Hanamichi on tour, por Kuma-chan
Capítulo 3.
Los días de arduo trabajo transcurrían con bastante tensión entre los integrantes de la nueva banda pop que se abía formado hacía poco tiempo. Los roles comenzaban a decidirse: Mitsui sería el seductor, aquel que aportaba los tonos bajos en los coros y ese aire a madurez. Yohei sería el simpático, el de apariencia jóven y dulce, quien de vez en cuando sorprendería a las audiencias con su tímida voz. Sendoh represdentaba el alma del grupo, la seducción y una de las voces principales de los cinco integrantes. Hanamichi era el carismático y el rudo, quien sabía cada coreografía con una agilidad única en él. Y Rukawa, como siempre, sería el sombrío y el misterioso. Sólo había un pequeño problema con él... No podía aprender una coreografía. Lo que fuese que fuera aquello que lo hacía jugar tan bien y tan técnicamente al básquet, ni siquiera asomaba durante los largo ensayos en los que Hanamichi sorpredía a todos burlándose de Rukawa con el solo hecho de practicar a su lado.
"Bueno, eso es todo por hoy muchachos", dijo el coreógrafo al tiempo que los despedía con unos aplausos alentadores. "Pueden irse a descansar."
Cuando ya todos habían volteado para marcharse, la voz del alto personaje que los había estado dirigiendo durante el ensayo de baile resonó en la sala. "Espera, Rukawa. Quédate un momento."
El resto del grupo salió apresurado, excepto Hanamichi quien parecía muy interesado por escuchar esa conversación. Al cerrar la puerta de la sala, el pelirrojo quedó escuchando con su oreja apoyada en la puerta.
"Bueno, Rukawa" comenzó el coreográfo, "lamento decirte esto, pero me estoy dando cuenta de que quedas descolocado del grupo." El hombre hizo una pausa para secarse el sudor de la frente y el muchacho que estaba con él aprovechó para hacer lo mismo. "Todos sabemos que es muy dificil aprender a bailar", prosiguió, "pero creo que este es un caso muy excepcional. Nunca en mi carrera había visto a una persona bailar tan mal."
Rukawa hizo una mueca de disgusto y desvió la mirada hacia otro lado. "¿Y qué quieres que haga?" dijo él con su monótona voz.
Hanamichi Sakuragi, que podía escuchar todo desde afuera, tenía una sonrisa dibujada en los labios. /JAJAJA Soy mucho mejor que ese maldito/ pensaba, y en eso, alguien apoyó su mano en su hombro haciendo que su corazón se detuviera por un instante. Al voltear, sintió un gran alivio al ver el rostro de Sendoh. Con esto no pudo más que soreir.
"¿Escuchando conversaciones ajenas?" rió burlonamente. "¿Por qué mejor no vienes a tomar algo conmigo a la cocina?"
Cuando Hanamichi estaba por abrir la boca para contestarle, la puerta se abrió detrás de él y como estaba apoyado en ella, cayó hacia atrás para ser contenido por unos poderosos brazos.
"Oye torpe, ten más cuidado"
Todo ruborizado, el supuesto "torpe" se desprendió del cuerpo de su peor enemigo (de quien se había agarrado con bastante confianza!) y musitó un insulto que no pudo ser entendido porque estaba nervioso y confundido al mismo tiempo. Tomandolo por el brazo, Sendoh lo ayudó a pararse derecho y le dijo en voz lo suficientemente alta como para que todos (en especial cierto zorrito) escucharan: "Vamos."
Al ver esto, Rukawa se movió ágilmente y tomó por el brazo que le quedaba libre al pelirrojo, tirando de él hacia sí. "No" dijo firmemente. "Antes tengo que pedirte algo"
.:Continuará:.
