Hola, Hola! Como están todos? Espero que muy bien, bueno si hace rato que no actualizo pero que pena y la verdad que la culpa es de Andrew... cada vez que iba a actualizar el entraba y tomaba toda mi atención... si le van a decir a algo a alguien es a el... ja solo que no habla español (así mejor le dicen lo que quieran) jaja la verdad es que eh estado muy ocupada y prometo actualizar mas rápido!

Espero que les guste este capitulo tiene mucho fluff!

Cuídense y hasta la prox.

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Kagome se puso de pie al momento de ver que Naraku se acercaba a ella sus ojos reflejaban algo de temor pero se quedo viéndolo con firmeza.

-Espero que recuerdes nuestro trato hermosa- Kagome sabia de lo que estaba hablando, Naraku paso su mano por el rostro de la joven esta al sentirlo camino varios pasos hacia atrás.

-Eres muy buena actriz- -No estoy actuando- Naraku soltó una risa maligna –Pero como puedes decir eso después de todo lo que te hizo-

Kagome pensó en todo lo malo que le habia hecho Inuyasha la verdad es que no entendía su comportamiento pero sabia que por dentro era una buena persona .

-Quiero romper el trato- La risa de Naraku se detuvo –No puedes- -Si Puedo y lo voy a hacer no te tengo miedo!- Naraku apareció frente a ella y la tomo del cuello apretando sin misericordia.

Kagome trato de quitar sus manos pero le fue imposible se estaba ahogando, Naraku la acerco a el y susurro en su oído –Vas a cumplir con lo que prometiste y ni se te ocurra hablar por que tu vida no será la única que este en peligro si no la de tu preciado hermano-

El corazón de Kagome comenzó a latir a mil por hora y el miedo se apodero de su ser todo comenzó a verse mas oscuro hasta que cayo en la fría nieve.

-Crees que se ponga bien?- escucho una voz de niño –Claro ella es fuerte-contesto otra

-Podrían callarse!- se escucho una mas masculina Kagome abrió lentamente los ojos para encontrarse con esos bellos ojos color ámbar observándola.

Se sonrojo un poco, su cabeza daba vueltas no recordaba lo que habia pasado Inuyasha frunció el entrecejo al ver la cara de confusión de Kagome –Estas bien?- le pregunto algo preocupado trato de ocultar su preocupación pero le fue imposible.

Una pequeña sonrisa apareció en el rostro de la joven –Si, gracias- -Oye Kagome que fue lo que te paso? Por que te desmayaste?- pregunto Shippo curioso.

Kagome se sentó bien recargándose sobre las enormes almohadas que tenia atrás puso su manos derecha sobre su cabeza tratando de recordar –No....no lo se-

Todos la vieron con confusión si no fuera por Inuyasha ella seguiría desmayada en las afueras del castillo.

Kagome de pronto recordó lo que habia pasado Naraku la habia amenazado con lastimar a su hermano tenia que protegerlo pero como? No quería hacer lo que le habia pedido pero tenia que hacerlo por ella y por Souta.

-Inuyasha ya no tenemos té y no hay nada de medicamentos- entraron Sango y Miroku al cuarto.

-Veo que ya esta mejor señorita- exclamo Miroku felizmente al ver a Kagome mejor.

Ella asintió con una dulce sonrisa, Inuyasha no pudo dejar de notar lo hermosa que se veía cuando sonreía se habia preocupado mucho cuando la vio sobre la fría nieve.

-Tenemos que ir al pueblo- Los ojos de Kagome se iluminaron al oír esto Inuyasha lo noto

-No! Nadie sale del castillo!- grito enojado

Sango y Miroku rolaron los ojos –Inuyasha no tenemos nada de víveres-

-pfft claro que si tenemos! Solo están inventando!- -por que habríamos de inventarlo? Puedes preguntárselo a Tanuki el es el que cocina!- reclamo Sango

Todos en el cuarto voltearon a verlo –eh ... yo- -Habla Tanuki!- gruño Inuyasha molesto

-No, no hay nada señor solo queda arroz- contesto el pobre mapache Inuyasha se quedo callado mientras todos lo veían en el cuarto Kagome lo encontró como una magnifica oportunidad de salir del castillo.

-Esta bien iremos- todos dieron un pequeño salto de felicidad Kagome trato de ponerse de pie pero se sintió mareada y se detuvo –Te pasa algo?- le pregunto Shippo preocupado –No no es nada-

-Tu te quedas campesina, eres mi prisionera y no puedes salir de aquí además de que estas enferma y aun esta nevando- exclamó Inuyasha, ya Miroku , Sango y Tanuki habían salido del cuarto.

-Y que? Me voy a quedar aquí sola en este lúgubre castillo?- pregunto la joven enojada la verdad es que no se quería quedar sola especialmente con Naraku en los alrededores

–Quien dijo que yo iba a ir?-

Kagome vio como apareció una pequeña sonrisa en su rostro eso no estaba bien, si ya no le tenia tanto miedo como al principio pero aun tenia un poco de preocupación.

-Si quieres yo también me quedo Kagome!- respondió alegre el zorrito Inuyasha lo vio enojado eso no estaba en sus planes –No tonto tu te vas a ayudar a cargar- Kagome lo vio preocupada –Que tiene de malo que Shippo se quede?-

-Es un pequeño fastidio- contesto mientras le daba un golpe a Shippo quien estaba sentado en la cama cerca de Kagome.

-Oye no hagas eso!- grito enojado Kagome rió vaya que Inuyasha podía ser infantil al verlo así todo el miedo por el se iba pero su humor era muy cambiante se habia dado cuenta en las pocas semanas que habia estado junto con el en el castillo.

-Vamos Shippo corre no querrás que se vayan si ti- El hanyou lo tomo de la cola y lo aventó hacia la puerta el pequeño zorro se pego fuerte contra esta en la cabeza.

-Oww eso dolió- expresó mientras caminaba fuera de la alcoba –Ya te sientes mejor?- Inuyasha se sentó a su lado.

-Si, ya estoy mejor gracias- Kagome trato de no sonrojarse, por que se estaría portando tan amable con ella?

-Hm... no te ves bien- agrego poniendo su manos con largos dedos en su frente –Estas algo caliente- La joven sonrió –Sobreviviré-

Inuyasha se le quedo viendo, su sonrisa lo atontaba era bellísima de pronto volteo la mirada hacia el suelo y se la dejo abajo.

-Eh quería decirte que...- Kagome lo vio atenta –Que se que me eh portado mal contigo en estas semanas- se quería disculpar pero su orgullo no lo dejaba.

El hanyou subió lentamente su mirada hacia los hermosos ojos azules de Kagome lo hipnotizaban –Quería decirtequelosientomucho- dijo en voz baja y muy rápido.

Kagome lo vio confundida –Que dices?- -Eh quiero mostrare algo- contesto rápidamente Ella sabia que eso no era lo que habia dicho pero lo hizo tan rápido que la verdad no pudo entenderlo bien.

-Si ,que es?- -Es una sorpresa- contesto Inuyasha alegre mientras se ponía de pie, tomo la pequeña y suave mano de Kagome para ayudarla a levantarse.

Esta se sentó en el lado de la cama con los pies recargados en el piso –Pasa algo?- le pregunto algo preocupado –Es solo que estoy algo mareada-

Inuyasha se hincó con la espalda hacia ella –sube- Kagome se sintió algo apenada pero lo hizo, El hanyou puso sus manos sobre sus piernas para sujetarla se puso de pie y comenzó a caminar la joven pensó en lo fuerte que era pues caminaba como si no tuviera nada de peso.

-No te molesta verdad?- le pregunto apenada –jaja no te preocupes- Kagome mordió su labio le agradaba sentir como Inuyasha la tomaba con delicadeza recargo su cabeza en su espalda.

Inuyasha lo sintió y sonrió –Ya casi llegamos- camino por el largo pasillo subió las amplias escaleras de mármol hasta llegar a una enorme puerta color café Inuyasha se inclino un poco para que Kagome pudiera bajar.

-Cierra los ojos- susurro en su oído, Ella sonrió y le hizo caso Inuyasha abrió la puerta y entro con Kagome de la mano.

-Espera- corrió hacia las enormes ventanas y movió las lujosas pero algo raidas cortinas para que el sol de la tarde pudiera entrar al oscuro cuarto.

-Ya puedes abrirlos- Kagome abrió lo ojos lentamente para encontrarse con un sueño echo realidad.

Se encontró con la mas enorme y bella biblioteca que habia visto jamás no lo podía creer camino por los estantes estaban llenos de libros estaba realmente impresionada.

-Eh..- Inuyasha se acerco a ella –No se si te guste leer pero quería compensarte con algo por haberte trato tan mal y espero que si te guste...- dijo lenta y cortadamente.

Kagome con una amplia sonrisa en su cara se abalanzó contra el y le dio un fuerte abrazo Inuyasha se quedo en shock en verdad la estaba abrazando? El paso sus manos por su cintura y contesto el abrazo.

–Muchas gracias- susurro Kagome quien tenia su cabeza recargada en el fuerte pecho de Inuyasha –de nada- contesto el simplemente pasando una mano por el sedoso pelo de la joven.

La vida en el castillo no seria tan mala después de todo pensó Kagome sonriendo.

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-Como crees que estén Inuyasha y Kagome?- le pregunto Sango a Miroku ambos caminaban por el pueblo felizmente.

-Pues Inuyasha tal vez este tratando de hacer algo productivo con la señorita Kagome-

Sango le dio un golpe en la cabeza –Pero que pervertido eres!- grito enojada

Miroku paso su brazo por los hombros de Sango y la abrazo –Ah, mi hermosa Sango no lo puedo evitar-

La joven se sonrojo un poco –deje de pensar en tonterías y hay que buscar lo que falta

Sango lo dejo abrazarla la verdad era que le gustaba su calidez.

-Como ordene- contesto el monje con una sonrisa juguetona en sus labios.

Review sip?