Vaya Percy, me has asustado- dijo Hermione.
Perdona, no era mi intención... ¿es cierto lo que le acabas de decir a Ginny?- preguntó con curiosidad
¿El qué?- dijo confundida
Que pronto se recuperará. ¿Acaso habéis encontrado ya a ese fénix?
Que rápido vuelan las noticias... sí, lo he encontrado, he descubierto que el único fénix capturado, pertenece a Dumbledore.
Son unas noticias estupendas.- sonrió Percy.
Pero... ¿cómo te has enterado de lo de Ginny?
Harry me envió una lechuza explicándomelo, y pidiéndome que buscara lo que supiera sobre ese tipo de fénix.
Increíble, pensaba que ninguno se había molestado, pero ya veo que me equivocaba... por cierto... ¿qué ha dicho tu madre?
Bueno... aún no lo sabe.- dijo Percy sudando- y la verdad prefiero que no se entere nadie más, o se le caerá el pelo a Ron y George.
¿Solo te interesan ellos o qué?- dijo Hermione indignada.
También me preocupa Fred pero...
No me refería a eso- interrumpió Hermione- sois unos egoístas¿qué pasa si Ginny muere? Jamás os podríais perdonar el no haber avisado a vuestros padres, tienen derecho a saberlo, y yo misma me encargaré de comunicárselo.
Percy no continuó, ella tenía razón, debían de saberlo cuanto antes... y no sólo ellos, sino también Bill y Charley.
Hermione salió de allí, no quería discutir delante de Ginny. Necesitaba hablar con alguien, desahogarse, no podía aguantar más aquella presión...
Pero... ¿a quién debía acudir? A Harry, a Ron o a Draco.
Siempre acudía a Harry, pero recordó que tenía que acudir a la selección de guardián, así que no le quedaba más que una opción.
Cruzó los pasillos y subió las escaleras necesarias, hasta que halló la puerta de entrada a la casa de Slytherin. Por más que lo intentó, no pudo entrar en la casa, ni siquiera enseñando su insignia de prefecta. Justo cuando iba a marcharse, vio a Draco seguido de Crabbe y Goyle.
Sin poder evitarlo, comenzó a llorar desconsoladamente en los brazos de Malfoy. Éste, hizo una seña a los dos que le seguían para que les dejasen solos. Draco miró a su alrededor, y encontró una puerta cerrada con llave. Cogió a Hermione de la mano, y se dirigieron a ella.
Alohomora- dijo Malfoy, haciendo que la puerta se abriese.
Entraron, parecía que Hermione ya se había logrado calmar, aunque seguía llorando. Pasados unos minutos, dejó de llorar totalmente, se encontraba mucho mejor.
¿Te encuentras bien?- preguntó Malfoy
Sí, mucho mejor
¿Qué es lo que te ha pasado?
Nada concreto.- rió Hermione.
¿Entonces?- insistió Draco.
Necesitaba desahogarme, y la mejor manera de hacerlo es llorando ¿no crees?
Bueno... eh...- Malfoy no sabía que contestar.- ¿y para eso me has buscado por todo el castillo?
¿Qué mejor que desahogarte con la persona que más quieres?- dijo sonriente.
Sí, claro... esto Hermione... ¿Has contado a alguien lo nuestro?
Hermione se extrañó un poco... ¿a qué venía esa pregunta?
No, no se lo he dicho a nadie... aunque supongo que Harry y Ron se lo estarán imaginando... ¿y tú?
Crabbe y Goyle están enterados.- se limitó a responder.
¿Por qué querías saberlo?- preguntó Hermione al fin, tras intentar resistirlo.
Bueno, es que antes McGonagall se me acercó, y me preguntó si había algo entre nosotros.- dijo más o menos tranquilo.
Hermione se quedó blanca... McGonagall lo sabía... pero¿cómo se había enterado?
Bueno¿y qué le contestaste?- dijo tragando saliva.
Que era un asunto que no le incumbía ni a ella, ni a ningún otro profesor.- dijo seriamente Draco. Hermione suspiró, al menos no le había dicho ni que sí, ni que no.
Creo que es hora de que vayamos al gran comedor a cenar ¿no te parece?- dijo mirando la hora de su reloj.
Vamos entonces- asintió Malfoy, mientras tendía su mano hacia Hermione.
Alohomora- dijo Hermione con la varita en su mano.- Alohomora- repitió preocupada, al ver que su hechizo no daba efecto, y la puerta permanecía cerrada. Draco también sacó su varita, pero su hechizo tampoco dio efecto.
¿Qué es lo que pasa?- dijo Hermione.
Nuestra magia no funciona aquí. Este lugar debe estar protegido con algún encantamiento.- contestó Malfoy.
¿Protegido¿Por qué iba a estar un sitio como éste protegido?- preguntó Granger desconcertada.
Ambos miraron al lado contrario de la puerta. Aunque todo estaba lleno de polvo y telarañas, pudieron ver lo que necesitaban comprobar.
La... tumba de Salazar Slytherin- dijo Hermione muerta de miedo, viendo un ataúd de piedra, con el escudo de Slytherin sobre la lápida.
Increíble. No sabía que se encontraba aquí...- dijo Draco caminando hacia la tumba.- ¿qué es eso que se oye?- paró en seco, retrocediendo unos pasos. - parece el sonido de una...
Hermione se quedó más blanca que una pared. Solo le faltaba eso para ser un día completo. Retrocedió unos pasos, hasta chocar con la puerta y se agarró del brazo de Malfoy.
Una gran cobra se deslizaba por encima del ataúd, acercándose más y más a Draco y Hermione, hasta situarse junto a sus pies.
La muchacha se agarró fuertemente al brazo de Malfoy, que miraba directamente a la cobra. Éste, apretó con fuerza la mano de Hermione, para intentar tranquilizarla. Desde su experiencia con el basilisco cuando estaba en segundo, Hermione había adquirido una gran fobia a las serpientes.
El animal seguía observándolos desde el suelo, pero cuando parecía que iba a regresar junto a la tumba de Salazar, comenzó a subir por la pierna de Malfoy, que seguía muy quieto, aunque algo más nervioso.
La cobra subía y subía sin detenerse, hasta que comenzó a enlazarse en su cuello, y a mirarle directamente a los ojos.
Entretanto, Hermione se había retirado de Draco, y miraba aquella escena aterrorizada... parecía que Malfoy había sido hipnotizado por aquella serpiente. De repente, para asombro de Hermione, Malfoy dijo algo en una lengua totalmente desconocida para ella, pero fácil de adivinar: la lengua pársel, la lengua en la que hablan las serpientes, y que Harry y Voldemort conocían.
Entonces, tras decir aquella palabra, la insignia de prefecto comenzó a brillar, lanzando a la serpiente unos metros, hasta chocar contra la tumba. Malfoy volvió en sí, y vio que la brillante insignia, flotaba a más de un metro sobre el suelo, y que se convertía en un gran basilisco, que devoró a la cobra.
Hermione estaba desesperada. Comenzó a golpear la puerta con los puños cerrados, y a gritar hasta quedarse sin fuerzas, manteniendo los ojos cerrados, para evitar que su mirada y la del basilisco se cruzaran.
Hermione, tranquila- dijo Malfoy mirándola a los ojos, y sujetándola fuertemente.
La chica, asustada, se abrazó a él, y miró al suelo, viendo como el basilisco se acercaba al lugar donde ellos se encontraban.
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Que asco de día- se quejaba Harry mientras observaba el campo de quidditch a lo lejos.- ¿Por qué han tenido que cambiar? Si Hermione no se hubiese enamorado del idiota de Malfoy, todo habría seguido como antes- se quejaba Harry en voz alta- no, no es justo- reflexionó- nadie tiene la culpa, lo que tenía que pasar, ha pasado... estoy harto de sus peleas, tengo que convencer a Ron de que la apoye... no, no es el momento, Ron debe estar hecho polvo en estos momentos... pero claro, ahora pago yo sus disputas.- se quejaba Harry.
Claro, pobrecito Harry, nadie le quiere- dijo una voz conocida detrás de él, una voz que hizo que su corazón comenzara a latir con más rapidez de la normal.
Cho Chang- dijo volviéndose para ver aquel hermoso rostro que le tenía en las nubes. Para su sorpresa, ella estaba más sonriente que nunca, a pesar de la reciente muerte de Cedric- ¿cómo te encuentras¿Qué tal el verano¿Las clases?- comenzó a preguntar nervioso.
Bien, bien, tranquilo, no voy a comerte- dijo Cho al ver a Harry, aunque sin dejar de sonreír.- solo vine para darte las gracias.
¿Las gracias¿Por qué?- preguntó confuso Harry, logrando calmarse.
Este verano lo pasé muy mal con la muerte de Cedric, sufría mucho, hasta que a mediados de julio, su espíritu se me apareció, y me contó todo lo ocurrido durante el torneo... por eso te doy las gracias, por lo que hiciste- dijo dulcemente.
Durante unos segundos permanecieron callados, hasta que Cho volvió a hablar, ya que Harry no estaba en condiciones de decir nada, estaba demasiado ocupado intentando sujetar su corazón, que parecía que se le iba a salir del pecho.
¿Cómo que estás aquí tan solo¿Dónde están Granger y Weasley?
Hermione no nos habla a ninguno de los dos, y Ron... bueno, su sueño de pertenecer a un equipo de quidditch a desaparecido, y se ha ido.- dijo Harry recordando.
¿No crees que deberías ir a ver cómo se encuentra? Una mano amiga le vendría bien en estos momentos, es más, los amigos están para eso, para ayudarse los unos a los otros- dijo Cho tranquilamente.
Sí, pero en estos momentos es mejor que esté solo.
Cho no dijo nada, tal vez Harry tenía razón. De nuevo se produjo el silencio, aunque con la salvedad de que esta vez fue Harry quien lo rompió, por la sencilla razón de que debería parecerle estúpido a Cho, y eso no podía permitírselo.
¿Qué tal con el quidditch?
Bien, muy bien, he mejorado mucho- dijo sonriente Cho Chang- este año no lo tendréis tan fácil, he mejorado mi tiempo. La última vez que atrapé la snich, tardé dos minutos.- concluyó orgullosa.
Excelente- dijo Harry impresionado- ¿Cómo has mejorado tanto?
Entrenamiento y más entrenamiento.- rió.- por cierto, me he enterado de que estás en la selección de Hogwarts ¿no es cierto?
Sí, es cierto.- se limitó a decir Harry.
Va a ser un equipo muy bueno... si lográis vencer a Saberhaguen, no creo que tengáis ningún problema con el resto de los equipos. Beauxbatons no tiene un equipo demasiado brillante, Durmstrang será algo más difícil, sobre todo con Víktor Krum en el equipo. Este año tendremos problemas con el colegio Vêlonniz, nunca ha destacado en este tipo de competiciones, pero este año tienen a un jugador extraordinariamente bueno, Francoise Pignon... ¿y como olvidar al colegio Lorthom? Con su capitana Nathaly, que el año pasado dio tantos problemas a Lydia, la capitana de Saberhaguen y... ¿te estoy aburriendo?- preguntó al fin Cho, al ver que se estaba extendiendo tanto.- Es que me emociono hablando del quidditch.
No, por supuesto que no me aburres, a mí también me interesa mucho el quidditch, pero... ¿cómo sabes tanto acerca de este torneo?- preguntó extrañado Harry.
Bueno, es que mi padre es el que organiza este torneo desde hace varios años, pero solo me comenzó a interesar el año pasado, cuando me enteré que Hogwarts participaría en el próximo.- Ambos sonrieron.
Sabes, no sabía que existían tantos colegios de magos.- dijo Harry sin dejar de sonreír.
Sí, bueno, es que están a mucha distancia, y por eso no habías oído hablar de ellos, pero sí, existen, muchos más de los que te he mencionado, y de verdad que tiene que merecer la pena visitarlos, me gustaría tanto ver los castillos de otros colegios...- dijo Cho mirando al horizonte.
¿Te gustan los castillos?- preguntó Harry, se había dado cuenta, que no sabía apenas nada sobre ella, nada de su familia, ni sobre sus gustos... nada, solo algunos pequeños detalles.
Sí, me apasionan. Cuando termine Hogwarts, visitaré todos los castillos del mundo, estudiar su historia... y si me queda tiempo, me haré profesora de historia de la magia... aunque no serán tan aburridas como las que nos imparten a nosotros... lo siento, me estoy empezando a volver a emocionar...- dijo con una sonrisa. (se le cae una gota de la cabeza U)
Harry sonrió, se había dado cuenta que Cho Chang había cambiado mucho desde la última vez que la vio, no solo físicamente, sino también psicológicamente... ahora parecía más confiada de sí misma, más alegre... de pronto dejó de sonreír.
También ha cambiado- pensó Harry.
¡CHO!- gritó una muchacha de pelo castaño a lo lejos- ¿VIENES?
¡SÍ¡YA VOY!- gritó Cho a sus compañeras de Ravenclaw.- Bueno Harry, te tengo que dejar. Hasta pronto.- e inexplicablemente, besó a Harry en la mejilla, y se alejó del lugar.
El chico estaba totalmente impresionado, tenía los ojos como platos, Cho Chang le había besado... a él, aunque fuese solo como amigos.
Harry se quedó durante unos minutos en la misma posición, y con la misma expresión en el rostro... de felicidad absoluta. Se incorporó, y salió del lugar.
Es un día maravilloso- dijo en voz alta.
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Está bien – dijo Electra terminando de escribir en su diario, algo colorada.- he anotado todo lo que era importante... ¿qué es eso?- dijo mirando a través de la ventana.
¿El qué?- dijo Flibby mirando también por ella.
Ese bicho se está burlando de mí- dijo indignada.
¿Pero se puede saber qué bicho? Yo no veo nada- continuó Flibby.
Te habrás visto tú- discutía Electra con el bicho, ignorando por completo a Flibby.- viscoso, morado, y con un solo ojo.
Wood estaba por los suelos, reía sin parar, llorando de la risa. Electra miró hacia él, y se enfadó aún más.
Encima tú le apoyas- le gritó furiosa.- ¿Te parezco una morsa marina?
Wood soltó una gran carcajada, eso era demasiado, ya no podía más. Flibby los miraba a los dos, parecía que se habían vuelto locos...
Ya lo entiendo- dijo Flibby comprendiendo- Los escudos están empezando a hacer efecto.- Flibby también comenzó a reír, se había contagiado de Wood, que seguía riendo por los suelos.
Parad ya- gritó Electra.
No lo hago aposta jajajajajaja- dijo Wood sin parar de reír- es este duende, que jajajajaja, me está haciendo cosquillas, jajajajaja
Flibby siguió riendo como loca, al ver aquella situación, ver a Wood por los suelos, mientras que Electra estaba a punto de perder los nervios, con el supuesto monstruo morado que estaba en la ventana.
¡Flibby! Así que todos os aliáis al monstruo ¿eh?- gritó desesperada Electra, mientras los otros dos reían sin parar.- pues os daré algo para que os dejéis de reír.
No, Electra, espera- gritó Flibby. Demasiado tarde, Electra juntó las manos, y pronunció el hechizo.
Thunder- e inmediatamente un trueno rompió los cristales, y otro más débil, cayó entre Wood y Flibby. Sin embargo, esto no evitó que Wood dejara de reír, todo lo contrario, reía más, si era posible.
Unos pasos se oyeron, y se acercaban cada vez más a ellos. Detrás de la puerta, que se abrió rápidamente, apareció Lirio.
Creo que ya es hora de que os borre la memoria, no conviene que sigáis así, sino, acabaréis rompiendo todo el castillo.- dijo Lirio tranquilamente al ver a Flibby y a Wood por los suelos.
Un momento, jijiji- dijo Wood incorporándose y acercándose a la cama donde estaba Electra muy enojada.- ¿nos vas, jaja, a borrar la memoria?
Sí, no recordaréis nada de lo que acabáis de hacer.- dijo seriamente Lirio.
Entonces... te quiero- dijo Wood a Electra dándole un beso en la boca, rápidamente, antes de que ella reaccionara.
Ahora por favor- dijo Wood a Lirio que no acababa de creérselo.
De acuerdo- rió ella- Ovlibiatem- agitó su varita, y los tres quedaron dormidos.- Lo que hay que ver- pensó Lirio, saliendo de la habitación.
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Qué bien he dormido- dijo Electra despertando tras unas cuantas horas.- ¿Qué hacen Flibby y Wood dormidos en mi habitación?- dijo viendo a Flibby dormida en el suelo, encogida como una pelota, y a Wood de rodillas a su cama.- ¡Ay! Me duele la cabeza... ¡Vaya¿Qué hace aquí mi diario¿Quidditch?- llamó Electra suavemente para no despertar a los otros- ¿Dónde estás?
De pronto, un fénix salió de un armario que había en la habitación, y fue a posarse en el hombro de Electra. Ésta le acarició, y abrió su diario para comenzar a leerlo.
Tras una hora, acabó de leer todo lo que había escrito.
Es increíble lo que puedes llegar a olvidar, así que Voldemort apareció, y por eso estoy aquí... y Wood fue a buscarte ¿no es cierto Quidditch?- el pájaro asintió.- bueno, pero tengo una pregunta¿por qué han dormido también a Flibby? Ella no ha visto ningún escudo... y algo más¿qué...?
Hola¿qué tal estás?- dijo Lirio interrumpiendo a Electra.
Shhh- exclamó Electra, para evitar que Lirio despertara a Wood y Flibby.
Bien, he dormido muy bien- dijo guardando su diario bajo la sábana.- sabes, me alegro de haber dejado de ver aquellas ilusiones causadas por el escudo de la casa del fuego... no sabía que habíais conseguido la manera de hacer que no veamos espejismos, y poder recordar todo lo demás.- disimuló Electra.
¿Cómo¿Acaso recuerdas todo lo que ha pasado?- preguntó Lirio estupefacta.
Sí, todo lo de Voldemort, que mi padre vino a verme, y...
Fue increíble- interrumpió Lirio, sentándose a su lado, muy sonriente- nunca creí que Wood se te declarara en esta situación... creí que era un chico muy tímido, cuando le conocí aquí... ¿quién diría que hasta te besaría?... aunque le echó agallas... una escena muy bonita... lástima que se le haya olvidado... bueno, aunque tú lo recuerdas bien ¿no?- preguntó Lirio.
Claro- disimuló Electra más pasmada que nunca. ¿Wood se le había declarado? Y no solo eso¿la había besado?
Cuando llegué aquí quedé impresionada, parecía como si se hubiese montado una fiesta en esta habitación... no sé, los cristales rotos, y Flibby y Huragano riéndose a carcajadas, y tú con una cara de odio profundo... no sé qué paso... prefiero no saberlo... bueno¿y qué le vas a decir?
Bueno, él no recordará nada, así que tengo tiempo para pensarlo... la verdad es que no lo sé...- dijo Electra dudosa.
¿Lo vas a pensar?- dijo sin acabar de creérselo Lirio- si estás loca por él, se te nota a la legua.
Sí, pero...- Electra se quedó pensativa.
Haz lo que te parezca, no me voy a meter en asuntos amorosos ajenos... aunque, es un chico muy majo¿por qué no arriesgarse?
Asuntos personales- rió Electra.
¡Ay, mi espalda!- se quejó Wood que se acababa de despertar.
¡Mi cuello!- gimió Flibby.- podríais haberme prestado alguna almohada ¿no?... por cierto... ¿qué hago en el suelo? O mejor aún¿qué hago en la enfermería?
Eh... esto...- Electra no sabía qué decir.
Has venido a hacerle una visita a tu amiga Lydia, pero has debido inhalar los polvos del sueño que administro a mis pacientes para que tengan un dulce sueño, y así poder curarles con mayor facilidad... por eso te has quedado dormida en el suelo- mintió Lirio.
Al menos podías haberme tapado, o haberme dejado una almohada, que no os costaba tanto... ahora tendré tortícolis durante unos días.
Es que cada vez que nos acercábamos, aparecía un círculo de fuego a tu alrededor, y no nos dejaba acercarnos, o prestarte una almohada.- siguió la mentira Electra.
No sé, pero tengo la sensación de que la espalda se me va a romper de un momento a otro.- siguió Wood.
¿No recuerdas nada de lo que pasó Wood?- preguntó Lirio maliciosamente.
No¿por qué¿Pasó algo importante?- dijo inocentemente.
No, nada- dijo rápidamente Electra mientras tapaba la boca de Lirio.- Bueno, ya estoy mucho mejor, como nueva, muchas gracias por tus cuidados Lirio.
Está bien, pero tienes que quedarte aquí solo por unas horas más.- dijo Lirio con un poco de indignación.
Pero si no me pasa nada, estoy como nueva... ¡no! Mejor aún- recalcó Electra.
No te servirá de nada, te vas a quedar, te guste o no, así que no te comportes como una niña- Lirio salió de la habitación.
Sabes, voy a ir a comer algo a ver si me despejo un poco- dijo Flibby todavía dormida, mientras salía de la habitación.
Bueno, al fin solos- dijo Wood mirando a Electra- todavía no me has contestado.
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NOTAS DE AUTORA: Toma ya que cortada le ha hecho Wood a Electra... jajajajajjaaja... y q pasara con Malfoy y Hermione, con el basilisco? Y con el pobre Ron? Con la antipática de la prima de Wood? Con Cho y Harry? Me encanta Quidditch! Dew
Almu-chan
PD: me preguntaron que cómo podía sobrevivir aquella serpiente... en una historia alternativa, la serpiente se alimenta de galletas, existentes en una caja que está junto al cadáver de Salazar...jejejejeeje (es que me hizo mucha gracia cuando me lo propusieron... )
PD2. Aggggg! he tenido que subirlo desde otro ordenador, así que no recuerdo qué puse en estos comentarios la otra vez... es decir, de las cosas que me preguntan... en fin, ya las contestaré! Saludos.