¡Al ataque!
Dark Kotetsu Angel
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Estoy sumamente agradecida por sus reviews! No pude superar lo que dijo "La Neko"...tan sólo me acuerdo y me muero de la risa jajajajajajaj!!!!! (Dark intenta calmarse)... uff... ... ... jajajajaj!! Ya... ya. XD. La segunda entrega de esta historia. Perdón por la demora (.. T_T)... ¡Ojalá les guste! Y no olviden colocar un review para darme su opinión. ENJOY! ^^
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Capítulo 2: ¿Qué hay, muchachos?
- ¿Seguro que puedo ir? – dudó Shizuka en el auricular, hablando con Jounouchi.
Su hermano mayor la había invitado a ir al parque de diversiones junto a sus amigos, y aunque Shizuka los conociera desde hace un MUY buen tiempo, no sentía total confianza hacia todos ellos.
- ¡Claro hermanita!!!!!! X) -
- Entonces, está bien, muchas gracias por invitarme hermano -
- No hay de qué, entonces, ¿qué te parece si en media hora voy por ti? -
- De acuerdo -
Jounouchi dejó el auricular en si sitio. Ya estaba vestido, eran las nueve y media. Debía ir ya mismo por Shizuka... pero... ¿cómo iban a permitir los dioses que fuera con la panza vacía? Eso era imposible. Así que, por qué no nutrirse con unos deliciosos...
- ¿Hot cakes? – dijo Mokuba, mirando a la mucama – Gracias ^_^ si quiero más! -
En la mansión Kaiba, a las nueve y treinta había actividad. Empleados limpiando la casona aquí y allá, acomodando cuadros, quitando gérmenes microscópicos, insectos siendo removidos con microscopios... ¿el motivo? Kaiba Seto había organizado una cena super elegante en su casa para abarcar a un nuevo socio de Kaiba Corp., casualmente, estaba enterado que tenía un hijo de la edad de Mokuba, también amante de los vídeo juegos... Dios los hace y ellos se juntan... (^^U)
El problema... era que Mokuba no se fuera a emocionar con el dichoso parque y lo tuviera ahí hasta que San Juan agachara el dedo... iba a llegar a su casa después de recibir "terribles" dosis de diversión... e incluso, pasaba por su cabeza el infortunio de hallarse a los cabeza de chuzo multicolor y su clan en el parque...
Qué tal que llegara y ya los estuvieran esperando...
***
- hola muchachos! Es que estaba llevando a mi hermanito al parque de diversiones! Me ducho, me cambio y ya vuelvo, tomen té que no tardo! -
***
Puaj, la asombrosa mente de Kaiba no creyó haber imaginado tal calamidad. Faltaban ya 20 minutos para las diez... a esa hora iría con Mokuba.
- Apresúrate, Mokuba – ordenó el mayor
- hai nii-sama! -
Con eso, el niño de cabellos rebeldes comió con mayor agilidad sus deliciosos, maravillosos, únicos, fantásticos, hermosos, hot cakes.
Mientras tanto...
- aaaaaaagh... rayos... no entiendo! No entiendo estos número!!!!! _ por qué... por qué... ¿por qué??? ¡¡¿¿¿¿POR QUÉÉÉÉÉ!!???? – decía Yami en actitud de mártir viendo los botones del auricular.
Yugi le pidió de favor llamar a Jounouchi, para confirmar su ida, así que Yami, gustoso, fue a hacerlo ignorando lo "complejo" y terrible que sería marcar el número telefónico de Jounouchi... tras que no entendía los "garbatos", no recordaba muy bien el dichoso número...
- ¡No aibou! ... ;_; no pude! -
Yami hacía círculos imaginarios en el piso con su dedo índice. En instantes bajó Yugi a verle.
- ¿Qué? ¿Ya llamaste? -
- ;_;... -
- ._.? y... qué dijo Jou...?
- ;_; -
- ¬¬ No llamaste... -
- T_T -
- Yo lo llamo, pero puedes secar algunos trastes por mí?
Yami lo miró con cara de "y yo por qué o qué?", y Yugi le lanzó un relámpago con la mirada, de haber sido verídico, ni el pararrayos capilar del faraón hubiera podido detenerlo...
Entonces, el espíritu milenario fue a la cocina y comenzó rápidamente a secar unos platos... - ... tengo la "leve" impresión que necesito un curso de tecnología... -
Para desgracia del ex faraón, sonó el timbre, de manera tan fuerte, que se sobresaltó y soltó un delgado plato, partiéndolo en mil pedazos
- Qué mal Yami... qué mal... ._.UUUUUUUU -
Y otra vez el timbre y qué casualidad, Yugi hablaba con Jounouchi en el segundo piso y no oía al desenfrenado que tocaba el timbre como una batería
- ¡eh! Tenemos dificultades técnicas, vuelva otro día -_-U – Yami se quitó los guantes, y fue a abrir la puerta... iba a lanzarle las siete plagas de Egipto si era alguien indeseable o algún desocupado...
- ¿qué hay de comer?... no pude tragar los fideos porque tapizaron la cocina!! -
- O.O! – Yami retrocedió ante el shock, viendo un poco incrédulo a quienes tenía en frente.
Un Ryou pasivo acompañado de su yami, Bakura, el rey de la etiqueta y del glamour, que le saludó con un eructo y una "cortés" petición de comida. El británico-nipón si fue cortés y dio un saludo al pelos de arco iris.
- ¿me viste cara de cocinero personal???? – reclamó Yami, tras saludar a Ryou
- Ja! ¿y qué? ¿pretendías ser un bailarín con el delantal que traes puesto????? – de inmediato, la imagen de Yami bailando ridículamente, invadió la retorcida mente del rey ladrón...
En efecto! Yami había olvidado al cien por ciento quitarse el delantal del abuelo Sugoroku, que tenía un dibujo de una muchacha con curvas increíbles... y un bikini diminuto.
- ¡no es tu problema! -
- jajajajajajajajajajajaja!!!! ... está bien, pero no te sulfures -
- ¡no estoy sulfurado! – expresó Yami, casi gritando para todo el distrito, con toda la cara roja, deseando darle su merecido al ladrón, pero no le iba a dar el gusto del todo. - ¬¬ sólo ten cuidado con el tapete que es nuevo, y con las porcelanas, y los muebles... -
- ¿qué dijiste?????? -
- ¿yoooooo? -
- no, yo! Pendejo!
- ¿qué es todo ese alboroto? ...¿uh? ¿Ryou, Bakura? -
- no, somos hologramas! -
- ... si como sea... – replica Yugi - ¿no se supone que íbamos a vernos en el parque? -
Bakura hizo cara de cordero degollado - ¿por qué?... si llegamos juntos nos veremos más fraternales, sólo faltan el resto y nos vamos tomados de la manito, por si alguien se pierde... -
Todos: ¬¬
Yami deseaba comprarle a Bakura un somnífero
- Igual, faltan diez minutos, vámonos o los demás pensarán que no fuimos... – sugiere Yami
- ah, espero que no les moleste... invité a un par de personas... -
Todos los presentes se exaltaron, y las miradas acusadoras se posaron en el ladrón
- ¡no se enojen! – se hizo el inocente "yo no fui" – sólo a un par... -
- ... -
- ... -
- ... -
Ese silencio le hacía entender a Bakura que todos deseaban una respuesta AHORA.
- A Malik... y.. pues se pegó Rishid -
- ¿¡¡¡QUÉ??????!!!!!!!!! -
- ¡O SEA QUE NO PUEDO LLEVAR A MIS AMIGOS!!!! -
Nadie creía el cuento de la moral-fraternal cháchara que daba el espíritu de la sortija
Yami frunció el cejo - ¡lo decimos por Rishid baboso! -
- Es como si nos llevaras a un papá guardián – comentó Yugi
- No, genial, va Kaiba, va Rishid, va Malik... vas tú -
El yami del albino miró al faraón milenario - ¿Kaiba va? Será que va a poner hielo en todas las máquinas o a hacer quebrar al parque de diversiones! Hey! Un momento! Ustedes invitaron a Kaiba!???? – añadió indignado
- baboso – se dijo Yami
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Qué raro... a Kaiba Seto se le había caído su esfero de trillones de yenes. En toda su perfección y cálculos subatómicos de la velocidad con que debía mover su mano para tomar la pluma sin impulsarla a caer, nunca se había equivocado, y aunque se le deslizara, hacía ecuaciones a la velocidad del rayo con caída libre y lograba rescatarla antes que tocara la alfombra de su ostentosa mansión-casona.
Mokuba entró al estudio - ¡Nii-sama! ¡vamos! -
- Ya voy Mokuba... es que tanta adrenalina es incontrolable... -
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