Capitulo 20: "El, tu, mi hermano, y yo"
Mírame –peinaba su hermoso cabello negro azulado con un peine dorado, traía un hermoso vestido blanco cuando yo le hablé muy molesto
¿Que es lo que quieres?- dijo, dejando aquel peine sobre la cama
Sabes… estoy muy cansado de mirarte – caminé hasta la ventana observando la lluvia, nos encontrábamos en la vieja cabaña que se estaba enmoheciendo por el agua, la casa rechinaba cuando ella me abrazó la cintura
Que delicado – dijo la joven sonriendo, yo pude oler su perfume de violetas y seguir mirando la ventana sin expresión alguna
Esto es monótono, ya no deseo estar a tu lado – dije al fin despojándome levemente con mi brazo de los suyos que me estrechaban con cariño
Nunca hemos estado juntos – dijo ella quitándose la mascara, sus hermosos ojos rojos, nuevamente anegados de lagrimas. Yo sonreí
Tienes razón, todo no ha sido mas que un sueño lindo…pero…- volteé con mirada cruda hacia ella
¿Pero? – la joven me rodeó nuevamente el cuello con sus delgados brazos, sus lagrimas seguían cayendo, podía escuchar el sonido que provocaban al recorrer sus mejillas opacando todos los sonidos del lugar
sabes demasiado…- sonreí maléficamente tomándola por el cuello
te amo – susurró ella entre lagrimas amargas, sin moverse siquiera, aceptando el destino que le regalaba
ya no me sirves de nada…no te amo – susurré a su oído, la elevé poco a poco mientras mi risa macabra salió de mi boca sonriente
Saga… por favor – susurró mientras sus delicadas manos sujetaban sin fuerza alguna mi rostro contraído de emoción – no… me… olvides
Adiós… Lein – digo y mi mano izquierda se clavó en su pecho atravesándolo, la sangre brotó de inmediato manchándolo todo, el suelo, la cama, la ventana, la armadura dorada, mi rostro…al final extraje su corazón, al tiempo que mi mano derecha le dejaba caer inerte al suelo, mi mano izquierda sentía los últimos latidos de su tierno corazón.
Una cruel sonrisa invade mi rostro, tomé entre mis manos desnudas el corazón de la joven, volteé hacia la ventana, justo cuando cayo un rayo que me permitió ver mi reflejo en ella… complexión robusta, cabello gris, ojos rojos…mi boca degustando el bocado… una cruel sonrisa…
A los ojos de Saga.
Desperté con un terrible escalofrío mientras un grito se emanaba de mi boca, un nombre… "Lein"… mi amor… ¿por qué? ¿Por que tendría que matarle? Pensaba tristemente cuando una voz me contestó.
sabes la razón
¿razón?
Idiota… ¿Por qué crees que no recuerdas mucho de Lein?
Tu …
Si… yo te robé la mayoría de tus recuerdos al lado de ella, al lado de Kanon y de esos imbéciles que solo te han abandonado. No eres nada sin mi, no tendrías el coraje para seguir adelante sin la ayuda de alguien como yo
Eso... no es cierto
Pero mis planes ya están trazados y no voy a permitir que una mujerzuela venga a destruir todo lo que he planeado durante años, todo el tiempo que esperé para que tu crecieras lo suficiente
Entonces… por eso solo recuerdo ese oso, ese dije… no hay más – susurré llevándome la mano a la frente, pude sentir mi sudor frío recorriendo mi cuerpo, la respiración agitada.
Esa mujer me estorba demasiado y si no te alejas de ella… ese sueño se te va a cumplir – sentí como poco a poco mi respiración se agitaba mucho más y mi cabeza comenzaba con un agudo dolor, estaba seguro que mi cabello estaba cambiando de color como la ultima vez
Aléjate de ella…. SI LA TOCAS YO
¿Qué podrías hacer? – mis manos se entumieron mientras mi vista tan solo veía oscuridad, claramente pude verme recargado frente a mi litera, con una sonrisa cínica, con el cabello gris y los ojos… rojos, fieros. Era la representación del Dios, materializada en mi mente, con mi cuerpo – tengo el control de todo tu cuerpo – me dijo mientras se sentaba justo frente a mi, estaba inmovilizado
¿estas?
No… solo tu puedes verme… imagina a que grado de locura has llegado – me sonrió abrazándome por el cuello, me susurró al oído provocando un nuevo escalofrío – ya nada puedes hacer por liberarte Saga, no luches, tu cuerpo es mío. Acepta tu destino, acepta mis deseos y talvez dejes de llorar como mujercita
¿POR QUE ME ELEGISTE? – le grite en la mente pues mi boca estaba paralizada, él se soltó y se levantó hacia el mueble tomando la vieja foto
en primera… no te elegí a ti, elegí al tu gemelo… Kanon; pero los idiotas que estaban intentado revivirme… se equivocaron de gemelo… ¿puedes creer esa estupidez?
kanon …
él... tiene una maldad innata, mis planes le hubieran ajustado como anillo al dedo – menciono al tiempo que sus dedos de la mano izquierda recorrieron la vieja foto, cortándose con el vidrio roto de aquel viejo marco, la sangre broto en mis dedos, me impresionó mucho
kanon es bueno
todavía crees en los viejos cuentos Saga, eres noble y eso me enferma. De cualquier forma tu resultaste tan fuerte como tu hermano, tu mantienes una mejor posición en el santuario, lo cual es muy conveniente para mi – dijo cortándose la otra mano, provocándome dolor – de todos modos cualquiera de los dos me funciona como herramienta para llevar a cabo mi venganza, sobre todo tú, controlarte ha sido la tarea mas fácil. Kanon se hubiera resistido más a mi control
¿Por qué yo?
Porque tu eres débil de mente, tu signo te desequilibra más que a Kanon, tu pierdes mucho, él no pierde nada… por eso esta decidido a todo, tu eres indeciso… por eso te poseo de forma fácil.
venganza… Atenea
así es… bravo Saga hasta que piensas… te daré una galleta – se acercó nuevamente hasta mi y sujetó mis manos llenando de sangre las suyas – si no he matado a esa mocosa, es porque también le deseo, es linda
NO LA TOQUES MALDITO BASTARDO – volví a gritar intentando moverme sin resultados
es mi cuerpo ahora – sonrío nuevamente y dejo la foto frente a mi, mi sangre había manchado ya la foto, justo en el rostro del patriarca – él me estorba, no te preocupes Saga, ya encontrare la forma de que las cosas sean fáciles para nosotros… yo te daré poder
no quiero poder… - susurré con lagrimas en los ojos, todos peligraban estando cerca de mi
no importa, tendré mi venganza, encerraré a Atenea en el mismo lugar en el que ella me encerró – yo recordé la copa con los dragones, me recorrió un escalofrió al recordarme bebiendo las sangre de esas pobres mujeres – después tomaremos su lugar y la tierra volverá a ser mía como en los viejos tiempos, el mundo temblara ante las guerras y la muerte y yo sin duda lo disfrutarte muchísimo – un brillo perverso surgió de sus ojos, yo tenía ganas de matarle ahí mismo pero, no tenía las fuerzas
maldito
eres mi títere Saga, pórtate bien y ella seguirá viviendo para tu gran deleite. Mejor deja que se la tire tu hermano si tanto la quiere
yo…
"yo la amo" me tienes arto con esa cantaleta barata, la vida no es así Saga. No conoces a tu princesa, se casan y son felices para siempre… te haré aprenderlo lentamente, con dolor… - la imagen se desvaneció, entrando en mi interior, recupere la movilidad de mi cuerpo y caí presa de un mareo en la cama, perdí la vista por unos instantes, mi cuerpo cansado… aquel día, por primera vez en mi vida… desee no haber nacido… desee con todas mis fuerzas morir…
A los ojos de Lein.
Había pasado tiempo desde que Saga no pasaba por el hospital, desde aquella última vez que nos vimos hace dos meses según me contó el patriarca, el realidad yo lo sabía y además de todo sabía que algo malo pasaba, conforme el tiempo transcurría mis habilidades empaticas había superado bastante las normales y podía ver y sentir todo lo demás con un mínimo de daño a mi cuerpo y mente. En general podía tomar las manos de quien fuera y de acuerdo a sus sentimientos ver sus recuerdos más profundos, aquellos que impactaron su vida… ahora yo sabía el secreto de kanon y sabía que algo me impedía ver que había en Saga.
De un modo u otro tenía que regresar al santuario para las eliminatorias de las amazonas; pero había una nueva noticia, en mí tiempo de ausencia Shaina había derrotado a la última participante y con ello ganó el rango de amazona de plata… shaina… la amazona de Ophiocus.
Para cuando regrese al santuario todavía estaba un poco resentida de mis heridas, traía una pequeña maleta con mi ropa y al entrar me tope con Shura, Mu y Milo que estaban esperando desde hacía un rato.
Lein, que bueno que estas mejor – Mu me abrazó en cuanto me vio, imagino que estaba asustado por el resultado de todo porque el es un caballero amable pero reservado.
Que gusto verte hermanito- comente dándole un beso en la mejilla, ahí fue cuando note nuevamente el peso de la mascara amazona que tanto me desagrada.
No pudimos encontrar a Yuzuriha por ningún lado así que te pido que tengas mucho cuidado – comentó seriamente Shura tomando mi pequeña maleta.
Gracias por los cuidados Shura
¿Y para mi no hay ni un saludo? ¡¡Vamos! Estuve parado bajo el sol mucho tiempo… de menos un beso – dijo Milo sonriendo
yo te lo doy – comentó Marín que venía llegando, todos sonreímos y Milo claramente se sonrojo.
Hola chicos, me alegra verlos aquí también, juntos y además bien enamorados – comenté sonriendo y ambos se sonrojaron, le di un beso en la mejilla a ambos- ¿pasa algo? – pregunte inmediatamente después de tocar a Marin
Puff vaya que has mejorado – contestó Mu sonriendo
Bueno… es que ha venido una joven en tu búsqueda, se ha quedado con el patriarca y me pidieron que viniera por ti
Una joven – susurré pensativa y tome la mano de shura para recoger mi maleta pero él negó con la mirada – gracias
Iré contigo- comentó desconfiada Marín
Esta bien – contesté amablemente y ambas nos encaminamos dejando a los caballerosos muchachos en sus respectivas casa conforme subíamos con el patriarca.
Por el camino trataba de imaginar quien era la persona que había venido en mi búsqueda, aunque realmente solo podía ser una persona... una parte de mi no quería creerlo sino hasta que llegamos a la casa de patriarca.
Cuando entramos el patriarca estaba sentado frente a una mesita de té chino, con a indumentaria formal y la mascara de oro con el casco extraño, reía como no lo hacía desde hace tiempo conforme una chica que estaba de espaldas le contaba historias viejas.
cuando el viejo maestro notó que su pastel había sido robado del horno lo primero que dijo fue… Lein! Y ella salió corriendo junto conmigo por el bosque comiendo pastel y riendo
no puede ser… - susurre con una alegría profunda al reconocer la voz, el cabello entre rubio y cobre a los hombros, la vestimenta azul cielo, su cuerpo esbelto y atlético
Lein – susurró el patriarca feliz de verme nuevamente de pie después de meses difíciles de recuperación
No puedo creerlo… hace tanto…
Va solo son dos años – comentó la joven volteando hacia mi, pude reconocer de inmediato la expresión angelical plasmada en su mascara amazona. Yo en respuesta, camine rápidamente hasta ella y le abrace con fuerza
Hermana… que bueno verte aquí – dije mientras sentía que iba a llorar
Lein llorando… que novedad – susurró ella – es un gusto verte de nuevo hermana
Ajam – tosió Marin discretamente, sin entender mucho.
Ah perdona…Marin ella es Vinka, entrenaba conmigo en los cinco viejos picos del Rozan con el maestro Dohoko. Vinka, ella es Marin… ella luchara conmigo por la armadura de Aquila- dije y un escalofrío recorrió todo mi cuerpo… lo había olvidado… la próxima batalla sería la mas dura y difícil de todas.
Un placer – dijo mi amiga Vinka, quien se había criado tanto tiempo conmigo… por ello nos considerábamos hermanas.
Ven… vamos a dar la vuelta… tienes muchas cosas que contarme – me dijo vinka pasando su brazo izquierdo por mi cuello, yo sujete su mano y ambas salimos para recordar viejos tiempos.
Por el camino platicamos de su entrenamiento, de los problemas que pasamos juntas, de las muchas veces que tuvimos que superar las dificultades y de lo mucho que le extrañaba. Al final de la plática tuvo que hacer la pregunta que esperaba.
¿y los gemelos? – me dijo deteniéndose en el camino tomando asiento en una de las rocas
pues… andan por ahí
¿y eso es todo en dos años? - me dijo sonriendo
bueno… ya bien sabes, por las cartas que te envié, que mantuve una relación con Saga y que Kanon ha cambiado mucho con él
y… ¿ya no están juntos? – pregunta la joven rubia cruzando las piernas y recargando su codo en ellas, al tiempo que su mano sujeta su propia mejilla en un gesto pensativo
no… se ha estado comportando
totalmente raro… ¿desde cuando tienes que hablar de mi con otras personas? – el joven nos escuchaba desde arriba, dio un salto desde una de las columnas y cayo perfectamente de pie con una mirada fiera
Saga – susurré – lo siento, ella solo pregunto acerca de mi y yo le conté
¿Y por ello tienes que hablar de mí? ¿Quién eres tú?
¡¡Vaya! La cortesía no es tu fuerte – dijo vinka levantándose tranquilamente
es Vinka, la amiga de la que te conté – dije mirándole
no recuerdo que me hayas contado de alguien como ella, es bastante linda
y tú tienes poco tacto para el habla. Vamonos Lein
ah
anda! Vete. La rubia ordena – comenta Saga
¿Por qué te comprotas de ese modo?
Por que no se me ocurre una mejor manera de hacer que te alejes de mi… bueno… en realidad si se me ocurre una – dijo acercándose de forma amenazadora hasta mi y elevando levemente su cosmos, lo suficiente como para estremecernos a ambas – pero mi posición de caballero no lo permite
Eres…. Un…. Retrazado – termine por decir mas que molesta y me di la vuelta, retirándome con Vinka
Parece un Saga diferente al que relatas en las cartas – comentó mientras caminábamos hacía el santuario amazona
Es un Saga diferente al que conocí – afirme tratando de sentir el corazón de Saga sin éxito alguno, había algo que lo impedía.
A los ojos de MM
Hace mucho que no veía a Lein por lo que decidí ir en su búsqueda pero me encontré en el camino a Saga que parecía estar esperando algo en el camino
¿no es algo tarde para que vagues por ahí? – me preguntó en cuanto me acerque, le mire nuevamente fumando
¿no deberías estar vigilando a Poseidón? – contesté dispuesto a cortar en seco la platica, seguí mi camino derecho hasta que él me sujeto del brazo impidiendo mi partida
estoy arto de vigilar el maldito mar – contestó con cierta arrogancia y me sonrió – sabes, desde que te conozco siempre me has parecido una persona ruin y falta de cerebro – me dijo, de inmediato le empuje
eres un imbécil… ¿que te hace pensar que eres mejor que yo? – dije molesto y elevé mi cosmos
mi poder… el poder que tu y ese gay amigo tuyo no tienen – me dijo sujetándome por los hombros y levantándome, aplicando gran presión, la suficiente como para rasgar mi piel en aquel momento. Yo le miré espantado por aquella muestra de violencia y mejor aun… ese cosmos teñido de maldad e ira así que… necesito que me sirvas de algo
¿que demonios te pasa Saga? –le grite sujetando sus manos que comencé a estrujar con tal fuerza que termine por doblar sus muñecas permitiendo que me soltara, nos miramos fieramente
necesito ayuda… eso es todo – comentó divertido elevando sus manos frente a mi
¿Qué te hace pensar que te ayudare? – dije con una media sonrisa confiada y elevando mi defensa con las manos
el miedo que vas a tenerme – contestó con una especie de mirada arrogante, sus ojos se veían irritados – después de esto- sonrió levemente y elevó las manos, luego imitó una carcajada estremecedora y detrás de mí escuche unos pasos pesados
nubes infernales – susurró una voz tras de mi, yo de inmediato intente esquivar el poder de aquellos nubarrones rojos logrando solo salir expulsado contra las piedras.
TU…. Estabas… estabas… - susurré titiritando los dientes y huesos, mis ojos casi desorbitados no podía creer lo que veía – Kalistenes – susurré nuevamente sintiéndome indefenso ante su cruenta mirada, un hombre alto de cabello azul marino lacio hasta los hombros y unos ojos grises de sonrisa sádica y expresiones macabras, su cuerpo estaba lleno de heridas
Así es como le pagas a tu padre – susurró Saga sonriendo, Kalistenes me sujeto por el cuello comenzando a asfixiarme
Padre… suéltame – dije sin hacer ningún intento por librarme, seguía aterrado, olía a muerto y tenía todas las heridas que por años le inflingí en el Yomotzu
Te rebanare la cabeza – me dijo mirándome a los ojos, sus fríos ojos grises marcaron el desprecio de años de sufrimiento, marcaron el odio infinito que guardaba en el alma… su odio me embriago – justo como lo hiciste cuando me eliminaste
Era eso… tu … lo dijiste… para tener el honor de ser llamado dorado – susurré ya casi sin energías
Solo aquellos que tiene el poder pueden tener el mando de todo – contesto Saga cruzando sus brazos, yo miré su cabello oscilando entre gris y azul, sus ojos rojo sangre, su odio, su tristeza… todo combinado en una mirada extraña
Con poder – repetí cerrando los ojos, al final el tenía razón. Los débiles no logran nada por ser tan dependientes de los fuertes, los débiles se dejan maltratar por la vida por no tener la fuerza suficiente de salir de la miseria… solo aquellos con poder tienen derecho a lograr sus metas, solo los fuertes sobreviven.
En ese momento, miré por última vez los ojos de mi padre, derramé la lágrima que le debía por tanto tiempo de maltrato indefinido, al final terminé por sonreír maléficamente sabiéndome eternamente mas poderoso, sabiéndome heredero de todas sus tácticas, de todo su odio, de toda la maldad que jamás podría detenerse… he heredado sus costumbres, sus odios, sus deseos…. Ahora soy la copia idéntica de él.
MI cosmos se elevó al saberme poderoso, más que el enemigo. Mi cosmos se elevó a tal grado que mi armadura dorada acudió en mi grito de desesperación y en su compañía, usando la fuerza de mis manos estrujé nuevamente el cuello de Kalistenes como en otro tiempo lo hice, le estrujé con tanta fuerza que mis manos terminaron por desgarrar su piel y destruir su cráneo, una sonrisa… una risa macabra con la sangre en mis manos… en mi cabeza repasaba la cuenta… 301… 301… sentí unos brazos rodeando mi cuello
si tienes el poder… si tienes la decisión y la fuerza, entonces tienes el control de todo y de todos… ni los dioses tendrán siquiera el derecho de arrebatarte el destino- me dijo Saga al oído, yo sujete sus manos con las mías, estaba de espaldas
los dioses…. Ellos… nos odian… - susurré impresionado mirando el cadáver de mi padre en el suelo
¿Qué tan justa puede ser atenea si permite que uno de sus lideres oculte algo como esto? ¿Qué tan justa debe de ser que nos manda a batallar en sus guerras? – me ayuda a levantarme he hizo que volteara a mirarle, me sujeto por las mejillas – desde tiempos inmemoriales los dioses han decidido nuestros destinos… si algo no les parece inundan el mundo, lo llenan de plagas o pestes…envían a sus Ángeles a eliminarnos ¿Qué se puede decir de ellos? ¿Por qué les debemos respeto? Si nosotros tenemos el poder… ¿Por qué no usarlo?
El poder… la fuerza… solo el más fuerte sobrevive al final – contesté mirándole a los ojos, sus palabras eran envolventes y giraban en mi cabeza atinando a todos mis deseos
Ya has visto mi poder – susurró sonriente y al estirar su mano el cuerpo, la sangre, el hedor… todo desapareció, todo era una de sus poderosas ilusiones. Mi cuerpo se estremeció – únete a mi, únete a mis planes y tendrás todo lo que realmente mereces
Saga – susurré sin entender mucho
Los dioses no tienen porque elegir nuestros destinos… nosotros los forjamos – afirmo, cerré los ojos, su presencia no era la misma, no era ese ángel al que odiaba, no era el Saga que Lein amaba… en ese momento sin saberlo… conocí a Ares… aquel que casi mata a Saga – la era de los dioses terminará si me ayudas – dijo sosteniendo mi mano, yo le apreté con fuerza
Que así sea – susurré sonriendo… estábamos conspirando… y yo… yo estaba perdido, no podía entender porque siendo tan poderoso no podía llenar el vacío que formaba tanto dolor…. Mil veces me pregunte por ti… Atenea…
A los ojos de Kanon
No había visto nunca esa mirada de odio en mi hermano, ese desprecio y repulsión por todos, ese tono despectivo y orgulloso… ese no era Saga, me decía con cierta satisfacción de saber que talvez mi hermano ya había dejado de existir para darle paso a ese rival tan poderoso para la diosa que decidió desconocerme, para la diosa que permitió tanto sufrimiento… esos eran mis estúpidos pensamientos.
Pasaba el tiempo y yo solo deseaba una cosa…. Ver a Saga sufrir tanto como yo cuando le perdí… como yo cuando me miré solo…
¿en que piensas? – preguntó la niña abrazándome por la espalda, una calida sonrisa imagino…
no es nada… solo… me preguntaba ¿para que nos querrá el patriarca en la cena? – dije mirando la mascara plateada de la chica
pues… tiene mucho que no cenamos todos juntos – dijo abrazándome con mas fuerza
no pienso ir
¿Qué? – inmediatamente me soltó
¿no lo entiendes?... si habrá alguien más seguro el patriarca no querrá que miren al gemelo – contestó – solo el caballero de… geminis – dije con cierta furia contenida
tu también eres un caballero del santuario… también eres parte de la familia
que familia ni que…. – me contuve al recordar que mis comentarios hirientes no deben de ser en contra de ella – escucha… - susurré volteándome y tomándole por los hombros – tu eres mi única familia
kanon – susurró y me estrecho entre sus brazos calidamente – también Saga es nuestro… hermano
sabes bien que no es así… el ha cambiado y yo… yo solo te considero a ti. Eres la única que aun cree en mí
siempre seremos hermanos – susurró dándome un beso en la mejilla. Acto seguido nos fuimos.
Caminamos juntos hasta la casa del gran patriarca, para cuando llegamos ya estaban todos, incluyendo una rubia amazona que nunca había visto
Vinka – dijo Lein con un tono de voz lindo, corrió y se sentó en la silla a un lado de ella, la última silla vacía estaba al lado de Saga.
Ven Kanon – dijo Milo dándole una palmadita al asiento de la silla, yo sentí y me senté rápidamente, Saga me miró
Me alegra que todos estemos juntos – comentó Shion y ordenó que sirvieran a las nuevas empleadas, al salir ambas mujeres, mayores… debo aceptar que ese fue el comienzo de una mala noche.
Tiene mucho que no cenábamos así – comentó Shura haciéndole mala cara a las del servicio. – pero igual es bueno estar juntos
Pero díganme ¿que han hecho de sus vidas? – preguntó Shion, a todos nos extrañó
Pues…. Cuidar el santuario – contesto Aioros sonriendo, Saga le miro mal
Cuidar el cabo – contestó
Bueno… yo he ido de comprar y conseguí ropas muy lindas – dijo divertido Afrodita mostrando su nueva prenda
Esas son mariconadas – contestó MM molesto cuando la señora sirvió la sopa, un silencio sepulcral entró en el lugar
Ah esto.. perdón… ella es mi amiga Vinka de corona Borealis – dijo apresurada Lein
¿desde cuando podemos traer visitas? ¿acaso esto es un museo? – preguntó frío Saga, el patriarca le miro con mala cara
desde que yo lo permito – contestó con suprema autoridad
perdona la descortesía de este animal. Mi nombre es Milo – comentó el joven sonriente y estrechando la mano de la rubia
mucho gusto – contesto vinka algo apenada
cuidado pequeña… es mirada es de acoso – contestó Mu, todos reímos mientras Milo cambiaba de color.
¿Cómo piensan comer? – preguntó Saga secamente a Lein. Ella negó con la cabeza
nosotros no comeremos
¿entonces que haces aquí? – nos quedamos helados con la actitud
ella puede venir cuando quiera – dije furioso clavando la mirada en Saga que no se molesto ni en voltear
¿desde cuando puedes estar tú aquí? ¿es que existes? Ah… ya entiendo… no tienes a donde ir – aquel comentario me hizo enfurecer, lo sujete por el hombro haciendo que volteara
¿Qué quieres de mí? ¿es que te he hecho algo?
No eres mas que la sombra estúpida de lo que soy… así que actúa como tal y calla
Saga no seas tan duro con tu hermano – Lein golpeando la mesa, Shion volteo la mirad hacia otro lado mientras Milo intentaba calmarme
Tú también cállate. Estoy arto de que metas tu nariz en todo – le gritó golpeando la mesa con ambas manos al tiempo en que se levantó
NO LE GRITES – dije exasperado y le voltee una bofetada que lo tiró con todo y silla
KANON – me gritó el patriarca molesto, los demás voltearon a verle – vete… lárgate de esta mesa
Pero… kanon… no…- susurró Lein, yo asentí con una mirada llena de odio hacia Shion. Saga me miró con una sonrisa macabra
Salí indignado, totalmente molesto… ¿por qué? ¿Por qué yo siempre tenía que ser el culpable en las discusiones? ¿Es que yo sería siempre el malo? ¿Es que Saga es más amado?
Ya estaba arto de todas las discusiones en las que yo era el culpable, desde niños siempre le habían tolerado todo solo por actuar como bueno pero Shion y los demás se arrepentirían un día de haberle tolerado tanto a Saga… en el fondo yo sabía quien era mi hermano y toda esa actitud agresiva me demostró que era tan malo como yo….
A los ojos de Lein
Todo estaba llegando al tope de paciencia, además de que el patriarca se había vuelto menos tolerante por su enfermedad, la edad… el hecho de ver a sus dos hijos pelear de esa forma.
¿Por qué siempre te metes en lo que no te incumbe? – pregunto Saga levantándose y limpiando sus ropas, le mire con resentimiento
no puedes hablarle así a tu hermano
calma Lein – me dijo Vinka sujetando mi mano
basta… estoy harta de siempre callarme. TU eres una mala persona Saga
¿es que no has visto a kanon? Todo mundo le considera malo aquí y sin embargo lo trajiste….
El patriarca le invito también – dije y voltee a mirar a Shion que negó con la cabeza -¿Qué? – susurré impresionada
El no fue invitado y aun así lo trajiste – sentencio el patriarca
¿Por qué? – susurré y el me señalo a vinka, ella le miró entendiendo el mensaje y saliendo de la sala
vinka no iría diciendo por ahí que kanon existe ¿y que tiene si lo dice?
No pueden haber dos caballeros de Géminis – sentencio Saga – yo soy el único
Antes no pensabas eso
YA DEJA DE AFERRARTE AL PASADO – me gritó y yo asentí y salí, Mu me siguió
Lein calma – susurró el chico – escucha… necesito que te portes bien
Dime por que… no podemos permitir que le hagan esto a Kanon
El se lo ganó
¿Qué?
Me refiero al castigo, talvez nadie te lo ha dicho pero el ha hecho un montón de desbarajustes en Rodorio en nombre de Saga
Kanon… no-…
Todos cambiamos algún día Lein, es un proceso – me dijo acariciando mi cabello
Estoy cansada de esto
Escucha… si no te comportas… Shion te enviara a los cinco picos, tienes una semana de prueba… de lo contrario iras a terminar tu entrenamiento haya y la batalla contra Marín también se realizara haya – dijo vinka que nos esperaba a la entrada de Piscis
Has venido por mi – susurré abrazando a vinka – pero no quiero dejar a Saga y kanon solos… algo malo va a pasar… lo se…. Ya lo siento… hay tanto odio.
Mu nos dejo en la entrada del santuario amazona pero después de retirarse, yo decidí correr a géminis. Las emociones de Kanon por ira eran tan fuertes que sabía estaría esperando a Saga para discutir y golpearle… pero Saga últimamente no es el mismo, yo no podía permitir que ambos pelearan; así que resolví hablar con ambos. Vinka me apoyó en el plan a pesar de ser arriesgado y decidió guardar el secreto de mi partida.
Entre con pasas lentos en géminis, debido a la oscuridad de la noche no podía ver mucho en la casa, algunos rayos de la luna entraban tocando a penas algunos azulejos del suelo, la primera hilera de columnas doricas y mis ojos solo pudieron aferrarse a la luz dorada que desprendía el joven de la armadura dorada. Su cosmos dorado iluminando una parte de la enorme casa, el frío que desprendía se su cuerpo calaba mis huesos. No me dirigió ni una sola mirada y de un momento a otro un golpe al estomago me sacó de la casa, mi cuerpo se arrastró por todo el suelo hasta quedar entre las escaleras boca arriba.
ya lo resolví – susurró el caballero mirándome, sus ojos irritados fijos en mi mascara, su cabello tornándose grisáceo- te matare antes de que seas un estorbo
sa..ga – susurré con dolor en el abdomen, esa era la verdadera fuerza de un santo dorado, un solo golpe basto para romperme seguramente una costilla
me arte de ti – susurró sonriendo y corrió para rematarme con un golpe en el costado, después me sujetó por el cabello y me lanzó con toda su fuerza dentro de la casa. Mi cuerpo se estrelló en el primer pilar dejando marcado un hueco, caí lentamente sin entender el porque.
¿por qué? ¿por qué haces todo esto? – pregunté mirando los cabellos grises de mi atacante, su sonrisa fría, sus ojos llenos de maldad. Mi corazón sentía la opresión ejercida por su odio desprendido – nunca… había sentido tanto odio – dije para mí
porque…. Te odio…. Porque odio todo lo que represente paz y justicia, porque tú representas el amor en mi vida
Saga…
Y el amor es algo que este mundo no necesita, la hermandad y todos esos sentimientos estúpidos vuelven débiles a los más fuertes. – dijo acercándose hasta mí, yo no pude evitar hacerme hacia atrás y topar con el muro… seguía en el suelo, sentada
Pero… como puedes decir eso… tu eres caballero por todos esos sentimientos, para que la maldad jamás nuble el destino de los humanos… el destino de la tierra – grite cuando él me sujeto por ambos brazos y me levantó
Solo eres un estorbo igual que todos los idiotas que ponen sus esperanzas es los dioses… desde tiempos remotos ellos solo se han preocupado por sus deseos y les oprimen…solo yo me preocupo por eliminar a los enemigos, por hacer que descarguen esos malos sentimientos… - dijo al tiempo que me dejo caer para aplicarme patadas a la velocidad de la luz, salí expulsada nuevamente contra el suelo, golpeando mi frente y cayendo boca abajo.
Porque… yo…. No entiendo…. ¿QUE TE PASA SAGA? – emití un grito al tiempo que mi cosmos se elevaba, alcé mis manos frente a Saga – ADOVOCO IGNIS – grité y de mis manos se evocaron mis poderosas llamas que lanzaron al caballero a penas unos metros sin siquiera caer. Me miró con una sonrisa maquiavélica, sus labios dijeron algo que entendí de inmediato – DEFENSA CELESTIAL – grité formando mi barrera que resistió el embate aunque termine nuevamente contra la pared.
¡Vaya! La has mejorado de lo contrario hubieras muerto; pero no importa, quiero verte suplicarme por perdonar tu vida
¿Qué te ha pasado? … Saga… Saga… detente – susurró con lágrimas en los ojos.
Ahora… es tu final, vagaras eternamente, perdida… ¡¡y todos te olvidaremos! OTRA DIMENCION – gritó apuntándome con su dedo índice de la mano izquierda, redes de luz se formaron a nuestro alrededor. Cerré los ojos y al abrirlos me encontraba a salvo en el otro extremo de la casa, unos ojos azules me miraban preocupados
Kanon – susurré mirando a mi salvador
Todo lo que Saga prometió es mentira – me dijo y se levantó mirando con odio a Saga - de todo las cosas que puedes hacer Ares, esta no es una – dijo furioso y ese nombre me sorprendió
Ahora hay otro testigo de mi existencia… Eso amerita que silencie a ambos – dijo Ares sonriendo macabramente
No entiendo – susurré y Kanon ni se inmuto
Este que ves aquí es el dios de la guerra Ares… todos los asesinatos de mujeres fueron para revivirle en el cuerpo de mi hermano – aseguro cerrando sus puños y clavando su mirada en la de Ares.
Desde tiempos pasados la familia de los gemelos ofrece un hijo de su estirpe más noble para utilizar su cuerpo y realizar las batallas que me corresponden contra Athena – comentó Ares divertido y a la velocidad de la luz golpeo a kanon por el estomago, este Salió impactado contra la pared. En ese momento la armadura de géminis regresó a su caja – te demostrare quien es el gemelo más fuerte
Encantado – comentó Kanon limpiado su boca y subiendo su defensa con los brazos
Ares sonrió y corrió nuevamente hasta Kanon aplicando algunos puñetazos que el gemelo esquivo a al perfección. Después una serie de patadas que kanon continuaría esquivando hasta sujetar la pierna derecha de Saga y aplicar un codazo en ella, después unas patadas al rostro y antes de dejarlo caer una expulsión de su cosmos que le permitió golpear a Saga lo suficientemente fuerte como para caer de espaldas al suelo.
Pero antes de que Kanon pudiera contra atacar una expulsión del cosmos de Saga le envió nuevamente contra la pared, después Saga alzo su dedo índice de nuevo y lanzo un haz de luz, a penas una minúscula línea hacia Kanon que la recibió directamente…
A los ojos de Kanon
Mis ojos se nublaron un poco, me sentí un poco mareado debido al nauseabundo olor que desprendía la casa de géminis. Tallé mis ojos con las manos y levanté la mirada para encontrarme con un cuerpo colgado por un lazo, ahorcado… era él… era…. Saga
eso te mereces por hacerme la vida pesada – grité sonriendo; pero algo en el interior se partió
kanon… ¿Cómo pudiste hacerlo? – preguntó la voz de una joven tras de mí
¿hacer? - pregunté y volteé hacia la voz, lo primero que pude ver fue la mascara manchada de sangre; los cabellos negros, algunos maltratados y cortados; los brazos raspados al igual que las piernas y l pecho sangrando
¿Cómo pudiste matar a tu hermano? – preguntó Lein desesperadamente, sujeto mis ropas zangoloteándome
no fui yo
todos tienen razón eres un… ERES UN BASTARDO – gritó con la voz ahogada y me abofeteo varias veces
no fui yo… te juro que no fui yo… Lein
te odio… - susurró y sentí algo que se incrustó en mi pecho, era una daga… una daga dorada – eso es por Saga
maldita… ¿Cómo pudiste dejar de creer en mi?- la sujete con mis manos y comencé a ahogarla
AHHHHHHHHHHHHH! – escuché un grito que me regresó a la realidad, Saga ahorcaba a Lein con todas sus fuerzas
DEJALA MALDITO… OTRA DIMENCION – grité y evoque aquel poderoso que Saga a penas si pudo esquivar. Corrí hasta Lein y la sujete entre mis brazos.
Me tiene arto… HE DE BORRARLOS DE MI CAMINO – gritó Ares furioso estirando sus manos para formar un círculos en el aire con ellas, yo comencé a imitar sus movimientos
Morirás aquí y ahora – dije enfadado evocando todo mi cosmos, imagino que aquellas energías fueron suficientes para alertar a todos en el santuario… al final yo volvería a ser el culpable de todo pero… no podía permitir que Saga eliminará a la única persona en la que confío
¿como te atreves a retarme?
Kanon… Saga… por favor no lo hagan – susurró Lein
Ya no importa – susurré sonriéndole
EXPLOSION DE GALAXIAS
EXPLOSION DE GALAXIAS
Miles de planetas inundando el lugar, miles de galaxias formándose en cada espacio, cubriendo cada azulejo, cada pilar. ¿Acaso así se vería el universo?... mientras nuestros cosmos se elevaron al cielo, la voz de las plegarias de Lein llegó hasta mis oídos, las risas de Ares se perdieron en mi mente… una fusión con todas mis ideas, mi corazón latía rápido al tiempo que la fuerza de Saga aumentaba de tal modo que mi energía estaba siendo reflejada en mi contra, poco a poco los azulejos comenzaron a cuartearse.
Mis pies comenzaron a hundirse en el suelo, los pilares temblaban y por consecuencia el techo, cerré mis ojos… talvez sería el fin… pero….
AURA – gritó Lein colocándose a mi lado, sus manos estiradas casi en la misma posición que las mías
Lein – susurré - ¿que haces? ¡¡Tonta! Se supone que tienes que huir y servir de algo… niña tonta
No te dejare solo… eres… mi hermano – susurró mientras las carcajadas de Saga se distribuían por el lugar.
Me hartaron- afirmó con seriedad y elevó un poco su cosmos, el cosmos maligno, el cosmos de un dios….tan solo un instante, lo suficiente como para empujarnos
Nos borrara – susurró Lein cuando su mascara se cuarto y terminó por romperse en tres, sus hermosos ojos rojos relucían sus delicadas lágrimas, una leve sonrisa que jamás olvidare
No lo permitiré… no… NO – elevé mi cosmos con tal presión que nuestros ataques se colapsaron
A los ojos de Saga
mierda…. Tu estúpido hermano nos delatara si seguimos así
déjanos ya en paz – susurré desde mi interior y Ares río un poco - no importa de todos modos tu buena reputación nos salvara el pellejo de nuevo.
Maldito
Se colapsan nuestros ataques – me gritó Lein al notar que mi cabello había vuelto a la normalidad
Lein…- susurré al tiempo que nuestras energías se tornaron rojas
Cúbranse – le grité a Kanon y al mismo tiempo nos tiramos al suelo, Kanon sobre Lein y todo explotó… solo alcancé a escuchar un susurró de la boca de la mujer que amaba… luego todo se nublo….
Abrí los ojos al día siguiente, mi cuerpo se sentía herido y cansado… después me entere que el techo se vino abajo, terminamos sepultados y con la ayuda de Milo, Shura, Mu y Vinka pudimos salir de aquel lugar. La herida en el pecho de Kanon se abrió levemente al igual que las heridas de Lein, yo tuve una contusión en la cabeza.
Saga… que alivio – susurró Lein… no, no era ella, era Yuzuriha nuevamente ahí – estaba preocupada… sabes que te amo…- susurró abrazándome, pues me levanté confundido
Que demonios – susurré y algo en mi pecho me lastimo, escuche unos llantos… mire sin mirar, oí sin oír y todo en lo que mi cabeza podía pensar era en mi hermano, en Lein…- a un lado – advertí empujando a Yuzuriha
Saga, mi amor – me dijo sosteniendo mi mano, algo en mi me detuvo un instante
Escúchame Lein…dile a Mascara que te lleve al bosque, ahí te alcanzaré solo iré a advertirle al idiota de mi hermano que jamás vuelva a acercarse.- dije sujetándole el rostro y regalándole un beso
Así lo haré Saga – dijo divertida, me dio un beso en la mano y luego se fue corriendo a buscar a MM
Estúpida… - susurré – ya saben que hacer – de las sombras del cuarto se mostraron Mascara Mortal de Cancer y Afrodita de piscis, de ahí en adelante ellos sería mis más fieles servidores… por favor Atenea perdona nuestra arrogancia…
Camine por los pasillos, mi corazón iba siguiendo un llanto, una voz que me llamaba a gritos sin emitir sonido alguno, un corazón que latvia agitado… asustado… Lein… Lein ¿algún día podrás perdonarme por el daño causado?...
Llegue hasta la puerta del séptimo cuarto, segundo piso… pasillos de azulejos blancos, la muerte rondando por el lugar y los enfermos transitando por el lugar…. Un reloj…. Tic… tac…. Tic… tac…
