Lyn, la aprendiz de Link
Capítulo 17: Segunda oportunidad
Perdonar, es más difícil que pedir perdón... Cuando tu corazón está herido, intentar perdonar es una hazaña que no todos podemos hacer. Hay que tener el coraje de enfrentar a tus propios sentimientos, a decir "Te perdono" a pesar de lo que hallan hecho. Quizá, es más difícil actuar en favor a esa persona que te ha hecho algo...
- Yo siempre he visto espíritus – respondió Leivan a la pregunta de Sheik – por eso conocí a Sophia... ella... realmente no es mala niña
Sheik y Darunia miraron seriamente a Leivan
- Gracias ha eso – dijo Darunia – se nos hará difícil confiar en ti...
- Se dice que las personas que ven espíritus de nacimiento – dijo Sheik – no mienten... no creo que Leivan nos traicione
- No mienten – dijo Darunia – pero pueden guardar en su interior muchos secretos... como lo hiciste hasta ahora... tú conocías a Sophia, podrías haber conversado con ella desde antes
- Ella me hipnotizo un tiempo – dijo Leivan – creía que no podía confiar en mi porque Lyn estaba metida en esto... pero...
- Entiendo – dijo Sheik – pero ahora que ella piensa matar a Lyn, ella entendió que no puedes ayudarla
- Yo pensé al principio que sería beneficioso para el entrenamiento de Lyn... - dijo Leivan – no me di cuenta del odio de Sophia... ni que ella se descontrolaría por sus sentimientos... yo nunca pensé
- Yo no desconfiaré de ti – dijo Sheik mirando a los ojos de Leivan – pero ahora, debes ayudarnos... tú puedes conversar con Sophia, puedes ser nuestra salvación
- Ella es muy obstinada – dijo Leivan – no creo que pueda...
- Hay que intentarlo... - dijo Sheik
- Ella no aceptará... - dijo Leivan – ella cree que tener a Link dormido es lo mejor
- Esto está difícil... - dijo Sheik
Lyn abría los ojos, estaba maldiciendo a Sain, recién se había dado cuenta que le había aplicado un hechizo para dormirse. Veía algo borroso, una mancha café grande
- Buenos días Lyn – le dijo esa mancha café
Lyn saltó del susto, se sacudió y miró claramente ha esa mancha café
- Parece que no me reconoció, soy Link – dijo el Goron que estaba al frente de ella
Ahí Lyn recordó al Goron, era el pequeño Link, hijo de Darunia.
- Disculpa... - dijo Lyn algo avergonzada – yo... yo... bueno, no sé que exactamente pasa ahora
- Pues... - dijo Goron Link – a mi no me han explicado nada, pero el señor Sheik con otro joven están hablando con mi padre en estos momentos... me pidieron que no dejara que saliera de la pieza
- Lo siento – dijo Lyn levantándose – pero debo ir a pedir unas cuantas explicaciones
- Espera! - gritó Goron Link
Goron Link se puso al frente de Lyn, pero esta caminaba con decisión, quería saber que había pasado mientras ella dormía. Cuando llegó al medio de la ciudad Goron, se dio cuenta que no sabía ni donde estaba parada. Había estado tan poco en la ciudad Goron... Empezó ha hacer memoria... Se acordó de que Link había hablado con Darunia una ves. Y que fue en la planta baja, quizá ahí era donde Darunia estaba hablando con Sheik. Goron Link le tomó la mano
- Cálmese... - dijo Goron Link – ya le explicaran todo, no creo que...
- ¿Tú crees que es difícil tranquilizarse cuando te amenazan de muerte después te duermen y no sabes que pasa? - Lyn le grita en la cara a Goron Link
- Pues... yo...solo... - dijo con cara llorosa Goron Link – no quería... yo...
Lyn trago saliva, no sabía que hacer ante un Goron que estaba casi por llorar
- Yo... - dijo Lyn nerviosa – no quise lastimarte, es que... bueno, no estoy pasando un momento muy grato – sonríe forzosamente – ya sabes...
- Ok... shiff... - dijo Goron Link – ok...
Ahí, Darunia salió de un cuarto.
- Oh – dijo Darunia al ver a Lyn
Detrás de Darunia, salieron Sheik y Leivan.
- ¿Estás bien Lyn? - preguntó Leivan - ¿No te ha pasa--
- Quiero una explicación! - gritó Lyn - ¿Qué ha pasado?
- Tranquila – dijo Sheik – nuestra preocupación ahora es Sain
- ¿Le pasó algo a Sain? - preguntó Lyn preocupada
- Él pidió que lo dejáramos atrás porque se sentía cansado – dijo Sheik – estábamos escapando, no podíamos detenernos... Pero él aún no ha llegado y han pasado más de 5 horas
- Hay que ir a buscarlo! - dijo Lyn – no hay tiempo que perder!
- No! - dijo Leivan – yo puedo ir! Tú quédate... si Sophia te encuentra...
- Si Sophia me encuentra yo pelearé! - dijo Lyn – pero no puedo dejar que Sain este solo allá fuera, solo y cansado!
Sheik y Leivan miraron algo preocupados a Lyn.
- ¿Por qué me miran así? - preguntó Lyn - ¿Acaso no me dejan pelear¿Porque soy una chica?
- Nunca nos referimos ha eso – dijo Sheik – nunca hay que subestimar el poder de una mujer... pero... según lo que he visto que haces, noté que Link aún no encuentra que estés lista para enfrentar algo tan peligroso
- Pero él... - dijo Lyn apretando las manos – ¡él hizo su gran aventura más joven de lo que yo soy ahora!
Lyn tenía razón, Sheik respiró profundo y puso su mano en el hombro
- Está bien – dijo Sheik – no te obligaremos ha escapar de nuevo, pero por favor... piensa que estamos nosotros para ayudarte en esto, no seas igual que Link, que va solo a todo
Lyn sonrió, afirmó
- Gracias – dijo Lyn
- ¿Sain? - dijo Nils, el cual estaba en la entrada hablando con un pequeño Goron
Lyn, Sheik, Leivan y Darunia subieron lo más rápido posible a la entrada de Goron city
- ¿Lyn? - dijo Nils al ver a Lyn
Lyn miró a Nils, pero no le contestó, ahí miró a Sain. Sain venía agotado, parecía haber corrido mucho. Estaba entero cubierto de tierra, como si se hubiera caído varias veces. En sus manos, tenía una espada que estaba dentro de una muy elegante funda. Sain respiró unas cuantas veces, miró a Lyn
- ¿Sain? - dijo Lyn preocupada - ¿Estás bien?
Sain abrió la boca, pero ninguna palabra salió de ella, se veía que quería decir algo, pero algo lo detenía
¿Qué pasará cuando lo sepa?
- ¿Sain? - dijo Lyn mientras se acercaba a Sain y le tocaba el hombro
Sain dio un paso hacía atrás, miró a Lyn, respiro profundo, cerró los ojos.
- Perdóname Lyn! - grito Sain mientras se agachaba – yo no pude... no pude...
Lyn lo miraba extrañado, antes de que ella pudiera articular palabra, Sain estiró su brazo y le mostró la espada
- Tus padres te mandan esto... - dijo Sain algo inseguro – fue... fue... su último deseo
Todos se miraron, Lyn tomó la espada, notó inmediatamente que la hizo su padre
- Pasa Sain – dijo Sheik – creo que nos tienes que contar algunas cosas...
Todos se miraron en silencio, Sain obedeció a lo que le dijo Sheik. No quería más guerra. Sain comió y bebió un poco, mientras Lyn miraba la espada y pensaba lo que dijo Sain. Sain la miraba, suspiró un poco
- ¿Estás mejor ahora? - preguntó Leivan
- Sí... - dijo Sain sin dejar de mirar a Lyn
- Creo que ahora debes decirnos que paso – dijo Sheik
Al escuchar esto, Lyn miró hacia Sain
- Está bien... - dijo Sain algo desanimado – yo... bueno... - mira hacía el suelo- cuando estaba en e¡ cementerio... vi a Mamá Leila y a la Sra. Serra... ellas buscaban esta espada... pero... ahí... llegaron... y... - Sain tragó saliva, se refregó la cara porque empezaron a salir lágrimas de sus ojos – las mataron...
- ¿Qué? - dijeron todos al unísono
- No puede ser... - dijo Lyn, algo confundida
- Estás mintiendo! - gritó Nils nervioso - ¡Mientes¡Mientes¡Mamá no esta muerta!
- Yo estaba escondido... - siguió Sain – escuche que esa espada era para ti... no hice mucho, tenía miedo... estaba cansado... lo... lo siento Lyn... yo...
- Mentiroso! Mentiroso! - dijo Nils con lágrimas en los ojos – Es Mentira!
- ¿No sabes algo de el Sr. Hector? - preguntó Sheik
- No... - dijo Sain, sin dejar de mirar la cara de sorprendida de Lyn
- Yo iré a investigar – dijo Sheik – ustedes no se muevan...
Lyn se sentó en una caja que había cerca, miraba la espada estupefacta... Sus padres... ¿por qué? Ellos no habían hecho nada...
- Lo siento Lyn... - dijo Leivan acercándose a Lyn – yo...
Lyn levantó la cabeza y miró a Leivan
- ¿Qué haré ahora? - preguntó Lyn
- No sabría decirte – dijo Leivan – pero te ayudaré en lo que pueda, sabes que puedes contar siempre conmigo
"Si", pensaba Sain mirando lo poco de comida que le quedaba, "Siempre podrás contar con él...". Al frente de Sain, estaba Nils, el cual estaba mirando el suelo, un moco caía de su nariz, intentaba subirlo, pero no podía, era muy pesado
- Toma – dijo Sain pasándole un pañuelo a Nils, este se lo acepto - tranquilo
Nils limpió su nariz con el pañuelo
- ¿No es mentira? - dijo tristemente Nils
Era la primera ves que a Sain le daba pena Nils. Nils siempre había sido un fastidio, un niño demasiado inteligente y maldoso para su edad. Pero aquella ves era solo un niño desamparado, que sentía que se le había caído el mundo
- Nils - dijo Sain – Lo siento
- WAAAAAAAAAAAAAAAAA – Nils empezó a llorar, aun no podía creer lo que le decían
- Nils! - dijo Lyn al escuchar al pobre de Nils
Lyn se levantó, le toco el hombro a su hermano. Al sentir esto Nils dejo de llorar un momento. Se miraron a los ojos y luego se abrazaron. Lyn sabía que no podía ser débil ahora, debía proteger a Nils... Cueste lo que le cueste
Leivan se sentó al lado de Lyn y Nils. Los miró preocupado. Sain también los miró, unas lágrimas salieron de su rostro
- Por lo menos tienes ahora quien te abrace – pensó Sain refregándose la cara y pensando en su Mama Leila
Los Gorons miraban aquella escena en silencio, no podían hacer nada... absolutamente nada...
Sheik caminaba hacía la casa de Don Hector. Ya había confirmado que la Sra. Leila y la Sra. Serra estaban fallecidas. Una señora las había enterrado amablemente. Al llegar a la casa, encontró a un Deku. Este lo miró
- ¿El señor Hector? - preguntó Sheik
- Tengo su cuerpo en una caja – dijo el Deku – pensaba ir a dejarlo al cementerio de los Hylianos en unas horas, le debo algunos favores al Sr. Hector, así que creo que es lo mínimo que puedo hacer
- Yo puedo ayudarlo – dijo Sheik – sino es molestia
Pasaron algunas horas, Nils se había quedado dormido. Llorar es uno de los actos que más cansa... Lyn lo miraba.
- Esta espada la hizo tu padre como veo – dijo Leivan tomando la espada
- Si – dijo Lyn – no me había dado cuenta que mi padre la había hecho
- Link le pidió que la hiciera – interrumpió Sain – mientras estaba en la casa lo escuche una ves comentarlo... Esa espada, supuestamente, debería ayudarte con tus debilidades... eso dijo
- Link... - dijo Lyn - ¿Qué será de él ahora?
- Debe estar en un lindo sueño – dijo Leivan – quizá este mejor que nosotros
- Si Sophia le quitó su libertad – dijo Lyn – eso no se debería hacer...
- Pero... a cambio – dijo Leivan – le dio tranquilidad
- ¿Cómo sabes? - preguntó Lyn a Leivan
- Eso me dijo ella – dijo Leivan – ahora Link será feliz, aunque sea en su realidad
- Que se quede ahí – dijo Sain enojado – ya nos ha causado bastantes problemas
- ¿Cómo? - dijo Lyn – no podemos abandonar a Link! debemos encontrar una manera de que despierte
- De lo poco que sé sobre espíritus – dijo Sain – es que si el mismo acepto que le hicieran eso, la única manera de hablar con él sería meterse a su mente...
- Y eso es uno de tus hechizos prohibidos ¿O no? - dijo Leivan a Sain
Sain miró algo sorprendido a Leivan, después se rió un momento
- No – dijo Sain parando de reír – no tengo ese hechizo prohibido
- Eso significa que no podremos liberar a Link – dijo Leivan – no hay mago en Hyrule que pueda hacer eso...
- No – dijo Lyn – no podemos rendirnos! Debe haber algún camino, yo lo sé... hablar con Sophia, intentar comunicarse con Link ¡Debe haber otro camino!
Leivan y Sain suspiraron, sabían que Lyn no se daría por vencido
- No creo que después de tener la culpa de matar a tus padres – dijo Sain muy seriamente – Link se merezco que intentes salvarlo
- Pero... - dijo Lyn mirando a Sain - ¡Todos merecemos una segunda oportunidad¡Yo sé que él no quiso!
- ¡Él dejo a Sophia entrar a su cuerpo! - dijo Sain
- Pero... - dijo Lyn
- ¡Él dejo que Sophia lo durmiera sabiendo lo peligrosa que es! - interrumpió Sain a Lyn
- Pero... - dijo Lyn
- ¡Gracias ha eso Mamá Leila y tus padres están...! - dijo Sain furioso - ¿Y tú quieres salvarlo?
- Lo sé... - dijo Lyn mirando el suelo – pero él no es mala persona... ¡merece una segunda oportunidad!
- ¡Y nadie se la dio a mi padre! - gritó Sain
- Más bajo – dijo Leivan – Nils esta durmiendo
Sain y Lyn se miraron un momento. Miraron después para lados contrarios, Lyn cruzó los brazos. Sain hizo lo mismo después. Lyn miró a Sain sin mover su cabeza.
- Tú... - dijo Lyn - ¿Mataste a Navi no?
Eso fue como un gran balde de agua en la cabeza para Sain
- Pero... - dijo Lyn mientras Sain la miraba estupefacto – Tú no quisiste, pero, al final de cuentas, la mataste... por un error
Sain tragó saliva, Lyn tenía razón... Pero ¿Qué tenía que ver eso ahora?
- Yo no soy persona – dijo Lyn – para juzgar lo que pasó con tu padre, pero yo sé... de corazón, que tú nunca matarías a Navi
- Lyn... - dijo Sain
- Yo sé que Link tampoco lo haría – dijo Lyn – mi corazón lo dice... No te pido ayuda... pero, no digas que él no merece una segunda oportunidad... - Lyn empezó a tener un poco de lágrimas en sus ojos – porque él es una buena persona...
Sain miró un momento el suelo. Lyn quería luchar por lo que ella creía, aunque pareciera imposible de realizar. ¿Tanto Lyn apreciaba a Link? Bueno... Lyn haría lo mismo por él...
- Está bien – dijo finalmente Sain
- Gracias – dijo Lyn, la cual después abrazo a Sain casi sin pensarlo – Gracias!
- De nada... - dijo algo nervioso Sain
Lyn soltó a Sain
- Pues – dijo Leivan – seamos realistas ahora... ¿Cómo podremos comunicarnos con Link?
- Ni idea – dijo Lyn algo decepcionada de si misma
- Yo sé – dijo Sain
- Ah? - dijeron Lyn y Leivan
- ¿Acaso me creyeron cuando dije que no tenía el hechizo prohibido? - dijo Sain
Sheik había terminado de enterrar el cuerpo del Sr. Hector.
- Cuando termine esto – dijo Sheik al quedarse solo en el cementerio – le haremos un funeral con todos los honores
- ¿Cuando termine esto? - dijo una voz - ¿Cuándo?
Sheik se dio vuelta asustado, conocía esa voz... Era Sophia. Detrás de él estaba parado Link, bueno, Sophia controlando el cuerpo de Link
- Sophia... - dijo Sheik poniéndose en guardia
- Tranquilo – dijo Sophia – no ensuciaré las manos de mi hermano contigo
-¿Qué quieres? - preguntó Sheik
- Qué rápido... - dijo Sophia – sólo quiero que le des esta carta a Lyn... es una pequeña propuesta que tengo para ella
- Oh... - dijo Sheik tomando la carta y examinándola con sus conocimientos si tenía algún hechizo mágico extraño o algo así
- No tiene nada – dijo Sophia - no seas así
Sheik miró desconfiado a Sophia...
- Sólo dale la carta – dijo Sophia saliendo del cementerio – sólo dale la carta...
En el siguiente capítulo:
En la carta, Sophia reta a Lyn a una pelea. Si Lyn gana, Sophia promete liberar a Link... pero si Lyn pierde... ¿Será verdad lo que dice Sophia¿Usarán igual el hechizo prohibido de Sain? Esto, espero que esté todo... en el siguiente cap nnUu
