Resultado de un trabajo de Pociones

Aclaración: los personajes no me pertenecen, son de J. K. Rowling.

Capitulo dos: Convivencia, parte uno (en casa de Hermione)

Luego de desayunar, Draco dijo:

-Muy rico el desayuno, ahora la parte fea, a trabajar...

Hermione asintió y mientras ella acomodaba las cosas del desayuno, Draco buscaba los libros para empezar. Trabajaron hasta el mediodía, cuando llegaron los padres de Hermione se presentaron, y para sorpresa de Herm, Draco fue muy amable con ellos. Luego de almorzar, Herm le dijo a Draco.

-Hay un club con pileta aquí cerca, ¿quieres que vayamos?

-Ok, me cambio y vamos.

Ambos fueron a cambiarse y Hermione mientras preparaba su bolso pensaba, muy confundida "Draco está muy raro, no me insultó, no se quejó de nada muggle, hasta fue amable con mis padres. Pero debe ser todo por ese bendito trabajo, cuando volvamos a Hogwarts todo va a ser como antes".

Al llegar al club, se bañaron en la pileta y luego estuvieron toda la tarde juntos, conversando como si fueran amigos desde siempre. Hermione descubrió que Draco no era la misma persona que en Hogwarts, con ella era muy simpático y para nada engreído. Draco, por su parte, cambió su forma de pensar hacia Herm, la creía un "ratón de biblioteca", como la llamaba en Hogwarts, aunque nada que ver a eso, ella era una chica estupenda, que también se divertía.

Pasó una semana y el trabajo progresaba, al igual que la amistad de los chicos crecía, un día en el club, Draco le dijo a Hermione:

-Herm... quisiera contarte algo...

-Si Draco, ¿qué pasa?

-Bueno... es que... mi ceremonia de iniciación como mortífago será en las vacaciones de navidad – soltó como sacándose un peso de encima.

Hermione sintió que el Draco que ella conocía era sólo una ilusión, bajó la vista y sólo pudo murmurar:

-Oh...

-Pero no quiero ser uno de ellos – agregó Draco al ver el rostro de Herm

Ella levantó la cabeza y lo miró a los ojos, preguntándole:

-¿Realmente no querés unirte al bando oscuro?

Draco sonrió amargamente y contestó:

-No Herm, no tengo "madera" para eso, a pesar de que fui criado con toda la severidad de los Malfoy, para convertirme en un mortífago, deben haber fallado en algo porque... – dudando un poco agregó con furia – odio a Voldemort. Odio a Slytherin, odio a Crabbe y a Goyle que son dos estúpidos, buenos para nada. Siempre los insulté por envidia, el "trío gryffindor", siempre juntos, siempre unidos, se metían en líos y no los descubrían, realmente son muy afortunados, los preferidos de Dumbledore.

Herm sonrió con la mirada brillante y dijo:

-Draco!, yo lo sabía, lo sabía, vos no podías ser tan insensible.

-No Herm, de insensible, que ya quisiera serlo, no tengo nada. Lo que ahora tengo es miedo, porque mi padre supone que seré un mortífago, aún no le dije nada. Si se llega a enojar me puede matar, tengo mucho miedo Herm.

-Tranquilo, ya verás como todo va a estar bien, una vez que estés en Hogwarts, Dumbledore no dejará que te hagan nada, solo tienes que ir y decirle todo, él te protegerá, aunque.. con respecto a Slytherin, no creo que se pueda hacer nada...

-Una lástima... pero creo poder soportar 6° y 7° con ellos, después de todo, allí estuve desde que entré. Gracias Herm, gracias por todo.

Se abrazaron muy fuerte, sabiendo ambos que desde ese día algo cambiaría para siempre.

Esa noche luego de cenar, decidieron salir a caminar, se despidieron de los padres de Herm y se dirigieron a una plaza, allí empezaron se sentaron en un banco y siguieron conversando de Quidditch, de Hogwarts y de miles de temas más, aunque ambos eludiendo lo que querían realmente decirse, hasta que Hermione empezó:

-Draco, yo...

-Shh – la calló él con una sonrisa, mientras se acercaba a su rostro. Sus labios se unieron, al principio muy suavemente, luego Draco avanzó el beso encontrando a una Hermione totalmente inexperta, pero siguió con el beso y poco a poco Herm aprendió, terminaron en un beso muy apasionado, mientras se separaban con una sonrisa, Draco dijo:

-No lo puedo creer, la chica más inteligente de Hogwarts nunca había besado a nadie.

Hermione se sonrojó, mientras le respondía:

-No, es que yo esperaba que vos te decidieras a besarme – susurró riendo.

-Bueno, al fin me decidí – dijo él sonriendo, y poniendo voz formal - ¿Quiere ser mi novia, señorita Granger?

-Eh... voy a tener que pensarlo mucho... si!!!

Volvieron a besarse y luego se levantaron para volver a la casa de ella. Esa noche ambos se durmieron con una sonrisa en el rostro, felices de saber que eran correspondidos en sus sentimientos.

La semana que faltaba para cambiar de casa terminó muy pronto, el trabajo iba casi a la mitad. Los chicos alistaron todo y esa mañana se despidieron de los padres de Herm.

-Draco, quedé con Harry y Ron de encontrarnos en el Callejón Diagon hoy, podríamos pasar el día allí y luego vamos a tu casa, ¿te parece?

Draco asintió, mientras la tomaba de la cintura y le decía sobre sus labios:

-Si es lo que mi chica quiere, entonces me parece.

Se dirigieron ambos a la chimenea y entrando en ella gritaron:

-"Callejón Diagon"

Allí se encontraron con Ron y Millicent Bulstrode que parecían  estar despidiéndose, su trato parecía un poco tenso. Draco y Herm rieron viéndolos. Buscaron con la mirada y un poco más lejos se encontraban Harry y Pansy Parkinson. Ésta al ver a Draco se acercó corriendo y lo abrazó:

-Draco!!! Te extrañé mucho, no te hizo nada esta sangre sucia, ¿eh?

Draco se la quitó de encima y le dijo con la mirada dura:

-No vuelvas a decirle así, ¿me escuchaste bien? Y para que te quedes tranquila, Herm no me hizo nada.

Parkinson los miró perpleja, pensando: "Esa sangre sucia de Granger le hizo algo a mi Draco, está muy extraño". Luego su mirada fue de furia y dirigiéndose a Draco dijo:

-Después hablamos. – Y se alejó de ellos muy enojada.

Harry, mientras tanto se había acercado a Hermione, luego de saludarse, miró con desprecio a Draco y le dijo a Herm.

-Espero que éste no te haya hecho nada, porque sino...

-Entre los dos lo dejamos de cama – dijo Ron que se había acercado.

-Tranquilos chicos, Draco no me hizo nada – dijo Hermione sonriendo.

-¿Draco? – preguntaron a coro sus amigos, mientras el mencionado se acercaba, preguntando:

-¿Qué pasa conmigo?

-Nada – respondió Herm – sólo que creo que debemos explicarles las cosas a los chicos, ¿querés?

Draco asintió y se dirigieron los cuatro a la heladería "Florean Fortescue" (se escribía así???), allí mientras tomaban unos helados gigantes le explicaron todo lo de Draco a Harry y a Ron, que poco a poco empezaron a entender.

Finalmente Harry le dijo:

-No te preocupes que Dumbledore sabrá que hacer, yo sólo espero que seas de fiar, aunque por ahora bienvenido al club.

Draco sonrió diciendo:

-Gracias chicos, quería pedirles perdón por todas las veces que los insulté, a vos W... Ron y también a Harry.

Los dos asintieron y luego Draco, abrazando a Hermione por la cintura agregó:

-Bueno, y creo que tenemos que decirles otra cosa con Herm...

-Si – dijo ella sonriendo – Draco y yo...

-Somos novios – finalizó él, mientras Harry y Ron abrían los ojos como platos...

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Hola!!! Todos bien??

Espero que si, bueno, se que el capi está malísimo, prometo mejorar, ténganme paciencia que pronto estará mucho más bueno.

Ah!!! Y ... REVIEWS plis!!!!!!!!!