RESUMEN: A veces para que las cosas salgan bien hay que hacerlas de la peor manera posible. CAPITULO VIII: "La verdad" La versión de Nodoka.
NOTA: Lamento la demora... con este capitulo si me tardé más de un mes y no tengo ni excusas ni razones para justificar tal demora. Si todavía están leyendo... espero que la espera valga la pena.
EL CAMINO EQUIVOCADO
¡Buenos días- Respondió Kasumi sonriente a los diferentes saludos que recibió mientras pasaba.
¿Y a dónde vas tan temprano, pequeña- Preguntó una anciana desde su puerta, deteniendo la tarea de vertir agua sobre la acera como era su costumbre.
-Oh, Buenos Días Señora Tamaeda- Dijo la aludida deteniéndose un minuto frente a la anciana.
Al ver la sincera sonrisa de Kasumi, la mujer arrugó su rostro, mostrando los vestigios de una sonrisa que años atrás debió haber sido tan radiante como la de la muchacha parada frente a ella.
-Voy a la clínica- Sonrió Kasumi.
-Oh, pequeña… ¿Vas a ver al Doctor Tofu- Preguntó la mujer con una expresión de susto.
-Sí- Confirmó la muchacha.
El rostro arrugado de la anciana palideció de tal manera que casi se confundió con el plateado de sus canas.
-Oh cielos…- alcanzó a murmurar.
Kasumi la miró preocupada. ¿Se siente usted bien- Preguntó de inmediato.
-Oh sí, sí, estoy perfecta- Respondió la mujer haciendo de menos el asunto con un vaivén de su mano
¿Está segura?
-Sí, linda no te preocupes. Mejor sigue tu camino… no te distraigas conmigo- Ofreció la anciana tratando de sonar afable.
-Am- dudó Kasumi
-Anda muchacha, que yo puedo cuidar mis huesos.
-Está bien…-aceptó ella, no completamente convencida¡Hasta luego Señora Tamaede- Y Kasumi se alejó siguiendo la dirección de la clínica. Pronto su radiante sonrisa estaba de nuevo en su lugar.
-Ay Kami- Murmuró la anciana mientras la veía alejarse. Después entró a su casa y tomó el teléfono. Tenía que llamar a media comunidad para advertirles que se mantengan alejados de la clínica durante toda la mañana. Si Kasumi iba para allá, no era nada seguro estar cerca del Doctor Tofú.
¡Qué bueno que se me ocurrió preguntar- Se dijo a sí misma la Señora Tamaede mientras marcaba el primer número telefónico.
CAPITULO VIII
LA VERDAD
"De libros, problemas y pocas soluciones"
-Pasen, pasen- Insistió Nodoka Saotome, antes de que Ranma o Akane pudieran pronunciar palabra más allá del saludo formal.
Después la mujer los guió a la mesa y los dejó sentados mientras desaparecía tras la puerta de la cocina anunciando que en unos minutos el té estaría listo.
Ranma y Akane, una vez solos, intercambiaron nerviosas miradas.
¡Pregúntale- urgió Akane en un susurro.
¡¿Por qué yo- se quejó el joven de la coleta sabiendo la respuesta de la muchacha antes de que ella la pronunciara.
¡Es tu mamá!
"Y es tu suegra" pensó Ranma, pero decidió no decirlo. No valía la pena echarle más leña al fuego si él era el único que iba a salir quemado. Así que se conformó con refunfuñar un poco y aceptar la responsabilidad de hacer las preguntas.
-El té estará listo en un momento- Comunicó Nodoka mientras tomaba asiento frente a los jóvenes.
Un silencio un tanto incómodo inundó la habitación. Akane, sintiéndose nerviosa, haló con insistencia la manga de Ranma, cuidándose de que la mujer frente a ella no lo notara.
-Am… mamá-
¡Oh! Me alegra tanto que hayan venido a visitarme- Irrumpió Nodoka súbitamente sorprendiendo a Ranma de sobremanera y provocando también que éste diera un pequeño salto sobre el asiento. Akane solo le dedicó una mirada de extrañeza.
-Veo que ya se están llevando mejor- Prosiguió la mujer emocionada -Llamé a Kasumi ésta mañana y ella me confirmó que siguieron mi consejo y están compartiendo habitación. Ay hijo, me alegra tanto.
Ranma hizó una mueca al tratar de fingir una sonrisa después de escuchar a su madre. ¿Consejo dijo? Pero si prácticamente los había obligado.
-Tía Nodoka- Intervino Akane con la esperanza de evitar otro monólogo acerca de la importancia de la vida matrimonial
-Ah, linda… ¿Cómo te dije que me digas-Preguntó la mujer con tono azucarado.
-Am… mamá…- respondió Akane cabizbaja y nerviosa.
Para que vean que las palabras son en extremo poderosas, y son capaces de acabar moralmente con una persona. Akane no solo quedó inmóvil y sin palabras después de escuchar a la mujer, también perdió el color para luego recuperarlo en un fuerte tono rojizo.
Definitivamente meterse en la conversación no fue una buena idea.
¡Mamá- Dijo Ranma escandalizado.
Nodoka rió. ¿Sí Ranma?
La noción de que talvez su suegra disfrutaba demasiado abochornarlos de aquella manera sacudió a Akane.
-Mamá… en realidad Akane y yo vinimos aquí para hablarte de otra cosa
-Oh… ¿en verdad- Inquirió Nodoka curiosa. No era muy a menudo pues, que su hijo usaba esa voz para hablarle, tampoco era muy seguido que Ranma lucía tan serio y decidido en algo que no fuera una batalla… en realidad, era la primera vez que la mujer veía comportarse así a su hijo.
-Sí. Tenemos que hacerte un par de preguntas.
¿Preguntas?
-Sí, mamá. Preguntas acerca de la boda.
-Pues, pregunta muchacho. ¿Qué es lo que quieren saber?
Ranma, sintiendo una inhibición repentina volteó a ver a Akane para hallar valor en ella. Akane al verlo decidió tomar la palabra.
-Sabemos que nos obligaron a casarnos tía Nodoka.
-Oh por favor- comenzó la mujer, un tanto burlona, haciendo de menos la pregunta. O al menos tratando de hacerlo antes de ser bruscamente interrumpida.
-Sabemos que hubo alguna clase de acuerdo en el que no nos dejaron otra opción a parte del matrimonio y sabemos también que tú fuiste la de la idea mamá- Continuó Ranma en tono nivelado.
Nodoka frunció el ceño y retorció los labios.
-Lo que no sabemos es que fue lo que hicieron. Y nos gustaría mucho que nos lo digas mamá.- terminó el muchacho, Akane haciéndole eco silencioso con un asentimiento de cabeza.
Nodoka Saotome examinó en silencio a los dos jovencitos parados frente a ella. Ambos se veían decididos, luciendo un poco molestos y con una expresión facial que afirmaba con seguridad que no se moverían de donde estaban hasta conseguir lo que querían. La mujer suspiró… todo indicaba que no tenía salida.
"¡¡¡¡¡¡¡FIIIIIIIIII" Chilló la tetera anunciando que el agua había hervido.
Nodoka sonrió.
-Parece que el té está listo - Y dicho esto levantose de su asiento para ir a la cocina.
Ranma y Akane miraron al techo simultáneamente… ambos esperando que en cualquier momento se les cayera la casa encima.
-
El Doctor Tofu Ono se levantó aquella mañana con la seguridad de que sería un día de lo más tranquilo. Con Ranma fuera de la ciudad los accidentes y heridos disminuían notablemente y ya que Akane, su paciente predilecta, estaba de viaje con él… el día no prometía ninguna sorpresa.
Así que el joven doctor se dispuso a cumplir con las obligaciones que exigía la rutina de la mañana. Se dedicó primero a limpiar su clínica, abrir cortinas y ventanas, asegurarse después de que el letrero de la puerta leyera "abierto" y cuando se encontró desocupado, decidió entretenerse con un juego de cartas en compañía de Betty, su esqueleto.
Para cualquier cristiano la vista de un respetable doctor inmerso en un juego de cartas con un montón de huesos hubiera sido pues… en extremo peculiar. Pero para Kasumi Tendo, la historia era completamente diferente.
¡Buenos Días doctor- exclamó en un saludo sonreído.
-Ka-ka-ka-kasumi- respondió Tofu levantándose súbitamente... o intentando hacerlo, pues en lugar de terminar sobre sus pies, terminó sobre su trasero en el piso.
¡Oh- Exclamó Kasumi alarmada –¿Está usted bien Doctor?
-Oh... si, si...Kasumi- Respondió él en un tono soñador, sus lentes empañados.
Ella lo observó entretenida. El joven doctor era en verdad distraído en su presencia, siempre actuando de manera graciosa y ocurrente. Después de pensarlo Kasumi había llegado a la conclusión de que este comportamiento no solo se daba en su presencia, sino DEBIDO a ella. Así que acostumbraba sonreír y disfrutar entre divertida y halagada las visitas, no poco frecuentes, a la Clínica del Doctor Tofú.
-Oh, bueno. Si usted lo dice- Acordó la muchacha borrando la arruga de preocupación de su frente.
El joven doctor la miró con la empañada mirada de un hombre que ha perdido la razón
Kasumi se esforzó por mantener su sonrisa, después de un largo rato, decidió continuar ella con la conversación.
-Doctor¿Recuerda el libro que le vine a devolver el sábado? Me preguntaba si me lo podría volver a buscar.
Pero antes de que terminara la frase, la muchacha se vio abordada por una pila creciente de tomos.
-Libros? Claro- Había dicho el joven antes de comenzar el inusitado ataque.
Kasumi se escurrió rápida y nerviosamente. –No, Doctor, LIBRO, solo un libro... el que le devolví anteayer... recuerda?
-Claro, claro Kasumi- Dijo él.
Por alguna razón la muchacha no halló convincente la afirmación. Tal vez debido a la extraña sonrisa de su rostro, o quizás el tono soñador con el que la había dicho. Claro... que el hecho de que siguiera con la tarea de apilar libros que sacaba de la nada, mientras lo decía, le quitaba bastante credibilidad.
Sintiéndose un poco abrumada, pero disimulándolo con su siempre presente sonrisa, Kasumi divisó el libro que buscaba entre una de las pilas sobre el escritorio. Estirándose lo alcanzó y una vez que lo tuvo en sus manos no tardó en agradecer el favor para luego despedirse.
Salió por la puerta como una brisa y el Doctor Tofu Ono comenzó lentamente a recobrar su cordura.
La breve idea de que su rutina y aquella anticipación de tener un día normal se habían esfumado, lo abordó por un microsegundo. Después volvió a recordar la sonrisa de la joven Tendo y bailó unos cuantos tangos con Betty para celebrar que la había visto.
Sí... la cordura del Doctor Tofu Ono se recobraba MUY lentamente después de una de esas visitas.
-
-Mamá- dijo Ranma exasperado cuando Nodoka comenzó a servir el té y hablar sin sentido después de regresar de la cocina; ignorando sin esfuerzo las miradas expectantes de los muchachos.
¡Mamá!
Nodoka Saotome detuvo la tarea de servir el té y comentar el clima y midió a su hijo con la mirada.
-Es importante- Dijo él.
Y fue suficiente. La mujer suspiró.
¿Qué quieren saber- Preguntó, esta vez mirándolos con seriedad.
-
Nabiki Tendo prácticamente atropelló a su cándida hermana mayor al salir por la puerta principal de la casa.
¡Oy- Gritó antes de terminar desparramada sobre el suelo.
-Oh, Nabiki. ¿Estás bien- Preguntó la muchacha.
La aludida la miró desde el suelo preguntándose como es que ella había terminado ahí mientras Kasumi continuaba firmemente apoyada sobre sus pies.
-Si- Respondió en un bufido mientras trataba de levantarse. Cosa difícil en la micro minifalda y los zapatos de tacón tipo aguja que estaba usando.
-Argh... estúpida falda- Gruñó la muchacha cuando al fin logró pararse.
Kasumi agitó ligeramente la cabeza, decidiendo que era mejor no reírse de la expresión de su hermana.
¿A dónde vas? El almuerzo estará listo en una hora- Dijo Kasumi.
-Tengo que salir. Negocios- afirmó Nabiki –No me esperen, comeré fuera.
¿Negocios?
-Sí... bueno, algo así.
Kasumi examinó a su hermana.
¿Negocios con quién?
-Kuonji- Dijo Nabiki sin chistar y saliendo por la puerta.
Kasumi abrazó el libro que llevaba y la miró alejarse. Después hizo del lado el asunto con un movimiento de los hombros. Tenía mucho que leer y un almuerzo por terminar como para preocuparse por los "negocios" de su hermana.
-
-Eso es imposible- Dijo Akane mirando incrédula a su suegra.
-Talvez- dijo la mujer con voz queda –Pero así fue.
¡Pero ustedes nos obligaron- Exclamó la muchacha perdiendo la paciencia mientras Ranma intentaba procesar toda la nueva información.
-Pues si lo quieres ver de ese modo... –respondió Nodoka sin perder la compostura- Yo creo que solo le dimos un empujoncito a las cosas.
¡¿Qué!
-Si en verdad no hubieran querido casarse nunca lo hubieran hecho linda, y lo sabes.
Akane torció los ojos. No encontró una respuesta que dar.
-No puedo creerlo- Exclamó Ranma tirándose contra el sillón.
-Hijo, sé que no lo recuerdas pero eso fue lo que pasó. Créeme que hubiera bastado que me digas que no querías casarte para no entrometerme y para evitar que tu padre lo haga.
-Pero no te lo dije.- Dijo Ranma con los ojos cerrados y golpeándose la cabeza repetitivamente contra el sillón.
-No. Y Akane, era obvio que tú también deseabas el matrimonio.
La muchacha no tardó en remedar las acciones de su esposo.
¿Seguro que no nos amenazaron con otra cosa- Preguntó la muchacha débilmente. –¿Perder el Dojo¿El apellido?
-No... la única amenaza que hicimos fue romper su compromiso. El Dojo, Akane era la dote para Ranma, pero el trato era que tú ibas a manejarlo en lugar de Nabiki... todos sabemos que ella no sirve para eso y que tú eres la artista marcial en la familia.
-Y nosotros no quisimos romper el compromiso- Dijo Ranma.
-No... se alarmaron especialmente, cuando se enteraron que Nabiki sería tu nueva prometida.
-Y fue ahí cuando...- Empezó Ranma, pero no pudo terminar.
-Decidieron que lo mejor era casarse de una vez.
-Eso no es posible.- Dijo Akane para si misma.
-Oh, pero linda, lo es- Dijo Nodoka y luego sonrió consoladoramente- No sé que sucedió con ustedes en ese viaje, pero les puedo asegurar que fueron ustedes mismos los que decidieron casarse, y quizás ahora no lo recuerden; pero fué porqué aunque no eran capaces de aceptarlo... se querían. No los obligamos. Ranma, hijo, tienes que aceptar, que si en verdad se odiaran como decían hubieran roto el compromiso de una vez y hubieran salido del problema. Hubieran salido ganando.
Ranma asintió con la cabeza. Tanto él como Akane sabían que Nodoka tenía razón. Aún así era muy difícil de aceptarlo.
-Pero no lo hicieron. Prefirieron quedarse juntos. Era lo que ustedes querían.
La mujer sonrió maternalmente.
-No puedo creerlo- Esta vez, fue Akane quién lo dijo.
-
El camino de regreso a casa fue largo y silencioso. Ranma y Akane tenían aún mucho en que pensar. Después de la entrevista con Nodoka, ambos habían quedado mucho más confundidos que antes.
-Revisaré mi diario... tiene que haber algo más ahí- Dijo Akane antes de que Ranma saltara sobre la cerca y asintiera silenciosamente con un ademán de su cabeza.
En realidad Akane no estaba tan confundida como estaba sorprendida. La historia que Nodoka había relatado, era de un sentido incuestionable, y aún así parecía salida de un universo alterno.
'Ranma y yo enamorados'
Akane sintió un estremecimiento subirle por el cuerpo ante aquella posibilidad. Porque era posible... especialmente ahora. La idea, hasta aquel momento le había parecido demasiado soñadora y romántica como para ser cierta pero quizás...
Talvez sí estuvieron enamorados... talvez durante esas dos semanas que no logran recordar aceptaron que se querían... o quizás lo hicieron ante la posibilidad de perderse... era posible, bastante lógico también.
Con tanta gente loca alrededor suyo no sería nada extraño que en lugar de un hechizo para enamorarlos y casarlos les hayan puesto un hechizo para que olviden que estaban enamorados!
Era muy posible... y los posibles culpables serían muchos... Pero aún así, Ranma enamorado de ella en una semana? No, no... eso no podría ser... a menos que Ranma siempre...
Akane detuvo su línea de pensamiento en ese instante. Decidida a mantener la línea entre la realidad y lo imposible bien definida... no era momento para estar soñando despierta.
Ranma observó curioso el juego de expresiones pintados sobre la cara de su prometida... o esposa, lo que sea. '¿En qué estará pensando?' Se preguntó al mirarla comenzando a sonrojarse para luego fruncir el ceño y levantar la nariz de aquella manera graciosa que hacía cuando tomaba alguna decisión.
'¿Estará pensando en lo que dijo mamá?'
'Seguramente' Se respondió Ranma. Después de todo en que otra cosa podría estar pensando.
Él mismo no había dejado de pensar en aquello desde que abandonaron la casa de su madre.
Después de varios monólogos internos Ranma decidió que estaba muy cansado para pensar y que era hora de llegar a un par de conclusiones. Así que detuvo su retahíla interna y acordó consigo mismo.
Definitivamente, estar con Akane ahora lo ponía mucho más nervioso que antes. No entendía muy bien porqué... o mejor dicho, lo entendía pero no quería ni pensar en aquello.
La cosa se iba aclarando... pero no de la manera que esperaba que se aclare... comenzaba a sentir que el problema lo asfixiaba.
Su madre tenía razón. Si en verdad no hubieran querido casarse no lo habrían hecho. La afirmación era obvia y sencilla, pero por alguna razón solo complicaba las cosas. Ranma se prometió que no la iba a comentar, a pesar de lo mucho que lo estaba molestando.
Y... que pensaba Akane de todo aquello... estaba pensando lo mismo que él... acaso había llegado a las mismas conclusiones... estaba confundida... iba a decirle algo?
Ranma estaba debatiendo el preguntarle o no a Akane lo que pensaba cuando la escuchó emitir un pequeño resoplido de sorpresa.
¿Qué- Preguntó mirando hacia abajo, pero no la encontró.
¡
chan- la oyó gritar emocionada mientras corría hacia el cerdito negro parado una cuadra lejos de ella.
¡Genial- Dijo Ranma con fastidio.
Akane corrió emocionada hacia su mascota.
¡
Chan- Volvió a gritar.
El cerdito de la bandana amarilla amarrada a su cuello se detuvo en seco al escuchar que lo llamaban, miró hacia el frente y se encontró con la vista de su ama... confundido, no supo que hacer al principio, pero al ver tras ella, no muy lejos y parado sobre la cerca de Ranma su confusión se disipó, y echó a correr... alejándose con lágrimas en los ojos de la muchacha que lo llamaba.
¿
chan- Preguntó Akane confundida y sintiéndose triste de pronto al ver que su mascota se alejaba.
¿Qué pasó- Preguntó de nuevo... esta vez a Ranma, quien la había alcanzado.
Ranma miró preocupado hacia la dirección en la que el cerdito había desaparecido.
'Ryoga' Pensó...
Y para rematar, ahora tenía algo más en que preocuparse.
FIN DEL CAPITULO VIIINOTAS DE LA AUTORA: Okay... no sé si el capitulo saliò bueno... o si eso de P chan parece que estuviera de más... no estoy muy segura sobre eso pero lo puse porque en el próximo capitulo tiene que aparecer Ryoga y otros personajes tambièn para ir expandiendo la trama... que no la puedo dejar rodeando solo a la familia Tendo...
Ah! Y por si a alguien, le importó... Soun y Genma están bien... probablemente apareceran el proximo capítulo.
A REVIEWERS:
Shakka DV: Tú crees? A quien te refieres con todos? Y vamos! El objetivo de este fic es dejarte picada en todos los episodios! Je je! Gracias por tu review! Besos!
Key-Kugodgy: Esa risa me encantó... pues estoy segura de que Ranma se va a quedar picado con eso del diario por mucho tiempo así que talvez eso de que se lo roba pase... pero es solo un talvez.
Mourisan: Gracias! Y te aviso que me has dejado super picada con tu fic... estoy comenzando a sentir que es karma por eso de dejarles picados con este... pero bueno muchas gracias por tu review y que bueno que te guste el material del diario. Besos!
Teresa: Sip! Otro round más... es que me gusta el personaje de Nodoka... se me hace que es una mujer muy inteligente. Y gracias por el detalle de lo de los buitres me encanta que la gente me diga cosas tan específicas acerca de lo que les gusta de lo que escribo. Gracias Tere!
Lord Shakka mini me: Que bueno que te haya gustado el fic y ojala hayas vuelto para este capitulo. Te cuento que eso de la consumación se va a volver a ver y va a ser un detalle importante en la historia... espero sorprenderte con lo que va a pasar. Muchas gracias por tu review! Besos!
Phoenix-Gise: No lo voy a dejar así... tranquis que yo ya se el final y me muero de ganas de escribirlo así que esa y reviews como la tuya son el ánimo que necesito pa terminarlo... oye? Cual es tu teoría que te cuesta creer? Sería muy interesante oirla.
El Gran Kaiosama: Muchas muchas gracias... Wow! Vaya que tu review me ha dejado... pues, sin otra cosa que decir. Se nota que eres una persona bastante sincera... y yo comparto mucho tu opinión en eso de solo poner reviews cuando los fics capturan mi atención. Wow! Gracias, me alegra mucho que mis escritos lo hayan logrado. Es un gran honor.
Anyer: Aquí me tienes a escribir! Pues gracias Anyer... te cuento que fue tu review la que me hizo caer en cuenta que me estaba tardando en actualizar así que muchas gracias! Que bueno que te guste el fic... no te olvides de contarme que pensaste de este episodio si?