Ahora es cuando las cosas se ponen interesantes B )

THE LABYRINTH – CHAPTER 2

Daniel despertó en un lugar oscuro. Tanteando, logró descubrir que estaba encadenado a una tubería. Se puso de pie y buscó a oscuras un interruptor. La sensación que sentía y el extraño olor de aquel lugar le resultaban familiares. Cuando lo consiguió, las luces se encendieron de repente, de una forma que él ya había visto.

- ¡No¡Otra vez aquí no!

Estaba en el mismo baño al que había llegado con Amanda, aunque esta vez había frases escritas en las paredes y en el techo. En el suelo estaban los cadáveres que las dos personas que ya había visto, el de Xavier y… el de su padre.

- ¡No puede ser¡¡No por favor¡¡No puede ser mi padre!

De sus ojos brotaron lágrimas. Llorando descubrió que en una de las esquinas estaba Kate, encadenada igual que él

- ¡Kate¿Me oyes? No puedes estar muerta tú también

Cogió unos trozos de cerámica del suelo y se los lanzó. En el segundo intento le dio en la cabeza, haciéndola despertar.

- ¡Mierda¿Dónde estoy?

Vio a Daniel llorar. No contestaba. Se limitó a seguir su mirada. No pudo reprimir un grito cuando vio a Eric.

- ¡Dios mío¡Esto está lleno de cadáveres!

Fijándose en el de la esquina que tenía a su lado, observó detenidamente

- ¡No¡Creo que ese es Adam!

Los dos habían perdido de repente la esperanza de encontrar a salvo a sus familiares.

- Todos tienen que haber tenido una muerte horrible

- No me puedo creer que encerraran a mi padre aquí cuando intentaba encontrarme

- Lo siento mucho. De verdad. Yo apenas reconozco a Adam.

- Bueno, si esto es lo que yo me temo, tendremos que salir pronto de aquí

- ¿Es esto un juego de Jigsaw?

- Me temo que sí

- Mis peores pesadillas se han cumplido. Seguro que no tenemos ninguna oportunidad

- Sí que la tenemos. Se puede sobrevivir

- Pero no es seguro

- Habrá que intentarlo. Primero habrá que buscar algo que nos dé la pista para salir. No se puede perder la esperanza

Kate se sentó y descubrió a su lado un sobre en el que estaba escrito su nombre

- Aquí hay un sobre con mi nombre

- Ábrelo

Dentro encontró una grabadora, una llave y un walkie-talkie. Intentó abrir las cadenas con la llave, pero fue en vano.

- Dudo que sea tan fácil

Tiró la llave en el suelo y cogió la grabadora. Cuando le dio al play la voz retumbó en el baño.

"Hola Kate. Seguro que te estás preguntando dónde estás. Creo que Daniel te lo puede decir. No te diré por qué estás aquí. La X te enseñará la solución. Tu objetivo en este juego es dar pistas a Daniel sobre el camino que tiene que seguir. Las pistas están por toda la habitación. Date prisa, o estas puertas se cerraran para siempre, contigo dentro"

- No lo entiendo. ¿Este es el baño al que me dijiste que habías llegado?

- Sí. Es este… Yo tengo que tener otro sobre

En su bolsillo, encontró su sobre, con una cinta, un llavero lleno de llaves y otro walkie-talkie.

- ¿Para qué serán los walkie-talkies?

- Todavía no lo sé. Pásame tu cinta. Así nos aseguramos de que la grabadora no se rompa. Sería lo último que querría en este momento.

Daniel le lanzó la cinta. Kate la puso dentro de la grabadora.

"Hola Daniel. Me imagino que te haces una idea de donde estás. Ya estuvimos aquí una vez. Pero eso ahora no viene al caso. Tú sabes por qué estás aquí. Busca en tu interior la respuesta. Una de esas llaves abre tus cadenas, pero no las de Kate. Kate tiene una llave especial que tú deberás encontrar por ella. Te doy dos horas. En la puerta hay un temporizador. Si en dos horas no consigues sacar a Kate de ahí, la puerta se cerrara para siempre. No se podrá volver a abrir. Para encontrar la llave tendrás que atravesar salas con diferentes objetivos. Imagínatelo como un laberinto. ¿Cuánto serías capaz de hacer por salvarla? Que empiece el juego"

- Esa voz me suena…

Recordó lo que había vivido hace unos meses en esa casa, y recordó la voz de Amanda.

- ¡Sé quien es! Se llama Amanda. No pensé que ella fuera Jigsaw. Maldita sea…

- ¿Amanda? Yo conocí a una chica llamada Amanda. No me acuerdo mucho de ella. La recuerdo con pelo largo. Fue novia de Adam hace un tiempo

- Tiene el pelo corto, y creo que era drogadicta. Mucho antes de todo esto fue víctima de los juegos de Jigsaw, pero por lo visto ha pasado al otro bando

- Creo que la Amanda que conocí también tenía esos problemas. No puedo creer que sea ella. Pensaba que Jigsaw era un hombre.

- Yo también. Debemos darnos prisa. Debo buscar la llave y salvarte.

- Y aquí yo soy la inútil, la que tiene que ser rescatada, la que no puede hacer nada por sí misma.

- Ahora mismo en lo único que puedes ayudarme es en las pistas

- Está bien. Date prisa, por favor

Daniel probó a abrir las cadenas con todas las llaves. A la novena llave consiguió liberarse.

- Bien. Ahora buscaré la llave. Me llevaré todas estas llaves y el walkie-talkie.

- Espera. ¿Y si es una trampa¿Y si no hay llave que me quite estas cadenas¿Y si me quedo encerrada para siempre?

- Seguro que hay llave y no te quedarás encerrada aquí, te lo prometo.

- Ten cuidado

- Volveré

Daniel salió de la habitación y recorrió el pasillo. La trampilla por la que había bajado hace tres meses estaba cerrada, así que tuvo que buscar otra entrada. Al final del pasillo, descubrió una puerta cerrada. Sacó las llaves e intentó abrirla. Esta vez le costó más, necesitó 14 intentos para encontrar la llave correcta.

- Kate, voy a entrar¿me oyes?

- Sí, perfectamente

Abrió la puerta y se encontró con una habitación con las paredes verdes. El suelo estaba lleno de cristales rotos. Al otro extremo había otra puerta cerrada. Daniel estaba descalzo.

- Dios, es imposible caminar por aquí. Está lleno de cristales.

- ¿En qué te puedo ayudar?

- La habitación es verde, busca un texto que haga referencia a cristales

Kate buscó en el techo y, justo encima de su cabeza, encontró un texto pintado en verde

- Aquí esta: "Ninguna de tus llaves sirve en la puerta del final/Debes encontrarla entre los cristales del suelo/Dar un paso aquí es mortal/Date prisa, no sobra el tiempo"

- No voy a poder caminar después de esto.

- Ánimo. Seguro que puedes.

Las palabras de Kate le alentaron. Daniel puso el primer pie en el suelo de esa habitación. Algunos cristales se le clavaron.

- Debo encontrar la llave rápido. Esto es insoportable.

Tras un par de minutos caminando y rastreando con las manos el suelo, encontró la llave. Se dirigió a la puerta, la abrió y cayó en el suelo limpio. Dolorido, se quitó los trozos de cristales que habían quedado clavados en sus manos y sus pies.

- Daniel¿estás bien?

- No creo que me pueda poner en pie. Tengo los pies ensangrentados. Incluso hay cristales que se han quedado dentro de las heridas.

- Ojalá te pudiera ayudar. Sólo estoy aquí para estorbar.

- Al contrario. No podría haber descubierto lo que había que hacer si tú no estuvieras.

- Sigo pensando lo contrario

- No lo esperaba de otro modo

No quería mostrar su preocupación por lo que pasaría si le ocurriera algo y Kate no pudiera salir.

- Solo quiero pasar la siguiente sala rápido. Aunque no creo que sea peor que la anterior.

Daniel estaba en un pasillo que terminaba en una puerta cerrada, para variar. A cada paso que daba era como si los pies le ardieran. Cuando estuvo delante de la puerta volvió a sacar el montón de llaves y no tardó demasiado en encontrar la correcta. Esperaba que la segunda sala fuera más fácil.

Cuando abriera la puerta descubriría que Amanda le estaba poniendo las cosas difíciles.

Fin del capítulo. Reviews!