Sí, otra vez un poco tarde, pero espero que sea de su agrado. Ya saben, lean y dejen su opinión, me es muy importante.
Dedicatoria: A Jahir-chan (tú ya sabrás, Jahir xD)
Caricia de un pétalo
Capítulo 3
-
Me sentía mal. Después de ese agotador día mi cabeza era una confusión, y me di cuenta de que ahora no podía dejar de pensar en él, o más que en las veces anteriores. Todo esto era "raro". Es decir, pensar así sobre... . Es ilógico! Ni en mis más extraños sueños hubiera podido pensar de aquella manera... Pero igual, no había manera de escapar ni de pensar en ello, lo supe desde ese día, ese día... En que no me comporté normal, en que ya lo trataba "diferente" y no podía dejar de mirarlo –claro, a escondidas- y si es que era capaz de sentirme, me hacía el sonso y miraba hacia otra parte, todo nervioso.
A partir de ahí, me puse a pensar en las posibilidades del extraño "cariño" que empezaba a surgir en mí, y de lo mucho que me consideraba que era un completo loco e idiota...
Todos iban a la misma dirección, yo estaba siguiendo a Botan, y ella me estaba guiando a mi. Al principio pensé que era una alegría tener a la guía espiritual de visita en el Ningenkai, de vacaciones... ¡¿Vacaciones! Me pude a pensar detalladamente en todo esto y me di cuenta de algo... Era imposible que Botan tenga vacaciones! Ilógico! Irrazonable! Mentiroso!... Y me puse a pensar en todos lo sinónimos que tenía la primera palabra! Aún no me entraba en la cabeza (N.A.: piensa Yusuke, piensa... xD) Pero ahí estaba yo siguiéndola, con un calor del demonio y esas rosas por doquier, que estaba pensando que estaban en mi contra... Hasta que de una vez me harté y me decidí hablarle a Botan.
-"Hey Botan!"-le dije-
-"Si Yusuke?"-me preguntó
Lo sé, lo sé... estoy seguro! Hay algo raro en Botan, se le notaba extraña, rara... Dije más sinónimos de esas palabras pero ese no era el caso, lo que me importaba en ese momento era sacar a luz la verdad y dejarme de filosofear tanto. Aparte de que no soy muy bueno pensando en cosas complicadas y decidí hacerlo a mi simple modo: ir directo al grano sin importar las consecuencias.
Ahora lo sé... ir al grano a veces no es bueno, y te puede causar GRAVES problemas preguntar sin pensar en lo que el otro te dirá.
-
-"Nos vemos luego, Yusuke!"
-"Adiós Urameshi! Y no te 'olvides' de los exámenes que han comenzado desde la otra semana, eh?"-dijo con burla. Yo solo le despedí como normalmente hacía, unas palabras graciosas y una pelea bastaban. Estaba bastante preocupado y había algo que oprimía en mi corazón. Ya no me sentía igual. Sabía que había algo que faltaba en mi vida, y no me gustaba que me pasara eso a mí.
Maldición. No podía dejar de pensar en eso.
Ya no me comporto como antes. Ahora hay algo diferente en mí, pero trato de hacer que no se vea tan visible, pero Keiko... ella no me deja en paz! Rayos, ¡no me deja pensar en lo que me está pasando! Pude notar que a pasado bastante tiempo conmigo, pero ella tampoco se comporta como antes...
Mi mirada estaba fija en un punto centro entre mi camino, y no quería quitarla. Me sentía deprimido... Y no se porque. Nunca antes... nunca antes...
¡Nunca antes me había pasado esto!
Acelero mi paso, desesperadamente busco un atajo al departamento que comparto con mi madre, y tanto fue mi meta que llegué hasta correr.
Ir al grano, sí... eso haría.
-"Botan que rayos está pasando!"- el incómodo silencio me estaba poniendo los nervios de punta, impacientándola. Mierda. Se que no debí haber hecho eso, pero siempre hay algo estúpido en nosotros que nos guía a hacer tonterías.
-"Quieres... saber lo que está pasando, Yusuke...?"-
-"Sí. Creo que ya me escuchaste y fui lo suficientemente claro como para repetirlo"- le dije firme y tajante
-"Tonto"- susurró bajísimo, que con las justas escuché. Siguió hablándome- "Yusuke, no ves que ya vamos a llegar?"- No, esta vez no me iba a engañar con sus sonrisitas falsas y pirateadas. Siempre supe que ella no era Botan, pero todo esto hacía que me confundiera más. Botan me miraba y juntaba sus manos en modo de súplicas. Yo ya no sabía que hacer, sólo quería que todo se solucionara. De una vez!-
Kurama
Ese nombre sonaba en mi cabeza hace mucho tiempo. Me ponía nervioso, no sabía que hacer cuando me hablaba, me miraba, se movía... No me gustaba todo esto. Lo eh repetido muchas veces, pero no me gusta.
-"Tonterías..."-intenté convencerme, apartando uno de mis flequillos y arreglar mi peinado. El frío empezaba a calar mis huesos y me producía un poco de escalofríos. Busqué entre mi maletín y encontré la bufanda que Keiko me había prestado alguna vez. Me la puse en todo mi cuello, enrollándolo. Cerré mis ojos y seguía recordando.
-"Por favor, Yusuke... un poco más y ya llegamos"- me dijo suplicante. Ya no sabía que hacer en ese momento, decidí esta vez actuar con astucia y dejar que las cosas fluyeran por su cuenta, aunque me dieran ganas de suicidarme por eso.
Al poco tiempo ya habíamos llegado, como me dijo Botan. Todo alrededor mío había cambiado un poco, sólo un poco. Seguía habiendo árboles, pero los rayos del molesto solo ya no llegaban a tocarme. Suspiré y seguí mirando... a lo largo se podía ver un lago... pero ese estaba sucio, sus aguas estaban del color plomo, como las del cielo estando en lluvia. Lluvia...la nieve... en ese momento al pensar en esa palabra rememoré el día en que había visto de tiempo a Kurama, la conversación, todo.
-"Yusuke, mira por allá..."-me dijo señalando hacia la parte derecha mía. Al ver ahí no pude divisar nada. Me esforcé un poco más y pude ver una masa roja... la otra negra. La verdad se me hicieron familiares...
-"... Sí, ya estoy viendo... pero no logro ver quienes son..."- le dije serio
-"Ay Yusuke, a veces tienes la cabeza tan hueca que afecta todos tus sentidos..."- al decir eso mi cara puso una mueca con cara de querer matarla y puse mis ojos en blanco. Ella me seguía mirando sonriendo, algunos flequillos de su cabello estaban en su rostro, pero igual podía notar sus grandes ojos rosa debajo de ellos.
Verla así de contenta me había producido miedo, todo mi cuerpo se puso en alerta pero al instante volvió a como estaba antes, pero igual la seguí mirando desconfiado.
-"A dónde es que estás viendo, te dije que miraras hacia allá!"- me dijo señalando de nuevo al mismo lugar de la derecha. Es que acaso creía que era lento? Ya sabía que tenía que mirar allá! Un poco indignado volteé de nuevo, esperando ver ahora sí a esas dos masas roja... y negra...
... roja
... negra
... Roja...
... y negra...?
Pero es que acaso en verdad si era lento? Era obvio que eran Kurama y Hiei yendo hacia donde estaba Botan y yol! Estaban ellos dos una distancia corta, y me llené de rabia en mi interior, y empecé a mirarlos mal. No... lo que hacía estaba mal... pero igual no podía alejarme de eso, porque cada día se enfocaba más y más en mi... porque cada vez estaba internándose en mi ser, y yo no hacía nada para evitarlo. Sin darme cuenta empecé a temblar un poco, pero no pude evitar voltear hacia Botan. Al posar mi mirada en ella me di cuenta de que me estaba sonriendo, con una mirada cómplice, culpable. Volteé nuevamente y Kurama y Hiei ya estaban más cerca, Hiei lo estaba guiando, pero decidí centrarme en quien lo acompañaba.
Giré un poco mi cabeza y ahí estaba. Kurama seguía a Hiei vacilante, y al igual como yo estaba con la defensa arriba. Al ver eso me calmó... ver que desconfiaba de Hiei... me hacía sentir algo, que se sentía tan bien...
Sabía que siempre había querido a Kurama, de alguna manera, pero sé que no lo quería de esta. Yo nunca había experimentado algo así, y no pensé hacerlo, aunque tal vez haya sentido algo por Keiko, pero... ya no sabía ni que era en lo pensaba. Daba vueltas y vueltas al caso, pero se me escapaba como una cucaracha, y también me era muy difícil de exterminar.
Una retahíla de sentimientos me estaba invadiendo y me hacían sentir muy mal.
-"Hiei... mira, allá está Yusuke..."- a pesar de la distancia, logré escucharle, su melodiosa voz en mis oídos me hizo estremecerme.
Bien, aún no estaba de acuerdo de que estuviere al lado de Hiei, pero igual aún no podía dejar de pensar en la posible coincidencia de que me haya encontrado "de casualidad" con ellos dos, en el mismo lugar y en el mismo momento.
Algo aquí no encaja.
Y sí, esa frase sigue en mi cabeza, porque sé que algo no está bien en mí, no está bien sentir eso...No está bien lo que estoy haciendo, no me puedo permitir sentir eso, y me voy a proponer a olvidarlo, no más problemas.
No más engaños.
-
Al fin terminado! Todo este capítulo lo he escrito escuchando Motherlnad de Fullmetal Alchemist -- Está tan kawaii la canción!
Igual, bueno, gracias a todos los que han dejado review, es que se los agradezco de todo corazón! n.n Ahora respondo:
Miguel: muchas gracias por tus palabras :) Tengo en cuenta tu palabra del YxK, por ahora no sé si hacerlo as¡ o KxH u.u Gracias por seguir leyendo! n.n
Hitomi chizu: Perdón por demorar, es que me tengo que tomar mi tiempo para pensar y pensar, y a veces dura hasta meses o Pero trataré de hacerlo más seguido, muchas gracias!
Senko-Kun: no sé si el capítulo estuvo algo predecible o es que eres una adivina :P Igual gracias por seguir leyendo! n.n
Youko Hikari: sigo pensando y pensando sobre el KxH :P A mí me agrada, y creo que pienso hacerlo así... o tal vez no o.oU... Pero de todas formas por ahí habrá de lo que a ti te gusta, no te preocupes n.n Gracias por el review!
Edith: Bien, otro voto más para un KxH, y con este ya van tres n.n Gracias por leer!
Y también muchas gracias a Andrómeda black, Hideaki Nimara, Inari-chan y Davinci por leer y dejar review. Espero le vaya bien todo :)
En fin, pienso si habrá por ahí un muertito. Eso todavía no lo decido.
Ya saben, si quieren un YxK o KxH, háganmelo saber! De ustedes depende mucho mi fic n.n Eso es todo
A todos gracias!
... Sayume
