24 de Diciembre de 1980 : ¡Nochebuena!

Nat se despertó y por unos momentos no supo localizarse. Eso era... ¿el comedor? ¿Se había dormido en el sofá? Se incorporó un poco y entonces vio a alguien a su lado... Alguien que le había estado ofreciendo su hombro como almohada durante toda la noche...

¿¡Había dormido encima de Sirius? Se apartó de golpe despertando al animago en el proceso. El chico se la quedó mirando al tiempo que se rascaba confuso la cabeza.

"¿Hemos dormido aquí?" – terminó por preguntar.

"Eso parece." – dijo Nat, levantándose como si el sofá quemara – "Perdón por... Bueno, en fin... Por... Dormirme encima de ti. Debiste haberme dicho algo..."

"Ah tranquila, si yo me he dormido es que estaba cómodo y a gusto." – sonrió él.

Nat, por alguna razón, notó que las mejillas le ardían, y para que Sirius no lo notara se escapó hacía el baño, con la excusa de irse a dar una ducha antes de ir a trabajar.

O.O.O

A la hora de comer, Nat fue directa a casa de Lily. Había decidido que era la más adecuada para contarle lo que le estaba sucediendo... No por nada estaba casada con el mejor amigo del causante de su estado de histeria permanente...

La pelirroja se la quedó mirando con las cejas alzadas cuando la encontró al otro lado de la puerta.

"¿Puedo pasar?" – preguntó ella al fin.

"Si... Si claro." – asintió Lily.

En el comedor estaba el pequeño Harry, que soltó un par de berridos para llamar la atención de la recién llegada. Nat le hizo un par de mimos para luego sentarse en el sofá y mirar a Lily con cara preocupada.

"Bueno, ¿qué ha pasado?" – preguntó ella con impaciencia.

"Nada grave... creo..." – contestó Nat, dubitativa – "O bueno... Tal vez si... Alex diría que es una catástrofe."

"¡Nat me estás poniendo de los nervios! ¡Dime de que se trata!" – chilló la pelirroja perdiendo los nervios.

"Me gusta Sirius... Y tengo miedo de averiguar hasta que punto." – declaró ella cerrando los ojos, como si fuera la peor noticia que hubiera dado en su vida.

Sólo se atrevió a abrirlos cuando oyó a Lily reír.

"Si... Cuando te cuelgas por uno de ellos parece la fin del mundo... Pero cuando descubres su lado tierno..." – la chica suspiró y miró con cariño a Harry – "Si te gusta Sirius, adelante, no será ni tan bueno como tu crees ni tan malo como Dawn y Alex querrán hacerte creer... Pero valdrá la pena."

O.O.O

Remus terminó de arreglarse la corbata mientras intentaba acordarse de porque exactamente había accedido a ir a la cena familiar de Dawn... Sabía que era una mala idea... Una muuuy mala idea ir a una cena familiar de una chica con la que no quería intimar... Pero ahora ya no tenía otra opción. Con un suspiró tocó el timbre.

Dawn no tardó en abrirle, y antes de dejarle pasar le susurró : - "Perdón por anticipado por todo lo que pueda suceder dentro..."

"No te preocupes, seguro que no será para tanto." – sonrió Remus.

Pero un rato más tarde, cuando, la abuela de Dawn esta vez, le preguntó que si iban a hacer oficial el compromiso con su nieta antes de los postres, pensó que si, que si que había para tanto.

"No abuela... Es que sólo somos amigos..." – aclaró Dawn por décima vez desde que habían empezado a cenar.

"Pues en mi época no se llevaban los amigos a las cenas de nochebuena." – sentenció la anciana. – "No señor."

Cuando por fin terminó la cena y Remus y Dawn salieron de la casa, el licántropo dejó escapar todo el aire que había estado acumulando.

"Lo... Lo siento." – dijo Dawn al final – "No tendría ni que habértelo propuesto..."

"No, no... yo no tendría que haber aceptado." – concluyó él. – "Esto es una cosa muy... muy de parejas y es normal que tu familia haya pensado cosas que no son..."

"No ya." – dijo Dawn, algo picada por esa respuesta. Vale que Remus no quería nada con ella... ¿pero hacía falta dejárselo tan claro? – "Si ya me quedó clarísimo en Hogwarts que no querías nada conmigo. Aquí la tonta he sido yo por haberme echo de nuevo ilusiones."

"No lo entiendes." – suspiró Remus – "No es por ti... Soy yo el problema."

"¿Alguna otra frase que no sea tan usada por favor?"

"Sé que suena típico, pero..."

"¡No es que suene típico! Es que resultas patético intentando darme una excusa para quedar bien... De verdad, podrías huir como la última vez..."

"Oye, si la última vez hice lo que hice fue por la misma razón." – respondió Remus, ahora un tanto enfadado por la reacción de la chica cuando él sólo estaba tratando de hacer las cosas pensando en su bien.

"¿Y que razón es esa?" – preguntó Dawn, cruzándose de brazos.

"Eso no es de tu incumbencia..." – murmuró Remus, que se había puesto nervioso de golpe.

"Ya, claro..." – dijo ella con escepticismo – "¿Sabes lo que te digo? Que eres un completo gilipollas... Y que no voy a perder más el tiempo contigo."

"No... Soy algo mucho peor que un completo gilipollas..." – murmuró él – "Sólo espero que comprendas, aunque te cueste creerlo, que estoy haciendo todo esto porque te quiero... Te quiero desde hace dos años... Desde Hogwarts... Y créeme, estar alejada de mi es lo mejor que te puede pasar."

Dawn se había quedado de piedra... Sólo cuando vio que el chico se giraba para irse reaccionó : - "Pero... No lo entiendo Remus... ¡¿Si tu me quieres y yo te quiero a ti cual es el problema!"

"Ya te lo he dicho, el problema soy yo." – contestó sin detenerse ni girar la cabeza para mirarla.

Ella se adelantó unos pasos, lo tomó del brazo y le obligó a mirarla : - "Me da igual todo. Me da igual cualquier cosa que a ti te pueda parecer lo suficientemente importante para decidir que no eres lo suficientemente bueno para estar conmigo... ¡Me daria igual cualquier cosa! ¡Cualquier secreto inconfensable que pudieras tener por gordo que fuera! Yo solo quiero estar contigo..."

"¿Te daría igual incluso si te dijera que soy un licántropo?" – dijo él con suavidad.

La noticia le cayó a la chica como un balde de agua fría. Sin saber como reaccionar se quedó mirando a Remus con los ojos como platos, demasiado sorprendida para decir algo. Él le dirigió una mirada de resignación, giró sobre sus talones y se fue, esta vez sin que ella le detuviera.

O.O.O

Sirius volvió a cambiar de canal, asqueado. Navidad, navidad y más navidad... Y tooodo el mundo feliz y contento mientras él se moría de aburrimiento sólo en su casa.

Volvió a sonar el timbre. Ya era la quinta vez que los niños le tocaban el timbre para cantar villancicos, así que cogió el platito con bombones que tenía y se fue a abrir. Se quedó con el platito d bombones en la mano y con cara de bobo cuando descrubrió que no eran niños cantando villancicos, sino Nat, quien estaba al otro lado de la puerta.

"Feliz Navidad." – dijo ella con una sonrisa – "He pensado que estarias aquí solo y... bueno, la Nochebuena no es tiempo para estar solo."

"Creí que tu tenías cena familiar..." – dijo él, también sonriendo.

"Y la tenía. Pero me he ido antes... Y me he traido esto." – la chica extendió los brazos que tenía detrás de la espalda para mostrar una botella de champan y dos copas altas.

"Yo tengo el chocolate." – dijo él sonriendo, mostrando el platito de bombones.

"Champan y bombones? Me gusta la combinación."

"¿Y ya sabes lo que dicen? Que es algo bastante afrodisiaco." – dijo él, en tono insinuante.

"¿Ah si?" – contestó ella, siguiendole el juego – "Bueno, entonces mejor ¿no?"

Y Sirius, sin decir nada más se acercó a ella para besarla, cosa que a Nat le pareció perfecta.

O.O.O

Si, ya ya... Esto es del dia 24 y estamos a 27... ups no, 28 pq pasan ya de medianoche... Pero que quereis... Me ha costado más de lo que creía escribirlo. No me lo tengais en cuenta ¿vale? El cava me enturbia la mente xD En fin... Prometo que lo más pronto posible tendreis el dia 25 y ultimo subido ¿vale? ¡Felices fiestas!