Capitulo 18: "Amargo Adiós"

A los ojos de Saga

Despertamos lentamente al amanecer, abrí los ojos cuando apenas se difuminaban los primeros rayos matutinos formando un color azul ozono en nuestras pieles. Coloque mi rostro frente al de ella con una media sonrisa, dormía. Acomode su cabello de forma que me permitiera ver su rostro, el viento soplo y me vi obligado a moverla para estrecharla mas hacia mi, ella despertó y me miro con una sonrisa angelical, noto al instante nuestra desnudez y se sonrojo.

- es hora de irnos - me susurro - si alguien nos ve...

- no digas nada - le tape la boca y le mire a los ojos - déjame verte un poco mas... solo un poco, lo suficiente como para llevar tu imagen a mis sueños, lo suficiente como para evocarla en mis desvelos... y en los años venideros

- te amo - dijo sin evocar su linda voz, le mire unos segundos mas, su piel, sus facciones... su todo. Después le tape con mi camisa y buscamos nuestras ropas.

Caminamos juntos, tomados de la mano rumbo al santuario. Al llegar a géminis en la mañana, ambos tomamos un baño, juntos y tuve la oportunidad de tallar su espalda mientras le llenaba de besos, después me dirigí a la casa de patriarca.

A los ojos de Lein

Llegue al santuario amazona, justo antes de que todo el mundo despertara. Me di cuenta de que Yuzuriha también había pasado la noche a fuera junto con Shaina que desde la discusión con Marín no había vuelto a dirigirnos la palabra.

Marín despertó en cuando entre, me miro significativamente y mas tarde un abrazo.

. ¿Pasa algo?

- se... que saga no fue elegido y eso debió de afectarte a ti también

- algo... comparto demasiado con Saga... hasta lo que sentimos... - susurre y agache la mirada. Marin se acerco a mi y me quito la mascara de un tirón, no lo esperaba - por que...

- tiene arena - dijo mientras la limpia, yo me sonroje de golpe

- ese color rojo combina con tus ojos - Marín se quito la mascara y se sentó frente a mi - ¿lo hicieron?

- ahhhh... MARIN!

- no lo negaste

- no hicimos nada

- lo niegas de golpe...jajaja... a juzgar por lo sonrojada y la arena... estuvieron en el cabo

- ahhhh ...

- jajaja lo bueno es que nadie mas puede ver tu rostro jaja sino todos sabríamos lo que paso

- me... da pena

- ¿y que tal es?

- hey!

- vamos... dilo

- ¿que tal es milo?

- LEIN! - se sonrojo y me dio la mascara - el patriarca organizo una fiesta en la noche, fiesta de disfraces.

- ¿enserio? ¿Por que?

- para... para honrar al sucesor

- ¡¡por Zeus!... seguro tendrán que ir todos los caballeros de la orden

- será mejor que estés ahí para saga, amiga

- pero... ¿están invitadas las amazonas?

- claro que no... Sabes que no debemos salir de aquí; pero nadie dijo que dos chicas de rodorio - Marín se levanto y saco una caja de la cama - no podían ir a una fiesta de disfraces

- nadie a visto nuestros rostros - sonreí levemente - jeje vamos a la fiesta entonces

- ¡¡¡bien!

A los ojos de Kanon.

Estábamos todos en casa del patriarca cuando este anuncio la fiesta de disfraces y un especial motivo, la sucesión de Aioros. Todos parecían en acuerdo con la decisión, hasta Saga pero yo se que le estaba carcomiendo la sangre toda la envidia que le corroía en ese momento.

Termino de dar su discurso el patriarca y salio apresurado para organizar lo que faltaba para la fiesta de esa misma noche

hermano… te ves muy serio hoy

déjame en paz Kanon

¿decepcionado? – me senté frente a el

de ti – me dijo con voz severa que me sorprendió

al fin tienes agallas para decir lo que realmente sientes

me tienes arto con tus estupideces, por que no te vas por ahí a molestar a quien le importe – me dijo con una media sonrisa segura, se levanto de la silla y se fue. Aioros le miro salir mas que sorprendido

¿le pasa algo? – pregunto Aldebaran que rara vez decía algo, no le gustaba ser intrometido y prefería relajarse y disfrutar de cosas simples.

¿Es notorio? – mi voz sarcástica salio con una sonrisa

talvez este un poquito decepcionado – comento Milo cruzando los brazos, Shura asintió

para haber contestado de esa forma debió haberle afectado mucho – susurro Mu

lo lamento – contesto Aioros

no pasa nada – contesto Shura – no es tu culpa – le sonrió a Aioros y el asintió

da igual ¿no? Si no fue elegido es por que no lo merecía – comento MM

¿desde cuando nos importa algo así? – pregunto Afrodita a MM

tienes razón Afro… - dije sonriendo y me levante – que se diviertan en la fiesta nenas

¿no vendrás? – pregunto Milo levantándose del asiento

¿eres idiota? – conteste relajadamente sin voltear a verlos – es obvio que no puede haber dos Sagas

Kanon – susurro Shura, yo seguí mi camino haciendo caso omiso, tenia mejores cosas que hacer que ir a una estúpida fiesta de disfraces

A los ojos de Lein.

Por la noche todos se retiraron a la fiesta, Marín y yo nos escabullimos cambiándonos de ropas y colocándonos medios antifaces y disfraces para ir a la fiesta. Recuerdo que corrimos mucho hasta llegar al pueblo y mirar las calles llenas de majestuosos adornos blancos y pétalos de rosas en el suelo.

Llegamos al enorme salón donde se llevaría acabo la fiesta, tenia dos pisos y las puertas eran de hierro pintado en blanco con adornos góticos; el salón estaba repleto de gente disfrazada, el techo iluminado por un enorme candelabro de cristal y en las paredes adornos blancos de flores, la música de fondo mientras los suelos rechinan por los tacones y zapatos que bailan sobre el azulejo del suelo color cielo. A los lados había escaleras alfombradas que llevaban a las mesas del segundo piso y frente a nosotros estaba la banda tocando música y muchísima gente conversando con copas de cristal con vino en las manos; otros bailando… otros sentados.

Entramos emocionadas. Marín portaba un hermoso vestido blanco y largo como la cenicienta, yo traía un vestido rojo con vuelo como si se tratara de las épocas de castillos, mi cabello suelto hasta la cintura, negro…contrastando con el vestido y mis ojos cubiertos por un antifaz, rojos.

Camine buscando con la mirada a los jóvenes dorados, encontré a los ocho sentados en la mesa de honor junto con el patriarca, cada uno con un disfraz distinto pero todos con el estilo de caballeros al rescate, caballeros como de la edad media o algo así. El patriarca por supuesto estaba con sus aposentos diarios charlando con la gente importante del pueblo.

Caminé entre la multitud mientras una hermosa balada en guitarra se escuchaba; pero Marín me sujeto de golpe

¿estas loca?

Solo un poquito – conteste apenada y ella sonrió

El patriarca debe de ser la única persona que ha visto y recuerda tu rostro… ¿no es así?

¡¡Rayos! Lo había olvidado… el me conoce desde que era un bebé

bien… lo traeré para ti – yo asentí algo apenada y me recargue en la pared con los brazos cruzados mientras Marín caminaba hacia la mesa de honor

A los ojos de Marín

Camine segura de que nadie me reconocería jamás, después de todo Milo, el caballero de Escorpión y el caballero leo, eran los únicos que me había visto sin la mascara. En cuanto me pare frente a la mesa, Milo dejo caer el vaso de vino

¿estas bien? – pregunto alarmado Aldebarán y volteo a mirarme - ¿desea algo señorita? –

quería saber… si el caballero me permitiría una pieza

encantado – menciono Milo

he… no te esta mirando a ti – comento Shura por lo bajo dándole un codazo

saga…- susurro Mu y el susodicho volteo

¿sucede algo?

Esta señorita quiere bailar contigo – comento Aldebarán mientras Milo no dejaba de mirarme

Tu eres – susurro Milo y yo asentí

Mejor lleve al señor – contesto Saga y siguió mirando a los alrededores con la copa en la mano. Mire significativamente a Milo

¡¡Ya! no seas payaso Saga – Milo le dio un leve empujón – no seas descortés con la dama

además es la tercera que rechazas en el día – contesto Mu

vamos Tío ni que con eso le fueras infiel a Lein – comento divertido Shura y Saga cerro los ojos agachando la cabeza

hay si serás tonto – comento molesto Milo dándole un golpe en la frente a Shura, evidentemente aquello tenia que ser un secreto entre caballeros y amazonas.

¿vienes? – comente y el caballero se levanto y me tomo de la mano, me miro a los ojos

Bailamos un poco perdiéndonos entre la gente y lo lleve hasta una chica de rojo que le esperaba en medio de la pista, tome delicadamente su musculosa mano y la pose en las de ella, que tenia estiradas como si esperase un regalo.

y tu eres- susurro Saga y miro fijamente los ojos de la joven – LEIN – la susodicha le tapo la boca y lo jalo un poco comenzando a bailar.

Yo por supuesto regrese a la mesa de honor y me robe a un apuesto caballero de ojos azules, cabello azul y linda sonrisa.

A los ojos de saga

Se veía tan hermosa con ese vestido que hacia destellar el brillo de esos ojos rojos.

si el patriarca te ve

calma… trato de no llamar la atención

¡¡si claro! Con el vestido rojo, los ojos semi-diabólicos y… - me quede callado cuando ella agacho la mirada – perdona no quise decir eso de tus …ojos

no importa – me sonrió

Dimos varias vueltas mientras se escuchaba Yume miru tameni de fondo, ella se recargo en mi pecho lentamente y ambos cerramos los ojos… por un instante… solo por un instante me sentí volando, me sentí lleno de luz y paz… nada había a nuestro alrededor, tan solo la música y las estrellas acompañaban a nuestros lentos pasos. Estrecho mi mano con fuerza mientras se aferraba al latir de mi corazón en una sonrisa, en una mirada; yo simplemente estaba anonadado por la calidez y nuevamente pude sentir a nuestro corazón latir rápidamente…al compás de una tierna canción en una noche que jamás olvidaría, en una danza que jamás he olvidado…. Aquella era nuestra canción. Y ellos lo arruinaron…

hay mujeres mas lindas aquí –escuche en mi mente

tu…. Déjanos en paz – pensé

vamos, me estoy aburriendo con esta mocosa

que nos dejes – me puse tenso y de golpe nos detuvimos

de todos modos tendrá que irse

que…

el patriarca – susurro Lein y me soltó – perdona amor – salio corriendo entre la gente cuando mire al patriarca llegar hasta mi

¿Qué hacías?

Bailaba – y tomo posesión de mi voz nuevamente.

Sabes muy bien las reglas

Si, si… ya se…. Virgen por siempre

Saga – me sujeto por el brazo, yo me quede perplejo, no podía dejar de hablar… no eran mis palabras

Me permite… iré al aburrido rincón de la fiesta – me solté de golpe y le rete con la mirada, el volteo a ver hacia donde corrió Lein y me dio un vuelco el corazón

¿Quién era ella?…. Se parecía tanto a Lein

¿por el cabello negro? Vamos… su querida "pequeña" no es la única con el cabello singularmente largo

pero si con el cabello azulado

pues…acaba de ver a otra con el cabello así – comente sonriendo, esta vez era yo

por que la encubres, si desaparece de nuestras vidas nos quitaremos de muchos problemas – dijo el dios falso a mi mente.

tienes razón… creo que estoy paranoico con Lein – comento el patriarca sin dejar de ver a esa dirección.

yo estaría paranoico tratándose de esa maniaca

saga - su voz nuevamente tomo el estilo autoritario que habría de corresponderle siempre.

esta bien no digo nada – me di la vuelta y regrese a mi lugar

linda chica, lastima que salio huyendo en cuanto se topo con el patriarca – me dijo Aioros con una sonrisa, una vez que regrese ala mesa

bastardo – pensé - ya sabes… primero son unas zorras y cuando ven problemas huyen – conteste de golpe ganándome una fea mirada de parte de Mu

no se habla así de las mujeres

¡¡claro!… lo dice el único virgen del santuario – todos se quedaron callados unos segundos hasta que Shura rió un poco para sacarnos del momento de tensión

¿estas de mal humor por que te cortaron el baile? – pregunto Milo, le mire fríamente – lo digo por que a mí también me cortaron la inspiración – dijo mientras se despedía con la mano de la chica de azul que se retiraba

no nos dejan hacer nada… espero que siendo tu el patriarca permitas ciertas emociones – le dije severamente a Aioros y me levante

no comprendo

eso de morir virgen por la diosa no me agrada – conteste

ni a mí

Milo –le golpeo Shura en la cabeza y volteo a verlo

no te pases Saga – dijo Aioros tranquilamente

estoy arto de este lugar – dije

ya somos dos – contesto MM – voy a fumar a fuera ¿vienes?

Vamos – conteste y nos retiramos ante la impresión de todos.

Estuvimos un poco afuera, sentados en una pequeña cerca hecha de piedra, tendría como unos 20 cm. de ancho por 35 de alto. MM fumaba tabaco junto a mí mientras mirábamos las estrellas

odio que no nos permitan ver los placeres de la vida – dijo molesto MM – esa estupidez de no enamorarse de alguien solo por que estamos condenados a morir no me agrada

el patriarca suele ser muy estricto – regrese a la posesión de mis palabras – pero al parecer solo esta prohibido con amazonas del mismo santuario

¿entonces por que no les dejo bailar?

Seria muy mal visto que chicas del pueblo, chicas que se ven tan menores estuvieran con caballeros como nosotros

hace un rato no parecías muy de acuerdo

no importa – conteste y me lleve el cigarro a la boca

¿realmente amas a Lein? – pregunto MM y volteo a mirarme, yo ni siquiera me moví, eran cosas que no le importaban a MM – eres comunicativo

Nos quedamos un rato callados cuando alguien me cubrió los ojos por detrás, sentí sus manos algo frías y ásperas, pude sentir sus uñas cerca…

déjame – susurre y ella quitó las manos – ¿Qué haces aquí?

No te da gusto verme – dijo yuzuriha y se pusó frente a mi, recargo sus brazos en mi cuello

Esta servida en bandeja de plata – me dijo el dios a la mente – se me antoja

Así que aquí vienes de perdida nuevamente

Pierdete MM

Pufff… no se como la soportas – contestó MM que le hizo mala cara a Yuzuriha y se retiro rápidamente

¿Qué quieres? ¿No tenias prohibido venir?

No quise obedecer

Mejor para nosotros – pensó mientras comenzaba a sentir su cosmos negativo nuevamente. Algo me estrujaba el corazón… era él… Ares

Sabes…. Les vi haciendo el amor en la playa – susurro Yuzuriha y tomo su mascara tirándola con fuerza al suelo, en un típico berrinche – la odio

Lo se…- una vez mas había pasado de ser Saga, el caballero de géminis… a un simple espectador encerrado en mi propia mente – pero… no importa

¿COMO DE QUE NO IMPORTA? – me grito y se lanzo a mis piernas sollozando – quiero ser yo la que re ame en la playa

en la playa, en el infierno… da lo mismo – susurré a su oído y la levante por los hombros – tu también eres de mi propiedad

pero quiero ser la única

entonces… encárgate de Lein

¿que me encargue?

mátala – susurre y le di un beso en la boca

NO PERMITIRE ESO – grite, Ares sonrió en mi cuerpo ya que mi voz no salía de mi boca… solo pensaba y solo Ares podía escucharme

Me estorba idiota… creo que solo así dejaras de luchar y aceptar tu destino

Mi destino – susurre mientras dejamos de besarnos

Hazme el amor saga

ah… si eso quieres- comento Ares y bajo su mano hasta su pecho dándole nuevamente un beso cuando escuche un ruido, era algo que caía al suelo, al separarme de yuzuriha sin dejar de rebuscar en su sostén me tope con los ojos rojos

Saga – susurro entre lagrimas que el viento comenzaba a llevarse y revolotear con su cabello

Lein – susurre con una sonrisa- ¿quieres hacer el tercio?

¡¡¿Qué! – dijeron ambas

Por que… ¿Por qué juegas conmigo?

Por que me gusta jugar – dije mientras empujaba a Yuzuriha lejos de mi cuerpo y me desabrochaba la armadura

No le digas mentiras- dije con determinación intentando tomar posesión de mi cuerpo y mi voluntad, sin lograrlo

Pero tu…

El me ama, acéptalo Lein – dijo Yuzuriha levantándose con el cordón de la blusa destrozado

El… no te ama

Bueno... si no vienes a hacer el tercio por que no dejas de estorbar – dije con voz severa, Lein asintió y camino hasta mi, empujo a un lado a yuzuriha y se coloco frente a mi... clavando su mirada fiera

Lein - susurre

SOLO TE AMAS A TI MISMO – me grito Lein y me volteo una bofetada, luego se fue corriendo a velocidad luz y yo comencé a reír macabramente

LEIN! – grite en mi mente, se había ido… otra vez.

A los ojos de Kanon

La verdad es que por aquel tiempo estaba lleno de ira, no podía entender la forma en que quede huérfano, la forma en que murió mi madre, la forma en que mate a mi padre y el hecho de tener que lidiar con una imagen idéntica a la mía… con alguien que siempre te acompaño y que no habías notado la amenaza que era para tu propia identidad. Estaba enojado, estaba confundido y además… solo.

En cuanto Saga comenzó a contestarme de mala gana e insultarme en las mañanas cuando se arman las discusiones supe que algo no andaba bien. Saga solía ser pacifico... En esos momentos pareciera un demonio… así era Ares, paciente, astuto, engreído, fuerte, sulfúrico entre otras muchas malas cualidades que casi eran como las mías… de no ser por la cantidad de maldad en su actos.

Así que…. Para mi fue muy fácil fastidiar un rato a Saga, mas cuando Ares se encargo de alejar a Lein. Ella llego hasta mi cabaña aquella noche, llorando, en cuanto entro la estreche entre mis brazos y acaricie su cabello

el… es extraño, hay algo que no es como antes – me dijo mientras yo la invitaba a sentarse en la cama

calma, ya no llores. Te juro que Saga no vale la pena – dije acariciando su rostro con un pañuelo para borrar las lagrimas

es como si fuera alguien mas – comento, imagino que su mirada estaba perdida, yo solo podía ver el duro metal aunque en su voz y su actitud se escuchaba que lloraba crudamente

creo… que Saga se esta volviendo malo – dije con delicadeza fingida

¡¡¡no digas eso! – se levantó de la cama cerrando los puños

se que le amas… pero no permitas que ese amor te ciegue Lein – me quede callado volteando a la chimenea y mire las cenizas fingiendo pesar – es mi hermano y le quiero; pero no puedo permitir que te lastime, ambos prometimos protegerte – me levante sujetando sus hombros

Saga no es malo…. Lo se – susurro volteando a la lejanía – lo conozco…. Lo se…

No es tu culpa – le susurre abrazándole – mejor… aléjate de él, ya no es seguro

¿Qué hago con este amor? – me abrazo por la cintura estrujando su mascara contra mi pecho -¿Qué hago?

Nada…. Solo…. Espera – susurre a su oído. La verdad es que me pesaba verla sufrir por mi hermano al que consideraba por aquel entonces un maldito bastardo, el no merecía ni el amor de mi hermana Lein, ni la armadura…. Ni al dios.

A los ojos de MM

Los demás santos siguieron hablando mientras tomaban "ponche" (habrá que aceptar que me las ingenié para meter alcohol en nuestras bebidas), solían bromear y sonreírse para luego hablar de cosas mas serias, de cómo seria la vida luchando juntos, de cómo seria Atenea; pero a mi nada de eso me interesaba, solo estaba aburriéndome mientras veía a algunas jovencitas hermosas guiñarme los ojos.

Afrodita que era todo un galán entre las mujeres solía aceptar rosas que muchas le regalaban, estaba sentado frente a mí cuando una niña de escasos 7 años le entrego un ramo de rosas

gracias niña, unas hermosas rosas para alguien de mi altura – la chica asintió y se fue, yo me reí a carcajadas

"que hermosura … la de la rosa y la mía " – seguía burlándome mientras imitaba su voz

eres un retrasado Mascara – contesto acomodando una rosa en su oído – pero alguien sin clase como tu, jamás podría ver la verdadera belleza

belleza son los gritos de la gente del Yomotzu – conteste en voz baja y el me sonrió

¿Cuántos son?

¿míos? Serán como 300, si contamos los imbeciles que nos fastidiaron en el bar hace dos días – conteste sonriendo maliciosamente

debes de aceptar que yo ayude

esas rosas aromáticas tuyas me han gustado… nada como una muerte lenta – conteste

y no has visto mi mejor truco –

¿has practicado otro?

Uso una de estas – contesto sonriendo mostrándome una rosa blanca

Fascinante si no fuera por que usas rosas – conteste aplastando una rosa normal

Nos mirábamos mutuamente charlando de mis victimas y las suyas cuando un hombre sucio entro corriendo a la fiesta y se coloco frente al patriarca, era uno de sus informantes. Mientras hablaban el hombre se veía muy alarmado y a todos nos llamo la atención, el patriarca volteaba a ver en nuestra dirección.

Después de que el hombre hubo terminado de hablar se fue corriendo y el patriarca se acerco hacia mi he hizo una señal a la banda y a la gente para que continuara la fiesta pues todos se había petrificado… parecía grave.

tenemos que hablar – me dijo y le acompañe a fuera. El patriarca se sentó en el césped y yo le acompañe…la escena era extraña

¿Qué pasa? ¿le ha dicho algo de mí aquel hombre?

Era un informante… lo mandé hace unos días a tu lugar de entrenamiento – un escalofrió paso por mi mente, sentí un poco de miedo pues nuestro secreto pudiera haber sido descubierto

En…. Mi… - susurré mirando al cielo nostálgico, asustado…y por dentro lleno de odio, me estaba pudriendo.

Le envié buscando a Kalistenes, tu maestro

¿le encontraron? ¿Cómo esta? – dije volteando alarmado, como si realmente me importara

alguien… lo asesino a sangre fría

¿Qué? – me levante de golpe y el patriarca no se movió

al parecer fue con una arma punzo cortante, le atacaron por el frente y luego lo enterraron cerca de la casa, de hecho frente a la puerta…. Llevaba dos años ahí

dos años – susurre – justo cuando me fui….solo estaban esperando a que estuviera solo – dije casi con desesperación y llevé mis manos a las sienes en expresión de pesar

así es… no hay huellas, no hay ni rastro de batalla. El asesino sabia lo que hacia

por Atenea -susurre y agache la mirada

hay algo mas

¿Qué? – voltee sorprendido, estaba seguro de que el sabia la verdad pero…. Me equivoque

escucha, conozco a kaslitenes desde que era un niño, mire como lo entrenaron y sabia que seria buen maestro… era algo agresivo y estricto pero… buen maestro – definitivamente Shion no conocía a ese infeliz

lo siento, esto también debió de haberle afectado

cuando…. Cuando le envié a la isla para entrenar a futuros caballeros el me confeso algo – le mire intrigado y él se levanto sujetándome el hombro

escucha hijo… esto no es fácil pero

pero…

cuando kalistenes se fue me confeso que había una mujer en su vida, ella era de Italia, su nombre era Sishire, quería que la protegiera – el patriarca guardo silencio un momento, estaba tomando valor – ella murió al dar a luz a un pequeño niño

¿un hijo? – susurre, como era que ese bastardo podía tener hijos, ¿Por qué los dioses le enviaran un descendiente a ese infeliz? Por mi mente paso eliminar al mocoso solo por hacer sufrir a Kalistenes…

su nombre era… Zairus – dijo el patriarca y la sangre se me helo, todo lo que podía haber de compasión en mi murió aquel día

¿Qué? No….no

Kalistenes era tu padre… lo lamento mucho Zairus – dijo el patriarca y me estrecho. Me quede perplejo… había matado a mi propio padre… justo como Kanon, en estos días actuales hemos compartido palabras él y yo…creo que ahora nos entendemos mas.

NO ES CIERTO – grite con furia y lo empuje - ¿Por qué? ¿por que me lo ocultaron? – grite y derramé algunas lagrimas, siempre soñé con una buena familia y una vida mejor que la que tenia…estaban destrozado el sueño… no me moleste por el hecho de que hubiera matado a mi padre…. Sino por que él estuvo a punto de matarme varias veces… el me enseño a odiar.

Perdóname Zairus, no había tenido el valor para decirlo y creí… sinceramente creí que Kalistenes te lo había dicho

No… no lo dijo – conteste y seque mis lagrimas, me di la vuelta

Zairus…

NO ME LLAME ASI….- conteste de forma arrogante – soy Mascara de la Muerte… del signo de cáncer.

A los ojos de Saga…

A la mañana siguiente me levanté, caminé lentamente hasta el baño y me lavé la cara con un poco de agua tomando la toalla para secarme, suelo levantar la mirada al espejo. Bajé la toalla lentamente y me topé con los mechones de mi cabello grises, la toalla cayo y me sostuve un momento del lavabo impresionado por el color del cabello.

que demonios… – susurré y toqué con las yemas de los dedos los mechones grises

¿te gusta? – dijo aquel infeliz que se hacia llamar un dios

por que… - susurré nuevamente, miré hacia atrás cuando escuché a Kanon moverse, cerré la puerta con seguro

¿no lo entiendes? Entre mas se desarrolle mi cosmos, mas será mi poder para manipular tu cuerpo a mi antojo

maldito infeliz

¿Qué te pasa? ¿No te gusta?

Eres un…. Bastardo

Los cambios serán mas notables con el tiempo, tu cuerpo ahora es mío

Eso no es cierto

¿Por qué no se lo preguntas a Lein?

Maldito

Ella es una persona muy linda, tiene un buen temperamento y… esas caderas…

Maldito bastardo – susurré y cerré los ojos con fuerza, como si aquel fuera un mal sueño

Sabes… he pensado y… esa mujer tiene que ser mía

NO TE ATREVAS A TOCARLA

¿quien lo va impedir? ¿tu? Pero si no puedes protegerte de mí- dijo entre risas y volteé hacia el espejo, mirando el cabello totalmente gris y los ojos rojos, estaba sonriéndome con un cinismo profundo. Rompí el espejo con el puño cortando mi mano

no te atrevas a tocarla

entonces… aléjala de mi... aléjate de ella – me susurraba la voz profunda en la mente, mientras lentamente me recargaba en la puerta, dejándome caer despacio al suelo – aléjate de ella no sea que vallamos a matarla como a Caliope

no la toques…. no….

¿harás lo que quiera?

No…la toques – susurré con la mirada perdida mientras mis ojos comenzaban a llenarse de lagrimas de rabia, de hiel

¿saga?... ¿estas bien? – kanon tocó la puerta, juraría haber escuchado preocupación en su voz

estoy bien Kanon… regresa a la cama

¿seguro?

Si…estoy…bien – dije con determinación y miré las partes del espejo destrozado en el suelo, una sonrisa se evocó en mi boca y después mi reflejo regreso a la normalidad

A los ojos de Kanon

Le había escuchado desde el otro lado, estaba llorando eso me dio lastima por unos segundos, después un pensamiento macabro vino a mi mente… yo mismo tendría que fastidiarle la vida, mas de lo que Ares lo estaba haciendo…sonreí levemente

saga… necesitamos hablar

escucha…. No estoy de…

es sobre Lein – le interrumpí y el inmediatamente abrió la puerta- ¿estabas llorando?

No – contestó en seco y me miró con tristeza - ¿Qué te dijo?

Escucha… eres un imbécil, eso no es secreto, por ello creo que deberías alejarte de Lein… si verdaderamente la amas…

Kanon – susurró Saga y agachó la mirada con pesadez

Me dijo lo de Yuzuriha… ¿Quién te crees para andar jugando así con las mujeres? – le dije con determinación y sujeté con fuerza su camisa, le clavé una fría mirada

Soy… un imbécil ¿no? – contestó con pesadez y tomó mi mano con fuerza

Si te acercas de nuevo a ella yo…. Voy a matarte – susurré y quité mi mano – aunque seas mi hermano… voy a matarte

¿te importa mucho? – preguntó con interés y en su mirada noté un leve destello de ira

no eres el único que… -susurré y agaché la mirada pensativo, luego le di la espalda

¿Qué kanon? – me dijo y sujetó mi hombro con poca fuerza

que estoy…- me callé unos segundos, estaba llegando al extremo de mentir solo por envidia, por odio, porque estaba confundido… aun no lo se

estas…- susurró saga y me hizo mirarle a los ojos

estoy enamorado de Lein – contesté con un tono de tranquilidad y preocupación fingida.

Kanon – susurró Saga y me estrechó entre sus brazos, me quede quieto – si la amas… yo…

Saga... perdóname – le dije empujándolo y volteando hacia otro lado, mire por unos segundos la foto en la que éramos aun unos niños, cuando éramos buenos hermanos - esto, es como una traición, ella es tu…. No se que sea pero… Lein … le importas mucho y yo… yo me hago a un lado – El me miró pensativo

Kanon… si la amas verdaderamente… quiero que la hagas muy feliz – me dijo sonriendo con tristeza – seré yo quien se haga a un lado

Pero… tu la amas – le dije con tristeza, aunque por dentro estaba apunto de estallar en risa

Tu si puedes hacerla feliz kanon, yo…. No puedo, no puedo – dijo con un tono de voz lastimero y salió del cuarto rápidamente

Saga… eres un idiota- dije en voz casi imperceptible al tiempo que tomaba el cuadro entre mis manos – no mereces nada… ni amor, ni gloria… no mereces ni estar vivo – aplique pequeña cantidad de fuerza al cuadro, lo suficiente como para doblarlo con lentitud – y vas a pagar por todo lo que me robaste – sonreí al tiempo que el cristal del cuadro se rompió, mi mano sangró levemente manchando la cara de saga – ares no es tu único enemigo.

A los ojos de MM

Abrí los ojos lentamente, aun traía el ridículo traje de caballero medieval que había portado en la fiesta. Sentía mis ojos irritados e hinchados, junto a mi se encontraba alguien mas, estaba abrazándome la cintura; voltee con cierta impresión hacia esa persona, era Afrodita, con el rostro angelical.

¿Qué te pasa idiota? – le empuje y cayó grotescamente de la cama

hey! Tu me pediste que me acostara, retrazado – me dijo con desprecio y se levanto al instante

yo no te pediría eso NUNCA – le dije con ira, él se sonrió y me mostró las dos botellas de coñac, ellas fueron las culpables de mi dolor de cabeza- esta bien… estaba ebrio

escucha Zairus…

no me llames de esa forma

se que nuestras identidades anteriores quedaron enterradas, debes enterrar el pasado.

ERA MI PADRE

ERA NUESTRO ENEMIGO- me grito afrodita con lagrimas en los ojos sujetándome por la camisa, ambos nos miramos a los ojos – merecía morir por todo el daño que nos provoco, merecía morir… y tu nos vengaste, a ambos

Pero…

Escúchame mascara, hiciste lo que era necesario no solo para tu supervivencia sino por nuestro propio honor. Nadie puede lastimarnos de esa forma…

Elimine a mi única familia – susurré y me estrecho entre sus brazos con fuerza

Aun somos amigos – me susurro al oído cuando escuchamos unos pasos acelerados, alguien había estado escuchándonos.

Ambos corrimos a velocidad luz y tapamos el paso del intruso que casi escapa, detuvo en seco su marche al tiempo que la canasta de fruta caía al suelo desperdigando las manzanas en todo el. Mire los ojos aterrados de aquella joven rubia, sus ojos azules que se anegaron de lágrimas y miedo.

¿Por qué nos espiabas Karin? – le dije con cierta ferocidad y frialdad

no era mi intención señor MM, yo solo traía algunas frutas para afrodita.- me dijo y afrodita asintió cuando le mire

¿Qué tanto escuchaste?

Le juro que nada, se lo juro – afrodita se acerco tomándola por los hombros, la chica estaba temblando

¿Por qué tiemblas Karin? – le susurro afrodita al oído y yo me acerque clavándole una mirada casi sádica- nuca habías temblado ante nuestra presencia –

lo escuchaste todo – susurré acariciando su cuello

no…. No le juro que no…- me dijo con una desesperación exquisita en su voz, afrodita miro mis ojos llenos de unas ansias de destruir que por aquellos tiempos surgían casi siempre. Sonrió levemente si dejar de mirarme

no podemos arriesgarnos Karin – le dije y reí macabramente, Afrodita abrazo el cuello de karin como aplicando una llave. La chica en reacción sujeto los brazos de afrodita con desesperación, no podía gritar pero se retorcía de manera increíble mientras el aire y la vida se le escapaban de un tajo, forcejeo por unos segundos hasta que todo el aire se escapaba, sus ojos azules se cerraron lentamente mientras dejaba caer las manos a los costados

la chica de shion – susurré sujetando la barbilla de la joven que había muerto- este es el cobro por mentirme tantos años – susurré y la estreché entre mis brazos con lagrimas en los ojos

Zairus …- susurró Afrodita mientras algunas lagrimas se le escapaban, hay que aceptar que afrodita y yo desde siempre habíamos sido buenos amigos.

Mira lo que hemos hecho Paris – dije con la garganta destrozada y cargando a Karin – mira el extremo al que hemos llegado por ocultar nuestros pecados, por hacer que otros paguen…

Debemos de ocultar el crimen – me dijo y se acerco a besar la frente de karin – perdónanos… pero no podíamos permitir que acabaras con lo único que hemos logrado en esta asquerosa vida,… la victoria, la armadura dorada – dijo y nos encaminamos entre la oscura noche a ocultar el cadáver.

Caminamos entre los árboles del extenso bosque, ambos decidimos imitar el móvil del asesinato de Caliope para que sospecharan que había más gente de la orden de Ares, aunque yo sabía bien que todos estaban muertos. Así lo hicimos, colocamos a karin entre dos árboles y abrimos su pecho extrayendo el corazón, mismo que abandonamos en el mar…mientras caminábamos rumbo a cáncer me recargue en el hombro de Afrodita totalmente cansado y el me estrecho levemente, seguimos caminando y yo comencé a recordar…. Recordar la noche en que mi padre murió…

A los ojos de Saga

Entré al cuarto con lentitud, pude verla entre los pocos haces de luz que se difuminaban por la ventana, estaba descansando en un expresión de calma que extrañe alguna vez en mi propio rostro. Sus parpados cerrados mostrando sus largas y hermosas pestañas, sus labios delgados mas relajados de lo normal, su tez blanca resplandeciendo… hermosa.

La había citado en ese cuarto aquella tarde, estaba seguro de que kanon venía tras de mi, no dije nada y cerré la puerta. Caminé hasta ella, acaricié su largo cabello negro con una media sonrisa en el rostro, las lagrimas querían escaparse pero me contuve, algo dentro de mi reía, era él… Ares…. Como le odio aun hoy.

Me acerqué a su rostro y lentamente, le regalé un beso que le despertó, ella me clavo una tierna mirada estrechando levemente mi cuello entre sus brazos…

saga… amor, que bueno es verte – susurró mientras destellaba el brillo del atardecer en sus ojos rojos.

Escucha…. Yo se que últimamente las cosas han avanzado demasiado, yo se que hemos compartido muchas experiencias y que hasta ahora me he equivocado muchas veces

Explícame que paso con yuzuriha…. Dime… ¿Por qué? ¿Por qué pudiste hacerme algo así? – dijo con toda la calma del mundo, podría jurar que su tono de voz no se escuchaba como un reproche, ni siquiera pude notar ira

Porque… yo…. – me miró a los ojos buscando respuestas

Dímelo… confía en mi saga, intento entenderte y apoyarte… pero… necesito que seas totalmente sincero

Lein yo…- no podía decírselo, en parte no lo deseaba, estaba totalmente enamorado de ella; pero esa misma razón me impulsaba a esa decisión tan extrema, si yo hubiera sabido lo que pasaría después de esa noche… no se, tal vez hubiera podido evitar todo el dolor que sentí y aun el dolor de ella…. Esa noche me odie tanto por hacerla llorar de esa forma

Maldición! ¿Vas a confiar en mi algún día?

No…

¿Qué? – ella me soltó en un instante, esa mirada diferente se clavo en la mía nuevamente buscando respuestas – por favor… te lo ruego… dime la verdad… ¿es qué estas enamorado de yuzuriha? ¿fue por eso qué la estabas besando?

Escucha – le dije sujetando su rostro con mis manos, use poca delicadeza – la verdad es…. Que yo no te amo

¿Qué? – dijo con fuerza sosteniendo mis manos y buscando mi mirada que hasta ahora la estaba evitando

¡¡Lo que oíste! NO TE AMO… JAMAS LO HICE…

ESO NO ES CIERTO…. Mírame a los ojos y di que no es verdad, dime que aquella noche no sentiste nada, que mis besos no son nada…. DIME QUE TODOS ESTOS AÑOS DE CONOCERNOS NO SON NADA

ASI COMO LO OYES… NO ERES NADA

Saga….- susurró y dejo caer sus manos al tiempo que sus bellos ojos se anegaba en lagrimas. Maldita sea… es que siempre la hacía llorar, no servía para amarla, creo

Lo lamento pero todo este tiempo estuve jugando, escucha, en realidad recuerdo muy pocas cosas de nosotros en el pasado y sinceramente no me interesa

¿Por qué? – agacho la mirada escondiéndola

no me interesas…. ¿no lo entiendes? Tú o cualquier otra mujer, todas son lo mismo. Al final mi único objetivo es hacerme mas poderoso para proteger a Atenea

a… Atenea… - susurró sin moverse aun, yo no busque su mirada y no pensaba hacerlo, si así fuera entonces yo no hubiera podido salir sin dudas y dejarla llorando de forma inconsolable.

Caminé por el pasillo de aquellos viejos cuartos, ese olor a antiguo me calaba las venas, el piso de madera rechinando al tiempo que daba un paso y otro; por el corredor podía escucharse su llanto ahogado, destrozado… mi alma se estaba haciendo pedazos, ¿Cómo pude haber destrozado de esa forma el corazón mas débil de todos? ¿Cómo pudo aquel dios ocultar mi dolor? ¿Cómo pudo engañar su sentido de empatía? ¿Cómo se puede ser tan perverso para destruir un amor que parecía eterno?... no se, tantas preguntas y tan pocas respuestas y el aliento me faltaba mientras caminaba, el aliento aun se me escapa cuando recuerdo sus lagrimas aquella noche…no sabes cuanto me odié Atenea… aún no puedo perdonarme del todo por tanto dolor infringido a ella… a mi… a nuestro amor.

Por el camino me topé con Kanon, me miró significativamente, una sonrisa que por un instante me denotó sus malas intenciones, por un momento casi le golpeo con un: "no te acerques nunca a ella" pero…. me trague todo el cuento de ese amor falso, me trague las vanas palabras de mí hermano que estaba tan desorientado como yo…. Ambos estábamos decayendo en un profundo hoyo

¿Qué paso?

¿tu que crees idiota?

La…. Dejaste ir

¿¿¿No era eso lo que querías? ¿¿¿Estas muy feliz ahora?

Saga yo…. Yo no te obligue

Pero lo hiciste, ella es lo único importante… será mejor que la cuides con tu vida o de lo contrario te juro Kanon, que terminaras encerrado en el cabo – dije y le sujete la camisa con fuerza

No serias capaz

No me conoces aun

Debo de temer por eso

Mas te vale que lo hagas – dije con frialdad y me fui secamente dejándolo intrigado en medio pasillo, lo pensó un poco y camino hasta la puerta donde se detuvo un instante

¡¡¡No lo dudes! – le grite

Jamás lo hago…. ¿no te ibas ya?

A los ojos de Kanon.

La puerta de madera desgastada por los años, la manija de la puerta color dorado que reflejaba mi mano a punto de sostenerla, de otro lado sus lagrimas que destrozaban alguna parte de mí alma. Cerré los ojos con pensar, sujete mi pecho un tanto mareado, después de todo las resacas de mi ultima batalla en Asegard aun estaban ahí, ella no paraba de llorar y yo ¿En que monstruo me estaba convirtiendo? ¿Cómo pude destruir las ilusiones de mis dos hermanos? Aun me lo pregunto, aun me pregunto como fui tan débil para dejarme llevar de esa forma por mis propias pasiones.

Entro al cuarto y le veo en la cama, ahí, recostada boca abajo con la cara en la almohada, sujetándola con tanta fuerza y ahogando en un intento vano sus lágrimas

Lein – susurré

No quiero hablar ahora Kanon

Pero

No quiero

Déjame cuidarte – le dije con fuerza y ella no se movió, no dijo nada. Caminé hasta ella mirando en el taburete la mascara plateada y luego enfocándome en su cabello extendido por su espalda, mi mano instintivamente llego hasta su cabeza acariciándola como a un pequeña niña. Me senté junto a ella en la cama

Kanon… ¿Por qué? ¿Por qué ha jugado conmigo? ¿Por qué destruyó todo esto en un instante? – dijo con la voz resquebrajada

Lein, el no se merece tu amor, el no merece nada, ya déjalo ir, te lo ruego, déjalo ir YA

NO PUEDO…. LO AMO – grito con fuerza y se levanto de golpe abrazándome con fuerza – necesita de mi, puedo sentirlo. Hay algo en su interior, algo que le lastima

No… no te lastimes por el, deja de herirte por el, deja de adjudicarte responsabilidades que no son tuyas... te lo ruego, no permitas que te lastimen de esta forma… - la estreche entre mis brazos derramando una lagrima… ¡¡maldición! Mis acciones también estaban afectándola a ella que nada tenía que ver en mí venganza, en mí dolor

¿Por qué? ¿Por qué te sientes culpable? – me susurró y se alejo un poco de mi, me miro desnudando mi alma, yo miré por primera vez su rostro delicado, esos ojos… rojos… como el rubí…tan dulces… tan tristes.

Yo… no… lo se- susurré y cerré los ojos, ella sostuvo mis manos y sonrió levemente entre lagrimas – tu lo sabes… sabes que hay una profunda oscuridad en ambos

En…ambos…- susurré

Tu tampoco te reconoces cuando te miras a un espejo – quite mis manos abriendo los ojos en sorpresa

¿Por qué sabes todo eso?

… mi poder… esta… creciendo…- susurró – tu… tu padre…- llevo sus manos al pecho- y saga…el…ESTA MURIENDO – grito y comenzó a llorar con fuerzas, hubo un instante en el que se desmayo

Lein… LEIN… LEIIINNNN

A los ojos de Lein

Noviembre… llueve, llueve al tiempo que un humor negro recorre los pasillos del santuario, la nostalgia se apodera de todos los corazones que habitan este lugar, la tristeza invade a cuantos viven en este lugar.

Escucho llantos a lo lejos, escucho sollozos y suplicas piden un consuelo, mi corazón llora impotente de verme sin poder hacer nada, de no tener las fuerzas para sanar todos esos males y esas lagrimas lastimeras… no puedo, no tengo tantas fuerzas para proteger a tanta gente… mas sin embargo puedo sentirlas a todas, puedo sentir a quienes lloran, a quienes sufre… a quienes quisieran morir ahora. Escucho a la gente que amo suplicando… ¿este don será una maldición?

Abro los ojos lentamente, no veo nada he instintivamente llevo la mano a mis ojos sintiendo algo frío…otra vez ese estúpido metal, esa estúpida mascara que finge ser un rostro que no siente el dolor de los demás, cuando mi verdadero yo esta destrozado.

Me levanto, se donde estoy, la casa del patriarca, escucho sollozos del otro cuarto, no era un sueño, alguien llora con todas sus fuerzas, camino hasta la puerta y salgo…

Saga, voltea y me mira preocupado, Kanon que esta de tras de mi me abraza con fuerza y el patriarca me mira apenado. Amelia llorar, al igual que Aldebaran y Mu, Aioros abraza a amelia y afrodita esta junto a MM, ambos desprenden una energía totalmente destinta, en ellos solo hay arrepentimiento y miedo… jamás tristeza. ¿Que es lo que pasa? Pregunté

Shura se aparta, un ataúd de cristal frente a mi, empujo levemente a Kanon y me acercó con lentitud… Karin, pálida, asustada… sin vida….

¡¡¡KAAAAAAAARINNNNNNNNNNNN!

Esto es un adiós…. Un amargo adiós….