CAPITULO 20
PELEA Y HUIDA
- Hola - saludo el muchacho - soy Tom Ryddle ¿Quiénes son ustedes? ¿Y porque hay tanto vapor en la habitación?
- ¡Pero que suerte! - exclamó who-you-know - Ahora si podré llevar a cabo todos mis planes.
- sabe - empezó a decir Harry - yo creí que el próximo año, cuando fuera el torneo de los tres magos, usando a su fiel mortífago que se encontraba en Hogwarts iba poner mi nombre en el cáliz y asegurar mi entrada al torneo, y que fuera el primero en tocar la copa, la Copa que su mortífago habría convertido en un translador que me llevaría al cementerio donde esta su padre, lejos de la protección de Dumbledore, a sus brazos expectantes...
- ¿De donde sacaste esa idea tan absurda? - dijo Voldemort.
Harry se encogió de hombros.
Voldemort explicó todo a aquel muchacho, y se pusieron de acuerdo. Harían otro hechizo diferente, para que el alma del Voldemort derrotado se pasara al cuerpo de Tom; pero para esto Ryddle tenía que ser real, y la única forma era que le chupara la vida a alguien, y no se imaginan a quien iban a usar.
- Usaremos al muchacho - dijo Voldemort.
- ¿A cual? - preguntó Tom.
- Pues a Harry, ¿A quien mas?
- Podría ser al horrible pelirrojo que intenta abrir la puerta con desesperación para escapar.
- A ese ni de sirviente.
- No deberías juzgar a las personas solo porque tienen cara de idiotas - continuó Tom
- Es que ustedes no lo han visto en realidad - comentó Harry. - cuando me secuestro me golpeo varias veces para noquearme pero nunca lo logró.
Los tres magos empezaron a reírse muy fuerte, y hacer mas comentarios, parecían tres viejos amigos contando anécdotas y divirtiéndose. Hasta que una gran piedra golpeo la cabeza de Tom, haciéndolo caer, pero obviamente no le pasó nada; la piedra había sido arrojada por no se imaginan quien, así es, nada mas y nada menos que por Hermione que acababa de llegar al rescate.
- Ah - dijo Voldemort - pensé que había sido el otro chico.
- ¿Quién, Ron? - dijo Hermione - por favor, él no podría atinarle al lago aunque estuviera a un metro de distancia. Pero yo no vine aquí para criticar a Ron, vine a rescatarlos.
Voldemort rió fríamente.
- ¿Tu y cuantos mas? - dijo - . ¡Tom, mátala!
Tom sacó su varita y la apuntó con ella, "Avada Kedavra" pero Hermione se arrojo ágilmente detrás de Harry, el hechizo se impactó sobre las ataduras de Harry y este quedó libre.
Ahora Tom trataba de darles pero se movían demasiado y apenas alcanzaba a chamuscarle los cabellos.
De repente llegó música de algún lugar. Rydlle se volteó para comprobar que no había nadie mas en la habitación. Pero aquella música llegaba cada vez mas y mas fuerte; era una música estremecedora y sobrenatural. A Harry le pusieron literalmente los pelos de punta. Luego la música alcanzo tal fuerza que Harry pudo sentirla retumbando dentro del él y surgieron llamas del techo.
Apareció un pájaro carmesí del tamaño de un cisne, tenia una cola dorada y unas garras brillantes y muy largas con las que sujetaba unos harapos viejos.
El pájaro se encaminó hacia Harry y dejo caer el fardo a sus pies y luego se posó en su hombro.
- Es un fénix - dijo Ryddle
- ¿Fawkes? - musitó Harry asustado - pe.... pero.... las cenizas y la ventana, ¿qué tu no...? Bueno...
Y antes de que Harry pudiera decir algo mas el fénix se hizo cenizas de nuevo.
- ¿Qué fue eso? - preguntó Hermione sorprendida.
- No sé - respondió Harry.
- Mira nada mas - interrumpió Voldemort - eso es lo que les envía Dumbledore, un pajarraco hecho cenizas y un sombrero viejo. ¿se sienten mas seguros ahora?
Voldemort rió y Tom lo remedó, y los dos rieron y sus risas resonaron por toda la residencia.
- ¿Y ahora que hacemos, Harry? - preguntó Hermione.
Harry no sabia que responder, intentaba pensar, pero el pánico se apoderaba de él. Entonces se puso el sobrero y algo duro lo golpeo en la cabeza, atontándolo y haciéndolo caer. Metió su mano dentro del sombrero para sentir que lo había golpeado, pero no hallaba forma a lo que tocaba, entonces lo sacó y vio que era una espada con el mango incrustado de diamantes y con el nombre gravado de G. Gryffindor
- ¡Maldita cosa! Por tu culpa casi me descalabro - le gritó Harry a la espada mientras la aventaba al otro lado de la habitación con mucho coraje.
- Ah - dijo Voldemort - temía que usaras esa poderosa espada para vencernos o escapar.
- Si os quisiera vencer - dijo Harry - usaría mis propias manos, así la victoria seria dulce y triunfadora.
- ¿Osas hablar así al gran mago y hechicero que a todos hizo y hace estremecer.?
- No habléis más y saca tu arma, cobarde, y veremos quien estremece a quien.- Retó Harry
- Tu lo has pedido así, pero os juro que vuestra derrota será recordada.
- Ya veremos y espero que juegue limpió, oh gran señor oscuro.
- Que así sea.
Ambos sacaron su varita y se apuntaron. Pero luego Voldemort recordó que era solo una pequeña y horrible criatura sin fuerzas.
- Antes de empezar - dijo Voldemort - creo que seria mas conveniente si Ryddle luchara por mí.
- Bien, lo haré - respondió Tom y sacó su varita.
Ahora Harry y Tom se apuntaban de nuevo. Tom hizo el primer movimiento y Harry salió volando por los aires cayendo sobre Hermione.
- Lo siento, bella dama - se disculpó Harry al levantarse, le besó la mano para luego seguir luchando.
Ahora era el turno de Potter quien lanzó su ataque y fue esquivado por Ryddle, pero eso ya esta previsto, y fue cuando Harry tomó una piedra roja que producía una especie de liquido, y se la arrojó a Tom dándole en el la cabeza y cuando se agacho, Harry se acercó y le dio un puñetazo, luego le arrojó una patada que fue detenida por el enemigo y Tom al tener la pierna de Harry aprovecho el momento y pateó a Harry en el estómago lanzándolo muy lejos. Tom se acerco corriendo para atacar pero Harry echó a correr y cuando vio que Tom lo alcanzaba tomó impulso y comenzó a correr por la pared seguido por Ryddle, pero Harry corria mas rápido y llegó un momento en el que Harry corría por un extremo del salón mientras que Tom por el otro. Ambos se vieron y saltaron de su pared para pelear, Harry lanzó una patada y Tom un puñetazo, y antes de que se encontraran en el aire, se cayeron por falta de impulso.
Tom se levantó al instante, luego tomó una mesa que estaba por allí e intentó golpearlo con ella pero Harry, muy intrépido, se quitó, se levantó y corrió para ponerse detrás de Ryddle y lo tomó por los brazos dejándolo casi inmóvil.
- Ríndete - le dijo Harry - y ahórrate la vergüenza de la derrota.
- ¡Jamás! - respondió dándole un cabezazo para que lo soltara.
Harry dio un par de pasos hacia atrás y sintió un gran dolor en su nariz, se llevó la mando al rostro para tocarse la herida y cual fue su sorpresa al retirar la mano de su cara y verla llena de su propia sangre.
- ¡Has arruinado mi hermoso rostro!
- Y no hablemos de tu gafas - se burló Tom.
- Pagarás por esto Ryddle - amenazó Harry.
- ¿Y que harás? ¿Lanzarme un estúpido hechizo de cosquillas?
- Haré algo mejor que eso.
Harry sacó de la nada unos shurinken (son esas estrellas, que lanzan los ninjas) y los lanzo con perfecta precisión y Ryddle acabo sujeto a la pared por las ropas.
- ¿Ahora quien ríe, Ryddle? - le dijo Harry mientras caminaba hacia él.
- Pues el que se esta riendo es tu amigo pelirrojo. - contestó.
- ¿Cómo...?
Harry volteo a ver para comprobar lo que había dicho Tom, pero vio que Ron estaba sentando en un rincón sin hacer nada. Así que se volvió hacia Tom para reclamarle y lo que recibió de respuesta fue una patada que lo hizo retroceder. Tom ya había liberado sus pies. Pero Harry rápidamente lo volvió a sujetar con los shurinken.
- Creías que me podías engañar, ¿verdad? - dijo Harry - pero ahora la pelea se ha terminado y yo soy el ganador.
- Todavía no - respondió - ¿por qué no miras detrás de ti?
Harry obedeció y vio que Ron se acercada violentamente hacia él con la espada que había salido del sombrero en la mano, estaba a unos cuantos paso cuando tropezó con una bolita luminosa y cayó al suelo.
Al caer, lo hizo sobre el diario mágico y sin querer enterró la espada entre las páginas....
PELEA Y HUIDA
- Hola - saludo el muchacho - soy Tom Ryddle ¿Quiénes son ustedes? ¿Y porque hay tanto vapor en la habitación?
- ¡Pero que suerte! - exclamó who-you-know - Ahora si podré llevar a cabo todos mis planes.
- sabe - empezó a decir Harry - yo creí que el próximo año, cuando fuera el torneo de los tres magos, usando a su fiel mortífago que se encontraba en Hogwarts iba poner mi nombre en el cáliz y asegurar mi entrada al torneo, y que fuera el primero en tocar la copa, la Copa que su mortífago habría convertido en un translador que me llevaría al cementerio donde esta su padre, lejos de la protección de Dumbledore, a sus brazos expectantes...
- ¿De donde sacaste esa idea tan absurda? - dijo Voldemort.
Harry se encogió de hombros.
Voldemort explicó todo a aquel muchacho, y se pusieron de acuerdo. Harían otro hechizo diferente, para que el alma del Voldemort derrotado se pasara al cuerpo de Tom; pero para esto Ryddle tenía que ser real, y la única forma era que le chupara la vida a alguien, y no se imaginan a quien iban a usar.
- Usaremos al muchacho - dijo Voldemort.
- ¿A cual? - preguntó Tom.
- Pues a Harry, ¿A quien mas?
- Podría ser al horrible pelirrojo que intenta abrir la puerta con desesperación para escapar.
- A ese ni de sirviente.
- No deberías juzgar a las personas solo porque tienen cara de idiotas - continuó Tom
- Es que ustedes no lo han visto en realidad - comentó Harry. - cuando me secuestro me golpeo varias veces para noquearme pero nunca lo logró.
Los tres magos empezaron a reírse muy fuerte, y hacer mas comentarios, parecían tres viejos amigos contando anécdotas y divirtiéndose. Hasta que una gran piedra golpeo la cabeza de Tom, haciéndolo caer, pero obviamente no le pasó nada; la piedra había sido arrojada por no se imaginan quien, así es, nada mas y nada menos que por Hermione que acababa de llegar al rescate.
- Ah - dijo Voldemort - pensé que había sido el otro chico.
- ¿Quién, Ron? - dijo Hermione - por favor, él no podría atinarle al lago aunque estuviera a un metro de distancia. Pero yo no vine aquí para criticar a Ron, vine a rescatarlos.
Voldemort rió fríamente.
- ¿Tu y cuantos mas? - dijo - . ¡Tom, mátala!
Tom sacó su varita y la apuntó con ella, "Avada Kedavra" pero Hermione se arrojo ágilmente detrás de Harry, el hechizo se impactó sobre las ataduras de Harry y este quedó libre.
Ahora Tom trataba de darles pero se movían demasiado y apenas alcanzaba a chamuscarle los cabellos.
De repente llegó música de algún lugar. Rydlle se volteó para comprobar que no había nadie mas en la habitación. Pero aquella música llegaba cada vez mas y mas fuerte; era una música estremecedora y sobrenatural. A Harry le pusieron literalmente los pelos de punta. Luego la música alcanzo tal fuerza que Harry pudo sentirla retumbando dentro del él y surgieron llamas del techo.
Apareció un pájaro carmesí del tamaño de un cisne, tenia una cola dorada y unas garras brillantes y muy largas con las que sujetaba unos harapos viejos.
El pájaro se encaminó hacia Harry y dejo caer el fardo a sus pies y luego se posó en su hombro.
- Es un fénix - dijo Ryddle
- ¿Fawkes? - musitó Harry asustado - pe.... pero.... las cenizas y la ventana, ¿qué tu no...? Bueno...
Y antes de que Harry pudiera decir algo mas el fénix se hizo cenizas de nuevo.
- ¿Qué fue eso? - preguntó Hermione sorprendida.
- No sé - respondió Harry.
- Mira nada mas - interrumpió Voldemort - eso es lo que les envía Dumbledore, un pajarraco hecho cenizas y un sombrero viejo. ¿se sienten mas seguros ahora?
Voldemort rió y Tom lo remedó, y los dos rieron y sus risas resonaron por toda la residencia.
- ¿Y ahora que hacemos, Harry? - preguntó Hermione.
Harry no sabia que responder, intentaba pensar, pero el pánico se apoderaba de él. Entonces se puso el sobrero y algo duro lo golpeo en la cabeza, atontándolo y haciéndolo caer. Metió su mano dentro del sombrero para sentir que lo había golpeado, pero no hallaba forma a lo que tocaba, entonces lo sacó y vio que era una espada con el mango incrustado de diamantes y con el nombre gravado de G. Gryffindor
- ¡Maldita cosa! Por tu culpa casi me descalabro - le gritó Harry a la espada mientras la aventaba al otro lado de la habitación con mucho coraje.
- Ah - dijo Voldemort - temía que usaras esa poderosa espada para vencernos o escapar.
- Si os quisiera vencer - dijo Harry - usaría mis propias manos, así la victoria seria dulce y triunfadora.
- ¿Osas hablar así al gran mago y hechicero que a todos hizo y hace estremecer.?
- No habléis más y saca tu arma, cobarde, y veremos quien estremece a quien.- Retó Harry
- Tu lo has pedido así, pero os juro que vuestra derrota será recordada.
- Ya veremos y espero que juegue limpió, oh gran señor oscuro.
- Que así sea.
Ambos sacaron su varita y se apuntaron. Pero luego Voldemort recordó que era solo una pequeña y horrible criatura sin fuerzas.
- Antes de empezar - dijo Voldemort - creo que seria mas conveniente si Ryddle luchara por mí.
- Bien, lo haré - respondió Tom y sacó su varita.
Ahora Harry y Tom se apuntaban de nuevo. Tom hizo el primer movimiento y Harry salió volando por los aires cayendo sobre Hermione.
- Lo siento, bella dama - se disculpó Harry al levantarse, le besó la mano para luego seguir luchando.
Ahora era el turno de Potter quien lanzó su ataque y fue esquivado por Ryddle, pero eso ya esta previsto, y fue cuando Harry tomó una piedra roja que producía una especie de liquido, y se la arrojó a Tom dándole en el la cabeza y cuando se agacho, Harry se acercó y le dio un puñetazo, luego le arrojó una patada que fue detenida por el enemigo y Tom al tener la pierna de Harry aprovecho el momento y pateó a Harry en el estómago lanzándolo muy lejos. Tom se acerco corriendo para atacar pero Harry echó a correr y cuando vio que Tom lo alcanzaba tomó impulso y comenzó a correr por la pared seguido por Ryddle, pero Harry corria mas rápido y llegó un momento en el que Harry corría por un extremo del salón mientras que Tom por el otro. Ambos se vieron y saltaron de su pared para pelear, Harry lanzó una patada y Tom un puñetazo, y antes de que se encontraran en el aire, se cayeron por falta de impulso.
Tom se levantó al instante, luego tomó una mesa que estaba por allí e intentó golpearlo con ella pero Harry, muy intrépido, se quitó, se levantó y corrió para ponerse detrás de Ryddle y lo tomó por los brazos dejándolo casi inmóvil.
- Ríndete - le dijo Harry - y ahórrate la vergüenza de la derrota.
- ¡Jamás! - respondió dándole un cabezazo para que lo soltara.
Harry dio un par de pasos hacia atrás y sintió un gran dolor en su nariz, se llevó la mando al rostro para tocarse la herida y cual fue su sorpresa al retirar la mano de su cara y verla llena de su propia sangre.
- ¡Has arruinado mi hermoso rostro!
- Y no hablemos de tu gafas - se burló Tom.
- Pagarás por esto Ryddle - amenazó Harry.
- ¿Y que harás? ¿Lanzarme un estúpido hechizo de cosquillas?
- Haré algo mejor que eso.
Harry sacó de la nada unos shurinken (son esas estrellas, que lanzan los ninjas) y los lanzo con perfecta precisión y Ryddle acabo sujeto a la pared por las ropas.
- ¿Ahora quien ríe, Ryddle? - le dijo Harry mientras caminaba hacia él.
- Pues el que se esta riendo es tu amigo pelirrojo. - contestó.
- ¿Cómo...?
Harry volteo a ver para comprobar lo que había dicho Tom, pero vio que Ron estaba sentando en un rincón sin hacer nada. Así que se volvió hacia Tom para reclamarle y lo que recibió de respuesta fue una patada que lo hizo retroceder. Tom ya había liberado sus pies. Pero Harry rápidamente lo volvió a sujetar con los shurinken.
- Creías que me podías engañar, ¿verdad? - dijo Harry - pero ahora la pelea se ha terminado y yo soy el ganador.
- Todavía no - respondió - ¿por qué no miras detrás de ti?
Harry obedeció y vio que Ron se acercada violentamente hacia él con la espada que había salido del sombrero en la mano, estaba a unos cuantos paso cuando tropezó con una bolita luminosa y cayó al suelo.
Al caer, lo hizo sobre el diario mágico y sin querer enterró la espada entre las páginas....
