BAJO EL CIELO DE CERULEAN
por Aneth.
ooooooooooooooo
"Porque mi destino es estar contigo,
sin importar el tiempo ni el espacio
yo te encontraré.
Aún cuando tenga que buscarte por todo el mundo,
algún día
tú y yo compartiremos el mismo cielo"
ooooooooooooooo
Este capítulo está dedicado a mi mejor amiga! Chufis this chapter is for you. n - n
ooooooooooooo
CAPITULO 2:
DIAS NUBLADOS
–¿COMO SE TE OCURRIO ENTRAR AHÍ SIN MI PERMISO PONIENDO EN RIESGO TU VIDA!–le grita Touya muy enojado a Sakura.– ¿Qué crees que hubiera pasado si los guardias te atacaban antes de reconocerte¡O peor aún¡¿Si ese ladrón al secuestrarte te hacía algo!
Sakura no respondía, sólo se limitaba a escuchar a su hermano y a mirar el piso avergonzada.
–P-Perdón...–dijo Sakura sentada en el borde de la cama con la cabeza baja–... por haberte quitado la llave...
Touya estaba sentado en una silla, de brazos cruzados, mientras miraba a su hermana molesto. Sakura sabía que su plan de pasar desapercibida no había tenido el resultado que esperaba, y mientras los guardias vigilaban los alrededores había estado esperando pacientemente que su hermano se enterara de ello... También, que no tardaría mucho en enterarse de lo sucedido y que la regañaría, pero no creyó que se enojaría tanto con ella ...
Luego de haberle gritado, Touya finalmente respira hondo y se calma, aunque igual seguía molesto.
–¿Por qué querías ir a la bóveda?–le pregunta en un tono serio.
–Porque... es que... yo quería... buscar el dije de mamá y papá y...–responde temerosa.
–¿Otra vez con eso?
–¿Qué tiene de malo que siga buscándolo ahí!
–Si mal no recuerdo, dejé a un lado mis obligaciones y te acompañé a buscarlo hace tiempo y no había ningún dije.
–¡Eso fue porque no busqué lo suficientemente bien! La próxima vez...
–No habrá una próxima vez–la interrumpe.
–¿P-Pero por qué?
–Porque ya es hora de que te olvides de ese dije.
–Ya te lo expliqué, fue un accidente el que haya caído dentro de esa habitación. ¡Yo no quería...
–Perderlo, lo sé... -dijo ablandando su mal humor un poco- ¡Pero no voy a permitir que sigas obsesionada con eso!
–¡Pero era el único recuerdo que tenía de nuestros padres, ¡Es importante para mí!
–¡Tú tambiéneres importante para mí! ¡No voy a arriesgar tu vida por un estúpido objeto!
–Pero...
–¡No quiero verte cerca de ahí nunca más, ¿está claro! ¡Y menos ahora que estamos en vísperas de una guerra, ya que esa bóveda es blanco de saqueadores, ¿entendido?
–Es que...
–¿ENTENDIDO
–...–
Sakura no responde y se pone de pie mirando aún el suelo.
–¿Sakura?
Sakura abre la boca para decir algo apretando sus puños, pero en vez de hacer eso sale corriendo de la habitación.
Rápidamente, Touya se levanta de su asiento y la sigue hasta la puerta.
–¡SAKURA!–le grita viéndola doblar por el pasillo desapareciendo de su vista.
Touya lanza un suspiro, y voltea hacia su derecha, donde se encontraba un hombre haciendo guardia.
–Quiero que refuercen la vigilancia en todo el palacio¿de acuerdo?
–Como usted diga, Su Majestad.–le responde el soldado haciéndole una reverencia.
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–¿Una chica?–pregunta Len desconcertado–¿Qué hacía una chica ahí?
–Yo que sé... –dijo Shaoran mientras se lavaba la cara en un arroyo.–Mientras que no esté buscando lo mismo que yo no me importa.
–¿Y era linda? Ya que te la llevaste para escapar la hubieras traído para presentármela
–¡Oh perdón! ¡Qué estúpido de mi parte en no haber pensado en ello mientras intentaba salvar mi vida!-dijo con tono exagerado para seguirle la corriente.
–Está bien, está bien... todos cometemos errores–dijo sonriendo.–Disculpas aceptadas.
Shaoran sonrió negando con la cabeza por el comentario de su amigo, quien también se encontraba enjuagándose.
–¿Y qué piensas hacer ahora?–inquirió Len.–Porque si antes fue difícil ahora la cosa se complicó más¿o no?
–No lo sé... por ahí espero unos días a que todo se normalice en el palacio...-dijo seriamente pensando la situación.
–Sí, creo que es lo mejor... Por lo que me has dicho, el mapa sí está ahí.
–Supongo... sólo vi un símbolo que me pareció familiar desde lejos... No podemos descartar la posibilidad de que no sea lo que estamos buscando...
–Es verdad... pero por lo menos estamos más cerca del objetivo que al principio¿no?–dijo Len mientras sumergía su cabeza por completo bajo el agua fresca.–Recuerdo cuando asaltamos el Palacio de Mènara, y esa horrible señora¡puaj! me confundió con uno de los sirvientes y no me dejaba ir! Cada vez que me acuerdo me dan náuseas... –continúa diciendo mientras sigue mojándose la cabeza.
Shaoran se tiende en el suelo mirando correr el agua cristalina del arroyo. Su mente comienza a divagar acerca de lo sucedido, ignorando a su amigo.
Aquella chica... por unos momentos se preguntó qué era lo que hacía allí... Pensar que estuvo a punto de matarla.
Conociéndose a sí mismo, si hubiese sabido que era una muchacha desde un principio tal vez no la habría atacado siquiera... Aunque eso en realidad hubiese dependido de la situación, claro está. Cuando de robos de trata, hay que hacer lo necesario para conseguir el objetivo y salir airoso.
Shaoran recordó de pronto esos ojos que lo miraban...
No podía entender cómo se había quedado paralizado en ese momento... Aunque fue tan sólo un pequeño instante...
Se preguntó si alguna vez la volvería a ver...
–¿Pero qué estoy diciendo!–se dijo en voz alta y exasperándose– ¡No fue la gran cosa!
–¿Eh?–dice Len levantando su cabeza del agua con el cabello negro chorreando sobre su rostro–¿Que no fue la gran cosa, ¡ya te quiero ver en mi lugar siendo asfixiado por esos brazos de oso alguna vez, a ver si decís lo mismo!
–¡Mi mente habría quedado en blanco, eso es todo!–dice Shaoran ignorando que estaba diciendo sus pensamientos en voz alta.
–¡Ya lo creo! Imagíname a mí, que tan sólo pensaba en poder respirar.–dice Len haciendo una graciosa imitación de lo sucedido.
–¡No reaccioné en ese momento porque la situación me tomó por sorpresa!–se dijo Shaoran a sí mismo explicándose lo sucedido.
–De no haber sido por el verdadero tipo que se apareció por ahí, ¡yo ya estaría muerto!–continúa Len.
–¿Eh? O.o–pregunta Shaoran cayendo a la realidad–Si tú no estabas conmigo ¿cómo...–se detiene al darse cuenta de algo raro en la conversación–¿De qué estás hablando?
–¿De qué estásTU hablando?–contesta Len tendiéndose en el suelo y mirando a su compañero extrañado.
Shaoran se quedó confundido mirando a Len unos momentos. Se dio cuenta entonces que había estado expresando en voz alta lo que pensaba sonrojándose.
–¿Te pasa algo que te pusiste rojo?–pregunta Len.
–No... es nada...–dice poniéndose de pie avergonzado.
–¿Seguro? Mira que...
–Te dije que no es nada–dice marchándose, dejando a Len solo a orillas del arroyo.
–Ahh...–dice Len suspirando–Cada día lo entiendo menos.–dice rascándose la cabeza.
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–Ah! Su Majestad, ya hice los planos que me pidió...–le dice Yukito a Touya en el Salón Real, pero hace una pausa al ver que está pensativo.
–Muchas gracias, dejalos por ahí, yo después les echaré un vistazo...–dijo algo serio.
–¿Puedo preguntarle qué sucede?–dijo Yukito mirándolo preocupado.
–Ya lo hiciste–le respondió con una sonrisa.–Y no me gusta que me trates con tanto respeto, siempre fuiste alguien muy querido para nuestra familia.
–Se lo agradezco mucho, pero mis modales no me permiten tratarlo de otra manera. Es la costumbre n - n
–Pues vas a tener que acostumbrarte a llamarme por mi nombre, por queeres mi amigo y no me gusta que me trates como a un extraño.
–De acuerdo, está bien.–dice Yukito sonriente como siempre.–¿Puedo preguntarte que te pasa, Touya?
Touya sonríe al escuchar esas palabras pero luego se entristece de pronto, levantando la cabeza y mirando hacia el cielo.
–Es Sakura. Desde que discutí con ella anoche, que no ha salido de su habitación, ni siquiera ha bajado a comer.
–Ya veo... me imaginé que era por eso...
–Sé que está confundida, es lógico que esté muy triste y se encierre... como una manera de esconderse... En verdad no quisiera estar en su lugar, pero... no hay nada que pueda hacer al respecto... me siento un miserable.
–Sos un buen hermano, aunque no lo creas así... y ella lo sabe.
Touya no respondió a ese comentario, sino que bajó su mirada hacia el suelo del salón pensativo.
–Si quieres, yo puedo intentar hablar con ella...–sugirió Yukito.
–¿En verdad me harías ese favor? –le pregunta mirándolo esperanzado a los ojos.
–¡Claro! Para mí es un placer el poder ayudarles a ustedes en lo que fuera... Ambos son como mi familia, son muy importantes para mí.–respondió Yukito sonriendo.
–Muchas gracias... –le dice Touya con una sonrisa en su rostro–... amigo mío...
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–Ya se tardó demasiado...–dijo Len mirando entre los habitantes del pueblo que circulaban comprando en el medio de la feria.
–Tranquilo, ya va a llegar.–le dijo Shaoran–No seas impaciente.
Ya habían pasado un poco más del mediodía. Ambos sujetos estaban vestidos con ropa común del lugar, esperando la llegada de su otro compañero en la fuente de la plaza principal. Habían acordado encontrarse en aquella plaza la noche anterior.
–¿Qué tal si lo buscamos? Si mal no recuerdo le diste órdenes de que investigara por este lugar... me parece raro que no haya llegado todavía...
–Siempre es muy puntual, seguro que debió de haberle de pasado algo.
–Ese tipo es un misterio...–dijo Len saludando con su mano a una de las vendedoras que lo miraba desde lejos. Ésta le responde con el mismo gesto y con una gran sonrisa.
–¿Por qué no vas a hablarle donjuan, en vez de quejarte tanto?–dice Shaoran causándole mucha gracia el gesto de su amigo.
–OK!–dijo alegremente alejándose en dirección del puesto donde se encontraba la chica.
–Perdón por la tardanza–dijo de pronto un muchacho de largos y oscuros cabellos grises acercándosele.
–Ya era hora¿dónde estabas?–le pregunta Shaoran a Milo dejándole lugar para que se siente.
–Tuve un pequeño percance, eso es todo.–dice Milo guardando rápidamente una medalla que tenía colgada del cuello entre sus ropas.
–¿Y? ¿Pudiste averiguar algo?–dice Shaoran fingiendo despreocupadamente que no alcanzó a verlo.
–Según los rumores, Níger enviará sus tropas a invadir las tierras lejanas del sur. El norte ya lo tiene totalmente dominado.
–Con que el sur¿eh?–dice Shaoran quedándose pensativo.–Si ocupa esas tierras ya tiene prácticamente todo el continente ocupado.
–Así es. Los reinos de Mènara y Kalia al norte están casi completamente devastados. Los planes de reconstruirlos ya han comenzado. Aunque al parecer, a Kain esos reinos no le importan absolutamente nada...
–Ja! En realidad creo que nunca va a haber algo que realmente le importe a ese Kain–dijo Shaoran sonriendo tristemente .– Es un pobre diablo.
–Tenés razón... –dice Milo suspirando–...una verdadera lástima...–continúa diciendo mirando al suelo.
A Shaoran le llama la atención aquel comentario.
–Con que va a atacar el sur... –repite Shaoran absorto en sus pensamientos–El reino de Clow será invadido de nuevo... –dice con cierta melancolía– ...otra vez correrá sangre... –dice casi como un susurro.
Milo levanta su mirada observándole. Nunca había sentido en él ese tono tan extraño en su voz. Shaoran se da cuenta de que estaba hablando de más.
–Y claro, caerá el reino de Fehl también.–dice cambiando el tono de voz a uno más despreocupado.
–A propósito¿cómo les fue anoche? –pregunta Milo para cambiar de tema, aunque sin dejar de observar con atención a su compañero.
–Ahora te cuento. Creo que esta vez dimos con el lugar correcto.–dijo Shaoran con una sonrisa.–Aunque creo que nos tomará más tiempo del esperado.
–Ya veo...–dice mirando a su alrededor–¿Y Len?
–Está por ahí conquistando chicas. Él sí que no está perdiendo el tiempo como nosotros.–dice Shaoran riéndose.
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Mientras tanto, en el palacio, Sakura estaba sentada y acurrucada contra una gran palmera en uno de los jardines que rodeaban al palacio.
No tenía deseos de hablar con nadie, después de lo sucedido la otra noche en la bóveda y de haber discutido con su hermano al respecto.
Continuaba molesta por el trato que éste le dio a ella. Sabía que Touya no había tenido malas intenciones y que lo único que quería era protegerla. Pero aún así, no podía evitar el sentirse enfadada con él.
Recordaba que desde que era niña, él siempre había sido sumamente sobreprotector, y le gustaba tomar las decisiones por ella cuando se presentaba la ocasión. Y eso fue en aumento luego del fallecimiento de sus padres. Esto la irritaba sobremanera... Sabía que su hermano tenía miedo de que algo malo le sucediese, que se sentía con la responsabilidad de cuidarla más que nadie, pero ya era demasiado, una exageración. Touya ya se había pasado de la raya.
–Me pregunto cuándo se va a dar cuenta que yo ya no soy una niña...–se dijo a sí misma mientras se acurrucaba más contra el árbol.
La única vez que su hermano le dio la posibilidad de elegir, de llevar a cabo una responsabilidad, de tomar una decisión, había sido hace ciertamente muy poco... Dos días para ser exactos...
-FLASHBACK-
–Sakura, siéntate aquí a mi lado por favor– le dijo Touya mientras Sakura obedecía a su petición, y éste la tomaba de las manos..
–¿Qué sucede?–le pregunta ella preocupada.
–Hay algo que debo preguntarte...–comenzó diciendo– ... ya que esta vez no seré yo quien toma la decisión..
–¿Eh?–dice Sakura confundida–¿De qué estás hablando?
Touya suspira: –Es algo muy importante, por eso quiero que me escuches con atención y lo pienses muy bien antes de responderme¿de acuerdo?
–Estás asustándome¿qué pasa?
–Como sabes bien –dice Touya en un tono calmado– los asuntos con el reino de Níger han empeorado... Muchos de los demás reinos ya han sido invadidos y cayeron bajo su poder...
–¿Lo que te aflige... –interrumpe Sakura–... tiene algo que ver con la visita del rey el día de hoy?
–Sí, así es.–hace una pausa– Han puesto sus ojos en el puerto de nuestro país. Ellos...
–¡Lo sabía!–interrumpe nuevamente–¿Están pensando quitarnos el puerto, verdad?–exclama mientras su hermano asiente ante la suposición de su hermana.–¡Eso es terrible!–hace una pausa y continúa–¿Qué fue lo que...?
–Déjame terminar por favor...–Sakura se detiene y opta por guardar silencio.–El Rey Kain planea invadir nuestro reino si no le entregamos lo que piden.
Touya se da cuenta que Sakura va a hablar de nuevo y le hace una seña con la mano para que lo deje continuar
–El ejército de Níger es muy poderoso... si nos llegaran a atacar, lo más probable es que nuestro ejército no pueda contra ellos... Estaría en peligro la supervivencia de nuestro pueblo. No me queda otra opción más que acceder a sus reclamos...
–¿Pero –no soporta más estar callada– si ellos se apoderan del puerto qué pasará con la gente de este país! La mayoría, incluyéndonos a nosotros dependemos del mar¡en éste se basa nuestra economía para poder subsistir¿Qué va a pasar con Cerulean?
Touya guardó silencio no respondiéndole a Sakura, quien se hallaba enojada por las noticias que acababa de recibir... Aun quedaba algo por decir, debía encontrar la mejor manera de confesarle a su hermanita lo que el tirano rey de Níger le propuso a cambio de no invadir su reino.
Mientras buscaba la manera, Sakura continuó:
–Pero... ¿hay algo más o no?–Touya miró a Sakura no comprendiendo lo que quería decir– ¿Por qué... comenzaste diciéndome que esta vez iba a ser yo la que tenía que decidir?
A Touya no le quedaba otra alternativa más que tratar el tema.
–Kain intentó hacer un trato–dijo finalmente resignándose.
–¿Un trato?–preguntó al ver que sus sospechas de que aparte había algo más fueron correctas– ¿Qué tipo de trato?
–Si yo...– comenzó diciendo Touya– ...le entregaba algo importante para mí, podríamos quedarnos con una pequeña parte del puerto y no invadirían Cerulean.
–¿Algo... importante para ti?–preguntó Sakura sorprendida– ¿Qué fue lo que te pidió?
Touya miró fijamente a Sakura. Ella no entendía el motivo por el cual él la miraba de esa manera... Nunca lo había visto así.
–¿Touya?–inquirió.
–Te quiere a ti–dijo al fin.
–...¿eh?...–dijo una Sakura más que sorprendida y abriendo grandes los ojos.
–Quiero decir, que es a vos a quien Kain desea, más que el puerto y nuestro reino juntos...
Sakura trataba de procesar las palabras que acababa de escuchar. No sabía qué pensar, ni qué decir...
¿Kain la quería a ella? Pero si ni siquiera la había visto y menos la conocía ... ¿o sí...?
Hubo unos minutos de silencio, en los que Sakura intentó salir de la confusión en la que se encontraba.
–Entonces... eso quiere decir... –dijo finalmente– ...que si yo me caso con Kain... Cerulean todavía tiene una oportunidad de sobrevivir...–dijo mirando al suelo.– ¿o no?...
–... Yo no quiero que...
–O NO?–dijo esta vez levantando la mirada y mirándolo con determinación en los ojos.
–Tal vez... –dijo Touya dudando de su respuesta.
Sakura se quedó en silencio nuevamente pensando.
–Entonces de mí depende el futuro de nuestro pueblo¿no es así?–dijo tristemente.
Touya niega con la cabeza.
–Escucha–dijo agarrándole fuertemente las manos–Lo que más deseo en el mundo es tu felicidad... No me importaría entrar en guerra con Níger si no quedase otra salida. No voy a entregarte a alguien sin tu consentimiento. Está enti el decidir si ir con él o no...
–Hermano yo... –comenzó diciendo, sin llegar a completar lo que quería decir, porque en verdad no tenía idea de lo que realmente deseaba expresar en ese momento. Touya se acercó a ella dándole un cálido abrazo, mientras que Sakura se acurrucaba junto a él a punto de llorar...
-FIN DEL FLASHBACK-
Sakura se quedó unos momentos mirando cómo la suave brisa movía las hojas de los árboles. Las palabras que había oído de parte de su hermano resonaban en su cabeza una y otra vez. Aunque quisiera no podía dejarlas de lado y así de alguna manera evadir la situación en la que se encontraba.
¿Qué es lo que debía hacer? Deseaba que la respuesta a esa pregunta no fuese tan obvia... Era lógico que accediera al reclamo de ese tal Kain... haciendo eso no sólo evitaría un cruel derramamiento de sangre, sino que podría ayudar a su país a salir adelante.
Su moral no le permitía darse el lujo de rechazar lo que podría significar la salvación de su nación. Sí... lo que debía hacer era aceptar esa propuesta.
Touya le había dicho, que aquel rey no tenía prisa por recibir la respuesta, así que decidió no decirle nada a su hermano por el momento acerca de lo que pensar al respecto.
Inútilmente, tenía la esperanza de que podría suceder un milagro, antes de que el gobernante de Níger se impacientase.
De pronto, los pensamientos de Sakura fueron interrumpidos por una voz familiar que la llamaba.
–Disculpe¿señorita?–dijo Yukito sonriendo a su lado.
–WAH! –exclamó Sakura sobresaltándose al ver al joven. Estaba tan absorta en sus pensamientos que no escuchó cuando él se acercó a donde estaba ella.
–No quise asustarla...
–Ah... estee... no, es que no escuché cuando venías Yukito–dijo sonriéndole de igual manera, y sonrojándose levemente
–¿Puedo sentarme?
–Ah, sí¡claro!–le dijo corriéndose a un lado dejándole lugar para que él se siente.
–Últimamente, ha estado algo desaparecida–dijo sentándose y mientras ella miraba hacia abajo.–Me extrañó el no verla por los alrededores del palacio, ni que saliera de su habitación.
–Es que...–dijo no sabiendo qué decir–¿Supiste lo de mi hermano y el rey de...?
–¿Níger? Sí, yo presencié toda la discusión que hubo durante la reunión.
–Entonces lo sabías todo... –dijo suspirando y haciendo una pausa– Sabes entonces lo que tengo que decidir¿no?–Yukito asintió con la cabeza.–Me siento tan confundida... que no sé qué hacer... aunque en realidad sí lo sé, pero no deseo hacerlo¿entiendes?
–Comprendo... lo que quiere decir...
–Qué bueno... porque a veces ni siquiera me entiendo yo misma... En estos momentos me gustaría que mi madre estuviese conmigo... tan sólo para sentir su calor de nuevo...
–La extrañas mucho¿verdad?
Sakura asiente con la cabeza: –Sí... aunque en realidad no me acuerdo mucho de ella... murió cuando yo era muy chica... Recuerdo más a papá... pero no estaba mucho tiempo conmigo, como rey tenía demasiadas obligaciones...–dijo suspirando–El recuerdo de mis padres fue uno de los motivos por el que entré a la bóveda anoche...
–Si mal no recuerdo, hace mucho tiempo que usted perdió algo ahí dentro¿no?
–Ahá... era un dije que me dio mi padre cuando murió mamá... para que su espíritu siempre estuviese conmigo y me protegiese... Él se lo había regalado a ella el día de su boda... Era muy bonito... de color plateado y con una piedra rosa en forma de corazón en el centro... pero lo perdí un día que corrí muy rápido y no sé cómo... pero se me resbaló de las manos...–dijo imitando la situación– y pasó por debajo de la puerta... Desde ese entonces que intenté entrar allí para recuperarlo. Incluso Touya una vez me acompañó a buscarlo, pero asombrosamente no estaba.
–Qué extraño... –dijo Yukito imaginándose la situación..
–Y como no estaba, Touya no le dio importancia... y es por eso que no me deja entrar ahí... –dijo quejándose– Además, como es un lugar importante, tiene miedo que alguien robe algo cuando yo estoy adentro...
–Su hermano no desea que nada le suceda, princesa.
–¡Lo sé¡Pero es que a veces es taaaan...!–dijo pensando una palabra que expresara lo que ella quería decir.
–¿Intolerante¿Fastidioso¿Insoportable?–dijo Yukito intentando ayudar.
–¡Todo eso¡No lo podrías haber dicho mejor!–dijo Sakura riéndose.
–Jejeje, es verdad–dijo riéndose también– Ya lo conoce... esa es su manera de expresarle que quiere protegerla y que la quiere.
–Sí, lo sé... ¡Pero eso no significa que no me enoje con él!–dijo quejándose–En cuanto a lo del rey Kain... estoy segura que mi hermano ya sabe la decisión que tomaré... –dijo esta vez suspirando– Me gustaría tanto que las cosas fueran de otra manera...
–Pero lamentablemente no lo son–dijo Yukito mirándola con ternura–Por eso hay que intentar verle el lado positivo a las situaciones que son difíciles.
–Suena tan fácil...–dijo riéndose.–Ojalá pudiera irme de aquí... lejos, donde nada de todo esto existiera.
–Es cierto que...–dijo mirando hacia el cielo celeste–... hay veces en las que deseamos escapar de todo y de todos... pero eso no resuelve las cosas.–dijo esta vez mirándola a ella.–El escapar no es la solución...
–Tienes razón... como siempre.–dijo sonriéndole–Pero es que...
–Ya verá que todo se solucionará a su debido tiempo.
–¿De verdad lo crees así, Yukito?–él asiente con la cabeza.
–Ya verá que todo estará bien. Puede contar conmigo para lo que sea, princesa.
–Muchas gracias... en verdad te lo agradezco mucho.–le dijo con una sonrisa.
Sakura se dio cuenta de que Yukito tenía razón, debía conservar la esperanza de que todo se solucionaría... ya encontraría la manera...
–Ahhh...–suspira mirando el firmamento–el cielo está hermoso... lástima que se está nublando.
En ese momento, hace ruido el estómago de Sakura, haciendo que ésta se sonroje completamente. Yukito no puede evitar lanzar una carcajada.
–L-Lo... lo siento...–dijo totalmente avergonzada, mientras Yukito lanzaba una sonora carcajada.
–¡Es lógico que tenga hambre!.–dijo él dejando de reír pero con la misma sonrisa de siempre– ...ya que estos dos últimos días no ha bajado a comer.
–...N-No es... verdad... –dijo agarrándose el estómago roja como un tomate–en realidad, me escapé a la cocina por la noche... no pude aguantar el no comer algo...
–Venga conmigo...–dice Yukito poniéndose de pie y extendiéndole la mano–Le prepararé algo rico de comer.
–Esteee... yo... te lo agradezco mucho Yukito, pero si mi hermano me viera entrar a la cocina...
–No tiene por qué enterarse...–le dijo sonriéndole–Será un secreto¿de acuerdo?
Sakura levanta la mirada mirándole tímidamente, y le sonríe, tomando su mano.
–De acuerdo.
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–Su Majestad, me han informado que ya están listas las tropas.–dijo un joven alto, con anteojos y cabellos cortos negros haciendo una reverencia.
–Estupendo, todo está saliendo más rápido de lo que suponía.–dijo Kain satisfecho, mientras se sentaba alrededor de una mesa adornada y cubierta de fuentes con comida.
–Disculpe mi atrevimiento pero¿me permite hacerle una pregunta?–dijo el joven.
–Habla Eriol. Como mi Leal Consejero, tenés la libertad de opinar en ciertos asuntos que los demás no pueden...–dijo Kain tranquilamente.
–¿Es realmente necesario... –pregunta con calma–... que invada las lejanas tierras del sur?
–¿Por qué lo preguntas?–dice cerrando los ojos y tomando una copa de vino.
–El reino de Felh a decir verdad no me preocupa, ya que sus gobernantes son abiertos a cualquier tipo de negociación y le será fácil tomar control sobre la ciudad... Pero el reino de Clow ya ha sufrido dos invasiones hace poco tiempo...
–¿Y¿Cuál es el problema?–dice jugando con la copa.
–Su pueblo no se ha recuperado todavía. Ni siquiera se han completado las correspondientes reconstrucciones... Otra invasión terminaría por destruirla, y en lugar de obtener una tierra más a su disposición, la haría desaparecer.
–¬-¬ Mmmm... no lo creo tan así–dijo dándole otro sorbo a la bebida–¿No estás exagerando?
–Su gente está confundida. La familia real original de ese lugar fue desterrada hace aproximadamente diez años en la primera invasión, y luego cambiaron de dueños dos veces. Su pueblo no confía en sus gobernantes, sino que aún mantienen la esperanza de que sus verdaderos señores regresen. Se han formado diferentes clanes opositores... Eso le jugaría en contra...
–Bah... creo que no les viene mal cambiar de nuevo de dueño... Con respecto a los clanes, creo que aunque se unieran todos contra mí, nunca podrían vencerme... no saben a lo que se enfrentan... Aunque conociéndote, creo que esa no es la razón de tu preocupación¿o no Eriol?–dijo mirándolo.
–Me preocupa la gente de ese lugar, eso es todo.–dijo tranquilamente.
–En una guerra, es lógico que en el medio se pierdan vidas invalorables...–dijo haciéndose el preocupado–Pero es un riesgo que debo correr para lograr que mis objetivos se hagan realidad.
–Creo que hay otras maneras de conseguir las cosas sin caer en el uso de las armas...–dijo Eriol seriamente sin darle importancia a las palabras de su superior.
–Ya te acostumbrarás... –dijo bebiendo hasta la última gota de vino que quedaba en su copa.–En cuanto al reino del oeste...
–¿Cerulean?
–Sí... ¿alguna novedad?
–Por ahora no, señor. El rey no se ha comunicado con nosotros...
–Ya veo... –dijo poniéndose de pie– Por el momento me tiene sin cuidado, tengo otros asuntos que atender... –dijo en dirección a la puerta– ...pero espero que no se demore en negociar o tendrán el mismo destino que los demás reinos tuvieron al oponerse a mí... ¿Lo ves? –dijo dirigiéndose a su consejero–Al usar las armas se consigue todo más rápido... Se evitan todo tipo de estúpidas negociaciones sin sentido...–dijo saliendo finalmente y dejando a Eriol solo en el Salón.
–Me temo que tiene razón... Con personas como usted no sirven esas negociaciones...-piensa mientras mira la puerta por donde el rey se alejó-Ya verá que todo acabará muy pronto...
Continuará...
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Hola a todos de nuevo!
Les agradezco mucho los reviews que recibí. Lamento haber tardado tanto en subir el capítulo 2 (ya saben, problemas con la facu, hermanas que ocupan la Pc y demás O-O).
Voy a tratar de actualizar lo más rápido que pueda, aunque por lo que veo me resulta bastante difícil n - n. Soy nueva, tengan piedad!
Agradecimientos a:
Ciliegia: Fuiste la primera que leyó mi historia y me mandó un review! En verdad muchas gracias! Me puso muy contenta el haberlo visto, justo un día después de haberlo publicado! n - n
Danielita: Me alegro que mi fic te haya resultado interesante! Voy a esforzarme para que los demás te resulten interesantes también!
Belzer: Sos un divino! Hiciste que Aneth se pusiera rooooja con tu comentario en el capítulo 2 de tu fic nn. Jajaja! Estoy muy feliz que te haya gustado mi humilde capítulo, y que desees seguirla. Muchíiiiiiiisimas gracias!
Y en cuanto a la historia, la vengo teniendo en la cabeza hace muucho tiempo y no sé cómo pero me animé a escribirla (y a subirla, fue todo un tema, tendrían que haberme visto n-n).
Como ya les dije anteriormente, no me considero buena, por eso les seguiré agradeciendo cualquier comentario de parte de ustedes!
Matta ne!