Capítulo 25
"El corazón roto en mil pedazos..."
Terry estaba en Hollywood, pocas semanas después. Susana, como era de esperarse, fue a verlo con noticias.
- Estoy embarazada Terry, dijo.
- Y por qué crees que no me sorprende? Preguntó Terry.
- Estás insinuando que lo hice a propósito? Preguntó Susana.
- Claro que lo hiciste a propósito! Gritó enojado.
- Pero te acostaste conmigo...
- Tú me drogaste, Susana.
- Qué? Pero...
- Tengo los exámenes que lo prueban...
- Susana se quedó callada. No se esperaba que Terry descubriera que fue drogado...
- "Pudo ser solamente su novata doctora y novia, quien ahora es su prometida... Candy! Maldita sea!" pensó...
- Ahora estoy embarazada...
- Susana, tan urgida estabas?
- Te amo, Terry... con todo mi corazón.
- Y yo amo a Candy, desde la escuela...
- Nos vas a abandonar... al bebé y a mí?
La mirada de Terry era de desesperación. Qué dilema! Quería casarse con Candy... y todo por una noche involuntaria... que había tenido frutos indeseables...
- Susana, déjame pensarlo...
- Pensar qué?
- Susana!
- Ok, ya me voy...
Le llamó a Candy. Estaba con sus papás.
- Hola? Dijo con voz preocupada...
- Candy...
Terry la estaba llamando por su nombre, la cual no era una buena señal. Las noticias no eran buenas...
- Terry, finalmente dijo ella...
- Sí...
- Embarazada?
- Sí...
- Quieres que vaya?
- Me encantaría.
- Ok cariño, voy a ir...
Melissa la escuchó. Candy le contó sobre el incidente.
- Te vas a ir?
- Mamá, dijo... está embarazada...
- Oh... tienes suerte de tener un hombre tan honesto.
- No te molesta?
- Claro que no cariño... es tu felicidad... Ve y sálvala...
- Gracias mami... te amo.
- Te amo Candy...
Se despidió de los pequeños y su papá, quien acababa de llegar.
- Candy, a dónde vas?
- A Los Angeles...
- Oh... te quieren robar tu felicidad?
- Sí...
- Vamos cariño... que tengas buena suerte. Te amo.
- Gracias papi... yo también te amo.
Ni siquiera fue a su casa por sus cosas... se fue directamente al aeropuerto para comprar un boleto para el siguiente vuelo a Los Angeles... Llegó pocas horas después. Le había llamado a Terry desde el avión. El la estaba esperando en el aeropuerto. Terry llevaba un sombrero y lentes.
- Terry? Ah, de incógnito? Ok, Romeo.
- Vámonos de aquí... dónde está tu equipaje?
- Vine sin nada... estaba con mis papás.
- Perfecto... vámonos de aquí rápido...
La gente de alrededor los estaba viendo. Terry tomó su mano y la llevó corriendo hacia la salida. Una vez afuera, tomaron un taxi. Terry le dio su dirección y el carro dejó el aeropuerto. Cuando estaban en camino, él se acercó a Candy para besarla.
- Cómo estás? Preguntó luego de un rato.
- Tenerte aquí me hace sentir mejor.
- No hay mejor lugar en el que yo prefiriera estar, dijo ella abrazándose contra él.
Cuando llegaron frente al departamento de Terry, encontraron a Esther, su representante y Robert Hathaway, esperando.
- Robert, Esther, dijo Terry.
- Hola, dijo Candy.
- Hola, contestaron.
- Pasen, por favor... dijo Terry.
Terry estaba un poco decepcionado de tener compañía. Quería estar a solas con Candy y mostrarle el departamento. Se sentaron en la sala.
- Terry, dijo Esther, estamos aquí por el asunto de Susana.
- Sí, dijo Robert, qué intentas hacer?
- Intento casarme con Candy...
- Pero Terry, dijo Hathaway.
- Robert, dijo Terry, pude haber estado casado con Candy desde la escuela, pero quería ser capaz de hacerme cargo de ella.
- Pero Susana... dijo Esther.
- Debiste haber pensado eso antes de llevarla a tu cama, dijo Hathaway.
- Ella me drogó, Robert.
- Qué? Dijeron Hathaway y Esther al mismo tiempo...
- Lo puedo probar.
- Susana es una mocosa estúpida, que te quiere tomar como un juguete... sus padres tienen muchas influencias... te pueden destruir Terry, dijo Esther... tienes que hacer algo, tienes que hacerte cargo de ella.
- Hacerme cargo de ella? Cómo? Mandarle un cheque cada mes?
- No... tienes que estar con ella, temporalmente, hasta que nazca el bebé... dijo Esther.
- Ustedes parecen no entender lo que les estoy diciendo. Me voy a casar con Candy! Dijo Terry en voz alta.
- Te estamos pidiendo que esperes un poco, dijo Esther.
- Esperar a qué? Preguntó Candy, quien ya no pudo guardar silencio... y cómo?
- Tienen que hacer creer que rompieron, así Terry podría hacerse cargo de Susana por un rato, ella tiene el bebé y entonces... dijo Esther.
- Entonces la abandono para regresar con Candy? Dijo Terry.
- Sí... dijo Esther.
- Abandonarla ahora no es posible, por la publicidad y por sus padres... dijo Hathaway.
- Pero abandonarla después es mejor... eso es lo que piensas? Dijo Terry irónicamente... aparentar un rompimiento... podría seguir viendo a Candy?
- NO, dijo Esther... Susana y sus padres tienen que creer que eres sincero, que tú realmente terminaste con Candy. Ellos no deben sospechar nada...
- NO, dijo Terry, deben estar bromeando! De ninguna manera!
- Desafortunadamente... dijo Hathaway...
- Entonces no es un supuesto... es un verdadero rompimiento! Dijo Terry.
Candy se puso pálida como una hoja de papel. Terry se acercó y la tomó en sus brazos. Comenzaron a rodar lágrimas por las mejillas de Candy.
- No le puedes decir nada a nadie, dijo Hathaway. Candy, eres la hija de Melissa Grant... No puedes decirle nada a tu madre.
- Sí, ni a tus amigos ni a tu familia... todos tienen que creer que rompieron para siempre... dijo Esther.
Esther y Robert los estaban viendo. El amor de Candy y Terry era muy intenso... casi se podía palpar. Les rompía el corazón hacerles lo que les estaban haciendo. Pero Susana y sus padres podían causar mucho daño, no sólo a Terry sino también a la compañía de Esther y la producción de Hathaway. Terry llevó a Candy a su recámara, la cual estaba en el segundo piso. Candy estaba llorando como una Magdalena. Tenía que terminar con Terry!
- Candy, dijo Terry... necesito tu opinión... qué debo hacer?
- Terry, dijo ella sollozando... oh Terry, te amo... pero no te puedo pedir que dejes todo por mí... acabarías reclamándome. Yo sé que no pasaste la noche con ella a propósito, pero el resultado es el mismo. Tienes que tomar tu responsabilidad y hacerte cargo de Susana y el bebé.
- Candy, yo estoy listo para dejar todo por ti...
- Pero ella aún estará embarazada... por qué dejar todo por amor? Susana y sus padres pueden destruirte; no puedes dejar que hagan eso. Y no serías el hombre que amo si no tomaras tus responsabilidades por tus actos... Hay un bebé inocente, que no pidió venir a este mundo...
- Pero no vernos más...
- Tienes razón "supuesto" es sólo una forma de decirlo... tenemos que romper realmente... Terry, toma las riendas de la situación.
- Me estás pidiendo que me quede con Susana y el bebé?
- Sí...
- Candy, te amo... Eres a la única que quiero. Vine aquí por ti...
- Pero también viniste aquí para hacer tu sueño realidad. Eres un maravilloso actor. Naciste para ser actor.
- Pero...
- Terry, sabes que esto es lo correcto, piensa en el bebé... él no pidió nada a nadie... el bebé necesita a sus dos padres. Tú y yo sabemos lo que es vivir sin padres... Eso quieres para tu niño?
Hubo un pesado silencio. Terry estaba completamente destruido. No quería romper con Candy. Era la mujer que amaba desde la primera vez que la vio. Hollywood convirtió su sueño en realidad... era estar con Candy y hacer lo que más le gustaba en el mundo. Cayó en la diabólica trampa de Susana! Qué esperaba? Que se enamorara de ella a lo largo del camino? Nunca! Su corazón pertenecía a Candy para siempre. Pero el bebé...
- Lo voy a hacer por el bebé... Candy, te amo... les voy a decir a Esther y Hathaway que estamos de acuerdo, dijo con una voz de desconcierto y tristeza, pero después voy a dejarla para volver contigo... te voy a pedir que me esperes, Candy. Sé que no tengo derecho a pedirte eso, pero por favor mi amor... espérame... hasta que arregle esta horrible situación... todavía me quiero casar contigo.
- Y qué tal si te obligan a casarte con Susana?
- Candy, ellos me pueden forzar a hacerme cargo de Susana por la publicidad, pero nunca, y estoy diciendo NUNCA podrán forzarme a casarme con ella... me quiero casar contigo, y sólo contigo. Probablemente tendrás muchos pretendientes y a lo mejor te gustan un poco... pero Candy, te lo suplico, espérame mi amor... Iré por ti y nos casaremos en seguida y no daremos lugar a más trampas, nunca más. Pensemos que tenemos todo el tiempo del mundo... Entonces mi amor... me vas a esperar?
Candy guardó silencio por un momento. Esperar a Terry? El le iba a decir a todo el mundo oficialmente que estaba con Susana y que iban a tener un bebé. Eso la lastimaba mucho, pero Terry... Lo que la lastimaba más, era pensar en no estar con él para nada. La solución era simple, lo dejaría hacerse cargo de Susana y entonces, el volvería con ella, como lo prometió... Así que...
- Ok Terry, te esperaré. Tan doloroso es el pensar en que nos vamos a separar, como el pensar que ya no viviré contigo... eso es peor. Así que sí... Te esperaré mi amor... Encárgate de la situación y regresa conmigo pronto.
- Gracias Candy, me das el valor para hacer algo que no tenía intención de hacer. Pero el pensar en que vamos a estar juntos al final, me da el coraje que necesito. Gracias mi amor.
Terry salió del cuarto. Candy fue al baño para refrescarse. Su corazón estaba hecho pedazos. Tenía que terminar con Terry, para salvar su reputación y su carrera en Hollywood... pero a qué precio! Su corazón le dolía, le dolía mucho! Terry regresó al cuarto y encontró a Candy en la cama. Ella se paró.
- Ya se fueron? Preguntó.
- Sí, susurró Terry.
- Me tengo que ir ahora, dijo ella con voz entrecortada.
- Te llevo al aeropuerto.
- No. La prensa puede estar ahí viendo nuestra despedida.
- Candy!
Ella caminó hacia la puerta, y comenzó a bajar las escaleras. Terry la alcanzó y la sostuvo por la cintura, por atrás. El estaba detrás de ella y sentía su cabello en su cara y sus labios en su cuello. No pudo evitar que las lágrimas rodaran por sus mejillas.
- "Terry está llorando", pensó Candy.
- Candy, no te vayas...
- Me tengo que ir Terry, no hagas esto más difícil de lo que ya es...
- Espera... déjame amarte por última vez...
- Terry...
- Por favor mi amor, déjame amarte... déjame sentir tu cuerpo contra el mío, mi amor, por favor, no digas que no. Déjame demostrártelo una vez más.
- Oh Terry, te amo!
Candy volteó y sus labios se unieron. El la llevó cargando a su cuarto, se quitaron la ropa y se encontraron en la cama. Terry le hizo el amor suavemente, tiernamente, intensamente y apasionadamente. Ella se entregó a él por última vez antes de su separación. Ellos sabían que su separación "temporal" podría ser una ilusión. Susana iba a querer más y usaría a sus padres para obtenerlo. Pero Terry le había prometido no dejarse manipular para casarse con Susana... La nube de la tristeza que colgaba sobre su felicidad, aún estaba ahí... pero había detrás un sol que llegó por un momento, mientras los dos amantes consumaban su pasión por última vez. Todos sus problemas se fueron, por un rato. Eran uno solo... estaban hechos el uno para el otro y la crueldad de la vida los estaba separando. El universo ya no iba a ser el mismo, hasta que esos dos amantes volvieran a estar juntos.
Hicieron el amor apasionadamente durante toda la noche... sin poder parar. Finalmente, al amanecer, Candy se despertó sin hacer ruido, se vistió y salió del departamento antes de que Terry despertara.
Regresó a Chicago y fue directamente al hospital. Tomó un baño y se cambió para comenzar con su turno. Había llorado durante todo el viaje. Tenía que aguantarse delante de sus compañeras. La noticia sobre su rompimiento con Terry iba a ocupar la página principal de todos los periódicos dentro de pocos días. Pero no sabía si les iba a decir a sus amigos o iba a dejar que se enteraran por la prensa.
Terry despertó y encontró el espacio al lado de él vacío. Sintió que una parte de él había desaparecido con Candy, su amor, su alma gemela, su esposa de corazón. Iba a necesitar mucha fuerza y coraje para sobrepasar esa sórdida situación. Tuvo que colgar una llamada, con todas las fuerzas del mundo para no tomar el primer vuelo a Chicago, reunirse con ella y mandar al resto del mundo al infierno... Pero como decía Candy, Susana aún estaba embarazada... tenía que tomar las riendas de la situación, del bebé, un inocente que no le pidió nada a nadie... su bebé! El pensó que iba a tener su primer bebé con Candy... no con una mujer con la que pasó una noche que ni siquiera recordaba! Una mujer a la que nunca miró, porque estaba cegado por el amor de su pecosa. Tomaron la decisión correcta? Separarse, arreglar la situación y reunirse? Debió haber tomado el riesgo de y dejar todo, incluyendo su carrera? Candy quería que continuara siendo actor... si tenía que sacrificarse, al menos haría lo que ama, aunque no tuviera a la mujer que lo abrigaba. Pero la tendría después... Era aún así doloroso... Vivir sin Candy... ya lo había hecho por 3 años y fue un infierno... La acababa de encontrar de nuevo y la tenía que perder otra vez? Temporalmente... Así que no podía perder de vista su meta... estar con Candy otra vez. Iba a vivir la separación, la compañía de una mujer a la que despreciaba, sólo para tener a Candy al final. Ella se sacrificó, para que así él pudiera continuar viviendo su sueño, actuando. Acababa de obtener su primer protagónico y ella no dejaría que Susana lo arruinara. No podemos hacer un omelette sin romper un solo huevo... pero su corazón estaba como el de Candy, roto en mil pedazos. Era la hora...
Se levantó de la cama, tomó un baño, se vistió y trató de comer algo... llegó su asistente, su nombre era Hunter.
- Buenos días Terry...
- Hunter.
- No estás de buen humor?
- Hunter, Susana dijo que está embarazada...
- Oh...
- Así que tuve que romper con mi prometida anoche...
- Lo siento... Terry, yo sé lo mucho que la amas.
- Gracias. Cancela todas mis citas y llama a Susana, dile que la quiero ver.
- Ok, Terry.
El no podía decirle a nadie la verdad, para evitar los ataques de la prensa. Pensó en su familia, su madre, sus hermanas... iban a estar destrozadas al enterarse de que terminó con Candy... Tenía que hablar con ellas, pero no tenía el coraje y las fuerzas para darles la noticia... La prensa se encargaría de eso. Una de las extrañas ventajas de ser famoso, era que puedes dar las novedades a tus seres queridos y el mundo entero, por su puesto, sin tener que verles la cara. Las repercusiones... estaba listo para enfrentarlas... iba a mostrar su talento como actor al resto del mundo, pero era por Candy.
Susana llegó a su departamento en la tarde. Terry tenía ganas de ahorcarla, pero pudo controlarse y mantenerse en calma. El bebé, piensa en el bebé.
- Susana... cómo estás?
- Sin contar las náuseas matutinas, estoy bien...
- Cuándo es tu próxima cita con el doctor?
- Esta tarde...
- Me gustaría ir contigo...
- Conmigo? Como el padre del bebé?
- Tú dijiste que yo era el padre, o no? Quiero participar lo más que pueda... quiero ir contigo al doctor y asegurarme que te alimentes bien.
- Te vas a asegurar de eso de lejos?
- No... vas a venir a vivir conmigo...
- Contigo?
- Sí, en el cuarto de huéspedes...
- Pero...
- Me gusta tener espacio en mi cama, Susana...
- Quieres decir que no quieres estar a mi lado por culpa de Candy!
- Susana... Terminé con Candy. Luego de la historia del bebé, ella no quiere tener nada que ver conmigo... y tiene razón, quién querría a un hombre que embaraza a otra mujer?
- Pero, por qué el cuarto de invitados? Quiero dormir a tu lado... quiero pasar mis noches de pasión, como la primera...
- La primera? No la recuerdo... bueno, tú tienes suficientes recuerdos que alcanzan para los dos y eso te mantendrá ocupada. Me voy a encargar de ti y del bebé, eso es todo.
- Pero Terry, yo te amo demasiado... llevo a tu bebé en mi vientre.
- Y esa es la única razón por la que hasta te hablo. El bebé.
- Pero, mis padres...
- Tus padres verán que me estoy haciendo cargo de ti... no es suficiente? Tómalo o déjalo Susana... O te vienes a vivir conmigo o te regresas con tus papás y que venga lo que venga!
Terry sabía que se estaba engañando, pero Susana estaba obsesionada con él y Terry esperaba que aceptara la situación sin hacer muchas preguntas, que preferiría tenerlo en el mismo departamento que ella.
Susana lo pensó por un minuto. El terminó con Candy, ella tenía el campo libre... Así que si ella podría vivir con Terry bajo el mismo techo, iba a hacer todo lo posible para seducirlo. El hombre que pudiera resistirse a sus encantos, aún no había nacido, pensaba... Terrence Grandchester, ella lo tendría de nuevo, así él estuviera dispuesto o no.
- Ok Terry, vendré a vivir contigo. Será fácil para los ensayos...
- Ensayos? Preguntó sorprendido.
- Sí... ah, tú no sabes... conseguí el papel de Julieta... entonces, mi Romeo, seremos la pareja perfecta, tanto en la pantalla grande, como en casa... con el bebé!
Susana es Julieta? No solo tendría que soportar su presencia en casa, sino también en el trabajo? No... el destino no podía ser tan cruel con él! Pero tenía que aguantarse y fingir alegría.
- Súper! Eres una excelente actriz Susana. Serás la Julieta perfecta... vas a ir por tus cosas?
- No, voy a llamar para que me las traigan, quiero quedarme aquí contigo, para esperar la cita con el doctor.
- Voy a hacer una rueda de prensa anunciando mi rompimiento con Candy... y en una semana, anunciaremos nuestro bebé y nuestra... pareja...
- Si fuera por mí, les daría la noticia ahora mismo! Pero está bien, vamos a hacerlo como dices. Oh Terry, gracias! Me acabas de hacer muy feliz!
Susana brincó a su cuello y lo abrazó fuerte. Tenía casi todo lo que quería... no tenía a Terry aún, pero eso vendría. Terry sonrió y la abrazó pensando que quería estrangularla. Hunter iba pasando por ahí y los vio. Su jefe y Susana hacían una linda pareja.