Wolas! Estoy otra vez aquí y quiero que sepáis que voy estresada y la gente que vive en España me entenderá ¡LAS VACACIONES SE TERMINAN! Buaaaa... no quiero... snif,snif.

Bueno, una vez sacado esto que llevo dentro nos volvemos a poner en el fic, jeje. Este capi es más corto, en un principio era un capi entero este capi y el siguiente pero entonces se decía demasiada información de golpe.

Sabremos el resultado de la apuesta del capi pasado y como reaccionan todos a partir de hora y una aventura por parte de la familia Thomas, tachán.

Os lo dejó aquí y espero que os guste el capi

Nos vemos a bajo!


-Bien, estamos reunidos aquí – dijo Cloe mirando a sus amigas, todas y cada una de ellas con sus respectivos novios - ¿Queréis dejar de hacer eso? – preguntó Cloe a James que mordisqueaba la oreja de Lily mientras esta sonreía avergonzada – Bien – dijo al ver que se separaban – Para cumplir nuestra parte

-Vuestra – aclaró Alice

-Así es. Cloe, tienes que comprometerte a dejar de coquetear con cualquier chico hasta fin de año – dijo Sirius – Y no quiero verte cerca de Malfoy – añadió.

-Eso no iba en el plan – dijo Cloe

-Pues lo añadimos nosotros – ayudó James a Sirius

-Bueno – respiró cansada – Nada de hacer manitas con Malfoy – Lily y Alice ni tan solo la miraban, solo con imaginarse a Cloe con Malfoy haciendo lo mismo que hacían ellas con James y Frank, respectivamente, les daban arcadas. – Y Sirius…

-Lo haré en privado, sino te importa – dijo el chico

-Bien, pues todo aclarado. Ahora me voy a dormir – la chica se dirigía a las escaleras del dormitorio cuando la mano de Natalie la retuvo

-A clases cariño – y sin más la llevo a rastras hacia su próxima clase


James iba por el pasillo con Lily cogida de la cintura. Al parecer se había tomado al pie de la letra proteger a su chica. Y cada chico que venía a pedirle por salir a Lily él los miraba con una mirada asesina y estrechaba más fuertemente a la chica de la cintura mientras ella replicaba que no hacia falta ir agarrados todo el tiempo.

Por el pasillo vio que Remus iba hablando con Natalie y comprobó lo que realmente había pasado. Los chicos, al ver que no habían Merodeadores vigilando a las chicas se pensaban que podían acercarse a ellas sin temer a las represalias, pero ahora se encontraban sorprendidos al encontrarse con los chicos que los miraban como si atacaran a su territorio sagrado.

-¿Has visto a Alice? – preguntó Lily cuando las dos parejas se encontraron

-No, por lo que sé se fue a hablar con Dumblembore, sobre la custodia – dijo Natalie - ¿Y Cloe?

-Está con Sirius – contestó James

-¿Creéis que está bien? – preguntó esta vez Remus

-No creo que le diga nada – dijo James

-¿Y si lo hace? – preguntó Lily mirando a Natalie que ahora se encontraba mirando por la ventana

-Es mi hermana gemela pero… no soy telepática – dijo encogiéndose de hombros – No tengo ni idea de cómo reaccionará.


-Bien Blacky. Empieza a cantar – Cloe y Sirius se encontraban en la torre de Astronomía. Ella sentada en el alfeizar de la ventana mientras él estaba en el suelo con las camas cruzadas

-No puedo decirlo así como así Cloe

-¿Quién es? – preguntó dulcemente

-Yo… - intentó decir el chico rascándose nerviosamente la nuca

-No importa – ella se acercó y cogió el rostro del chico entre las manos – Cuando estés preparado para admitir que te has enamorado de verdad me lo dices ¿si? – los ojos de Cloe lo miraban sin rencor ni malicia, solo con ternura

-¿Cuándo empezamos a ser amigos?

-¿Te importa? – él negó con la cabeza

-Pero… no hemos dejado de hacer bromas a Slytherin (n/a: Aunque yo no haya dicho nada ellos han hecho bromas y muuuuuuuuuuchas)

-Si, a Snape últimamente. ¿Sabes que Jane llega cabreadísima porqué no ha podido verlo, una vez más?

-No. Pero… ¿por qué me lo dices a mí? – preguntó inocentemente

-Por nada – dijo ella con ironía – Me gusta cuando no tienes el posado de chico arrogante, malcriado, el mejor en todo, el más guapo, y la lista se alarga – Sirius cogió las manos de la chica que aún se encontraban en su rostro y besó la izquierda con ternura

-Puedo cambiar

-¿Por mi?

-Por ti

-No quiero que cambies por mi, quiero que cambies por esa personita que se te ha puesto aquí – dijo poniendo una mano encima del corazón – Venga, es hora de cenar – se levantó de repente y alargó la mano hacia el chico para se levantará, él estaba con la boca abierta iba a decir algo, algo que descubrió en ese mismo instante.


Cuando el grupo quiso darse cuenta el segundo trimestre había llegado a su fin y se encontraban con exámenes encima. James se fastidió muchísimo al ver que Lily estudiaba con mucho entusiasmo y que casi no tenía tanto tiempo para él, aunque de vez en cuando lo sorprendía con un caluroso beso que él recibía de buena gana. Alice y Cloe estaban haciendo codos, no es que fueran malas estudiantes, solo que no tenían la misma facilitada que Natalie o Lily para los estudios, muchas veces compartían mesa con Peter y Frank.

Mientras Remus estudiaba junto a Lily y Natalie e intentaba convencer a Sirius y a James que hicieran lo mismo, pero era un caso perdido y no quería ni pensar en como saldrían los EXTASIS de ese año.


-Dumbledore nos llama a su despacho – Jane se acercó a las chicas que estaban estiradas a la orilla del lago, libres de novios y de libros

-¿A nosotras? – preguntó Natalie a lo que Jane asintió con la cabeza

-¿Seguro que no se ha equivocado¿No busca a los Merodeadores? – dijo Lily sin ni siquiera quitar la vista del cielo ni levantar su cabeza de la tripa de Alice

-No, solo a los Thomas – Cloe y Natalie la miraron extrañada – Dice que es urgente – sin decir más las tres Thomas se fueron prometiendo contarles después.


-Señoritas, señor Thomas – dijo el director al ver como entraban a la habitación los cuatro integrantes de la familia

-Director la última vez que nos llamó a su despacho fue por decirnos que los padre de James estaban… - Natalie bajó la vista

-Así no quiero que nos diga que ha pasado algo parecido – terminó Cloe la frase de su hermana

-Cloe por favor – se quejó Jane - ¡No llames al mal tiempo!

-Vuestros padres han pasado vuestra custodia a los señores Malfoy y por lo tanto tienen que ir a su casa estas vacaciones

-¿Qué les ha pasado a mis padres? – preguntó Natalie

-Los atacaron

-¿Quién? – exclamó con fuerza la rubia

-No lo sabemos, no pudimos determinar si fue Voldemort por estar en su contra – Mark se estremeció al sentir el nombre – o fueron aurores. La cuestión es que estaban entre medio de fuegos y…

-¡Mis padres no eran mortífagos profesor! – Natalie se levantó con todo el temperamento – Puede que fueran amigos de los Malfoy pero nunca han creído en Voldemort – Mark se volvió a estremecer

-Señorita Thomas por favor… - intentó decir Dumblembore

-No director. Quiero que nos hablé claro – Cloe también se había levantado - ¿Qué cree el Ministerio de Magia? – Dumblembore bajó la vista

-Vuestro padres han sido acusado de mortífagos y a vosotros no os han hecho nada porqué sois menores y os encontráis en Hogwarts – Jane se desplomó en la silla que Natalie había dejado libre – El señor Malfoy me pidió que os mandará a su casa y que viviríais con él hasta que fuerais mayores

-Profesor… - Natalie lo miró, había algo más, ella lo sabía, lo sabía por culpa de esa maldita carta y su director también

-Creo Natalie, que es hora de tomar decisiones y pensar en lo mejor – Cloe miró extrañada al director y a su hermana

Cuando llegaron a la Sala Común y explicaron a sus amigos lo que había pasado James fue el primero en abrazarlos. Natalie sonrió agradecida y dijo que se marcharían mañana mismo. Tenían que arreglarlo todo, además que su hermano Josh también iba a ir, aunque fuera en contra de la petición del señor Malfoy.

-No te preocupes por nada – dijo Remus abrazando a Natalie con fuerza

-Siento dejarte en tu noche de luna llena – Natalie lo miró a los ojos – No me gusta verte tan pálido

-Tranquila, los chicos no se apartaran de mi lado – sonrió él

-Eso espero porqué sino los cortaré en cachitos muy pequeños y los freiré con sal y pimienta

-Siento mucho… - Natalie lo calló con un dedo en los labios

-Te amo Remus – se elevó un poco y besó tiernamente los labios de Remus – Quiero que te quedé siempre claro, pasé lo que pasé.

-No pasará nada

-Eso espero Remus, eso espero – Remus la besó apasionadamente

-¡Eh¡Que quiero a mi hermana no a un agujero negro! – se quejó Cloe haciendo separarlos rojos de vergüenza

-No seas corta rollos Cloe – dijo Sirius que estaba a su lado

-¡Yo no soy corta rollos! – le gritó.

-Es verdad – dijo Jane que bajaba junto a su baúl – El único corta rollos aquí eres tu maldito Black

-¿Yo? – preguntó inocentemente

-¡Si¡Tu¡Esta vez te pasaste¡Severus no podrá moverse de la cama durante una semana!

-¡Mira que bien! – dijeron a la vez Sirius y Cloe – Así cuando vuelvas ya podrá estar para ti solita – dijo la última guiñándole el ojo - ¿Verdad Black? - Y ante esto una discusión a tres bandas empezó.

-¿Estás listo Mark? – preguntó Natalie, el pequeño asintió – Bien, nos vamos. Os quedáis aquí – dijo un suave beso en los labios de Remus después de mencionar un te quiero y se dirigió a la puerta de salida

-¡Eh! – gritó Cloe al ver que Jane la dejaba sola con la discusión con Sirius – Nos vemos Black, cuídame a Alice y a Lily

-¿No quieres que me cuidé de alguien más? – preguntó señalándose a él mismo

-Si a James y a Frank, me haríais un favor – después dio un beso en la mejilla a Alice y otro a Lily y se fue hacia el retrato de la Dama Gorda. Antes de salir se giró y le dijo – También a ya sabes quién – le guiñó el ojo y se fue

-¿Le dijiste algo? – preguntó James que se acercó a él

-Nada

-¿Aclaraste algo?

-Demasiadas cosas James, demasiadas – sin decir más subió a su cuarto


Los alumnos se preparaban para marchar. Frank se marchó a su casa para ver a su familia ya que durante las vacaciones de Navidad no había ido, aunque había ofrecido la oportunidad de ir con él, Alice se negó diciendo que no estaba preparada para conocer a su familia, y gracias a un par de comentarios de Sirius, hizo enrojecer a la pareja. Lily también se quedó, junto a James, ella no tenía donde ir ya que sus padres habían muerto el año pasado y su hermana, bueno, ella se había casado y seguro que no la echaba en falta. Sirius también se quedó ya que, al desaparecer la familia de James, se había quedado sin familia adoptiva.

Mientras, en el tren de vuelta a casa se encontraban en el mismo compartimiento los más pequeños de la familia Thomas.

Jane se encontraba dormida con la cabeza apoyada en el hombro de Cloe, ésta también estaba dormida apoyando su cabeza con la cabeza de Jane y Mark estaba con la cabeza en las rodillas de Cloe. Natalie miró a sus hermanos, se veían tiernos así y seguro que más de un chico pagaría por tener una foto de ese momento. Natalie salió del compartimiento, trabó la puerta con magia y la silencio, no quería que nadie los despertará, no ahora, no para que pudieran pensar en lo que había pasado y en lo que les esperaba.

-Natalie – la chica levantó la cabeza y se encontró delante de ella a Albert Zabini

-Albert – dijo con un susurró y sin más se abrazó a él y lloró.

-Tranquila – dijo con voz tranquilizadora y se la llevó a un lado del vagón donde nadie la viera llorar – Todo pasará, ya lo verás

-Pero… mis padres…

-No están muertos Natalie – la chica levantó la mirada

-¿Cómo?

-Tu madre está en el hospital, en coma, no reacciona. En tus manos está la responsabilidad de mantenerla en vida

-¿En mis manos? – preguntó Natalie

-El padre de Lucius te lo contará mucho mejor – y mientras la tenía cogida por los hombros la llevó a su compartimiento – Estaré a tu lado Natalie – besó suavemente su frente – Te lo prometo

-Albert yo… yo estoy con Remus y… te quiero pero como un amigo Albert

-Lo sé – y sin más se fue dejando a Natalie sola en el pasillo del tren

Cuando bajaron en la estación del King Cross Natalie pudo distinguir al señor Malfoy a la perfección. Vio como Lucius, acompañado de Natasha y Albert, iban hacia él. Se giró hacia sus hermanos y vio como Jane limpiaba la cara de su hermano con un pañuelo y este rechistaba y como Cloe se despedía de un par de chicos, al parecer la apuesta con Sirius había quedado al olvido, al menos hasta que volviera a Hogwarts.

-Buenas tardes señor Malfoy – saludó educadamente Natalie cuando los cuatro hubieron llegado a donde se encontraba

-Natalie puedes llamarme Abraxas, ahora soy tu padre legal – Natalie sonrió más que por compromiso que por otra cosa – Tenemos que hablar, pero no aquí – ella asintió, siempre bajo la atenta mirada de su hermana. Cloe sabía que había algo que se le escapaba.

Al no poder aparecer unos coches oficiales habían ido a recogerles. En el primero fueron la familia Malfoy, en el segundo Natalie junto a Mark y Albert Zabini y en el tercero Cloe y Jane que estaban batallando para que cupieran los baúles en el maletero.

La mansión Malfoy era tan impresionante como siempre. En la entrada ya estaban los sirvientes, a los cuales dieron sus ropas y sus baúles. Después fueron encaminados hacia el gran salón donde se encontraron con una mujer de la misma edad que Malfoy padre

-Buenos tardes Abraxas

-Victoria – dijo con un simple movimiento de cabeza – Chicos – dijo refiriéndose a los Thomas – Os presentó a la señora Victoria Zabini

-Muchos gusto señora – dijeron a coro los cuatro. Se fijaron en ella. Tenía una larga melena castaña atada en un elegante moño, iba con una capa azul marino que le daba un toque de realeza. Sus ojos eran verdes y sus facciones muy maduras y hermosas

-El gusto es mío

-Bueno, tenemos mucho de que hablar y poco tiempo. Ha llegado ya… - pero el señor Malfoy no terminó la frase

-¡Chicos! – una voz masculina pero juvenil hizo que todos los de las sala se giraran. En la puerta había un chico, de unos 23 años de edad. De piel oscura y ojos de color café, vestido con una túnica sencilla, muy diferente a la de la señora Zabini o la del señor Malfoy.

¡Joshua! – Cloe dejó el abrigo que tenía en la mano, el cual se había negado a dejar con los criados y corrió hacia el chico. Se lanzó a sus brazos, con tanta fuerza que lo tiró al suelo

-Ay que daño – se quejó el mayor con una sonrisa en la cara – En tus 17 años y con tus vicios de pequeña Cleopatra – dijo con ternura el hermano mayor de los Thomas abrazando a Cloe

Cuando finalmente los dos hermanos se levantaron del suelo Mark y Jane se acercaron, eso si, Cloe no dejó de abrazar a su hermano mayor en ningún momento. Joshua miró hacia Natalie y fue entonces cuando Cloe dejó a su hermano, solo por cinco minutos. Josh se acercó lentamente hacia la rubia

-Natalie estás preciosa – dijo con voz suave

-Eres un idiota – y sin más se refugió en sus brazos – Un gran idiota – dijo llorando en su pecho. Albert y Lucius se enternecieron al ver a Natalie con tanta necesidad de llorar y abrazando a su hermano mayor

-Lo sé, siento mucho no haber podido estar a vuestro lado – dijo con una sonrisa mientras abrazaba a Natalie y sentía como su túnica se empezaba a humedecer

-Bien – el señor Malfoy cortó esa demostración de afecto, no le gustaba ese chico y no iba a permitir que sus preferidas de la familia Thomas se encariñaran demasiado con un hermano que nunca más volverían a ver – Necesitamos hablar del sistema legal – Natalie y Joshua se separaron y miraron al señor Malfoy, a este descuido Cloe se les unió al abrazo y Josh ni siquiera protestó.

-Creo, con todos mis respetos señor Malfoy, que los chicos están muy cansados hoy por hoy, además que decirlo todo de golpe sería demasiado… duro – intentó hacer razonar Josh

-Creo que como antes mejor

-Abraxas – intervino por primera vez la señora Zabini – Quizá sería mejor que hablarás con ellos de la salud de sus padres y mañana, después de descansar, hablarais de los temas legales – el señor Malfoy miró a Victoria y pareció repensárselo

-Bien. Lucius lleva a Albert y a Natasha a sus habitaciones mientras yo tengo una conversación con los Thomas – el chico solo asintió y sin decir más los otros dos le siguieron – Tomad asiento – Jane y Mark se sentaron en un sofá de color verde oscuro, mientras que en la butaca de delante estaba sentada Natalie y en el reposadero Cloe

-Quiero que sea sincero señor Malfoy – fue lo único que dijo Joshua. El señor Malfoy dejó ir gruñido y dio la palabra a Victoria

-Elizabeth se encuentra en un estado de coma, por desgracia vuestro padre no ha sobrevivido – dijo en un susurró. Cloe se dejó caer hacia Natalie y esta la abrazó con fuerza mientras Jane hacia lo mismo con Mark

-¿Cómo está mama? – preguntó Natalie

-Ni los médicos magos ni los muggles han encontrado una solución para hacer despertar a una persona del coma pero… Elizabeth está gravemente herida y su mantenimiento en coma es realmente costoso…

-Pero ese no es el problema ¿verdad? – preguntó Joshua

-No – dijo Victoria en un susurró – El problema es que posiblemente nunca despierte y…

-Quieren que demos nuestra autorización para poder dejarla morir ¿verdad? – preguntó Natalie

-Así es Natalie – dijo el señor Malfoy – Personalmente pienso que es lo mejor y…

-¡No! – Cloe se levantó - ¡Piensan dejar morir a mi madre¡No es problema de dinero ni tampoco de tiempo!

-Es de mantener falsas esperanzas – dijo Natalie – Además, ahora nuestra custodia está en manos del señor Malfoy y tienen que dar una respuesta

-¿Qué sugieres? – preguntó Jane con lágrimas en los ojos

-Un Malfoy nunca debe mantener las esperanzas ni tampoco llorar ¿verdad? – preguntó Joshua

-Solo existe la realidad – dijo en un susurró el señor Malfoy – Natalie, realmente quería a Elizabeth como a una hermana pero ahora tenemos que pensar en lo mejor para ella

-Lo sé – dijo en un susurró.

-Cuando vuestra madre despierte tendrá que enfrentarse a un mundo sin vuestro padre, sin el hombre al que amaba y… - empezó la señora Zabini

-Es posible que nosotros no estemos aquí Natalie – dijo Josh

-¿Por qué dices eso? – preguntó Cloe – Gracias por tu optimismo – dijo con burla

-¡No es momento de bromas Cleopatra! Siento ofenderle señor Malfoy – dijo Joshua antes de continuar – Pero no creo que todos nos unamos al lado oscuro, y si lo hacemos, quien te dice que no nos cojerán. Cuando mama despierte es posible que todos hayamos cambiado demasiado o que no podemos hacerle de apoyo tanto como necesitará.

-¿Estás sugiriendo que la matemos? – preguntó Jane

-Es lo mejor – dijeron Natalie y Joshua a la vez

-¡Y una mierda lo mejor¡Es mama! – saltó Mark

-¡Mark¡Es un vocabulario inapropiado! – le soltó Natalie

-¡Pero tiene razón! – Ahora era Cloe quien hablaba - ¡Me da igual que no estemos¡Quiero que mama viva!

-¿Te imaginas la vida sin Black? – preguntó de repente Natalie

-No metas a Sirius en esto – respondió Cloe

-¡Respóndeme!

-¡Sabes que no puedo responderte!

-¡Pues mama sentiría lo mismo!

-¡A la mierda Natalie¡Haz lo que quieras¡Pero que conste, que me opongo, y seguro que Remus me apoyaría! – y sin más cogió a Mark de la mano y se lo llevó de ahí.

-¿Qué hacemos Jane? – preguntó Natalie a la rubia de delante suyo

-No me hagas decidir a mi Nat, si quieres hacerlo hazlo, pero no digas que el voto decisivo fue el mío – se giró hacia el señor Malfoy y la señora Zabini y educadamente se disculpo por su comportamiento y se fue

-¿Y bien? – preguntó Natalie

-Mañana iremos al hospital – dijo con voz fría el señor Malfoy, besó a Natalie en la frente, lanzó una mirada asesina a Joshua y también se fue


Mañana por la mañana, los Thomas junto con el señor Malfoy se dirigieron al hospital. Preguntaron a la señorita de recepción sobre la habitación de Elizabeth Thomas y se dirigieron hacia ahí. La madre de los chicos estaba tumbada en una camilla, su largo pelo rubio estaba recogido en una trenza que se posaba elegantemente en su hombro. Su semblante era de tranquilidad.

-Hasta dormida se ve madura y elegante – dijo Natalie

-Si, y también tranquila y refunfuñona – dijo Cloe, ante este comentario todos sus hermanos sonrieron – Quiero que despiertes mama – dijo tomando suavemente su mano

-Chicos – el señor Malfoy entró en la habitación – He estado hablando con un médico, tenéis media hora y después la dejaran descansar…

-… para siempre mama – Joshua besó suavemente su frente y esperó a que el señor Malfoy se marchara – Creo que cinco minutos cada uno habrá suficiente ¿verdad? – los demás asintieron y lo dejaron a solas con ella – Kim está muy bien¿sabes? Está embarazada de nuestro primer hijo – sonrió francamente – al parecer será una niña ¿qué te parece el nombre de Elizabeth? Aunque no será maga, consulte con una poción que me dio un amigo mío y al parecer no tiene poderes pero… no importa, será la más hermosa y la más bella persona que ha existido. Lo prometo – besó suavemente su frente – Tus hijas están preciosas. Te quiero mama

Poco a poco, los demás también hablaron con ella. Y finalmente vino el doctor. Con un movimiento de varita hizo que los tubos que tenía en los brazos, que le servían para alimentarla artificialmente.

-¿Cuánto… - intentó preguntar Cloe pero el sollozo de Jane la cortó.

-Hoy mismo, su madre está muy débil – dijo el doctor y se marchó sin más

-Nos vamos – y sin más el señor Malfoy los obligó a abandonar – El entierro será esta tarde, junto a la tumba de vuestro padre – solo lo escuchaban Natalie y Joshua – He quedado con Victoria, mañana se hablará de lo legal y las custodias. Así que tranquilos, al menos por hoy.


La ceremonia fue pequeña, con varios amigos en común de la familia Malfoy y Thomas. Natalie divisó el profesor Dumblembore junto a la profesora MacGonagall. También estaba la familia Longbottom, los cuales desearon lo mejor a los Thomas y Frank dijo que en Hogwarts hablarían al observar la mirada de Lucius Malfoy.

Albert Zabini, junto a su madre, no se separaron de su lado en ningún momento.

-Cuidaos – se despidió el señor Parkinson junto a su hijo que hacia sexto en Hogwarts

-Gracias señor Parkinson – dijo educadamente Cloe

-Si, gra… - Natalie se mareó, empezaba a ver borroso y cayó pesadamente al suelo. Albert se acercó rápidamente a ella y la cogió en brazos

-Vamos a casa


-Nat… - Natalie abrió los ojos y vio como Jane le hablaba - … ¿estás bien?

-¿Qué pasó? – preguntó intentando levantarse de la cama – ¡Ay¡Que mareo!

-¿Cuántos días hace que no comes bien?

-Yo como bien

-¿Y duermes? – ella bajó la vista

-Estabas agotada y te desmayaste. Tienes demasiadas obligaciones Natalie – dijo Jane

-Si…

-Cuando lleguemos a Hogwarts le diré a Remus que no te deje hacer ni un solo trabajo – las dos sonrieron – La señora Zabini hace dos horas que ha llegado y están hablando con Josh, esperando que tu despiertes

-OH, está bien. Me ducho y bajo

-Hoy descansa – le recomendó Cloe entrando en la habitación

-Mejor todo a la vez y así me desmayó una vez más y ya está ¿no? – las tres chicas se pusieron a reír – Bueno. ¿Les decís que ahora bajo? – las otras dos asintieron – Y yo que vosotras escribiría a vuestros novios

-¿Novios? – preguntó Cloe confundida - ¡Aquí las únicas con novios sois vosotras dos!

-Se refiere a Black – y sin más Jane la sacó de la habitación


-Natalie – Albert se levantó rápidamente del sillón en el que estaba sentado

-Hola – dijo ella intentando recoger su pelo – Siento lo que pasó ayer

-No importa – dijo el señor Malfoy – Bien, tenemos que empezar ¿no?

-Si – Natalie se sentó en el sofá que Albert había dejado libre

-El testamento de vuestros padres es un poco complicado pero… - intentó decir Victoria pero fue callada inmediatamente por Abraxas Malfoy

-La custodia de Mark va hacia Joshua – dijo sin más el señor Malfoy, al parecer no le gusto la idea que el único chico fuera hacia el hijo que salió "mal"

-¿Y qué hay de nosotras? – preguntó Natalie

-Ahí está lo complicado y es por eso que Albert y tu estáis aquí – el chico miró a su madre extrañada – Estáis comprometidos

-¡Cómo? – Natalie se levantó como si le hubieran pellizcado el trasero

-La hermana mayor tiene que casarse para poder conseguir la custodia de las otras dos hermanas – dijo leyendo el testamente el señor Malfoy

-Pero… Cloe es la mayor – aclaró Joshua

-Si, es verdad – admitió la señora Zabini – Pero aquí dice que eres tu la que te tienes que casar. Al solo tener 17 años las dos, no sois mayores de edad, pero si tu te casas conseguirás una mayoría de edad "legal" y así poder tener la custodia de tus dos hermanas

-Pero, puedo escoger con quien quiero casarme ¿no?

-No – dijo fríamente el señor Malfoy – Tu eres menor, yo no tengo la custodia de tus hermanas pero si la tuya y yo QUIERO que te cases, y no con ese tal Lupin, sino con Albert

-Pero… - intentó rechistar su hermano

-¡Nada! – Natalie buscó con la mirada a Albert pero este estaba muy interesado en la moqueta y no levantó la vista. Al parecer a él le habían consultado las cosas igual que a ella

-¿Y si no me caso? – preguntó Natalie, su última carta

-Jane será prometida con Nott y Cloe ocupará tu lugar al lado de Albert - "Tu libertad o la de todas tus hermanas", la voz de su conciencia resonó en su cabeza una y otra vez


Ya está¡Os lo dije! Os dije tened cuidado con Albert Zabini y mirad, aquí está, el resultado de mis advertencias. Debo decir que el personaje de Victoria Zabini es totalmente inventado, jeje.

Que decir, vamos que Cloe se ha portado de una manera muy madura (incluso yo cuando lo leo alucino en colores) y que decir de Sirius, pobrecito, pero en el próximo capi sabremos más de él y de su "descubrimiento"

En este fic he querido dar mucha importancia al amor que hay entre hermanos, aún no ha salido pero a partir de este momento la relación entre Cloe y Natalie se estrechará aún más ¡y tendremos más Jane!

No sé que más deciros solo que espero que os haya gustado el capi y doy muchas gracias a h3IdI-Lû, CiNtUrO-cHaN, Dark Angel Miaka y HADA por haberme dejado un review, muchas gracias

Espero que hayáis difrutado del capi y ya sabéis, alguna duda, suggerencia, crítica constructiva y felicitación (si, también acepto de esas, xD) pues me mandáis un review que siempre hacen feliz

Muchos besos y nos vemos en el próximo capi

Se despide con un abrazo

Aya-Mery