De gira con Hanamichi (ó Hanamichi on Tour), por Kuma-chan

Notas: Ya saben de que se trata, no necesitan advertencias ni nada. Por fin está empezando la acción por aquí, fanáticas del SenRu, éste es su capítulo! Pero no puedo prometer que Hana-kun termine con ese tipo, eh? Gracias por todas las reviews, REALMENTE ASÍ me dan ganas de escribir. Así que, pweez!!! No se vayan sin decirme que les pareció esta escenita!! O sus comentarios O sus sugerencias. Todavía no sabemos porque Ru no quiere que lo toquen por ahí, jeje. AH! Y visiten fandomslam.8k.com para más fanfics!!! (Ya lo saben -_-u)

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"¡Ese Rukawa!" Masculló Hanamichi en la cocina mientras devoraba la pasta que le había cocinado Sendoh. A ellos se les había sumado Mitsui, quien se sentaba junto a Sakuragi en la mesa.

"Están deliciosos", felicitó Mitsui a Sendoh. "Algún día yo les cocinaré mi especialidad: rollos de pescado frito. ¿Qué te parece, Hanamichi?"

Una gota de transpiración se depositó en la sien del pelirrojo mientras oía que lo llamaban por su nombre. Con la cabeza agachada hacia el plato, miró por el rabillo del ojo al ex gángster y le dijo: "¿Has vuelto a la normalidad, Micchy?"

Sendoh miró a ambos muchachos y por el tono sospechoso de Hanamichi supuso que había sucedido algo que él no sabía. Quizás Mitsui ya había hecho la primer movida, así que debía apresurarse o si no...

--- Flash back ---

Rukawa y Hanamichi ensayaban los pasos de la coreografía en la sala y mientras tanto, eran observados por un sujeto de cabellos de punta. De pronto, Mitsui apareció por detrás de él y sin decir nada, se quedó observando también a los dos muchachos, específicamente al pelirrojo que bailaba como los dioses. Sin querer y como si fuera una niñita enamorada, lanzó un suspiro al aire y sonrió con cara de idiota. Al notar que no estaba solo, se volvió y se dio cuenta que Sendoh tenía la MISMA cara de idiota.

"Oye, tú, Sendoh..." le dijo, "¿A quién estás mirando?

Sendoh salió de su letargo y se encontró con el rostro de Mitsui frente a él.

"¿Eh?" Respondió elocuentemente.

"Que digo que a quién estás mirando..." gruñó Mitsui por lo bajo.

Luego de un breve intercambio de palabras, ambos muchachos se enteraron que andaban tras la misma prueba. "Lo siento," dijo alegremente Sendoh "pero creo que esta vez estás perdido." Sendoh tenía todo el 'charm', pero Mitsui sabía que no se quedaba atrás, así que replicó inmediatamente. "Disculpa, pero te equivocas" le sonrió levemente. Un desafío nuevo se acercaba.

Y así fue que ambos acordaron que quien lograra conquistar al pelirrojo antes de la fecha de su primer recital (cosa que aún no sabían) sería el ganador de la apuesta y el otro debería admitir en público que el ganador era la persona 'más seductora y sexy de todo el Distrito de Kanagawa.' Luego de sellar el acuerdo con un apretón de manos, ambos se retiraron a planear su estrategia a solas.

---- Fin del flash back ----

"¿De qué hablas, Hanamichi?" Dijo Mitsui sin darle importancia al asunto. "Vamos, creo que ya es hora de que nos acostemos, es decir, que vayamos a dormir. Mañana por la mañana nos anunciarán la fecha del primer recital, así que necesitamos estar lúcidos."

"De acuerdo." Asintió Sendoh y luego agregó: "pero, ¿por qué no vas yendo, Mitsui, que quiero hablar a solas con Hana-kun un momento?"

Mitsui y Hanamichi abrieron grande sus bocas pero de ellas no salió ningún sonido /Hana-¿kun?/ pensó Sakuragi.

Refunfuñando, Mitsui se retiró de la cocina sin antes echarle un vistazo a la escena. No confiaba para nada en que Sendoh pudiera "hablar" de algo con su objeto de deseo.

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"¡Ah!" suspiró Hanamichi Sakuragi frotándose el abdomen. "¡Voy a estallar!"

Sendoh sonrió complacido de que su comida le hubiera resultado tan deliciosa y retiró los platos de la mesa. Cuando acomodó todo en la pileta y dejó todo listo para ser lavado, se volvió hacia Hanamichi y lo miró un buen rato hasta que el otro comenzó a sentirse algo incómodo.
"Hana-kun", le dijo suavemente, con ese tono de voz que solo él puede hacer. "Aún falta el postre."

Por alguna razón que en ese entonces no comprendió, a Hanamichi esas palabras lo atemorizaron. "N-no, g-gracias, Sendoh..."

"Akira, dime Akira" dijo mientras se acercaba.

"E-estoy hasta el tope. No podría tragar un bocado más. ¡Estoy satisfecho!

"Pues yo no" volvió a decir poniendo su voz más seductora.

"A-además, yo *bostezo fingido* yo, yo tengo mucho sueño *otro bostezo*"

A estas alturas, cuando ya Sendoh se había acercado tanto que el pelirrojo había tenido que levantarse de la silla y volvía a quedar acurrucado contra la mesada, Hanamichi había puesto sus manos hacia delante, como para protegerse de una golpiza. Pero lo que menos recibiría serían golpes.

"Ahora"; susurró Sendoh colocando una mano por encima de la cabeza de Sakuragi y apoyándose en una alacena, " solo quiero decirte unas palabras al oído"

La cabeza del pelirrojo estaba a punto de estallar y su respiración se hacía cada vez más pesada. /¡El pervertido!/ pensaba, pero por alguna fuerza extraña no podía alejarse de ese lugar aunque así lo quisiera. ¿Realmente lo quería?

Por supuesto que sí, o al menos eso se repetía una y otra vez mientras escuchaba ausente las palabras que susurraban en su oído derecho.

"¿Alguien te ha dicho que eres hermoso?"

"Bueno, sí, mi mamá me lo decía todo el tiempo cuando era pequeño."

Sendoh se quedó mudo. Luego, rió francamente. "Oh, Hana-kun, eres adorable." Y con estas palabras acercó su mano y corrió unas mechas pelirrojas que se habían desparramado en la frente del otro.

Encerrado y sin salida, Hanamichi temblaba internamente y se le doblaban las rodillas. ÉL era el Tensai, maldita sea, esto no le podía estar sucediendo. Entonces, se decidió a acabar con el asunto y cuando estaba por protestar por la impertinencia del jugador del Ryonan, algo repentino le cubrió la boca. No era una mano, al menos no parecía. Por supuesto que no era una mano, era un par de labios, húmedos y tibios sobre los suyos. A esto le siguió una mano en la cadera, y la que estaba por encima de su cabeza, en su cuello. Hanamichi se congeló en ese mismo instante y se volvió una masa de electricidad y sensaciones. Sus ojos se cerraron involuntariamente y sus mejillas se volvieron a sonrojar con furia. Lo único que comprendía era que alguien lo estaba abrazando y besando. Sendoh lo estaba abrazando y besando. Sendoh...
"¡¿SENDOH?!"

Instantáneamente, Hanamichi se separó del beso y miró fijamente a los ojos azules del otro chico que lo miraba como esperando que reaccionara. Su expresión estaba en blanco por lo que Hanamichi no supo que hacer salvo ver como el otro se alejaba, ahora sonriente y cruzaba la puerta de la cocina.

Antes de salir, Sendoh le dijo: "Nos vemos, Hana-kun. El postre fue más delicioso de lo que esperaba."

Tras la puerta de la cocina, el muchacho se sonrió, "Y ese fue un triple, ¡sí señores!"

Aún contra la mesada, recobrando su respiración y su pulso, Hanamichi se llevó la mano a los labios y los sintió húmedos. Su corazón se estaba calmando, pero su cabeza había comenzado a trabajar y lo único que hacía era confundirse cada vez más.

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