Capítulo 26. Solución a los problemas.

(Nótese la originalidad de la autora para los títulos de los capítulos ¬¬).

Después de que Lily dejó a Deb y a Levin hablando, se fue a buscar a su hija y a su suegro… Y a su esposo, dicho sea de paso. Sin embargo, al dar la vuelta en el corredor para encontrar la salida, vio que se acercaban a ella Genzo y Taro. A Lily le dio un vuelco el corazón, más porque la expresión de ambos era inescrutable y ella no sabía ni a qué tirarle. Genzo y Taro se detuvieron al llegar junto a Lily. Ella también se detuvo, más por reflejo que por cualquier otra cosa.

- Felicidades, Wakabayashi.- dijo Lily, nomás por decir algo.- Jugaste bien…

- Lily, tenemos que hablar.- respondió Genzo, ignorando la felicitación.

- Los dejaré solos.- anunció Taro, intentando marcharse, pero Lily lo detuvo por el brazo.

- ¿Qué le dijiste?.- preguntó Lily, en español, un tanto aterrada.

- La verdad.- respondió Misaki.- No podíamos ocultárselo para siempre…

- Ya lo sé todo, Lily.- intervino Wakabayashi, quien a pesar de que no entendía lo que hablaban los otros dos, suponía que solo podía tratarse de una cosa.- Y tenemos que hablar sobre nuestra hija…

- Nos veremos después.- dijo Taro.- Tengo que buscar a Eriko…

- Suerte, amigo.- se despidió Genzo.

Lily estaba más o menos en estado de shock. Tarde que temprano sabía que Genzo se enteraría de que Jazmín era su hija, pero aun así nunca se preparó mentalmente para el suceso.

- ¿Por qué no me dijiste que Jazmín es mi hija?.- reprochó Genzo, suavemente.- Claro, que soy un idiota… Nunca contesté a tus llamadas…

- No, no lo hiciste.- Lily se limitó a contemplarse las uñas, cosa que hacía cada vez que quería evitar la mirada de alguien.- Intenté llamarte muchas veces para decírtelo todo, pero jamás me regresaste las llamadas…

- ¿Pero por qué no me lo dijiste ahora que nos volvimos a encontrar? Tuviste muchas oportunidades de decírmelo…

- ¿Y crees que te lo merecías?.- Lily encaró a Genzo, enojada.- Estuviste ausente los tres primeros años de vida de Jazmín, ¿crees que te mereces que te diga que tú eres su padre?

- ¡Al menos debiste haberme dado la oportunidad!.- gritó Genzo.- ¡Sé que cometí un error al abandonarte, pero puedo corregir las cosas!

- ¿Y para qué? Jazmín ya tiene un padre.- replicó Lily.- Y yo ya había continuado con mi vida y tú con la tuya. Además, no quiero tu compasión. No quería que regresaras a mí solo por tus remordimientos de padre desnaturalizado…

- ¡No es por eso, maldita sea!

- ¿Qué no? ¿Entonces por qué?

- Porque lo único que he hecho estos últimos tres años es arrepentirme de haberte dejado en Japón.- dijo Genzo, tomando a Lily por los hombros y obligándola a verlo a la cara.- Cuando supe que te habías casado casi me vuelvo loco… Y más cuando me enteré de que tuviste una hija… Lily, yo no te he podido olvidar, de ninguna manera consigo sacarte de mi cabeza… Entiende que nunca te dejé de amar, que te amo ahora y que te seguiré amando hasta el resto de mis días… Pero no podía acercarme a ti, porque estás casada con uno de mis mejores amigos…

- Quizás cometí una estupidez.- los ojos de Lily comenzaron a llenarse de lágrimas.- Pero tenía tanto miedo… Yo quería tener a Jazmín, pero al mismo tiempo me aterrorizaba la reacción de mi padre. Aun recuerdo cómo actuó cuando se enteró de que Lara estaba embarazada y yo no quería que pasara por algo así otra vez… Además, yo no me sentía lo suficientemente preparada para tener un hijo yo sola, y cuando Taro me pidió matrimonio para darle un apellido a mi hija, no me pude negar… Ahora sé que lo arruiné todo, sobre todo para él, ya que por mi culpa él no ha podido ir en busca de su verdadero amor… Soy una egoísta…

- No, el egoísta estúpido soy yo.- Genzo secó las lágrimas de Lily.- Pero Misaki tiene razón: aun estamos a tiempo…

- ¿Crees que sea posible corregir todo?.- Lily miró a Genzo un tanto esperanzada.- Eriko me ha de odiar con toda su alma…

- Eriko está esperando un hijo de Misaki.- anunció Genzo.- Espero que eso no te afecte…

- ¿Afectarme en qué?.- sonrió Lily.- Si yo sabía perfectamente bien que Taro y ella habían dormido juntos. Él no me lo ocultó y yo no podía negarle esa felicidad… Pero un hijo… Vaya que ese Taro es bárbaro…

- Dímelo a mí.- Genzo soltó una carcajada.- Casi lo mato por creer que además de embarazar a mi hermana, te había embarazado a ti…

Lily también rió. Genzo la tomó por la cintura y la atrajo hacia él.

- Te amo, Lily.- murmuró él, antes de besarla en los labios.- Permíteme corregir mis errores.

- Corregiremos nuestros errores.- sonrió ella.- Yo quería decirte de Eunesto…

- Cierto.- asintió Genzo.- Creo que hay algo que me debes explicar…

- Sí.- suspiró Lily.- Mira, esa vez que nos encontraste, Eunesto me besó a la fuerza, pero yo iba a decirle que el único en mi corazón eres tú…

- No hablo de eso.- negó Genzo.- Misaki ya me explicó eso. Me refiero a que Sorimachi me contó que después de que yo me fui de Japón se te vio muchas veces con Terán…

- ¡Ah!.- Lily recordó.- Sí. Mira, en ese entonces yo estaba de lo más decaída por tu partida y Eunesto se ofreció a darme terapia para ayudarme a afrontarlo… Solo salimos como amigos y como doctor-paciente, nada más…

- Sorimachi también me dijo que un día antes de que tú y Misaki se marcharan a México para casarse, Terán partió precipitadamente de Japón. ¿Por qué fue eso?

- Porque Eunesto se ofreció también a casarse conmigo y darle un apellido a Jazmín, pero yo me negué.- explicó Lily.- Él no está hecho para el matrimonio y sé que no soportaría estar atado de esa manera, y más con una hija que no es suya…

- De manera que decidiste aprovecharte de Misaki.- rió Genzo.

- Exactamente.- Lily también rió.- ¿Por eso fue que creíste que Jazmín era hija de Eunesto?

- Sí.

- Eres un tonto…

Lily y Genzo volvieron a besarse. Y en eso estaban cuando dos personas los descubrieron y los miraron con la boca abierta…

- ¡Lily!.- gritó uno.

- ¡Genzo!.- gritó el otro.

Lily y Genzo se separaron, algo sorprendidos. Frente a ellos se encontraban Ichiro Misaki y el señor Yamazaki, y ninguno los miraba con agrado…

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En París, Francia, Ilse Matsuyama hacía sus maletas. Le dolía un poco el tener que dejar Francia, pero era momento de regresar… Cuando estaba por terminar, Frank llegó y tocó a la puerta de su habitación. Ella abrió y él se sorprendió de ver sus lágrimas.

- ¿Qué ocurre?.- preguntó él, sorprendido.

- Regreso a Alemania.- respondió ella, triste.- Hikaru desea que regrese…

- ¿Cuándo te vas?.- murmuró Frank, inexplicablemente triste.

- Hoy por la noche sale mi vuelo.- murmuró Ilse.

- Entiendo…

Ilse seguía llorando. Quería decirle a Frank que si estaba tan triste por irse era porque tendría que dejar de verlo. Y Frank no quería que Ilse se marchara… Él la abrazó, para tratar de consolarla. Ella lloró en su hombro. De pronto, y sin que ninguno de los dos supiera muy bien qué pasaba, Frank e Ilse se besaron, por un largo rato. Cuando se separaron, ella lo miró con cierta sorpresa.

- Tengo que hablar con Yoshiko.- murmuró Frank.

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En Bogotá, Colombia, Saki Aiza se entrenaba arduamente para convertirse en la próxima capitana de la Selección Femenil de Fútbol Sóccer Colombiana que participaría en el próximo Mundial Femenil. Gabriel Katsumura resultó ser primo hermano del entrenador. Saki estaba un poco molesta con Gabriel por haberle ocultado dicha información, aunque después el gusto por regresar al campo de juego la hizo olvidarse de eso.

- Excelente, Saki.- le dijo el entrenador, al final del entrenamiento.- Eres toda una estrella del sóccer. Me da mucho gusto que tú vayas a formar parte de nuestra selección…

- A mí me da mucho más gusto.- sonrió Saki.

Después de ducharse y de cambiarse de ropa, Saki y Gabriel decidieron ir a almorzar, pero apenas iban saliendo de las instalaciones cuando Gabriel abordó a Saki con una propuesta inesperada.

- Saki, perdóname, pero ya no puedo esperar más.- dijo Gabriel.

- ¿Qué pasa, Gabriel?.- preguntó Saki, un poco asustada.

- He querido decirte esto desde hace mucho tiempo… Saki, yo aun te amo. Te pido que me des otra oportunidad… .- murmuró Katsumura.

- ¿No me lo estarás pidiendo porque ahora yo estoy en Colombia?.- inquirió Saki, suspicaz.- Ahora me dices que me quieres pero, ¿qué pasará cuando yo me vuelva a ir de gira con Sounds of Silence? Sabes que no he renunciado a ellos… ¿Me volverás a terminar?

A esto, Gabriel no supo qué responder.

- Lo sabía.- suspiró Saki.

- ¡No! De verdad, Saki, dame otra oportunidad.- pidió Gabriel.

- Lo siento, Gabriel, no puedo.- Saki desvió la mirada.- Porque aun lo amo…

- ¿Sigues pensando en Shadows?.- preguntó Gabriel, desilusionado.

- Sí… No puedo sacarlo de mi mente, aunque lo desee…

En ese momento, un hombre de cabello negra y ojos rojos vio a Gabriel y a Saki platicando y bufó. El joven apresuró el paso y llegó hasta donde se encontraban los otros dos.

- Saki.- dijo Tess Shadows, con voz seria.

- ¿Tess?.- Saki se sorprendió mucho.- ¿Qué haces aquí?

- Vengo por ti.- afirmó Tess, cruzándose de brazos.

- ¿Qué dices?

- Que vengo por ti.- repito Tess.- Saki, he sido um completo idiota. No sé por qué te dije que no queria volver a saber de ti si te marchabas... Mejor dicho, sí que lo sabía: era un recurso idiota para no perderte…

- Demasiado idiota.- opinó Gabriel.

Tess le lanzó una mirada muy acre pero continuó hablando.

- Saki, yo te amo.- dijo.- Tú eso siempre lo has sabido. Si nunca te pedí que fueras mi novia fue porque… No sé, creí que nuestra relación podría afectar el futuro de Sounds of Silence… Mejor dicho, ése fue mi pretexto. La verdad era que tenía miedo de enamorarme profundamente de ti y perderte después… Aunque, a pesar de mis excusas, terminó por pasarme precisamente esto…

- Tess… .- Saki no sabía ni qué decir.

- Mira, he venido hasta Colombia por ti.- continuó Tess.- Estoy dispuesto a todo con tal de que tú regreses a mi vida… No quiero que dejes el sóccer, eso no. Todo lo contrario, te apoyaré en eso y en lo que decidas… Quiero que me perdones y que me des otra oportunidad… Te amo, Saki, quiero estar contigo…

- Saki, yo también estaría dispuesto a ayudarte en todo lo que decidas.- dijo Gabriel.- Te apoyaré en tus giras con Sounds of Silence…

Tess y Gabriel se miraron por unos segundos.

- Saki, debes decidir.- dijo Tess.- Sea lo que sea, nosotros apoyaremos tu decisión…

Saki no tenía que pensarlo dos veces. Estaba más que segura de los sentimientos de su corazón…

- Gabriel.- respondió.- Eres un hombre increíble y sabes que te amé muchísimo. Tienes muchas cualidades, muchas mujeres serían afortunadas de tenerte, porque eres muy especial… Pero lo siento mucho… Yo amo a Tess…

Gabriel asintió. Sin decir nada más, se dio la vuelta y dejó que Tess y Saki tuvieran el dulce reencuentro que tanto anhelaban…

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Kazuki y Katya viajaban a Múnich. Durante todo el camino, él había estado tratando de decirle algo a ella, pero por alguna razón alguien los interrumpía siempre. "Quizás no soy yo el hombre adecuado para ella", pensó él.

- ¿Te pasa algo?.- preguntó Katya, después de un buen rato.- Has estado algo nervioso.

- Es que trato de decirte algo pero no hallo como.- respondió Sorimachi.

- Solo abre tu boca y habla.- replicó Katya.

- No es tan fácil…

- ¿Por qué no? ¿Qué me piensas decir?

- Este…

- ¿Qué eres gay?

- No…

- ¿Qué te vas a cambiar de sexo?

- No…

- ¿Qué te vas a ir a vivir a la Antártica?

- No…

- ¿Entonces?

- Ay, Katya, ¿por qué siempre eres así?

- ¿Así como?

- De cobarde en cuanto al amor se refiere.- replicó Kazuki.- Porque bien que sabes qué es lo que te trato de decir. Lo has sabido desde siempre…

- Kazuki… .- Katya trató de detenerlo, pero él la detuvo con un beso.

- Bien que sabes lo que siento por ti.- murmuró él, cuando se separaron.- Y sabes que es por eso por lo que detesto tanto que te acerques a Matsuyama…

Katya contempló a su amigo durante unos minutos. Ella tampoco podía seguir ignorando el sentimiento que había despertado su corazón por él…

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Eriko buscaba a Taro, y Taro buscaba a Eriko. Ella tenía que decirle que esperaba un hijo. Él tenía que decirle que ya sabía que ella esperaba un hijo. Ambos se encontraron a la salida del estadio. Taro vio primero a Eriko. La vio más hermosa que nunca, aun cuando solo habían dejado de verse por dos meses. Él se quedó parado, esperándola. Ella lo identificó y sonrió, echándose a correr a sus brazos. Taro la recibió y la cargó, al más puro, ridículo, meloso y cursi estilo de las películas románticas. Eriko y Taro se besaron largamente.

- Mi amor, tengo que decirte algo.- murmuró Eriko, cuando se separaron.- Yo…

- Estás embarazada.- Taro sonrió, feliz.- Eso ya lo sé…

- ¿Cómo?

- Genzo me lo dijo.

- Ahhh, maldito de mi hermano… .- gruñó Eriko.- Pero… ¿Qué piensas al respecto?

- ¿Qué pienso de qué?.- gritó Taro, eufórico.- ¡Voy a ser papá, es maravilloso!

- ¿Pero qué va a pasar con tu matrimonio y… ?

- ¿Qué va a pasar? Nada.- respondió Taro.- Solo que Lily y yo nos divorciaremos. Ella se casará con Genzo y tú y yo haremos lo mismo. Lily y yo solo nos casamos por el civil, nunca por la Iglesia.

- Pero creo que Genzo tiene ganas de matarte… .-señaló Eriko.

- Ya no.- sonrió Misaki.- Hablé con él hace rato. Él me confesó que tú esperas un hijo mío y yo le dije que Jazmín es su hija.

- Ya era hora de que lo supiera.- suspiró Eriko, abrazándose de Taro.

Todo parecía que las cosas al fin comenzaban a arreglarse, pero entonces llegó un grupito de personas…

- ¡Taro!.- gritó Ichiro Misaki, enojado.

- ¡Joven Misaki!.- gritó también el señor Yamazaki.

- Ya nos cayó el chahuistle a todos… .- musitó Lily, angustiada.

- Y que lo digas.- gruñó Genzo.

- ¡Taro!.- gritó Ichiro.- ¡Acabo de encontrarme a tu esposa besándose con tu amigo!

- ¡Esto es una ofensa inadmisible!.- gritó el señor Yamazaki.- ¡Este traidor (y señaló a Genzo), engañó a mi hija! ¡Ésa es una ofensa pero es peor que tu esposa haya sido ultrajada de esa manera!

Eriko, Taro, Lily y Genzo pusieron cara de "hello con tu hello".

- ¿Perdón?.- inquirió Taro.- No le entiendo…

- ¡Que debes pagar tu ofensa!.- gritó el señor Yamazaki.- ¡Debes cobrarle a este infeliz de Wakabayashi el que haya besado a tu mujer! ¡Debes golpearlo hasta dejarlo inconsciente!

- No hablará en serio… .- gruñó Genzo.

- No es para tanto.- intervino Lily.- Solo fue un beso.

- ¡Y tú!.- gritó el señor Misaki.- ¿Cómo pudiste engañar a mi hijo?

- Ichiro, deje que le expliquemos.- suplicó Lily.

- ¡Las palabras sobran!.- gritó el señor Yamazaki.- Ahora mismo vas a golpear a Genzo para pagar tu ofensa.

Dicho esto, el señor Yamazaki tomó a Taro de un brazo y a Genzo de otro y comenzó a jalarlos hacia una calle despejada. Eriko y Lily intercambiaron miradas de angustia y corrieron detrás de ellos.

- Señor Yamazaki, creo que esto no es para tanto.- dijo Ichiro.- O sea, hubo una ofensa, sí, pero no por eso ellos tienen que molerse a golpes…

- ¡No diga eso!.- replicó el señor Yamazaki.- ¿Usted no está ofendido por la actitud de su nuera?

- Bueno, sí, pero…

- ¡Nada de peros!.- gritó Yamazaki.- ¡Y ahora quiero que lo golpees, Misaki!

- ¿Pues éste cree que no me voy a defender o qué?.- gruñó Genzo.

- Ay, no… .- musitó Taro.

- ¡Anda!

Taro, muy de a fuerzas, le propinó un golpe tan débil a Genzo en el estómago que no hubiese servido ni para matar a una mosca…

- Eriko golpea más fuerte.- se burló Genzo.

- ¿Quieres que te golpee de a de veras?.- gruñó Taro.

- ¿Qué pasa aquí?.- exclamó en ese entonces Emily Del Valle, quien llegaba junto con Jazmín, sorprendida al ver semejante escena.

- ¡Mamá!.- Lily echó a correr hacia ella.

- ¿Por qué están peleando?.- quiso saber Emily.

- ¡Es que este traidor ha osado besar a su hija!.- exclamó el señor Yamazaki, señalando a Genzo.- ¡Y le he dicho a su yerno que cobre venganza!

- ¿QUÉ?

Se armó un gran alboroto. Eriko y Lily comenzaron a dar explicaciones atolondradas a Emily Del Valle, como si ésta fuera el juez de tan singular problema. Ichiro solo quería saber el por qué Genzo había besado a su nuera y el por qué su hijo estaba tan campante con esto, mientras que el señor Yamazaki insistía en que Taro apaleara a Genzo. La pequeña Jazmín tenía los ojos abiertos como platos.

- A ver, basta ya.- pidió la señora Del Valle, harta ya de tanto alegato.- De uno por uno. Hija, quiero que me expliques qué es lo que pasa.

Lily asintió. Se llevó a su madre aparte a contarle más o menos lo que había pasado. Mientras, el resto hizo una pausa. Cuando Lily terminó de explicarle todo a su madre, ésta les pidió a los señores Yamazaki y Misaki que hablaran con ella un momento.

- ¿Qué pasó?.- preguntó Eriko a Lily, al tiempo que Genzo y Taro se acercaban a ellas.

- Le dije a mamá lo que pasó entre nosotros.- suspiró Lily.- Todo. A ver si ella puede hacer entrar en razón al señor Yamazaki…

- … Y entonces, Taro aceptó casarse con mi hija para evitar un lío con mi esposo.- decía Emily Del Valle.- Pero mi hija aun está enamorada de Genzo y él de ella. Además, está la cuestión de que la gemela de Genzo ama a Taro y éste a ella…

- ¿Por eso estaban besándose?.- inquirió el señor Ichiro.

- Sí. Ya los cuatro habían arreglado sus diferencias e intentaban corregir sus errores.- continuó Emily.

- Perdóname, papá, por no decirte la verdad.- dijo Taro a su padre.- Pero quería proteger a Lily…

- No te preocupes, hijo.- sonrió Ichiro.- Lo que hiciste fue muy noble…

- Genzo, perdóname por dejarme llevar por las apariencias.- dijo el señor Yamazaki, dándole una palmada a Genzo en el hombro.- ¿Y sabes? Me hubiese gustado que fueses mi yerno, pero en las actuales circunstancias te pido que por favor rompas tu compromiso con mi hija…

- Gracias por comprender.- sonrió Genzo.

- ¡UN SEGUNDO!.- gritó Aki, en ese momento.- ¡ME NIEGO! ¡TÚ ERES MI PROMETIDO Y TE VAS A CASAR CONMIGO!

- Perdóname, Aki, pero yo amo a Lily.- dijo Genzo, tratando de calmarla.- Y solo deseo estar con ella y con mi hija…

- ¡SÍ, YA SÉ QUE AMAS A ESTA MUJER!.- Aki escupía las palabras.- ¡SÉ TAMBIÉN QUE POR CULPA DE ELLA ME ENGAÑASTE EN JAPÓN!

- Aki, yo no te engañé.- negó Genzo.- En ese entonces nosotros no éramos nada…

- ¡PERO SABÍAS QUE YO TE AMABA!

- ¡Pero tú sabías que yo solo te veo como una amiga!

- Sí, eso lo sabía.- murmuró Aki, con los ojos llenos de lágrimas.- Lo peor del caso es que por mi dolor de no tenerte cometí la barbaridad de destruir el violín de Lily.

Esta confesión hizo que todos soltaran un grito de sorpresa, excepto Lily, quien gimió del dolor.

- ¿Qué hiciste qué cosa?.- preguntó Genzo, sorprendido y enojado.

- Yo destruí el violín de Lily.- repitió Aki.- Los sorprendí a ella y a ti amándose y mi corazón no lo resistió… Por eso lo hice…

Nadie dijo nada por unos segundos. Después, el señor Yamazaki tomó a su hija por un brazo.

- Hay muchas cosas que debes reflexionar, Aki.- le dijo.- Creo que dejé que tu obsesión por casarte con Genzo llegara muy lejos… Pero todavía podemos corregirla… Genzo, oficialmente queda roto tu compromiso con mi hija. Y señora Misaki… Bueno, Lily… Lamento mucho lo de su violín…

- No se preocupe.- Lily trató de sonreír, pero estaba pálida. Genzo había corrido a abrazarla.- Eso pasó hace tiempo. Fue doloroso, pero alguien me ayudó a superarlo…

- Hasta pronto, señor Yamazaki.- dijo Genzo.- Adiós, Aki…

La muchacha no respondió. Dejó que su padre se la llevara de ahí, mirando a Genzo y a Lily con una profunda tristeza en sus ojos…

- Bueno, pues ahora sí, ya podremos hacer planes de boda.- dijo la señora Del Valle.

- ¡Viva!.- gritó Lily.

- ¡Sí!.- exclamó Eriko.

- ¡Qué líos!.- bufó Ichiro.- Me confundiré con tantas cosas… Taro y Lily se criaron como hermanos y sin embargo son esposos, aunque Lily es como mi hija, de manera que Jazmín pasaría a ser mi nieta y mi sobrina, porque Emily es como mi media hermana, mientras que Genzo y Eriko son gemelos y si él se casa con Lily entonces pasaría a ser mi hijastro…

- Ya párele, que si sigue con eso voy a terminar por ser la mamá de Taro y no me podré casar con él.- se quejó Eriko.

Todos soltaron una carcajada. La pequeña Jazmín seguía sin entender nada, como era de esperarse.

- ¿Qué pasó, mami?.- preguntó.

- Nada, preciosa.- Genzo la cargó y la besó en la frente.- Que a partir de ahora tendrás dos papás.

- Y un hermanito.- añadió Lily.

Todos se quedaron con la boca abierta, sobre todo Genzo.

- Eriko no fue la única que se embarazó ese día que yo estuve en el hospital, ¿sabes?.- Lily rió con calidez.

Genzo abrazó a su futura esposa y a su hija. Al final, las dos terminaron por ser suyas.

Notas:

- Bueno, al fin lo logré…

- Este fic tiene algunas diferencias con la película "Dos tipos de cuidado". En la película, Pedro Malo (Pedro Infante) se enamora de la hermana (no gemela) de Jorge Bueno (Jorge Negrete). Éste, a su vez, se enamora de la prima de Pedro Malo. Un año pasa y Pedro Malo se casó con su prima, dejando a Jorge Bueno y a la hermana hechos un embrollo. La prima de Pedro (y su ahora esposa) tiene una hija. Después de mucho argüende, se descubre que a la prima la violaron y para salvar su honra, Pedro Malo se casa con ella. Jorge Bueno y la hermana se enteran de esto y aceptan en regresar con sus amores, claro que las familias de ambos les hacen un lío… Muchas de las escenas que pasaron en este fic ocurrieron también en la película original.

- En el capítulo pasado, puse que Sho realiza un tiro que tiene el efecto de parecer un dragón chino. El nombre del tiro es Cañón con Retroceso.

- Al principio del fic tenía a Carol Ledesma, personaje de K_ro, en vez de a Débora Cortés como amiga de Lily. Hice el cambio porque deseaba ponerle una pareja a Levin y no podía utilizar a Carol, por eso creé a Deb. Ella y Levin fueron pareja piloto en este fic, quería ver su aceptación por el público.

- Ya por último, hice que en el capítulo anterior el BM ganara el partido por la sencilla razón de que es un mejor equipo que el PSG (tiene más y mejores jugadores estrella). No me parecía justo hacer que el PSG ganara o que quedaran en empate.