Hacía Occidente¡¡¡

Sango, entiendo que sientas tal enojo contra Naraku, más que nunca, por lo que le hizo a Kohaku... – dijo Miroku junto a ella, el espíritu de mapache no los había acompañado, por lo cual, Miroku iba junto a Shipo, montados en Kirara.

Si, ahora es cuando esto se termina... – dijo silenciosamente, lo había casi olvidado con los ocurrido de las inscripciones.

Extraño a Aome... – dijo con tristeza Shipo.

No eres el único... – dijo con ironía Miroku, observaba a inu yasha ir corriendo, y a la vez desquitándose con cada pobre criatura que se topara con él. Si, era raro viajar sin Kagome...

Se ve que inu yasha es quien más la extraña... – dijo entre dientes Sango, al ver que está sacaba a colmillo de acero para descargar su impotencia.

Que miran! – les preguntó con el ceño fruncido.

Nada... – dijeron al unísono mirando hacía el cielo.

Inu yasha no sientes el olor de la señorita Kikyou? – le preguntó Miroku retomando el tema.

La verdad, lo siento muy suave, como si hubiera pasado hace mucho tiempo por aquí... – dijo pensativo. De repente el olor de ella se volvió muy fuerte, como si ella estuviera junto a él – Miroku¡¡¡ está muy cerca¡¡¡

Bajaremos¡¡¡ - descendieron lentamente. Hasta que llegaron al punto de correr junto a inu yasha.

Miren, almas¡¡ - grito Shipo apuntando entre los árboles, está alma hizo una pequeña explosión, y la imagen fantasmagórica de Kikyou apareció un instante en el árbol. Tras está vieron otra, las fueron siguiendo sucesivamente, adentrándose más en el bosque.

Por que malgastaría las almas así? – preguntó Sango cuando pasaron la N ° 15.

No lo sé, pero tampoco sabemos si es ella... – dijo Miroku, eso dio en el clavo, inu yasha se detuvo, y dio un salto, vió un claro más adelante, diviso por un instante una figura roja y blanca; Kikyou o alguien más?

Parece que está más adelante¡¡¡ - dijo inu yasha aterrizando, siguieron avanzado, las almas dejaron de aparecer, la persona sabía que se habían dado cuenta de su ubicación.

A medida que avanzaban el bosque se hacía más espeso y difícil de atravesar, por molestia, inu yasha "exagero" usando el viento cortante, dejando un sendero directo hacía donde estaba la persona que buscaban.

Efectivamente, era Kikyou la que estaba, estaba en el centro del claro, parada sobre un roca, con su arco apuntándolos.

hola Kikyou... – dijo con arrogancia.

Inu yasha... para que me buscan? – preguntó mordazmente.

Que gusto verla... – saludo Miroku – nos preguntábamos si sabe algo sobre los 5 vientos... – dijo con cortesía.

Ja... – exclamó inu yasha, y se sentó en el piso apoyado en colmillo de acero.

Por que pregunta eso un monje, una exterminadora, y un híbrido? – guardo sus armas.

... la verdad es que fuimos al templo donde se encuentran las escrituras de está leyenda... – se sentó en el piso, tratando de darle algo de confianza a la sacerdotisa.

Fueron a ver las escrituras de esa leyenda? – ella se sentó a su vez - ... veo que ya ocurrió...

Que señorita Kikyou? – preguntó Sango.

... es una vieja profecía, es casi una leyenda, cuando se escribió se utilizó un lenguaje de las tierras de occidente, veo que lo tradujeron, como para saber el nombre de la profecía, que hacían allí?

Es algo irrelevante – dijo inu yasha guardando por fin a colmillo de acero – nosotros fuimos por que pensamos que está leyenda nos podría ayudar contra Naraku...

Por cierto, dond3e está esa mujer que dicen que es mi reencarnación?

Ella... fue raptada por Naraku cuando traducimos la leyenda...

Dejaron que esa bestia leyera la leyenda completa? - exclamó molesta.

Se llevó la hoja donde lo escribimos...- se lamento Miroku.

Y les dijo algo? Quien traducía el texto? – dijo alterándose.

Nos dijo algo que tu eras uno de esos vientos... – dijo Shipo.

Que yo otro, Koga – puso una cara de asco – y tú...

La señorita Aome quedó en un trance por traducir el texto, y se la llevó, dijo que inu yasha tenía un fragmento de la perla... – completo Miroku.

Y... por último dijo que buscáramos la pieza que falta – reitero Sango.

Como pudieron dejar que él supiera de esa leyenda¡¡¡ tontos¡¡¡ - les dijo levantando la voz, pero sin gritar.

Nosotros no sabíamos que Naraku iba tras de la leyenda... – susurró Shipo.

Pero ahora hay que recuperar a Aome¡¡ - dijo inu yasha.

Saben que son los 5 vientos? – les preguntó dándose la media vuelta.

No lo tenemos claro – susurró Miroku.

No tengo otra opción... – dijo Kikyou entre dientes, suspiró y se digno a sentarse junto a ellos - ... es una vieja leyenda, una de las más antiguas, trata de 4 espíritus, que viajaban por sus mundos dentro de este mundo, tenían sus propias propiedades, sus propias mentes, sentimientos, rondaban por la tierra dejando sus dones, su forma era de algo semejante al vapor, sólo las personas capaces de ver cosas sobre naturales los sentían o los notaban, en esos tiempos había una amenaza, un objeto de poder increíble, estos espíritus podían purificar elementos, pero fuere como fuere, siempre existía algo sobre sus poderes, dependieron de un espíritu que vivía en el anonimato, él poderoso de todos, pero no en el sentido de poder, su mente era distinta, su manera de pensar también, la opción cayó en sus manos, los 5 juntaron sus poderes en uno sólo, purificaron y deshicieron el objeto, pero a cambió de esto perdieron su libertad, bajaron en cuerpos de mortales de forma humana, ellos siguen vigentes pero no son recordados por lo que fueron, sólo como un leyenda, unos druidas que aún creían en este poder escondieron el secreto en un lugar secreto, del cual pocos sabían, allí usaron parte de un idioma que mucho más adelante surgiría. Sabían del avenida de una amenaza de la cuál casi nadie podía detener, previeron a Naraku, y ahora él está en posesión de la leyenda y uno de los vientos! Todo por su descuido! Si llega a purificar la perla y está no se destruye los vientos desaparecerán por completo, y él tendrá un poder muy superior... – concluyó.

Ya veo... – susurró inu yasha – pero tenemos que recobrar a Aome...

No pueden, ella no despertará hasta que los 5 se vuelvan a juntar, la profecía una vez que empieza debe seguirse... por que te preocupa tanto esa mujer? – preguntó empuñando el arco y las flechas.

Por que... – bajo su mirada... por que? Desde cuando le preocupaba tanto? Era la primera vez que se daba cuenta; era por que le preguntaba Kikyou?

Ahora eso no importa, tenemos que saber más sobre esto, si es tal cual como dice usted, perderemos una potencia muy poderosa... – aseguro Miroku.

Monje, debes confiar en lo que digo, por que esto sobre la perla de Shikón pronto va a terminar... lo importante es terminar la leyenda para no perder a los vientos – camino hacía la entrada que había hecho inu yasha con colmillo de acero, siguió caminando ignorándolos, pero aún así dijo – si es cierto, el viento del fuego te corresponde a ti inu yasha, el mío el del aire, el hombre lobo; Koga; correspondiendo al de la tierra, y esa mujer a la que llaman Aome, uno de ellos, lo que falta es uno, él que trajo ese idioma, el que permanecía más lejos...

Señorita Kikyou, Aome dijo algo sobre el occidente, cree que sirva? – preguntó Sango llevando a cuestas su Giray-Kotsu.

Exterminadora, cuál es tú nombre?

Sango

La verdad es que esa información sirve, pero quiero saber algo más, tengo entendido que esa joven necesita de los fragmentos de Shikón para pasar a su mundo, pero no los tiene como puede ser?

Ja¡ Kikyou creía que lo sabías todo acerca de la perla... Aome no tiene ningún fragmento, pero siempre a pasado a mi lado, yo siempre e podido pasar sin tener nada que ver con los fragmentos.. – aseguró.

Ya veo.. – dijo triunfante – tú eres el que posee uno de los vientos, y el fragmento espectral a de la perla, nunca lo imagine de un ser como tú – siguió.

Señorita Kikyou, tenemos que recuperar a la señorita Aome... – reitero Miroku.

...no les servirá de nada, ella está en trance, sólo la persona que lo a traducido sufre los efectos de este, si es el viento que según la suerte predijo que era el quinto, ella está en estos momentos recibiendo información y teniendo las experiencias de lo que ocurrió hace varios años, no despertará, hay que completar la leyenda para que ella despierte, ya se los dije – no los miró, a medida que avanzaba. Los árboles le daban paso, era como si le tuvieran cierto respeto.

Entonces hay que reunir a los 5... – susurró Shipo – entonces vamos a tener que viajar con Koga, y Kikyou ¡¡ - recordando las palabras de Naraku.

Ahora que la leyenda renació, los elementos nos tienen cierto respeto, ahora es cuando se ve el final de la perla de Shikón; inu yasha¡ si llegas a completar la profecía, hay grandes posibilidades de que pierdas a la perla¡ - exclamó.

Lo se... pero de todas formas, hay que recuperar a Aome... – Kikyou lo miró extrañada; " esa mujer se ha introducido en su corazón.." siguió caminando, mordiéndose el labio.

A medida que avanzaban, parecían adentrarse más y más al bosque, y así era, cada vez se introducían más en la espesura del bosque, era raro estar allí sin los comentarios que quizás haría Kagome, como; " este lugar no me gusta... salgamos de aquí pronto" . Con Kikyou era muy distinto, no decía ni una palabra, simplemente avanzaba, abriéndose paso entre los arbustos que le cedían terreno, inu yasha, Shipo, Kirara, Sango y Miroku la perseguían sin hacer preguntas, aparentemente ella sabía mucho sobre el tema lo mejor era no molestarle para que les explicara más.

El camino pronto en ves de ser de tierra, comenzó a tornarse de arena, se acercaban a la costa o a alguna laguna.

A donde vamos? – preguntó Shipo a Inu yasha rompiendo el silencio.

... – el no respondió, el follaje del bosque desapareció, abriendo paso a un increíble espectáculo, era una entrada de mar en la tierra, uno muy grande, pero no era sólo eso, la vegetación era muy extraña, era como si estuvieran sumergidos en el mar, una extraña brisa soplaba, llevando consigo algo así como polen, dando un efecto bastante peculiar, pero lo que más llamaba la atención eran unos dragones que circundaban el aire, en sus patas delanteras portaban piedras azules, quizás cristales de energía, a medida que avanzaban las piedras dejaban un rastro de luz.

Esto es...

El valle de Num; el valle del viento de agua – dijo Kikyou deteniéndose para guardar sus flechas, y reparar su arco.

Pero si vivía muy lejos, eso decía la leyenda... – susurró Sango extrañada.

Exterminadora Sango, el valle es parte de una leyenda, se dice que ya cansada de viajar, su energía estaba casi al limite, estos dragones son muy antiguos, deben tener entre mil años o menos, se dice que en medio del mar el viento se detuvo bajo el mar, no podía avanzar, estos dragones fueron en su ayuda brindándole de sus propias energías, Num les dio por recompensa esos cristales que llevan en sus garras.. cuando Num se convirtió en mortal, ellos prometieron ayudar a completar la profecía, ella les había regalado este valle, ese fue su pago, ahora nosotros estamos aquí para que nos lleven a Occidente – Kikyou envió una de sus serpientes, está se puso en frente de uno de los dragones, este paró en un instante de navegar por el aire, miró a Kikyou, a Inu yasha y los demás, descendió lentamente, hasta quedar posado sobre la laguna, allí, ondeante, avanzó sigilosamente, una presentación imponente.

A diferencia de otros dragones, estos son escasos... pero son mucho más civilizados que otros – dijo Sango, viendo como estaban impresionados.

Necesita un alma para tomar forma humana... – susurró Kikyou, una flotilla de serpientes roba almas se acercaba con un alma en sus zarpas cada una.

Forma humana? – preguntó inu yasha.

Si, a menos de que te quieras entender con el a gruñidos, como la bestia que eres – respondió mordazmente. Las serpientes lanzaron las almas contra el dragón que estaba posado sobre la laguna, una luz azul los segó, para cuando alzaron la mirada nuevamente había un hombre vestido con un traje holgado, color azul, su mirada era fiera, provocativa, su cabellos mantenía su color plateado de cuando era dragón, tenía colmillos, y caminaba sobre el agua.

Quienes son? – preguntó, su voz era imponente, correcta, su manera de expresarse era cortés.

Yo soy Sun, viento representante de la luz del sol, y el aire, leyenda llama a Num, tú le debes algo, y para que no cumplas necesito que nos lleves a Occidente.

Veo que eres Sun, los elementos te respetan, como lo hacían antes, pero estas personas quienes son? Uno lleva consigo la flama de Li, dime sacerdotisa del viento, quienes son? Por que la leyenda a renacido? – preguntó mucho, pero sin saturar la mente de Kikyou.

Veo que tú y tu gente han estado mucho tiempo en estos valles, una amenaza llamada Naraku quiere usar la perla de Shikón, pero necesita purificarla, ha raptado a Naomi para darnos una excusa de juntarnos nuevamente – recitó.

Y ellos? – preguntó nuevamente mirando de reojo a Inu yasha, lo observaba con un aire frío.

... su excelencia, nosotros le responderemos si usted nos dice su nombre o como le llaman – le dijo Miroku fijándose en que ponía su atención sobre ellos.

No tengo por que hacerlo, ustedes son los que han venido, al que le daría mi nombre es a este ser híbrido que está en frente mío – dijo sin mirarlo fijamente.

...si así debe ser... Yo soy Sango, de la aldea de los exterminadores... – el dragón la miró con desaprobación.

Por que una exterminadora vendría a un valle de dragones? Me es extraño – dijo acercándose a ella

...mira dragón – le dijo inu yasha desde su espalda - a la persona a la que le dicen Naomi, se refiere a una amiga nuestra, nosotros somos los responsables de todo esto – le reclamó.

Tú eres Li, no? El viento del fuego – preguntó ignorando lo que había dicho.

No me importa si lo soy, sólo sé que tú y tu gente nos puede llevar a occidente, encontrar a esa tal Num y recuperar a Aome – dijo mirando a un dragón alejarse hacía lo que parecía ser el cielo.

Ya veo por que Li te eligió.. – sonrió – entonces les daré mi nombre; Zhen; soy el líder de los dragones de este valle, yo intercedo por mi gente - se dio vuelta hacía el lago. Su ropa tapaba sus brazos, al extenderlos pudieron ver que tenían unas garras enormes, llevaba el cristal de Num, las piedras brillaron: los dragones del valle se reunieron, Zhen volvió a su forma original, dejando las almas utilizadas en medio del aire, las serpientes de Kikyou las recogieron. Un dragón estaba por la espalda de Kikyou, recibió las almas, en medio de luces, los dragones portaban sus piedras, y una joven estaba tras de Kikyou.

Señorita, me llamo Reika, soy la hija de Zhen, el a decidido llevarlos; yo seré quien traduzca las palabras de mi padre – dijo con una leve reverencia.

Zhen es tú padre... – susurró Kikyou – irán todos?

Sí, según lo que dijo Num hace cientos de años, cuando se encuentre con otros vientos, el portador recordará, y nuestra cuenta estará saldada.

Bien, llama a esas personas que te observan impresionados, ellos van conmigo – dijo dejándose caer sobre el lomo de uno de los dragones. Estos eran no muy grandes, cada uno podía portar a una persona cómodamente, y así sería mejor, el viaje ra largo, necesitaban ir lo menos cargados posible.

... Me llamo Reika, soy la hija de Zhen, por favor, dispónganse a montar a uno de mis compañeros, para iniciar el viaje – dijo cortésmente, ella se había mantenido ciertamente encorvada, su apariencia humana, era similar a la de su padre, ella tenía un traje más claro, y una marca en su frente, orejas alargadas, y una cola, era realmente bella para ser un dragón...

hola¡¡ - exclamó Shipo tomándole simpatía, Kirara expreso un maullido.

Hola.. – dijo mirándolo – por favor, tomen camino, no hay tiempo que perder, la persona atrapada por ser la traductora del texto de la leyenda no puede comer, ni nutrirse, puede vivir así unos 2 meses no más... – dijo encaminándolos a sus parientes.

Te llamas Reika, no? –le preguntó inu yasha antes de subir. Los dragones encumbraron... ella extendió alas propias.

Si, que se te ofrece? – le preguntó.

Cuanto sabes sobre está leyenda? Quiero saber lo más posible – dijo mirando el horizonte, acababan de salir de la entrada de mar, ahora estaban en océano abierto.

No se mucho, yo nací después de que ocurriere todo esto, no soy nadie... – susurró.

...Inu yasha, mira allá al frente¡¡ - grito Shipo.

Que? – a lo lejos se veían un tótem de piedra, todos los dragones empezaron a inquietarse.

Reika, que es eso? – preguntó Kikyou tomando su arco y flechas.

Ese es el monolito de Li¡¡ - dijo tomando los cristales de Num, y empuñándolos – el tótem de fuego, allí residen los dragones del fuego¡¡

Hay dragones de todos los vientos? Reika¡¡ explícate¡¡ - le dijo Sango.

Los dragones protegemos sellos, los 5 vientos encontraron sus guardianes, pero de entre las bestias, los de mi raza son los mas resistentes y leales, los dragones somos los guardianes de los sellos de los 5 vientos¡ - dijo casi a gritos, ella se adelanto, golpeo los cristales, al hacerlo se formo una lanza de aspecto muy frágil, encabezó el tropa de su gente – mientras el líder de ellos, no sepa que Li esta con nosotros nos atacaran¡¡ los dragones de fuego son mucho más poderosos que nosotros y más resistentes... – con está última frase, Sango monto a Kirara, tomo fuertemente su Hiray-kotsu, inu yasha saltó de un dragón a otro para quedar lo más cerca de Reika, Kikyou se mantuvo en su posición, lista para atacar. Zhen lanzó un rugido, los demás dragones miraron a Reika con desaprobación.

No¡¡ bajen sus armas¡¡ todos en este momento somos aliados, le pediría a la señorita Kikyou que me ayudara, junto con inu yasha, para evitar este enfrentamiento – dijo tomando nuevamente la forma de bestia.

Inu yasha¡¡ nosotras también iremos¡¡ - grito Miroku montando junto a Sango a Kirara.

No¡¡ Miroku, tú quédate¡ - le dijo subiendo sobre la espalda de Reika – no es necesario...

como desees... – bajo la cabeza, tenía que recordarlo?

Excelencia... no se sienta culpable, eso ya ocurrió.. – dijo Sango al verlo decaer.

No Sango... – levanto la mirada, la tomo de las manos y la miró a los ojos, ella se ruborizo – pero si quieres levantarme el animo puedes tener... – antes de terminar recibe una bofetada y cae hacía el mar, un dragón lo recoge, y mira a Sango con algo así como una gotita a un lado de su cabeza.

Olvídelo¡¡ - dijo descendiendo sobre el dragón más lejano al monje.

Estas bien? – le preguntó Shipo, Miroku tenía la marca de la bofetada muy delineada en la cara.

Que crees?...

Más adelante, inu yasha era rodeado por los guardianes de Li, estos dragones eran mucho más corpulentos que los de Num, sus cuerpos eran de color cobrizo, miraban a inu yasha, Kikyou y a Reika con cautela.

Las almas que le daban forma a Reika eran trasportadas por las serpientes de Kikyou.

Al llegar al tótem notaron una vara parecida a la que llevaba Reika antes e transformarse de nuevo en dragón, la lanza estaba pendiendo de su cuello. La vara del monolito tenía una llama en su extremo. Inu yasha la miró... se sintió muy extraño...

Continuara…