RESUMEN: A veces para que las cosas salgan bien hay que hacerlas de la peor manera posible. CAPITULO XI: "La Mentira" Y es que cuando se la descubre… suceden cosas inesperadas.

NOTA: Si, admito que me tardé de nuevo… pero me tardé menos que antes… así que denme un poquito de crédito… ¿Listo? Muchas Gracias.

EL CAMINO EQUIVOCADO

Calles… avenidas… edificios… todos ellos vestidos con una extraña familiaridad. Extraña, digo, porque a pesar de lucir como una alegoría de borrosos recuerdos, la cabeza del muchacho no lograba ubicarlas en un lugar específico… Estaban todas revueltas, perdidas… igual que él.

Así que Ryoga caminaba… luciendo como siempre confundido. Y aunque en aquellos instantes su forma no era precisamente humana… la expresión en su rostro explayaba sentimientos que solo los humanos pueden demostrar.

El joven reducido a la figura de un pequeño cerdito negro miraba alrededor y caminaba inseguro. Sus ojos brillaban con la esperanza de pronto encontrar la casa amiga en la cual sería recibido cordialmente.

Pero nada…

Y para empeorar una situación de por si mala, acababa de toparse con ella.

Ella, aunque parezca un pronombre común y generalizado; en el mundo de Ryoga Hibiki representaba a una sola persona marcada por un nombre, una mirada y una sonrisa.

Akane Tendo. Ella… la única ella que había.

La ella que las circunstancias lo obligaban a olvidar, o al menos evitar hasta que pueda dejar de desearla. Pero la vida tiene un sentido del humor un tanto extraño, y siempre obliga a individuos como Ryoga a enfrentar situaciones cuando tratan de huir de ellas.

Así que el cerdito caminaba, sintiéndose infinitamente pequeño entre la multitud de piernas y zapatos que transitaban alrededor suyo. Caminaba, sintiendo pena de si mismo y la vida que llevaba. Caminaba maldiciendo su sentido de orientación, o la ausencia del mismo en todo caso. Caminaba… o al menos intentaba hacerlo, pues de un momento a otro había sido levantado del suelo.

Mira nada más que tenemos aquí.

Se oyó una voz femenina mientras el cerdito forcejeaba en un inútil intento de liberarse.

Hola, P-chan

Ryoga se encontró con la fría e inquisitiva mirada de Nabiki Tendo.

CAPITULO IX

"La Mentira"

De cerditos, restaurantes y reminiscencias.

Ya Akane, estoy seguro de que P-chan solo se confundió o algo- Ranma dijo en un vano intento de animar a la entristecida jovencita que caminaba a su lado.

Como respuesta Akane solo asintió la cabeza.

Olvídalo… no te sirve de nada pensar en el estúpido cerdo negro… y mira como te tiene toda distraída, eso no ayuda en nada.- Prosiguió el muchacho.

Akane se detuvo con el ceño fruncido. Por su mente paseándose la idea de lo egoísta que podía llegar a ser Ranma sin siquiera proponérselo. 'Y yo que pensé que se estaba preocupando por mi… lo único que le importa es que no me distraiga… porque a él no le conviene' Dedujo con sorpresa mientras su tristeza se volvía más pesada.

Después de dar unos cuantos pasos, el joven notó que su "prometida" no lo seguía más, así que dio media vuelta y la miró curioso. "Estúpido Ryoga" Pensó con enojo al ver los ojos llorosos de Akane.

¿Akane?- inquirió preocupado tiempo después.

La muchacha lo miró con enojo. -¡Olvídalo Ranma!- dijo con brusquedad y fastidio.

Ranma frunció el ceño. '¿Y ahora qué le pasa?'

¡Oye¡Qué solo estaba tratando de

No me voy a distraer… no me voy a preocupar… tranquilo no voy a dejar atrás tu problema para solucionar el mío.- Dijo, ignorando la voz de su cabeza que le decía, casi con miedo, que el problema también era de ella.

?De que estás hablando?

¡Eres un egoísta!- Gritó la muchacha y después lo rebasó caminando con enojo hacia su casa.

Ranma la miró desde atrás. Detenido sin saber exactamente que es lo que acababa de suceder. Después de todo Ranma en verdad había tratado de consolarla… y sinceramente no tenía idea de lo que significaba todo aquello que la muchacha le acababa de decir. Pero nadie podía culparlo, la verdad es que la mente de Akane Tendo es una especie de rompecabezas que a veces no tiene sentido ni cuando logras armarlo… la única que puede entenderlo es ella misma… y de vez en cuando sus ideas se enmarañan tanto que hasta ella encuentra difícil ordenarlas.

Así que Ranma se quedó ahí parado… sintiéndose perplejo por un segundo, porque enseguida, olvidó que no entendía y la exasperación lo inundó -Estúpida, violenta, desconsiderada, marimacho- dijo entre dientes mientras comenzaba a seguirla.

Jueves 22 de Julio

1:45 pm

Querido Diario:

Ranma es un idiota, arrogante, egoísta… ay! A veces siento que en verdad lo odio. Esta mañana le pedí de favor que me ayude a buscar a P-chan, desde hace más de una semana que no lo veo. Y él claro, no me quiso ayudar, terminó diciéndome un montón de cosas y lo único que hizo fue insultarme. Me dijo que deje en paz a P-chan! Que soy una ingenua y tonta y que debería darme cuenta de lo que pasa alrededor mío. Y después no quiso darme explicaciones… se fue como si yo le hubiera hecho algo. ¡Cuando fue él quien me insultó! Yo sé que no le agrada mi mascota… pero pudo haberme dicho simplemente que no me iba a ayudar! Eso me pasa por ir a pedirle favores justamente a él…

Kuonji Ukyo dibujó una entusiasta sonrisa al sonido de la puerta del restaurante abriéndose.

¡Bienve

Comenzó alegremente ante el prospecto de clientela pero la frase murió en sus labios y aquella sonrisa fue reemplazada con una expresión de sorpresa al reconocer a la persona que acababa de entrar.

Nabiki- Dijo la muchacha instalando una fría sonrisa en el rostro. -¿Qué te trae por aquí?

Nabiki Tendo la miró por un instante, y después sin moverse del umbral y con expresión pasiva examinó el restaurante. Un solo cliente estaba sentado frente a la barra dando los primeros mordiscos a su merienda. Nabiki clavó la mirada en él esperando a que la vea.

Negocios- Replicó al fin.

El joven suspiró resignado y se levantó de su puesto dejando unos billetes y un agradecimiento casi inaudible. Nabiki sonrió satisfecha, su fama se había extendido desde que entró en la Universidad, seguía siendo una leyenda en la secundaria Furinkan y muchos la temían aún, pero ahora que sus movimientos se habían extendido… casi toda Nerima la consideraba una persona de cuidado, especialmente cuando hablaba de "negocios."

Ugh- Ukyo puso los ojos en blanco y procedió a recoger el plato casi intacto que el cliente había dejado -Pues, eso no significa que debes venir acá a arruinar el mío- Dijo con fastidio

Nabiki no respondió, en su lugar sus labios se torcieron en una semi sonrisa.

Y tú y yo no tenemos nada de que hablar. ¿O no fue eso lo que dijiste hace unos días cuando fui a pedirte ayuda?

Las cosas cambian- Afirmó la muchacha -Además encontré algo tuyo perdido por ahí.

Ukyo la miró extrañada y segundos después Nabiki se acercó y puso bruscamente a P-chan sobre la mesa. La muchacha de cabello largo no hizo más que abrir los ojos con sorpresa mientras el cerdito chillaba emocionado.

¿Ahora es tu mascota o no?- Preguntó la mediana de las Tendo mientras tomaba asiento.

Ukyo entrecerró los ojos y la miró con desconfianza. -¿Qué buscas Tendo?- preguntó con hostilidad.

Respuestas.- Respondió dedicándole una brillante sonrisa. -Hay un par de cosas que no termino de comprender y estoy segura de que tú puedes ayudarme.

Ukyo suspiró -Voy a apagar la estufa… no tendré mucha clientela mientras tú estés aquí.

Antes de eso… porque no hierves agua en una tetera.

La cocinera la miró extrañada, esto definitivamente no era una visita social para justificar tal petición. -¿Quieres té?

No, pero tenía planeado hablar con Ryoga uno de estos días. Y así mato dos pájaros de un tiro. -Sonrió.

Ukyo miró fijamente al cerdito negro. -Dime que no hiciste nada aparte de perderte.

Weee- respondió P-chan y la muchacha decidió que lo mejor era no tratar interpretarlo.

Dos semanas antes.

"Harina. Listo. Verduras. Listo. Res. Listo. Cerdo… mmm"

Ukyo miró alrededor. El mercado estaba atestado de gente. "Cerdo… cerdo… cerdo" Repitió en su cabeza mientras buscaba el rostro del carnicero al que siempre compraba carne de cerdo. En cuanto lo vio, se regaló una sonrisa y caminó hacia él. Pero la sonrisa no tardó en desvanecerse para ser limpiamente reemplazada por una expresión de sorpresa.

-¡Wee¡Wee!-

Chillaba un cerdito negro entre las manos del carnicero. Ukyo lo vio, reconociéndolo y sabiendo que aquel chillido era, de seguro, un grito desesperado de ayuda.

-Ryoga.

Dijo en un suspiro resignado.

Akane entró como un torbellino a la casa Tendo y se tumbó en una silla del comedor con el rostro aún arrugado en una expresión de enfado.

Kasumi la miró extrañada desde la cocina y al ver su cara de pocos amigos vaciló al saludarle.

Hermana…- comenzó pero unos pasos que se oían pesados contra el piso la interrumpieron. Ranma, llevando una expresión muy parecida a la de Akane, no tardó en aparecer por la puerta.

Paró en seco al ver a su "esposa" sentada en el comedor y ni la cándida sonrisa de Kasumi logró borrar la profunda arruga de fastidio que traía dibujada en la frente.

Me voy a entrenar- Dijo bruscamente, y adivinando lo que Kasumi iba a preguntarle y la razón por la que Akane había entrado directo al comedor, aclaró. -Almorzaré más tarde.

Kasumi no pudo ocultar la sorpresa que sentía y su boca se abrió levemente mientras seguía a Ranma con la mirada.

Pero…- comenzó y después miró inquisitivamente a su hermana pequeña -¿Qué les pasó?

Era obvio que habían peleado… pero algo muy extraño debía haber sucedido para que se estén ignorando de esa manera en lugar de insultarse como era su costumbre.

Akane cruzó los brazos, miró al techo, soltó un profundo suspiro y agitó la cabeza. Se dio cuenta, que no podía responder.


Por segunda vez en el día Nodoka escuchó voces en su puerta y cansada de esperar a que golpeen la abrió sin aviso alguno.

Sintió sorpresa pero no la demostró y se dedicó a mirar inquisitivamente a sus visitas.

Am… Nodoka- Dijo nervioso Genma Saotome a su esposa -Hola- y luego sonrió, o intentó hacerlo porque más que sonrisa pareció salirle una mueca.

Genma, Soun -la mujer sonrió con amabilidad -¿Qué los trae por aquí?- Miró detenidamente a cada uno de ellos y luego añadió -Y en ese estado.

Y es que el estado de su marido y su consuegro era en verdad deplorable, sus ropas todas rasgadas y sucias no eran nada en comparación a los mil y un moretones que los cubrían de pies a cabeza.

Pues…- comenzó Soun

Los muchachos no quieren vernos ni en pintura Nodoka- terminó el hombre calvo.

Era de esperarse- dijo Nodoka con calma, solo señalando lo obvio.

Nodoka, por favor- Comenzó Soun, sabiendo que la mujer era lo suficientemente inteligente para entender que habían acudido a ella en busca de refugio. Ninguno de los dos hombres estaba dispuesto a recibir otro vuelo alrededor del Japón.

Nodoka Saotome suspiró mirando al cielo.

Pasen, pasen- aceptó abriendo la puerta para que los hombres entraran y la cerró después tras de si, mientras pensaba con pena en su cocina y lo vacía que iba a quedar después de que su marido la encontrara. El apetito de Genma Saotome era algo casi tan fastidioso como la costumbre esa de llorar por todo de Soun Tendo.


Nabiki sonrió ampliamente cuando Ryoga apareció transformado frente a ella.

¡Ryoga!- exclamó -Hace mucho tiempo que no te veía.

El muchacho en cuestión se sonrojó y ofreció una sonrisa tímida y un tanto forzada mientras intentaba cubrir su desnudes. Ukyo le arrojó una toalla claramente molesta con todo el intercambio.

Iré a buscar mi ropa- Dijo el muchacho dando media vuelta, seguro de que había dejado algunas cosas suyas la última vez que estuvo de visita en el U-chan's.

NO, no, no- Lo detuvo Ukyo -Voy yo.- Se adelantó, sabiendo que si lo soltaba terminaría por perderse y no aparecer en al menos un par de horas. Y un par de horas soportando la charla de "negocios" que la joven Tendo tenía en mente, no era algo que estaba dispuesta a soportar.

Pararse apenas cubierto con una toalla frente a una persona de poca confianza debe ser una experiencia… pues, aparte de fría, bastante incómoda la verdad. Ryoga, siendo tan tímido como era se sintió morir cuando el escape que se proponía hacer fue interrumpido por Ukyo. Y la cosa solo empeoró cuando se dio cuenta que estaba completamente solo en una habitación con la misma persona que hace menos de tres semanas le dio, pues, razones "muy" convincentes para mantenerse alejado de ella y su familia.

Am…- Tartamudeo Ryoga, nervioso ante la penetrante mirada de la mediana de las Tendo.

Tranquilo Ryoga- Dijo ella, sabiendo la razón por la que el joven no sabía que hacer -Sé que tú y P-chan se han portado muy bien últimamente.

Ryoga bajó la mirada.

Sé que solo han sido tres semanas, pero han bastado para que Kasumi ya no esté tan enojada contigo.

Ante esta afirmación el muchacho sintió un toque de esperanza rozándole el cuerpo. La mayor de las Tendo había sido muy directa al expresarle su desagrado cuando se enteró de que era él la mascota de su hermana. Y recibir una reprimenda por parte de una persona tan dulce y respetable como Kasumi Tendo era una experiencia que no le deseaba ni a Ranma.

Pero eso no significa que puedas a volver aparecerte por allÂ?Entendiste?- continuó Nabiki.

Ryoga asintió -Todos preferimos que Akane crea que P-chan se perdió- Dijo él sonando resignado y ya sabiéndose de memoria el discurso aquel que exponía las mil y un razones por las que debía mantenerse alejado de la mujer que amaba.

Me alegra que hayas aprendido la lección- ella le dedicó una sonrisa burlona.

Tres semanas antes.

Nabiki Tendo miró a su hermana mayor y sintió que no la estaba viendo. El aura de ira que hace unos pocos minutos había cubierto a la cándida muchacha por completo, estaba poco a poco desvaneciéndose. El aire aún se sentía pesado, pero la sorpresa de Nabiki poco a poco se iba aplacando… Cuando escuchó la conmoción en el patio y bajó con su cámara para conseguir algún material interesante… jamás se imaginó que era esto lo que iba a encontrar.

-Ka… Kasumi.

Alcanzó a decir la joven de cabello corto.

-Qué descaro-

Farfulló la aludida, sin levantar la mirada. Su voz, dulce todavía, sonó extraña… pesada con algo entre fastidio, decepción y aquel veneno con que el que había hablado hace unos minutos.

Ukyo miró confundida la escena… "Ryoga… es P-chan" se dijo… pero no terminó de creerlo. Aquello tenía que haber sido una visita informal bajo la excusa de traer comida… una de esas visitas en las que no sucede nada. Y en lugar de eso, ALGO sucedió.

Ryoga había caído en la laguna de los Tendo durante una pelea con Ranma… nada grave, o al menos es lo que Ukyo y Kasumi pensaron al ver desde la cocina. Pero, cuando en lugar del muchacho de la bandana, del agua emergió un familiar cerdito negro… la cosa cambió.

En cuanto Kasumi entendió, en un momento de lucidez extraordinaria, todo, absolutamente TODO -incluso que Ranma tenía algo que ver en el asunto- lo que rodeaba a aquel secreto de la maldición de Ryoga, la tierra se salió de su órbita.

O al menos, fue eso lo que Ranma sintió ante la vista de la diáfana muchacha transformada en una réplica de su marimacho…

Kasumi, en verdad no quiero hablar de eso.- Dijo Akane tratando de ser amable ante el interrogatorio de su hermana.

Esta bien. Pero Ranma se veía muy molesto. Y esta actitud de ustedes dos es bastante extraña. Deberían hablar.

¿Para qué?- Akane sonó cansada -¿Para terminar insultándonos?

Hermana- la reprendió.

Ay Kasumi… si es la verdad.

Aún así…

No- Akane interrumpió -Es mejor así… ya hablaremos luego. No te preocupes.

Kasumi suspiró. Un silencio tenso se instaló en la habitación y ella terminó por levantarse a servir el almuerzo.

Akane quiso suspirar también pero no lo hizo. Suspirar tanto y así de seguido no podía ser saludable. "Me voy a quedar sin aire" pensó. Y a ese paso definitivamente iba a hacerlo… Suspirar de pena, de cansancio, de pura resignación… hasta de confusión… era mucho aire desperdiciado. No, no más. Decidió que pensar en él y sus problemas era inútil porque jamás encontraba soluciones. Y mientras más pensaba, menos entendía.

Luego recordó los acontecimientos de los últimos días y por más que lo intentó, no pudo contener el suspiro, segura de que si seguía intentando retenerlo moriría ahogada. El problema aquel del matrimonio… era demasiado. La muchacha se sentía presionada. Pensar en la posibilidad de que se casaron por voluntad propia… que estuvieron enamorados o que al menos pensaron estarlo... la pérdida de memoria, la desesperación de no saber lo que había pasado con ellos, el inmencionable suceso de la Luna de Miel, y como consecuencia lo incómodo que se le estaba haciendo tener a Ranma cerca… la huida de P-chan aquella tarde después de que estuvo perdido antes de que ella perdiera la memoria… y encima todo lo que decía su diario.

"Mi diario" pensó Akane y levantó la mirada.

Kasumi le había servido ya la comida y estaba sentada frente a ella, almorzando también.

Akane no pudo evitar mirar fijamente a su hermana.

"No olvides agradecer a Kasumi y a Ukyo cuando regreses"

Y eso… ¿Qué significaba? La frase se repitió incesante en la cabeza de la joven…

­-¿Kasumi?- Preguntó, con una mirada de sospecha plasmada en el rostro.


La puerta del cuarto de huéspedes del Uchan's se abrió dejando ver el rostro cansado de la dueña de casa.

"Diablos" pensó "¿Y ahora que querrá Nabiki?" Se preguntó mientras buscaba la ropa de Ryoga en uno de los armarios.

Sabía que la mediana de las Tendo siempre se traía escondido algo y después del incidente aquel en el que Nabiki, Kasumi y ella descubrieron la identidad de P-chan… pues con Ryoga estando presente, nada de aquello podría traer algo bueno.

Yo tengo la culpa por tenerle pena y ayudarle- Refunfuñó al encontrar el inconfundible atuendo de Ryoga.

Dos semanas antes

-Ya no tengo razones para vivir- Se quejó el muchacho, luciendo miserable.

Ukyo miró al cielo profundamente fastidiada, desde que lo salvó del carnicero no había dejado de quejarse. La joven estaba comenzando a arrepentirse de haber hecho lo que hizo y comenzaba a entretener la idea de hacer chuleta del muchacho con sus propias manos. -Tú te lo buscaste- dijo con desdén.

-En eso tienes razón- aceptó el muchacho derrotado. -Pero era la única manera de acercarme a ella.

-No seas descarado Ryoga… mientiéndole… Por Dios, si la quisieras tanto como dices no le hubieras hecho eso.

-Ella amaba a P-chan… me amaba.

-Como a una MASCOTA.

Ryoga suspiró y la miró dolido.

-Tú deberías entender. ¿Estás enamorada de Ranma o no?.

-¿Qué estás tratando de decir?

-Él no te quiere.

Ukyo lo miró agraviada. -Claro que me quiere.

-No como tú quisieras…

La muchacha se quedó callada, no sabía como defenderse.

-Akane… ella, tampoco me quiere.- Ryoga levantó la mirada, tenía la mirada turbia de las personas que acaban de romperse -Pero como P-chan...

La miró como pidiendo clemencia. -Tenía que intentar…

Una, dos, tres veces. Y cada vez que volvía a intentar el complicado kata corrigiendo el error anterior terminaba equivocándose en algo nuevo. Ranma gruñó agitando los puños. El entrenamiento en definitiva no le estaba ayudando a relajarse.

Sentía su cabeza toda enredada, como si sus pensamientos fueran hilo y no hubiera más que nudos desordenados por doquier. Y la verdad es que ese era el problema. Muchos nudos que desatar y ni idea de cómo hacerlo.

No en definitiva con esa falta de concentración no lograría tener un entrenamiento provechoso. Ranma suspiró y miró alrededor, preguntándose si talvez meditar sería más sencillo. Y entonces lo vio.

El muñequito que Akane usaba en sus entrenamientos. Ahí tirado en una esquina… pero no despajado y desecho como era usual. Ranma se acercó para ver mejor, y ahí estaba, el monigote enfundado en un smoking, con una coleta saliéndole de la cabeza y una gran sonrisa dibujada en el rostro, junto a él ahora se veía otro muñequito, este en cambio vestido de novia y con un garabato de sonrisa adornándole.

Al ver como habían dejado unidas las manos de ambos monigotes, Ranma no pudo contener una sonrisa.

FIN DEL CAPITULO IX

A REVIEWERS:

Shakka DV: Me encantó la emoción... aquí llegó nuevo capitulo no tan tardío como el anterior... pero ahora si advierto que el próximo capitulo si va a tardar en salir un poco... no lo he comenzado siquiera y ya voy a mis exámenes de grado y todas esas notas... y mi curso de inglés metido en el medio... Pues... el tiempo me va a faltar para poder escribirlo. Asi que me disculpo con anterioridad. Hice lo posible por no dejarte tan picada... funciono? No te olvides de decirme que te pareció el capítulo. Gracias por leerme!

Teresa 3: Adoro tu comentario... no son lo que parecen? Y que parecen entonces? Kasumi y Nodoka son dos personajes muy interesantes así que los pienso aprovechar en esta historia y no dejar a las dos matriarcas como papel de fondo de un romance... Y que piensas ahora después de este capitulo? Alguna nueva especulación?...

Kei-Kugodgy: Gracias, gracias! Y ahí lo ves... eso le pasò a Ryoga... se entendió? Espero que si... Y pues bueno, te prometo que voy a tratar de pasarme por tus fics... pero voy a tardar un poquito en leerlos porque esto del tiempo... fuu... me tiene hecha nudos.

Maria T: A lo mejor... pudieron haber sido muchas, muchas cosas... pero como que esa teoría es la más complicada... al fin y al cabo esos dos no recuerdan haber estado enamorados... y si te pones en su lugar... pues es una situación muy incómoda..no crees? Y ahí está más P-chan!

El Gran Kaiosama: Pos lo siento... y espero no ganarme otro Aleluya! Porque terminé tardándome màs de lo debido no crees? Pero bueno aquí està y lo importante es que llegó. Gracias, muchas gracias por tu review... y te cuento un secretito. (todos están más involucrados de lo que parece)

Mouri-san: Holaaaa! Y captaste justo mi punto… las cosas nunca son sencillas… en todo, TODO hay cientos de matices... hay miles de formas en las que algo puede terminar... a ver si adivinas como termina esta. Muchas Gracias por tu review... y ya sabes... estoy pendiente de todas tus actualizaciones.

miriamkinomoto: Gracias! Y te devuelvo los saludos desde Ecuador... aquí está la continuación. Ojalá te siga gustando y me alegra mucho que te haya parecido buena mi historia. Sigue leyendo fics! Adiu!

Erin: Si que lo tuve en cuenta... fue tu review el que mi hizo ver si por fin me sentaba a terminar el siguiente episodio y aqu� lo tienes. Gracias por tu review! Cuando alguien me hace acuerdo de actualizar es cuando me digo a mi misma ya pues! Escribe!