ACTO 15
Por suerte la casa Winner no estaba muy lejos de la casa Yuy por lo que no tardaron mucho en llegar, fueron conducidos inmediatamente a la recamara principal donde Dorothy estaba acostada... y jalando a Quatre del cuello de la camisa mientras este solo sonreía sin saber si soltarse o seguir ahí demostrando su apoyo a su mujer... pero si seguía demostrando el apoyo terminaría siendo ahorcado.
-tu.. me hiciste esto!!!- escucharon que le grito.
-Calma querida... respira hondo....- le decia Quatre tratando de no ponerse nervioso para no alterar aun mas a Dorothy, mientras le acariciaba la frente apartando el cabello que caia sobre sus ojos.
Una nueva contracción aun más fuerte que las anteriores hizo que Dorothy casi triunfara en ahorcar a su marido. Y esa fue la escena que encontraron Duo y Heero al entrar a la habitación.
Los gritos de dolor de Dorothy eran cada vez mas frecuentes, por fortuna ya había llegado Heero, a buena hora se le había ocurrido al medico y a la matrona irse de viaje... aunque era de esperarse, nadie suponia que el bebé llegaria tan pronto.
Heero se encargo lo mas rapido que pudo de la situación, coloco a Dorothy en una pose un poco mas comoda ayudándose de varias almohadas, la chica ya había roto fuente, pero aun no estaba lista para dar a luz.
-aun faltan dos centimentros de dilatación... tendremos que esperar un poco...- le informo Heero a Quatre pero al parecer Dorothy no opinaba lo mismo.
Dorothy respiraba afanosamente entre cada contracción... habiendo soltado a Quatre (el cual respiro aliviado y se alejo un poco por aquello de la precaución) tomo por el cuello de la camisa a Heero y le dijo en un tono algo subido de voz:
-Sacame a este niño yaaaaaaaaa!!!!!!!- le grito a Heero, este solo carraspeo.
-En unos pocos minutos lo hare... si te relajas estaria mejor...- le dijo mientras revisaba que tuviera todo lo que iba a necesitar.
Duo se acerco con cautela a su amiga, pues si le había gritado al propio Quatre... –Dorothy... ¿cómo... como te sientes?- pregunto Duo solidarizándose a la causa de Quatre, hacer sentir mejor a la futura madre.
-¿qué como me siento?... ¿qué como me siento?- profirió en un grito Dorothy - siento que me estan partiendo en dos que no ves???!!!!!!!- ahí comprobo Duo que si fue mala idea hablar. Asi que tambien imitando a Quatre solo le sonrio y fue a ver si podia ayudar a Heero. El cual se encontraba tratando de concentrarse en revisar la dilatación de Dorothy entre los gritos de la mujer, mas era demasiado el ruido.
-Duo... Quatre... déjenme un momento a solas con mi paciente. Manda a la nana a que vaya calentado bastante agua... y que tenga listas sabanas limpias.
Ambos hombres salieron dejando a Heero a solas para poder revisar a Dorothy...
Esta se encontraba nerviosa, ningún hombre aparte de Quatre la había visto íntimamente... pero una nueva contracción llego y un grito se escapo de sus labios...
- Ahhhhhhh!!!!
Heero le tomo de la mano y empezó a decirle...
- Calma Dorothy, eso relájate y respira profundo... Hazme caso.. –le decía en un tono firme para que respondiera favorablemente.
Ya había pasado alrededor de una hora cuando las contracciones de Dorothy se volvieron mas frecuentes.
-Dorothy voy a revisarte una vez mas en cuanto tengas otro dolor, ¿esta bien?-
-Uff... Si... duele mucho-
-Tranquila... respira profundo...-
En cuanto llego la otra contracción Heero realizo otro tacto vaginal, el cuello de la matriz finalmente había dilatado completamente y el bebe estaba bien encajado. Al retirar sus dedos una gran cantidad de líquido amniótico salio... por fin se había roto la fuente.
-Ahora si Dorothy... ya pronto tendrás a tu bebe-
Heero se acerco a la puerta...
-Quatre - le dijo asomándose- necesito que venga la nana de Dorothy a ayudarme... que traiga el agua hervida y las sabanas limpias que le pedí-
-Heero... esta todo bien... se que Dorothy tiene mucho dolor-- dijo poniendo la mano sobre su corazón- puedo sentirlo.-
-no te preocupes Quatre- no poniendo atención al extraño gesto del rubio -todo saldrá bien-
Quatre se dispuso a hacer lo que le habían pedido, mientras Heero le aseguraba a Duo que su amiga estaría bien, ella y el bebe estarían bien...
Heero regreso al lado de Dorothy, y a los pocos minutos llego la nana de esta...
-Señora Di... entre a ayudar... es su deber como mujer y como amiga de mi niña- le dijo muy seria a Duo.
-¿Queeeeé? Yo... entrar... yo... yoo... – la nana no espero mas y lo jalo del brazo para que entrara a la habitación... teniendo que mantener su secreto no le quedo mas que obedecer
-Doctorcito aquí estamos pa ayudarle- dijo la nana de Dorothy en cuanto entraron.
-Hn-
-Ahgggggg.... Quatreeeeeee.....-
-Eso es Dorothy... ahora vas a empezar a pujar, este bebe ya tiene que salir.... – le decía Heero a Dorothy.
-Quatre quiero a Quatre.... arggggggghhh me duueeeelllleeee.- Dorothy se encontraba bastante perturbada y necesitaba a su marido a su lado.- Nana tráeme a mi marido-
-Di... háblale a Quatre- le dijo Heero a Duo sin darle chance a la nana ni siquiera de moverse- ---Rápido-
Duo que se había quedado pegado en su sitio al escuchar el tono enérgico de su esposo reacciono y dejo entrar a Quatre quien al sentir el stress de su esposa estaba dando vueltas como loco en el pasillo.
Al ver que Duo lo llamaba entro rápidamente para estar al lado de su esposa.
Dorothy respiraba profundamente como le decía Heero... tenia miedo de los dolores... eran como si la partieran en dos... pero hay de Quatre cuando saliera de esta... no la iba a tocar... el la había embarazado... el le había provocado ese dolor tan enorme...
-Pero que me vuelves a tocar...- le gruño a Quatre cuando este se acerco una vez mas a ella para tratar de ayudarla.
Heero suspiro, la habitación estaba demasiado perturbada, primero a que había mas gente de la que debia de haber ahí, se quiso dirigir a Quatre, que estaba haciendo intentos vanos por quitarse la mandibula de Dorothy de la mano pues esta la había agarrado como amortiguador para no gritar del dolor.
Pero ya no habia tiempo de poner nada en calma, el trabajo de parto había comenzado... y la sangre en su mano asi como la sabana que había puesto para cubrir un poco a Dorothy se llenaban de sangre... estaba en eso cuando escucho la voz de Duo que le iba a decir algo.
-Heero... eso.. es... sangre...- dijo el pobre chico antes de caer desmayado al suelo.
Heero miro instintivamente hacia donde había escuchado el golpe de algo caer, y se encontro con que su hermoso tesoro se había desmayado.
-¿Quatre podrias por favor salir?... creo que pones demasiado nerviosa a Dorothy... Dorothy por favor necesito que pujes..-
-Estoy pujando idiota!!!!-
-esto... si... – Heero ignoro el ultimo comentario de la parturienta -y Quatre por favor, saca a mi pequeño valiente que se acaba de desmayar y dale a oler sales.-
Quatre obedecio no sin que antes Dorothy le gritara "me las vas a pagar!!!", llevo a Duo a un cuarto cercano y lo acosto en la cama, aun se podia escuchar vagamente los gritos de Dorothy. Tardo un rato en que Duo volviera en si.
-ay mi Dios...- dijo Duo recordando por que se había desmayado.
-Estas bien Duo?... te desmayaste y te tuve que sacar de la habitación...-
-Si ya se que me desmaye.- dijo el chico –si tu hubieras visto lo que yo vi tambien te habrias desmayado.- dijo incorporándose de la cama.
-Al menos a ti no te mordio tu propia esposa- dijo algo resentido Quatre mirándose la mano.
-Buen punto Quatre- le dijo sonriendo para dar algo de calma a Quatre.
Duo se sento en la cama y vio como Quatre recorria todo el cuarto, moviendo cuanta cosa veia de su lugar, era su manera de confrontar los nervios.
-Oye Quatre...- dijo Duo mientras miraba el techo y recordaba que Dorothy le había dicho que aun faltaban unos meses para que el niño naciera –¿que no debia de nacer el niño en noviembre?- al escuchar decir esto a Duo, Quatre se paro en seco.
-¿Dorothy... no te conto nada?-
-¿Contarme que?- pregunto de manera candida.
-Bueno es que...- las mejillas de Quatre se iban tiñendo –Dorothyyaestabaembarazadaantesdecasarnos- lo dijo casi sin despegar los labios.
-¿Que que?- pregunto Duo pues no había escuchado ni entendido nada de lo que había dicho Quatre.
-Que Dorothy ya estaba embarazada... antes de casarnos- dijo el chico evitando mirar a toda costa a Duo, mas el chico de ojos violetas solo dijo un "oh" y nada mas, bueno al menos nada por cinco segundos.
-¿Se casaron por que Dorothy...?-
-No!! claro que no!!!- dijo Quatre con toda la cara roja –los preparativos de la boda ya llevaban meses antes de eso...-
-Ah...- Duo miro a Quatre, este se quedo estatico, la mirada de Duo parecia que lo estaba investigando o algo parecido. –bien dicen que los mas seriecitos son los mas peligrosos Quatre Raberba Winner...-
-Oye... que.. ¿que quieres decir con eso!?- dijo Quatre aun mas rojo.
-Tan chiquito, quien te viera...- Duo se había llevado una mano a la mejilla en un gesto muy dramatico de preocupación.
-Duo!-
-Ya me imagino a Dorothy cayendo en las garras del lobo...- Quatre no queria saber que se estaba imaginando Duo, pero fuera lo que fuera sabia que no era bueno.
-O...oye eso es cosa de dos...!!!- dijo Quatre haciendo que Duo dejara de imaginar lo que fuese que se estuviera imaginando.
Duo ya iba a alegar algo mas pero un fuerte llanto de un bebé lo callo. Quatre salio corriendo hacia la recamara principal que era donde estaba Dorothy, seguido por Duo quien le grito –¡no huyas cobarde!-
Cuando ambos entraron a la alcoba Heero se estaba encargando de limpiar todo con ayuda de uno de los sirvientes de la casa Winner, y Dorothy aun mojada del sudor sostenia un pequeño paquetito envuelto en una sabana bordada con un delicado color rosa.
Quatre se acerco casi sin creer que, lo que tuviera su amada esposa en los brazos fuera el fruto del amor que se tenían, al fin era padre, al fin eran padres. Dorothy miro a Quatre y le sonrio con algo de pena como queriéndose disculpar por los gritos y mordidas que le había dado –mira pequeñita... el es tu papito...- dijo mientras acomodaba mejor a la pequeña para que se pudiera observar mejor, sus ojitos los tenia aun cerrados. Quatre se sento en al cama junto a Dorothy quien le coloco a la bebita en los brazos. -Nuestro bebe... Dorothy te amo... es el regalo mas maravilloso del mundo-
-Ahora vuelvo, voy a lavarme- le dijo Heero a Duo saliendo de la habitación, Duo le dijo que si evitando ver a Heero pues estaba demasiado manchado de sangre.
-Y aquella personita que esta en la puerta es tu tio Duo...-
Duo sonrio al escuchar a Dorothy –vamos, ven Duo, carga a tu sobrinita- le dijo Dorothy acomodándose mejor y abrazando a Quatre quien aun sostenia a la bebita que ahora hacia movimientos con su boquita como si quisiera agarrar algo con ella.
-Y si se me cae?- pregunto Duo, el nunca en su vida había cargado un bebé.
-Te la cobro como nueva ¬¬-
Duo rió y se acerco, Quatre le coloco con cuidado en los brazos de Duo, quien admiro lo pequeñita que era la criatura, ahora si comprendía como cabía en el vientre de Dorothy, era una cosita sumamente pequeñita y blandita, toco con cuidado las suaves y regordetas manitas, la bebita tomo el dedo de Duo aprisionándolo fuerte con sus pequeñitos dedos.
Despues de lavarse un poco regreso a la habitación, aun no terminaba su trabajo, mas una imagen lo hizo paralizarse en el segundo, solo pudo quedarse viendo embelesado a Duo, quien cargaba a la pequeña recien nacida y le sonreia dulcemente, nunca lo negaria, Duo siempre le había parecido un mismisimo angel...
Duo miro de reojo a Heero, mas este percibio su mirada y tambien le sonrio, aunque la sonrisa de Duo estaba tambien llena de un sabor amargo, como lo había entendido hacia dias, el nunca podria darle una familia a Heero, nunca podria tener en sus brazos a un hijo de Heero... la bebe solo suspiro atrayendo de nuevo la atención de Duo hacia la nena.
Los padres tenian de nuevo en sus brazos a la pequeña, Duo estaba enternecido con la escena... pero... que pasaría cuando Heero de verdad deseara un hijo... el no podía tener hijos era un hombre... ya antes lo habían discutido pero... al pasar los años. Era natural que Heero deseara su propia descendencia...
Salio de su ensimismamiento cuando Heero le dijo a Dorothy que ya venia la placenta.
Involuntariamente, Duo fijo su vista... y una masa de carne sanguinolenta salía del cuerpo de su amiga... seguida de una gran cantidad de sangre.
-Sa..sa...sangre- La cabeza le dio vueltas y de repente todo se puso negro.
Plaff...
-Duooo... eyy que alguien ayude a mi esposa. – grito Heero preocupado por el bienestar de la luz de su vida.
-Ay señora Di... que será cuando usted sea la que para- le dijo con una sonrisa a Duo quien rapidamente recobraba el conocimiento.
Duo se limito a quedarse callado... solo sonriendo ampliamente... se acerco a Dorothy y Quatre, esa era una cosa de la que mejor ni debia pensar.
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Ya suponia que se tardarian en regresar.... tenia que hablar por ultima vez con Duo... solo una ultima vez y despues se iria... no aceptaria dejarlo en esa hacienda con Heero Yuy, mas era lo unico que podia hacer.... mas una cosa era el deber y otra el querer hacer.
Manejar la hacienda no había sido tan difícil, Trowa tenia cada negocio muy bien organizado y eso lo había ayudado sin duda, ya casi se ocultaba el sol y el había subido a la terraza a admirar como el sol se ocultaba.
-No es mas doloroso estar a su lado sin poder tenerlo?- pregunto una voz que ya conocia, la de la chica llamada Hilde.
-Pensabas en Duo...- dijo la chica sin rodeos.
Wufei abrio los ojos sorprendido de que Hilde conociera todos los detalles detrás de la historia de el y Duo.
-Y por que crees eso?-
-Por que tus ojos se llenan de dolor.... y eso es cada vez que piensas en el.. o que lo ves...- la chica se acerco a el, no la rechazo era agradable tener a alguien con quien platicar...
Y era cierto, era doloroso pensar en Duo, pero es que no podia simplemente llevárselo a la fuerza ¿cierto?-, el no haria nada para dañar a Duo aunque a veces... su puño se tenso... debia alejarse esas ideas tontas de la cabeza.
Hilde callo, en todas esas pequeñas platicas conocia un poco mas de Wufei, y se daba cuenta que lo que había dicho Duo sobre el era verdad, y aun mas... Wufei era una clase de hombre que Hilde jamas en su vida había conocido.
Ninguno dijo nada mas... solo se quedaron admirando el cielo que se comenzaba a llenar de estrellas.
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El novenario había pasado, y la lectura del testamento ya se podia llevar a cabo. El abogado de la familia, el señor Kiffer era ya un hombre viejo y de avanzada edad, mientras el leia el largo papel solo se escuchaba su monótona voz y el sonido del reloj indicando que el tiempo seguia avanzando.
-por ultimo, la casa pasa a manos del ultimo de mis herederos, Duo Maxwell, quien solo le pido se haga cargo de su madre los ultimos años de su vida hasta que se reuna conmigo....-
Claro que Duo no queria la casa, pero pues asi estaba mejor al menos Traize ya no podria hipotecarla si el tenia las escrituras y asi su madre tendría un lugar en el cual vivir, y lo mas importante lejos de el.
Se levanto seguido por Heero, ya queria salir de esa casa lo mas pronto posible, tambien debian de regresar al Guadiana pues aunque la hacienda estuviera siendo manejada por Wufei no sucedia lo mismo con la clinica que esa si era responsabilidad total de Heero.
El enojo de Traize no podia ser mayor y totalmente mal infundado, ¿acaso creia que su padre le dejaria todo?, si lo creyo, creyo que al ser legalmente el unico varon Maxwell toda posesión se quedaria con el, pero una vez mas su padre le había jugado mal....
-El viejo hasta la muerte hizo lo posible por molestarme la existencia- exclamo Traize, no en voz alta, pero si lo suficiente para que Duo lo escuchara, pese a que su deseo principal era salir de esa casa sin ningun otro problema encima, lo que dijo Traize no le agrado en absoluto.
El padre de Duo lo unico que había hecho era preocuparse por el bienestar de el y de Traize y ahora el muy necio se atrevia a decir algo como eso, dio la vuelta y encaro a su hermano.
-En verdad que tu no tienes... no tienes vergüenza!!- le grito a su hermano mayor.
-Es otra la persona que no tiene vergüenza... tu sabes que no te deberia tocar nada...-
-Oh si.. seguramente tu podras hacerte cargo de nuestra madre... seguramente a la primera oportunidad vuelves a vender la casa y a ella la dejas en al calle!!!! "cosa que no estaria mal..."-
-Eso tu no lo sabes!!!!-
-Pero lo puedo imaginar... o crees que no me daba cuenta que han desaparecido objetos de la casa en tan poco tiempo?... te aseguro que en un mes ya vendiste, o mejor dicho vendiste tambien la Hacienda!!!-
Ambos hermanos estaban en una acalorada discusión de gritos, pero por la cara de Traize se veia que ya queria propinarle varios golpes a su hermano que el creia demasiado impertinente, mas la presencia0 de Heero ahi observándolo lo detenia.
Mas Duo no sabia que le había dado en el orgullo a Traize –ya veraz...- le dijo el chico mirándolo con el mas puro odio que podia sentir Traize –ya veraz que sacare esa maldita hacienda adelante-
Duo sonrio con ironia –me encantara verlo... con permiso, hermanito- y se dio media vuelta, era la primera vez que le ganaba a traize sin que su madre o alguna otra persona se meteria de por medio, y la verdad, como la primera vez que le dio un puñetazo a su hermano se sintio tan bien.
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-Te prometo visitar pronto... y a ti tambien pequeña... pequeña... ¿ya tiene nombre, Dorothy?- pregunto Duo, ese dia partirían de nuevo al Guadiana pues el trabajo de Heero no podia esperar mas, y aunque este le había sugerido a Duo (muy muy a su pesar) que se quedara otro tiempo con Dorothy, Duo no acepto.
-Mariana- contesto sonriente Dorothy mientras arreglaba el pequeño vestidito de la nena.
-Espero contar con su presencia para el bautizmo de Mariana- le dijo Quatre a Heero, este solo contesto con un movimiento de cabeza, Quatre se acerco a el –y muchas gracias por todo..-
Heero se sorprendio, Quatre Winner tambien tenia dos caras de la moneda... como todo mundo, acepto su mano y la estrecho –no fue nada.... era mi deber como medico-
Al despedirse del matrimonio Winner y caminar hacia su carruaje una visita no muy bien aceptada y mucho menos anhelada los esperaba fuera de este.
-¿Tu que haces aquí?- pregunto Duo de manera fria a su hermano, Heero como siempre no se metia al asunto, mientras Traize dejara sus manos lejos de Duo todo estaba bien.
Traize se levanto pues estaba recargado en el coche –pues.. para atender la Hacienda necesito aprender de alguien- dijo mirando a Heero y luego a Duo y sin dejar esa sonrisa burlesca.
-Creo que para eso tuviste mucho tiempo.. cuando nuestro padre te quiso enseñar...-
-Vamos Duo... hazlo por el bien de la familia...-
-ya han usado esa excusa conmigo muchas veces, inventate otra-
-Como me corregire si no quieres ayudarme a hacerlo...-
Duo lo miro –por que no creo que quieras cambiar... por eso...-
-Mi padre me habria dado otra oportunidad...-
-Mi padre te dio demasiadas y las desaprovechaste....- murmuro Duo... no.. no podia dejar que Traize fuera a la Hacienda... no cuando... cuando... ahí esta Wufei.
-Duo... deja que lo intente... al menos si fracasa esta vez no podra chantajearte con nada mas....- le dijo Heero al oido, Duo miro esos profundos ojos... no podia.. por que no le había contado nada a Heero de la existencia de Wufei...
-Esta bien...- le dijo a Traize, quien monto su caballo y sonrio.
En el camino Duo iba pensando, ¿por qué? ¿por qué siempre el universo y el tiempo se ponian en su contra? ¿el que mal habria hecho en el pasado para ahora estarlo pagando...?
-Hee...Heero?- llamo timidamente Duo al muchacho, mas este no le contesto, miro a su derecha y vio a Heero profundamente dormido... de nuevo.. el maldito destino le estaba ganando la partida.
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-Aaaaaaaay al fin termine.. gomen gomen!!! Es que... ahora si fue toda culpa mia....... no me salia la inspiración por ningun lado... jejejejjee .UUUU
Agradezco su ayuda a Terry Maxwell por ayudarme con la escena del parto, gracias hermana te debo una muy grande... aunque no utilice las partes demasiado graficas.. despues mis lectoras quedarian traumadas y no querrían tener bebe.
Espero vernos por aquí muy pronto.... y muchas gracias por sus reviews y pro esperarme taaaaaaaantoooooooooo.
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Matta ne.