Disclaimer¿de verdad creéis que si todo esto hubiera salido de imaginación estaría yo aquí, escribiendo por amor al arte? Pues no, pero como nada es mío, me aguanto. Bueno, los merodeadores son patrimonio de la humanidad, pero como los creó Rowling hay que reconocerle el mérito a la mujer.
Pasemos directamente a contestar los reviews, que por cierto no me tenéis muy contenta,6 reviews. Pero tampoco me tenéis enfadada Es una cifra… intermedia.
>Isa: me alegra que te gustara el primer capi. Y sí, si estoy contenta con la cantidad de reviews que me dejéis, prometo actualizar lo antes posible. Besos.
>Anto: me alegra que te pareciera original. La verdad es que ya está demasiado visto el argumento "Lily y James se odian", por eso me pareció que pintarles como si fueran buenos amigos podía hacerlo más interesante. ¿Te gusta la pareja Sirius/Liz? Buenoooo, ya veremos qué pasa con ellos. Lamento decirte que Peter sí que sale en el fic, concretamente en este capi aunque no te preocupes, que le voy a hacer sufrir bastante. Besos y espero que te guste el capi. Chaoo.
>Maegboriel: me alegra que te gustara el capi. Prometo actualizar pronto aunque eso dependerá de los reviews que me dejéis Chao, besitos.
>Sailor Alluminem Siren: a ver, ahora mismo ni Lily ni James están enamorados simplemente porque son amigos, por eso Lily le pide ayuda a James para que le ayude con Sirius… espero que lo hayas entendido ). Espero que este capi también te guste. Un abrazo.
>NIeVS-LKB: pos no, lo de Dawson no viene por Dawson's creek (de hecho nunca vi esa serie) sino por Rose Dawson, la prota de Titanic. Un besito y me alegra que te gustara el primer capi. Bye.
>Carla Gray: bueno, que como no tengo nada que contarte te aviso que en cuanto actualice todos los fics que tengo descarrilados por varias páginas, te dejo el review de verdad en PAAA. Un beso grande grande.
Pues ahora sí, un disclaimer y varios reviews después, el segundo capi. Espero que os guste. Y por cierto, los diálogos van a ir introducidos por esto: ' y los pensamientos entre las comillas de toda la vida "". Una vez hecha la advertencia… ¡a leer!
Capítulo 2. James, necesito tu ayuda
'James, necesito tu ayuda.
Con estas palabras recibió Lily a su amigo al domingo siguiente en la sala común. El merodeador, que se acababa de levantar de la cama y por lo tanto no coordinaba muy bien, se rascó la cabeza y miró a Lily con cara de no haber entendido nada.
'¿Qué? – se limitó a preguntar el joven, mientras reprimía un bostezo que hubiera hecho temblar los cimientos del castillo.
'Que necesito tu ayuda.
'¿Ayuda? – repitió James con los ojos medio cerrados.
'Sí – respondió Lily con desesperación. ¿Tan difícil era comprender la frase "necesito tu ayuda"? – Ayudar, prestar cooperación, auxiliar, socorrer…
'Vale Lily, veo que eres un diccionario de sinónimos andante – bromeó el moreno al escuchar la cantidad de sinónimos que conocía su amiga de la palabra "ayuda".
'¡James! – se hartó la chica, cuya principal virtud no era precisamente la paciencia. Es más, carecía completamente de esa cualidad.
James tan solo sonrió burlonamente, le encantaba hacerla rabiar.
'Está bien – aceptó James finalmente – Ya sabes que por las mañanas no ando yo muy fino.
'Pues ahora mismo te espabilo yo – aseguró la pelirroja muy resuelta, dándole una colleja.
'¡Au! Mira que eres bestia.
'Lo sé – dijo Lily mostrando una enorme y radiante sonrisa y pasando un brazo por encima de los hombros del chico – Pero tú me adoras tal y como soy¿verdad?
'Hombre – empezó James, encorvado por el peso que ejercía su amiga sobre él – Si fueras un poco más delicada, no me maltrataras tanto y…
'¿Entonces me ayudas o no? – cortó ella en seguida la réplica del merodeador.
'Ya, por el interés te quiero Andrés.
'James… - le llamó la pelirroja a modo de advertencia a la vez que cargaba la mano, dispuesta a propinarle otra colleja
'Está bien¿de qué se trata?
Antes de contestar, Lily miró paranoicamente a ambos lados, pero al ver que en ese momento Sirius bajaba por las escaleras y se acercaba al lugar en el que estaban ellos dos, susurró:
'Espérame a las cinco al lado del lago. Ya te contaré.
'¿Y ahora qué se trae ésta entre manos? – se preguntó James así mismo mientras veía como la joven desaparecía por el retrato de la dama gorda.
ooooooooooooooo
'¡Anne! – exclamó Lily escandalizada al ver a su amiga salir del baño.
Y no era para menos, ya que la chica era de esas cuyo uniforme de todos los días eran unos vaqueros cómodos, zapatillas de deporte y jersey sencillo o camiseta, dependiendo de la época del año. Pero aquel día se había puesto el atuendo de guerra: minifalda cortísima o cinturón ancho, según como se mire, botas altas con un tacón que la hacía más alta de lo que ya era y una camiseta… bueno, una camiseta que combinaba perfectamente con el resto de la ropa.
'¿Qué? – preguntó la chica con indiferencia.
'Pero… ¡tápate! – aconsejó Lily abalanzándose sobre ella y tapándola con un albornoz.
'Lily, que pareces mi madre.
'Pero… - replicó la pelirroja - ¡Liz! Mírala¿a qué va muy despechugada?
'Que va – negó la aludida sin ni siquiera mirar a Anne, ya que estaba leyendo una revista de testimonios y estaba en el punto álgido del relato: Mary Stevenson, un ama de casa cuarentona y sin nada interesante que hacer, contaba como se había encontrado a su marido en la cama con la vecina del quinto, un zorrón de mucho cuidado - ¡Qué fuerte! – exclamó Liz al terminar de leerlo.
'¿Lo ves? – dijo Anne quitándose el albornoz y dirigiéndose hacia la puerta de la habitación.
'Espera Anne– pidió Lily con tono de hermana mayor preocupada en cuanto su amiga puso una mano sobre el pomo de la puerta – Por lo menos dime donde vas, anda.
'He quedado – contestó la castaña simplemente con una pequeña sonrisa.
Anne salió por la puerta, dejando Lily perpleja por la anormal actitud de su amiga y a Liz pasando al siguiente testimonio: el de una treinteañera que la despidieron de su trabajo porque había engordado y sus jefes creyeron que estaba embarazada.
'¿Y con quién ha quedado? – preguntó Lily al vacío, antes de darse la vuelta y preguntar a su otra amiga - ¿Qué lees?
'Stephy Donaldson. 34 años. Abogada. La despidieron porque engordó unos kilos y su jefe pensó que estaba embarazada – informó Liz traumatizada por lo que estaba leyendo. ¿Ese era el futuro que le esperaba a la mujer en el mundo laboral?
'A ver – pidió la pelirroja sumergiéndose también ella en la lectura, para después exclamar - ¡Qué fuerte!
ooooooooooo
Anne llegó al vestíbulo en un abrir y cerrar de ojos, estaba ansiosa por comenzar con su plan. Al llegar allí, se encontró con un chico esperándola al pie de las escaleras. Un chico alto, rubio, de ojos marrones y muy guapo que esbozaba una adorable sonrisa, para concretar. Su nombre era Vincent Raymond, aunque todo el mundo conocía a ese Sly como el tío más engreído y superficial que había sobre la faz de la tierra. Precisamente por eso, por ser Sly y por ser guapo, a Anne le venía que ni pintado para su plan.
'Hola Vincent – saludó ella con su mejor sonrisa.
'Hola… - el chico se quedó pensando durante unos momentos¿cómo se llamaba ella¿Megan o Cindy? Pues ni lo uno ni lo otro - ¿qué tal, Nancy?
'Anne – corrigió ella inmediatamente, para luego añadir – bien¿tú qué tal?
'Guapísimo, como siempre – contestó Vincent haciendo alarde de su peculiar humildad.
La chica tan solo sonrió concentrando en ese gesto toda la falsedad que pudo, aunque interiormente estaba pensando en si valdría la pena la de sacrificios que estaba dispuesta a hacer por un tío.
'¿Qué te apetece hacer? – preguntó el joven.
'No sé… ¿pasear por el lago? – Anne propuso esa opción de la manera más casual que le fue posible, pero lo tenía todo planeado. Sabía que Remus estaría allí con su nueva novia, así que ella no tendría más que aparecer por allí con Vincent y dejar que los celos hicieran su trabajo.
'Es un poco aburrido¿no crees?
'Puede ser, pero como me dejaste elegir a mí… - replicó ella sonriendo para suavizar la situación.
'De acuerdo – aceptó Vincent con resignación y tendiéndole el brazo a su acompañante.
Tal y como Anne había planeado, en cuanto la chica y el Sly entraron en el campo de vista de Remus, el licántropo no fue capaz de apartar la mirada de la parejita ni un solo momento, provocando que Grant se enfadara y que al final de la tarde dejara al merodeador más plantado que un geranio.
Para Anne la cita había resultado de lo más aburrida. ¿Cómo no iba a resultar aburrido estar casi dos horas escuchando las maravillas y magnificencias de Vincent Raymond contadas por él mismo? Pero a la Gryffi por lo menos le quedó el consuelo de que su plan iba dando resultado: Remus se había puesto celoso. Ahora solo tendría que potenciar ese estado. Pan comido.
Cuando la chica se había despedido del Sly y se disponía a entrar en el castillo, vio a lo lejos a Lily hablando con James con absoluto secretismo, por lo que Anne se extrañó. Si la pelirroja quería conquistar a Sirius¿qué hacía quedando en secreto con James? Pero luego cayó en la cuenta de que los dos eran amigos. Seguro que estaban urdiendo un plan para que Sirius se fijara en Lily.
Anne había acertado de pleno, porque lo que los dos chicos estaban haciendo era precisamente eso.
'¿Entonces me ayudarás? – preguntó Lily con una sonrisa.
'Claro, pelirroja – aseguró el merodeador – Pero no lo vas a tener fácil.
'¿Por qué?
'Ya sabes que Sirius es un alma libre – le recordó James.
'No hace falta que me lo repitas – suspiró la chica, harta de oír que su príncipe azul era un alma libre.
'No veo el momento en que siente la cabeza – se quejó James con fingido pesimismo, por lo que su amiga rió con alegría.
'¡Mira quien fue a hablar! El que cada semana tiene una novia diferente.
'Ese no es el punto – especificó el moreno – Tenemos que preparar un plan.
'Tú dirás. Tú eres el que conoce a Sirius. Al fin y al cabo eres su mejor amigo¿no? – dijo Lily.
'Sí, soy su mejor amigo pero… ¿sabes? A veces Sirius es taaaaaaaaan difícil.
'¿Qué quieres decir?
'¿Por qué no te fijaste en otro chico más… asequible? Por ejemplo, un ejemplo: yo – bromeó James.
'¡James! – se escandalizó ella siguiéndole el juego - ¿Cómo se te ocurre?
'¿Te imaginas? – preguntó el merodeador tumbándose sobre el césped y haciendo que Lily le imitara.
'¿El qué me tengo que imaginar?
'Tú… y yo. Como pareja.
Los dos chicos se echaron a reír en seguida ante una perspectiva tan absurda e improbable como esa. (N.A. ¿no es irónico? )
'Ahora en serio James, tenemos que preparar un plan – dijo Lily mientras observaba como se ponía el sol y el cielo se iba tornando cada vez más anaranjado. Era una vista preciosa, y sabía que a su acompañante también le encantaba.
'Yo soy muy malo para eso. Es Remus el que siempre prepara las bromas.
'¡Anda ya! – exclamó la pelirroja sin creérselo – Yo que creía que los cerebros erais Sirius y tú.
'Que va, nosotros solo las ejecutamos. Pero ahora que lo dices… podíamos pedirle ayuda a Remus – propuso él – Seguro que sabe lo que hacer.
'Ni hablar – se negó Lily en rotundo a la vez que se incorporaba y miraba a su amigo fijamente – Esto tiene que quedar entre tú y yo. Nadie más.
'Apuesto a que Liz y Anne también lo saben.
'Sí, pero… ¡ellas son mis amigas! – se defendió Lily.
'¿Y Remus¿No es tu amigo? – preguntó el chico metiéndola en un aprieto.
'Claro que sí, pero compréndelo James. Como se lo diga a más gente, a este paso se entera hasta Sirius.
'¿No es eso lo que quieres?
'Sí, pero de una manera más sutil.
'Tranquila – dijo James incorporándose el también – Sé lo que quieres decir.
'Entonces¿qué hacemos? – volvió a preguntar la pelirroja.
James se levantó del suelo y le tendió una mano a su amiga para que hiciera lo mismo. Mientras iban caminando de vuelta al castillo, el chico expuso lo que pensaba.
'Creo que lo primero que deberías a hacer es acercarte a él, para que se dé cuenta de que existes.
'¿Cómo que para que se dé cuenta de que existo? – se extrañó ella. Ni que fuera invisible – Que yo sepa, sabe que existo.
'Sí – afirmó James armándose de paciencia – Pero quiero que te conozca por ser Lily, no por ser la amiga de James o la amiga de Liz – explicó el chico.
Al nombrar a Liz, la pelirroja se quedó estática. De repente, la idea del incesto volvió a rondar por su mente.
'¿Y si a Sirius…? - comenzó a decir Lily, mientras volvía a echar a andar
'¿Le gusta Liz? – terminó el merodeador la pregunta por ella.
Lily contuvo la respiración y le miró expectante por saber su respuesta.
'Nooooooo – negó el moreno rápidamente.
Al conocer la opinión de su amigo, Lily volvió a recordar como se respiraba. Pero a pesar de su respuesta, James no estaba tan seguro de ello. Sirius y Liz se pasaban todo el día como el perro y el gato, sí, pero… James sacudió la cabeza bruscamente para alejar esos pensamientos de la cabeza.
'Entonces sabes lo que tienes que hacer¿no? – preguntó el chico al llegar a la entrada de la sala común de Gryffindor.
'Sí, sí, pero…
'No te preocupes, yo te ayudaré a acercarte a Sirius – aseguró James adivinando los pensamientos de la pelirroja.
Lily sonrió agradecida. Le encantaba esa complicidad que tenía con su amigo, eran capaces de adivinar lo que pensaban con solo mirarse.
Al entrar en la sala común se encontraron con Anne, que todavía llevaba puesta la ropa de la cita y estaba sentada en uno de los mejores sillones. A parte de ella, la sala estaba desierta ya que era la hora de la cena y todo el mundo se encontraba en el Gran Comedor.
'Voy a ver si Sirius está en la habitación y bajamos a cenar¿vale? – habló James dirigiéndole a la pelirroja una mirada significativa.
'De acuerdo – aceptó ella.
En cuanto el merodeador desapareció escaleras arriba, Lily se sentó al lado de Anne y le preguntó a su amiga:
'¿Qué tal la cita?
Como toda respuesta, la chica tan solo se encogió de hombros.
'¿Con quién habías quedado? – intentó sonsacarle Lily.
'No te lo digo – negó Anne – Por que si te lo digo, me matas.
'Por lo menos dime que haces.
'Esperar.
'¿A quién? – se desesperó Lily pensando que a su amiga había que sacarle las cosas con cucharilla.
Anne iba a contestar, pero al oír el rumor de pasos que bajaban por la escalera indicando que James se acercaba, la chica cerró la boca:
'Luego te cuento – dijo al fin esbozando una enigmática sonrisa.
'Como tú veas – concedió Lily, y luego se volvió hacia James para preguntarle - ¿Sirius?
'Estará abajo – contestó él – llenándose el estómago de calorías y grasas.
'Si a eso le llamas tú comer – bromeó Lily - ¿vamos?
James asintió y los dos salieron por el agujero del retrato de la dama gorda, no sin antes despedirse de Anne. Instantes después de que los dos jóvenes abandonaran la sala común, el retrato se volvió a abrir dejando paso a la persona que Anne esperaba. La chica esbozó una pequeña sonrisa al oír los pasos furiosos que se acercaban a ella y se acomodó en el sillón para disfrutar del espectáculo.
'¿SE PUEDE SABER QUÉ COÑO HACÍAS EN UNA CITA CON RAYMOND? – tronó Remus en cuanto visualizó a la joven.
Al ver el estado histérico en el que se encontraba Remus, Anne amplió aún más su ya de por sí gran sonrisa de satisfacción, lo que provocó que el enfado del licántropo también aumentara.
'Tú lo has dicho – la serenidad con la que Anne habló, contrastaba con la furia que irradiaban los ojos del chico – Estaba en una cita.
'Eso ya lo sabía – puntualizó él tratando en vano de calmarse.
'¿Entonces cuál es el problema?
'Que… ¡joder¡que estabas con un Sly! – explotó Remus.
'¿Y?
La calma de Anne volvió a desesperar al merodeador.
'Pues eso, que es un Sly.
'¿Qué tiene de malo que sea un Sly? – replicó Anne, satisfecha porque estaba manejando la situación exactamente como ella quería.
Remus se quedó pensando… ¿qué tenía de malo que fuera un Sly? Ellos siempre habían dado por hecho que los de la casa de Slytherin eran malas compañías, pero nunca se había parado a pensar el porqué.
'Además – continuó la chica levantándose y encarándose a Remus directamente. Los dos eran casi igual de altos, por lo que ella no tuvo problema por mirarle directamente a los ojos - ¿quién te crees que eres para pedirme explicaciones sobre con quien salgo y con quien no?
Anne continuó mirando a su acompañante a los ojos, taladrándole, hasta que el chico no aguantó más y retiró la mirada, haciendo que ella sonriera interiormente.
'No deberías salir con Slys – contestó él simplemente a la vez que se encogía de hombros.
'¡Mira quien fue a hablar! – exclamó la Griffy con cierto sarcasmo – Te recuerdo que eres tú el que está saliendo con una tía que no tiene ni siquiera dos dedos de frente.
Al oír la alusión a su novia, el rostro del licántropo se ensombreció, pero no dijo nada. Tan solo se acercó a la chica. Demasiado cerca. Anne se dio cuenta de que la situación se le estaba escapando de las manos y pensó en cuanto tiempo más sería capaz de aguantar teniendo a Remus tan cerca sin lanzarse a besarle. Podía oír su respiración agitada, podía observar como su pecho subía y bajaba rápidamente, podía admirar con detenimiento sus asombrosos ojos dorados… Pero no. No debía ceder. Si lo hacía, daría la sensación de que era una chica fácil y ella no lo era… ¿verdad?
Pero por lo visto el merodeador pensaba justo lo contrario, ya que antes de que Anne se diera cuenta, las manos del chico rodeaban su cintura con suma delicadeza y los labios de ambos estaban a escasos centímetros de distancia.
Justo en el momento en el que Remus movió ligeramente la cabeza para cubrir el mínimo espacio que había entre sus bocas, ella pareció recuperar la cordura y se liberó de los brazos que la sujetaban.
'Te recuerdo que tienes novia – susurró Anne, todavía con la respiración agitada – Rachel Grant se llamaba… ¿no?
Dicho esto, la chica desapareció camino a su habitación, dejando al licántropo sumido en un estado de frustración.
ooooooooooo
Mientras, en el Gran Comedor, Lily y James hacían vanos esfuerzos por captar la atención de Sirius, el cual a su vez estaba más que concentrado en llenar su estómago con el plato… que digo plato, con el platazo de chuletas que tenía delante.
'¡Hola Sirius! – saludó Lily con una deslumbrante sonrisa.
'…
Sirius seguía tan concentrado con su plato que ni se dio cuenta. Lily por su parte lanzó a James una mirada de desesperación, ante la cual su amigo la animó a que lo intentara de nuevo.
'Hola – volvió a decir la pelirroja, aunque esta vez haciendo aspavientos con los brazos para que el chico notara su presencia.
'…
Nada. Sirius seguía a lo suyo, por lo que James decidió tomar cartas en el asunto.
'¡Padfoot! – exclamó James propinándole a su amigo una magistral colleja, digna de la madre de Manolito Gafotas.
'¡Au! – se quejó el aludido llevándose una mano a la parte afectada (la nuca, para ser más precisos).
'Hola – repitió Lily por tercera vez y ya sin la alegría que había demostrado la primera vez que saludó a Sirius.
'¡Ah! – exclamó el chico percatándose por primera vez de la presencia de su compañera – Hola Lily.
Después de ese saludo, se hizo un incómodo silencio entre los tres: Lily no sabía como actuar a continuación, Sirius había vuelto a engullir como un animal y James miraba expectante la escena sin atreverse a intervenir.
Pero no fue Lily la que rompió el silencio. Ni Sirius que continuaba a lo suyo. Ni siquiera James. Fue…
'Hola – saludó una voz chillona y para nada propia de un joven de 17 años, a la vez que el dueño de dicha voz se disponías a sentarse al lado de los tres chicos.
Peter Pettigrew, o como Lily, Liz y Anne le llamaban, el "intento frustrado de merodeador". Peter era el otro chico de 7º de la casa de Gryffindor, aunque en realidad nadie se explicaba como había llegado a pertenecer a esa casa ya que a simple vista no reunía ninguna de las características que un verdadero Gryffindor debería poseer: no era valiente, siempre trataba de esconderse tras James, Sirius o Remus (el primero que pillara a mano); no era leal, en más de una ocasión había dejado en feo a sus compañeros por salvar su pellejo; ni siquiera era bueno con la varita y nadie sabía como había sido capaz de llegar a séptimo sin repetir curso ni una sola vez. Por esta y otra razones, Lily no se explicaba como James, Sirius y Remus podían considerarle su amigo. Además estaba el hecho de que Peter no era guapo. No es que fuera un hecho importante, pero al fin y al cabo era un hecho: era demasiado bajo en comparación con los otros tres, regordete, con ojos llorosos y extremadamente pequeños que recordaban a los de un ratón y pelo ralo y tan claro que parecía que no tenía color.
"Definitivamente", pensó Lily al observar una vez más con detenimiento al chico, "no me explico como este tío se puede considerar un merodeador" (N.A. ¿hace falta que diga que yo tampoco me lo explico?)
'Hola "Feter" – respondió Sirius con la boca llena y señalando un hueco vacío a su lado, justo enfrente de Lily – "Fiéntate" aquí.
'Sirius, por favor – se quejó James con cara de asco – Haz el favor de tragar antes de hablar.
'Perdone usted, don remilgos – se burló Sirius.
'Hay señoritas delante – le recordó el otro moreno señalando a Lily, que reía disimuladamente por lo payaso que era Sirius.
'En ese caso… - concedió el joven con una bonita sonrisa que hizo suspirar a más de una en el Gran Comedor (Lily incluida)
'Lily… - oyó la chica como la voz de Peter pronunciaba su nombre.
Ella apartó la vista de Sirius y la dirigió a la rata, quiero decir, a Peter.
'Dime – pidió ella tratando de sonar amable. Algo completamente imposible. No sabía exactamente porqué, pero ese chico siempre le había dado muy mala espina. Tenía la impresión de que no era de fiar.
'Me preguntaba si… si… - empezó Peter no sin cierto reparo, pero al ver la impaciencia que demostraban los penetrantes ojos verdes de la pelirroja, se decidió a seguir - ¿me podrías ayudar con Encantamientos?
Automáticamente, en la mente de la chica se dibujó la palabra "NO", bien grande, con letras fosforitas y que brillaban en la oscuridad. La sola idea de respirar la misma atmósfera que ese… ser durante tanto tiempo seguido, la producía escalofríos. Lily ya había abierto la boca para contestar pero todavía no encontraba una excusa los suficientemente creíble y aceptable para negarse, cuando su amiga Liz acudió rauda y veloz cual gacela en su ayuda:
'No puede – dijo inmediatamente la morena sin ni siquiera saludar y sentándose al lado de su amiga.
'¿Por qué? – preguntó Peter decepcionado a la vez que la pelirroja le dirigía a Liz una mirada de agradecimiento.
'Porque… porque no puede y punto en boca. ¡Hombre ya! – sentenció Liz, inflexible.
'A eso le llamo yo razonamiento lógico – ironizó Sirius, que no despreciaba ni una ocasión para meterse con su prima.
'¿Algún problema? – replicó ella.
Peter ya iba a contestar que sí, que tenía muchos problemas. El primero y más importante de todos era que Lily era la mujer de su vida y que él pretendía ligársela con la excusa de que le ayudara con Encantamientos, pero al ver el brillo peligroso en los ojos de Liz y las consecuencias catastróficas que podía tener esa contestación, decidió que lo mejor en ese caos era mantener la boca cerrada.
'No, ninguno – intervino rápidamente James para evitar que la furia de las dos chicas se descargara sobre Peter. No sabía porqué a Lily, Liz y Anne les caía taaaaaaaan rematadamente mal. Si total, tan solo era un pobre chico desvalido que necesitaba dosis extras de cariño y atención.
'Pues ya está – concluyó Liz tomando un bollo de pan y untándolo con mermelada.
'¿Solo piensas comer eso? – preguntó Lily dirigiéndola una mirada reprobatoria.
'Sí – contestó la otra hincándole un diente al pan.
'Estás muy delgada – la riñó la pelirroja.
'Lily tiene razón – apoyó Sirius, más por fastidiar a su prima que porque en realidad lo creyera así.
'¿Ves? – dijo Lily triunfal, contenta porque el amor de su vida le hubiera dado la razón en algo.
'¿Vas a tomar en serio la opinión de ese descerebrado? – preguntó Liz mirando a Sirius de manera despectiva.
'¡Oye! Descerebrada serás tú – se defendió el merodeador.
'Mentira.
'Verdad.
'Mentira.
'Verdad.
'Mentira.
'Verdad.
'Ment… - pero Liz se cansó del mismo cuento, así que se levantó y dijo – Te vas a enterar, capullo.
Con esa frase, la chica comenzó a perseguir a Sirius, abandonando el Gran Comedor y camino a la sala común.
'Son incorregibles – rió James.
Pero Lily no se rió por la escena como habitualmente hacía. Más bien todo lo contrario.
'Oye… - empezó la pelirroja - ¿De verdad no crees que…?
'No – se negó el moreno cortando la pregunta y adivinando sus pensamientos – En serio, no lo creo.
Aún así, esta vez la chica no se quedó contenta con la respuesta. Cada vez que veía a Sirius y a Liz discutiendo, peleando o dándose de tortas (que era lo que normalmente hacían), las sospechas de que los dos chicos se atraían mutuamente cobraban más fuerza.
'¿Vamos a la sala común? – propuso James intentando alejar esas sospechas de la mente de su amiga.
La chica asintió y se levantó, por lo que él se dio la vuelta y le preguntó a Peter:
'¿Vienes?
'No – declinó el joven la invitación – Todavía no he acabado de cenar.
'Como tú quieras.
James y Lily se encaminaron en seguida a la torre de Gryffindor, y al llegar allí se encontraron con Sirius y Liz persiguiéndose el uno al otro por toda la sala sin que sus compañeros les prestaran la más mínima atención. Ya estaban más que acostumbrados a las habituales peleas de los dos primos.
Por otra parte, los otros dos se sentaron en un sillón enfrente del fuego a charlar tranquilamente como normalmente hacían. Cuando Sirius y Liz se cansaron de correr por toda la sala común y se fueron a la cama, alegando que estaban agotados, Lily decidió que ya era hora de abordar el tema en serio.
'Así no avanzamos nada, James.
'Ya lo sé pelirroja, ya lo sé – dijo el chico sabiendo a que se refería su amiga.
'Yo creo que le gusta Liz – insistió Lily con terquedad.
James no contestó inmediatamente. Tan solo se quedó mirando distraído las figuras que formaban las llamas en la hoguera, pensando sobre la posibilidad que acababa de exponer Lily.
'Pues ser – contestó él finalmente mirando a la chica directamente a los ojos – Pero también puede ser que estemos equivocados.
'Espero que sea lo segundo – suspiró la pelirroja hundiéndose en el sillón y cerrando los ojos.
'De todas formas tenemos que ser más directos.
'¿Qué quieres decir? – preguntó la chica volviendo a abrir los ojos y posándolos sobre su amigo.
'Tengo un plan – aseguró James con una sonrisa traviesa y con un brillo peligroso en sus ojos que no presagiaba nada bueno.
Ya está. Segundo capi escrito.
Y los adelantos para el próximo capi:
>El plan de James comenzará a funcionar.
>Remus y Anne, Anne y Remus… ¿qué puede salir de aquí?
¿Conseguirá Peter ligarse a la mujer de su vida?
>¿Realmente a Sirius le gustará Liz?
Pues eso y mucho más en el próximo capi. Y si no podéis esperar y queréis leer más fics sobre los merodeadores, podéis echarle un vistazo a mi primer fic "Una pelirroja muy legal". Y si no tienen que ser historias necesariamente de los merodeadores, también podéis leer mi segundo fic "Como en los viejos tiempos". Ya veis que yo tengo para todos los gustos. Pero eso sí, no os olvidéis de dejarme reviews.
Y con este y un bizcocho, hasta dentro de… algunos días a las ocho.
Besos.
bars9
Miembro de la Legión de las Lupinas
Miembro de la Orden Siriusana
Hermana de Mina Black
Miembro del A.O.C.S.
Miembro de las 11 de Mey
