Capítulo 18
"Sorpresas del amor..."
La ceremonia de graduación se llevó al cabo muy bien, durante el mes de Julio. Candy estaba orgullosa de Terry. Estaba feliz y triste al mismo tiempo. El fue elegido para dar el discurso, ya que era el mejor de su clase. Estuvo magnífico... Candy se sentía en el séptimo cielo. Luego de la ceremonia, Terry fue con Candy. Su padre tuvo que ir a la graduación, con los hermanos de Terry, incluso fue su madrastra, y la abuela también estaba ahí.
Terry no le había dicho a su padre que quería convertirse en actor. Candy estaba platicando con Rose Anna y Anna Rose... había pasado mucho tiempo... a veces hablaban por teléfono. Junior estaba muy cordial y se mantuvo lejos. Fueron a cenar a un restaurante no muy lejos de la escuela. Ellos no querían hacerles el anuncio durante la cena. Terry hablaría con su padre después. Cuando se fue su familia, él volvió a la escuela con Candy.
Había festividades para el final de año... había justamente un desfile de modas y una cuadrilla de baile, organizada por los estudiantes, en la noche.
Annie estaba encargada del desfile de modas, ella había diseñado los modelos con la ayuda de Archie... El era un verdadero diseñador de "clóset"... y Annie quería que Candy modelara el vestido de novia para cerrar el evento.
- Tú lo hiciste sola todo este tiempo... dijo Candy durante los ensayos... el vestido de novia es hermoso!
- Será perfecto para la modelo también...
- Quieres que lo use? Pero y tú?
- Va muy bien contigo... yo tengo otros vestidos blancos.
- Ok, muchas gracias Annie.
Candy modeló el vestido de novia diseñado por Archie y Annie, con su velo. Fue todo un éxito. Antes de que anocheciera, los alumnos presentaron sus bailes. Después de eso, empezó la fiesta... Candy bailó con Terry, por supuesto. En la segunda etapa, Terry se encontró con Lizzie, quien estaba en las nubes... y Candy se encontró bailando con Neil, quien también se sentía en las nubes. Lizzie no perdió ocasión para provocar a Terry.
- Realmente quieres romper el récord de abstinencia?
- Lizzie, no empieces...
- En verdad vale tanto? La amas tanto?
- No vamos a hablar de eso... según los rumores, tú no necesitas nada más.
- Eso es porque tú me terminaste... Terry, te amo, fuiste el mejor...
- No te voy a escuchar, Lizzie.
Terry volteó la cara y se alegró cuando el baile terminó. El miró a Candy y caminó hacia ella.
- No fue muy duro escuchar las tentativas de seducción de Lizzie? Bromeó.
- Fue una tortura!
- Candy rompió a carcajadas...
- Pecosa, ven conmigo...
- Adónde?
- Ya verás, es una sorpresa...
Terry la llevó a la capilla.
- Terry, por qué me estás llevando al templo?
- Qué? No quieres rezar?
- Sí, como no... seguramente por eso haces tanto ruido en misa.
- Es para sacar de quicio a las monjas... pero esta noche es para hacer una promesa enfrente de Dios. Tu vestido de novia va "a doc" con la situación... Nos vamos a casar en nuestros corazones.
Candy estaba intrigada... qué quería decir? Entraron a la capilla, la cual estaba vacía y Terry la llevó hasta el altar.
- Candy, mi amor... Estoy aquí contigo para hacerte la promesa solemne ante Dios, de que te voy a buscar un día, para casarme contigo. Estás frente al altar de Dios... y te voy a dar mis votos. Estaremos casados en nuestro corazón.
Candy se quedó sin habla! Decir sus votos frente al altar? Terry se quería casar con ella de corazón?
- La primera vez que te vi, me enamoré de ti... sabía que un día me casaría contigo. Eres el sol de mi vida, y mi amor por ti, sigue creciendo. Prometo amarte y cuidarte hasta que la muerte nos separe. Te amo Candy.
Candy tenía lágrimas en sus ojos. Era su turno... no había preparado nada, pero habló desde el fondo de su corazón y dijo:
- La primera vez que te vi... tocaste mi corazón... fuiste la pieza que hacía falta en mi vida. Cada vez que te veo, te amo más que el día anterior y menos que mañana. Te prometo amarte y cuidarte hasta que la muerte nos separe. Te amo Terry.
Sellaron su amor con un beso, salieron de la capilla y regresaron a la fiesta. A Terry lo llamaron de la dirección; tenía un mensaje de su mamá, para reunirse con ella en algún lugar. El le llamó a Candy y le dijo.
- Tengo que ir a ver a mi mamá al hotel Hillton, Julieta. Pero voy a pasar a donde está mi papá para dejar algunas de mis cosas. Vendré a verte después.
- Ok Romeo, te veo luego.
Terry fue con su padre y dejó sus cosas... Le dijo a su papá que iba a ver a su mamá al hotel y que volvería a la escuela después. Fue al hotel y preguntó por la habitación de Eleonor Baker. Le dieron la tarjeta para entrar al cuarto, la cual era la Suite presidencial. Abrió la puerta y entró.
- Mamá?
Las cortinas estaban cerradas, había veladoras encendidas por todos lados. Había pétalos de rosa desde la entrada, hasta la cama presidencial. También había música suave y romántica. Era un ambiente romántico! Su mamá cometería un error? Se reuniría con un amante? Ohhh tal vez se equivocó de habitación!
La puerta del baño se abrió y salió una mujer joven de cabello largo; usaba un negligé en rosa. Terry no alcanzaba a ver muy bien su cara, ya que estaba lejos... sólo había luces de las veladoras, lo cual no iluminaba mucho. El se acercó... y cuál fue su sorpresa al ver...
- Candy!
Ella se acercó sonriendo.
- Sr. Grandchester, pensé que nunca llegaría, dijo con una sensual voz.
- Bueno Srita. Andrew, usted está llena de sorpresas.. dijo él sonriendo... bailamos?
- Será un placer, Sr. Grandchester.
Empezaron a bailar abrazándose lo más cerca posible. Se miraban a los ojos con mucho amor. El resto del mundo no existía... eran sólo dos personas en el mundo. Terry finalmente besó sus labios hambrienta y apasionadamente. Candy respondió con la misma pasión y le quitó el saco, desabrochando los botones de la camisa... el pantalón... él le quitó el negligé... De repente se encontraban en la suite, en la gran cama. Continuaron besándose y acariciándose... Terry besó su pecho con sus labios, al tiempo que lo acariciaba con su lengua. Ella cerró sus ojos y acariciaba su espalda, su pecho y debajo de su cintura. El le comenzó a dar besos franceses. Ella sintió el deseo de Terry e instintivamente se sintió lista para él. El entró suave, muy suavemente y él sintió una punzada en ella de dolor al tocar su virginidad. El himen se había ido para siempre y con él el dolor para dar lugar a que creciera un nuevo placer, el que aumentaba y aumentaba, como el movimiento regular de ir y venir que estaba cada vez más rápido. La sensación de placer se estaba tornando más fuerte y estaba haciendo que ella sintiera su cabeza girar. Ella se movía al ritmo de él, lo que incrementaba la magnitud del placer... hasta que gritaron a la hora de llegar al orgasmo...
Estaban abrazados, sus ojos cerrados... todavía cuando sentían que se habían intoxicado de placer.
- Candy, te amo...
- Te amo Terry, te amo demasiado.. te voy a extrañar, mi amor.
- Lo sé mi amor. Esta fue realmente una muy linda sorpresa... Me acabas de hacer muy feliz.
- Tú también... estoy contenta de que hayas sido el primero... dijo ella parándose para apagar las velas.
Terry se paró para ayudarle con las veladoras.
- Yo soy muy feliz de ser el primero... No sabía que estabas pensándolo.
- Es por eso que fue sorpresa.
- Por un momento, pensé que estaba en el lugar de mi mamá y su novio.
- Ehhh... perdón... Me alegra que eso no te haya puesto de malas... haciendo nuestros votos hace rato... estamos casados de corazón.
- Tu sorpresa fue pura coincidencia... otra prueba de que estamos conectados... en el mismo canal.
- Eso ya lo sabíamos Romeo.
- Será muy duro dejarte, mi amor.
- No hay que pensar en eso ahora. La habitación está pagada hasta mañana.
- Pues vamos a aprovechar, dijo él besándola en los labios.
Pasaron su primer noche de pasión haciéndose felices mutuamente, hasta que amaneció.
Annie estaba en su cuarto platicando con Patty y Tanisha, después de la fiesta.
- Saben dónde está Candy? Preguntó Patty.
- Yo creo que fue a celebrar con Terry, dijo Annie.
- Adónde? Con Terry? Y va a regresar? Preguntó Tanisha.
- Ehhh, no lo creo, dijo Annie.
- Qué quieres decir? Preguntó Patty.
- Que finalmente va a pasar la noche con Terry! Gritó Tanisha.
- Cállate! Dijo Annie, te pueden escuchar.
Pero ya era muy tarde... Lizzie y Eliza iban pasando y escucharon. Lizzie estaba furiosa con Candy. Ella quería hacer algo para castigarla... no quería estar en la misma escuela que Candy. Terry no iba a estar el próximo año, pero Candy le recordaría todo el tiempo que había perdido al chico que amaba, por su culpa. Era ridículo, pero ella pensaba que podría regresar con Terry usando su cuerpo. Como Candy era casta! Pero ahora... maldita sea!
Candy despertó en los brazos de Terry... se fue a dar un baño antes de que él despertara. El baño tenía un gran vestidor y había regaderas separadas. Se lavó los dientes y se metió a la regadera para comenzar a bañarse. Empezó a lavarse el cabello... se enjabonó y trataba de alcanzar su espalda, cuando sintió que una mano tomó la esponja y comenzó a tallarla.
- Gracias Romeo, dijo Candy... déjame ayudarte también.
Candy comenzó a tallar su espalda y el resto de su cuerpo... sin dejar de mirarse el uno al otro. Estaban bajo el agua enjabonando sus cuerpos y mirándose! Sus labios se unieron en un beso, bajo el agua caliente de la regadera. Terry la cargó... ella tenía su pierna colgada en su cintura. El la penetró suavemente y se colgó de la puerta corrediza de la regadera. El movimiento continuó debajo del agua, hasta que alcanzaron el séptimo cielo.
Después, en el cuarto, mientras se vestían, Candy le dijo:
- Mi amor... sabes? Tú realmente recibiste un mensaje de tu mamá.
- Uno de verdad?
- Sí, tienes que reunirte con ella hoy.
- Oh... aquí?
- Sí... en otro cuarto, por supuesto... vamos a desayunar.
- Aquí en el cuarto...
- Claro, no se me antoja tener gente a nuestro alrededor...
Candy regresó a la escuela al principio de la tarde, mientras Terry fue a ver a su mamá. Candy estaba en su cuarto, checando su correo, cuando Annie tocó la puerta.
- Pasa Annie, dijo sonriendo.
- Estás bien?
- Sí...
- Y?
- Y qué?
- Andale Candy, ya sabes de qué estoy hablando.
Candy se puso roja...
- Annie...
- Te apena hablar de esto conmigo? Yo lo organicé todo contigo... además te conté mi experiencia! Soy tu hermana.
- Ok, hermanita...
Le contó su noche de pasión con Terry.
- Lo vas a extrañar, verdad?
- Sí, no sé que cómo voy a vivir sin él... Annie, lo amo tanto! Dijo con lágrimas en los ojos.
- Dónde está él ahora?
- Fue a ver a su mamá. No quiero ser egoísta y retenerlo truncando sus sueños.
- Tienes que ser optimista... Se convertirá en un gran actor y vendrá por ti.
- Y vamos a montar un caballo blanco en una puesta de sol? Dijo sonriendo.
- Sí... vamos a rezar para que lo logre... y así puedan estar juntos.
- Gracias Annie.
Terry estaba con su madre en la suite.
- Estoy muy orgullosa de ti mi amor, siento haber llegado tarde. Me perdí la ceremonia.
- Lo importante es que estás aquí mamá... estoy feliz de verte.
- Yo también.
Además hubieras robado escena... Eleonor Baker, la gran actriz... todo mundo olvidaría la graduación. Los dos rompieron a carcajadas.
- Cómo está Candy? Preguntó.
- Bien... está triste por verme partir.
- No estarás tan lejos... Oxford está cerca de Londres.
Terry no dijo nada. No quería decirle que iba a Hollywood. Ella habría estado muy feliz y probablemente habría querido ayudarlo. Pero no quería ser el "hijo de mami", cuando él mismo tendría que probarse que era algo más. Por ser el hijo de una famosa actriz, la gente iba a pensar que por eso logró ser actor. Se la iba a jugar...
Luego de que su madre dejó Londres, Terry fue a donde estaba su padre para soltarle "la bomba"... por supuesto, ardió el infierno.
Terry regresó muy tarde ese día... Tocó en la ventana de Candy. Ella se paró para abrir.
- Buenas noches Terry...
- Buenas noches pecosa...
El la abrazó. Se tenía que ir. Ya había vaciado su cuarto, se había confrontado con su padre, quien le quitó el apoyo económico, como él se lo esperaba. No le había dicho a su madre de sus planes, porque no quería que lo ayudara. Ella había regresado a América sin saber sobre los planes de su hijo. El llevó a Candy a la cama... ella tenía su cabeza en el pecho de Terry.
- Candy me voy mañana a Los Angeles... Mi padre me quitó su apoyo económico... y eso es todo... mis cuentas bancarias están congeladas, mi celular desconectado, mi computadora, mi correo... todo se fue. Todo lo que tengo, es mi pasaporte, mi boleto para Los Angeles y muy poquito dinero. No quiero que mi mamá me ayude. Quiero hacerlo por mi mismo, con mi talento, no como el hijo de Eleonor Baker. Si no lo logro, regresaré con mi padre para hacerme cargo de los negocios de la familia. No podré contactarte por un tiempo... te escribiré por correo normal. Tú vas a ir a Escocia para la escuela?
- Sí...
- Las madres te mandarán tus cartas... Candy te amé desde el primer momento en que posé mis ojos en ti. Yo sé que tú también me amas. Quiero vivir mi vida contigo. Pero aún estás en la escuela. No te puedo pedir que vengas conmigo, pero te voy a hacer una promesa, cuando tenga un buen descanso y sea famoso, vendré para casarnos y pasar el resto de mi vida contigo. Es una promesa de matrimonio. Si no lo logro como actor, serás la esposa de un hombre Inglés de negocios.
- Terry, dijo ella con lágrimas en los ojos. Te amo. Te voy a extrañar. Te esperaré. Voy a esperar tu carta con impaciencia. Voy a esperar hasta que vengas por mi... si lo logras o regresas con tu padre... te amo. Confío en ti... eres muy talentoso y lo vas a lograr. Estoy segura.
- Gracias mi amor.
Terry la abrazó fuerte y ella se abandonó en los brazos del hombre que amaba, por última vez... Candy lo llevó al aeropuerto al siguiente día y la separación fue muy dolorosa. Ella lloraba y trataba de ocultar sus lágrimas. El estaba dejando a la chica que amaba más que a nada, para seguir su sueño. El volvería por ella tan pronto como lo lograra. Tenían que ser pacientes. El la besó por última vez antes de abordar el avión.
- Te amo, nunca olvides eso.
- Te amo... buena suerte mi amor.
Candy vio el avión alejarse, con el corazón roto en mil pedazos. Volvió a la escuela y se encerró en su cuarto para llorar. Annie, Patty y Tanisha fueron a verla para consolarla y alentarla. Candy llamó a Melissa a Rumania, quien le dio ánimos.
- No te preocupes chiquita, estás destinada para estar con Terry... es tu alma gemela, estoy segura de eso, dijo Melissa.
- Realmente lo piensas?
- Los he visto juntos. Me recuerdan a Phillipe y a mi... son todavía muy jóvenes. Tienes toda la vida por delante.
- Tienes razón, voy a terminar la escuela y esperar a Terry, dijo Candy. Cómo están tú y tu panza?
- Va creciendo bien, dijo Melissa riendo.
- Y Carissa y los demás?
- Están bien, gracias... Carissa me dice que está pidiéndole a Dios para que tu más grande deseo se cumpla.
- Es muy dulce... Dile que gracias... Cómo está Phillipe?
- Está bien... emocionado por el bebé.
- Qué bueno... Gracias Melissa, por animarme... realmente lo necesitaba.
- De nada, Candy. Ahora descansa... todo estará bien.
- Yo debería ser la que te diga que descanses Melissa. Cuida al bebé que está dentro de ti. Te extraño.
- Yo también te extraño Candy, bye...
- Nos vemos Melissa.
Lizzie se enteró de que Terry antes de partir, pasó su última noche con Candy. Estaba furiosa aún con Candy, por robarle al mejor novio que había tenido. Tenía miedo de hacer algo cuando Terry estaba aún ahí. El todavía ponía las reglas en la escuela, y Candy era "La Reina". Ahora, el Rey se había ido... tenía que tirar a la Reina. No importaba que sus propios celos la hicieran perder a Terry, pero no Candy. Lizzie decidió con Eliza ir al cuarto de Candy, plantar algo de drogas y decirle a la Madre Superiora. Pero Eliza no pudo callarse enfrente de su hermano. Este último, corrió al cuarto de Candy, tocó la puerta, Candy abrió y le sorprendió verlo.
- Neil?
- No tengo tiempo de explicarte, puedo entrar?
- Pero, qué está pasando?
- Las hermanas vienen a hacer una inspección...
- Y?
- Van a encontrar drogas en tu recámara.
- QUE?
- Mi hermana y Lizzie...
- Dios mío! Pasa, rápido! Sabes dónde pusieron la droga?
- No, no tuve tiempo de preguntar, dijo mirando a todos lados.
Candy estaba buscando por todos lados en su cuarto, también. Los roperos, el baño... Neil finalmente la encontró debajo del lavamanos. Pero ya era muy tarde, las hermanas habían entrado al cuarto y lo encontraron con las manos en la masa.
- Hermanas, dijo Neil sonriendo nervioso, no es lo que piensan.
- Sr. Reagan, si esa es droga en sus manos y usted trata de tirarla, entonces qué es lo que pensamos?...
- Pero hermana...
- Silencio... Lo encontramos con droga en sus manos en el cuarto de la Srita. Andrew.
- Es mía, dijo Neil, Candy no tiene nada que ver.
Candy no podía creer lo que escuchaba! Neil Reagan se estaba echando la culpa por ella? Eliza tampoco podía creer lo que oía.
- Neil qué estás haciendo? Vas a arruinarlo todo! Cállate, dijo Eliza.
- Sr. Reagan, las drogas son suyas?
- Sí, hermana.
- Entonces no tengo otra opción que contactar a sus padres. Está usted expulsado desde ahora.
Neil expulsado por ella? No, no dejaría que sucediera eso.
- Hermana, dijo Candy... él me está protegiendo... las drogas son mías.
- Candy, dijo Neil... cállate, yo me estoy haciendo cargo.
- No... no dejaré que te eches la culpa por mi...
- No necesito ninguna explicación, dijo la reverenda madre, los dos están expulsados! Y no van a ir a Escocia, obviamente... Hay cero tolerancia para las drogas en esta escuela.
