Capítulo 1 "El inicio de algo nuevo"
Harry era un chico de 16 años, vivía en el número cuatro de Privet Drive con sus tíos y su aún detestable primo Dudley. Este chico aparentemente ordinario, sin ningún atributo físico más que unos fuertes brazos y hombros anchos…era un mago, a simplevista nadie lo diría pero realmente lo era. Llevaba 6años en el colegio Hogwarts de magia y Hechicería . s poesar de ser anticosial en el mundo "Muggle" que era el nombre que se le daba a las personas normales, no mágicas, en la escuela tenía dos grandes amigos y además era famoso en el mundo de los magos….Porqué? pues a la corta edad de un año este chucuelo acabó temporalmente con el mago más tenebroso de todos los tiempos, tan grande y malvado que su sólo nombre llamaba grandes desgracias, este mago es Lord Voldemort.
A pesar de no haber hecho desastres desde su aparición en el quinto año de Harry todo estaban alerta porque el había vuelto, y andaba por ahí merodeando.
Este chico no dejaba de pensar en eso, nunca lo hacía. Sólo dejaba de pensar en el para pensar en sus amigos y luego nuevamente volvía a ocupar su cabeza ese mago de mirada roja y llena de odio.
Harry se encontraba en su habitación la noche del 29 de julio. 23:30 horas, miraba por la ventana hacia el manto punteado infinito que se mostraba por su ventana. Pensaba…en lo de siempre , el mundo mágico, prácticamente no salía de su habitación y eso era bueno para todos, para Harry y para sus tíos que odiaban tener que verlo en los mismo espacios fisicos que ellos. Especialmente ahora que atraía desgracias.
Observaba la ventana como hipnotizado. La veía ahí también, a ella, la chica que desde siempre había estado en sus sueños y pensamientos como una persona más, Harry no había notado lo que esa mujer significaba para el, le debía la vida, y pensaba que podría dársela si ella se la pidiera. No se había dado cuenta de lo mucho que hacía por el día a día, y de lo hermosa que era y de su risa y sus ojos….
Tres puntos cafés quitaron a Harry sus ensoñaciones con ella, y lo dejaron estupefacto por un par de minutos…Lechuzas?
Se apresuró a levantarse de la cama y abrir la ventana para dar la bienvenida a estas tres visitas tan deseadas por el desde que había dado un paso fuera de la plataforma nueve y tres cuartos el verano anterior.
El trío de lechuzas entró con la elegancia que las caracterizaba. Y se posaron en la silla del escritorio que el chico tenía.
Cada una llevaba una carta y un pequeño paquete atado a la pata. Harry quitó extrañado los paquetes y las cartas a las lechuzas al momento en que estas levantaron sus patas ordenándole hacerlo.
Una carta era de Ron, otra de Hermione, otra de Hagrid…
Pero que es esto?-se preguntó en un susurro mientras abría la carta de Hermione con manos temblorosas.
¡Feliz cumpleaños Harry!
Como estas? Espero que un poquito mejor que yo, Echo mucho de menos Hogwarts, y a ti y a Ron. Pero mis penas no dejarían que olvidara tu día especial! Ahora te estoy escribiendo desde el "instituto de enseñanza de primeros auxilios"
Ya sé que cara pusiste, mis padres me inscribieron para tener algo en que perder el tiempo, aunque quizá no sea tan terrible, en fin.
Te escogí un regalo espectacular. El mejor que encontré y pienso que te gustará. Espero que si.
Bueno ya me despido
Cuídate mucho! Y ya nos veremos.
Besos
Hermione.
Harry dejó de leer la carta con una sonrisa.
Primeros auxilios-dijo soltando la risita que esa sonrisa precedía mientras se dirigía al paquete que traía la lechuza.
Que será que será-se decía mientras desataba el cordel que mantenía cerrado el bulto.
Sus ojos se abrieron al ver a Hermione, Ron y el mismo sonriéndole desde un hermoso cuadro, los tres reían y se hacían bromas mientras el los observaba.
Habían otros dos más. En uno salían sólo Hermione y el y en otro sólo Ron y el.
Con una sonrisa de auténtica felicidad puso los tres cuadros en su velador. Quedó embelesado mirando el de Hermione y el. Recodaba el día en que les habían tomado esa foto, Hacía un hermoso día de sol y Harry no había querido ir a Hogsmeade. Hermione estaba enferma y se había quedado ahí también, Ron tuvo que ir porque los gemelos le habían hecho una llamada urgente. La chica convaleciente fue a dar un paseo con Harry por los terrenos cuando se encontraron con Colin quien les había tomado esa fotografía. Harry con tantas cosas en la cabeza había olvidado pedirla, pero a Hermione no se le iba nada. Y ahí estaba la fotografía ahora, en su velador recordándole que faltaba poco para volver a su verdadero hogar.
Las otras dos lechuzas comenzaron a aletear en signo de que ya se iban, eso sacó a Harry se su ensueño y abrió la ventana para que las tres lechuzas hicieran el camino de vuelta a casa.
Vió la otra carta, reconoció la letra desgarbada de Ron, que contrastaba con la caligrafía perfecta de Hermione.
Tomó el sobre y lo abrió con emoción.
¡Feliz cumpleaños Amigo!
Con tanta cosa en la cabeza apostaría a que se te olvidó
Harry sonrió ante esa afirmación, realmente se le había olvidado.
Pero aquí estoy yo para recordártelo. Bueno tu regalo…me costó mucho escogerlo así que te tendrá que gustar o te tendrá que gustar. No te diré lo que es porque perdería gracia.
Bueno te cuento que hace poco concordamos con Hermione que iremos a comprar los útiles el 16 de Agosto, Así que ahí te vemos me mandar un mensaje con Hedwig para responderme.
Me despido amigo.
Disfruta tu regalo!
Ron.
Harry fue a ver su calendario, el cual no había tomado en cuenta en mucho tiempo, y vió que faltaban dos días para el 16 de agosto.
Tendré que tener el permiso rápido.-se dijo mientras abría el segundo regalo de la noche.
El chico soltó un pequeño "Oh" al darse cuenta de que era una caja llena de los más deliciosos dulces, las más espectaculares bromas y artificios, y unas fotos de jugadores de quiditch. -Esto me recuerda a casa-se susurró mientras observaba la foto de su jugador favorito y abría una caja de grageas bertie bott de todos los sabores.-Necesitaba una de estas-dijo echándose una a la boca que para suerte de el, era de Limón.
Se fijó en el tercer paquete, y la tercera carta.
Hagrid-se dijo y abrió la carta ya más tranquilo.
Felis cumpleaños harry
Bueno llo eztava preocupado por ti porke no sabia komo estavas. Puez espero ke estes vien.
Ojala te guste tu regalo porque lo hize con mis propias manoz.
Cuidate musho.
Se despide
Tu profesor y amigo.
Hagrid.
Harry, sorprendido ante la rapidez con que se notaba la carta había sido escrita y las numerosas faltas de ortografía. Se dispuso a abrir el regalo.
Era una tarta como la que le había hecho para su cumpleaños número 11. algo extraño era que "Feliz" estaba bien escrito en la tarta a diferencia de en la carta.
Pasó un dedo por la superficie de la torta y la probó, Hagrid podía tener muy mal gusto para algunas cosas alimenticias pero las tartas eran algo que el hacía bien.
La alarma sonó. 12:00 pm...30 de julio. Harry había cumplido 17 años.
Feliz cumpleaños Harry-se susurró y sacó un pedazo de su torta personal mientras observaba las fotos que sonreían desde su velador.
