Disclaimer: Vean el capítulo uno, por favor.

Nota: Este capitulo esta lleno de dolor y tortura, así que si alguien no soporta dichas escenas... Pero, ¿por qué repito esto si son parte de la generación insensibilizada por la tele? A cierto, porque no quiero le les agarre de golpe y porrazo...

Capítulo 12: Rogar o morir

Los cautivos habían caminado la mayor parte del día. Al inicio había tenido que apoyarse en Elrohir frente a ella para poder continuar, pero a medida que sus habilidades curativas surtían efecto había sido capaz de erguirse y caminar sin ayuda. Ninguno de ellos sabía que hacer por ella. No había dicho mucho, pero sostenía su cabeza alta. Ella sabía que los orcos tenían más dolor de reserva para esa tarde, y ella no podía soportar las miradas culpables en las caras de sus amigos. No había nada que pudieran hacer por ella. Uglúk era su torturador personal, y nada de lo que los otros pudieran hacer lo detendría. Su guerra personal había empezado mucho antes de que conociera a Legolas y a Este, y esta continuaría hasta que ella o el orco murieran. Él la odiaba por lo que ella era, y ella lo odiaba por lo que él hacía.

"Atavus," susurró Legolas detrás de ella.

"¿Qué?" susurró de vuelta.

"He estado pensando. Cuando ellos vayan a atarnos más tarde, voy a crear una distracción. Quiero que intentes escapar," continuó suavemente. Los otros podían oírle, pero los orcos no.

"¿Qué estás diciendo Legolas? Quieres decir que todos intentaremos escapar, ¿correcto?"

"No, solo tú. No creo que nosotros podamos alejarnos. Pero uno de nosotros puede. Tú puedes huir hacía los árboles. Ellos nunca podrán rastrearte ahí," ella sabía porque él estaba sugiriendo eso, pero no podía dejarlos así.

"No te dejaré a ellos así," siseó suavemente.

"Oye, tú sabes que ellos no van a lastimarnos, pero tú eres un juego justo para ellos. ¿Quieres ser torturada otra vez?" Ella estaba siendo terca, pero él estaba decidido a no rendirse.

"No, claro que no quiero Legolas. Pero no soy una cobarde, y no los dejare," prometió.

"Puedes ir por ayuda. Busca el palacio de mi padre y trae ayuda," sugirió dispuesto a intentar cualquier estrategia para convencerla.

"Si escapo ellos esperaran eso. Todos ustedes estarán muertos o a medio camino hacía Mordor antes de que pueda conseguir ayuda. Tú lo sabes. Por favor no me pidas que les traiga la muerte a mis amigos. Si tenemos la oportunidad, nos iremos todos juntos." Ella no cambiaría de opinión. No aceptaría el sacrificio de otro amigo por ella. No otra vez. No esta vez.

"Atavus no podemos soportar verlos torturarte otra vez. Mientras dormías anoche, decidimos no dejar que sucediera de nuevo." Legolas admitió sus planes.

"No es tu decisión, no es de ninguno de ustedes. Si no pueden soportar mirar entonces cierren sus ojos, pero no crean que voy a dejar que se sacrifiquen a si mismos para que yo sienta menos dolor. Yo hice una tolerancia a ese tipo de tratamiento en Mordor. Puedo soportar hasta que podamos escapar todos juntos. No más discusión. No les hará ningún bien." Sabía que sus palabras eran duras, pero no cambiaría su forma de pensar acerca de eso.

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Fueron atados a los árboles como la noche anterior. Legolas había empezado a resistirse pensando que talvez ella haría como él le había dicho una vez que el hubiera llegado el momento, pero en vez de eso ella solo se sentó junto a un árbol y espero a su turno de ser atada.

Como antes, vieron a los orcos comer y beber más de esa fuerte cerveza con sangre. Al menos esa noche les dieron un poco de agua. Estaba agria, pero ayudo a sus labios resecos y a sus gargantas secas.

La noche anterior Atavus había estado nerviosa y asustada, preguntándose que le harían, pero por alguna razón se sentía completamente relajada y calmada. Se dio cuenta que estaba pasando. Cuando había sido una esclava había pasado tanto dolor y tormento que había crecido acostumbrada a eso. Ella lo esperaba. Era como si se hubiera auto-condicionado para el maltrato. Durante los treinta y dos años que fue libre había perdido ese condicionamiento. Ella se había desacostumbrado a el. Pero durante su viaje ella había repasado cada instante de tortura al que había sido sometida alguna vez, una y otra vez en su cabeza, endureciendo su corazón y su alma de nuevo.

Cuando Uglúk vino por ella de nuevo no se resistió ni dijo nada para provocar al orco. Solo lo acepto. Con fría determinación espero a ver que juego quería jugar esa noche.

"¿Por qué estás tan callada Retroceso?" le preguntó. Él sabía que ella odiaba ese nombre pero su expresión no cambió.

"Solo has lo que sea que vayas a hacer," respondió mirando al frente. Él reconoció la mirada en sus ojos. La recordaba de cuando ella era una esclava. Sería más difícil de romper ahora, pero se prometió romperla.

"Ah, ah, ah, aún no sabes las reglas para esta noche," dijo con esa sonrisa malvada que ella tanto detestaba. "Anoche te dije que hoy te oiría gritar, pero he cambiado de parecer. No quiero oírte gritar. Quiero oírte rogar."

"Yo no ruego," dijo sin ninguna emoción.

"Oh, esta noche lo harás. No solo me rogarás que deje de lastimarte, pero también les rogarás a ellos que te ayuden," dijo señalando a los otros cautivos. "Vas a ver que voy a golpearte hasta que ruegues. Si ruegas me detendré y dejare libre a uno de ellos para que cure tus heridas. Mientras más tiempo estés callada, más te golpearé." Él sabía que ella se sentiría avergonzada si tenía que rogarle que parará, pero ella se sentiría peor si tenía que rogarle a sus amigos que la ayudarán El orgullo era algo que nunca había sido capaz de vencer.

Ella solo sacudió su cabeza y no dijo nada. Así que empezó. Él enterró su puño en su estomago, lo que le causó que se doblara por el dolor. Inmediatamente pegó su espalda golpeándola contra el piso. Entonces procedió a patear partes estratégicas de su cuerpo. Nunca la golpeó en la cabeza, no queriendo que cayera inconsciente. Ella sostuvo sus costillas y se concentro en un pensamiento. Lo único que la sostuvo todo el tiempo que fue esclava. Lo dijo una y otra vez por su mente, como diciendo un mantra. Estaba viva y viviría otro día, y talvez al día siguiente mataría un orco. Sabía que era un pensamiento destructivo, pero siempre había funcionado y funcionaría ahora. Pensó en matar orcos y como siempre, este trajo una sonrisa a su rostro. Uglúk no vio la sonrisa, pero sus amigos la vieron y esta los perturbo.

"¿Así que ya estás lista para rogar?" preguntó el orco poniendo un pie sobre su espalda, hundiéndolo en ella.

Ella no dijo nada, pero un suave gruñido dejo sus labios. "No aún, ¿eh?" Decidió intentar con otra estrategia y la puso boca abajo así que él pudo sentarse a horcajadas sobre su espalda. Tiró de su cabello jalando su cabeza hacía arriba para que ella viera a sus amigos. Su peso estaba sacando el aire de sus pulmones pero no dijo nada. Él sacó su cuchillo y se inclino hacía el frente, sacando un poco de presión de sus pulmones. Quería que ella pudiera ser capaz de hablar. Estaban mirando a sus amigos. Él disfruto las expresiones de sus rostros al mirarle jugar. Entonces uso la daga para hacer un corte de su oreja a su barbilla. La sangre empezó a correr libre. Ella contuvo el aliento, no esperaba eso. "Tal vez deba cambiar tu apariencia un poco. Dudo que aún con tus habilidades curativas tu oreja vuelva a crecer si te la corto." Ella vio las miradas aterrorizadas en los rostros de sus amigos, pero lo bloqueó imaginando que hundía la daga en el corazón del orco.

"Saben chicos, no creo que ella vaya a rogar no importa cuantas partes de su cuerpo le quite," dijo hablándoles a los cautivos. "Y yo quiero oír ruegos. ¿Alguno de ustedes rogarán por ella?" pregunto formando un nuevo plan diabólico. Decían que los orcos son criaturas tontas, pero en el caso de este le había dando un intelecto excepcional cuando venía el momento de torturar.

Ninguno dijo nada. "No," dijo y atrajo el cuchillo hacía atrás, cortando su hombro y bajándolo lentamente a su codo. Ella hizo una mueca de dolor pero no dijo nada. "A ninguno de ustedes les importa lo suficiente como para rogar por ella.

Todos ellos querían rogar por ella, pero sabía que no pararía si lo hacían. El orco decidió intentar algo más. Se puso de pie jalándola con él y se acercó a los cautivos. Primero la hizo arrodillarse frente a Elladan. El se arrodillo a lado empujándola hasta que estuvo a menos de dos pies de la cara de Elladan. "Mírala. ¿Dónde debería cortarla ahora?" se burló de Elladan. Ella miró en los ojos de Elladan y sacudió su cabeza ligeramente, dejándole saber que no quería que respondiera. Él bajó la mirada sin hacer ruido. "La pierna, ¿eh? Bueno, fue tu elección," dijo el orco usando el cuchillo para hacer un profundo corte a través de su muslo. Elladan vio la sangre manar de donde la pierna fue cortada. Contuvo el aliento y la miró a los ojos. Vio una chispa de dolor ahí, pero nada más.

"Okay, tú eres el siguiente," dijo tirándola de nuevo y llevándola a donde estaba atado Elrohir. "Puedo hacer esto toda la noche. Alguien rogará por ella." La hizo arrodillarse otra vez y le preguntó a Elrohir lo mismo que a Elladan. Sin embargo esta vez pasó el cuchillo por su estomago. La herida no era lo suficientemente profunda para perforar algún organo, pero la sangre fluía a una velocidad alarmante. Atavus empezó a sentirse ligera por la perdida de la sangre. El orco tampoco obtuvo ninguna respuesta de él.

"Chica, te repito que estos chicos no se interesan por ti en lo más mínimo. Creo que tal vez están disfrutando esto tanto como yo," susurró en su oído. Ella casi se rió por la mentira. Era tan ridícula, pero se mordió la lengua para no decir nada.

El siguiente elegido fue Aragorn. La empujó frente al humano, así que ella cayó sobre su estomago de nuevo. Él se estaba cansando del silencio. Se sentó sobre ella de nuevo y tiró de su cabello otra vez poniendo la navaja por debajo de su barbilla contra su garganta. "Okay, humano. Estoy cansado de este juego. Esta vez la matare. Tú puedes detenerlo con solo unas pocas palabras," Aragorn no podía creer lo que oía. ¿Realmente el orco la mataría?

"Atavus vio que estaba a punto de abrir su boca. "Piénsalo Estel, no puede matarme. Su amo me quiere viva," pidió con él.

"¿Pero, cómo sabrá mi amo que nosotros te encontramos?", el orco pensaba que la tenía ahí.

"¿No crees que alguno de tus hombres te traicionaría para tomar tu lugar? Si no, eres un estúpido," ella sabía que tenía razón. Él no podía matarla aún.

Cuando el pensó acerca de eso supo que ella estaba en lo correcto. Podía decir que el humano guardaría silencio. Así que en vez de cortar su garganta clavó la daga en su hombro girándola mientras la hundía. Ella no había esperado el dolor ardiente en su hombro. Aulló en dolorosa sorpresa.

"Bueno, al menos conseguí un pequeño grito de ti."

Pero él quería ver a los hombres romperse sobre ella, por lo que se movió hacía donde Legolas. Ella estaba preocupada por lo que haría ahora. Ella le miró a los ojos y dejó que sus emociones brillarán a través. Le rogó con los ojos que no hablara mientras sacudía su cabeza. No sabía como podía contenerse de gritarle a la bestia. Pero nada de lo que dijera la haría cambiar de opinión. Él la arrodillo frente a él, pero tenía una nueva idea. Llamo a dos orcos para que se acercaran. Hizo que ellos liberaran una de las manos de Legolas de los complicados nudos que lo ataban. El otro brazo aún estaba ajustado al árbol y las cuerdas lo rodeaban por su estomago y pecho, manteniéndolo pegado al árbol.

Pero podía ver que nada de lo que dijera la ayudaría. Hizo que se arrodillara frente a ella, pero tenía una nueva idea, les señalo a dos orcos para que se acercaran. Ellos liberaron uno de las manos de Legolas del intrincado juego de nudas que lo ataban. Su otro brazo fue sostenido firmemente contra el árbol, y cuerdas envolvían su pecho y estomago, manteniéndolo fijamente contra el árbol. Se había asegurado de que el elfo no lo alcanzará.

El orco pasó sus manos alrededor de ella, manteniéndola segura entre sus brazos, pero hizo algo un poco inesperado. Sujeto la mano del elfo con la suya, forzándolo a sostener el cuchillo en la mano libre y sujetándolo en la suya, así que el cuchillo apuntaba a Atavus. "Tienes un cuchillo en tu mano. ¿Eres lo suficientemente fuerte para usarlo para salvarla?", preguntó.

Legolas sabía que por la forma en la que estaba atado nunca podría alcanzar al orco. No tenía esperanzas, pero tal vez no. "Si no fueras tan cobarde me habrías desatado para que así esto fuera una verdadera pelea," le espetó al monstruo. Entonces miró horrorizado mientras los asombrosamente rápidos reflejos del orco llevaban la mano y el cuchillo al frente y abajo. La hoja hizo una cortada desde su hombro y hacía abajo junto a la clavícula antes de que pudiera reaccionar para alejarlo de ella. Sabía que si hubiera demorado unos segundos más el cuchillo habría terminado en su corazón.

Ella gritó esta vez, pero de rabia. La forma en la que el orco estaba usando a su amigo era más de lo que podía soportar. La bestia estaba lo suficientemente sorprendida como para ser atrapada con la guardia baja. Liberó su mano para resbalarla entre la de Legolas que sostenía el cuchillo, y entonces se giró entre los brazos del orco haciéndolo retroceder y aterrizando ella sobre la criatura. Trato de darle en el corazón, pero falló levemente y apuñaló su hombro. No pudo hacerle más daño pues varias manos orcas la alejaron y la apalearon brutalmente.

"Deténganse," ordenó el capitán. Se paró y sacó la daga de su hombro. Los otros obedecieron y la subieron para que se parara. Su adrenalina se había agotado y si ellos no la hubieran sostenido se habría derrumbado. "Fenómeno, es la segunda ves que me has sacado sangre y será la última." Se le acercó y la golpeó en el rostro, dejándola inconsciente en el acto. Los orcos que la sostenían la tiraron con los otros cautivos.

Aterrizó en las piernas extendidas de Legolas. Él uso la mano que tenía libre para acercarla a él, acunando su inmóvil figura. Podía ver la sangre goteando de la herida que había sido obligado a hacerle. Sentía un profundo dolor en su corazón que nada podría sacar. "Lo lamento mellon-nin," susurró.

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Nota de la traductora (si es que todavía no ha huido):

— No, todavía no huyo... –dice Ghani acercándose a la computadora con cara de culpabilidad.- Pero debería haberlo hecho... –susurra viendo las miradas asesinas de varias lectoras.

¡Nah! Ni que te fueran a hacer algo... –dice cierto subconsciente metiche dándole otro sorbito al café.- Pero sería divertido que lo hicieran. nn

— Bueno, ya ven como me quiere mi subconsciente... Pero continuando con lo nuestro... les comento que fue culpa del colegio que no pudiera traducir mucho en estas últimas semanas... En verdad, me están explotando (T.T). Pero aprovechando el feriado del Día de los Difuntos, termine de traducir este capi para ustedes. Espero que después de los exámenes (que son la próxima semana) pueda traducir otro más, o a ver como me las apaño.

Pero ya saben a quien culpará si no lo hace...

— ¡Oye! ¡Que en verdad me están explotando! Intenta leerte vos ese libraco y hacer una monografía en menos de 15 días... –Ghani resopla molesta,- Y ahora me espera ese otro, el Ensayo de la ceguera de José Saramago... Del que también tengo que hacer una monografía (;;)

A mi me gustó el libro...

­— A mi también, pero no me gustan las monografías... (¬¬)

En todo caso... Esperamos que les haya gustado el capítulo y a pesar de que esta niña horrenda no se merece ni un review, por favor dejen uno contándonos que les pareció, ¿si?

— Muchas gracias por seguir leyendo y por los reviews que han dejado.

Cuídense mucho, ¡un beso enorme para todas!

— ¡Namarië!

Atte. Ghani y su loco subconsciente

Respuestas a los reviews:

Hada: ¿Te gusto? Pos, un poco sádico si fue... (pensativa sigue escribiendo) Y vas a ver como se... (recibe un sape) ¡¿Qué! (Les vas a contar más de lo debido, so-bruta) ¬¬ Vale, casi la friego, pero tenías que pegarme? (Nopes, pero es divertido) Maldición... Bueno, en todo caso... Ya viste que si hay otras de tortura, inclusive, hay más después de esta. Espera y verás, mellon-nin Gracias por el cumplido, otro beso para ti! Nos vemos al rato!

P.d: Saludos a estrellavieja!

Walkyria: Aiya! Pos yo estoy bien, algo ocupada por el cole, pero bien... Además mañana (¡Ya pasó la medianoche, so-despistada!) Bueno, hoy tengo fiesta y va a tocar una banda en el bar Jusjusjus... Y bueno, ya que estas insensibilizada, no creo que tengas problemas cuando torturen a los elfos, ¿o si? (¡So-mensa! Que eso era para que si les diera de golpe y porrazo... ¬¬) Bueno, no importa... o si? nnU Besos a ti tm! Ciao!

Ninde: Me alegro que estés contenta con el capi y que puedas tener un lugar donde leerlo (lo dice porque ella se muere sin un computador) Seee... Me he hecho tecnología-dependiente u.u ¿Pero que le voy a hacer si me gusta así? 0.- Y bueno, mis bebés (Tradúzcase: Ell y Ro ¬¬) son muy inteligentes o (Lo dice porque los quiere muchisimo... Nada más) Sape, que a vos también te quiero y no sé porque (¿Por que soy increíblemente encantadora?) xD Ya quisieras... En todo caso, muchisimas gracias por los ánimos, un besote y un abrazote para ti también... Ciao é baci!

Jix: Hola querida, bueno, no tengo nada contra el slash, si a alguien le gusta: bien por esa persona. Solo creo que es bueno avisar antes de que se trata el fic, además, creo que el respetar los criterios de los demás es importante. No creo que la violencia ni nada por el estilo solucione nada, cada persona tiene su forma de pensar y si quieres que te respeten a ti, es necesario que te respeten (Y para que veas que no es nada contra el slash, este fic ni siquiera tiene romance entre los personajes y nosotras somos un par de románticas... Solo ve los fics de esta mujer) Solo quise traducirlo porque me encantó la trama, y te apuesto que hay fics fantásticos entre los slash, pero si has leído mis notas de traductora, sabrás que ni siquiera tengo tiempo para leer todos mis favoritos ;; (Lo sentimos mucho, Melissa ;;) En todo caso, si quisieras discutir el tema, puedes escribirme a mi mail gea279 o ghani-chan, ambos son hotmail, (si escribes a ghani-chan te recomiendo que le pongas el titulo sobre lo que se trata, es un mail un poco... bueno, esta un poco copado como para charlas u.u) Un beso, hasta pronto!

P.d: A mi hermana menor le gusta el slash, a mi nee adoptada también y tengo varias amigas a las que les gusta, y tengo la fuerte sospecha de que mi alguien a quien quiero mucho es homosexual, ero no lo sé a ciencia cierta, en todo caso, ¿no crees que eso me obligaría a ser un chance más tolerable si fuera homo fóbica, en el caso que lo fuera?