Nota de la autora: Sábado, 31 de enero de 2006.
¡FELIZ AÑO NUEVO A TODOS Y TODASSSS! No sé cuántas veces os he felicitado ya, pero no me importa.
Bueno, aquí estamos de nuevo, subiendo el siguiente cap de la batalla final. No os pienso adelantar nada de lo que va a ocurrir aquí, ya lo veréis.
Recordad que aún quedan varios caps para que el fic termine, me encantaría que me diese tiempo a terminarlo antes de volver a Almería pero para eso, tendría que subir cap cada dos días o así, o sea el próximo sería el 3, el siguiente el 5, el siguiente el 7 y ahí me quedaría ya que el 8 vuelvo a Almería, aún así, me seguiría faltando un día para el último y definitivo, el epílogo. ¿Seríais capaces de esperar otra semana más (después del 8 de enero me refiero) hasta que yo subiese el epílogo? Supongo que sí pero…me da miedo de que perdáis el interés, sobre todo si por lo que fuese, no pudiese subir el epílogo en el finde después del 8 de enero y dejar pasar los días hasta poder subirlo… no sé, ya me diréis lo que sea.
Os dejo con el cap. Pero antes, música recomendada para este cap 38.
Música recomendada:
- Buffy the vampire Slayer: 1- Massacre, 2-Chosen (sobre todo esta pues es ideal para la batalla, tiene varios ritmos muy buenos), 3- Resurrection (when she was bad), 4-Angel waits. (Y cualquier otra tétrica o de tensión no nombrada aquí pero de esta genial banda sonora).
- 5- El último samuray: melodía 10: the way of the sword.
Si por ejemplo tenéis el señor de los anillos: cualquiera que sea de batalla u oscura, como por ej la que ponen siempre para los espectros del anillo, que además de súper tétrica, también es la mar de emocionante.
Simbología:
Guión y letra normal: diálogo de los personajes.
- Comillas y cursiva: pensamientos internos o conversaciones telepáticas.
- Guión y cursiva: Flashbacks.
- Negrita: intervención de algún otro personaje.
- Tres guiones detrás de algún signo: música recomendada. Primero os pondré tres guiones en una parte del cap, querrá decir que empecéis con la música de Buffy, (con toda la tétrica que tengáis, no sólo la que os he nombrado) luego os pondré otros tres guiones, eso indicará que cambiéis la de Buffy por la del último samurai, os recomiendo el orden que os he puesto antes en negrita. O sea: respecto a la de el último samurai, empezad con la melodía 10: the way of the sword, (Como es larga, os da tiempo a escucharla hasta terminar el cap, que ya lo he comprobado. Jijijijijiji).
Os aseguro que la música recomendada que os he ido nombrando en todos y cada uno de los caps publicados hasta ahora, ha sido usada por mí para escribir todos esos caps, sobre todo los que tienen relación con la batalla final. A mí la música instrumental siempre me ha encantado y como me transmite cosas, luego puedo plasmarlas en los caps. Por ej, si estoy escuchando la 9 de el último samurai, la de "Red Warrior" y escucho los gritos de guerra de la melodía, yo me imagino un ataque bestial contra Lori o Rak y si quiero escribir algo así, luego puedo plasmarlo en la historia, porque no sólo veo ese ataque en mi cabeza sino que escuchando los gritos de guerra, se me ponen los pelos de punta al ver en mi mente a los buenos contra los malos. Sí, sí…ya me callo, lo prometo. Os dejo con el cap. RAkAoMi.
Cap. 38. " Lori."
En cuanto estuvieron a su altura, la rodearon. Estando Hermione de cara a ella, Minerva en un extremo y Winky en otro. Lori rió. --
- ¿Creéis que así me asustaréis? Oh por favor, sois patéticas. Por mucho que lo intentéis, no podréis nada contra mí y en seguida os lo demostraré.
Girándose en la dirección de Winky, la diosa alzó una mano, la abrió y lanzó varias descargas de energía, que impactaron de lleno en el pecho de la pequeña elfina y la mandaron unos cuantos metros atrás. Winky se golpeó la cabeza contra el tronco de un árbol y quedó inconsciente.
- Una menos por ahora. ¿Y bien, quién quiere ser la próxima, tú…Elegida, o quizás…esta anciana que dice ser tu Vigilante, mm?
Hermione la miró con decisión.
- Tócale un solo pelo del cuerpo y te aseguro que lo lamentarás, Lori.
- Oh querida, no te preocupes, no hará falta que la toque.
La diosa lanzó un rayo de energía a Minerva, haciéndola caer al suelo y haciendo aparecer unos grilletes de energía que ataron sus pies y manos a la tierra. Seguidamente, llenó su cuerpo de descargas haciendo que la bruja gritase en agonía. Hermione no pudo evitar recordar todo lo vivido por Draco Malfoy cuando él mismo hizo aparecer también, unos grilletes que la dejaron inmóvil e indefensa.
- ¡BASTA, BASTA, YA BASTA!- gritó la prefecta- ¡ES A MÍ A QUIEN QUIERES, NO A ELLA, LIBÉRALA DE INMEDIATO!
- ¡NO! Me lo estoy pasando bomba, y ella también…¿verdad Vigilante?
Otra potente descarga de energía impactó en su cuerpo, McGonagall no pudo reprimir las lágrimas.
- ¡MONSTRUO, ERES UN MALDITO MONSTRUO!- pronunció la castaña llorando de rabia- ¡PERO TE DETENDRÉ, TE LO JURO, AUNQUE SEA LO ÚLTIMO QUE HAGA EN ESTA VIDA, JURO QUE TE DETENDRÉ, LORI!
Hermione echó a correr y apuntando al corazón de la diosa, gritó con voz potente y clara…
- ¡DESMAIUS!
Pero para su sorpresa, nada ocurrió. Lo único que produjo su ataque, fue una gran carcajada por parte de la diosa.
- ¡ESTÚPIDA, JAJAJAAAAA, NO PUEDO CREER LO ESTÚPIDA QUE ERES, JAJAJAJAAA!. ¿TODAVÍA NO TE HAS DADO CUENTA QUE TU MAGIA NO SIRVE CONTRA MÍ?. ¡ESOS INSIGNIFICANTES HECHIZOS NO ME HARÁN NADA! En cambio yo…puedo hacerte mucho daño ¡y sin tener que usar varita!
Pronunciando unas palabras que Hermione no entendió, una especie de alfileres de energía, largos y más que afilados, aparecieron entre los dedos de Lori. Ella miró a la prefecta, sonriendo, mientras apuntaba a su corazón.
- Ve rezando lo que sepas Elegida, porque serán tus últimas palabras.
- ¡APÁRTATE HERMIONE!- gritó Harry desde el interior del escudo en el instante en que vió los alfileres dirigirse a ella. Justo cuando iban a impactar en su cuerpo, ella reaccionó, echándose al suelo, rodando en la tierra para evitar aquél ataque y poniéndose rápidamente de pie.
Harry suspiró aliviado.
- ¡Basta de juegos, peleemos en serio!. Para eso has venido ¿no?
Hermione no contestó.
- ¡Ataca, vamos!
Ella se quedó quieta.
- ¿No vas a hacer nada? Entonces lo haré yo…
Lori echó a correr en dirección a la prefecta, a mitad del recorrido desapareció, volviendo a aparecer agarrándola del cuello e izándola en el aire. Hermione empezó a sentir que le faltaba el aire conforme sentía los dedos de la diosa, apretar su cuello.
- ¿No vas a rogar por tu vida, no vas a suplicar que te deje vivir?
- No…- logró pronunciar la castaña con gran dificultad.
- Entonces…¡muere!
La diosa intensificó su apretón mientras Hermione, miraba a su alrededor, sintiendo cómo se asfixiaba poco a poco y viendo la mirada de angustia en los ojos de Harry, Ron, Dumbledore y Minerva, que desde sus respectivos lugares, observaban con impotencia cómo la diosa del Caos y la destrucción, asfixiaba lentamente a la prefecta a la vez que reía sin parar.
- Eres tan patética…
Hermione parpadeó y para asombro de todos los presentes y hasta de la misma Lori, hizo algo que nadie esperaba, sonreír.
- ¿De qué te ríes?
Ella no contestó, sólo amplió su sonrisa.
- ¡DE QUÉ TE RÍES!
Los ojos de Hermione brillaron de alegría, eso descolocó a Lori, dejando de asfixiarla pero sin soltar su agarre sobre ella.
La Gryffindor cerró los ojos y su voz, sonó alta y clara para la mente de Lori.
- Me das tanta pena…
- ¿QUÉ?
- Es tan triste que hayas acabado así…tú antes no eras así. ¿Dónde está aquella mujer buena y cariñosa de la que Arion se enamoró?
- ¡CÁLLATE!
Meteoros de energía negra y maligna impactaron en el cuerpo de la prefecta, pero ella los recibió sin emitir un solo grito de dolor, cosa que asombró a Lori más todavía.
- No importa lo que me hagas, Lori, no me das ningún miedo, ya no. He dejado de temerte, lo único que me provocas, es mucha pena, una pena infinita. Te compadezco…
- ¡NO NECESITO TU COMPASIÓN. VAMOS, PELEA!
- No…
-¡PELEAAA!
- No…
Otra potente descarga impactó en el cuerpo de Hermione, pero eso tampoco pareció importarle. Lori emitió un gruñido de fastidio.
- No tiene caso pelear con alguien que no quiere luchar. Si lo que quieres es morir y terminar cuanto antes, con gusto cumpliré tu deseo.
Una espada se materializó en las manos de Lori, ella apuntó al corazón de Hermione, quien miró la espada como si nada.
- ¡NOOO!- gritó Harry al ver cómo la diosa acercaba con decisión el arma al pecho de la prefecta- ¡MALDITA SEA HERMIONE, REACCIONA DE UNA VEZ, TE VA A MATAR, ENTIENDES, TE VA A MATAR. HAZ ALGO, NO TE DEJES MATAR, LO PROMETISTE. ME LO PROMETISTE!
Justo cuando la espada estaba a punto de penetrar en su carne, las manos de la prefecta agarraron el arma, deteniendo su avance. Con decisión, ella movió la pierna derecha y propinó una potente patada al cuerpo de la diosa, quien se dobló de dolor, provocando así que sus manos soltasen a la castaña, la cuál cayó al suelo, soltando un quejido por el impacto.
- ¡LEVÁNTATE HERMIONE, DEPRISA, ESTÁ JUSTO DETRÁS DE TI!- gritó Harry.
La Gryffindor se puso en pie y echó a correr, alejándose de los dos escudos protectores y de los cuerpos de McGonagall y Winky, que aún seguían en el suelo.
Corrió, corrió con todas sus fuerzas, hasta llegar al Roble Centenario, que estaba a pocos metros del árbol del olvido. Una vez allí, ella cerró los ojos, respirando entrecortadamente y concentrándose, preparándose para todo lo que pudiera venir. Y tratándose de Lori, ella sabía que no sería nada bueno lo que le tuviese preparado.
La diosa descendió hasta quedar de pie frente a la castaña.
- ¿Lucharás ahora?- preguntó en tono mordaz- ¿O tendré que sacar la espada otra vez para hacerte reaccionar?
Hermione abrió los ojos, mirándola con decisión.
- Si quieres luchar…lucharemos. Prepárate Lori…porque esta vez, no me dejaré atrapar fácilmente. ¡EXPELIARMUS!
Aunque la diosa no tenía varita, su cuerpo sufrió los efectos del hechizo y ella misma se vió impulsada hacia atrás, cayendo al suelo y golpeándose la cabeza contra el tronco del Roble Centenario.
- Maldita…¡pagarás por esto!
- ¿Y a qué estás esperando?
Soltando un grito de furia, Lori voló directa hacia ella, pero Hermione no se movió del sitio.
Justo cuando la diosa iba a golpearla, Hermione detuvo el golpe agarrándola del brazo y propinándole en cambio, un potente puñetazo que hizo sangrar su nariz. Lori se curó con magia, mirándola con odio infinito.
- Te detesto…
- Lo sé.
- Voy a acabar contigo como más me gusta…torturándote y haciéndote sufrir mucho…tendrás una muerte lenta y dolorosa…ya lo creo que sí…
La diosa volvió a correr en dirección a la prefecta, volviendo a desaparecer, pero esta vez, no reapareció, sino que se introdujo en su cuerpo, como ya había hecho otras veces.
Hermione la sintió en su interior, percibiendo claramente todo el dolor que ésta le provocaba. Sus rodillas se doblaron y ella cayó al suelo, rodando por una pendiente, hasta llegar de nuevo al lugar de los escudos protectores.
- ¡HERMIONE, LEVÁNTATE!- gritaron Ron y Harry- ¡LEVÁNTATE, VAMOS! --
Pero era inútil, por más que ella lo intentaba, era como si su propio cuerpo estuviese pegado al suelo. Pues Lori ejercía tal fuerza dentro de ella, que por sí misma no podía mover ni un músculo.
Un sentimiento de tristeza y derrota la llenó por dentro y sus ojos marrones, empezaron a derramar lágrimas que fueron claramente vistas por todos los presentes.
- ¡NO LLORES HERMIONE, NO PIERDAS TIEMPO LLORANDO, DEBES REACCIONAR!- gritó Minerva- ¡NO DEJES QUE EL DOLOR Y LA TRISTEZA INUNDEN TU ALMA, TÚ ERES MÁS FUERTE QUE TODO ESO, LEVÁNTATE!
- No…¡puedo!- pronunció por vez primera la voz de la castaña.
- ¡SÍ QUE PUEDES, ERES LA ELEGIDA, PUEDES HACER CUALQUIER COSA. EN PIE, VENGA!- volvió a gritar Minerva.
Pero no podía, por más que lo intentaba, no podía levantarse y sus lágrimas…siguieron cayendo mientras en su mente, ella escuchaba la risa de Lori al percibir todo lo que ella sufría y lo débil e indefensa que parecía.
Fue entonces que la diosa salió de su interior, volviendo a aparecer de pie frente a ella, que seguía en el suelo sin poder moverse.
- Y ahora…morirás…
Una descarga de energía negra, inundó su cuerpo, una mucho más potente que las que ella le había lanzado anteriormente. Esta vez…Hermione no pudo reprimir los gritos de agonía y dolor que emitió su garganta.
Desde el interior del escudo, Harry temblaba de rabia al ver todo lo que ella sufría. Pero lo que más rabia le daba, era que por mucho que lo intentaba, no podía salir del escudo.
Por un instante a él se le olvidó que no podía intervenir en la lucha, que eso sería desastroso para el mundo, porque al verla allí, tumbada en el suelo, chillando de dolor…el único pensamiento de Harry era uno: correr en su ayuda. Y no sólo porque él la quisiera sino porque ante todo, ella siempre le había ayudado a él, siempre había estado a su lado en lo bueno y en lo malo y nunca jamás se había alejado de él por muy grande que fuese el peligro.
- ¡MIERDA, MIERDA!- gritó él totalmente frustrado tras intentar salir y ver que no podía por más que insistía- ¡COBARDE, ERES UNA COBARDE DE MIERDA, LORI. SÓLO LOS COBARDES ATACAN ASÍ!
Sin dejar de lanzar descargas, la diosa ladeó su cabeza para mirar a Harry, con voz alta y clara, ella pronunció…
- No te preocupes querido, pronto te reunirás con ella en la otra vida. En cuanto haya terminado… ¡Acabaré contigo!
- ¡NOOO!- gritó Hermione- ¡NO TE LO PERMITIRÉ!- Y agarrando su varita, apuntó a la cara de Lori, lanzándole una descarga de energía, no lo suficientemente potente como para causarle un gran daño pero sí para hacer que ella se llevase las manos al rostro y pronunciase una expresión malsonante.
Al verse momentáneamente libre de las descargas, ella intentó ponerse en pie, pero volvió a caer al suelo, pues aún se encontraba débil.
La voz de Harry volvió a resonar alta y clara.
- ¡ LEVÁNTATE HERMIONE, PUEDES HACERLO. TÚ ERES FUERTE, SIEMPRE LO HAS SIDO!
Ella volvió a intentar ponerse en pie, teniendo éxito esta vez.
- ¡DETRÁS DE TI!- volvió a gritar Harry.
En el instante en que ella se giró, recibió un potente puñetazo en el estómago. Ella tosió, agarrándose la barriga, mientras Lori se reía y se preparaba para golpearla de nuevo.
Estaba a punto de recibir una patada en sus costillas cuando sintió que le volvían las fuerzas. Con rapidez, ella paró el golpe y empezó a pegar a la diosa con un montón de movimientos que no se esperaba ni tampoco pudo evitar.
Desde el interior del escudo, tanto Harry como Ron, observaron con creciente asombro cómo peleaba Hermione. Y Harry, siendo medio muggle, pudo reconocer en aquellos movimientos muchos de los que él había visto en varias películas orientales y pensó que Bruce Lee se quedaba corto al lado de Hermione Granger.
Ron no entendía lo que veía, no sabía dónde o cómo había aprendido ella a hacer todas esas piruetas, volteretas, puñetazos y patadas voladoras que estaba propinándole a la diosa, lo que sí sabía era que estaba tremendamente orgulloso de cómo estaba peleando ella.
Hermione, su mejor amiga. Aquella con la que siempre discutía y a la cuál le encantaba sacar de quicio, y conseguir así lo que quería, ser el centro de atención de la castaña. Ya que tenía que reconocer para sí mismo, que siempre le había fastidiado un poco el hecho de que ella se llevase mejor con Harry y por ende, le dedicase más atención a él.
Y el hecho de discutir con ella, no era sino una forma de reclamar su atención, pero Ron también tenía clarísimo otra cosa, por muchas peleas o discusiones que pudiese tener con ella, él seguiría estando a su lado como siempre lo había hecho, y hasta que ella no le dijese lo contrario, él no pensaba abandonarla nunca. Porque tal y como había dicho Dean Thomas aquella tarde, el trío unido…jamás sería vencido.
- ¡VENGA HERMIONE, DALE FUERTE, MACHÁCALA!- gritó él la mar de entusiasmado mientras lanzaba gritos de animación propios de un partido de Quidditch, gritos que dejó de pronunciar en el instante en que recibió un codazo de Harry y le vio mirarle con cara de pocos amigos como diciendo "córtate un poco, que esto es serio."
El pelirrojo le hizo caso parcialmente, pues sólo abandonó los "Uuhhh" que había estado diciendo para sustituirlos por otras expresiones que indicaban dónde golpeaba Hermione o dónde debía golpear. Expresiones como…
- ¡AHÍ, AHÍ, EN LA BARRIGA. CHÚPATE ESA LORI, TOMA DERECHAZO EN PLENO OJO, VAMOS HERMIONE…BIENNNNN, JÓDETE LORI!
- ¡CÁLLATE RON, ME ESTÁS DESCONCENTRANDO!- gritó ella sin dejar de pelear.
Harry le dio un pequeño manotazo en la nuca, lo que ellos llamaban "colleja" o "galletazo."
- ¿Lo ves? Ya te lo advertí. Te indiqué que no…¡AL SUELO HERMIONE!- gritó él cuando vio a Lori materializar una bola de energía que pretendía lanzar a la espalda de la prefecta- ¡ALÉJATE!
Hermione obedeció, rodando lo suficiente para volver a mantener las distancias.
Tanto ella como Lori, estuvieron varios segundos sin atacarse, mientras recuperaban la respiración.
Un poco después, la diosa volvió a hablar.
- ¡Bueno basta ya de tonterías, acabemos cuanto antes. Estoy perdiendo tiempo y yo odio eso!
"Tiempo…eso es precisamente lo que quiero que pierdas. Recuerdo perfectamente lo que decía el libro y sé, que si amanece antes de que puedas abrir el portal, desaparecerás para no volver más, pues esta es la última vez que puedes intentarlo."
- ¡ CON QUE ÉSE ERA TU PLAN, EH. GRACIAS POR AVISÁRMELO!
"Mierda...¡lee la mente!"
- ¡ PUES CLARO QUE SÍ, ESTÚPIDA, SOY UNA DIOSA, PUEDO HACER LO QUE QUIERA, INCLUSO ESCUCHAR TUS PENSAMIENTOS, PERO YA NO PENSARÁS MÁS DURANTE UN BUEN RATO, YO ME ENCARGARÉ DE ESO!
Sin que Hermione pudiese evitarlo, un potente meteoro de energía impactó en su cabeza, ella cayó al suelo y todo se volvió negro.
Lori se acercó a Hermione, comprobando que estaba inconsciente. Sin dejar de sonreír, caminó hasta llegar a McGonagall y la inconsciente Winky, que ya estaba empezando a despertar.
- Y ahora, queridas mías…abriré el portal y vosotras…me ayudaréis.
- ¡JAMÁS!- pronunció Minerva aún sin poder liberarse de los grilletes energéticos.
- Oh sí…ya lo creo que sí, pues sois vosotras sin duda, las que lo abriréis.
Con horror, McGonagall vió cómo Lori se agachaba y le cortaba algunos cabellos y luego se dirigía hacia Winky para hacerle un corte en uno de sus brazos.
- Bien, bien…pelo de la última Vigilante, sangre de la última Guardiana…sí…era lo único que me faltaba. Gracias por vuestra colaboración.
- ¡MALDITA SEAS, LORI, MALDITA SEAS MIL VECES!- gritó Minerva sin querer esconder su frustración y su ira.
Lori movió las manos, creando un círculo mágico que envolvió tanto a ella misma, como a McGonagall y a Winky, dejando fuera de él sólo a los dos escudos protectores que albergaban a Harry, Ron y Dumbledore.
Ellos escucharon a Lori pronunciar unas palabras y luego vieron aparecer una serie de cosas que supusieron necesarias para abrir el portal. Todas esas cosas comenzaron a temblar y unos instantes más tardes, un gran arco apareció y la tierra comenzó a temblar, como si hubiese un terremoto, con la única diferencia en que nada se destruía, por el momento.
- Oh no…no…el portal ha aparecido.- dijo Minerva llena de pánico.
- ¡DESPIERTA HERMIONE, DESPIÉRTATE!- gritó Ron desde el interior del escudo- ¡SI NO DESPIERTAS ESTAREMOS PERDIDOS!
Harry le miró asombrado.
- ¿Desde cuándo sabes…?
- ¡SÉ MUCHO MÁS DE LO QUE CREES!- contestó Ron- ¡NO SOY QUIEN TÚ CREES QUE SOY!
Y para asombro del propio Harry, una neblina salió del cuerpo del pelirrojo para tomar la forma y el aspecto de alguien a quien él ya conocía.
Un hombre joven y apuesto que un día le besó para poder calmarle. Un hombre que no era humano pero que tenía la apariencia de uno, un hombre que flotó y atravesó la barrera mágica del escudo protector para volar a toda velocidad en dirección a la diosa y gritar con voz potente…
- ¡MADRE NO LO HAGAS!
Continuará.
Nota de la autora: Bueno, os prometo intentar subir cap cada dos días, (es que quiero leer los reviews que me vayáis dejando) a ver si consigo terminar el fic antes de irme a Almería, que me voy el ocho de enero.
Espero con ansias vuestros Reviews, un besazo y disfrutad la nochevieja y el nuevo año. Hasta dentro de dos días (si nada me lo impide).
¡MUCHOS BESOSSS! RAkAoMi. ;-)
