3.POCIONES
Al día siguiente la profesora McGonagall fue a buscar a Yavanna a su habitación y la acompañó hasta el Gran Comedor, una vez allí la acompañó a la mesa de Gryffindor donde le presentó a Hermione Granger a la que pidió que la enseñara a manejarse por el colegio. Ella asintió encantada, estaba explicándole como funcionaban más o menos las cosas por ahí cuando apareció Ginny.
"¡Yavanna!" Dijo la pelirroja "al final te han elegido para Gryffindor, ¡es genial!" Se sentó con sus dos amigas y se puso a devorar lo que tenía delante. Entonces volvió la profesora McGonagall, pero esta vez repartiendo los horarios. Nada más verlo Ginny dijo:
"Me parece que tendré que irme ya, ¿a quién se le habrá ocurrido poner Cuidado de Criaturas Mágicas a estas horas?"
Enfrente de la pelirroja sonó un bufido: "Si quieres me voy yo por ti a ver a Hagrid y tú te vas por mí a ver a Snape" La chica sonrió a su hermano y se levantó de la mesa.
"Suerte Yavanna, espero que Snape no te coja manía aunque lo veo un poco difícil." Estaba alejándose de la mesa cuando oyó.
"¡Eh! Ginny, y que hay de nosotros" preguntó Harry con una sonrisa muy dulce.
"Lo siento mucho, pero a vosotros ya os tiene mucha manía" le sonrió a su amigo.
Como Yavanna estaba impaciente por empezar las clases se dirigieron enseguida a las mazmorras, llegaron pronto por lo que Harry, Ron y Hermione consideraron oportuno aconsejar a su amiga sobre su nuevo profesor.
"Nunca te hagas la sabelotodo, no lo soporta."
"Esconde tú insignia de Gryffindor, si no te sitúa a lo mejor todavía te queda alguna oportunidad."
"Ron, ya me ha situado y muy bien."
"Pues pasa desapercibida" aconsejó Hermione.
En esos momentos apareció Snape, que les miró con desprecio:
"Me parece que ya son lo suficientemente mayorcitos como para seguir sentándose en el suelo, ¿no creen?" Hermione se levantó inmediatamente pero los otros tres siguieron sentados desafiando al profesor con la mirada lo que hizo que el desprecio de Snape aumentara, si eso era posible "Señorita Nienna, le importaría acompañarme quiero hablar con usted antes de que empiece la clase." El profesor se fue sin esperar respuesta ni mirar atrás. Yavanna se quedó sentada como si la cosa no hubiera ido con ella. Harry la miró alucinado.
"Yavanna, ¿qué haces?"
"Es un poco déspota, ¿verdad? Se le ha olvidado decirme por favor " dijo la chica con un mohín. Al ver la cara de asombro de sus tres compañeros se levantó de un salto cambiando el mohín por una sonrisa. La verdad es que estaba muy nerviosa, era su primer día de clase y además tenía clase de pociones que era su asignatura favorita, pero este año tenía un profesor que le ponía nerviosa con esa mirada fría e indiferente. Yavanna no sabía lo que ese hombre ocultaba pero sentía unos deseos irrefrenables de descubrirlo. A pesar de todo esto entró en le mazmorra 8 con paso seguro y se dirigió a Snape que se había sentado en la mesa del profesor.
"¿De que quería hablar?" Preguntó Yavanna
"Como ha estado estudiando fuera todos estos años quiero saber que nivel tiene así que la clase de hoy la dedicará a hacer este pequeño examen y cuando acabe quiero que haga un filtro amoroso, ¿cree que será capaz?" Snape le había mandado una poción bastante difícil que él no solía enseñar ya que no le veía la utilidad.
"Claro que sí, profesor Snape" respondió Yavanna con rabia, ¿cómo podía poner en duda su habilidad en pociones?
Yavanna se sentó a responder las preguntas, eran bastante fáciles, casi todas eran relativas a los ingredientes que se utilizaban en pociones que Yavanna conocía muy bien gracias a su estupenda memoria y a su gran habilidad para hacer pociones desde que llegó a su antiguo colegio con 11 añitos. A los cinco minutos empezaron a llegar alumnos, Snape les explicó la poción que tendrían que hacer, Yavanna se dio cuenta de que esa poción era muy fácil, la había hecho en tercero un día que se quería teñir el pelo y le había salido sin dificultad. A la media hora Yavanna se levantó, se acercó a la mesa de Snape, le dio el examen y volvió a su mesa para hacer el filtro amoroso, ¿para quién querrá un filtro amoroso? Se preguntó Yavanna divertida.
Snape se puso a corregir el examen, era un examen asombroso, esa chica lo explicaba todo tal y como él lo hacía, era el mejor examen que veía en toda su historia como profesor, era incluso mejor que cualquier examen de Hermione Granger ya que no había que buscar las respuestas en medio de un mogollón de palabras. Se dio cuenta de que esa chica era muy buena, por lo menos en la teoría así que se dedicó a observarla. Parecía que estaba haciendo perfecta la poción, Snape estaba contento, por fin iba a tener a un alumno que mereciera la pena, aunque fuera un Gryffindor.
Yavanna terminó antes que el resto de sus compañeros ya que su poción era más corta aunque no por ello más fácil. Llenó un botecito con la poción y se la dio a su nuevo profesor, al ver el color Snape se sorprendió, era de un color rosa chillón y tendría que ser naranja.
"Desde aquí me parecía que lo estaba haciendo bien pero se debe haber equivocado porque debería ser naranja, ahora váyase."
"Pues yo he seguido todos los pasos tal y como indicaba el libro así que no puede estar mal."
"A veces no es suficiente con seguir el libro hay que saber como tratar a las pociones."
"Pero..."
"Señorita Nienna hay alumnos que todavía no han terminado sus clases, así que, por favor, váyase."
"Pero..."
"Cinco puntos menos para Gryffindor por seguir molestando a sus compañeros."
Yavanna salió echa una furia, nunca había hecho mal una poción y no iba a empezar ahora por capricho de ese profesor; así que sacó el libro y se puso a releer la poción, en una nota a pie de página ponía: "La poción normalmente toma un color naranja pero hay en algunos casos, en los que la poción toma un color rosa chillón" Ajá pensó Yavanna, no está mal hecha.
"Perdone profesor Snape" dijo la chica mientras que volvía a entrar en la mazmorra. "Pero mi poción está bien."
"¿Qué ha dicho?" Snape estaba furioso, nunca, ningún alumno se había atrevido a corregirle.
"Que mi poción esta bien" dijo la chica con más seguridad "en el libro pone que puede ser de color rosa chillón."
"¿Quién se cree usted que es para corregirme?" Dijo Snape mientras se levantaba furioso. En ese momento toda la clase estaba en la página del filtro amoroso mirando lo que decía Yavanna.
"¿Qué pasa?" La paciencia de la chica ya se había acabado "¿No me cree? Quizás si la probara en usted mismo cambiaría de idea."
"Cincuenta puntos menos para Gryffindor por su impertinencia" Le dijo Snape mientras se ponía rojo de rabia. "Y ahora váyase de mi clase."
"Vale" dijo Yavanna, se acercó a la puerta. Salió pensando en la razón que tenían sus amigos acerca de su nuevo profesor, no entendía su comportamiento y se prometió a sí misma que llegaría a entenderlo aunque para ello tuviera que olvidar lo que acababa de pasar.
Mientras tanto Snape dentro de la clase repasaba lo que acababa de pasar, se había dejado humillar por una alumna, jamás perdonaría a la chica; su único problema iba a ser no prestar atención a la atracción que sentía por ella.
Aquí está el tercer capítulo espero que os guste. Ya que has leído hasta aquí deja un review que no te cuesta nada. Muchos besos.
Amsp14: Muchas gracias por leerla y dejar tu opinión.
