Una Visita no deseada...

El estado de Kikyou iba de mal en peor, la falta de almas no podía ser reemplazada, las serpientes roba almas, las habían perdido de vista ya hace tiempo, el cuerpo de Kikyou tomaba cada vez de manera más fuerte el aroma a barro, Reika estaba recluida en un rincón de la cueva, se sentía mal, culpable.

No podían perder a Kikyou a esas alturas, era esencial para lo que intentaban...

...Kikyou despierta! No te quedes dormida! – gritaba Inu yasha, estaban increíblemente preocupados, el perderla como Windy o como persona era fatal, a pesar de que ya estuviera muerta...

No había mucho que hacer... Reika de pronto salió de la cueva.

oye! – grito Shipo intentando seguirla.

No te preocupes... – dijo, de pronto surgieron unas cuantas almas, ella tomó su forma como dragón, la almas se dirigieron dentro de la cueva, hacía el auxilio de Kikyou.

Gracias! – dijo con alegría, el dragón, después de escuchar eso, se elevó sobre las nubes.

Yue! Que ocurre? – preguntó Titania alarmada – no cualquier cosa te asusta así!

...ese olor... – susurró Ayame – nunca había olido algo así! – la flor de su cabello se voló, sobré las nubes había sólo viento, truenos y relámpagos.

...es cierto es un olor muy extraño... – se percato Koga. No era Reika quien los seguía, que sería que , aquella gran ave le temiera?

Escucharon un gruñido, y el aroma desconocido eclipso frente un hedor putrefacto. De entre las nubes surgieron unas llamas, rojas, y brillantes, era un caballo con llamas que flameaban a su alrededor, lo conocían, rea de una extensión de Naraku... no, era distinto, era mucho más grande, tenía alas; nunca habían visto un caballo así en sus tierras. El ser pasó fugaz por el lado de Yue, y se alejo entre la bruma y oscuridad.

eso era lo que te asustaba? – le preguntó Ayame al ave.

No! Era algo más pequeño en tamaño, pero más peligroso – dijo con una voz temblorosa.

...no! no puede ser! Que haría él aquí? – exclamó Koga conmocionado. Había olido cierto aroma en el aire.

Quien? – le preguntó Titania.

No... después te lo diré! Yue aterriza pronto! – bramo.

Y el ave, confundida se abalanzó contra la isla, puso sus garras sobre el cráter del volcán, allí la tormenta los golpeaba fuerte, Ayame se envolvió en un pequeño tornado, seguida por Koga, que ya usaba el poder de la perla de dragón, Titania iba a toda velocidad, usaba unas sandalias con alas puestas en los tobillos, estas la levantaban sobre el aire.

En la otra cara del volcán donde la tormenta no golpeaba tan fuerte, estaba la cueva donde estaba inu yasha, vieron a Yue elevarse sobre sus cabezas, alejándose rápidamente. Que tanto lo asustaba...

En las tierras de oriente, cierta persona se trasladaba por el cielo, sigilosa, para que no le descubrieran en su salida del lugar donde debería estar.

... – un constante respirar doloroso nacía de Kagome, ya había pasado más de una semana, no se había nutrido, sólo recibía más y más dolor de aquellos horribles asesinatos.

...Kagura, veo que vas a un lugar donde quizás no te pueda ver... – chasqueo los dedos, una colmena de avispas se posó cerca de su ventana – síganla, vean que intenta...

los insectos instantáneamente, se lanzaron hacía el aire, se dirigieron hacía las nubes negras de tormenta que venían del mar.

Kagome dejo de hacer ruido, parecía haberse rendido, ya no susurraba por ayuda, pero su mirada seguía en blanco...

Kagura seguía a Sesshumaru, estaba metido en medio de una tormenta quizás por que...

Él ya había captado el olor de la extensión de Naraku, que haría ella otra siguiéndolo? Otro trato? Otra trampa? Sea cual fuera la razón, la estaba ignorando... la persecución llegó a un punto en el que separaba a Kagura de Lee montada en el treshalt de dos cabezas por muy poco, unos metros.

...señor Sesshumaru, por que estamos viajando por está tormenta? – preguntó lee, estaba asustada por los truenos y relámpagos.

...Lee, quítate de hay... – susurró, su voz se escuchaba clara aún opacada por los relámpagos.

Señor? – preguntó extrañada, obedeció, Jaken tomó las riendas, y movió el treshalt más adelante.

Amo bonito... que ocurre? – pregunto Jaken, Sesshumaru no respondió, se mantuvo sin moverse en su lugar, mirando un cúmulo de nubes, mucho más oscuro que los demás.

Tú eres una extensión de Naraku, o me equivoco? – preguntó casi en un susurro. La sombra de la nube, se volvió un remolino, del centro de este, apareció Kagura, parada sobre su enorme pluma.

Señor Sesshumaru, supongo que no me guarda rencor, o si? – preguntó tapándose la boca con su abanico.

Rencor?... – susurró.

Por supuesto que sí! - Grito Jaken, que había dado la vuelta – por la culpa de ustedes el Señor Sesshumaru casi es absorbido por Naraku!

... – Jaken recibió un golpe en la cabeza, obviamente que dijeran que casi era vencido era muy vergonzoso para alguien como Sesshumaru.

Ustedes creen que los llevo a otra sucia trampa de mi amo? – preguntó. Sus verdaderas intenciones eran otras. Quería que Sesshumaru sacara del castillo a Kagome, no por pena, si no, para que Inu yasha y los otros no estuvieran obligados a purificar a Shikon no tama, creía que cuando ocurriere eso, Naraku la absorbería; no quería que ocurriera eso. Pero no tenía nada que ofrecerle a Sesshumaru para que hiciera eso, pretendía llevarse otra vez a la niña.

Entonces cuales son sus verdaderas intenciones? – preguntó sin poner mucho entusiasmo.

Conoce la leyenda de los 5 vientos? – preguntó con una mirada penetrante.

Los cinco vientos?... no creo en fantasías... – se burlo.

No es fantasía – le replicó, si pensaba así seria mucho más difícil – en el castillo tenemos la perla de shikon completa, y a la chica que es uno de los vientos, y que acompaña a Inu yasha – le informo, con esperanza de que ayudara un poco.

Que quieres? Ve directo al grano – viento que estaba insinuando.

Quiero que saques de las manos de Naraku a esa niña llamada Aome... – dijo evitando la mirada de Sesshumaru.

Por que querría yo hacer eso? – le preguntó despreciando del todo su petición. Jaken intentaba decir algo entre medio, pero el ambiente lo evitaba, y los golpes que Lee le propinaba sin razón alguna.

Por que si usted no lo hace, Naraku podrá usar la perla con todo su esplendor y será mucho más poderoso que usted – replicó, inclinándose sobre su pluma. Sesshumaru estaba puesto de forma majestuosa sobre el aire. Realmente a ojos de Sesshumaru Kagura actuaba muy bien.

Quieres decir que el maldito de Naraku completo la perla? – preguntó Jaken a gritos.

Así es... – susurró.

Quien fue el culpable de esto? – preguntó apretando los dientes.

Fue... el monje que acompaña a Inu yasha...

Otra vez el tonto de Inu yasha! – gritó Jaken, otra vez Inu yasha...

Maldición... y donde está ese Híbrido? – preguntó cada vez más y furioso y conteniendo su rabia.

Va camino a occidente, para encontrar al 5° viento, y completar la profecía...

Inu yasha contribuirá a la labor de ese hombre malo? – preguntó Lee asustada.

Como puede ser tan estúpido! – elevó la voz Sesshumaru.

Y por que le pides al señor Sesshumaru que deshaga los planes de tu amo? – insinuó Jaken.

Por que... – Kagura se incorporo lentamente, cerró su abanico de golpe, y miró desafiante a Sesshumaru - ...soy una extensión de esa criatura... – de pronto se dio la vuelta, sintió el sonido de los insectos de Naraku al volar, estaban escuchando... - ...no! – estos ya se iban... – "Knives Dance!" – la mitad de los insectos se quemaron, otra centella de luz atravesó el aire, en dirección de la otra mitad que escapaba; destrozándolos a todos. Kagura estaba impresionada... por que?

Si desconfías de las bestias de tú amo, puedo pensar que es verdad o una trampa muy bien elaborada... Jaken! Parte hacía occidente... – Kagura se quedó allí - ... mujer, no te hagas ideas, sólo busco el poder, no necesito escuchar tus razones para traicionar a tu amo... – y se alejó entre las nubes.

Kagura se quedó allí, si se movía tendría problemas, Naraku podía rondar por ahí junto a su nube de veneno, y absorberla... lo mejor era también ir a Occidente...

Por otra parte, Koga, Ayame y Titania, avanzaban trabajosamente en contra de la corriente, la tormenta se intensificaba, parecía abarcar todo el horizonte, el día se asemejaba a la noche... ya faltaba poco para llegar al otro lado de la montaña, no podían pensar en otra cosa que refugiarse pronto. Aún con sus agudos sentidos, no percibían nada, el viento hacía que lo que el sonido se oyera distante, a su vez, si había algún aroma que les ayudara, no lo percibirían, y el escapar tambien era difícil... estos eran los factores que necesitaba esta bestia...

Dentro del volcán donde la tormenta era algo distante, sólo un sonido, algo se retorcía en el corazón del volcán, inactivo...

... oye, Shipo, y Reika? – preguntó Sango, viéndolo regresar por la curva de la cueva.

Se sintió mal... – mintió . Ella nos mando algo... – la media docena de almas se aventuraron dentro del cuerpo de Kikyou...

...señorita Kikyou... – susurró Miroku... Kikyou levanto su mirada astuta y fría... lentamente se reincorporo...

Inu yasha sentía un gran alivio, por un instante no sabían que decir, pero tampoco importaba, algo sacudió la isla completa... tanto Koga, Ayame, Titania y Reika lo habían percibido; sería eso lo que inquietaba al ave de la luna?

Todos escucharon un rugido espantoso, como de una bestia cuando agoniza. Koga se detuvo por suerte antes de que un escombro de los bordes del volcán lo aplastara. Entre la densa lluvia vieron un par de ojos, de una bestia muy grande, parecía haberse dado cuenta de la existencia de los 10 visitantes de la isla.

El grupo de Inu yasha se apresuro para salir de la cueva, se derrumbaba. Al salir se encontraron con la tormenta, empezaron a correr hacia el otro lado de la isla...

Vamos corran! Hay que encontrar a Reika! – grito Inu yasha, dirigiéndolos, sabía donde estaban por las llamas de Kirara.

...apresúrense... hay que encontrarlos... – escucharon en la distancia.

Miroku dijiste algo? – preguntó Inu yasha, confundido.

No...

... que?...Demonios!... – gritaron dos personas a la vez.

E hay, una imagen bastante simpática, Inu yasha, en el piso lleno de barro con el pie de Koga en la boca, balbucea algo incomprensible, Koga por su parte tiene toda la cara en el barro, pero mueve los dedos de su pie para molestar a Inu yasha.

Que te ocurre? – preguntó Inu yasha muy molesto...

Perro rabioso, no te molestas en saludar? – dijo irritado, no era la idea que tenían ambos de encontrarse, había encontrado una segunda cueva subiendo el volcán, iba en bajada así que la tormenta no los golpearía, Kikyou estaba débil pero necesitaría almas pronto. Titania miraba a Kikyou con interés, a su vez Miroku miraba a Titania con interés, y Ayame criticaba a Inu yasha.

...como se te ocurre! Permitir que ese ser destruya todo con el poder de la perla!... – y algo así pero con variaciones continuaba... hasta que se le acabo el aire.

Como sea, Inu yasha, por que permitiste que ese ser se apoderara del último fragmento? . pregunto Koga alterado...

Ah? ... – había escuchado sin entender el por que a Ayame... – la verdad no fue del todo mi culpa...

Si culpas a los demás de tus culpas! – replica Ayame. en ese instante, las paredes y el techo de la cueva, se empezaron a desplomar, salieron apresurados, cuando salieron, una roca se abalanzó contra ellos desde la dirección del cráter del volcán.

...no es así, es mi culpa... – Dijo Miroku entre el viento y la lluvia.

Excelencia... – susurró Sango, preocupada, lo había visto tan deprimido últimamente que ya no le pedía a ninguna mujer que tuviera un hijo con él...

Monje! Por que lo permitiste! O Inu yasha te está asustando para que te culpes? – preguntó Koga, indignado.

...ahora no empiecen a pelearse! – les replicó Titania, (con su forma de hada pequeña, agarrada de la armadura de Koga) – ahora tenemos que encontrar a la bestia que está haciendo está tormenta!

... – Inu yasha miró muy de cerca a esa pequeña figura luminosa. Ella le enterró su lanza en la nariz ( pues sí, o creen que usa polvitos para defenderse? ). Inu yasha se quejo la insultó, y después empezó a sangrar... Kikyou, Shipo le entrego papel doblado como un tubito, para que se tapara la nariz.

...hombre lobo, sea como sea, todos estamos juntos en esto... tú debes un Windy, no? – preguntó Kikyou, sentada en Kirara, bastante tranquila.

Tú quien eres? – preguntó, hasta el momento no había notado la presencia de Kikyou.

Soy la sacerdotisa Kikyou; dime, eres un Viento? – reitero.

Si lo es, no es su problema, ahora el problema es lo que ocurre con la tormenta! – replicó Titania. Kirara, casi bota a Kikyou de su lomo, algo la altero, tanto Koga como Inu yasha, y Shipo notaron que algo se acercaba...

Kirara! – miró entre la espesa lluvia, no podía captar nada, ni escuchar algo, lo hubiera captado en otras condiciones, pero así, no. Ayudo a Kikyou a mantenerse estable sobre Kirara – que ocurre?...

Algo se acerca... – susurró Ayame, dirigió su mirada hacía la misma dirección de donde había venido el desplome.

Será mejor que encontremos pronto a Reika! Tenemos que salir pronto de aquí! – gritó Miroku, la tormenta iba cada vez empeorando, les costaba caminar, y mirar hacía adelante.

...Shipo, tú la viste salir, dijo a donde iba? – preguntó a gritos Inu yasha.

Sea donde sea, debemos encontrarla, y pedirle que nos lleve al cráter de este volcán! – dijo Kikyou, abrazada al cuello de Kirara, protegida por Sango, que también iba montada; tampoco podía contra el viento.

Que hay allí señorita Kikyou? – le preguntó Sango. Ellas a diferencia de los otros personajes allí, no eran tan resistentes... el monje Miroku era otro caso...

...la sacerdotisa tiene razón, algo está provocando está tormenta, cuando yo venía hacía oriente, me explicaron que por estas regiones, no hay grandes tormentas.. – le apoyó Titania.

En ese caso ustedes busquen a Reika, nosotros iremos a ver que hay! .. – grito Inu yasha, acompañado de Koga. Ayame se empeño en seguirles.

No! Tú tienes que proteger a los demás, telo encargo! – dijo Koga tomando velocidad, gracias a la perla de dragón, Inu yasha iba a su vez a buen paso.

Koga!... cuídate! – escucharon de manera lejana.

... Koga, como recuperaste tus poderes? - le preguntó extrañado Inu yasha.

Se llaman fragmentos de dragón... ignorante, me dan características de esos seres – dijo con orgullo.

.. tú siempre dependes de algo para ser fuerte... – insinuó, y tomó la delantera. Koga molesto, usó más capacidad de la perla, Inu yasha quedó atrás por varios metros.

Te haz vuelto veloz, bestia! – le felicitó... de cierta forma.

Ja! Y tu muy lento! – al llegar al cráter, no pudieron contener su sorpresa; nunca antes había visto algo así, era un ser extraño, tenía un cuerpo como de un dinosaurio, pelo en lo que era la columna vertebral, su cabeza se asemejaba al de una araña, llevaba ondeantes unas alas como de libélula, y una cola de escorpión, lo único que no era del todo grotesco era un cristal que llevaba entre sus ojos de araña, un cristal nítido, en el que se veían nubes, algo claro y puro. Como una bestia así podía portar semejante joya?

Se sintieron intimidados, fijaron sus miradas confusas en la joya, se miraron, era obvio; debían despojarlo de su joya, algo de ella atraía su atención. A parte, era aquella bestia la que provocaba los derrumbes, podían captar el aroma que circundaba por toda la isla en él.

Inu yasha, quizás si lo destruimos, está tormenta cesé... – susurró Koga, en esa región alta de la isla, no había rastro de la tormenta, únicamente el cielo oscuro y tenebroso.

Por que crees eso?...

No hagas pretextos y hazme caso... – de pronto recordó...- debemos apresurarnos o Aome sufrirá las consecuencias...

Koga, y tu como lo sabes? – preguntó, ahora que el tema entraba de nuevo en su mente, sintió un nudo en su estomagó, era cierto, por lo que le había dicho, no podían tardar más de un mes o Aome moriría, con ella la perla de Shikon...por eso era más conveniente encontrar al 5 viento y salvar a Aome y no tener que pagar de alguna forma la condición puesta por Naraku.

Vamos... no es de tu incumbencia

Ambos se lanzaron al mismo tiempo dentro del cráter, un olor pestilente los rodeó; esa no era la bestia, estaba muerta, el cristal que llevaba seguí funcionando únicamente, era otra cosa lo que había provocado el derrumbe, pues esta bestia estaba carcomida por dentro. Koga le arrancó el collar, aún así no hubo cambio alguno, la intentó quebrar, pero no pudo...

Una pequeña lucecita, descendió hacía ellos...

Que quieres hada? – le preguntó con desdén Inu yasha. Titania, se envolvió en luz, y tomó su forma verdadera. Inu yasha la miraba indignado.

Inu yasha, me llamó Titania, Hada Líder de los Fairies... – dijo con orgullo.

Koga de donde la sacaste? – le preguntó apuntándola – es un metiche...

No lo sé, simplemente apareció y me aconsejo.. – haciendo un gesto de Ignorancia.

...son unos desagradecidos... – los golpeó a cada uno con su lanza, dejando cototos enormes en sus cabezas – venía a ver que clase de monstruo era, recordé que en esta isla había una bestia que podía ver el clima... según lo que veo algo que no son ustedes lo mató, y algo más está haciendo está tormenta, por que el cristal dice que debería estar despejado...

como sabes todo eso? – le preguntó Inu yasha tocando el cototo que se le escocia.

Es cierto, tú eres de occidente, por que vendrías a oriente o a sus cercanías? – Koga sabía que era muy antigua, conocía a muchos seres de oriente...

Es algo bastante simple, ahora Koga, primero que nada tengo que decirles que siempre olvido decir detalles... lo que sí puedo hacer es llevarlos a donde se encuentra la verdadera bestia... la sentí asecharnos cuando veníamos sobre Yue, pero pensé que era el caballo de pesadilla que no seguía por equivocación... pero era otra cosa... lamento no haberles dicho.. – puso su mano en frente de ella y se inclinó levemente hacía adelante, como lo hacen en occidente los caballeros.

Disculparte?.. nah - Inu yasha hizo un gestó con su mano para que no se preocupara... – si quieres ayudar llévanos a donde crees que está el verdadero monstruo! – le indicó. Titania recogió la esfera con suma delicadeza, lo sostuvo entre sus brazos, y lo hizo desaparecer en un leve brillo color nácar, Koga e Inu yasha se asombraron con la bella luz. Titania apuntó hacía arriba.

Eso que quiere decir que... está arriba? – preguntó – cómo se supone que llegaremos? – reclamó Inu yasha, podía saltar alto, pero no volar...

Bestia, sólo observa... – le respondió Koga, Titania, tomó la bolsa, de ella saco el polco nácar, y lo roseo sobre Inu yasha y Koga, poco a poco se fueron elevando tras Titania, lentamente se elevaron sobre el cráter; que se acercaba mucho a las nubes, cuando llegaron al limite entre las nubes y la atmósfera, Tomaron velocidad de manera brusca, Inu yasha se sintió mareado, a la vez Koga sentía lo mismo, nunca había viajado a tal velocidad, aún con los fragmentos de la perla. Sobre las nubes era todo lleno de luz, la nubes bajo llenos relucían blancas a la luz del sol...

Nunca había estado en un lugar como este... – susurró Inu yasha.

Yo tampoco, que lugar es este? – preguntó Koga desconcertado, ambos ( Inu yasha y Koga habían visto el cielo, pero no desde allí) observaron el panorama, sencillamente "impresionante", pronto se encaminaron hacía el este; ahora, sin la tormenta ni la presencia de lo que quedaba del monstruo del cráter del volcán, se sentía fuerte, una presencia repugnante ante los personajes, entre más iban hacía la dirección de aquella presencia, podían ver más una burbuja brillante, que reflejaba la luz...

...ahora te responderé – había dejado a Koga cortado pues habían tomado velocidad para llegar a la burbuja – así sobre las nubes, en cualquier día... aquí el sol es más brillante que en ninguna otra parte, no todas las criaturas pueden subir, pronto sentirán algo extraño en sus orejas... la altura nos afecta... – era cierto, Inu yasha y Koga fueron victimas de la diferencia de presión, de sentirse mareados, a molestarse enormemente por ese sentimiento en sus orejas...

supongo que en esa esfera está el monstruo... – Inu yasha desenfundó a Colmillo de acero.

...no es así, aquí arriba hay seres que controlan ciertas cosas viendo des de aquí arriba, y les avisan a sus altos... a veces los altos hacen algo... – le retuvo Titania, Inu yasha estaba listo para lanzar el viento cortante , el Baku Riu-Ha o lo que fuere...

que controlan? – preguntó Koga, cuando estaban a un paso de la esfera.

Lo que hacemos, las guerras, y a parte estos jueces son muy poderosos... – le contesto.

Es imposible! A menos de que puedan leer la mente... – Inu yasha miró a través de la esfera, había una mujer vestida con un Kimono de reina, color blanco con pequeños diseños celestes en las mangas, cuellos y terminaciones, sencillo y bello, tenía los ojos cerrados, con un rostro sereno, obviamente no era una bestia perversa, ni si quiera tenía una presencia maligna, más bien agradable...

Entonces donde está? – preguntó Koga mientras se dirigían hacía abajo a velocidad moderada.

Los puntos donde se encuentran son perfectos para usarse para controlar cosas, si es que algún ser puede llegar aquí... no importa la altura mientras sea en el mismo punto, está más abajo... – dijo, al bajar la nubes se notaban más oscuras... había un ser extraño, su cabeza de color violeta estaba alargada a los lados como si tuviera cuernos, y tenía una nariz enorme, bestia con una piel tapándolo solo en las partes necesarias...

.. ya llegaron... – susurró " alegre" – ya veo, con que vienen con un hada...

quien demonios eres? Y que quieres? – le gritó Koga.

Jiji... – rió de manera desagradable – ya que el demonio Naraku tiene la perla de Shikon, prefiero poseer otra...

Otra? De que demonios hablas? – le reclamó Inu yasha, empuño a colmillo de acero.

No te alteres bestia, la perla de shikon puede ser la joya más poderosa pero existen otras joyas que le dan a los seres sobrenaturales poderes superiores; como la perla de dragón que tiene ese hombre lobo... – Inu yasha miró a Koga, eso era lo que usaba entonces...

Perla de dragón? Koga eso era? – le preguntó, no sabía que también existieran otros tipos de joyas que entregaran poderes sobre naturales.

Me la entrego un dragón del viento...

Koga, eso es lo que quiere... – susurró Titania.

Si lo noté...

Entonces hay que matarlo para que cesé la tormenta, no? – preguntó Inu yasha.

Si, sólo hay que matarlo...

Hada! No me subestimes! No soy lo que aparento, yo vengo también de oriente, quizás yo sea lo que asustó a esa gran ave cobarde... – poco a poco una aura maligna emergió del ser... podía ser pequeña pero tenía una concentración de malicia pura...

Es increíble... – susurró Inu yasha, los tres se retractaron.

Es posible que esa no sea su verdadera forma... – susurró Koga.

Es correcto, hombre lobo, si no quieres ver mi verdadera forma, entrégame la perla de dragón – extendió su mano.

Koga... – Inu yasha lo miró, como ideando un plan.

Está bien... – Koga, ambos se elevaron y bajaron en picada...

InuYasha preparo el viento cortante, y Koga un golpe... le bestia los miró hacía arriba, y cuando intentaron golpearlo, un escudo de energía los rechazó...

...Kagura estaba en un momento muy complicado, los insectos no paraban de aparecer y al parecer la nube de veneno se acercaba... no tenía por donde irse, él siempre la encontraría; pero no podía rendirse... Más adelante había una tormenta, si se metía entre las violentas nubes y aumentaba el torbellino quizás perdería de rastro a Naraku...

Kagome, estaba mal, ahora ya no podía repeler el veneno de la nube, lo absorbía poco a poco... pero Ni si quiera Naraku se podía permitir que ella estuviera en mal estado.

Kanna, llévate a Aome a la parte menos densa de la nube castillo... – Kanna accedió sin chistar. –Naraku miró un instante la tormenta, no tenía tiempo de atrapar a Kagura, debía preparara la purificación que ocurriría en unas dos semanas... – Kagura te libraste está vez... – susurró y dirigió la nube de vuelta a occidente.

Kagura se sintió aliviada, acabó con el último insecto, y se alejó hacía donde se supone que era la dirección de occidente.

...Koga e Inu yasha al ser rechazados se precipitaron contra las nubes, Titania se quedó sola un instante, cuando el ser la iba a atacar el viento cortante de Inu yasha, más el poder de destruir campos de fuerza actuó, cortando el hombro de la bestia.

puede que tengas un campo poderoso, eso es sólo tu presencia, pero resultaste eres un fraude, prepárate a morir! – Inu yasha se lanzó contra él, pero Titania lanzó sus polvos – que te ocurre?

La bestia a la que le quitaste la habilidad de controlar el clima, tú la mataste no? – le preguntó, el polvo formo una burbuja alrededor de la criatura.

Si lo hice, soy un parásito que vive de otros, pero cuando no tenía a donde ir cuando llegué a esta isla anticipando la llegada de ustedes me lo comí por dentro, y absorbí sus poderes.. – sin sentir pena alguna por el hecho, con impresionante malicia. Titania apretó su puño y la burbuja presiono al parásito y la ahorcó.

Esa bestia tenía una forma humana, pero la persona que el quería quedó atrapada dentro de la bestia, él controlaba que él clima fuera como debería, pero cambió su cuerpo para que esa persona se salvará, su cuerpo fue mutilado por la bestia y murió quemado por la gente que ya no aguantaba verlo haciendo tales masoquismos, su verdadera alma quedó en la bestia que este parásito se comió, la persona querida es la mujer que vimos dormida más arriba... – al terminar el relato presionó más la burbuja, la sangre se filtró dentro de la misma, y dejando unas luces dentro de la esfera.

Que piensas hacer con eso? – preguntó Inu yasha, el relato lo había hecho sentir un nudo en el estomago, igual que Koga.

Los parásitos también se alimentan de las almas de sus victimas, y con mis polvos podré reconstruir su cuerpo... supongo que con eso bastará... – el cielo a sus pies se aclaró y se disolvió... Titania subió más arriba y se encontró con la burbuja de la joven... y empezó a hablar en un idioma extraño... la Joven le dijo en chino " No te preocupes su labor ya termino en la tierra, el desde hace mucho quería volver..." la joven acogió el alma en sus brazos, la abrazó dulcemente, Titania también le entregó la esfera del clima, el alma tomó la forma de un joven vestido de príncipe Chino, y ambos tomaron la esfera y sonrieron a Titania. Ella les saludo a su vez con una inclinación, y se alejo lentamente a donde le esperaban Koga e Inu yasha.

Esa historia era real? – preguntó Koga impresionado.

Supongo que ustedes piensan que soy una hada anticuada e irresponsable, he vivido mucho tiempo y se sobre la vida, pero me comporto así para darle algo de animó a mi vida – los miró que estaban cabizbajos, cuando llegaron cerca del cráter Titania se detuvo – están preocupados por Naomi, no, lo recordaron por la historia de ellos dos, díganme, ustedes son capaces de entregarse a una labor incansable y dolor por la eternidad para que el ser que aman esté bien? - y después se adelantó... Koga e Inu yasha meditaron...

De pronto apareció de una de las pocas nubes que quedaban; un treshalt de dos cabezas y...

Sesshumaru! Que haces aquí? – gritó Inu yasha...