Wolas! Bien... qué decir aki q no sepais ya? xD Ni la serie ni los personajes son míos (entonces todos mis favoritos habrían sufrido más... MUAAAAAHAHAAA! xDDDD y Roy no tendría tiempo d ir a trabajar... ù/ú). Para quien no lo sepa...:
Chuui: Teniente
Taisa: Coronel
Gomen ne: lo siento
Baaka (no se si lo puse xDD): idiota
Bien, no os aburro más n.ñ
"Amigo invisible" Militar
- ¿"Amigo invisible"¿Qué es eso? ooU -preguntó la teniente Hawkeye cuando Havoc le cuestionó si deseaba participar en dicho juego tradicional navideño.
- ¿No lo ha hecho nunca, teniente? -inquirió el militar divertido-. Verá, es algo muy sencillo… Yo, por ejemplo, anoto los nombres de todos nosotros en cada uno de estos papelitos -cogió de su escritorio unos pequeños pedazos de papel cortados torpemente y los extendió en la mesa de Hawkeye, anotando un nombre en cada papel-… y por último, Roy Mustang. Bien, pues ahora se doblan todos y…
- Vaya al grano, teniente Havoc, que hay mucho trabajo por hacer ¬¬ -contestó ella indiferentemente.
- Ah, sí… pues luego cada uno coge un papel al azar y, sin revelar el nombre inscrito en él, tiene que comprarle un regalo antes de cierta fecha que ya decidiremos más tarde…
- ¿Un regalo?
- Sí, pero no es preciso que sea nada especial… Un simple detalle n.ñ
La teniente permaneció pensativa unos instantes, aunque sin mostrar ningún gesto en su cara. Finalmente…
- De acuerdo u.u
- ¡Bien! -exclamó Havoc, dirigiéndose a continuación al coronel-. ¡Taisaaaa! Usted también participará¿no? n.ñ
- ¿Por qué he de hacerlo? ¬¬ -contestó Mustang secamente.
- UUUU¬¬……….. Si no participa no tendrá regalo ù.ú
- Me importa un rábano el regalo ¬¬
- ¡Oh, vamos! -insistió el rubio sacando un cigarrillo y metiéndoselo a la boca-. Gastarse sólo una centésima parte de su sueldo no le hará daño ú.úU…
- U¬¬…
Ahora los demás, Fury, Farman y Breda, también insistían.
- ¡Venga, taisaaa! ò.o
Pero el coronel sólo accedió cuando cierta teniente pronunció lo que él, aunque no quisiera reconocerlo, deseaba escuchar.
- Vamos, taisa, que no se va a morir por participar… ú.ùU
- …ùú… Maldición… ¡Vale, de acuerdo! Dame uno de esos malditos papeles U¬¬
El resto de sus subordinados se quedaron un tanto atónitos ante el repentino cambio de opinión de su superior, pero prefirieron no decir nada…
"Teniente Riza Hawkeye". Ese era el nombre que se hallaba escrito en el papelito que había cogido Roy al azar. Todos miraban disimuladamente a la persona que les había tocado regalar… Todos con disimulo excepto el coronel.
- òoU……… -él la miraba descaradamente pensando qué podría regalarle.
Llegó la hora de marcharse a casa y el coronel Mustang caminaba por las calles de Central City casi sin mirar adónde se dirigía; en su cabeza sólo habitaba un único pensamiento. Comenzó a hablar para sí mismo, en voz no muy alta para no despertar sospechas sobre su cordura.
- ¿Qué podría gustarle? Lo cierto es… que no sé nada de ella… ¿sus gustos? Ni idea. Tampoco conozco sus sentimientos… Ella es tan… fría… -una suave gota de lluvia mojó la nariz del coronel, seguida de varias más. Cuando quiso darse cuenta, se había detenido en su caminata. Miró hacia el oscuro y nublado cielo-. ¿Qué sé yo de ella?
Bajó de nuevo la vista e instintivamente se rodeó a sí mismo con sus brazospara cubrirse del frío. "Bah", pensó, "no es cuestión de complicarse la vida por un estúpido regalo… ù.u Además¡ni siquiera sabrá que he sido yo! Así que no hay por qué preocuparse, le compraré cualquier cosa ù.u ……… ò.ó ¡ya sé! Una funda nueva para su pistola!". Y con esos pensamientos metió las manos en sus bolsillos y se dispuso a seguir su trayecto felizmente.
- ¿Taisa? -oyó una voz femenina tras él; era la teniente.
- ¿Eh? Ah, eres tú, chuui… -puso su vista en ella y vio que sostenía un paraguas para protegerse de la lluvia.
- ¿Qué está haciendo por aquí todavía? Se va a mojar… -se acercó a él ofreciéndole el paraguas.
- Oh! No te preocupes, no me pasará nada por cuatro gotas… n.ñ
- Taisa, recuerde que bajo la lluvia usted es un completo inútil u.uU
- U¬¬…… Gracias por la aclaración, chuui.
Para la sorpresa del alquimista de fuego, ella sonrió ligeramente.
- ¿Adónde se dirige por esta calle¿Su casa no está por allí? o.O
- O.o… Cierto…
Lo cierto era que sin darse cuenta había cogido la dirección contraria a donde debía ir. Es más, se percató en esos instantes de que se encontraba extrañamente cerca de la casa de la teniente.
- Pues… debí equivocarme… hoy estoy un poco adormilado… n.ñUU
La lluvia comenzaba a hacerse más notoria y el coronel comenzaba a calarse hasta los huesos.
- ¿Adormilado? Pues yo lo vi normal ooU
- U¬¬
- Se está enfriando, Taisa, va a coger un resfriado… -comenzó ella a preocuparse.
Él sabía que sólo con su abrigo negro, ahora también empapado, no conseguiría librarse de un constipado.
- ¿Por qué no sube a mi casa? Allí se está mejor y le podría secar la ropa y darle un paraguas…
- Ah… no, gracias, no hace falta… -su subconsciente comenzó a cuestionarle el por qué de su reciente nerviosismo, pero no encontró respuesta.
- Taisa, si tiene que volver a su casa todo mojado cogerá una pulmonía… Además no está precisamente muy cerca de aquí, así que tardaría bastante…
- P-pero… óòUU
- ¡Nada más que hablar! Vamos ù.u
Y sin permitirle protesta alguna, se dirigieron a la pequeña casa de la teniente.
Diez minutos después se encontraba él dentro del aseo de la teniente, quitándose toda la ropa menos la interior. Ella tocó la puerta del baño desde fuera.
- Taisa¿ha acabado?
- Ah… sí, chuui, enseguida… ¿Ya has encontrado algo para ponerme mientras la secas?
- Sí, un pantalón vaquero… no sé si le estará bien.
- Es… ¿tuyo? ó.òU
- Tranquilo, es de hombre u.u
- Ah… vale, gracias -se puso una toalla para cubrirse la parte inferior y abrió la puerta, entregándole su uniforme a la mujer.
- Tome, Taisa -le dijo ella mientras cogía la ropa de Roy y le daba unos pantalones vaqueros de color oscuro.
Un par de minutos más tarde, se escuchó al coronel desde el cuarto de baño:
- ¡Chuui¿Seguro que son de hombre? Me están demasiado estrechos…
- Pues claro que son de hombre… Pero su antiguo propietario, aparte de ser incluso más joven de lo que yo soy ahora, era la mitad de corpulento que usted -contestó ella desde fuera comenzando a secar la ropa.
- ……… Chuui… ¿saliste con un hombre menor que tú? O.ó……
- ¬¬…… ¡Pues claro que no! Cuando salía con él, yo tenía 22 años, y él 24 ùúU
- Ahm… ¿y ya no estás con él?
- No. Desde que se fue hace tres de años no he vuelto a verlo, y si él no me llama para ver cómo estoy, no pienso llamarle yo para devolverle un pantalón ùú -hablaba más para ella misma que para el coronel, pero casi ni se dio cuenta. Hubo una pausa, y habló él.
- Chuui... ¿cuántos años tienes? oO
- 25... ¿Por qué lo pregunta¿Es que no lo sabía?
- No me acordaba ú.ùU
- Lo pone en mi ficha militar. De vez en cuando podría leerse las fichas de sus subordinados, Taisa ùuU
- òoU...
Poco después se encontraba él sentado en la alfombra del pequeño salón-comedor de la teniente, con el único abrigo de una buena chimenea y una manta rodeando su bien formado cuerpo, sin mencionar los pantalones extremadamente estrechos que le había dejado la teniente. Roy se entretenía mirando desde lejos las pocas fotos que su teniente tenía colocadas en las estanterías… tan pocas que podrían contarse con los dedos de una sola mano. Una era de Black Hayate con su dueña vestida de militar, y otras dos eran de su brigada: Hughes, Amstrong, Havoc, Fury, Breda, Farman, ella y el coronel. Y Roy alcanzó a ver que había otro porta fotos que se había caído sobre el estante.
- Debe haber tropezado con él sin darse cuenta… -pensó en voz baja, levantándose y poniendo bien la foto; para su sorpresa, en esta foto sólo salía él, ocupando todo el papel con su cara indiferente habitual.
- ¡Taisa! -exclamó Riza saliendo del aseo con la ropa seca de su superior en los brazos-. ¿Y-Ya ha entrado e-en calor?
Roy no supo por qué la teniente se había puesto tan nerviosa de repente. Sólo se la veía así cada mil años, no era nada normal en ella.
- Ah… sí -contestó él un tanto atónito, colocando bien el porta fotos, mirando de reojo a la mujer, quien contemplaba la foto con notable nerviosismo. ¿Era sido su imaginación… o eso que se hallaba en las mejillas de la joven era rubor? "Mierda…", dijo una vocecilla profunda en su cabeza, "Necesitas descansar un poco, Taisa, tu escasa cordura te empieza a jugar malas pasadas… úùU".
- T-tome, Taisa, su ropa… -dijo ella recuperando la compostura poco a poco, pero no lo suficientemente rápido, pues ya antes había reparado en el detalle de que su alfombra se encontraba un tanto desigualada, y al tropezarse con un doble del susodicho objeto e impedirle la ropa parte de visión, por poco cayó de boca al suelo, de no ser porque se encontró con los, insisto, bien formados brazos del coronel-. Ah… T-taisa… -cerró los ojos fuertemente, deseando que se la tragara la tierra.
"¡AAAH!", pensó la teniente, "¿Pero cómo puedo ser tan idiota¡Me he puesto nerviosa con una tontería y mira lo que ha pasado! ToT ¿Qué pensará él ahora…¡Pensará que soy una torpe!". Abrió los ojos y entonces deseó aún más desaparecer de allí, al ver lo extremadamente cerca que se encontraba de su superior, que la rodeaba ahora con sus brazos. La ropa, por supuesto, se había caído al suelo.
- ¿T-te encuentras bien, chuui? O/o -Roy tampoco había pasado por alto el detalle de la distancia, y no pudo controlar su mente cuando comenzaron a invadirla pensamientos un tanto… indecentes. Pero no se permitió hacer realidad ninguno de ellos. Tampoco pudo evitar pensar que, con otras mujeres, ese roce habría sido una enorme ventaja y una oportunidad que el coronel jamás desperdiciaría… pero Riza Hawkeye no era una mujer como las demás. Tal vez… fuera eso lo único que conocía de ella. Que era diferente.
Por supuesto, no iban a quedarse así eternamente, así que ella rápidamente se separó de él en cuanto pudo, agachando la cabeza sonrojada.
- G-gomen ne… T-taisa…
- N-no importa, chuui ù/u -Roy miró hacia otro lado intentando disimular el ligero rubor que ahora también se apoderaba de sus mejillas. Se colocó bien la manta que le cubría la espalda y cogió la ropa del suelo-. Voy a… a cambiarme…
Y sin decir nada más, volvió a entrar en el cuarto de baño dejando a Riza aún muerta de vergüenza en el salón. Cuando hubo recuperado la compostura, alzó la mirada hacia la foto causante de todo. Era su foto más preciada, la guardaba como si fuera un tesoro, siempre por delante de las otras. Ella misma no sabía la razón, o mejor dicho… no quería reconocerlo.
Poco después salió el coronel ya con su uniforme, poniéndose su abrigo negro, preparado para volver a casa, pues ya era bastante tarde y comenzaba a rugirle el estómago.
- Bien, chuui, ya va siendo hora de que me vaya… ùu
Ella estaba asomada a la ventana, comprobando que había dejado de llover.
- Vale… le he sacado un paraguas, Taisa, por si empieza a llover otra vez.
Ahora Riza actuaba como si nada hubiera pasado, intentando disimular su vergüenza. Si hubiese habido alguien más en la sala, no habría sospechado absolutamente nada, puesto que el coronel también hacía como si nada. Mejor así, pensaron ambos. Mejor así.
De camino a casa a Roy no le hizo falta abrir el paraguas, no volvió a llover. No podía dejar de pensar en todo lo que había ocurrido, y también en cosas más profundas. Por primera vez desde que la conocía se dio cuenta de lo necesaria que era ella para él, no sólo en su día a día, sino para su vida. Había podido comprobar alguna vez que otra lo importante que era ella en la oficina, pues cuando faltaba, aquello parecía un caos. Y Roy mismo habría muerto miles de veces de no ser porque ella siempre estaba allí. Se había acostumbrado a su presencia y el día que ella los dejara, él moriría. No por su falta de protección. Sino por pena. Se sentiría incompleto, como un pájaro al que le falta un ala.
Fue entonces cuando también se percató de que ella no era "diferente", como había pensado poco tiempo atrás, sino especial. Y que no se merecía un regalo cualquiera. Por una vez que tenía la oportunidad de complacerla en algo, no iba a desperdiciarla. Estaba decidido. Una persona especial se merece un regalo especial.
Continuará…
Bueno, en principio iba a ser un OneShot, pero decidí publicarlo aquí y preferí ponerlo en dos partes n.ñ No sé cómo se me ocurrió en realidad la idea de hacer este fic... simplemente, se me ocurrió o.oU Espero q os haya gustado esta primera parte y que también os guste la segunda y última! por supuesto, en esa otra vendrá la acción xDD
jA nE!
