cara era del mismo color que su pelo. Levantó la mano, pero se arrepintió y la bajó en seguida.

Como quieras Weasley, pero era urgente. – Seguía siendo el mismo Malfoy de siempre, orgulloso y arrogante, solo que ahora su relación con nosotros, era extraña. – Por cierto, siento mucho lo tu hermano, no sabía nada de eso pero si hubiera tenido aunque fuera una sospecha, te lo hubiera dicho. – Estaba tan serio que podría llegar a dar miedo.

Mi hermano sonrió – Lo se Malfoy, supuestamente ahora eres nuestro amigo, ¿no?

Por su puesto comadreja, pero no voy a demostrarlo delante de todos. Cuida bien a tu familia, sobretodo a ella – dijo señalándome – Voldemort la quiere, para que se una a él, y o lo consigue ya, o será la siguiente en morir.

Eso es asunto mío, yo la protegeré, si necesito ayuda, te aviso

Bien, pero has de saber que mi misión es llevarla ante el Lord antes de dos meses, así que te recomiendo que la protejas muy bien, porque si yo fallo, que lo haré porque no pienso entregarla, a mi me quitarán del medio y mandarán a otro. – Realmente era verdad lo que decían de que cuando estaba serio daba mucho miedo.

Si tienes problemas, avísanos. – Gritó Hermione cuando Draco se alejaba.

Hermione y Ron se abrazaron mientras yo apoyaba la cabeza en el hombro de Harry para reflexionar. Ahora si que mi mundo estaba más raro que nunca. Jamás podría haber imaginado a mi hermano preocupado por un Malfoy, pero las cosas cambian mucho. Tal y como cambiaron a partir de entonces...

NOTAS DE LA AUTORA: Siento haber tardado tanto en subir este capítulo, pero estaba en plena semana de exámenes y no encontraba ni tiempo para dormir. Weno, espero actualizar antes los próximos capítulos, aunque si os digo la verdad no se como continuar, ya se me ocurrirá algo. De este fic, me gusta la idea, me gusta la rama y la personalidad de los personajes, tengo pensado el final y todo, pero no se si está bien escrito, redactado o si se entiende. Dadme vuestra opinión por favor.

Gracias por los reviews y si queréis los contesto en cada capítulo, pero soy un poco vaga para eso. Por cierto, esto no lo hago con un fin lucrativo, simplemente me gusta escribir. Gracias por leer y espero que sigais dejando reviews a ver que os parece.