Muy bien dicen que estas épocas son un poco flojas, pero no importa, yo me estoy divirtiendo de lo lindo al escribir esto. AVISO: Todas las personas pueden dar recomendaciones para los retos, el único requisito es que tienen que ser humillantes xD. Este cap va dedicado a Neko-ili porque fue la única que dejó review en el cap anterior, ¡muchas gracias!
Nota: Beyblade y sus personajes no me pertenece, le pertenece al señor Takao Aoki. Porque si fuera así, usaría a Kenny, Miguel y Emily para que hagan mis tareas, a Rei para que cocine, a Max lo vestiría de bebe y lo cuidaría, a Tyson y a Daichi para que limpien mi casa y vendería a Kai a las fanáticas locas y así ganaré mucho dinero –risa malvada-… pero todos sabemos que es imposible. Sin embargo, todo lo ajeno a la serie me pertenece a mí, menos Ileyse, Pyro y Fenrir, que pertenecen a sus respectivos dueños.
El chico sacudió su cabeza e hizo girar la botella, provocando que todo el mundo se quedara en silencio nuevamente.
Cap. 5: El Amor es Ciego… muy Ciego:
La botella dio vueltas y vueltas, Kenny se quitó los lentes por un momento para limpiarlos, al parecer tenían polvo. En eso la botella se detuvo.
"Vaya, que sorpresa."
"Oh, Dios…"
"¿Quién es?" Preguntó Kenny.
Todo el mundo se volteó a mirar al chico miope.
"No me digan…"
"¿Verdad o reto, Kenny?" Le cuestionó Brooklyn mientras le sonreía.
"En serio, amigo. La cara se te va a quedar así…"
El joven de lentes decidió ser valiente por primera vez en su vida. "Re…reto." Respondió, tragando saliva.
A Kenny lo empujaron fuera del circulo pero trató de escuchar lo mejor posible las ideas que intercambiaban aquellos engendros de Satanás… digo, adolescentes.
"Oigan, ¿y a dónde se fue Pyro?"
"Que raro, estaba aquí hace un momento."
"¡Lo sabía! ¡Liika, tu casa es la puerta a la dimensión descosida!"
Liika le pegó a Fenrir en la cabeza con un abanico de papel que nadie sabe de donde sacó. Mientras tanto, Pyro se encontraba en la acera frente al edificio con unos lentes oscuros, aparentemente esperando a algo o alguien. Un automóvil negro se detuvo frente a él, el vidrió empañado se deslizó hacia abajo para revelar a tres personas vestidas de negro y con lentes oscuros: una mujer blanca de cabello corto, un hombre moreno y calvo, y un hombre muy apuesto parecido a Keanu Reeves.
"¿Estás preparado para salvar a Sión, Pyro? Tú eres el Elegido" Le preguntó el moreno.
El hombre parecido a Keanu Reeves vociferó. "¡¿No que ese era yo!"
"Cállate."
"Como sea." Dijo Pyro, encogiéndose de hombros y entrando al automóvil, el cual se dirigió hacia un camino que realmente no nos interesa en estos momentos.
Volviendo al tema de la historia…
"Hagamos que Kenny…"
"¡No!"
"Max, es sólo un juego."
"¡Pero eso es demasiado! Deberíamos hacer que…"
"¡Ay, Maxie! ¡Me encanta como piensas!"
"¡Quítate de encima de mí, Daichi!"
"Y después me preguntan por qué no me agrada el enano…"
"Parece perro en celo…"
"Así que Kenny…"
"¡Sí!"
"En verdad es una buena idea."
Kenny vio al grupo descomponerse y luego a Brooklyn dar el paso al frente.
"Kenny, queremos que "te tires" a una chica, como tu reto." Declaró el pelirrojo, incluso haciendo la seña de las comillas.
"¿Tirarme qué? ¡Yo jamás sería capaz de tirarme encima de una chica!" Exclamó el pequeño de lentes.
"¿En verdad es tan inocente?" Preguntó Julia.
Los Bladebreakers asintieron al mismo tiempo.
"Lo que queremos decir, Kenny…" Rei se aclaró la garganta. "Que tienes que encontrar a una chica y… eh…"
"'Tirarte a una chica' es acercarte a ella y decirle algo como: Oye, cariño, ¿qué tal si tu y yo nos vamos por ahí a hacer algo interesante?" Comentó Michael. "Demonios, jamás pensé encontrar a alguien que no supiera que es 'tirarse a una chica'."
"¿Hacer algo interesante?" El pequeño castaño ladeó la cabeza. "¿Hacer qué?" Era obvio que Kenny no tenía una vida amorosa… creemos que ni siquiera una vida social… o vida en sí.
"¡Sólo ve, encuentra una chica y pídele que tenga una cita contigo!" Le gritó Kai, al momento de arreglarle los lentes. "¡Y asegúrate de decirle 'cariño', 'morena' o 'cosita sexy' mientras le hables!"
"Pero… sería un maleducado…" Murmuró el enano al momento en que Kai lo lanzó de las escaleras del apartamento. Todos estaban amontonados en la puerta para ver el espectáculo.
"¿Desde cuándo Kai sabe cómo conquistar chicas?"
Ileyse se encogió de hombros.
Tan pronto como Kai regresó al apartamento, Tala le preguntó. "¿Lograste ponerle la cámara?"
"Sí… y por favor, quítate eso que te estoy perdiendo el respeto."
"Vete al diablo, Hiwatari." Espetó el pelirrojo mientras preparaba su laptop. Todos se acomodaron para ver lo que aparecía en la pantalla. Era la calle, justamente el trayecto que Kenny estaba recorriendo. Una persona se encontraba a la distancia, por su apariencia era una chica, y el niño de lentes decidió acercársele y salir de su reto. Conforme lo hacia, la voz y la imagen de esa persona se hacia más clara y Tyson, Rei, Max y Daichi palidecieron.
"No…"
"Mentira…"
"Pobre Kenny…"
"Vaya, vaya." Dijo Brooklyn. "¿Acaso esa no es Ming Ming?"
Liika hizo muecas de querer vomitar.
"¿Quién es esa?" Preguntó Julia.
"Una compañera de mi equipo."
"¡Ah, maldito!" Gritó la copia barata de Britney Spears (o por lo menos así le decían todos los presentes). "¿Qué crees que estás haciendo?"
Kenny estaba tan asustado que no podía darle sentido a sus palabras. "Em, disculpa… cosita sexy… ¿quieres que nos tiremos juntos?"
La cara de la cantante se puso roja del enojo. "¡¿Quién te crees que eres para llamarme 'cosita sexy', maldito cuatro ojos! ¿Y tirarme contigo? ¡PERVERTIDO!" Lo bueno era que la cámara era muy pequeña y estaba en los lentes del chico, porque sino la situación hubiera sido mucho más incomoda.
Kenny dio un paso atrá. "Oye, no estaba tratando…"
"¡Auxilio, violador!" La chica comenzó a gritar histérica.
Miope y despistado como lo era, Kenny sabía que las miradas que estaba recibiendo de las personas en la calle no eran precisamente alegres, así que hizo lo más inteligente y salió corriendo, seguido muy de cerca por la cantante que seguía gritando que la quería violar. Como estaba tan asustado, el pobre no le prestó atención a lo que tenía enfrente y…
"¡Un hueco! ¡Cuidado Kenny!"
"¡Aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaahhhhhh!"
"¡Te lo mereces, enfermo sexual!" Vociferó la voz de Ming Ming, aunque ya no podía ser vista por la cámara.
¡Splash!
La pantalla quedó negra.
"Wacala, aquí abajo huele feo…"
Todos los presentes pusieron cara de asco, ya que sabían que Kenny había terminado en el alcantarillado y, tomando en cuenta que se había caído, estaba todo empapado. Que bueno que la cámara era a prueba de agua.
En algún lugar del mundo, Boris se encontraba quejándose y refunfuñando que aquellos niños se estaban aprovechando de sus hermosas creaciones.
Splash… Splash… Splash…
Por varios minutos, nadie vio nada en la pantalla. El sonido de Kenny paseando por el alcantarillado era la única señal que tenían de que el aparato aún servía y que el pequeño se encontraba con bien.
¡Thunk!
"Ouch… creo que me golpee con algo." La luz por fin iluminó la cámara. Cualquiera que estuviera viendo estaría contento de que el joven Kenny haya logrado salir del alcantarillado, pero lo que lo recibió en la calle los hizo desear que se quedara más tiempo caminando entre los desperdicios.
"¡Uy! ¿Pueden creer que alguien así haya tratado de abusar de mí?" Kenny trató de regresarse lo más silenciosamente posible, pero ya era muy tarde. "¡Ah! ¡Es el pervertido!" La escalera que había subido sí llevaba a la calle. Desafortunadamente llevaba a la acera y justamente encima estaba Ming Ming con sus amigas/integrantes del grupo musical.
"¡Nos quiere ver la ropa interior!"
"¡Yo no me puse!"
"¡KROSHER!"
Y como la suerte es tan buena, el chico musculoso no estaba tan lejos de ahí.
Kenny podía ser despistado e inocente, pero tonto no era. Antes de que Krosher pudiera atraparlo para romperlo en mil pedazos, el chico salió rápidamente del hueco, (y pasando entre las piernas de varias jovencitas) trató de hacer su escape.
"¡Regresa aquí!"
¡Wham!
¡Crash!
Kenny se tropezó con algo y cayó de cara, rompiendo sus lentes y el visor de la cámara.
Crack
Los perseguidores del miope pisaron los lentes y lo último que escuchó el grupo antes de que el artefacto dejara de funcionar fue el sonido de las bocinas de un auto, un freno chillando y los gritos de un chico muy desafortunado.
"¿Continuamos?" Cuestionó Fenrir con la botella en la mano mientras trataba de sonreír lo más inocentemente que podía.
Todos asintieron y dejaron la laptop de Tala a un lado, como si lo que acaba de ocurrir no tenía nada que ver con ellos.
Continúa…
Bien, hasta aquí los dejo. Locura total… pobre Kenny. Como sea, nos vemos en el próximo cap!