KIMOCHI HANBUN
SENTIMIENTOS A MEDIAS
CAPITULO XII: TU SONRISA ANGELICAL.
Saco de la canasta de la chica un mantel y lo coloco cerca del río pero no lo bastante pues aun las copas de los árboles los abrigaban del sol.
Misao aun continuaba de pie observando el lugar así que no se dio cuenta cuando Aoshi puso el mantel o cuando se acerco a ella y le dijo.
Me alegro que te haya que quedado el kimono.
Ehhh!.- giro su rostro para verlo a la cara.- si me quedo muy bien, aunque Omasu me ayudo a ponérmelo usted sabe que no soy buena para estas cosas tan femenina.- sonrió colocando una mano en su nuca.
Cuando te vi bajando las escaleras todo mi cuerpo se estremeció, no sabía que te verías mas linda con eso puesto.-pronuncio con palabras cálidas pero con rostro sereno
Usted cree que me veo bien vistiendo kimonos.- pronuncio apenada la joven.
No lo creo lo se porque me encuentro observándote en este momento y no puedo dejar de sentir y pensar que eres la mujer mas hermosa del mundo, uses lo que uses te ves bellísima.- esta vez su rostro se ablando llevo una mano a la barbilla de una colorada Misao y suavemente poso sus labios sobre los de Misao; al principio ella no supo que hacer sentía como cada parte de su cuerpo se estremecía; sus labios en un inicio templaron al sentir los de la persona que tanto amaba, pero poco a poco se dejo guiar por sus sentimientos y por lo que le dictaba su corazón. Después de un instante en que todo pareció congelarse y donde solo existían ellos y el amor que se profesaban, se separaran ligeramente sonrojados pues esto para ellos era algo nuevo. Se sentaron a observar los brotes que aun faltaban por florecer, de entre toda la tranquilidad que se sentía en ese lugar, Misao busco con su mano la mano de él la tomo entre las suya y le dijo.
Aoshi san, nunca le había dicho lo mucho que lo quiero y cuanto me gusta en especial en ese gi, le sienta muy bien
Misao no hace falta que me lo digas con palabras, con solo mirarte me doy cuenta de tus sentimientos.
Cuando terminaron sus alimentos, Aoshi continuo sentado, Misao por el contrario se alejo un poco y jugueteo con los animales que se encontraban sumergió los pies en la fresca agua. Todo esto que a los ojos de otra persona hubiera sido simple niñerías, para Aoshi era ver la mas pura e inocente esencia de la vida y del amor, pronto descubrió que disfrutaba esos momentos ya sea de permanecer al lado de ella platicando o simplemente observándola y cuidándola. Tantas cosas giraban en su mente que no se había dado cuenta que Misao había desaparecido de ahí, permaneció unos momentos tratando de buscarla con la mirada pero al fracasar en eso se dedico a meditar un poco; se encontraba con los ojos cerrados y en pos de meditación cuando a los lejos escucho la risa de la joven, sintió como depositaba en sus piernas todo tipo de flores y como ella corría a abrazarlo y darle un beso en la mejilla.
Misao que haces estas mojada.-Pregunto abriendo un ojo y mirándola de reojo
Si eso lo se, es que tenía mucho calor y remoje mis pies en el agua pero parece que el kinomo se mojo, lo siento.
No tienes que disculparte fue un regalo y como es tuyo puedes hacer lo que desees con el.
Aoshi san, yo también tengo un regalo para usted.-sonrió la joven mientras de detrás de su espalda sacaba un pequeño ramillete de bellas flores, las cuales despedían un aroma dulce.
El ninja asombrado por el presente, no supo reaccionar no era muy dado a este tipo de cosas pero no podía rechazar las flores de Misao. Tomo las flores y exclamo.- no se que decir supongo que esta bien que alguien como yo reciba flores de vez en cuando
Misao pareció comprender la situación, supo cara de hacer un puchero y le respondió.- Aoshi san es muy cruel, las flores siempre alegran el corazón y alivian el alma.
En ese caso yo no necesito mas que una sola flor.
Cual flor.
Una que cada que la miro me doy cuenta que la felicidad se puede encontrar resguardada en las cosas mas pequeñas y bellas de este mundo.
Hmmm! Sigo sin saber cual flor.
Es una flor que en ocasiones parece muy inmadura, pero eso es lo que me gusta de ella. Tu Misao eres mi única flor.
El rostro de Misao nuevamente adquirió un tono del color de las flores agacho la mirada pues nunca pensó que Aoshi pudiera ser una persona tan cálida.
Él la tomo en sus brazos y dejo que ella derramara las lagrimas que indiscutiblemente saldrían, de las mejillas de Misao corrieron dos gotas cristalinas antes de que se escaparan mas sonrió, se separo de él y empezó a arrogarle los pétalos de las flores que estaban a su alrededor.
Aoshi san es una persona muy mala.
Porque malo, solo estoy siendo sincero no era eso lo que deseabas.-sin pensarlo tomo algunos pétalos y se los arrogo a Misao.
De esta forma inicio una pequeña batalla de pétalos de sakuras, cuando estas se terminaron usaron su último recurso Misao empezó a hacerle cosquillas las cuales como era de esperarse no surtieron efecto en el apuesto ninja, pero él imitando a Misao le hizo cosquillas con lo cual la batalla se decidió de inmediato.
Ya basta me doy por vencida.- hablaba entre risas la joven acostada en la hierva.-Aoshi se encontraba sentado a su lado con sus manos sobre el vientre de la chica. De pronto sus miradas se cruzaron y ahí estaba, por fin Misao había logrado lo que por tanto tiempo estuvo esperando. Finalmente en el rostro del ninja se dibujo una sonrisa y para Misao era la sonrisa mas pura y bella que jamás viera. Había surgido de improvisto, naciendo lenta pero segura al igual que esa flores de Sakura, tímida pero llena de esperanza, libertar y sobre todo llena de amor.
Aoshi san, por fin he alcanzado todos mis objetivos.
De que hablas.
No se da cuenta, esta sonriendo, es la primera vez en tantos años que lo veo sonreír, como se siente.
Era verdad Aoshi hasta ese momento se dio cuenta que por primera vez sonreía.- ayudo a Misao a ponerse de pie ella se recostó en el pecho del ninja y permaneció callada no deseaba hablar en esos momentos y es que quería conservar la imagen de Aoshi sonriendo. El imito a Misao y solo se limito a rodear su cuerpo con su brazo.
Como me siento;- hablo después de tanto tiempo de permanecer cayados.- por primera vez en mi vida me siento contento y agradecido con esta por todas las cosas buenas que me ha dado. Misao te agradezco todo lo que has hecho por mi.
De que habla Aoshi san.- pregunto intrigada la joven
Que fue gracias a tú dedicación y empeño que yo finalmente pude darme cuenta de mis errores y pude afrontar mis temores, también gracias por que fuiste la única persona que creyó en mi cuando todos los demás temieron con tan solo mirarme. Pero tu Misao viste en mí algo que yo nunca había podido descubrir.
No tiene nada que agradecerme Aoshi san. Yo no hice nada solo me deje guiar por mi corazón y actué como todas las personas cuando aman a alguien.
Misao.- pronuncio tiernamente el okashira.-podrías dejar de llamarme Aoshi san, es demasiado formal.
Hmm, tratare pero no le prometo nada Aoshi san... es decir Aoshi.
Aoshi.
mmmm.
aishiteru.
Misao mi ángel, Aishiteru.- y como hiciera la primera vez beso los labios de la persona que tantas cosas le debía y que tanto amaba.
Permanecieron juntos y abrazados hasta que la luna relevo al sol y las sombras a la luz; solo que esta vez en lugar de caer las sombras en el corazón del ninja esa llama que se había encendido no se volvió a apagar ni a amenguar nunca mas.
Cuando ya no había ningún otro ser en aquel lugar, solo algunos animales que se preparaban para dormir los cuales en su marcha a sus escondites observaban con creciente interés las dos figuras que se reflejaban como un espejo sobre el lago y que a ratos los rayos de la luna hacían que sus sombras se acrecentaran; logrando en otra época ahuyentar a los animales pero que ahora por el contrario permanecían ahí embelesados por el halito de paz y tranquilidad que tanto Aoshi como Misao emanaban. El tiempo transcurrió lento, y cuando ambos sintieron que ese lugar ya no les ofrecía otra cosa, decidieron retornar a su casa.
Llegaron al Aoiya ya cuando todos se encontraban descansando, se despidieron con un beso de buenas noches y cada uno retorno a su habitación, a su futon donde se entregaron a un largo sueño donde cada uno se encontraba en la mente y corazón del otro.
Y es que finalmente ambos se habían dado cuenta que ya nada podría volver a separarlos o hacerlos titubear pues se tenían uno al otro. Uno deseando amar y el otro deseando ser amado, eso era el complemento perfecto.
FIN...
Finalmente ha finalizado esta historia, espero les haya gustado el final a mi me gusto, y es que no me atreví a terminarlo con una boda o algo mas, sino como algo puro y nuevo para ambos inexpertos en el amor con el deseo de permanecer el uno con el otro, ojala y lo haya logrado. Además en algún tiempo me dio la pauta para entrelazarlo con una historia de Seujiro Seta, pero no la he podido terminar espero y si se realice porque tengo pensado que sea Aoshi el que lo haga entrar en razón; en fin solo el tiempo lo dira y ustedes claro.
Para finalizar, les agradezco infinitamente a todas las lectoras de este fic, me dio mucho gusto saber que fue bien aceptada y es que como lo dije en el primer cap. Fue la primera historia larga que hice y no estaba muy segura de si gustaría o no; pero dado a su apoyo y animo me ha servido para mejorar como escritora.
X-MiSaO-X, Alexandra Shinomori, Akiko Saman, HADA, Alis-Chan, Misao de Shinomori, Minue, Kat, Seenaeikki y a todas en general mil gracias por todos sus comentarios.
ARIGATO GOZAIMASU
TAO JUN SHINOMORI.
. Espero con ansias sus últimos comentarios
