Hola a todos! Miles de gracias por los reviews! Ya estoy comenzando a desarrollar el futuro romance entre Kagome e Inuyasha y pues esta capitulo no es muy largo pero espero que les guste! esta fue mi primera semana de clases y no estuvo mal jaja

Suerte a todos los que entraron a clases!

Disclaimer: ya saben yo no soy la dueña de Inu ni nada de la bella y la bestia

-Inuyasha, ya se que no te gusta que entre aquí pero.....- Sango se quedo callada al ver que a quien buscaba no estaba si no alguien que nunca esperaría ver –¿Kagome?-

La joven de pelo negro azabache se encontraba en el suelo, dormía pacíficamente con una ligera frazada cubriendo su cálido cuerpo, sus ojos comenzaron a abrirse lentamente mientras que el sol entraba con fuerza por la enorme ventana del la alcoba.

Levanto su torso del duro suelo y bostezó al abrir completamente sus ojos se percato de que alguien la observaba –Sango? Que haces aquí?-

-Es lo mismo que yo me preguntaba- contesto cruzando los brazos, Kagome busco alrededor del cuarto para encontrar alguna señal de Inuyasha pero no tuvo éxito.

-Ayer vine a agradecerle por haberme salvado cuando me di cuenta de que estaba herido y decidí ayudarlo- el silencio reino por un tiempo.

-Vaya, dices que Inuyasha dejo que lo ayudaras a limpiar su herida?- pregunto atónita, Kagome la vio confundida –Si- Sango rió –Es solo que el es muy terco y nunca ah dejado que lo ayudemos cuando resulta herido.

-Dices que esta no es la primera vez?- La sonrisa que habia en el rostro de Sango desapareció por completo se podía detectar un poco de tristeza en sus resplandecientes ojos.

-Por supuesto que no Kagome, con Naraku tratando de derrotar a Inuyasha- -Quien es Naraku?- pregunto la joven enredada –No se si sea yo la persona indicada para decírtelo aun que bueno es una persona que ah atentado contra nuestras vidas desde antes de que Inuyasha y los del castillo se convirtieron en demonios-

-Ahora que lo dices, veo que Miroku es completamente normal- Kagome pensó en todos los que vivían en el castillo y los únicos normales eran Miroku y Sango pero ella no habia vivido ahí desde el principio.

-Pues- continuo la bella joven –Creo que no te has fijado en su mano derecha- Kagome trato de recordar "Hm.... es verdad el joven Miroku siempre lleva una especie de tela con un rosario"

-Tiene una especie de hoyo negro todos pensamos que es para castigar el ser tan pervertido... –

Kagome rió -Pues no ah tratado de hacer nada malo conmigo- Sango frunció el entrecejo

–Pues tienes suerte-

Se escucharon pasos que se acercaban –Oye Inuyasha....Pero que?- era Miroku

Se acerco a ellas en cuanto las vio y puso su brazo alrededor ambas chicas –Vaya Sango me lo esperaba de Kagome pero nunca de ti-

-MALDITO MONJE PERVERTIDO!!!- el grito se escucho por todo el castillo seguido por la fuerte bofetada, su cara estaba de color rojo y le ardía del dolor.

-A mi querida Sango como olvidar tus dulces caricias- mientras decía esto su mano derecha acariciaba la parte trasera de la joven -PERO QUE LE PASA!!!!!- grito de nuevo sonrojada.

-Saben creo que voy a buscar algo de comer- Kagome se excuso tratando de escapar de la pelea.

Camino por los corredores del castillo aun que fuera de día la luz apenas entraba y se veía muy oscuro aun así se alcanzaba a apreciar las pinturas colgadas en las paredes de piedra estaban llenas de polvo parecía que no las habían limpiado en un largo tiempo.

El castillo era enorme en las pocas veces que habia caminado por el se habia perdido habia puertas por todos lados al igual que los corredores unos llevaban hacia un lugar sin salida.

Y como esas otras veces estaba de nuevo perdida Kagome suspiro "Vaya ahora que haré?"

decidió seguir caminando hasta toparse contra una enorme puerta de color blanco, entro y se dio cuenta que estaba en el primer piso, al menos no estaba perdida en las torres.

Vio otra puerta en medio de la pared de enfrente, en el cuarto no habia mucho parecía que era donde habia trabajado el jardinero salió por aquella puerta para encontrarse con un hermoso jardín.

La nieve se derretía en el césped y en los frondosos árboles en el medio de aquel jardín habia una enorme fuente se veía muy elegante aun que un poco vieja alrededor de esta habia flores silvestres.

Habían varios cerezos hubo uno que llamo toda su atención era enorme y por muy raro que pareciera era el único que tenia flores el viento las movía con tal delicadeza Kagome camino hacia el para encontrarse a alguien viendo el horizonte en una de sus ramas.

-Inuyasha- susurro la joven podía ver que sus ojos reflejaban indecisión y tristeza que era lo que tenia? Le hubiera gustado poder entrar a sus pensamientos y averiguarlo.

-Que me vez estúpida?- vaya que era inoportuno. El hanyou la veía con ojos que penetraban su alma.

-No tienes razón para llamarme estúpida!- le contesto molesta –Solo vine a ver como estas- -Feh! lárgate estoy bien-

Kagome se acerco mas –No es verdad ayer estabas muy herido!- -Ja tu lo has dicho! Ayer-

-Oh vamos baja! Solo quiero ver que estés bien y me voy- -que ya te dije que No! Lárgate!-

-Pues ni creas que me voy a ir! Me voy a quedar aquí sentada hasta que decidas bajar-

-Feh! Como quieras!- dijo volteándose para el otro lado Kagome acomodo su vestido y se sentó en el césped.

Pasaron varias horas sin que ninguno de los dos se movieran vaya que iba a ser una larga tarde.

Habían sido mas de tres largas semanas sin encontrar a su hija no podía darse por vencida sabia que estaba viva lo podía sentir solo que como encontrarla.

Habia tratado ya de todo no tenia nada mas en mente necesitaba descansar decidió regresar a su pequeña casa en el campo cerca de un pequeño pueblo.

El pequeño Souta habia estado deprimido desde que su hermana habia desaparecido se podría decir que el era el que tenia mas fe en poder encontrarla entre el oscuro bosque.

Para la gente eso era imposible nadie podía sobrevivir en aquel bosque nadie la poca gente que se habia adentrado habia desparecido por completo era un caso perdido.

-Mamá- pregunto Souta caminando a lado de ella hacia su casa –Que pasa?-

-Crees que mi hermana este pensando en nosotros?- lagrimas comenzaron a salir de los ojos de su madre –Si hijo si-

El sol se estaba poniendo y comenzaba a hacer frió –Ya vete de aquí!- le grito Inuyasha quien no podía creer que la joven hubiera esperado tanto tiempo –Ya te dije que no! No hasta que bajes!-

-De acuerdo, de acuerdo!- el hanyou bajo derrotado estaba harto de que la joven lo estuviera viendo callo justo enfrente de ella.

Kagome se puso de pie en la forma que habia saltado la habia dado la impresión de que su pierna estaba completamente curada.

-Si campesina como podrás darte cuenta mi cuerpo no es normal- Kagome lo vio enfadada y a la vez impresionada por lo que le habia dicho, en verdad se veía mucho mejor que la noche anterior.

-Podrías dejar de decirme "campesina" tengo nombre- -Por que debería?-

-Por que no me agrada que me digas así- -Pero eso es lo que eres!-

-Ah Si? Pues tu eres un mo....- Kagome se callo al ver el rostro de Inuyasha recordó lo que habia pasado la ultima vez que le habia dicho así.

-Un que?- pregunto con la frente en alto –Un... TONTO!!- grito todos los pájaros de los árboles volaron.

-AAAH!! No grites! Mis orejas son muy sensibles!- gruño enfadado

-Hm.? Que tanto puedes hacer?- Kagome lo vio curiosa

Una sonrisa pícara apareció en el rostro del hanyou.

Review......sip?