Lyn, la aprendiz de Link
Capítulo 1: El encuentro
Cuando un aventurero viaja, buscando aventuras, a veces no las encuentra y a veces las encuentra, pero no las ve. Si uno lo piensa, no siempre una aventura es un gran viaje por los mundos donde vives, con un destino claro, salvarlo. La mayoría de las aventuras alguna ves hechas, jamás han sido escritas porque gran parte de nosotros no tenemos conciencia de que son verdaderas aventuras.
Sin habérselo nunca preguntado, el héroe de esta historia, y varias más escritas, viaja por las tierras de Hyrule, donde encontrara la que quizá sea, no la más importante y espectacular, pero si, una de sus más raras aventuras...
- Mira Lyn! – dijo un niño - ¿Él es el famoso Link?
- ¿Tu crees que después de haber salvado tantas veces Hyrule va a dormir en el suelo? – preguntó Lyn – Hey! Parece que si es él ¿Cómo supiste Nils?...
- Mamá me mostró un libro donde salían dibujos de las distintas especies en Hyrule... – contesto Nils – según se es el único Hyliano que viste como Kokiri
- No es mala deducción para un niño de 8 años... – dijo Lyn – aunque... ahora que tengo al gran héroe de Hyrule durmiendo a 3 pasos de mí...
- Lyn tiene un plan – dijo Nils – mejor me retiro...
El pequeño Nils se alejo unos cuantos pasos de Lyn. En aquel momento, Link estaba en su ultimo sueño, entrando a despertar su conciente. Al abrir sus ojos, vio a una niña 4 años menor que él, pelo negro y ojos rojos, la cual parecía un Kokiri crecido... hasta la hubiera confundido con la hermana de Mido sino fuera por sus ojos rojos y porque parecía de 14 años y no de 10 u 12 años.
- ¿Tú eres Link? – preguntó Lyn
- ¿Ah? – dijo Link, el cual aun no estaba 100% conciente - ¿Qué?
- Si tu eres Link... – repitió Lyn
- ¿Si yo son qué? – dijo Link
- LINK!!!! – grito la niña al oído de Link
- Ah! Si, ese es mi nombre – dijo Link - ¿Te he visto alguna ves?
- No que mi memoria sepa – contesto Lyn
- Ah... – dijo Link – ningún problema ¿Puedo seguir durmiendo?
- Es medio día!!! – dijo Lyn - ¿Cómo puedes dormir con todo este sol?
- Durmiendo... – contesto Link – así de simple
- ¿Sabes? – dijo Lyn – creo que puedes hacer algo más útil ahora
- ¿Dormir? – pregunto esperanzado Link
- No! – dijo Lyn – ven conmigo, mi papá siempre te ha querido conocer
- ¿Ah?
Y así, sin saber mucho si aun estaba tranquilamente durmiendo en el pasto o si realmente esto era realidad, Link fue empujado por esta niña llamada Lyn hacia el taller de su padre .
- Papá! Papá! – grito Lyn – ¿estas aquí?
- Lyn! – grito su padre, el cual era un herrero - ¿Qué haces aquí?
- Te traje a una persona que querías conocer!! – dijo Lyn
- ¿Ah? – dijo Link, el cual aun no despertaba – Perdone señor pero... ¿Qué hago aquí?
- No puede ser! – dijo el padre de Lyn – es... ¿Link en persona?
- Si papá – dijo Lyn – lo encontramos durmiendo en el pasto... si ves, aun no despierta
- Dime muchacho – le dijo el padre de Lyn a Link - ¿Cuál es la espada más pesada que has tomado?
- ¿Espada?... ¿Pesada? – dijo el adormilado Link - ¿Una espada llamada pesada?
- Mejor probemos – dijo el padre de Lyn pasándole a Link la espada más grande que tenía en aquel momento – Veamos levántala
El adormilado Link, el cual tomo la espada sin saber si era un palo o solo algo. La levanto casi como si fuera una espada liviana
- Woa! – dijo el padre de Lyn – tiene que ser él!!
- ¿Yo? – preguntó Link
- Será fuerte... – dijo Lyn – pero no es muy inteligente
- Solo esta dormido – concluyo el padre de Lyn
- Tengo una idea para despertarlo! – dijo Lyn
Lyn salió rápidamente del taller y volvió con la misma velocidad con un balde que tenía agua en su interior. Como deben estar pensando, aquella agua de aquel balde fue directamente a la cabeza de Link, haciendo que por fin, despertara
- ¿¿¿Ah??? – dijo el por fin conciente Link - ¿¿¿Cómo se te ocurre???
- Lo siento – dijo Lyn – es que pensé que jamás despertaría
- Yo solo quería dormir... – dijo Link
- Perdónale por su comportamiento a mi hija – dijo el padre de Lyn - ¿Habría alguna forma de remediar este mal rato que le hizo pasar?
- No sé preocupe – dijo Link – yo ya me vo...
Ahí a Link le sonaron las tripas tal orquesta tuvieran en su estómago
- Quizá, si lo invitamos a almorzar... – dijo el padre de Lyn – no creo que no tenga hambre
- Eh... – dijo Link – bueno...
- almorzare con el héroe de Hyrule! – celebro Lyn - almorzare con el héroe de Hyrule!
No parecía mala idea, igual, no eran malas personas... que la señorita ahí presente fuera un poco "loca" no iba ha hacer que su estómago no recibiera bien la comida
Link siguió a la niña y a su padre
- Se me olvido preguntarles sus nombres – dijo Link
- Lo siento – dijo el padre de Lyn – yo soy Héctor y ella es mi hija Lyn
- Ah... – dijo Link – Lyn y Héctor
- ¿Aun estas dormido? – pregunto Lyn al ver el ánimo de Link
- Si.. diga! No, claro que estoy bien despierto! – dijo Link
Al llegar a la casa del Sr. Héctor, Link vio que no era pequeña ¿Acaso él señor Héctor era el herrero real? Era la única manera que se le ocurría a Link para que tuviera una casa así
- Serra! – dijo el Sr. Héctor a su esposa – trajimos un invitado!
- ¿Invitado? ¿Tengo que cocinar más comida? – dijo como enojada la Sra. Serra
- Bueno... – dijo Link – si le molesta, yo me retiro, no sé preocupe
- Obvio que... – dijo la Sra. Serra – quédese! Me encanta tener visitas
- ¿Eh? – dijo Link extrañado
- Le encanta hacerse la enojada – dijo el Sr. Héctor – no te preocupes
- Mamá! – dijo Lyn - ¿Viste qué el es Link? ¡El héroe de Hyrule!
- Si me di cuenta Lyn – dijo la Sra. Serra - ¿Fue plan tuyo traerlo?
- Eh... – dijo Lyn - ¿Cómo supiste?
- Te conozco – dijo la Sra. Serra
Al escuchar esto, Link pensó que sería mejor irse de esta casa, ya que si la niña "loca" tenía un plan con él... sería menos peligroso cumplir el cuarto día sin comer que estar con ella
- Todos a sentarse a la mesa! – dijo la Sra. Serra – hoy hay mucha comida para todos!
Al ver Link aquel plato lleno de comida su estomago agradeció. Desde que Malon y Talon se habían ido de vacaciones y solo Ingo estaba en el rancho, se le había hecho más difícil conseguir comida... además, no quería ir a visitar a Zelda o a Ruto por ahora. Pensaran ¿Y Saria? Pues... Los Kokiris estaban en una reunión especial de 5 días en la que no podían ir Hylianos... Saria intento convencer a Mido, pero nada, no lo logro. Sobre Darunia, ni hablar, siempre cuando iba terminaba enfermo del estómago... Se podría decir que hasta pensó ir con Zelda y Ruto pero... cada ves Ruto se comportaba más extraña y Zelda quería que comiera su comida y no la de su chef, la cual era... bueno, era algo. Link tenía calculado pasar una semana sin comer durmiendo la mayoría del tiempo, pero ahora... estaba salvado, bueno, salvado si los planes de esa niña loca no lo lastimarían
- Como veo lo logro! – dijo Nils – siempre Lyn sale con la suya ¿Se lo vas a pedir?
- ¿Ah? – dijo Link - ¿Pedir qué?
- Nils! – dijo Lyn – se lo iba a pedir después del almuerzo
Link no sabía si preguntar o no... se apresuro en comer rápidamente su plato para poder despedirse antes de que le pidiera lo que fuera
- Es que... – continuo Lyn – quería preguntarte si estabas muy ocupado
Link sabía perfectamente que estaba más desocupado que cualquier Hyliano en aquel momento... Podría decir que estaba muy ocupado pero... ¿Quién le creeria? Tenía planeado dormir hasta el atardecer...
- Sino estas muy ocupado - dijo Lyn - ¿Podrías enseñarme a usar la espada?
Link estuvo casi por escupir lo que tenía dentro de su boca... Con un poco de esfuerzo extra logro tragar lo casi escupido y así pudo contestarle a Lyn
- Mire, señorita Lyn – dijo Link lo más amable posible – aunque yo pudiera enseñarle, no sabría como... yo aprendí por practica y necesidad... no tengo idea como enseñarle
- Pero usted es el mejor que hay... – dijo Lyn – yo siempre he querido aprender
- Usted no tiene necesidad de saber usar la espada – dijo Link - ¿Para qué quiere usar una?
- Porque... – dijo Lyn – encuentro que... bueno, nadie sabe cuando se necesitará usar una espada
- Exactamente – dijo Link – no tienes razón alguna
Link le había acertado en el punto del problema, Lyn lo hacía porque pensaba que usar la espada sería interesante, al ver ha su padre hacer espadas y saber los milagros que hacían ciertos caballeros, como Link, le llamaba mucho la atención
- Joven Link – dijo la Sr. Serra - ¿Quiere repetir plato?
- ¡Claro! – dijo alegremente Link
Link siguió comiendo tranquilamente, Lyn callo, tenía que planear otra manera de convencer a Link...
Al terminar el almuerzo, la Sra. Serra invito a Link a descansar un rato en la casa. Link acepto alegremente, ya que como sabía que la niña "loca" realmente no le haría nada malo, pudo quedarse tranquilamente
- ¿Qué harás Lyn? – preguntó el pequeño Nils – tú no te rindes así de fácil
- Claro que no Nils – dijo Lyn – yo aprenderé ha usar espadas del mejor!
Link estuvo un tiempo mirando el comedor de aquella casa, ahí vio un cuadro de la familia real
- ¿y esto? – preguntó Link
- Esa pintura aun no la termino – dijo la Sra. Serra – es un encargo de la familia Real
- Así veo... – dijo Link - ¡Zelda esta igual a la real!
- Tiene que ser así – dijo la Sra. Serra – o sino no me contratan
Link miraba maravillado aquella pintura. Después de un rato, dejo de verla, ahí vio a Lyn que lo miraba pensativa... Link no sé le ocurrió más que pensar en retira inmediata
- Creo que mejor me voy Doña Serra – dijo Link – realmente no quiero molestarla más
- No es molestia joven Link – dijo la Sra. Serra – jamás lo será
- Igual, gracias por todo – dijo Link – usted me despide a Don Héctor, Lyn y Nils por favor
- No hay problema – dijo la Sra. Serra – que este bien
- Usted también – dijo Link
Link camino hacia la puerta, al ver esto Lyn tuvo que tomar una apurada decisión para poder detenerlo
- ¿A dónde va Sr. Link? – dijo Lyn
- A donde mis pies me lleven – contesto Link
- ¿Qué pasaría si sus pies no lo llevaran? – dijo Lyn
- ¿A qué te refieres? – dijo Link – mis pies jamás me han falla...
PAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAFFFFFFFFFFFFFFFFFFFFFFFFFFFFF
- ¿Esta bien Sr. Link? – preguntó Lyn
Explicare un poco el plan de Lyn. Al frente de la casa de Lyn hay un hoyo el cual nunca nadie lo ve, en aquel hoyo siempre cae alguien aunque sea una ves al año. En resumen, lo que hizo fue distraer a Link para que se tropezara en aquel hoyo.
- Estoy bien – dijo Link – me he caído miles de veces
Link salió rápidamente, para la decepción de Lyn, no parecía estar muy lastimado
- Con permiso señorita – dijo Link – me voy
- Usted esta cojeando Sr. Link – dijo Lyn – tiene algo en pie parece
- No es nada – dijo Link – solo me torcí el tobillo, me ha pasado miles de veces, se cuidarme
Lyn vio la perfecta oportunidad en este momento de retener a Link
- ¡Mamá! – grito Lyn – ¡El Sr. Link se torció el tobillo y no quiere cuidárselo!
Ahí salió de la casa como un rayo la señora Serra
- ¿¿QUÉ?? – dijo la Sra. Serra - ¿¿Cómo se le ocurre??
- ¿Ah? – dijo Link, el cual ya tenía un muy mal presentimiento – Sino es nada... se cura solo
- ¿Cómo puedes decir eso? – dijo la Sra. Serra muy enojada a Link – Si no te cuidas bien ese tobillo se hará peor la lesión
- Sino es nada!! – dijo Link – aun puedo caminar!!
- Se ve nadie le ha enseñado que debe cuidarse... – dijo la Sra. Serra – A LA CASA, he dicho
Link no sabía que decir... para él aquella torcedura no era nada, ahí miro a Lyn, sabía perfectamente que todo esto estaba planeado
- Ya muévase!!! – dijo la Sra. Serra – Lyn, ayúdalo a llegar a la casa
- Por favor... – dijo Link – si aun puedo camina...
PAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAFFFFFFFFFFFFFFFFFFFFFFFFFFFFFFFFF
- Y callo de nuevo... – dijo Lyn – esta no la planee
- ¿Esta bien joven Link? – dijo la Sra. Serra
- Sí! – dijo Link – si aun puedo caminar!
Si, aun podía caminar... pero le costaba más
Después de que lograron hacer que Link llegara a la casa...
- Me he enfrentado a Dragones... a criaturas gigantes de piedra, he caminado miles de kilómetros – decía Link – he hecho las mil y una travesías y me lastimo cayéndome a un hoyo...
- Eso se llama mala suerte – dijo Lyn
- Dejen de conversar ustedes dos – dijo la Sra. Serra – sácale la bota al joven Link, Lyn, para ver como esta la lesión
- Si mamá! – dijo Lyn
Lyn le saco la bota a Link. La primera impresión de Lyn fue el fuerte olor que salió de ellas
- ¿Desde cuando no te sacas las botas? – pregunto Lyn
- Pues... – intento contestar Link – eh...
Realmente, Link no tenía memoria de habérselas sacado hace menos de... ¿¿6 meses?? ¿¿Un año?? ¿¿Un año y medio?? ¿¿Dos años?? Ni idea...
- Veamos... – dijo la Sra. Serra – mmm esto se huele feo
- ¿Qué? – dijo Link - ¿Esta mal la lesión?
- ¿No te bañas desde que Nils nació o qué? – preguntó la Sra. Serra – nadie puede revisarte la lesión con ese olor...
Link no sabía si sentirse avergonzado o decir "Sino quieren ver la lesión, solo déjeme irme de aquí"
- Solo hay que limpiarle el pie – dijo Lyn – yo traigo agua
Lyn llevo con un balde de agua y jabón
- Esto será un trabajo duro – dijo Lyn
- No encuentro que vea necesario tanto por una simple torcedura de tobillo – dijo Link
- ¡Usted se calla! – dijo la Sra. Serra. Tomando un paño y dándole directo como con un látigo al tobillo lastimado de Link
- Auch! – grito Link - ¿Para qué hizo eso?
- Para que veas lo mal que estas – dijo la Sra. Serra
Link decidió no hablar más, no sabía si saldría peor o no si comentaba algo...
La Sra. Serra hizo que Lyn fuera a buscar una amiga que tenía la cual tenía unos cursos de medicina hechos.
- ¡Prisila! – dijo la Sra. Serra al ver a su amiga - ¿Cómo estas?
- Muy bien Serra – dijo Prisila - ¿Dónde esta el niño desobediente?
- Ahí esta – dijo la Sra. Serra – nos ha costado mucho que mantenga el pie en alto... revísale su tobillo
- Veamos – dijo Prisila
Prisila observo tranquilamente el tobillo de Link
- La lesión no es grave – dijo Prisila
- ¿Qué les dije? – dijo Link
- Pero – dijo Prisila – aquí se ve una unión de lesiones mal cuidadas
- Lo presentía – dijo la Sra. Serra
- ¿Y eso que tiene? – dijo Link
- Qué esto unido forma una lesión grave – dijo Prisila
- Si aun puedo caminar... – dijo Link -
- Lo más probable es que tu cuerpo haya reaccionado haciendo que no sintieras el dolor al pisar al principio – explico Prisila – pero ahora que has estado un tiempo sentado, si te intentas parar, te dolerá bastante
- ¿Ah? – dijo Link sin entender mucho
Para demostrar que realmente no era nada grave, Link se paro. Pudo pararse, pero el tobillo le dolía bastante, intento no expresarlo, pero la Sra. Serra lo notó inmediatamente.
- ¿Cuánto tiempo tiene que cuidarse? – pregunto la Sra. Serra a Prisila
- Un mes – contesto Prisila
- ¿Qué? – dijo Link, solo pensar en un mes sin moverse era aterrador en él
- Aunque tengo un amigo que sabe magia curativa – dijo Prisila – si él viene lo curara la lesión de inmediato
- Si! – dijo Link, había una luz de esperanza
- Qué se quede el mes – dijo la Sra. Serra
- ¿Qué?? – dijo Link – pero... no puedo molestarla más tiempo
- Mejor el mes – dijo la Sra. Serra – para que aprenda a cuidarse
- Don Héctor – le dijo Link a Sr. Héctor - ¿No puede hablar con su esposa para que razone? ¡No Puedo quedarme así un mes!
- Hazle caso – dijo el Sr. Héctor – sino quieres pasar un año así sentado
- ... – Link no tenía palabras en aquel momento...
Así, sin haberlo planeado, Link quedo condenado a no moverse de aquella casa por un mes, tenía todo, comida y una cama, pero igual, el prefería ser libre que a eso...
Al pasar 3 días, Link se calmo un poco, había estado bastante enojado por lo sucedido, pero ya empezaba a resignarse. Aquel día, dejaron a Link sentado en la cocina (lo cambiaban de lugar en la casa cada día para que no sé aburra), después del almuerzo, Lyn lavaba los platos, ahí Link aprovecho de preguntarle una cosa
- Dígame Señorita Lyn – dijo Link - ¿Por qué hizo todo esto? Sé que usted quiere que le enseñe a usar espada, pero, una persona sin razón alguna no abría llegado tan lejos
- Realmente... – dijo Lyn – usted tiene razón en decir que no tengo alguna razón importante para aprender el arte de usar la espada pero... yo... quiero cumplir el deseo de mi padre... pero no lo iba a decir al frente de él
- ¿El deseo de tú padre? – dijo Link
- El siempre quiso ser guerrero – dijo Lyn – pero no pudo porque le falta un pie
- ¿Le falta un pie? No lo note – dijo Link
- Es difícil, ya que el se hizo un pie falso, además, siempre se pone el zapato – dijo Lyn – pero si ves su forma de caminar, no es muy estable
Link se acordó de la forma de caminar del Sr. Héctor, Lyn tenía razón...
- Quieres tú cumplir el sueño de tú padre... – dijo Link – muy linda razón, pero... ¿Realmente crees que sea necesario?
- No sé – contesto Lyn – para eso hay que intentarlo, ¡Tomar la aventura!
- ¿Tomar la aventura? – dijo Link sorprendido
- Sé que es una molestia para usted Sr. Link – dijo Lyn – quizá deba tomar una espada yo por mi cuenta y aventurarme como usted, al mundo
- Mejor qué no – dijo Link
Al oír esto, Lyn se sorprendió
- Tú tienes mucho aquí como para dejarlo – continuó Link – tienes una familia como yo jamás la tuve... no puedo decir que los Kokiris no fueron mi familia, pero no sé, yo creo que no es lo mismo, aunque no podría asegurar
- ¿Y cómo quiere que lo haga? – dijo Lyn - ¿Qué abandone el sueño de mi padre?
- Yo te ayudaré – dijo Link – pero cúmpleme dos condiciones
- ¿Cuáles? – dijo Lyn, la cual no podía creer que Link había aceptado
- Uno – dijo Link – desde ahora, este será tú sueño, aunque sea por tu padre es tu sueño que tú lo llevaras... y dos... no me digas "Sr. Link" que me siento viejo... solo dime Link
- ¡Claro! – gritó alegremente Lyn
En eso, Lyn abrazo fuertemente a Link
- Lyn! Cuidado! Que me cai... – dijo Link - AAAAHHHHH
PAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAFFFFFFFFFFFFFFFF
- Ayayaaaaiiiiiiiii – dijo Link – mi tobillo!!
- Lo siento! – dijo Lyn
En el siguiente capítulo:
Ahora Link le tendrá que enseñar a usar la espada a Lyn, ¿Logrará Link soportar el mes entero sin moverse? ¿Qué cosas se le ocurrirán a Link para entrenar a Lyn? ¿Será Lyn buena alumna? ¿Logrará Link vencer a Nils en el juego del dibujo? Todo esto, espero, en el siguiente capítulo