Hermione ya estaba en la mesa de Gryffindorf repartiendo los horarios. Era temprano y muchos estudiantes seguían durmiendo. Llevaba toda la última hora observando a Draco. No sabía cuando poder darle las gracias por lo que había hecho, y, cuando se decidía a acercarse a él, siempre aparecía alguien, Goyle, Crabbe, Pansy...
En ese momento, Ron apareció por la puerta del comedor.
Buenos días Hermione- dijo bastante animado.
Buenos días Ron- dijo Hermione dejando de mirar a Draco.- Ten, éste es el horario de este curso- dijo entregándole un pergamino.
En ese momento apareció Harry (sin gafas) con cara de dolor, y frotándose la cicatriz.
Buenos días Harry- dijo Ron mirándole de forma extraña.
Buenos días- continuó Hermione- ¿Qué te ha pasado?
Buenos días- dijo Harry mirándoles- la verdad es que no he tenido un buen despertar. Tuve el sueño del que os hablé. Cuando desperté, la cicatriz me ardía. Me puse las gafas un momento para ver la hora que era, lo miré, y en ese momento salió la bludger del despertador contra mis gafas y rompió el cristal ¿qué os parece? Bueno, así que decidí ponerme las lentillas que me regaló Wood... después de todo, necesitaba una ocasión para probarlas.
Ambos se rieron, mientras Hermione le entregaba el horario. Éste lo abrió, y se puso pálido.
No puede ser.
¿Qué ocurre?- preguntó Hermione.
Tenemos pociones a primera hora con Hufflepuff- dijo Harry- hoy es mi día de suerte- exclamó sarcásticamente
Míralo por el lado bueno, al menos no tenemos con Slytherin.- dijo Ron.
Harry le miró con mala cara, como diciendo¡Sí, que gran noticia, y comenzó a desayunar.
En ese momento, la puerta se abrió. A través de ella apareció Ginny, a la cual se le pusieron los ojos como platos al ver a Harry con lentillas. Aunque las gafas eran una de las cosas características de Harry, sin gafas estaba que arrasaba.
Claro que no solo Ginny estaba loca por Harry. Unas cuantas de Ravenclaw y de Hufflepuff también estaban locas por él... Y aunque pareciera raro, también Draco disponía de un club de fans.
Ya es la hora de comenzar las clases- dijo Hermione transcurridos varios minutos- tenemos que ir a las mazmorras.
De acuerdo- dijo Harry, poco entusiasmado con la idea.
Llegaron a éstas. Algunos de Hufflepuff ya esperaban al profesor Snape. Entraron a la clase. Seguía igual de oscura y fría que siempre. Se sentaron por parejas (Neville- Hermione, Harry- Ron) y fueron sacando el libro. De repente entró el profesor. La oscuridad le tapaba el rostro. Todos miraban atentos. La sombra fue acercándose cada vez más, hasta que se acercó a la luz.
Bienvenidos a la clase de pociones- dijo una chica rubia de pelo largo, de unos 24 años de edad con una sonrisa- mi nombre es Fátima Malfoy, y seré su nueva profesora de pociones.
Todos se quedaron pasmados, en especial Harry. ¿Y Snape¡¡¡¿¿no tendrían a Snape como profesor! Eso era una gran noticia... un momento¿¿¿ MALFOY?.
Tal vez conozcan a mi hermano pequeño- continuó Fátima al ver el alboroto que habían montado los estudiantes al nombrar su nombre.- a Draco Malfoy.
Algunos suspiros se oyeron en la clase (entre ellos el de Hermione).
Fátima sonrió al ver como varias chicas se habían subido a las nubes al nombrar a su hermano.
Bien, para mí, el ambiente es muy importante en una clase para trabajar correctamente- dijo mirando alrededor- y la verdad, este lugar tan oscuro no me parece demasiado adecuado. ¿No les parece?
Todos asintieron. Ella sonrió, giró su varita, y las paredes negras de la habitación se volvieron blancas, las cortinas de las ventanas se abrieron, dejando pasar la luz del día, y la chimenea se encendió de golpe.
Bien, mucho mejor.- dijo Fátima mientras volvía a mirar a su alrededor.- Bueno, comenzaré pasando lista.
Comenzó a pasar lista. Cuando llegó a Harry, ésta se le quedó mirando, y después le sonrió, a lo cuál, tras el "impacto" de que un Malfoy le sonriera, le devolvió la sonrisa.
La clase transcurrió con mucha tranquilidad, en verdad, había sido la mejor clase de pociones que habían tenido hasta el momento. Incluso a Neville le salió bien la poción. Estaban muy tranquilos, incluso les dio pena que se acabara la clase.
Bien¿qué nos toca ahora?- preguntó Ron bastante feliz.
Transformaciones con Slytherin- dijo Hermione con la mirada al frente.
¿Ya te has aprendido el horario?- preguntó Harry muy asombrado.
No... bueno, la verdad es que... bueno... en fin... yo... - dijo Hermione colorada.
¿Estás bien?- preguntó Ron- desde que llegamos a Hogwarts estás muy rara... por cierto, aún no nos has dicho qué pasó en el expreso.
Hermione bajó la cabeza, y aceleró el paso, dejando atrás a Harry y a Ron, los cuales no entendían su comportamiento.
Maldita sea- pensó Hermione- ¿qué se supone que estoy haciendo? De cualquier modo Draco no me gusta... NO, HE DICHO QUE NO, no me gusta, solo parece más simpático que antes, tiene mejor cuerpo que antes, es más guapo que antes... ¡UN MOMENTO¿¿GUAPO? No, esa palabra sólo se usa cuando alguien te gusta, y ese no es tu caso ¿verdad Hermione? No lo es, no te gusta¿estamos de acuerdo? NO TE GUSTA- Hermione suspiró, y la batalla entre Hermione y su conciencia finalizó.
En ese momento, cruzó una esquina, y vio a dos personas hablando. Frenó en seco y se escondió tras ésta, mientras las escuchaba.
Allí estaban Draco y Snape manteniendo una pequeña disputa.
Eso es una deshonra para Slytherin, no se puede aceptar. ¿En qué pensabas? - decía Snape un poco furioso.
Fue un impulso, no pude hacer otra cosa, después de lo que pasó este verano... debía hacerlo- dijo Malfoy con la mirada seria hacia Snape.
Bueno, ya no hay nada que hacer. Vete a clase- dijo Snape más tranquilo.
Hermione vio como Snape se alejaba del lugar, y como Malfoy se dirigía hacia la esquina donde ella estaba. En ese momento una mano la tocó en el hombro. Hermione se volteó rápidamente, y se topó con la horrible cara de Crabbe.
Draco llegó donde estaban ellos. Se quedó mirando a ambos: a una Hermione asustada, apoyada de espaldas contra la pared, y a un Crabbe delante de ella, con su mano puesta en el hombro de la muchacha.
¿Se puede saber qué estás haciendo Crabbe?- dijo Draco con la mirada severa.
Esto... yo...- decía Crabbe lentamente, asustado ante la mirada de Draco, el cual no espero a que terminase de hablar.
Expelliarmus- Gritó Draco apuntando contra Crabbe que salió disparado por los aires.
Draco guardó su varita, y volteó para ver a Hermione, la cual estaba aún apoyada en la pared.
¿Estás bien?- preguntó Draco amablemente.
Sí, gracias- dijo Hermione sonrojada, ya que tenía a Draco delante de ella.
Éste iba a irse, cuando Hermione le detuvo.
Espera. Esto... yo... quería agradecerte lo que hiciste en el expreso... me salvaste la vida.- dijo Hermione muy colorada.
Era mi deber- respondió Draco muy fríamente.
A Hermione no le gustó ese tono, y comenzó a enfadarse.
¡Encima que te lo agradezco! Lo dices como si te diera igual. ¿Sabes algo? Pensé que habías cambiado, pero veo que no, sigues siendo el mismo chico de siempre, tal vez un poco más guapo, pero un malcriado, y además yo...
Hermione se vio interrumpida. Draco tenía su mano derecha en su cintura y la besaba tiernamente. A Hermione se le subieron los colores al instante, aunque deseaba que ese momento no acabase nunca.
Pero como lo bueno no puede durar siempre, ese instante se vio interrumpido.
En ese momento del otro lado del pasillo aparecieron Harry y Ron, con los libros en la mano. Iban charlando, cuando de repente vieron la escena. Se quedaron con la boca abierta, mientras los libros se les caían al suelo.
Se quedaron sin palabras ¿Draco y Hermione juntos? Acaso era una broma o es que estaban soñando. Hermione estaba muy, muy colorada, y les miraba con una expresión de "tierra trágame".
Instintivamente Ron sacó la varita apuntando a Draco.
Expelliarmo- dijo mientras un rayo se dirigía hacia Malfoy.
Fetro- dijo éste con tranquilidad.
El rayo chocó contra una especie de burbuja, y rebotó hacia donde estaban Harry y Ron, los cuales salieron disparados contra la pared.
Hermione se acercó al lugar donde estaban, retirándose de Draco.
Diez puntos menos para Gryffindorf por atacar a un prefecto- dijo con cara de pocos amigos, y con la mano en su insignia.
Pero Hermione, no puedes bajar puntos a tu propia casa- dijo Ron criticando la postura de Hermione.
¿Crees que no puedo?- dijo Hermione más enfadada todavía.
Harry tapó la boca de Ron, el cual quería volver a criticarla. Ambos se levantaron, y miraron muy fijamente a Hermione.
Vámonos Harry- dijo Ron con cara triste- ella ha tomado ya una decisión.
Ambos se fueron por el pasillo. Hermione estaba con la cabeza baja, con el pelo cubriéndole el rostro. Draco se acercó a ella con un LEVE aire de satisfacción, y puso su mano en su hombro derecho. Hermione, se dio la vuelta, miró durante unos instantes a Draco, y salió corriendo por donde Snape se había marchado minutos antes.
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Wood despertó temprano. Se dirigió al armario... estaba impaciente por ver el aspecto que había cobrado su túnica invisible. Abrió la caja, y allí se encontraba una estupenda túnica negra, con un tornado bordado en la capa.
Wood se la puso, y bajó al comedor, con ayuda de su madeto.
El comedor era muy grande. Tenía un cierto parecido con el salón de Hogwarts. A un lado estaban las mesas de las casas del agua, roca y tierra, y al otro lado la del trueno, el fuego y el viento. En el fondo estaba una mesa para seis personas, y, en el aire (flotando) una gran mesa, que se suponía, era de los profesores.
Ya estaba casi lleno el comedor, cuando Wood entró al salón. Se sentó en la mesa en la que sus compañeros de habitación se encontraban.
¿Ese es?- preguntó Electra, mirando hacia la mesa del viento.
Sí- dijo Ventisca- se llama Oliver Wood, era el capitán de Gryffindorf. Estaba muy interesado en tu forma de jugar al quidditch... bueno, la verdad es que estaba muy interesado en todo lo que tuviera que ver contigo...- dijo mientras ponía una sonrisa pícara.
Seguro- dijo Electra pasando del tema, mientras sus mejillas adquirían un tono rojizo.
Vaya, vaya, así que tienes un admirador ¿eh?- dijo la chica de al lado.
Lo ves, hasta Flibby está de acuerdo conmigo- dijo Ventisca.- Algo extraño, ya que vosotras dos siempre estáis de acuerdo.
¿Acaso lo has olvidado?- continuó Electra- Flibby es la hydegrut de la casa del fuego, vamos, la alumna con la mente más calenturienta de todo Saberhaguen, así que es normal que en este caso esté de acuerdo contigo.- dijo riendo.
Y a mucha honra- dijo la pelirroja.- pero si crees que no llevo razón... ¿por qué no te acercas a hablar con él?
¿Eso es un reto?- dijo Lydia con la mirada penetrante.
Efectivamente.
Acepto.
Ventisca y Electra se levantaron de la mesa, y se dirigieron hasta la mesa donde Wood y sus compañeros desayunaban. Éste al ver que se dirigían a su mesa, comenzó a ponerse un poco nervioso...
Buenos días- dijo Ventisca con una cara sonriente.
Buenos días- contestaron todos a coro.
Quería presentaros a Electra, la hydegrut de la casa del trueno. Éstos son Flint Kritteric, Marck Pitten y Oliver Wood.
Encantada de conoceros- dijo una muy sonriente Electra.
Así que tú eres la tan famosa Electra- dijo Marck entusiasmado.- Eres una excelente jugadora, estoy deseando verte jugar.
Pero si no la has visto jugar ¿cómo sabes que es buena?- dijo Flint
Los madeto nunca se confunden, y el mío decía que era una gran jugadora.- dijo Marck
Perdón¿un qué?- preguntó Electra muy sorprendida al oír el nombre de madeto.
Nada, nada, olvídalo- dijo rápidamente Ventisca, al ver el apuro en el que la habían metido.- Bueno, hasta luego chicos.
Adiós- contestaron todos a coro.
¿Pero qué...¡Ah!- dijo Electra mientras era empujada hacia la mesa de las hydegruts por Ventisca.
Flint dio una colleja a Marck.
¡Ay!- dijo éste- ¿por qué me golpeas?.
¿Acaso no lo sabes?- preguntó Flint- Los objetos que se reciben a principio de curso, son secretos, nadie debe saber lo que hemos recibido... bueno, se lo podéis decir a vuestros familiares... ¿sabéis que ha recibido mi hermano? Una bola de cristal auténtica, en la que se puede ver el futuro con mayor facilidad que las comunes... claro que él es de la casa del trueno, la casa a la que mejor se le da la adivinación.
Entonces ¿la casa del viento es la única que tiene madetos?- preguntó Wood.
Sí, eso creo, según tengo entendido, los hacen los de último curso, para los nuevos. Lo que no sé, es si siempre se repite el mismo regalo, o somos el único curso que tenemos madetos.
La verdad es que es muy útil ver lo que están haciendo otras personas.- dijo entre risas Marck.
Ya te digo, ayer, quise probarlo, dije el nombre de mi hermano, y vi como se rendía a los pies de Electra... jajaja.- dijo Flint.
¿Cómo que verlos? Solo aparece una foto.- dijo Wood recordando la foto de Electra.
No, que va, a mí me salía como si fuera una especie de cámara oculta o algo así.- dijo Flint sin parar de reír.
Sí, a mí también.- continuó Marck.
¿Y si le preguntamos a Ventisca?- dijo Flint.
Todos miraron el botón que había en el centro de la mesa, el cuál tenía grabado un remolino. Wood extendió la mano, y pulsó el botón. Al momento, una especie de tornado apareció a su lado, y en él estaba Ventisca.
¿Qué queréis?- preguntó Ventisca.
Bueno, es que creo que mi madeto está estropeado.- dijo Wood.
¿Qué ha pasado?
Bueno, en todos aparece como una cámara oculta, y en el mío solo una foto.- dijo con un aire de fastidio
¿A quién intentaste ver?
A Electra- dijo Wood un poco colorado.
No, entonces no está estropeado. Lo que pasa, es que se encontraría dentro de la casa del trueno, y no podéis ver el interior de la casa... Por cierto Wood, date prisa, las pruebas de guardián van a comenzar dentro de treinta minutos en el campo de quidditch.
Entonces me voy para allá.
Buena suerte- le dijeron los dos. Wood les sonrió, y se alejó en dirección a la puerta.
Abrió el madeto, el cuál le indicó hacia donde debía dirigirse. Iba caminando, mientras miraba el mapa, cuando vio que en éste apareció un punto amarillo.
Hola de nuevo Wood- dijo sonriendo Electra.- ¿A dónde vas?
¡Ah! Hola. La verdad es que iba a por mi escoba para entrenarme un poco antes de las pruebas.- dijo mientras guardaba el madeto.
Sí, ya me ha comentado Ventisca que jugabas de guardián en Hogwarts... ¿te importaría si te acompaño para ver cómo juegas?
No, no, por supuesto que puedes venir.
Bien, dame la mano.
¿Qué?- dijo Wood extrañado.
Iremos a la velocidad del relámpago, se va más deprisa.
Wood le dio la mano, y en el tiempo que tardó a pestañear, se encontraba en la puerta de entrada a la casa del viento.
Lo siento, pero no puedo entrar, no me está permitido. Te esperaré aquí.- dijo amablemente Electra con los ojos cerrados.
Bien, ahora vuelvo- dijo Wood extrañado.
Tardó unos minutos en salir. Allí estaba Electra esperando, con una Saeta de Fuego entre las manos. Wood recordó el día en que Harry les mostró su Saeta, la alegría que le invadió.
Bueno¿nos vamos?- dijo Electra.
Vamos.
Volvió a darle la mano, y al momento estaban en el campo de quidditch.
Bueno, suelo jugar de buscadora, pero para ayudarte a entrenar, jugaré de cazadora.- ¿estás de acuerdo?
Vale.- se limitó a decir Wood. Tendría la oportunidad de ver a Electra en acción antes de lo que esperaba.
Se colocaron en su posición, y Electra lanzó el quaffle. Wood ni lo vio. Por supuesto, traspasó un aro.
¿Cómo has hecho eso?- preguntó Wood.
Haciéndolo. Si de verdad quieres parar alguno de mis tiros, no te sirve mirar el quaffle, debes llegar a sentirlo.
¿Sentirlo?- preguntó Wood extrañado.
Cierra los ojos.- Wood obedeció. Electra lanzó el quaffle.- ¿Puedes ver el recorrido que ha hecho?
No.- dijo Wood, el cual seguía con los ojos cerrados.
Electra lanzó una y otra vez, hasta que, al fin, unas finas líneas se trazaron en la mente de Wood.
A la derecha- se pensó. Se lanzó a la derecha, y notó como el quaffle dio en la escoba. Abrió los ojos. Electra aplaudía muy sonriente.
¡Bravo! Veo que lo has conseguido. Eres la primera persona que consigue parar uno de mis tiros. Estoy segura de que entrarás a formar parte del equipo.
Eso espero.
Descendieron. Varios alumnos comenzaron a llegar. Electra se despidió de Wood, deseándole suerte, y al momento desapareció.
Las pruebas comenzaron. Wood no tuvo ningún problema para clasificarse, y formar parte del equipo. El puesto de buscador estaba más reñido. Las finalistas, dos chicas morenas y gemelas, se disputaban el puesto. Ambas jugaban de la misma forma, y tardaban los mismos segundos en atrapar la snich.
Es una lástima- dijo Ventisca a Wood.
¿El qué?- preguntó él desorientado.
Que este año también gane la casa del trueno.
¿Por qué debería ganar?
Por las buscadoras- dijo ésta mirándole.- Son demasiado lentas. Aunque atrapan la snich en un minuto, que no estaría tan mal en otros colegios, aquí no es suficiente. Para cuando ellas noten que la snich revolotea por el campo, Electra ya la tendrá entre sus manos.
¿Cómo pueden volar tan rápido los de la casa del trueno?
Bueno, no es que vuelen rápido, sino que ven todo a cámara lenta.
¿Cómo?
Tendrías que entrar a la casa del trueno... es horrible. No ves a nadie, sin embargo, está lleno. Los habitantes, se mueven a la velocidad de la luz, y eso hace que sea muy difícil verlos. Es por eso que cuando salen de la casa, todo les parece que va muy lento, y tienen más tiempo para reaccionar.
Entiendo, pero no pierdo todas las esperanzas, una de esas dos chicas podría atrapar la snich en menos tiempo.
Espero que lleves razón, de lo contrario...
Tras muchos esfuerzos, una de las gemelas consiguió atrapar la snich.
Enhorabuena- dijo Ventisca mirando a la chica morena de ojos negros que llevaba la snich entre las manos.- Tú eres...
Patti, Patti Préfister- dijo sonriendo.
Aunque eres la mejor Patti, debes entrenarte muy duro para conseguir batir tu marca¿de acuerdo?- dijo un chico, el cual debía ser el capitán, y que opinaba igual que Ventisca.
Claro.
De acuerdo, los entrenamientos serán a las seis, durante toda la semana. Debemos entrenarnos cuanto antes, aunque el torneo de quidditch de aquí no comience hasta febrero, o así. Además, las pruebas de selección para la selección- el muchacho se rió de sus propias palabras- comenzarán en una semana, y es preciso que seamos los máximos posibles de nuestro equipo.
En ese momento, un fuerte sonido se oyó en el cielo. Todos dieron media vuelta y salieron corriendo hacia sus respectivas clases.
Menuda manera de decir que comienzan las clases... ¿no sería mejor hacerlo al estilo muggle?- se quejaba un chico que se había presentado a las pruebas de buscador.
Algunos se rieron, mientras corrían a su primera clase: Encantamientos.
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Hermione estaba en el cuarto de baño de las chicas. Lloraba con amargura. Se sentía como si hubiese traicionado a Harry y Ron... pero solo fue un beso, y si había bajado puntos a Gryffindorf, era porque debía, atacar a un prefecto era demasiado grave... ¿por qué le habían dicho eso? Ella aún no había elegido... es más, no se había planteado la posibilidad de tener que elegir entre Harry y Ron, o Draco. Además había sido él quien la había besado, ella no quería...
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Esto es increíble- dijo Ron a Harry mientras McGonagall pasaba lista- Jamás hubiera imaginado esa aptitud de parte de Hermione.
Lo sé, pero hay que aceptarlo, son sus sentimientos- decía Harry.
¿Es que no lo entiendes? No me molesta que haya besado a Malfoy, sino que lo haya elegido a él por encima de nosotros.- miró hacia delante, al pupitre de Malfoy, donde estaba sentado junto con Goyle, con una sonrisa dibujada en los labios.
Finnigan, Seamus - dijo McGonagall.
Presente- dijo Seamus
Granger, Hermione- continuó McGonagall.- ¿Señorita Granger?- dijo mirando con rostro preocupado hacia el asiento que estaba junto a Neville.
Landet, Criss- continuó McGonagall.
Que extraño que Hermione se haya saltado la clase de transformaciones, después de todo es su asignatura favorita- pensó Harry preocupado.
McGonagall terminó de pasar lista.
Bienvenidos a clase de transformaciones. Como otros años, seré su profesora de esta asignatura. Hoy comenzaremos con la transformación de una pequeña piedra en un animal. Para ello deben pensar con fuerza en qué quieren transformar la piedra, y decir con un leve giro de varita: Vritus nothem.
Comenzaron a pensar un animal mientras McGonagall repartía las piedras entre los alumnos.
¡Ya lo tengo!- dijo Ron- Vritus nothem.- a su piedra le salieron dos patas, y algunas plumas verdes.
¿Qué es eso?- dijo Harry con una carcajada.
Se supone que debía ser un loro...- dijo Ron decepcionado.
Vritus nothem- dijo Harry. A su piedra le salieron cuatro patas, y un par de cuernos.
Jajaja- rió Ron- ¿qué es eso?
Una especie de ciervo- dijo riendo.
Por la clase se veía de todo, una cola de serpiente con una piedra en vez de la cabeza, una piedra con un cuerno en punta y cuatro patas blancas (se supone que querían un unicornio), etc.
La clase terminó. Ninguno había logrado convertir la piedra totalmente. Ron consiguió hacer aparecer el pico y unas cuantas plumas más, pero su falta de concentración hacía imposible la completa transformación.
Por cierto Ron, estaba pensando... si Snape no nos da pociones... ¿qué asignatura nos impartirá?- dijo Harry.
No lo había pensado... de todas formas, tal vez se haya marchado y no vuelva a Hogwarts.- dijo Ron con cara de felicidad.
No, no puede ser, antes estaba en el gran comedor.- dijo Harry fastidiado.
¿Y si da clase sólo a los de cursos inferiores?
No lo creo...
¡Qué fastidio!- dijo Ginny malhumorada. Se acercaba por el pasillo junto con tres chicas más. Al mirar hacia delante, descubrió a Ron y Harry.- ¡Vaya!- dijo cambiando totalmente de expresión- ¿qué tal chicos?
Bien, oye Ginny¿has tenido alguna clase con Snape?- dijo Ron intrigado. Ginny volvió a enfurecerse.
Sí, acabo de salir de su clase, ha bajado unos 15 puntos a Gryffindorf- dijo recordando su clase anterior.
Por las razones de siempre ¿no? ESTA POCIÓN ESTÁ MAL- dijo Ron mientras imitaba a Snape- 5 PUNTOS MENOS PARA GRYFFINDORF.
Ginny miró a su hermano pensando: éste me está tomando el pelo o qué. Inmediatamente dijo.
¿Qué hablas de pociones?- dijo enojada- Snape es el nuevo profesor de Defensa contra las artes oscuras.
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NOTAS DE LA AUTORA: Parejita! Jajajaja. Draco y Hermione tenían que acabar juntos... lo siento mucho para todos aquellos que estén en contra! (no va por nadie en especial...jejeje)Que Snape fuese profesor de Defensa contra las Artes Oscuras... estaba cantado, no? Bien, la hermana de Draco... no disimula, que conste, es que es muy agradable... la oveja negra de la familia... aunque sería más bien la blanca
Aquí también aparece Flibby... un personaje muy importante también! De los centrales... Wood por supuesto en el equipo... y bueno, creo que lo demás está bastante claro...
Por cierto, me hace mucha gracia que todo el mundo que ha leido esta historia se quede con lo del "madeto"... como triunfa no? Cuando lo escribí jamás pensé en que tuviera tanto éxito... (quizás tendría que aparecer más veces... en fin! jeje).
Siento actualizar tan de vez en cuando... pero cada vez que actualizo subo muchos, así que lo uno por lo otro. Hasta el siguiente capítulo.