BAJO EL CIELO DE CERULEAN
por Aneth.
oooooooooooooooo
"Porque bajo este cielo yo te conocí...
y desde ese día supe
que estarías a mi lado para toda la eternidad"
oooooooooooooooo
NOTA:
Los personajes de Card Captor Sakura le pertenecen pura y exclusivamente a CLAMP.
Este fanfic es realizado sólo con fines de entretenimiento.
ooooooooooooooooo
CAPITULO 3
RECUERDOS SOMBRíOS
Estaban completamente empapados...
La lluvia caía estrepitosamente y no les dejaba distinguir con claridad el camino.
A lo lejos, montañas de humo se alzaban sobre una gran cantidad de llamaradas que subían por las paredes de un palacio.
Se oían gritos...
Mucha gente estaba huyendo...
–¡Corré,rápido!–dice el hombre tomando al chico del brazo y apartándolo del camino.
–¡Pero padre!–dice el chico siendo arrastrado por el sujeto.
–¡No te preocupes por mí!–dice el sujeto dejándolo a un lado.
Al hacer eso, el hombre dio media vuelta y comenzó a avanzar en sentido contrario para esperar la llegada de unos soldados a lo lejos.
–¡No voy a dejarte!–grita el chico ignorando las órdenes y regresando a donde su padre.
En ese momento, detrás de él aparece un soldado al ataque con su espada mientras volvía.
–¡SHAORAN!–grita el rey Li corriendo desesperado al ver que el soldado estaba a punto de asestarle un golpe a su hijo.
Como si hubiese estado en cámara lenta, Shaoran se detiene y voltea, justo a tiempo para que su padre lograra quitarlo de en medio, no sin antes ver cómo éste recibía en su lugar un golpe de espada del enemigo en su hombro derecho. El rey lanza un grito de dolor, y aprovechando el desconcierto de su rival, ágilmente atraviesa con su espada el cuerpo de éste.
El soldado sin vida se desploma en el suelo, mientras que el otro cae de rodillas por el dolor de la herida.
–¡Padre!–grita Shaoran socorriéndolo.
–... estoy bien... –dice con la mano en su hombro cubierta de sangre–Escucha, quiero que vayas al barco con tu madre y tus hermanas ahora mismo¿está claro?
–Papá no...–dice viendo a su padre ponerse de pie con dificultad.
–Cuando termine con esto los alcanzaré–le dice con una triste sonrisa.
–¡Pero...!
–Toma-le da una hermosa joya que saca de su bolsillo–Esto les servirá si llegan a tener alguna emergencia. Si lo venden podrán obtener mucho dinero...
En ese instante, como salidos de la nada, aparecen cinco soldados más que los rodean. Rápidamente y pese a su condición, el rey Li se levanta y con veloces movimientos se deshace de ellos.
–¡Ahora quiero que te vayas!–le dice a Shaoran mientras saca su espada del cuerpo de uno de los soldados– ¡Si ven que no llego zarpen!
–¡Pero...!–comienza a decir viendo cómo unos veinte soldados se aproximaban al lugar allá a lo lejos.
–¡HAZLO!–le grita con una mirada totalmente fría.
–S-Sí...–dice mientras veía a su padre alejarse en dirección a dónde estaban los soldados. Shaoran comienza a correr...
OIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIO
–Me da gusto que finalmente te hayas calmado–dijo el rey Touya mientras llevaba un trozo de comida a su boca.
Sakura cortaba en silencio la comida en su plato, mientras que se hacía en cierto modo la ofendida. Se encontraba sentada en una punta de la mesa, mientras que su hermano la enfrentaba desde la otra.
–No vuelvas a hacer esa tontería de encerrarte en tu cuarto y no bajar a cenar para no encontrarte conmigo... –le dijo a su hermana tomando un sorbo de su copa de vino– Sabes que eso no va a solucionar las cosas...
Sakura lo miró unos instantes al mismo tiempo que se llevaba a la boca un trozo de comida.
Luego de unos instantes de silencio dijo:
–Yukito me convenció para que no lo hiciera...–dijo ella tranquilamente mientras bebía de su copa.–Él me aconsejó y me habló sabiamente... –dijo dejando la copa en la mesa–... No como ALGUNOS que yo conozco, que prefieren regañar y gritar antes que ...
–¡Está bien, está bien!-le interrumpe Touya–Supongo que me pasé un poco...–dijo mientras Sakura lo miraba levantando una ceja–... No quise gritarte de esa manera... estuve mal... –dijo haciendo una pausa–... te pido perdón...
Sakura lo miró con aire de ofendida y siguió con su tarea de cortar su comida. Touya abrió la boca para decir algo, pero decidió esperar una respuesta de parte de ella.
Al ver que ésta seguía en la suya perdió la paciencia.
–Oh, ¡vamos Sakura! Ya te pedí disculpas¿qué más quieres que haga?–dijo el rey exasperándose.
Sakura introdujo otro trozo de comida en su boca. Cuando terminó de comerlo, tomó su copa lentamente y bebió un sorbo de la bebida, ante la mirada de impaciencia de su hermano. Entonces dejó la copa y dijo:
–Quiero oír esas disculpas otra vez– con el mismo aire de importancia que antes.
–... ò ó... humpff... –dijo Touya refunfuñando.–... Ya me...
–¡Otra vez!–interrumpió haciéndose aún más la ofendida y mirando hacia un costado.
Sakura sabía que a su hermano le había costado mucho disculparse... por eso decidió fastidiarlo un poco más para compensar el mal trato que recibió de parte suya el otro día.
Touya también sabía que cuando ella se encaprichaba con algo no había forma de sacárselo de la cabeza. En verdad deseaba hacer las pases... así que dejó su orgullo de lado (por un momento n.n), cerró entonces los ojos y respiró profundamente.
De muy mala gana y bufando, dijo:
–... Te pido perdón... por haberte tratado de esa manera... En verdad, lo lamento...–Sakura giró su cabeza mirándolo nuevamente– ... ¿Ya¿Contenta?
–Mmmm... podrías haberlo hecho mejor...–ante esto Touya refunfuñó otra vez–... pero sí n - n ... ahora estoy contenta...
Sakura no aguantó más y sonrió satisfecha.
Se levantó rápidamente de su asiento y se dirigió hacia el otro extremo de la mesa, dándole a su hermano un cálido abrazo.
OIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIO
–¿Dónde está Shaoran?–pregunta una niña de cabellos negros, asomada en el borde del barco mirando inquieta hacia todas direcciones.-¿Por qué no llegó aún?–dijo mientras miraba a una mujer a su lado– ¡Tía Ieran!
–Tranquila Meiling...–dijo la mujer frunciendo el ceño y mirando hacia el puerto–Allá viene–dijo observando a su hijo acercarse corriendo rápidamente.
–¡Shaoran!–exclamó la chica yendo a su encuentro–¿Por qué te tardaste tanto¿Dónde está mi Tío?
Shaoran respiraba agitadamente por la corrida... miró a su prima y no le dirigió palabra alguna.
Levantó entonces su mirada hacia donde se hallaba su madre. Ésta se le acercó caminando despacio y lo miró a los ojos fijamente. Ieran deseaba una explicación.
Shaoran abrió la boca para decir algo pero en vez de eso, la cerró y bajó la vista lentamente. A través de ese gesto, ella entendió a la perfección lo sucedido.
–¿Qué?...¿Qué fue lo que pasó?–preguntó Meiling confundida.
De pronto, se escuchó el sonido de una explosión que provenía cerca del puerto donde se encontraban. Meiling se sobresaltó, mientras que Shaoran y su madre dirigieron su vista hacia el lugar de los hechos.
–Es muy tarde...–dijo Ieran con desesperación en su mirada–... No hay tiempo que perder...
–... N-No...–dijo Shaoran mirando hacia el puerto y luego a su madre, adivinando su propósito–¡Esperemos un poco más!–dijo mientras notaba que una gran cantidad de soldados allá a lo lejos que se dirigían rápidamente hacia el lugar.
Ieran se mordió los dientes, cerró los ojos y apretó fuertemente sus puños. Una lágrima rodó por su mejilla.
–¿...Madre...?–preguntó Shaoran mirándola preocupado.
–¡Suelten las amarras!–le gritó finalmente a sus guardias subordinados.
–¡Madre, no!–gritó el chico desesperado–¡Ya va a venir! ¡Tan sólo un poco más!
Los guardias al escuchar al joven se prepararon esperando la confirmación de la orden. Los enemigos ya estaban llegando al muelle.
–¡SUÉLTENLAS AHORA!–dijo nuevamente mientras los hombres obedecían finalmente la orden.
Shaoran se quedó estático con su mente en blanco, viendo cómo los enemigos habían rodeado prácticamente todo el muelle. Buscó en su bolsillo y apretó fuertemente la joya que momentos antes había recibido, mientras unas lágrimas manaban de sus ojos y rodando por su rostro. Ieran miraba tristemente hacia el suelo.
El barco comenzó a alejarse lentamente de la orilla, justo a tiempo para evitar que los soldados lograran subirse a éste.
En tan sólo un instante, el cielo fue atravesado por una lluvia de flechas que tenían como blanco la nave. Afortunadamente, el barco logró alejarse lo suficiente para que aquellas flechas no hirieran de gravedad a los que estaban a bordo.
Mientras la mayoría de los atacantes gritaba y continuaba arrojando flechas, otros se lanzaban en el mar intentando llegar al navío nadando. Sólo unos pocos lo lograron realmente, trepando y llegando a dónde se encontraba la familia real.
Los guardias a bordo dejaron sus quehaceres en la nave para eliminar a los soldados. Incluso Ieran y sus hijas ayudaron al respecto...
Shaoran mientras tanto, continuaba en estado de shock mirando en silencio el muelle en llamas, que cada vez se hacía más pequeño y menos visible, tanto porque el barco se iba alejando como por la espesa lluvia.
–¿Shaoran?...–preguntó Meiling acercándose también al borde del barco colocándose a su lado.
En ese momento, un soldado aparece detrás de Meiling, abalanzándose contra ella tirándola al suelo.
–¡Kyaaaaaaaaaaa!–grita Meiling aterrada.
–¡MEILING!–grita Shaoran saliendo de su estado.
Había permanecido tan absorto en sus pensamientos, que no se dio cuenta cuando uno de sus enemigos trepaba hasta donde estaban ellos.
El sujeto la tenía aprisionada, y aunque ella intentaba zafarse, éste logró desenfundar su espada para poder eliminarla.
Shaoran se arroja contra él, provocando que éste se ponga de pie para librarse del chico. Meiling aprovecha ese instante y se aleja. Shaoran al verla, suelta al tipo, al mismo tiempo que esquiva un golpe de la espada de éste saltando sobre el borde del barco.
Al hacer esto, la joya que le había dado su padre momentos antes, se resbala de su bolsillo cayendo. Shaoran logra asirla a tiempo, pero el soldado aprovecha esa distracción y se arroja contra él.
Shaoran esquiva nuevamente el ataque y pierde el equilibrio...
–¡SHAORAN!–grita Meiling, viendo con desesperación que éste cae inevitablemente al mar.
El soldado sonríe victorioso y voltea para eliminar a su próxima víctima, cuando de repente, es atravesado por una espada que salió prácticamente de la nada.
–...ngh... ... q-q-qué...–logra decir el soldado ante ese ataque que no esperaba.
Meiling vuelve a gritar.
El sujeto mira en estado de shock al portador de esa espada, intentando respirar.
Era tan sólo otro chico el que le había causado esa tremenda herida, y quien deja caer la espada atemorizado, al mismo tiempo que el cuerpo sin vida del enemigo se derrumbaba contra el suelo.
–¡LI!–grita el chico que hacía unos instantes había acabado con el soldado, asomado al borde del barco buscando a su compañero.
Shaoran salió a la superficie, respirando con dificultad. La lluvia cada vez era más intensa, al igual que la corriente. Había tragado demasiada agua con la caída.
Cayeron rayos. Una ola gigante se formó de pronto y cayó donde Shaoran, hundiéndolo aún más.
–¡Yamazaki haz algo por favor!–le dice Meiling al chico desesperada y buscando a su primo, quien no salía debajo del agua.–¡Tiene que haber algo... alguna soga que le podamos arrojar para ayudar...!–dice mirando hacia todos lados.
–¡Li aguanta!–dice el joven trepándose al borde.
–¿Eh?–dice Meiling volteando para verlo–¿Pero qué vas a...?
Demasiado tarde. Yamazaki se había arrojado de cabeza al océano también.
–¡SHAORAN! ¡YAMAZAKI!–gritó Meiling.
Yamazaki nadaba en dirección a donde estaba Shaoran. La corriente lo había llevado demasiado lejos... no podía ver bien a causa de la tormenta y el mar golpeaba con mucha fuerza. Aun siendo ambos excelentes nadadores, los dos nadaban con gran dificultad. Incluso Yamazaki estaba tragando mucho agua.
Meiling los perdió de repente de vista.
–¡TÍA IERAN! ¡Detengan el barco!–gritó con lágrimas en los ojos mientras la buscaba con su mirada–¡TÍA IERAN!–dijo volviendo su mirada al mar–¡SHAORAN! ¡YAMAZAKI!
Pese a la tormenta, y al ruido de los rayos, Yamazaki pudo escuchar los débiles llamados de Meiling. Pero por más que nadaba y nadaba... no encontraba a su compañero. El barco estaba cada vez más lejos...
–¡LI¿DONDE ESTAS!–gritó Yamazaki lo más fuerte que podía, e intentando no tragar agua mientras lo hacía.
Shaoran escuchaba débilmente que alguien lo llamaba. Pudo reconocer que era la voz de su amigo.
–¡Yama...!–comenzó diciendo, no pudiendo continuar al tragar de golpe más agua.
No podía distinguir nada. La lluvia le pegaba con fuerza en el rostro...
Ya no veía el barco... sólo agua y más agua...
Otra ola lo azotó de golpe... hundiéndose nuevamente...
Todo estaba poniéndose borroso...
... más aun...
–Li...
Con mucho esfuerzo consiguió salir a la superficie, sólo para ver...
...que otra ola gigante se alzaba detrás de él...
–¡Li...!
Sin escapatoria... abre grandes los ojos...
OIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIO
–¡LI!
Shaoran se levanta de un salto, con el rostro totalmente transpirado, y con la respiración entrecortada. Respirando con dificultad, vio a alguien a su lado, quien lo había estado llamando para que despertase.
–¿Q-Que...?–dijo confundido.
Todo le daba vueltas... diferentes imágenes giraban en su cabeza sin cesar una y otra vez... Cerró los ojos unos momentos, abriéndolos despacio para tranquilizarse. Aun perturbado, vio el rostro de Len que había estaba todo ese tiempo a su lado.
–Tranquilo... -dijo mientras lo miraba con preocupación– Estabas teniendo una pesadilla...
–...Pesa... dilla?–dijo intentando recuperar el aliento.
Sentía como si estuviera ahogándose... Como si todavía estuviese rodeado de agua...
Miró a su alrededor. A su lado se encontraba un Len bastante preocupado y en espera de una reacción por parte suya. Podía ver que aún era de noche, y los árboles apenas se movían. No había señal de viento alguna y el silencio reinaba en los alrededores. Poco a poco, logró tranquilizarse y su respiración se normalizó.
–¿Ya estás mejor?–pregunta Len.
–Sí... gracias...–dijo con la mano derecha en su cabeza, secándose la frente.
–¡Me asustaste en verdad! –dijo suspirando más tranquilo–Te escuché gritar, e intenté despertarte pero no me oías...
–... Perdona ... es que...–comenzó a decir mientras aclaraba sus pensamientos.
–No tienes por qué explicarme nada... –dijo sonriendo–Estabas soñando con tu familia de nuevo¿no?–al decir esto Shaoran asiente con su cabeza. Len suspira u.u–... Desde que te conozco que no dejás de perseguirte con eso...
–Como si quisiera yo seguir teniendo esas pesadillas...–dijo Shaoran respirando profundamente–... Y no acabarán hasta que mi conciencia esté tranquila de nuevo...
–Te martirizas mucho...–dijo Len acostándose contra un árbol. –Ya verás que pronto todo se arreglará...–dijo bostezando.
Shaoran miró hacia los alrededores del bosque. Milo se encontraba durmiendo con la cabeza gacha y recostado contra el tronco de otro árbol apenas un poco más alejado.
–Me extraña que no se haya despertado aún... con los gritos que pegaste...–dice Len en medio de otro bostezo y cerrando los ojos.–... Mmmm... creo que me voy a dormir de nuevo... Buenas...–dijo mientras se acomodaba para conciliar el sueño de nuevo– ... nochesszzzzzz...–dijo quedando completamente dormido.
Shaoran sonrió al ver la facilidad con la que su amigo siempre se dormía.
–... Sí que puede dormir en cualquier parte...–pensó con una trsite sonrisa.
Respiró profundamente una vez más. Su atención se desvió de un momento a otro a su segundo compañero de viaje, quien se hallaba dormitando tranquilamente como si nada hubiera pasado.
–... ¿Me habrá escuchado?–pensó Shaoran observando a Milo dormir sin siquiera mover un solo músculo.
Aunque creía que él no era una mala persona, desconocía totalmente su pasado...
En realidad si se ponía a pensar... ni siquiera sabía quién era...
–Tal vez... hay algún motivo en especial por el que no desea que nadie sepa quién es...–pensó de pronto mirándolo.
Shaoran imaginó en ese momento que no habría sido bueno que éste lo hubiera escuchado gritar la pesadilla que estaba teniendo...
El único que sabía la verdad era Len. Desde que ocurrió todo aquello y lo conoció hace tiempo atrás, se convirtió en su amigo inseparable... De ninguna manera querría que alguien más se enterara de su pasado... y menos quien a duras penas conocía...
Pero aunque pareciera extraño...
... no desconfiaba de él...
Tal vez porque ambos en cierta manera eran parecidos...
Tal vez porque los dos tenían un pasado oscuro qué ocultar...
Shaoran decidió que ya había ahondado demasiado en el asunto, y se recostó nuevamente en el suelo. Cerró entonces los ojos, e intentó dormirse nuevamente. Su mente comenzó a divagar acerca de otros temas sin importancia, hasta que finalmente cayó rendido ante el cansancio...
El silencio volvió a reinar en el bosque... Sólo se escuchaban los ruidos que hacía Len cuando se movía...
El bosque también se encontraba dormido... O por lo menos casi...
El joven de cabello largo levantaba lentamente su mirada en dirección a donde se encontraba Li. Lo observó unos instantes antes de volver a cerrar sus ojos y conciliar el sueño.
Shaoran no se equivocaba... Sí había escuchado...
OIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIO
–...Mmmm... bien...– dijo Kain con una mano en su barbilla en actitud pensativa.
El rey de Níger estaba caminando de un lado al otro del Salón, reflexionando y diciendo sus pensamientos en voz alta.
Eriol no le prestaba atención, y se encontraba sentado junto a un escritorio analizando unos documentos y escribiendo unos pergaminos.
–... Creo que es una buena idea¿no crees?–preguntó el rey de repente.
Eriol no le contestó, sino que se encontraba concentrado en sus tareas.
A decir verdad, él ya estaba acostumbrado a que Kain deambulara por la habitación y hablara solo. Sabía que con la pregunta que éste acababa de formular no exigía respuesta alguna, sino que él mismo se la contestaba. Por eso mismo, Kain no se molestó en lo más mínimo que su sirviente ignorara ese comentario.
–Sí, creo que es lo mejor...–dijo de repente respondiéndose a sí mismo tal y como Eriol pensaba que haría.–¡Eriol!
–¿Su Alteza?–preguntó dejando a un lado la pluma que tenía en su mano y levantando su mirada para hacer una leve reverencia con su cabeza.
–Necesito que redactes y envíes un mensaje al Capitán de las tropas que mandé para dominar las tierras del sur.
–Me temo que las tropas ya han partido, Señor.
–Eso no importa–dijo sentándose en su trono–Enviaré a uno de mis soldados para que le alcancen el mensaje.
–Como Usted diga... –dijo tomando un nuevo trozo de pergamino y preparándose para escribir–¿Qué es lo que desea que escriba, Señor?
–Escribe que...–hace una pausa pensando–... mmmm... que le ordeno regresar cuanto antes a palacio porque prescindo de sus servicios... –Eriol toma nota–... Y añade también que se encargue de dejar al mejor de sus hombres en su relevo...–dijo haciendo una pausa de nuevo–... Sí, creo que con eso ya está bien, no necesito dar más explicaciones...
–El documento ya está listo, Su Alteza.–dijo Eriol poniéndose de pie con el pergamino ya sellado en su mano.
–Bien, encárgate de dárselo a uno de mis guardias para que realicen la encomienda. Hazlo rápido.
–Enseguida, Señor.–dijo haciéndole una reverencia y retirándose del Salón.
–Es verdad, me olvidaba–dijo apresuradamente antes de que Eriol se alejara por la puerta.
–¿Se le ofrece algo más, Señor?
–Dile al soldado que elijas...–dijo sonriendo y con un dejo de maldad en sus ojos–... que su cabeza rodará si no entrega el mensaje y regresa con el Capitán en las próximasdoce horas...
–Pero... las tropas ya llevan más de siete horas de haber partido...–argumentó Eriol.
–Por eso te dije hace unos momentos que te apresures...–dijo con una sonrisa maligna en su rostro.
Eriol lo miró con desprecio y no dijo nada más. Volvió a hacer una reverencia y se retiró apresuradamente del Salón.
OIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIO
–Definitivamente no puedo seguir así...–pensó mientras se mojaba su cara con la fresca agua del río.
Shaoran se encontraba sentado en una gran roca al borde del arroyo, mirando el brillante cielo azul que se encontraba rodeado de unas pocas nubes.
En las profundidades del bosque reinaba la calma. En verdad ese lugar lo tranquilizaba... Estaba sorprendido de que en un mundo así, existiese un reino en donde hasta el mismísimo bosque expresara de cierta manera esa extraña sensación de paz.
Hacía unos instantes que había enviado a sus compañeros a la aldea a conseguir provisiones. Él les había solicitado que fueran en su lugar, ya que necesitaba tan sólo un pequeño momento de soledad. Necesitaba aclarar sus pensamientos...
Luego de haber tenido esa insistente pesadilla, no había logrado sacar de su cabeza aquellas imágenes que lo atormentaban y lo habían atormentado desde hace quién sabe cuánto tiempo. Lo acosaban los tristes recuerdos de su padre, de su familia, de su amigo...
Todas las noches que soñaba con ellos un sentimiento de culpa se adueñaba de su corazón..
Culpa por haberle fallado a su padre... por no haber permanecido en el barco... por haber hecho que su amigo de la infancia cayera junto con él...
–... por no haber sido lo suficientemente fuerte como para protegerlos a todos ellos...–pensó, tomando una piedra de su lado y arrojándola con fuerza al agua frustrado.
Shaoran se asomó al borde de la roca mirando su reflejo en el agua. Levantó su rostro y miró una vez más el cielo. Era la tarde... dentro de unas pocas horas más anochecería... y la oscuridad lo absorbería de nuevo...
–... Es hora de que le ponga un fin a esto... –se dijo a sí mismo sujetando con fuerza el amuleto que colgaba de su cuello.
Shaoran guardó el amuleto entre sus ropas y juntó sus cosas. Volvió a mirar su reflejo en el agua decidido.
–... y será esta noche...–dijo mientras salía corriendo velozmente y se perdía entre la espesura del bosque.
OIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIO
Comentarios de la autora:
Konnichiwa! Acá estoy otra vez! Pobrecito Shaoran... u.u snif snif
Este capítulo me quedó algo corto, aunque iba a hacerlo más largo... pero conociéndome sabía que me iba a ir por las ramas n – n. Así que muchas de las cosas que iba a incluir en este capítulo quedarán en el siguiente.
¡Siento haber tardado tanto en actualizar de nuevo! u.u En realidad suelo terminar los capítulos rápido, lo que pasa es que nunca me convencen a la primera leída y les hago las mil y una correcciones antes de subirlos a la página. Incluso soy tan obsesiva que una vez subidos, les sigo encontrando errores y los subo de nuevo reemplazando los capítulos por los ya existentes n – n. Soy demasiado detallista, no puedo conmigo!
Bueno en fin, espero que este capítulo les haya gustado!
Ahora pasemos a los reviews:
Earane: Me da mucho gusto que te haya gustado mi fic¿Así que esperas el reencuentro entre Shaoran y Sakura? Pues eso iba a estar en este capítulo, pero decidí dejarlo para el próximo n - n. ¡En verdad espero no decepcionarte! Muchas gracias por haberme dejado un review.
Ciliegia: Ohayou gozaimasu a vos también! Espero que este capítulo haya aclarado tus dudas acerca de si la familia Li eran o no los antiguos gobernantes de Clow (acertaste!) ¡En verdad te agradezco que esperes ansiosa las actualizaciones! Te deseo la mejor de las suertes!
Celina Sosa: Me alegró mucho que te haya gustado esta historia! Y sí, Shaoran pertenecía a la familia que gobernaba en el Reino Clow, acertaste vos también! Era algo muy predecible, no? n – n. En cuanto a lo que esconde Milo... aahhh no seeeeeeeeeeeeeé! X D Jaja! Si te digo arruino parte de la trama. Eso se sabrá más adelante, don't worry! Y lo mismo pasa con lo que dijo Eriol n - n.
Belzer: ¿Así que allá el clima está que es otoño pero parece invierno? Jajaja, acá también, pero estamos en primavera! Aunque hoy hizo calor de verano O . O El tiempo está realmente loco! Muchas gracias por tu review! Me da mucho gusto en verdad de que te agrade mi historia, espero que los capítulos siguientes te resulten igual de interesantes. Ah! Y me encanta que estés "chapado" a la antigua como decís! Es re tierno cuando se encuentra a alguien así n – n.
Bueno, eso fue todo. Cualquier duda, sugerencia, tomatazo o lo que sea (menos virus!) a:
sakura (guión bajo) ml (arroba) hotmail (punto) com
Y bueeeno, tuve que escribirlo así porque cada vez aceptan menos signos n – n (si alguien sabe cómo escribirlos porfis que me lo diga)
Les deseo a todos la mejoooooor de las suertes!
Matta ne!
