Hola! Como están! Bueno miles de gracias a Mysao, aomechan y miru cat por
sus reviews miles de abrazos y espero que disfruten este capi, Inuyasha
es malo....
Capitulo II
-Souta!!- grito la joven al galope del caballo, estaba oscuro y no se veía nada los aullidos de los lobos penetraban el bosque Kagome estaba asustada no veía nada a medida que el caballo avanzaba lo único que lograba ver eran árboles y maleza se pregunto si esto la llevaría a algún lado.
Kagome siempre habia sido una chica de pueblo, habia sido criada por su madre vivía solo con ella y su hermano menor Souta.
Nunca se habia adentrado al bosque nadie se adentraba al bosque pues contaban la leyenda del castillo encantado se decía que un Príncipe maldecido por su corazón de piedra vivía ahí claro que solo era una leyenda y una persona no podía vivir tanto ya que se contaba que esto habia pasado hace mas de un siglo.
-No crees que Inuyasha se porto muy malo con el niño?- -Ya sabes como es el- -Pero es muy pequeño, por que no lo ayudamos a salir?- -Estas loco? Nos matara!- -no puede- -cierto- contesto el joven de pelo café oscuro, alto con brillantes ojos azules.
–Vamos a ayudarlo- el joven salió de su lúgubre alcoba seguido por un pequeño niño con pelo rojo con un rabito como de zorro ambos caminaron lentamente por los largos pasillos del castillo hacia las mazmorras las cuales estaba húmedas y desabitadas.
En una de las celdas se encontraba un pequeño sollozando el joven alto de pelo café se acerco a el –no te preocupes te vamos a sacar- le susurro el niño sonrió y se movió de la esquina de donde estaba a la puerta.
El joven abrió la puerta y el pequeño salió rápidamente –muchas gracias señor- llámame Miroku -y el es Shippo- agrego señalando a su pequeño amigo, Souta lo vio extrañado especialmente la cola –Que eres?- pregunto asustado.
-Soy un niño- -con cola?- -algún problema?- le pregunto enojado -No, no nada- Miroku se rió –bien salgamos de aquí- -Espera que pasara con, con- -Inuyasha?- agrego Shippo Souta lo vio asustado moviendo su cabeza en forma de aprobación.
-Oh no te preocupes el no te hará nada es en verdad una gran farsa lo hace para que le tengas miedo pero en verdad es muy bueno- de pronto el castillo tembló.
-Creo que ya despertó- dijo Miroku –y de muy mal humor- agrego Shippo –corre!- gritaron ambos tomando a Souta para sacarlo lo mas rápido del castillo posible.
Corrieron por los largos y oscuros corredores hasta la cocina donde salieron por la puerta trasera –corran!! No tardara en darse cuenta- grito Shippo
Después de un rato se adentraron mas al bosque aun seguían corriendo hasta que se toparon con algo o mas bien alguien –hermana!!- -Souta!- grito Kagome bajando de su caballo lo abrazo lo mas fuerte posible.
-hermana no me dejas respirar- -lo siento es que estaba muy preocupada- dijo con los ojos llenos de lagrimas fue cuando se dio cuenta que habían 2 personas observándolos –Um? Quienes son ustedes?- pregunto confundida.
Miroku rápidamente se puso frente a ella y tomo su mano derecha Kagome se sonrojo -Mi bella señorita mi nombre es Miroku a tus ordenes- este beso su mano –tendrías un hijo conmigo?- el pequeño zorro salto y le dio un golpe en la cabeza –pervertido! Hola mi nombre es Shippo! – dijo este contento.
Kagome lo vio extrañada pero después su ojos lo vieron con ternura y lo abrazo –pero que bonito eres- -hay suéltame!- dijo forcejando para salir de sus brazos.
De pronto escucharon un fuerte sonido cerca de donde estaban –Que fue eso?- pregunto Kagome preocupada –uh oh corran! Nosotros los cubrimos- -pero que?- -no hagas preguntas solo corre grito Miroku.
Souta y Kagome corriendo lo mas rápido posible después de un rato pensando que ya estaban a salvo pararon a tomar un poco de aire –Pero de que corremos?- pregunto Kagome confundida –De el demonio que me tenia prisionero ellos me ayudaron!-
-Demonio?- -si hermana! De esos que lees en tus tontas historias!- Kagome golpeo la cabeza de Souta -no son tontos, además solo son historias los demonios no existen!-
-Quieres apostar?- se escucho una fuerte voz tras ellos Kagome volteo hacia donde provenía la voz pero no vio nada de pronto algo la tiro –Hermana!!!- grito Souta corriendo hacia ella algo lo tomo por la parte de atrás de su camisa.
-A donde crees que vas? Tu eres mi prisionero maldito ladrón! Crees que te podías escapar?- Kagome salió de su shock y se levanto rápidamente del suelo –Déjalo por favor!- grito –Por que debería?-
Kagome trato de ver quien era el que tenia a su hermano pero estaba demasiado oscuro de pronto podía ver cierto brillo en sus ojos como los de un gato o perro –Por que el no ah hecho nada malo!-
-JA! Trato de robar algo de mi castillo a eso le dices nada malo?- -cualquier cosa que sea te la pagare pero por favor déjalo ir!- -No! Largo de aquí estúpida!- dijo caminando de vuelta hacia el castillo.
Kagome corrió tras el toco su brazo para que le hiciera caso pero al poner un dedo sobre su hombro el joven reacciono de una forma violenta haciéndola caer al suelo –No te atrevas a tocarme humana estúpida- grito después de dar un fuerte rugido.
-Lo, lo lamento pero por favor déjalo ir!- -No!- -Por favor! Yo me quedare en cambio que el!- el demonio se detuvo soltó a Souta y tomo a Kagome rápidamente –hecho- salto hacia un árbol y se alejo lo mas rápido posible.
-HERMANA!!!- -ve a casa Souta!!- grito Kagome al ver que su hermano trataba de seguirlos trato de tragarse las lagrimas pero no pudo Inuyasha podía oler el miedo que la joven le tenia al igual que sus lagrimas no le importo y siguió su camino hacia el castillo.
Al llegar camino hacia el calabozo aun con Kagome en su hombro –MIROKU!!!!!!- Grito enojado su voz retumbo por todo el castillo al llegar a la parte baja del castillo la aventó a una de las celdas.
Kagome seguía llorando y no podía ver quien la tenia cautiva –Deja de llorar perra estúpida!- grito desesperado golpeando una de las paredes de piedras que rodeaban el lugar el castillo dio una sacudida.
-Me ... Me hablaste Inuyasha?- pregunto Miroku asustado Shippo tras el al igual que otras cuatro personas que se asomaban en la puerta Inuyasha se acerco a el joven el retrocedió -gulp- -POR QUE DEMONIOS AYUDASTE A ESCAPAR A ESE MALDITO LADRON!!!?- le grito
Kagome por fin pudo ver a su captor –Oh Dios mío...- susurro con sus ojos justos en el la luz de la vela que traía Miroku casi se apaga con el fuerza del grito que dio Inuyasha.
-Lo, lo lamento Inuyasha es que- -ES QUE NADA!!! VUELVES A DESOBEDECERME Y TE JURO QUE....- levanto su brazo para darle un golpe pero se detuvo todos lo veían asustados especialmente Kagome.
Inuyasha se trato de calmar camino hacia la puerta todos los que estaban ahí retrocedieron -A nadie se le ocurra desobedecerme lo hacen y serán castigados y sacados del castillo en cuanto a la chica se quedara aquí y no trates de escapar estúpida mi nariz puede detectar olores a kilómetros y tu apestoso olor te delataría-
Al terminar de decir esto se fue todos se acercaron a la celda –Estas bien?- dijeron al unísono –No te gustaría algo de comer?- -Oh una almohada?- todos preguntaban La pobre de Kagome comenzó de nuevo a llorar.
-vamos no llores todo estará bien- dijo una joven como se su edad y estatura pelo café oscuro al igual que sus ojos los cuales eran muy expresivos –Que me calme?- dijo molesta –estoy en una celda en un castillo en la mitad del bosque con un demonio que me quiere matar!! Y todo estará bien? quiero regresar a casa-
-Inuyasha no te quiere matar, no te preocupes nosotros te ayudaremos- los ojos de Kagome se iluminaron –si?- -Si, a salir de esta celda- -la poca esperanza que le quedaba a la pobre joven se desvaneció de inmediato al oír esto.
-Vaya Sango que forma de ayudar- -Tu cállate Miroku que por tu culpa ella esta aquí!- -Yo solo trate de ayudar a su hermano!- -bueno, bueno ya!- -mira mi nombre es Sango, y creo que ya conoces a Miroku el pervertido- -hey!- Sango lo volteo a ver pero rápidamente volvió con Kagome –Ellos son Tanuki y Kirara- ambos saludaron.
-me puedes llamar Hachi!- dijo el hombre en forma de topo
-Mucho gusto-Kagome trato de ser amable
Pero la verdad es que estaba muy asustada cuando volvería a ver a su familia? Algún día saldría de ahí? En verdad Inuyasha era la persona que estas personas dicen que es?
Mas tarde Sango le llevo una charola de plata con un poco de sopa y un vaso con agua
-Lo lamento pero no tenemos mucho- -Esta bien no te preocupes- contesto amablemente Kagome.
-No te preocupes te ayudare a que salgas de esta celda solo tenemos que encontrar a Inuyasha de buen humor-
-Eso espero- trato de sonreír Kagome
-Vamos Inuyasha! Tan siquiera dale un cuarto!- -Ya te dije que no!!- -vamos ahí va a morir- -Ella es mi prisionera no una invitada! Esa estúpida se atrevió a desafiarme!!- -solo pensé que le tendrías mas consideración ya que bueno...-
El príncipe lo volteo a ver que ojos de odio lo tomo del cuello y lo levanto –Olvida esas estupideces! Eso es imposible! Así es que resígnense y dejen de soñar! Nunca nadie se enamoraría de un monstruo como yo NADIE!-
Review....
Capitulo II
-Souta!!- grito la joven al galope del caballo, estaba oscuro y no se veía nada los aullidos de los lobos penetraban el bosque Kagome estaba asustada no veía nada a medida que el caballo avanzaba lo único que lograba ver eran árboles y maleza se pregunto si esto la llevaría a algún lado.
Kagome siempre habia sido una chica de pueblo, habia sido criada por su madre vivía solo con ella y su hermano menor Souta.
Nunca se habia adentrado al bosque nadie se adentraba al bosque pues contaban la leyenda del castillo encantado se decía que un Príncipe maldecido por su corazón de piedra vivía ahí claro que solo era una leyenda y una persona no podía vivir tanto ya que se contaba que esto habia pasado hace mas de un siglo.
-No crees que Inuyasha se porto muy malo con el niño?- -Ya sabes como es el- -Pero es muy pequeño, por que no lo ayudamos a salir?- -Estas loco? Nos matara!- -no puede- -cierto- contesto el joven de pelo café oscuro, alto con brillantes ojos azules.
–Vamos a ayudarlo- el joven salió de su lúgubre alcoba seguido por un pequeño niño con pelo rojo con un rabito como de zorro ambos caminaron lentamente por los largos pasillos del castillo hacia las mazmorras las cuales estaba húmedas y desabitadas.
En una de las celdas se encontraba un pequeño sollozando el joven alto de pelo café se acerco a el –no te preocupes te vamos a sacar- le susurro el niño sonrió y se movió de la esquina de donde estaba a la puerta.
El joven abrió la puerta y el pequeño salió rápidamente –muchas gracias señor- llámame Miroku -y el es Shippo- agrego señalando a su pequeño amigo, Souta lo vio extrañado especialmente la cola –Que eres?- pregunto asustado.
-Soy un niño- -con cola?- -algún problema?- le pregunto enojado -No, no nada- Miroku se rió –bien salgamos de aquí- -Espera que pasara con, con- -Inuyasha?- agrego Shippo Souta lo vio asustado moviendo su cabeza en forma de aprobación.
-Oh no te preocupes el no te hará nada es en verdad una gran farsa lo hace para que le tengas miedo pero en verdad es muy bueno- de pronto el castillo tembló.
-Creo que ya despertó- dijo Miroku –y de muy mal humor- agrego Shippo –corre!- gritaron ambos tomando a Souta para sacarlo lo mas rápido del castillo posible.
Corrieron por los largos y oscuros corredores hasta la cocina donde salieron por la puerta trasera –corran!! No tardara en darse cuenta- grito Shippo
Después de un rato se adentraron mas al bosque aun seguían corriendo hasta que se toparon con algo o mas bien alguien –hermana!!- -Souta!- grito Kagome bajando de su caballo lo abrazo lo mas fuerte posible.
-hermana no me dejas respirar- -lo siento es que estaba muy preocupada- dijo con los ojos llenos de lagrimas fue cuando se dio cuenta que habían 2 personas observándolos –Um? Quienes son ustedes?- pregunto confundida.
Miroku rápidamente se puso frente a ella y tomo su mano derecha Kagome se sonrojo -Mi bella señorita mi nombre es Miroku a tus ordenes- este beso su mano –tendrías un hijo conmigo?- el pequeño zorro salto y le dio un golpe en la cabeza –pervertido! Hola mi nombre es Shippo! – dijo este contento.
Kagome lo vio extrañada pero después su ojos lo vieron con ternura y lo abrazo –pero que bonito eres- -hay suéltame!- dijo forcejando para salir de sus brazos.
De pronto escucharon un fuerte sonido cerca de donde estaban –Que fue eso?- pregunto Kagome preocupada –uh oh corran! Nosotros los cubrimos- -pero que?- -no hagas preguntas solo corre grito Miroku.
Souta y Kagome corriendo lo mas rápido posible después de un rato pensando que ya estaban a salvo pararon a tomar un poco de aire –Pero de que corremos?- pregunto Kagome confundida –De el demonio que me tenia prisionero ellos me ayudaron!-
-Demonio?- -si hermana! De esos que lees en tus tontas historias!- Kagome golpeo la cabeza de Souta -no son tontos, además solo son historias los demonios no existen!-
-Quieres apostar?- se escucho una fuerte voz tras ellos Kagome volteo hacia donde provenía la voz pero no vio nada de pronto algo la tiro –Hermana!!!- grito Souta corriendo hacia ella algo lo tomo por la parte de atrás de su camisa.
-A donde crees que vas? Tu eres mi prisionero maldito ladrón! Crees que te podías escapar?- Kagome salió de su shock y se levanto rápidamente del suelo –Déjalo por favor!- grito –Por que debería?-
Kagome trato de ver quien era el que tenia a su hermano pero estaba demasiado oscuro de pronto podía ver cierto brillo en sus ojos como los de un gato o perro –Por que el no ah hecho nada malo!-
-JA! Trato de robar algo de mi castillo a eso le dices nada malo?- -cualquier cosa que sea te la pagare pero por favor déjalo ir!- -No! Largo de aquí estúpida!- dijo caminando de vuelta hacia el castillo.
Kagome corrió tras el toco su brazo para que le hiciera caso pero al poner un dedo sobre su hombro el joven reacciono de una forma violenta haciéndola caer al suelo –No te atrevas a tocarme humana estúpida- grito después de dar un fuerte rugido.
-Lo, lo lamento pero por favor déjalo ir!- -No!- -Por favor! Yo me quedare en cambio que el!- el demonio se detuvo soltó a Souta y tomo a Kagome rápidamente –hecho- salto hacia un árbol y se alejo lo mas rápido posible.
-HERMANA!!!- -ve a casa Souta!!- grito Kagome al ver que su hermano trataba de seguirlos trato de tragarse las lagrimas pero no pudo Inuyasha podía oler el miedo que la joven le tenia al igual que sus lagrimas no le importo y siguió su camino hacia el castillo.
Al llegar camino hacia el calabozo aun con Kagome en su hombro –MIROKU!!!!!!- Grito enojado su voz retumbo por todo el castillo al llegar a la parte baja del castillo la aventó a una de las celdas.
Kagome seguía llorando y no podía ver quien la tenia cautiva –Deja de llorar perra estúpida!- grito desesperado golpeando una de las paredes de piedras que rodeaban el lugar el castillo dio una sacudida.
-Me ... Me hablaste Inuyasha?- pregunto Miroku asustado Shippo tras el al igual que otras cuatro personas que se asomaban en la puerta Inuyasha se acerco a el joven el retrocedió -gulp- -POR QUE DEMONIOS AYUDASTE A ESCAPAR A ESE MALDITO LADRON!!!?- le grito
Kagome por fin pudo ver a su captor –Oh Dios mío...- susurro con sus ojos justos en el la luz de la vela que traía Miroku casi se apaga con el fuerza del grito que dio Inuyasha.
-Lo, lo lamento Inuyasha es que- -ES QUE NADA!!! VUELVES A DESOBEDECERME Y TE JURO QUE....- levanto su brazo para darle un golpe pero se detuvo todos lo veían asustados especialmente Kagome.
Inuyasha se trato de calmar camino hacia la puerta todos los que estaban ahí retrocedieron -A nadie se le ocurra desobedecerme lo hacen y serán castigados y sacados del castillo en cuanto a la chica se quedara aquí y no trates de escapar estúpida mi nariz puede detectar olores a kilómetros y tu apestoso olor te delataría-
Al terminar de decir esto se fue todos se acercaron a la celda –Estas bien?- dijeron al unísono –No te gustaría algo de comer?- -Oh una almohada?- todos preguntaban La pobre de Kagome comenzó de nuevo a llorar.
-vamos no llores todo estará bien- dijo una joven como se su edad y estatura pelo café oscuro al igual que sus ojos los cuales eran muy expresivos –Que me calme?- dijo molesta –estoy en una celda en un castillo en la mitad del bosque con un demonio que me quiere matar!! Y todo estará bien? quiero regresar a casa-
-Inuyasha no te quiere matar, no te preocupes nosotros te ayudaremos- los ojos de Kagome se iluminaron –si?- -Si, a salir de esta celda- -la poca esperanza que le quedaba a la pobre joven se desvaneció de inmediato al oír esto.
-Vaya Sango que forma de ayudar- -Tu cállate Miroku que por tu culpa ella esta aquí!- -Yo solo trate de ayudar a su hermano!- -bueno, bueno ya!- -mira mi nombre es Sango, y creo que ya conoces a Miroku el pervertido- -hey!- Sango lo volteo a ver pero rápidamente volvió con Kagome –Ellos son Tanuki y Kirara- ambos saludaron.
-me puedes llamar Hachi!- dijo el hombre en forma de topo
-Mucho gusto-Kagome trato de ser amable
Pero la verdad es que estaba muy asustada cuando volvería a ver a su familia? Algún día saldría de ahí? En verdad Inuyasha era la persona que estas personas dicen que es?
Mas tarde Sango le llevo una charola de plata con un poco de sopa y un vaso con agua
-Lo lamento pero no tenemos mucho- -Esta bien no te preocupes- contesto amablemente Kagome.
-No te preocupes te ayudare a que salgas de esta celda solo tenemos que encontrar a Inuyasha de buen humor-
-Eso espero- trato de sonreír Kagome
-Vamos Inuyasha! Tan siquiera dale un cuarto!- -Ya te dije que no!!- -vamos ahí va a morir- -Ella es mi prisionera no una invitada! Esa estúpida se atrevió a desafiarme!!- -solo pensé que le tendrías mas consideración ya que bueno...-
El príncipe lo volteo a ver que ojos de odio lo tomo del cuello y lo levanto –Olvida esas estupideces! Eso es imposible! Así es que resígnense y dejen de soñar! Nunca nadie se enamoraría de un monstruo como yo NADIE!-
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